Después de 7 años… No puedo olvidarte

Capítulo 3- Los obstáculos comienzan a definirse…


El cielo ya estaba casi en su totalidad de un color azul claro, las nubes ya se encontraban adornando este, formando así, un día que pintaba con tener el clima perfecto. Mientras tanto, una joven, de cabello rubio y ojos cafés, se paró enfrente de la entrada principal de la madriguera, dando unos leves golpes.

-¡Hola Gin, querida!- dijo la joven con una voz irritante y falsamente alegre al ver a Ginny, una vez que esta abrió la puerta -¿Está tu hermano en casa?

-Veamos… son las 7:15 a.m. ¿Tú qué crees?- le respondió Ginny sarcásticamente

-¡Tú siempre tan graciosa Gin!- le dijo la joven entrando rápidamente a la casa y con el mismo tono irritante

-Claro, pasa, sabes que eres bienvenida- espetó Ginny sarcásticamente, cerrando de mala gana la puerta y murmurando algo que sonaba como "y yo pensando que el día iba a ser perfecto…"

-Muy buenos días señores Weasley- dijo la joven de cabellos rubios con un tono un tanto hipócrita, al ver a Arthur y a Molly en la cocina, sentados y desayunando

-¡Buenos días Kristen!- la saludó alegremente el señor Weasley

-Buenos días- le dijo secamente Molly

-Supongo que vienes a ver a mi hijo- le dijo alegre Arthur por encima del periódico El Profeta

-Así es señor Weasley- le contestó Kristen con falsa inocencia en su voz –Ya tiene varios días que no nos vemos, y pensé en venir a verlo

-¡Pensó!- dijo Ginny como si algo imposible acabara de suceder, asegurándose de que la rubia la escuchara

Por fortuna, el señor Weasley no había escuchado el comentario de su hija, por que se había concentrado de nuevo en leer El Profeta; en cambio, Kristen escuchó a la perfección el comentario de Ginny y le lanzó una clara mirada de odio, cosa a la cual Ginny respondió con una sonrisa de suficiencia

La señora Weasley que había visto y escuchado todo, se limitó a sonreír discretamente, para después llamar a Ron.

Ron bajó cinco minutos después del llamado de su madre con el rostro soñoliento, y antes de que bajara completamente las escaleras, Kristen ya había llegado hacia el, casi corriendo.

-¡Ronnie, mi amor!- exclamó Kristen con un tono exageradamente meloso mientras lo abrazaba como si tuviera años de no verlo -¿Cómo está mi jugador de Quidditch favorito?

-Bien Kris, y tu… ¿Có-como estás?- le preguntó Ron en medio de un gran bostezo

-Extrañándote- le respondió Kristen poniendo una cara de suma tristeza –Me has tenido muy olvidada

-Lo siento- le dijo Ron después de darle un beso en los labios –He tenido mucho entrenamiento, pero por fortuna me han dado un mes de vacaciones

-Bueno familia, me voy a trabajar –dijo de pronto el señor Weasley caminando hacia su chimenea mientras veía su reloj -¿Vienes Kristen? Supongo que querrás llegar temprano al ministerio

-Creo que me quedaré un rato más con Ronnie- le contestó ella con su sonrisa hipócrita y abrazando más a Ron

-Vamos Kris- comenzó a decir Ginny con el mismo tono irritante que usaba Kristen –Acompaña a mi papá, no lo dejes ir solo

-Esta bien señor Weasley- dijo Kristen viendo que no le quedaba otra opción –Nos vemos más tarde, Ronnie

Ron asintió en medio de otro bostezo, Kristen se despidió de la señora Weasley y de Ginny, pero a esta última con una clara mirada de "me las vas a pagar", a lo que la pelirroja solo se limitó a formar una expresión inocente

-Te quejas de Draco- comenzó a decir Ginny cuando Kristen y su papá desaparecieron por la chimenea –Y tú estás peor… es un hígado, no se como logras aguantarla

Ron pareció no haberla escuchado ya que estaba muy entretenido viendo que había de desayunar

-¿No vas a ir al Cuartel General de Aurores, hija?- le preguntó la señora Weasley a Ginny

