Hola como estan, he tenido este capitulo desde hace mucho, esperando una aprovacion de la autora original para publicarlo, por lo que por eso tarde bastante a pesar de que estaba terminado desde hace mucho.

Espero que les agrade lo que aqui plasmo, que conste que lo escribi mientras escuchaba Lilium De Elfen Lied. Asi que puede estar algo fastidiosillo. Espero sus opiniones de l ultimo capitulo de Confusiones amorosas.

ADIOS MIS QUERIDOS AMIGOS...

El miedo consumía mi ser, sabia que era lo que miraba desde encima del edificio de graciosa silueta, Miraba como miles de siniestras formas, aparecían de la nada, y atacaban a esos grandes chicos que protegían mi vida y la ciudad aun a riesgo de perder sus hermosas y preciadas vidas.

Me sentía impotente al ser una simple espectadora, mi habilidad solo era útil para calmar la ira almacenada en el alma. Observe como el joven Bestia luchaba por su vida. Sus formas animales eran impresionantes. Podía ver al menos una pequeña parte del inmenso numero de nobles bestias en este chico... podía transformarse desde un diminuto y rápido roedor, hasta un inmenso y majestuoso rinoceronte. Todo lo que su imaginación podía abarcar, era expresado en su cuerpo. Pero notaba una gran tristeza en su ser...

... Se sentía menospreciado, abandonado, sabia de antemano que era el mas débil de los titanes, además de ser el menor de ellos. Se culpaba a el mismo de no poder calmar el dolor de su antigua camarada. En el se sentía la melancolía y soledad de la partida de su amada Terra.

Pero, al fijar mi mirada unos centímetros por encima del joven bestia, podía observar a una joven de hermosos ojos verdes. Tan claros como el jade, Su mirada al igual que el chico bestia expresaba dolor. Como cualquier ser vivo el dolor de lo que acababa de experimentar no era algo sencillo. Pero note con agrado de que liberaba sus frustraciones al destrozar las maquinas que le acorralaban.

-. Es una buena forma, de sacar el dolor de tu sistema.. .- Comente a la vez que bajaba un poco mas la mirada hacia un chico cibernético. Era un gigante manso, Solo su corazón era mas grande que su cuerpo. Aunque sentía oscuridad en el, no era ira... solo tristeza, de olvidar quien era. De convertirse en maquina y dejar atrás el calor humano. Era un alma que al igual que Starfire, ocultaba sus temores y peores pesadillas, tras una cortina de alegría y bromas sin limite.

Allí fue como a lo lejos... por fin pude notar a dos chicos que formaban una pareja ideal, Ambos se complementaban en cada sentido. Al menos habían dado el paso mas difícil en una relación, El primero. Ahora todo dependía de ellos.-. Confíen en ustedes mismos... y todo será mas sencillo. .- comentaba para si misma la chica que observaba desde las alturas.

-. Hermosas palabras mi pequeña .- exclamo Slade mientras le apresaba en sus brazos, ella sabia que las cosas solo serian peores si se resistía. Solo podía esperar lo mejor y que su destino no terminara aquí bruscamente interrumpido.

Pero fue en vano... su brazo desnudo podía sentir el frió del acero proveniente del arma que su padre empuñaba en su contra. Fue así como simplemente por su cabeza merodeaban una y otra vez: sentimientos, recuerdos y miedos. Sabia que Raven y su acompañante enmascarado habían descubierto que ella estaba a manos de su peor enemigo. No sabia el porque estaba empeñado en hacerle sufrir. A ella a su propia hija, la sangre de sus venas.

Y fue cuando noto que Su padre había exigido la atención de todos, Solo en ese lento instante en que sintió el cañón del arma apretándose contra su carne, que pudo darse cuenta de lo que estaba planeando.

Pero fue justo cuando planeaba advertirles, que sentía el desgarrador abrazo del plomo tomándole desde su espalda. Pudo sentir como la bala cortaba carne y hueso para al fin abrirse paso en su cuerpo y salir despedida con un pequeño hilo de sangre, que salpicaba las paredes destrozadas de donde solía estar una hermosa ventana.

Pudo sentir por completo como sus fuerzas se escapaban con cada gota de sangre que vertía sobre su cuerpo, sus ropas absorbían el sagrado liquido como si jamás hubiesen sido humedecidas con anterioridad, hasta que se empapaban por completo y dejaban correr por encima el liquido carmesí.

