-todo esta saliendo de acuerdo al plan….es hora de hacer mi aparición frente a ella…-con una sonrisa desapareció entre las sombras, estaba disfrutando de la situación en que la ex – sacerdotisa se encontraba.
Inuyasha (Y. Kurama) se separó suavemente de los labios de Kikio, mirándola fijamente a los ojos, con ese cariño y amor que solo era capas de mostrar estando con ella, por otro lado Kikio también lo miraba fijamente a los ojos, pero sus ojos no mostraban expresión alguna, se notaban tan vacíos, pero ella era su Kikio y nada podría hacer para cambiarla. El la abrazo un poco más fuerte estrechándola contra su pecho, aspirando su aroma, ese aroma que lo embobaba, recargo suavemente su barbilla sobre el negro cabello perteneciente a ella. Kikio odiaba estar en esa situación, pero si quería seguir manteniendo a Inuyasha a su lado tendría que soportar estar entre sus brazos, y esos besos que con tanto amor el le da.
Mientras tanto en la aldea, todo era alegría ya que se encontraban festejando la formalización del noviazgo entre la exterminadora y el monje, Sango tuvo que hacerse cargo de cierto monje a quien se le había sobrepasado un poco el Sake, llevándolo a dormir y aprovechando ella también iría a dormir, lamentablemente la anciana Kaede no los pudo acompañar a tan alegre festejo ya que los efectos de la edad, le estaban comenzando a afectar (cansancio, dolor etc.) el pequeño Shippo se había quedado completamente dormido a mitad del festejo, solo quedando aun en pie por así decirlo, Kagome que tenia un semblante de preocupación ya que ni Inuyasha tanto como Kikio, aun no llegaban y eso se le hacia raro.
-hummm….ellos aun no vienen, que tanto estarán haciendo……hay Kagome…que cosas te preguntas….es natural que ellos se tarden, incluso es natural que ellos dos no lleguen a dormir….-susurre más para mi misma, ya que no quería preocupar a ninguno de mis amigos, ellos estaban agotados y se merecían un buen descanso. Me puse de pie y comencé a recoger todo lo que usamos para llevar a cabo la celebración, claro ya que no fue del todo tan alegre debido a la ausencia de uno de nuestros amigos, Inuyasha, pero yo esperaba que el estuviera en compañía de Kikio, en algún tiempo solo pensar eso me llenaría de rabia, pero ahora es diferente, el tiene a su querida Kikio y yo tengo a mi amado Kurama, aunque ya hemos dejado en claro eso, creo que Inuyasha no piensa aceptarlo, aunque todo esta indicando lo contrario, tenía pensado esperar hasta mañana que el llegara, para poder terminar la conversación que habíamos dejado a medias.
Mientras tanto, no muy lejos de la aldea, se encontraba un hanyou, recostado en la rama de unos de los tantos árboles, el no había querido ir a la rama de su árbol favorito, puesto sabía de más que si el se iba ahí, no lo dejarían pensar claramente y vaya que tenía muchas cosas que pensar, pero no sabía aun por donde debería de comenzar.