-Hoy es mi día de descanso mamá- le contestó Ginny –Pero pienso ir en la tarde, voy a pedir permiso para el baile que va a hacer Hogwarts dentro de dos semanas

OoOoOoOoOoOo

-¡Claro que te daré el permiso Harry!- dijo alegremente el ministro –Ya necesitas unas vacaciones, aunque sin tu presencia aquí, todo va a ser un verdadero caos

-Hay muy buenos aurores aquí señor ministro- le contestó Harry antes de beber un poco de café

-Si Harry, es verdad, pero ninguno se compara contigo; en tan solo cuatro años has conseguido atrapar a más magos tenebrosos que mi auror más experimentado- Harry se sonrojó un poco con el comentario y lo disimuló tomando más café –Y… ¿Cómo piensas llegar hasta Escocia? Créeme, de la forma muggle, de Canadá hasta Escocia, no es muy cómodo que digamos…

-No, no voy a ir de la forma muggle, eso es solo cuando estoy en alguna misión- lo corrigió Harry –Voy a aparecerme

A los pocos minutos después de estar platicando Harry con el ministro de magia de Canadá, Thomas Lohan, salió de su despacho dispuesto a irse directamente hacia su oficina, pero en el camino, se le atravesó una hermosa joven más o menos de su edad, delgada, con el cabello de color castaño claro, largo y con leves rizos, y sus ojos eran de color verde claro.

-¿Cómo está eso de que te vas a ir de viaje Harry James Potter?- le preguntó la chica con el entrecejo fruncido y un tono falsamente enfadado, colocando sus manos en su cadera

-Ahora no Carol Anne, tengo cosas que hacer- le dijo Harry esquivándola y volviendo a emprender su camino, pero la chica lo detuvo por el brazo

-¿Olvidas que yo también soy una auror y por lo tanto se que asuntos hay?, Acabo de revisar y todo está en orden- le dijo Carol Anne con una gran sonrisa de satisfacción

-¿Qué es lo que quieres?- le preguntó Harry tratando de aparentar serenidad

-Que me digas que tan cierto es lo de tu viaje

-Si, es verdad, dentro de dos semanas me iré de viaje a Escocia por una semana –le contestó Harry

-¿Y por qué no me llevas?- le preguntó con un tono meloso Carol Anne

-¿Y por qué te he de llevar?- le dijo Harry comenzando a fastidiarse

-Vamos Harry, vas a necesitar algo de compañía- le dijo Carol Anne colocando ambos brazos alrededor del cuello de Harry, haciendo ademanes muy provocativos

-No lo creo- le contestó tajante Harry quitándose de encima los brazos de la chica y alejándola de el –Créeme, voy a tener demasiada compañía en el lugar a donde voy

-¿Por qué te comportas así conmigo Harry?- le preguntó ahora enfadada la chica

-Por que al parecer, tu no vas a entender de otra manera; he tratado de hacerte entender de la manera más amable que lo nuestro no va a llegar a ninguna parte; ya lo intentamos una vez y ambos sabemos perfectamente que fue un fracaso…

-Fue un fracaso por tu culpa- lo interrumpió bruscamente la chica –Yo puse todo de mi parte, pero tu te la pasas pensando en esa tal Ginny…

-Me estás quitando el tiempo, con permiso- la interrumpió Harry avanzando rápidamente en dirección hacia su oficina

-Ya veremos quien sale ganando- dijo en un susurro malicioso Carol Anne después de perder de vista la silueta de Harry –Voy a hacer hasta lo imposible para ganarme tu amor Harry…

-Carol Anne tiene razón- pensaba Harry mientras entraba bruscamente a su oficina y cerraba fuertemente la puerta –Por más que quiero, no puedo olvidarla


N/A: Hola! Bueno, espero que la historia les siga gustando… recuerden que los capítulos ya comienzan a estar algo más largos a partir del 10… la historia ya la tengo casi terminada, pero aún así, me gustaría mucho que me dijeran su opinión para ver que es lo que puedo corregir o cosas así… es que estoy algo triste por que no me llegan muchos reviews… En fin… les agradezco a todos los que leen y más aún, a los que me dejan su opinión… Bueno, los dejo y nos vemos en cuatro días… Un beso

Maryºººººººº