Su aliento se debilitaba y su mirada asemejaba un deseo ferviente de dormir. Mas su padre no contento con destrozar su cuerpo y derramar su sangre. Le tomaba del cuello y con todas sus fuerzas le arrojaba a unos 20 metros hasta la playa.

Fue cuando mi mirada se fijo en la reacción de los chicos, pude sentir como sus espíritus y almas eran corrompidas por la ira. Pude ver como mi apreciada amiga perdía esa dulzura que tanto le costaba demostrar para dejarse consumir por su odio.

Pero al final a quien mas temía era al joven maravilla. Su mente se mostraba en blanco, lo supe por la expresión que denotaba estupefacción. Sabia que ese chico era quien mas ira almacenaba en su vida. Era quien mas presiones poseía... fue allí cuando se dio cuenta, Si esto continuaba el se convertiría en un alma destrozada dedicada al mal. Se convertiría en un ser igual a su padre.

Mas por mas que lo desease no podía hacer nada para impedirlo, sentía como su cuerpo se impactaba contra el frió liquido del mar, que a esa altura era semejante a caer encima del concreto. Pudo sentir como sus órganos saltaban violentamente dentro de ella para colisionar con el interior de su pecho.

Mas el dolor duro poco... su cuerpo comenzaba a dormirse por la adrenalina... y sus ojos comenzaban a pesar como nunca antes. A pesar de que la adrenalina calmaba el dolor, aun podía sentir como el agua le devoraba por completo. Solo pudo fijar su mirada a la cristalina capa de aire que conformaba la superficie. Que no solo demarcaba hasta donde estaba el agua, sino que también se teñía con el color de las múltiples explosiones que sucedían sin detenerse.

-. Es... así como todo termina... sin conocer el amor, olvidada por todos, y devorada por los peces. Por favor chicos... no pierdan, no se dejen consumir por la ira... no, no lo hagan... Por favor. .- comentaba mientras se hundía en el agua adentrándose en la oscuridad, al tocar el fondo su cuerpo no solo sufría por el agua salada que entraba a su organismo, sino que esta hacia que sus heridas ardieran como el infierno mismo.

Pero no era eso lo que mas le dolía... su cuerpo ya no daba para mas y sentía como lentamente el sueño se apoderaba de ella. Lo que destrozaba lo poco que le quedaba de esperanza y vida, era el sentir como sus almas se oscurecían con el rápido pasar del tiempo.

Fue así como todo para ella se oscureció, al parecer esta tumba de frías y oscuras aguas seria su lecho eterno. Fue así como el sonido se apago, al final todo acabo en un profundo vació. Y lo único que podía hacer era adentrarme cada vez mas en el...

... Los jóvenes titanes por fin habían terminado con toda aquella maquina que osara colocar sus sistemas en movimiento. Todos tenían una mirada perdida en las alturas de su amada torre. Eran ocho pares de ojos mirando a un solo objetivo, Slade.

Starfire comenzaba a elevarse mientras que sus ojos comenzaban una extraña transmutación, cambiaban con lentitud su hermoso verde original a un rojo sangre que invadía sus iris con afán. Al parecer había sido la primera que había superado su estupefacción. Y atacaba descontrolada a Slade con sus Starboltz. Los cuales solo se impactaban en el piso del edificio, haciendo saltar pequeños trozos de concreto alrededor del hombre enmascarado.

Quien miraba complacido lo que había logrado, sabia que todos poseían un lado maligno, y con eso le bastaba. Se jactaba de que ahora los titanes serian sus mas poderosos aliados, solo necesitaba el chivo expiatorio donde ellos descargaran su furia. Mas por supuesto el sabia que no había nadie mejor que el mismo. Por lo que se arrojaba ante una oscura tamaraniana. Que solo le sujetaba firmemente intentando arrancarle los brazos sin inmutarse.

Pero el solo sonreía, su único ojo al descubierto, miraba a la pelirroja como si le divirtiese lo que le hacia. Mas el solo se impulso con sus pies y le acertó una patada en su mentón. Colocando su tosca bota en el delicado rostro de la chica apretándola contra ella hasta que le soltara en busca de aire.