-hay Kagome….por donde tendré que comenzar….tengo tantas cosas que pensar que no se cual es la primera……creo que debería de analizar la situación desde el día en que te dije mi decisión…-suspiro…-es verdad, ese fue el principal y gran error que cometí en toda mi vida, nunca llegue a imaginar que al darte el resultado tu te alejarías por un largo tiempo de mi…..durante ese tiempo no hice más que pensar en ti y recordar cada momento que pase contigo, pensé que ya había aprendido mi lección y que en cuanto te volviera a ver, te diría mis sentimientos, pero ahora las cosas se nos han complicado más, yo al cometer el segundo error de traerme a Kikio con nosotros y tu al haber amado otra vez, ya que ese sujeto me borro por completo de tu corazón….-apretó fuertemente sus puños…-ahora cada ves que trato de acercarme nuevamente a ti, tu me alejas o te alejas de mi lado diciéndome que yo ya deje de formar parte de tu vida….no sabes cuanto me parte el alma escuchar esas palabras de tus labios….ya que mi mayor deseo ahora era permanecer para siempre a tu lado, que tu fueras mi compañera para toda la vida y el que formáramos una manada…pero ese sueño tu lo compartes con otro…..y yo……yo no puedo compartirlo con Kikio…..por que no la amo….simplemente le tengo cariño…..aparte si estoy con ella es por deber…ya que ella arriesgo su vida por mi….y gracias a ella te pude conocer a ti….pero de que me sirvió y sirve que te conociera, si no puedo estar más a tu lado…..pero a pesar de todo lo que a pasado….me niego rotundamente a perderte…-su mirada reflejaba celos…-no permitiré que el se quede contigo….peleare por tu amor…de eso estoy seguro…aunque….también tengo la duda…..si llego a matar a ese tal Kurama….tu me odiarías no es así?...-su mirada se suavizo…-odiarías al ser que te arrebato a la personas que amas…..así como yo lo odio a el…..por haberme arrebatado lo que más amo en esta vida…..a Kagome…..mi niña…..cuanto te hice sufrir…hiendo a buscar a Kikio, sabiendo que te lastimaba, pero a mi eso no me importaba en lo más mínimo….pero ahora…..que te me vas de las manos….maldición…..Kagome….por que no me di cuenta antes de mis sentimientos…..por que tuve que tomar la decisión equivocada…..y por eso ahora estoy pagando caro….pero se que aun hay esperanzas para mi…..te reconquistare….mi niña……ya lo he decidido…..y esta vez nadie podrá detenerme…..ni siquiera el mismísimo….Naraku……-Inuyasha se fue quedando lentamente dormido, puesto que su mente se había cansado de tanto pensar en la situación en la que el y su niña Kagome se encontraban, antes de caer en un sueño profundo una gran sonrisa surco su rostro, ya que el aun tenía la esperanza de que el estuviera en el corazón de Kagome, por más pequeño que fuese el espacio dedicado para el en ese puro corazón, el se encargaría de convertir ese pequeño espacio, en uno grande ocupando si es necesario nuevamente el corazón de la futura sacerdotisa.
-hummm……que bien….por fin ya termine de recoger todo el desorden…-me estire un poco…-y estos niños que no vienen…-Salí a asomarme un poco desde la puerta…-no veo rastro alguno de ellos….veo que en aquella dirección esta comenzando a llover….espero que la lluvia no venga hacia acá…..por que si así fuese…..tendríamos a un Inuyasha empapado…-sonreí ante tal pensamiento…-jeje parecería un perrito mojado….jeje espero que vengan pronto, me tienen algo preocupada y esta sensación extraña que no me deja en paz ni un momento…-regrese a la cabaña y me senté al lado del pequeño Shippo mientras este dormía, tome un libro que había olvidado hace ya dos años atrás y comencé a leerlo para así poder matar tiempo en lo que ellos llegaban.
El viento comenzó a soplar fuertemente, y el precioso cielo de la noche se vio opacado por nubes negras, trayendo consigo relámpagos, este cambio tan sobrenatural alerto tanto a Inuyasha (Y. Kurama) como a Kikio, Inuyasha (Y. Kurama) escondió tras de el a Kikio, protegiéndola con su cuerpo sin dejar de gruñir, puesto se había percatado de la presencia del ser que quería eliminarla, y apartarlo para siempre de ella. El bosque adquirió un toque más tenebroso, frente a ellos hizo la aparición Naraku que no dejaba de sonreír, y con esos ojos llenos de crueldad y sed de venganza.
-pero miren a quienes tenemos aquí….-dijo sarcásticamente…-al bueno para nada de Inuyasha y a la ex – sacerdotisa de nombre Kikio…-desapareció la nube de veneno en la cual había llegado.
-maldito Naraku….-Inuyasha (Y. Kurama) desenvaino su espada.
