Después de 7 años… No puedo olvidarte
Capítulo 42- Tratando lo imposible… por amor
No caminaron mucho, cuando, después de haber atravesado el umbral de la puerta, y al haber entrado en un pasillo largo y estrecho, escucharon unos pasos muy cercanos a ellos, demasiado cerca; al principio, ninguno de ellos supo que hacer, pero Hermione, al lograr divisar entre la oscuridad, una silueta que se acercaba con rapidez hacia donde ellos estaban, les advirtió a los demás por lo bajo, y en seguida, se separaron, ya que, por lo urgente de la situación, no pudieron ni siquiera hablar ni pensar en hacer algo más prudente que eso.
Ron, tomando instintivamente a Hermione por el brazo, la jaló hacia el interior de una habitación, acción que Tonks, que se encontraba junto a ellos, vio y sin pensarlo, se metió junto con ellos.
Una vez que ya hubieron estado adentro, Ron, Hermione y Tonks, dejaron levemente abierta la puerta, para así, poder vislumbrar al encapuchado que se había ido acercando. Los tres vieron como el mortífago se detenía por unos instantes frente a una puerta que estaba del lado contrario a la de ellos, aunque algo más lejos de donde estaban; Ron, en eso, sintió una gran sensación de vacío en el estómago, ya que, el mortífago, había abierto de golpe la puerta en la que había estado parado, como escuchando atentamente si había alguien dentro… Y en efecto, lo había… Ron había logrado ver como Harry, Luna y Draco se adentraban en esa habitación, y por esta razón era que había sentido un enorme temor… No quería pensar que era lo que podría pasar si los descubrían, sin embargo, esta sensación se disipó casi del todo cuando el encapuchado salió a los pocos segundos, al parecer, sin haber encontrado nada fuera de lo normal ahí.
-"¿Quién será?"- se preguntó Ron así mismo, al momento de que la luz que emanaba de la varita del mortífago alumbró la máscara blanca que portaba
-Ron…- susurró débilmente Hermione, también mirando al encapuchado
-¿Qué pasa?- susurró de igual manera Ron, sin embargo, al no obtener respuesta alguna, volteó a ver a Hermione, y al observar que ella seguía con la mirada fija en el mortífago, con una expresión de angustia claramente mezclada con temor, el chico desvió la vista al punto en el que Hermione tenía puesta la suya, y al hacerlo, instantáneamente descubrió el por que de la expresión de su esposa…
La débil luz de la varita del mortífago, además de iluminar parte de su inexpresiva máscara, también iluminaba a un pequeño bulto que él llevaba cargando, el cual, estaba envuelto en varias cobijas, pero que, de un lado, algo diminuto sobresalía… una pequeña mano que colgaba inerte, no dando señal alguna de vida… una pequeña mano que Ron y Hermione reconocieron como la de Diane, su hija…
-Ese infeliz tiene a mi hija…- susurró Ron, apretando con furia los puños
Ron hizo ademán de salir de la habitación, sin embargo, Tonks lo tomó fuertemente del brazo, lanzándole una mirada amenazadora, como queriéndole decir que no hiciera nada imprudente que pudiera perjudicar a todos
-Quédate aquí, por favor- le susurró Tonks
Al chico pareció no importarle la advertencia de la auror, ya que aún se veía dispuesto a salir de ahí y acabar con el inepto que tenía a su hija en ese estado, pero, al momento de querer zafarse de Tonks, sintió como la cálida mano de Hermione se posaba en la suya, como queriéndole decir, con este gesto, que Tonks tenía razón, que no debía hacer nada imprudente, no tanto por ellos, si no por la niña, por su hija… Ron, al ver todo esto reflejado en los ojos de Hermione, toda esa preocupación y temor que pugnaba por salir de los ojos de la chica mediante lágrimas, asintió levemente con la cabeza al tiempo de que atraía a Hermione hacia sí para poder tranquilizarla con un abrazo, con un reconfortante contacto que dijera que no iba a dejar que nada le pasara… aún así fuera sacrificando su vida… El mortífago pasó de largo de donde ellos estaban, bajando con lentitud la escalera, como si estuviera disfrutando enormemente ese recorrido.