Debido al impacto Starfire le soltaba para poder palpar su rostro, ni siquiera se preocupaba por ver si Slade había sobrevivido a la caída, se sentía curiosa por saber que era ese liquido caliente que rodaba desde su nariz a su boca. Su amargo sabor era inconfundible para ella, era sangre.

Por eso volvió su mirada furica en tan solo unos segundos, en dirección hacia donde había soltado al enmascarado. Para verle caer en las garras del chico Bestia, Quien transformado en Werebeast, acertaba un zarpaso directo a su pecho. El hombre de la mascara fue impulsado por su fuerza animal rumbo a un risco artificial en el campo de entrenamiento, colisionando con el de lleno, logrando que un sonoro estruendo metálico resonara en toda la isla.

Pero no acababa allí su ataque, el joven bestia al mismo instante de conocer que su golpe había sido certero, se transformaba en un veloz halcón que atravesaba el espacio a gran velocidad rumbo a la dirección de Slade. Para así una vez tomado el impulso solo arrojarse encima de el en forma de rinoceronte y acertarle un golpe directo en su estomago atravesándole con su cuerno. Y a pesar de eso no se rendía allí, se transformaba nuevamente en un elefante, tomándole por su cabeza con su trompa e impactándole de frente contra su bote en las orillas.

Allí su cuerpo derramaba un extraño liquido de negrusco color, desde todos sus orificios posibles, cada fibra de su ser al menos temblaba del castigo que acababa de sufrir, pero el sonido ensordecedor de algo acercándose a el a gran velocidad, lograba que elevara su mirada al cielo que se tornaba de un rojo brillante y segador.

No pudo observar mas que una esfera de fuego cayendo desde el cielo hacia el, impactándose en su cabeza a varios kilómetros por hora. Era Starfire que usaba su cuerpo como proyectil para golpear con su tal vez mas letal técnica. Al lograrlo, ella solo se erguía de la tierra que brillaba al rojo vivo por la temperatura del impacto. Sus cabellos ondulaban al compás del vapor que emergía del cráter.

Se sentía en el aire un gran olor a quemado, ella había rostizado por completo el cuerpo dejando no mas que un bulto negro retorcido en sentido de la explosión. Ella solo caminaba de allí apartándose del sitio con desagrado. Su mirada solo mostraba seriedad ante el asunto. Acababa de matar y no se arrepentía de ello. Era por eso que las demás razas en el universo les temían y les habían denominado "Nada". Ya que en su época los Tamaranianos fueron La entidad mas peligrosa del universo para las demás razas.

Pero las cosas no eran así de sencillas para las jóvenes vidas que oscurecían su camino, de las sombras seguían saliendo Slades, que miraban extasiados cada escena interpretada.

-. Magnifico mis jóvenes aprendices... Magnifico, por que conformarme con dos, cuando puedo obtener al quinteto completo .- comentaba mientras miraba como Starfire ya desahogada, sonreía ante las insinuaciones del enmascarado. Al igual que chico bestia que reflejaba una mirada perdida y siniestra en su ser. Había aprendido lo que jamás busco aprender. La maldad humana y la fascinación de matar.

Pero los Slades, ya sabían que poseían a dos de los titanes en sus manos, Solo era cuestión de instantes para poseer a los otros tres. Pero las cosas no eran tan sencillas. Los androides eran envueltos en una aura negra y exprimidos hasta desconectarse. En tan solo unos simples segundos 4 unidades "Slade", fueron destruidas sin requerir mucho esfuerzo .

Y era algo sumamente extraño... La figura que le había atacado era nueva, Era un chico que estaba envuelto en todo su cuerpo por un aura negra. Poseía facciones divididas... ni definidas. Era la perfecta unión de un cuerpo femenino y masculino en una sola entidad. Poseía un largo cabello del mismo color. Solo sus ojos rojizos como la sangre eran la diferencia destacable en el.

Su mirada era petrificante, y dura... nadie sabia de donde había aparecido tal ser, Por lo que el verdadero Slade miraba toda acción con cuidado, cuando recordó por fin donde haber visto tal figura. Era Raven quien utilizaba esa técnica cuando astropoyectaba su ser en una entidad negrusca similar a ella.

