Poco a poco, Raven iba siendo tomada en cuenta por el resto de los miembros. Durante el día todo era compañerismo y felicidad, algo marcada por el vicio del alcohol.
Pero en las noches, horribles pesadillas de la muerte de sus compañeros la atormentaban. Gary le había dicho que todo terminaría pero la herida aún estaba abierta, y sangraba más que nunca.
Una tarde, Raven iba con cuatro tipos más por una zona. Los tipos estaban entretenidos hablando con un comerciante que encontraron. Raven vio a Robin en un callejón, observándola.
Raven se acercó con cuidado de no alertar a esos tipos.
-Robin, estás vivo-
-¿Qué has hecho, Raven?-
-Cometí el más grande error de toda mi existencia-
-Eso no fue un error, estuviste consciente de lo que hacías-
-Si-Dijo realmente triste
-¿Por qué?-
-Gary me dijo que ellos me habían traicionado, que los traidores deben morir, entonces...-
Uno de los tipos se dio vuelta y exclamó:
-ROBIN ESTÁ VIVO-
Los cuatro hombres sacaron Micro-Uzis de los cinturones y apuntaron.
-¡Al suelo Raven!-Dijo Robin
Empezaron los disparos. Raven esperaba sentir miles de balas atravesándole la espalda, pero eso no pasó. Alguien disparaba contra los tipos desde el techo de un edificio.
Dos tipos estaban muertos en el suelo, otro estaba herido y el cuarto disparaba como un loco contra el techo del edificio.
Finalmente fue abatido. El comerciante se largó.
Robin estaba dispuesto a irse pero Raven lo detuvo:
-¿A dónde vas?-Le preguntó a su ex líder
-Debo averiguar quién mató a esas personas-
-Déjame ir contigo-
-No puedo, pronto vendrán los demás a buscarte. Te matarán si te ven conmigo-
-Ayúdame a salir de este problema-
-Encuentra la solución tú misma-Dijo y la besó levemente en los labios
Luego se fue. Raven se quedó inmóvil en el callejón. Tres coches negros llegaron a la zona. Se bajaron varias personas con bidones y empezaron a descargar el contenido sobre los cadáveres. Un tipo se acercó a Raven y le indicó que entrara en uno de los coches.
Salieron a la carretera. El hombre sentado a su lado le dijo:
-¿Qué pasó?-
-¿Qué pasó en donde?-
-Murieron hombres nuestros, ¿qué ha pasado?-
-Alguien les disparó, no lo sé-
-¿No sabes quién diablos fue?-
-No-
El hombre no dejó de mirarla como a una sospechosa. Luego de un largo recorrido en silencio, llegaron a la granja. Había empezado a llover mucho.
Un tipo se acercó a Gary:
-Raven está viva, pero los demás no. Fueron aniquilados-
-No se preocupen, de seguro ha sido la policía-Dijo Gary
Se dirigió a la ventana para ver ingresar a los coches.
-Denle una habitación muy segura a Raven, la más segura de este lugar. Quiero guardias por todos lados-
-Si, señor-Dijo el subordinado
La tormenta azotaba a la ciudad. Una noche negra, lluviosa y solitaria. Las calles estaban desiertas, no había nada que rompiera el silencio a excepción de los truenos.
A eso de las 2:45 de la mañana, un coche gris se acercaba a la granja. Inmediatamente se encendieron reflectores y varios guardias salieron a recibirlo.