-Debemos seguirlo- susurró Hermione rápidamente
-Tienes razón, vamos a seguirlo- la apoyó Ron, tomándola de la mano
-Un momento- inquirió Tonks –No podemos seguirlo así como así, necesitamos decirles por lo menos a los otros…
-Pero no sabemos en donde están- la interrumpió Hermione –Por favor, vamos a seguirlo… si no nos damos prisa, lo vamos a perder de vista…
-Pero debemos avisarles a los demás…
-Mira Tonks- inquirió Ron, colocándose en frente de ella –Si los buscamos, vamos a perder más tiempo… Lo mejor es seguirlo, y ya que sepamos hacia donde se dirige, les avisamos a los demás¿De acuerdo?- Al ver que Tonks aún seguía con una expresión de duda, Ron volvió a agregar –Tonks… Por favor… Ese tipo tiene a nuestra hija… No sabes lo que sentimos al verla así… Debemos hacer algo, por favor, vamos…
-Esta bien- accedió Tonks, sacando su varita –Vamos ahora
La joven pareja le sonrió con gratitud a Tonks, para después, salir con sumo cuidado de su escondite, y así, poder seguir al mortífago que aún estaba bajando las escaleras.
Los tres agradecían enormemente la profunda oscuridad que iba creciendo a medida que avanzaban, ya que, en varias ocasiones, Tonks había tropezado con varios inmuebles, y en la mayoría de esas veces, el mortífago se había detenido y dado media vuelta para descubrir el origen de esos ruidos, pero al no lograr divisar nada, seguía su recorrido… Sin embargo, a Hermione esto se le hacía por demás extraño… Era como si el mortífago ya supiera que habían invadido la casa y que además, lo estuvieran siguiendo, ya que, por su actitud, podía deducirse muy fácil eso…
-"Pero si nos hubieran descubierto, ya nos habrían hecho algo"- pensó Hermione, tratando de desechar esos temores de su cabeza… No, no podían haberlos descubierto… ¿O si?
En ese momento, ya que llevaban caminando por varios minutos, recorriendo largos y oscuros pasadizos y bajando escaleras, entraron a un pasillo algo diferente a los demás, ya que, aparte de que sobre sus paredes de piedra, habían varias antorchas con fuego de color verde esmeralda, también se encontraban varias puertas y otras entradas que al parecer, conducían a otras partes subterráneas de la casa… En resumen, eso parecía como un laberinto subterráneo, del cual, si te perdías, difícilmente ibas a lograr salir vivo…
Dado que al pasillo al que habían entrado ya había muchísima más luz que en los anteriores, los tres tuvieron que esperarse a que el mortífago entrara a donde lo iba hacer, para que así, no pudiera descubrirlos; no tuvieron que esperar mucho, ya que el encapuchado entró por la tercera puerta del lado derecho, dejándola abierta, cosa que a Hermione volvió a parecerle muy extraña… era como si él los estuviera invitando a pasar…
-Bien, ya sabemos en donde está- susurró Tonks, fijando su mirada en los jóvenes –Ahora, vamos a buscar a los demás y así, poder rescatar a su hija
-No Tonks- la atajó Ron con actitud decidida –Debemos ir ahora… caminamos mucho y honestamente, no creo poder recordar el camino hasta aquí… Tenemos que actuar nosotros solos…
-¿Estás loco?- le preguntó Tonks con un tono de incredulidad –No sabemos si con él pueden haber más… lo más conveniente es pedir ayuda
-No creo que tenga compañía- inquirió Hermione, con un tono de decisión igual al de Ron
-Pero…
-¿Por qué no mejor los llamas con el encantamiento brújula?- sugirió Hermione, interrumpiendo a la auror –Así ellos vendrán sin necesidad de ir a buscarlos
-Pero en este lugar hay una gran cantidad de magia negra, no estoy segura en que funcione…
-Aún así, hay que intentarlo… Por favor
Tonks, viendo que no iba a poder convencer a ese par, accedió nuevamente, por lo que, sacando su varita y agitándola un poco, susurró algo, deseando profundamente que el encantamiento funcionara y lograra guiar a los demás hasta ellos
-Gracias- le dijo Hermione, abrazándola fuertemente
-Es imposible discutir contra ustedes- Le respondió ella, también devolviéndole el abrazo
Antes de salir de entre las sombras y adentrarse al pasillo, Ron y Hermione se miraron por unos instantes, para después, fundirse en un abrazo… en un cálido abrazo, uno muy diferente a los demás… el sentimiento que ambos jóvenes tenían, era casi el mismo… con temor, sentían que ese abrazo, iba a ser el último que se darían… Hermione, al sentir esto, a su cabeza, nuevamente llegaron de golpe las imágenes que había tenido en un sueño… aquellas terribles imágenes en las que veía con frustración, tristeza y dolor como un chico encapuchado, idéntico al que habían estado siguiendo, mataba a Ron con una maldición imperdonable… Hermione sintió un grandísimo hueco en el estómago… ¿Acaso ese sueño podría estar haciéndose realidad?