Fue cuando dirigió su mirada al cuerpo de la chica, Para quedarse con la boca abierta detrás de su mascara. Raven y Robin estaban inconscientes... Sus cuerpos solo estaban allí tendidos en el suelo. Que podía significar esto. Comentaba mientras Starfire y Chico Bestia miraban indiferentes la situación. Habían sucumbido ya a su lado maligno y no les interesaba que ocurría con sus camaradas.

Fue cuando allí Slade decidió integrarse a la lucha... Y como no conocía el poder de su enemigo decidió utilizar el arma que había robado del guardián de la puerta. Al menos le otorgaba los poderes suficientes como para enfrentarse a esta novedad.

-. Interesante Raven... pero dime, por que Robin también esta inconsciente... .- exclamo mientras se acercaba con su enorme arma a ellos. Esta parecía resplandecer de un color rojo... El mismo color de las llamas del infierno con que fue forjada.

Mas nunca se escucho la respuesta a esa interrogante, La figura solo alzaba su mano con lentitud hacia el hombre de la mascara, por lo que varios trozos de afiladas rocas salían a gran velocidad del suelo con intención de partir en dos su cuerpo. Mas Slade era tan ágil como un ocelote, Sus saltos eran precisos, posaba sus gruesas botas en el borde menos filoso de cada roca que aparecía en su frente. Por lo que bajaba por un instante su mirada para tener algo mas de atención al asunto.

Y aunque sus ojos solo observaron el suelo por una décima de segundo, Al colocarse nuevamente en dirección a su enemigo pudo observar como una filosa roca en forma de estalactita se dirigía directamente a su corazón. A duras penas pudo moverse unos metros, impulsándose con su peso para así recibir un profundo corte en su brazo izquierdo. El caía sobre sus pies sin perder de vista a su rival. Fue allí cuando comprendió, que esta no era una lucha para derrotarle y meterle en prisión, era un asesinato, y el verdugo era la oscura y extraña figura hermafrodita que le miraba sin piedad alguna...

... no se que sensación era... si era el mar que me jugaba una broma con sus aguas, o si alguien había posado sus manos en mi cuerpo. Eran frías... pero a la vez detrás de esa frialdad, pude sentir como mi cuerpo era elevado. Alguien me había salvado, pero ya era tarde... mi corazón se había detenido, y lo único que me daba un poco de sensibilidad en el, era mi alma que aun estaba atrapada en el "envase".

Pude percatarme como me sacaba del agua... fue agradable el sentir el viento frió tocar y recorrer cada milímetro de mi ser, Al menos antes de que mi alma abandonara el mundo, tuve la oportunidad de experimentar algunas sensaciones restantes de estar viva.

Fue allí como por fin mi alma se separo de mi cuerpo, y pude ver a mi bendito salvador, era aquel gigante manso, Cyborg... se había arriesgado a hundirse en el mar y quedar atrapado por su propio peso para rescatarme.

No sabia por que... pero por ese breve instante desee estar viva, y cernirse a sus brazos en agradecimiento, al mismo tiempo en que lloraría en su hombro agradecida de estar viva por su ayuda. Pero era tarde... pude sentir como mi espíritu se elevaba de allí y desaparecía por entre las nubes. Abandonando por fin aquella existencia material para siempre.

Pero alguien me detuvo... Era mi madre, Por fin había vuelto a verle, intente decir su nombre pero mis cuerdas vocales no emitían sonido alguno.

" MADRE... MADRE... ESTOY AQUÍ... POR FIN ESTOY AQUÍ CONTIGO MADRE." Pensaba al mismo tiempo que mis labios se movían, pero no emitía palabra o sonido alguno pero al menos yo escuchaba las palabras en mi conciente.

Pero ella solo se acerco a mi y me dio un calido beso en los labios... Me sorprendí de tal acción, Era mi madre... por que me besaba en la boca. Y fue cuando cavilaba incesantemente la acción. Que mi alma comenzó a descender con lentitud a la tierra. Que había hecho, por que me alejaba de ella de esa manera... Solo podía expresar mi dolor por medio de lagrimas de luz, que salían y se esparcían en el cielo creando nuevos luceros en el infinito.

Y fue cuando por fin escuche su hermosa y radiante vos, dirigiéndose a mi a medida que descendía con mas rapidez con dirección a mi cuerpo.