-¿Quién es?-Dijeron apuntando con las escopetas
-Soy yo, Harold-Dijo el comerciante
-Adelante-
Lo dejaron ingresar. El viejo comerciante ingresó en la casa principal para reunirse con Gary:
-¿Qué pasa?-Le preguntó Gary
-Robin está vivo-
-¿Cómo?-
-Yo lo vi, sus hombres murieron baleados cuando iban a matarlo-
-¿Usted piensa que...-
-Está trabajando para alguien más-
-¿Para quién?-
-No lo sé. Esa era mi noticia. Buenas noches-
-Buenas noches-
A la mañana siguiente, Gary se reunió con Raven:
-¿Viste a Robin?-
-¿Qué?-Preguntó Raven sorprendida
-Pregunté si viste a Robin-
-No, no, debe estar muerto-
-Anoche me dijeron que estaba vivo, justo en el lugar donde te encontrabas tú y los otros cuatro-
-Créame que yo no lo he visto-
-Ya veremos-
Raven estaba pensando en fugarse de ese lugar esa misma noche, pero la lluvia dificultaría el escape, eso sin contar la enorme cantidad de guardias armados y coches preparados y blindados.
Sin embargo, Gary le dijo que a las siete de la tarde ella vaya a una fábrica abandonada donde iban a reunirse. Un coche negro esperaba con la puerta trasera abierta.
Raven ingresó y el coche partió. Llegaron a una horrenda fábrica oxidada y llena de basura. Raven sabía que estaba en ese lugar con mucha anticipación, faltaban como dos horas para las siete.
En eso, llegan dos coches azul oscuro. Raven se escondió detrás de algunos restos de basura. Esa gente no es de Gary, llevan impermeables grises y sombreros azules. Raven los vio entrar en la fábrica. Algo anda mal.
Veinte minutos después esos individuos salen de la fábrica y se marchan a toda velocidad.
Raven entró en la fábrica y descubrió que en cada columna hay un cartucho de dinamita activado. Inmediatamente salió de allí.
Raven se alejó un poco de la fábrica y entró en un callejón. Había alguien más allí.
-No me ataques, no voy a matarte-
Raven identificó al asesino que estaba prófugo. Iba vestido con una gabardina verde oscuro y botas negras. Llevaba un subfusil en la mano.
-Buen trabajo hice con los cuatro tipos, ¿no lo crees?-
-Así que eras tú-
-Espero que no me entregues, ya estás metida en demasiada basura-
-¿Corrompiste a mis compañeros para que me mataran?-Le dijo realmente enojada
-No, ¿crees que ellos van a aceptar una oferta mía? No tengo poder, dinero, nada que ofrecer. Por el contrario, la persona que los ha corrompido está tratando de matarte-
-¿Quién? ¿Quiénes eran esas personas que entraron en la fábrica?-
-No me gustaría contarte quién es, te destruiría la sorpresa. En cuanto a esos que entraron en la fábrica, no son más que unos cuantos mercenarios-
-Realmente, me interesaría mucho que me dijeras un poco más-
-No serviría de nada, si no vas a ayudarme, ¿para qué voy a contártelo?-
El tiempo pasaba, ya eran las seis de la tarde. En una hora tendría la reunión donde hablaría con esos hombres sobre el peligro que hay en la fábrica. Por el momento no era necesario dañar al asesino.
-Si dispones de buena información no voy a hacerte nada-Dijo Raven
-Es la mejor elección-
-Pero, si no me dices nada antes de mañana voy a encerrarte en prisión-
-No puedes, la policía te identifica como cómplice de un montón de mafiosos. Perdiste esa ventaja-
Hubo una fuerte explosión que llenó todo de polvo y materiales que salieron volando en todas las direcciones. La fábrica había estallado. Llegaron dos coches negros.
Raven se olvidó del asesino y se dirigió a los coches. Uno le abrió la puerta trasera.
Adentro había un hombre enmascarado.
-Debo hablar con Gary, alguien ha volado la fábrica-
-De acuerdo-
El acompañante del chofer tomó una radio y llamó:
-Atención, está con vida, procedemos-
El coche empezó a avanzar. Ambos vehículos salieron juntos por la carretera.
Un helicóptero se acercaba desde los cielos tormentosos. Empezaron los disparos contra ambos vehículos.
-Maldita sea-Dijo el conductor mientras las balas rebotaban contra el techo
Un objeto salió a toda velocidad de algún punto del helicóptero y convirtió el coche que iba delante en una bola de fuego. El auto donde iba Raven viró de forma peligrosa y casi sale del camino.