-Inuyasha…crees que con esos débiles poderes que posees podrás eliminarme?...- hizo un ademán como si estuviese bostezando.
-estos poderes son más que suficientes….para acabar contigo….maldito….-Inuyasha (Y. Kurama) corrió en dirección a Naraku, al estar a una distancia prudente dio un gran salto agitando su espada y ataco a Naraku, pero este fácilmente lo esquivo.
-jajajajajajaja……Inuyasha….por favor no me hagas reír….-Naraku contra ataco…- si me sigues subestimando….podría ser tu perdición…-ataco nuevamente.
-maldición………-Inuyasha (Y. Kurama) esquivo con dificultad el ataque. Por el costado de Inuyasha paso velozmente una flecha purificadora dándole en el hombro a Naraku.
-Kikio….-el tono de vos se reflejaba rabia, incluso odio asía la ex – sacerdotisa…-imbecil…..-le lanzo un ataque.
-Kikio….-Inuyasha (Y. Kurama) corrió velozmente tomando en sus brazos a Kikio, salvándola de un ataque directo.
-mal nacido……..como te atreves a atacar a Kikio…-grito completamente furioso…-a ella déjala fuera de esto….-tocando tierra firme Inuyasha bajo sutilmente a Kikio dejándola en un lugar "seguro". (Y. Kurama)
-acaso el gran Inuyasha tiene miedo de no ser capas de proteger a su mujer?...-hablo sarcásticamente, mientras atacaba nuevamente a Inuyasha.
-te voy a cerrar esa boca de una buena vez…-intercepto el ataque de Naraku con su espada, regresándole el ataque al demonio. (Y. Kurama)
-eso me gustaría verlo mi estimado Inuyasha…-le dio un golpe certero en el rostro, lanzándolo lejos de el.
-maldito….-se seco el hilillo de sangre que corría por su labio inferior…-es muy poderoso ahora…-se puso nuevamente de pie. (Y. Kurama)
-y tu mi querida Kikio…-volteó a verla…-no piensas ayudar a tu querido Inuyasha?...-sonrió complacido por la expresión que tuvo de la ex- viva.
-eres un bastardo Naraku…….-saco decidida otra de sus flechas y la lanzo contra el sin titubear.
-eres tan predecible….-la flecha de Kikio, no pudo hacerle daño alguno ya que el se encontraba bajo la protección de un campo de fuerza…-pero que es esto?...los poderes de la gran sacerdotisa Kikio….no pueden atravesar un simple campo?...-se comenzó a bufar de la ex – viva.
-Naraku……..yo soy tu rival….-Inuyasha (Y. Kurama) uso su Bakuryuha, desapareciendo así el campo de fuerza de Naraku.
-Inuyasha….-logro esquivar el potente ataque de su rival.
La pelea se estaba alargando más de lo debido, por alguna razón Inuyasha (Y. Kurama) estaba haciendo más larga la muerte de Kikio, Naraku se había percatado de este cambio tan repentino en Yokko Kurama, pero confía en el y sabe que tarde o temprano la muerte de la ex – sacerdotisa se llevara a cabo.
Me puse inmediatamente de pie, ya que me percate de la presencia de Kurama, pero no de su forma humana, si no en su forma de zorro, quise despertar a los demás pero no habían tenido una noche tranquila, ya que pasaron por la mejor emoción que un humano pudo haber pasado, suspire un poco cansada pero el deber era primero.
-Shadow….-llame a mi mononoke…-rápido ahí que buscar a Inuyasha…-el se transformo he inmediatamente lo monte, el se elevo por los cielos, para poder llevar acabo la búsqueda de Inuyasha….el recorrido no fue muy largo debido a que el no se encontraba muy lejos de la aldea, no en los lugares que suele frecuentar pero si estaba del otro lado del bosque.
-Inuyashaaaaa…-lo llame mientras Shadow descendía, al llegar a tierra firme de un salto baje de mi mononoke, hasta llegar junto a cierto hanyou.