-Ron… tengo miedo de que te pase algo- le susurró ella al oído, aferrándose más a él, como si las palabras dichas no hubieran sido suficientes para expresar todo su temor
-No me va a pasar nada Herm- le respondió Ron, acariciándole con suavidad el cabello –Te lo prometo…
-¿En verdad?
-Si pequeña… te lo prometo
Ron alejó su rostro del cabello de Hermione, solo lo suficiente para quedar a escasos milímetros de la boca de su esposa… Ambos se fundieron en un beso, en un cálido, tierno y reconfortante beso… Era como si Ron le confirmara que nada malo le iba a pasar, que no se preocupara, y que, aunque así fuera, el siempre, siempre iba a estar con ella… Hermione, que a pesar de aún tener ese gran temor dentro de ella, se dejó llevar por todas las hermosas sensaciones que Ron, su esposo, le transmitía… Ambos se separaron, con la mirada fija en los ojos del otro, y así, decidieron ir de una vez por todas a aquel lugar para rescatar a su hija e impedir que le hicieran daño… A pesar de saber perfectamente que el destino no podría ser cambiado por nada ni nadie y que cada quien ya tenía el suyo marcado, decidido… ya fuese para bien o para mal…
Ron, colocándose en frente de las chicas, emprendió la marcha con la varita preparada, cruzando con decisión aquel camino solamente iluminado por aquel resplandor verde esmeralda que emanaba de las antorchas… Cuando ya hubieron llegado hasta la puerta en la que el mortífago se había adentrado, Ron, decidió no esperar ni un segundo más, y entró de golpe a la mazmorra
El lugar era amplio, y que, al igual que en el pasillo, estaba rodeado de antorchas sobre las paredes, exactamente del mismo color; la mazmorra estaba vacía, a excepción de una enorme roca con forma rectangular que se encontraba en medio del lugar, y en el cual, se podía vislumbrar algo sobre esta, era como un pequeño bulto de cobijas, mismo que estaba siendo resguardado por una silueta negra, por el mortífago al que habían seguido…
-Pensé que ya se habían arrepentido y que no querían pelear contra mi- dijo el mortífago, dándose media vuelta, para poder observar a los recién llegados por entre las rendijas de su máscara de mortífago
-¿Quién eres tú?- le preguntó con brusquedad Ron, apuntando con su varita al hombre… La voz del sujeto se le hacía familiar…
-Jajaja¿Acaso no eres capaz de adivinarlo, asqueroso Weasley?- le respondió el hombre, emitiendo una escalofriante carcajada
-Espera un momento…- inquirió Hermione, colocándose al lado de Ron… A ella también se le había hecho muy familiar esa voz, demasiado… Pero no, no podía ser… No lo creía capaz, sin embargo… recordó aquella vez en la que escuchó a esa misma voz advertirle algo… aquella ocasión en la que él la había amenazado, diciéndole que se iba a arrepentir, no solo ella, si no también Ron… Acaso… ¿Podría ser el?
-Veo que para variar, eres la única capaz de atar cabos, querida Hermione- dijo de pronto el chico, como si le hubiera leído la mente
-¿Rick?- preguntó Hermione, aunque ella, por desgracia, ya había confirmado la respuesta
-Efectivamente, amor
El mortífago se llevó una mano hacia la máscara, y lentamente, se fue despojando de la misma, dejando ver de esta manera, la repugnante mueca de satisfacción y ansiedad mezcladas, como también, unos ojos verdes que reflejaban un profundo odio hacia las dos personas de tres que tenía enfrente de sí… Era casi imposible describir con precisión su sonrisa, esa sonrisa que no se podía definir si era de desprecio, desesperación, triunfo o… ¿desdicha?
-¡¿Cómo pudiste desgraciado?!- espetó con furia Ron, empuñando mucho más firmemente su varita
-¡Cuidado con lo que haces Weasley!- espetó Rick, al que fugazmente le había atravesado por su rostro un dejo de temor, al ver a Ron así de enojado -¡O aquí, tu hija, sufrirá las consecuencias!