Una explosión detrás casi vuelca el vehículo. El helicóptero volvió a abrir fuego con las ametralladoras. Los vidrios comenzaban a perder su efectividad antibalas. El tipo que iba al lado de Raven abrió la ventanilla y arrojó una granada de humo.
El acompañante también abrió la ventanilla y comenzó a dispararle al helicóptero con su pistola. Las balas del helicóptero alcanzaron al hombre que le disparaba y lo rellenó de plomo. El cadáver quedó colgando por la ventanilla.
El vidrio de atrás se hizo pedazos y en el interior empezaron a entrar balas. Raven se agachó pero igual fue alcanzada. Quedó tirada detrás del asiento del conductor con varias heridas. El enmascarado estaba muerto.
El conductor intentaba esquivar los tiros, pero amenazaba con volcar. Las ruedas de atrás fueron destrozadas por las balas y el chofer perdió el control. El auto se salió del camino y volcó, dio dos vueltas más y quedó con las ruedas hacia arriba. El helicóptero se alejó.
La puerta delantera se abrió. El chofer salió arrastrándose. Observó el coche y dio a todos por muertos. Se fue cojeando por el borde de la carretera.
Raven permaneció inconsciente en el interior del coche. Tenía heridas de bala por los hombros, el brazo derecho, la mano derecha y otras más por el lado derecho del cuerpo.
Alguien llegó y la retiró del destrozado coche.
Debían ser las once de la noche. Raven despertó acostada en una cama. Estaba en un departamento. Afuera retumbaban los truenos y la lluvia golpeaba los vidrios con fuerza. No podía recordar como había llegado hasta ahí. Se intentó incorporar pero el dolor se lo impidió. Tenía todas las heridas vendadas, estaba fuera de peligro. En la mesita del costado estaban las balas ensangrentadas.
Era un departamento con las paredes pintadas de un horrible color verde musgo, había un televisor viejo, dos sillones amarillos y una mesa de madera. Eso era lo único que podía ver Raven en la habitación.
Alguien entró en el departamento. Levantó la vista y vio a Robin.
-Robin-Dijo Raven en voz baja
-Estás bien, mejor no hables mucho, debes recuperarte-
Aún así, ella quería hacerle una pregunta:
-¿Cómo me encontraste?-
-Es fácil identificar a un helicóptero que está disparándole a objetos móviles. En realidad no esperaba encontrarte, sino detener el ataque. Pero revisé el único coche que no había explotado y te encontré. Te traje aquí, donde estoy viviendo-
-¿Me quedaré aquí?-
-Será lo mejor. Prefiero que estés aquí donde yo puedo cuidarte, a que estés en un lugar donde puedes morir-
Robin se acercó a la cama y acarició la mejilla golpeada de Raven.
-Que te mejores-Le dijo
Pasaron los días y gracias al poder curativo era más sencillo curar las heridas. Cuando ya podía ponerse de pie ayudaba a Robin con algunas cosas.
La tormenta que estaba instalada en la ciudad no parecía tener fin. Aunque de día la lluvia era menos intensa, y eso era algo bueno.
Una tarde, Raven fue a hablar con Robin:
-El asesino sigue en esta ciudad-
-¿Lo encontraste?-
-Si, dijo que puede darme información-
-¿Qué clase de información?-
-Dijo saber quién estaba intentando matarme-
-¿Realmente sientes que alguien quiere matarte?-
-Habían puesto dinamitas en el lugar donde yo iba a estar y luego un helicóptero salió tratando de liquidarme-
-Entiendo-
Raven se acercó más a Robin:
-¿Vas a ayudarme?-
-¿En qué?-
-A sacarle la información a ese tipo-
-Si, claro. ¿Dónde podríamos capturarlo?-
-No lo sé, pero para eso aún hay tiempo-
Raven acarició la cabeza de Robin y comenzó a besarlo. Robin también le siguió el juego muy apasionadamente.
Esa noche terminó muy bien, durmiendo juntos. A su lado, Raven se sentía entendida. En cambio, Robin veía a la única persona por la cuál ha sentido mucho afecto.