-Kagome…-guardo silencio por unos minutos…-que haces aquí?...sucede algo?...-me pregunto con cierta alarma.
-que?...Inuyasha…-mire para ambos lados…-acaso no te has percatado de una presencia algo sobrenatural?...-lo mire directamente a los ojos.
-no….acaso tu te has percatado de algo extraño….Kagome?...-el también me miro directo a los ojos.
-hai…..es una presencia con un gran poder espiritual…..pero lo que no se es que es lo que esta buscando…-me lleve una mando a mi pecho.
-donde se encuentra esa presencia?...-Inuyasha camino quedando a solo unos cuantos centímetros de mi.
-no esta muy lejos de aquí…-guarde silencio…-Inuyasha hay que darnos prisa, tengo un muy mal presentimiento de esto….-monte rápidamente a Shadow, elevándonos al cielo nuevamente, mientras que Inuyasha nos seguía tratando de igualar el paso que llevábamos.
-Kagome….que es lo que esta sucediendo?...-me pregunto.
-tal ves…..sea algo desagradable para todos nosotros….pero a ciencia cierta…no lo se Inuyasha…..simplemente no lo se….-mi mirada seguía al frente.
-Kagome….-Inuyasha la miraba preocupado.
-basta de juegos…..es hora de darle fin a esto…..-grito Naraku exasperado.
-acaso ya te cansaste……Naraku?...-pregunto Kikio con sacarsmo.
-que tonterías dices….yo el gran Naraku jamás me canso tan fácilmente…-le miro molesto y ofendido.
Inuyasha (Y. Kurama) estaba totalmente cansado (bueno claro que estaba fingiendo estarlo) clavo su espada en el suelo para poder levantarse y así sostenerse en ella, gotas de sudor corrían por su rostro y su respiración era acelerada y cansada, tenía heridas por todo el cuerpo, Naraku se percato del estado de el, por lo que decidió atacar a Kikio, en ese accidental descuido por parte del supuesto Inuyasha para acabar de una buena ves con todo.
-que tenemos aquí al hijo del gran General Perro, completamente derrotado ante mi poder….-se bufaba sin piedad alguna, el rostro de Inuyasha apareció una mueca de molestia, cosa que también molesto a la ex – viva.
-maldito Naraku….-le lanzo nuevamente otra de sus flechas, dándole nuevamente en el hombro al demonio…-no dejare que dañes a Inuyasha…yo soy la única que puede matarlo…-grito con rabia contenida.
-maldita mujer….-grito furioso…-muere….-le lanzo un semi-rayo dándole en donde se supone se encuentra el corazón de barro de la mujer, no la mato al instante, pero la luz que era de color rojo se fue convirtiendo lentamente a un color morado, en el rostro de la ex viva apareció una mueca de dolor.
-ma…..maldito….veo que tu ataque fallo, ya que no he muerto aun…-Kikio cayo de rodillas, cubriendo la herida así evitando que de esta se siguiera derramando sangre. (Un decir no nnU)
-pero si lo que yo deseaba no era una muerte rápida, mi querida Kikio…-sonrió…-lo que yo en verdad deseaba….-se acerco a ella y la tomo de la barbilla mirándole directamente a los ojos…-que tuvieras una muerte lenta y dolorosa….-la soltó rudamente, haciendo que Kikio cayera al suelo sin poder moverse.
-Inu…..Inuyasha…..atacalo…ya que ahora es tu oportunidad….-su respiración era agitada.
-jajajajajajajaja…..-comenzó a carcajearse Inuyasha.(Y. Kurama)
-Inu…….yasha….-en el rostro de Kikio, apareció una muestra de asombro ante lo que veía.
-crees que en verdad me importa tu vida?...Kikio….-menciono con sarcasmo.