-. Querida... Haruko, los Ángeles y alguien muy amable me ha entregado, un permiso especial para ti... un breve lapso de vida, No puedes evitar tu muerte... solo será atrasada... por favor salva esas almas que están consumidas por la ira... ese es tu destino mi amada Hija. .- comentaba la dulce presencia que desaparecía por causa de las nubes que tapaban su silueta.

Ella comprendía sus palabras con agradecimiento, al menos morirá sabiendo que pudo salvar a aquellos jóvenes que lo darían todo por sus amigos y protegidos...

... La figura oscura se trasladaba levitando a pocos centímetros del suelo, acercándose cada vez mas a Slade, que comenzaba a cansarse de ser siempre el atacado. Fue así como con su mano derecha erguía en dirección al joven oscuro una oleada de energía roja, que le atravesaba en varias direcciones. Y este a pesar de demostrar dolor en su ser... solo se reincorporaba en instantes y continuaba su camino.

No obstante a sus espaldas, los cuerpos tendidos en el suelo de Raven y Robin comenzaban sangrar a medida de que la esencia oscura era golpeada... Fue así como Slade logro descubrirlo todo. Pero no lograba el comprender como habían efectuado esa unión. Robin no era ningún monje de Azarath. Entonces... por que estaba fusionado con Raven en su forma astral.

-. COMO DEMONIOS HAN LOGRADO HACER ESO .- comentaba enfadado por no haber previsto tal acción, al mismo tiempo de que a sus espaldas, una filosa estalactita estaba siendo concebida sin darse cuenta alguna gracias a su asombro

-. No se como lo han logrado... pero ya no me queda mas opción que eliminar... los .- Al fin había sucedido, La estalactita atravesaba su pecho, y su sangre era regada por los suelos sin control, dando así a demostrar que ese si era el verdadero Slade. Quien solo sacaba la estalactita de su cuerpo y miraba confuso la situación.

Y lo único que pudo pensar fue en un par de cosas antes de marcharse. De su cinto sacaba una pequeña granada, que estaba solo destinada a enceguecer, y la arrojaba a la criatura que simplemente se dejaba cegar por la fuerte descarga de luz. Para luego comenzar a recuperar la vista lo suficientemente rápido como para ver el hacha de Slade dirigiéndose a ellos a gran velocidad y enterrándose a varios centímetros de sus hombros derechos.

Ambos cuerpos saltaron desde su lugar de descanso, a unos pocos metros hacia atrás por el impacto, y en el mismo lugar en que fue herida su forma astral, una gran abertura comenzaba a formarse en sus cuerpos mientras que su sangre fluía de ella sin detenerse.

Mas la forma astral solo se quedaba allí quieta como paralizada, dándole así tiempo a Slade de fugarse a duras penas gracias a un deslizador aéreo. Starfire y Chico bestia miraban a su maldito Némesis huir de allí. Pero ellos solo disfrutaban el olor de la sangre vertida en el suelo de su amada isla...

... Mi alma descendió con rapidez a la vez que sentía un leve cosquilleo en mi pecho, Era Cyborg que aplicaba fuertes descargas en mi cuerpo intentando revivirme. No podía hacer que perdiese las esperanzas. Por lo que entre sin perder tiempo alguno... Fue allí cuando pude sentir nuevamente... El dolor agobiando mi ser, La herida sangrante en mi cuerpo era algo que no deseaba recordar nuevamente.

-. Hola grandote... .- comente a la vez que miraba sus dulces ojos, tal vez uno estaba hecho con maquina y tecnología, pero eso no le quitaba la belleza que poseía aquella imponente alma. Acaricie su rostro dolido por las escenas que observaba mientras intentaba resucitarme.

-. Haruko, me alegro de que estés viva, no sabes todo lo que ha ocurrido, .- comentaba mientras yo intentaba levantarme, Como era lógico me detuvo. Pero yo le explique que mi tiempo aquí era limitado, y que si no me apresuraba seria en vano el haber resucitado.

El no podía creer lo que decía, su ojo derramaba una gruesa lagrima al comprender la situación, al mismo tiempo que me levantaba con rapidez de la arena y salía corriendo hasta donde estaba una figura cubierta por completo de un color negro, que estaba atravesada por una inmensa hacha.