Estas simples palabras, causaron un gran y rápido impacto en el pelirrojo… Si no se andaba con cuidado, su hija podría estar en un grave peligro… Debía ser cauteloso con lo que hacía, de lo contrario… No, no quería ni imaginarlo…
-Así me gusta… que me obedezcas- dijo con malicia Rick, viendo con enorme gozo como Ron reaccionaba a sus palabras y bajaba su varita, aparentemente derrotado
-¿Por qué lo haces?- inquirió Hermione, con unas lágrimas de impotencia bajando por sus mejillas
-Tú, mejor que nadie, sabes por que lo hice- le contestó Rick, cambiando su tono de voz a uno frío, mirándola de una forma extraña
-Pero Rick…
-¡PERO NADA!- explotó el chico, con un color rojo en su rostro -¡TÚ Y WEASLEY SON LOS CAUSANTES DE LO QUE SOY AHORA!
-¡Ellos no tienen la culpa de nada!- saltó Tonks, colocándose a un lado de Ron -¡Cada quien decide su camino, nadie te obligó a convertirte en un asqueroso mortífago!
-¡TÚ CALLATE¡A TI NADIE TE LLAMÓ EN ESTO!- Rick, con los ojos llenos de profunda rabia y odio, levantó su varita y la dirigió directamente a Tonks, sin dar tiempo siquiera de reaccionar a los demás -¡DESMAIUS!
El rayo color rojo le dio de lleno a Tonks en el pecho, lanzándola por los aires y provocando que diera fuertemente contra la pared, deslizándose por esta, cayendo con el cuerpo inerte, desmayada…
-Lo mismo le pasará a quien se atreva a faltarme al respeto- susurró Rick, cambiando nuevamente su tono de voz, volteando a ver con una mirada penetrante y fría a la pareja
-No tenías por que hacerle eso- dijo Hermione, al tiempo de que se acercaba hasta Tonks, verificando que estuviera bien y que solo se hubiera tratado de un simple desmayo
-Yo hago lo que quiero y con quiero, no necesito la aprobación de nadie para hacerlo- le contestó Rick, solo siguiendo con la mirada los movimientos de Hermione
-Solo de tu tonto Señor Oscuro¿Verdad?- soltó Ron, que se había percatado de la manera en la que el mortífago miraba a su esposa… ¿Qué se creía ese inepto para mirarla de esa manera?... Por la mente del pelirrojo pasaron varias imágenes, imágenes que contenían la misma mirada que Rick le lanzaba a Hermione cuando ella y Ron eran novios… Era exactamente la misma mirada cargado de lujuria, deseo… No iba a tolerar esto más –Claro, era de suponerse… Alguien con tu cerebro necesita de otro que le diga que hacer y que no, por que tú no eres capaz de pensar por tu cuenta…
-¿!COMO TE ATREVES A DECIRME ESO?!... No sabes lo que acabas de hacer… Ahora tu hija sufrirá la consecuencia de tu estupidez…
-¡NO LO HAGAS RICK, POR FAVOR!- Gritó Hermione, levantándose rápidamente del piso, sin embargo, Rick ya había levantado su varita hacia el bulto que yacía sobre la mesa de piedra, y con una sonrisa de burla, dijo:
-Finite incantatem
El bulto, con el pequeño cuerpo que aparentemente se encontraba dentro, desapareció, no dejando nada más a la vista; Ron y Hermione, que habían puesto idénticas caras de terror, se quedaron en absoluto silencio, tratando de descifrar que era lo que acaba de ocurrir
-Jajaja¡No puedo creer que cayeran!- Rick emitió unas sonoras carcajadas, y retorciéndose de risa, dirigió su mirada hacia los jóvenes –¡Su hija no estaba aquí¡Yo ni siquiera la tenía por que ella ya está en poder de mi Señor Tenebroso y en estos momentos, ya debe estar llevando a cabo el rito que lo alzará nuevamente!
Hermione, sin poder creer lo cínico que Rick, el chico en el que alguna vez había confiado y querido, podría llegar a ser… De sus ojos castaños, nuevamente comenzaron a brotar nuevas lágrimas, sin embargo, antes de que pudiera hacer algo más, vio como Ron, cargado de una enorme furia y odio, se dirigía aprisa hacia Rick, dispuesto a acabarlo, destrozarlo, pero no con una varita, si no con sus propias manos…
-¡TE VOY A MATAR!