-mal…..maldito….-en los ojos de Kikio comenzaban a aparecer las lagrimas, Kikio se rehusaba a llorar, frente a ese demonio cruel y despiadado y frente al hombre que ella llegó a amar hace 50 años atrás.
-será mejor hacer menos lenta tu muerte….-Naraku cubrió a Kikio con una nube de veneno concentrado, Kikio comenzó a toser.
Yokko Kurama quien aun mantenía la impecable vestimenta de Inuyasha, miraba la situación, el no disfrutaba de eso, el estaba de acuerdo si, pero no podría interferir siquiera para darle una muerte rápida, el era incluso más fuerte que Naraku y más poderoso, pero a esa distancia corría el riesgo de ser absorbido por este, Naraku tenía una verdadera sonrisa de completo triunfo, hasta que una fuerte ráfaga de viento, alejaba la nube de veneno de Kikio, permitiéndole a esta respirar aire puro, ante este acto Naraku desvió su mirada en busca de la persona en que había intervenido en su plan. Se sorprendió al ver a la re-encarnación de Kikio, y mas fue su sorpresa al percatarse de que ella fue quien intervino.
-Naraku….-fue lo único que pude articular, ya que mi vista se enfoco en la persona que ya hacia en el suelo, que respiraba con dificultad…-Kikio…-susurre sorprendida.
-veo que has venido, a darle la despedida a tu encarnación….-se burlo Naraku.
-maldito…-mi mirada se lleno de furia al tener en frente al demonio que fue el culpable de tan cruel acto.
-Kikio….-Inuyasha llego y al ver el cuerpo casi inerte de su querida Kikio, corrió y la tomo en brazos…-Kikio….ese maldito….te hizo esto….-la voz de Inuyasha estaba quebrada.
-Inuyasha….-me sorprendí al escuchar el tono de voz, eso me lleno aun más de furia…-pagaras por esto Naraku….-me moví rápidamente desapareciendo de la vista del demonio, el me comenzó a buscar con su mirada, se quedo inmóvil al verme frente de el y muy cercas, que le propine un buen golpe lanzándolo, lejos de Kikio e Inuyasha. Kurama había mucho que se había alejado de ahí, por lo que no me pude percatar de la presencia de el, debido a que estaba completamente furiosa...-como te atreves…-se limpió el hilillo de sangre que corría por su labio Inferior.
-te dije que lo ibas a pagar….-contra ataque nuevamente, pero el muy cobarde había escapado, nuevamente….-cobarde…-apreté furiosamente mis puños.
-Inuyasha…..será mejor que te despidas de tu querida Kikio, ya que no le queda mucho tiempo de vida, jajajajajaja….-y así fue como desapareció, no dejando rastro nuevamente.
-eres un maldito, Naraku…-golpe furiosa el suelo, tanto fue el daño que me hice que mi mano comenzó a sangrar.
-Inu……Inuyasha….-Kikio comenzó a toser nuevamente.
-Kikio….no digas nada….te llevare con Kaede…..y verás que te salvaras….-Inuyasha le hablaba con voz calida, como siempre solía hacerlo.
-no……no…..ya no hay tiempo….-su mirada reflejaba cansancio…-Inuyasha….se feliz……ya que no…..podré llevarte…conmigo al infierno…..para poder….estar….juntos….-Kikio estaba sufriendo como nunca.
-Kikio…-Inuyasha abrazo a Kikio aferrándola a su cuerpo, de sus ojos comenzaban a desprenderse lagrimas de sus dorados ojos.
-Inu….Inuyasha….-y ante este susurro la ex viva, comenzó a desintegrarse en los brazos del hanyou, y las almas que esta retenía descendieron al cielo, Kikio había regresado al lugar de donde ya hace mucho pertenecía y que no era este mundo.
-Kikioooo….-comenzó a llorar como un pequeño Inuyasha, el estaba llorando era la primera vez que lo veía llorar de esa manera.