A las diez de la mañana, Raven y Robin salieron a la ciudad en busca del asesino. Entraron en varios callejones pero no aparecía, era como si el asesino presintiera cuando salen a buscarlo.
Fueron al callejón que estaba cerca de los restos de la fábrica y allí lo encontraron, con el subfusil en mano.
-No vamos a hacerte nada, sólo queremos hablar-Dijo Robin
-Hablar, como si hablar ayudara en algo-Dijo el asesino
-Quiero que nos cuentes sobre la persona que trata de matarme y también quién ha corrompido a nuestros compañeros-Dijo Raven
-¿Qué me darán a cambio?-
-La posibilidad de que te vayas de la ciudad sin ningún problema. Será nuestro secreto, únicamente si accedes a hablar-Le dijo Robin
-Bien, si es así acepto que me libren de toda la policía que tengo detrás-
-Sólo habla-
-Está bien. Chico Bestia y Starfire fueron corrompidos por el señor Gary. Ellos dos estaban listos para pasarse a su bando, ya que Gary necesitaba gente poderosa para arreglar unos asuntos en Alaska. Bien, este señor les pagó una enorme cantidad de dinero, más allá de lo que puedan imaginar. El trato era que para recibir ese dinero y el trabajo ellos debían matar a los otros tres. Habían pensado que te habían matado, pero habían informado a Gary que ellos no podían matar a Cyborg y a Robin debido a que la Torre está preparada con ciertas armas. Le dieron algunos códigos y cosas necesarias para que sus hombres pudieran evadir la seguridad y volar la Torre. Lo cuál pasó. Como Gary sabía que ellos no matarían a Robin y a Cyborg, te llevó a su organización para que los mates. Luego estalló la Torre. El objetivo de Gary siempre ha sido matarlos a los cinco titanes. Ha mentido diciendo que va en busca del que corrompió a los otros dos y echándome la culpa a mi. Él vendió esos ordenadores para ponerse en contacto con Starfire y Chico Bestia, él hizo el cortocircuito en la cárcel para que yo escapara y poder echarme la culpa de haber corrompido a dos titanes. Él manejó los hilos desde un principio. Como te tenía a ti, Raven, pensó que eras la única que quedaba con vida del grupo. Iba a matarte con las bombas en la fábrica. Contrató a esos gángsters para que hicieran el trabajo. Pero cuando supo que Robin estaba vivo entró en pánico. Quería matarte a ti lo antes posible para encargarse luego de Robin. Envió dos coches a la fábrica destruida para comprobar que no existas, pero estabas viva. Alguno de ellos informó a Gary que seguías viva y él mandó el helicóptero. No le importó perder a sus miembros, sólo quería matarte a ti. Como verás, un hombre como él pudo hacer todo esto fácilmente. Ahora mismo piensa que estás muerta, según el cuento del chofer.
Ya no cuenta conque seas un obstáculo, ahora va detrás de Robin-Dijo y miró a Robin.
-¿Eso es todo?-Preguntó Raven
-Exacto-Dijo el asesino
-¿Cómo sabes todo eso?-Le preguntó Robin
-Tengo un amigo en su organización, el chofer del último coche en el que viajaste Raven. Aunque no lo parezca, él me mantiene al tanto de la situación-
-Bien, te creo. Este es el lugar por el que podrás salir de la ciudad: En la plaza principal, en la callejuela de la izquierda hay un pozo de alcantarilla. Avanza hasta llegar a un lugar con un camino a la izquierda y otro a la derecha. Toma por el de la derecha y avanza. Pasará mucho tiempo, pero cuando veas una escalerilla sube porque te llevará a la carretera que conecta con la otra ciudad. Alejado de los controles policiales-
-Muchas gracias, titanes. Espero que ustedes y Dios me perdonen-Dijo, antes de irse se volvió-Y que acaben con Gary-
Se fue guardando el subfusil.
Las cosas van a aclararse.
Continuará