De inmediato pude comprender la situación, pero no había tiempo de explicarle a Cyborg... sentía como una barrera se formaba frente a nosotros. Era lógico que siendo una criatura oscura intentara alejar a una hecha de luz como yo. Su existencia estaba amenazada. Pero Cyborg estaba agotado y no podía mas... pude notar como en su brazo parpadeaba un pequeño numero "1" en su nivel de energía. Por lo que no pudo pasar la pared que la criatura creo.

Al alzar mi vista, le explique a Cyborg que debíamos detener esa expresión de furia de Raven y Robin. Que al buscarse mutuamente para reconfortarse por la perdida que no habían logrado evitar. Se unieron en su nexo, refugiándose así en una furia creciente que consumía sus esencias y les fusionaba en una sola entidad. Al no tener mas espacio donde expresarse, se astro proyecto en una forma material fuera de sus cuerpos.

Formando una criatura hecha de furia pura, y sus almas fusionadas en una sola esencia mágica. Que no distinguía entre amigo o enemigo.

Cyborg a duras penas podía creer lo que estaba escuchando, mas podía imaginar lo que seguiría, la criatura dirigiría todo su poder y furia hacia sus amigos. Fue así cuando enfoco su mirada al ente oscuro, que noto como la inmensa hacha salía de su pecho y caía estrepitosamente en el suelo.

La criatura estaba lista para asesinar a quien estuviese frente a ellos y no se detendría ante nadie, Starfire miraba complacida la batalla que se le avecinaba, por lo que se elevaba en el aire tomando gran altura. Pero chico bestia se le adelantaba transformándose en un pequeño colibrí que tomaba el impulso suficiente como para abalanzarse luego hacia ellos con la forma de un pesado elefante.

Pero el ente solo miraba con crueldad la inmensa criatura que se le avecinaba a gran velocidad, El solo le envolvió en energía oscura y le detenía en seco a tan solo unos metros de llegar a su brazo. Para luego comenzar a lanzarle una y otra vez contra las rocas del lugar, impactando su cuerpo en filosas salientes y rocas del campo de entrenamiento.

Aun cuando el chico bestia estaba ya inconsciente por tantas colisiones, la entidad solo le impactaba sin misericordia contra todo objeto en la isla. Y cuando se aburría de ello comenzaba a cerrar su figura sobre el pequeño cuerpo verde que yacía sin conocimiento dentro de la esfera de energía.

Mas fue cuando varios impactos de energía colisionaban contra su piel, sacándole de concentración, y dejando caer al chico bestia justo al frente de un Cyborg horrorizado que no creía lo que veía.

-. Los esta matando... debemos hacer algo por favor Haruko .- Pero al mirar a la chica que sostenía en brazos noto que esta cerraba lentamente sus ojos y a duras penas intentaba levantar su mano para acariciarle el rostro.

-. Lo siento Cyborg... quisiera haberte... conocido... antes... al menos... así... .- Pero sus palabras se cortaban de golpe al mismo tiempo que su cuerpo perdía toda energía. El hombre metálico solo miraba dolido de que alguien hubiese perdido la vida en ese día, además de que muy dentro de su ser, sentía atracción por esa caritativa alma.

Pero no tenia tiempo para llorar tan siquiera... al escuchar como la barrera desaparecía y las explosiones resaltaban el ambiente. Era Starfire que desde las alturas descendía con gran rapidez lanzando sus starboltz a una velocidad peligrosa. Que destrozarían y atravesarían de lleno cualquier materia que se le atravesara en el camino.

Pero la entidad oscura lanzaba unas esferas que a medida que avanzaban, tomaban la forma de una pequeña ave. Eran las armas emblema de Robin las que utilizaba la entidad, Solo que envueltas cada una con la energía de Raven.

Las cuales atravesaban los starboltz y se dirigían al cuerpo de Starfire que maniobraba para evitarlos, pero fue allí cuando decidió utilizar su ultima arma. Ella misma en un impacto directo con la entidad. No le importaba si en el transcurso de sus acciones le arrancara la vida a sus amigos.

Fue así como el silbido del viento al sentir el poder de Starfire resonaba en el ambiente, mientras la criatura miraba sin miedo alguno al gigantesco misil que estaba en su dirección. Y al estar a unos 30 metros de ellos alzo sus brazos y disparaba una y otra vez sus pequeñas aves oscuras que impactaban en tres puntos del cuerpo de Starfire.