Ron se abalanzó sobre Rick, y con una enorme fuerza, le dio un puñetazo en la cara, sin embargo, el ojiverde no esperó un segundo golpe, y con su varita, pronunció un hechizo que provocó que Ron golpeara contra la pared, con la nariz sangrando a chorros.
-¡Impedimenta!- exclamó Hermione, saliendo en defensa de Ron, pero Rick, con gran habilidad, logró esquivar el hechizo, para después, dirigir su mirada hacia la chica, y decir con tono lúgubre
-No debiste haber hecho eso… ¡Inmobilus!
El hechizo paralizó completamente a Hermione, cosa que Rick aprovechó para seguir atacando a Ron
-¡Diffindo!- Logró decir Ron, antes de que Rick se volteara completamente hacia él para seguir peleando; el hechizo logró hacerle al mortífago una herida profunda en el pecho, provocando que Rick emitiera un gemido de dolor, cosa que Ron aprovechó para lanzarle otro hechizo que le dio de lleno en la pierna
Hermione veía impotente el duelo entre Ron y Rick... No daba crédito a lo que veía… Era exactamente la misma escena que había visto entre sueños, la misma escena en la que veía a Ron peleando con furia contra un encapuchado, el cual, era Rick… Hermione, hizo lo posible por poder recuperar su movilidad… sabía con certeza que era lo que sucedería a continuación, sabía que maldición imperdonable estaba a punto de lanzar Rick… Debía impedirlo a cualquier costa, no podía permitir que Ron muriera a causa de la maldición asesina…
-¡VAMOS A ACABAR DE UNA VEZ CON ESTO¡HA LLEGADO TU HORA WEASLEY!- Exclamó Rick, formando una enorme sonrisa de satisfacción y repugnante gozo en medio de su cara bañada en sudor y cansancio notorio -¡AVADA KEDAVRA!
Hermione, sacando fuerzas desde lo más profundo de sí, logró terminar con el hechizo inmovilizador, y corriendo hasta Ron, se colocó en frente de él, y viendo como el rayo color verde se aproximaba directamente a ellos, le susurró algo a Ron:
-Habrá que intentarlo… ahora… ¡PROTEGO!
Los dos jóvenes gritaron esto al unísono, empuñando fuertemente sus varitas, formando así, un impresionante y gran escudo protector plateado alrededor de ellos; la maldición imperdonable chocó contra en escudo que los chicos, con su amor y su unión habían formado, sin embargo, la maldición no rebotó como era de esperarse, si no que, siguió aferrándose a destruir el escudo protector, dándoles así a saber, que irremediablemente, se iba a cometer un asesinato…
-Ron… cuida de Diane…
-¿Qué dices, Hermione?- la interrumpió Ron, incrédulo ante sus palabras… ¿Acaso…? No, no podía hacerlo…
-Lo siento… Te amo…
En el instante en el que Hermione terminó de pronunciar estas palabras, la maldición imperdonable logró romper el hasta entonces, fuerte escudo protector, y con un color y fuerza mucho más leves que en un principio, el Avada Kedavra logró darle directamente en el pecho a Hermione, haciendo que ella cayera pesadamente sobre el cuerpo de Ron, completamente inerte, como si estuviera… muerta
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N/A: Lo se!!!!! Me quieren matar, verdad??!! Lo siento!!!! Pero, pero… bueno, ya en unos capítulos más, creo que igual y cambiaré algunas cosas (ya sabrán a lo que me refiero, jeje)… Por cierto… ya notaron que la hago mucho de emoción?? XD… (es que ya son los últimos capítulos!!! Jejeje)… Así que para que sepan quien murió en el capítulo anterior, tendrá que ser hasta el próximo capítulo… XD…En fin, No saben el gustazo que me da el que la historia les agrade… Todos y cada uno de estos Reviews que he recibido, son lo mejor… En verdad, me hacen sentir super!!! XD… GRACIAS.. Y bueno, que más… Que les hago una invitación para que se pasen por mi nuevo fic "Desde el Lado Oscuro" o mis otros one-shot que tengo (son como 6, jejeje)… Que mas… Solo que espero que la historia les siga gustando… Gracias de corazón
Bueno, ahora si, ya me voy… En verdad millones de gracias por sus Reviews!!!!ººº
Un beso!!!
Mary
Futura de Radcliffe