-Inuyasha…-el corazón se me encogió, nunca antes lo había visto así, Inuyasha golpeo duramente el suelo, el llanto de el cada vez era más desesperado, en ese momento no lo pensé dos veces, me acerque cuidadosamente a el.
-Inuyasha….ella te amaba en verdad…-susurre para tranquilizarle.
-Kagome….-el me miro y sus ojos estaban semi rojos, por las lagrimas que el estaba derramando, instintivamente me abrazo fuertemente, ante este acto me sorprendí un poco…-debe de pensar que soy Kikio…-pensé para mis adentros, y torpemente correspondí al abrazo de el, trate de alentarlo de la misma manera que Kikio lo haría, claro si ella algún día lo hubiese animado, quizás cuando ella aun seguía con vida.
-Inuyasha….-susurre imitando la voz de Kikio…-siempre estaremos juntos…-me costo trabajo imitar la voz fría de ella.
-Kagome…..nunca podrás ser como Kikio….siquiera tu voz se parece al de ella…-me dijo en un susurro…-tu voz desprende ternura y tu cuerpo desprende ese calor que ella no puede…-se aferro más a mi ocultando su rostro en mi cuello.
-lo siento….ni siquiera puedo imitar la voz de Kikio…soy un fracaso…-lo dije entre sonrisas.
-tu eres…tu…eres Kagome….y no eres un fracaso….-esto me lo dijo casi en un susurro.
-ah?...Inuyasha…-lo llame pero sentí que el dejo caer su cuerpo sobre el mío, por más que lo llamaba y el no respondía…-se ha quedado dormido…-sonreí un poco, y lo acomode suavemente en mis piernas…-por lo menos….el se merece pasar una noche agradable…..por hoy no me importaría que el me viera como Kikio…-susurre mientras le acariciaba y acomodaba unos traviesos mechones de cabello que caían sobre su lindo rostro, le mire melancólica, cuantas veces había deseado tenerlo así y que Kikio ya no existiera entre nosotros, para así poder estar juntos, pero ahora era muy distinto, deseaba que ella aun siguiera con vida para así poder estar tranquila sabiendo que aunque Kikio no amaba a Inuyasha, le podría hacer compañía, para que el no se sintiera tan solo, pero nuevamente las cosas no salían a nuestro favor. Lentamente el sueño me fue venciendo, a pesar de tener el calor del cuerpo de Inuyasha sobre mis piernas, comencé a temblar un poco por el frío de la noche, hasta que sentí un pequeño peso extra, abrí lentamente mis ojos y mi pequeño mononoke se había recostado junto conmigo dándome el calor faltante, para poder descansar, pero antes de hacer un pensamiento cruzo por mi mente.
-hay…Kurama….acaso tu también tuviste que ver, con la muerte de Kikio y el plan de Naraku?...-este pensamiento me dejo algo aturdida, solo rogaba a Kami por que no fuera así, ya que de serlo, Inuyasha no descansaría hasta matarlo y ella por más que quisiera no sabría que hacer, por un lado Inuyasha quien tiene el derecho de vengar nuevamente la muerte de su amada Kikio y por otro lado Kurama, quien era el hombre que ella amaba profundamente y que estaba bajo la influencia de ese maldito ser, que desde que ha llegado le ha dado dolores de cabeza, por no saber como recuperar a su Kurama y por no saber como ayudar a Inuyasha…-después de todo…..aun sigo queriendo a Inuyasha…pero con quien deseo compartir mi vida….es contigo Kurama…-susurre antes de quedarme profundamente dormida.
-yo también….deseo compartir mi vida contigo…mi dulce Kagome…-un chico veía entre arrepentido y celoso al ver que la joven sacerdotisa tenía en sus piernas la cabeza del hanyou, quien había descubierto que tenía cierto interés en la joven de nombre Kagome….-no dejaré que el se quede contigo Kagome, tu y yo seremos uno mismo después de que todo esto pase lo juro…-pensó el chico más para si mismo, desapareciendo sin hacer mucho ruido, característica de el.