Sus hombros y rostro eran impactados sin piedad alguna, por las aves que a medida que el acto se repetía, se adentraban mas y mas en su cuerpo creando tres heridas que crecían con cada impacto. Fue así que por el dolor perdía el control de sus habilidades y caía precipitadamente hacia la entidad.

Pero esta no se inmutaba o detenía por su condición... solo preparaba sus manos con una especie de oz que esperaba a Starfire para darle el ultimo golpe. Cyborg intentaba moverse para ayudarles... pero su energía no le permitía tan siquiera el cambiar de posición. Mas un destello proveniente del cuerpo de Haruko le enceguecía.

Era su alma... El alma de Haruko tomaba por unos solos segundos forma física, aprovechando el momento de distracción del ente oscuro. Se abalanzo sobre ellos con su inmaculada presencia. Dejando tras de ella pequeñas esferas de energía que curaban las mas graves heridas de Cyborg y chico bestia, hasta por fin detenerse en seco justo frente a Starfire haciéndole caer con lentitud por su estela. Y abrazando a la furiosa entidad que se movía desesperada intentando escaparse de la luz que emitía su alma.

-. Deja que tu furia encarnada, desaparezca junto con mi existencia en este mundo... Deja que tu alma sea purificada de la maldad y miedo que te agobia en este momento. Se que jamás podré limpiarlos del todo de su oscuridad. En parte ustedes tomaron este camino de justicia gracias a sus ánimos de venganza del crimen, y gracias a sus sentimientos de evitar que alguien mas sufriese su trágico pasado .- Comento mientras ella y la entidad eran esparcidos por el aire dando así fin a todo el sufrimiento de sus amigos.

-. Madre... Padre.. por fin nos volveremos a ver... .- fueron las ultimas palabras que se lograron escuchar en la isla de los titanes. Starfire se levantaba herida... ayudada por un sangrante Chico bestia. Fue así como ambos dirigieron sus miradas Hacia Cyborg que llevaba consigo los cuerpos inconscientes de sus amigos...

Cinco días habían pasado y ambos aun estaban en una especie de coma, Starfire miraba con algo de melancolía, el cuerpo de su amado Robin. Estaba allí en frente de ella, y a la vez no. Seguía compartiendo mucho mas con Raven de lo que había compartido con ella en todo el tiempo en que habían estado juntos.

-. Cyborg... dime cuando despertaran nuestros amigos... cuando se acabara su sufrimiento .- comentaba mientras se dirigía hacia el chico bestia que estaba sentado justo al lado de su amada Raven. Tal vez le comparaba con Terra... pero aun así la amaba. No podía evitarlo.

Le miraba fijamente mientras sentía como Starfire posaba sus manos en el, reconfortándole El colocaba su mano encima de las de ella haciéndole conocer que estaba bien. Y mirándole al mismo tiempo al rostro. Dándole a entender que le deseaba lo mismo.

Pero el sonido de una bandeja estrellándose súbitamente contra el suelo les sacaba de sus mas íntimos pensamientos. Era Cyborg que no solo estaba destrozado aun por la perdida de Haruko. Si no que mostraba un dolor apreciable por su expresión. Con su mano derecha se apoyaba sobre la mesa... mientras que con su mano izquierda sostenía un papel. Que diagnosticaba el estado de los chicos.

Ambos se levantaban de sus lugares a gran velocidad para atenderle en su momento de debilidad. Los dos pensaban que era un efecto "látigo" de la lucha. Causado cuando los efectos de un golpe se sentían tiempo después de haber ocurrido.

Pero el les comentaba lo doloroso que era lo que acababa de leer, Los exámenes indicaban que los chicos tenían muerte cerebral. Solo eran cuerpo vacíos... allí frente a ellos, ya que al parecer la entidad era algo mas que la manifestación física de su ira. Fueron las palabras mas duras que habían escuchado en todas sus vidas.

Por lo que todos perdían el equilibrio cayendo estrepitosamente al suelo, al enterarse de que sus amigos se mantenían con vida gracias a un simple aparato. Nadie podía emitir una palabra... solo se escuchaba el sonido constante de las gotas estrellándose contra el suelo. Tanto habían luchado para perderles. Haruko les salvo a un precio demasiado grande. Y era un costo que ninguno de ellos estaba dispuesto a cancelar.

El trío miraba atónito el suelo, sin palabra alguna que comentar, esto marcaba el fin de los titanes, y el fracaso de sus metas. Las tres destrozadas almas sentían como el ambiente se calentaba a medida que el tiempo avanzaba.

Hasta que una luz irrumpió por completo en la habitación, sacándoles de su sufrimiento l instante. -. La esperanza es lo ultimo que se pierde .- Comento justo al instante en que tan rápido como llego, desaparecía ante sus ojos.

Era Haruko acaso, que les hacia una ultima visita inesperada. Para intentar animarles los ánimos, logrando que ellos se levantaran de sus rodillas y se miraran unos a otros, comprendiendo de que ellos lo dieron todo para salvarlos. Y por muy doloroso que fuese debían darles una despedida a lo titán.

-. Ambos se amaban mutuamente... propongo que les demos sepultura en un mismo lugar, uno al lado del otro .- Comentaba Starfire al mismo tiempo que levantaba el cuerpo de Robin y le depositaba en la misma cama que Raven.

-. Al menos así estarán juntos por la eternidad, mis queridos amigos .- Comentaba chico bestia mientras arropaba ambos cuerpos con una sola manta.

-. Es lo menos que podemos hacer .- exclamaba Cyborg lloroso... -. Ellos harían lo mismo por nosotros... Decía mientras apagaba la maquina que mantenía sus cuerpos con vida. No era justo que sus almas estuviesen atrapadas en la tierra por que su cuerpo no moría gracias a una maquina.

Fue así como todos colocaron su mirada en el interruptor, y comentaron al unísono -. Gracias por todo... Mis queridos amigos .- y un sonoro "Click" resonaba en todo el ambiente. Al igual que tres chicos miraban fijamente los cuerpos tendidos sobre la cama.

Aun respiraban, sus cuerpos respiraban con fuerza mientras sus ojos intentaban abrirse con insistencia. Ellos no podían dar cabida a sus emociones, Haruko no solo les visito para traerles animo, sino que les regreso a sus amados amigos. No podían creer que estuviesen con vida, y que con lentitud ambos abrieran sus ojos, y sonrieran al verles.

No se habían marchado... aun seguían allí... Y los tres se abalanzaban sobre ellos extasiados de verles con vida.

-. Como... pero como es que están vivos chicos .- Comento Cyborg mientras miraba sus rostros sonrientes.

-. Jamás perdimos la esperanza de volver a verlos chicos .- decían mientras sus manos se unían en una sola. Dando a entenderles que ambos habían tomado una decisión. Y les miraban fijamente.

Chico bestia y Starfire se sentían asustados, se sentían felices de verles sanos y salvo, pero sabían que ellos habían tomado la decisión de quedarse juntos. Mas sus pensamientos fueron interrumpidos por sus dulces palabras.

-. Nosotros hemos escogido, el amarnos... pero chicos... No nosotros no lo haremos si a ustedes no les agrada. Por lo que juntos hemos escogido el poner nuestro futuro en sus manos. Starfire, Chico Bestia, y por supuesto que tu también Cyborg. Nosotros nos amamos... y eso no es ningún secreto, sabemos que les hacemos daño chicos, pero hemos decidido que no sirve de nada amarnos si los perdemos a ustedes chicos. Simplemente la vida no seria la misma.

Comentaban los dos chicos al mismo tiempo gracias a que aun estaban unidos por el nexo. Todo dependía ahora de la decisión de sus amigos. Por lo que ellos se miraron los unos a los otros y miraron con dicha a los jóvenes por su decisión, comentando sus opiniones.

-. CHICOS, YO .- comento Cyborg. Con una sonrisa en su rostro... Para el esa seriala decisión que mas uniría a sus amigos.

-. ROBIN YO .- Exclamo Starfire con una sonrisa por el camino que sus amigos les habían entregado. Ahora podía decir lo que pensaba y no tendría arrepentimiento alguno.

-. RAVEN YO .- afirmo chico bestia, feliz de su decisión, Al menos ahora podría decirle lo que piensa de ella y el juntos.

FIN.