Hola a todos!!! Este fic quien sabe como me inspire, pero lo mas seguro es que haya sido por tanto soñar con sexo XD ya debo dejar mis perversiones (con cada locura que sueño Oo debo dejar la sobredosis) no, ToT no puedo dejar de ser adicta... pero pronto veré a mi psiquiatra u.u... pues ojala les guste el fic. Shonen ai: HoroXRen
Snow's Angel
Un bello paisaje cubierto de nieve... montañas... muchas montañas
"¿Qué estoy haciendo aquí?... no s
A lo lejos hay una silueta
"¿Quién será? Voy a averiguarlo"
Árboles... más árboles, todo acompañado de una triste melodía que me llega al corazón
"¿Qué estoy buscando? ¿A quién estoy buscando?"
"¿buscabas algo?"
"no lo sé, ¿tú quién eres?"
"ya nos habíamos conocido antes... ¿No lo recuerdas?"
"no, yo no soy de aquí, no sé que estoy haciendo aqu
"estabas buscándome"
"¿A ti? Pero si no te conozco"
"si me conoces, habíamos estado juntos"
"¡No!"
"está bien, pero estabas buscándome, necesito tu compañía"
"pero..."
"nos vemos"
Montañas, incontables montañas abarcaban el magnífico panorama. En el aire frío se respiraba una agradable tranquilidad. Tal vez la razón de tan inesperado decisión sea ridícula, aún así, unas vacaciones de invierno al norte de Japón no hacían mal a nadie, ya necesitaba un pequeño descanso. Todavía seguía analizando el motivo por el cual había llegado a ese preciso lugar: un sueño.
Desde que tiene memoria había estado soñando prácticamente lo mismo aunque con variantes. Jamás le había tomado importancia a un tonto sueño, siempre pasó desapercibido aquel detalle por que nunca lo perturbó, en sí, el sueño era hasta relajador pero... últimamente sentía insistencia, la necesidad de descubrir su significado y ahí estaba...
Nieve, nieve alrededor, montañas que me resguardaban
"¿Qué busco? ¿A quién estoy buscando? Mmm... Eso ya no importa"
"¿A quién estás buscando?"
"¿Eh? Eso... ni yo mismo lo s
"creo que es a m
"pero... ¿Quién eres?"
"tú lo sabes"
"no, no te conozco... ¿Quién eres?"
"¿Ya me olvidaste?"
"sinceramente jamás te había visto"
"me lo esperaba... cuídate"
"oye espera"
"adiós"...
Era frecuente soñar con el mismo paisaje que ahora mismo contemplaba, pero en los últimos días sentía desesperación, era urgente, una necesidad saber que es lo que le quería decir el sueño que tanto le insistía; ya estaba en el lugar de su sueño... ¿Y ahora qué? Quizá le estaba dando mucha prioridad a un sueño, era mejor relajarse un poco... disfrutar...
Había terminado de instalar todas sus cosas en la cabaña que no tenía mucho que había comprado, ¡Vaya! Hasta donde lo había llevado un inútil sueño, no teniendo más que hacer guardó algunas cosas que le fueran necesarias para su recorrido en su mochila y se echó a andar. Se encontraba explorando las cercanías, hasta introducirse a un bosque cuando, escuchó un ruido, no le tomó en cuenta creyendo que era algún animalillo del entorno. Siguió paseando admirándose de la belleza natural, luego de caminar un tramo llegó a un claro donde se encontraba un lago congelado, quedó maravillado con la majestuosidad del lago y sintió de repente el deseo de patinar pero... en primera, ni sabía patinar; en segunda, ni tenía patines... descartó la posibilidad de ser patinador. Se acercó a la orilla del lago cuando del otro extremo divisó una figura, se le hizo curioso encontrarse con alguien en aquel sitio tan solitario y decidió acercarse para conocerlo pero... pudo ver como la persona se alejaba rápidamente, la huída solo lo motivó a seguirlo y comenzó a correr detrás de la persona, corrió y corrió hasta que se le había perdido de vista, resignándose de inmediato a encontrarlo cuando oyó a sus espaldas una voz...
- ¿A quién buscas?
- ¿Mmm? -. Volteó para encontrarse con un joven un poco más alto que él, al que calculó de su misma edad, además de la vestimenta para el frío cargaba puestos unos googles que le impedían ver sus ojos.
- no, no buscaba a nadie... bueno, estaba siguiendo...
- a mí ¿Qué deseas?
- ¿Eh? No, nada, solo quería conocerte, perdona si te incomode
- no te preocupes ¿Quieres venir a mi casa?
- si no te molesta
- claro que no me molesta, por eso te estoy invitando, sígueme
Estaba sorprendido por él mismo, aquel joven extraño lo había invitado a su casa y ni siquiera lo conocía y había aceptado sin chistar, pero sin duda, podía sentir algo especial... cuando lo vio pudo sentir... no sabría describirlo... un sentimiento diferente a cualquiera que haya experimentado antes; por primera vez sintió confianza ciega hacia alguien que jamás había visto, era algo nuevo para él, extraño pero agradable. Había estado pensando hasta que se dio cuenta que el joven le hablaba
- ¿Quieres tomar algo?
- ¿Hm? Bueno...
Observó detenidamente la vivienda, era humilde pero acogedora, luego dirigió su mirada hacia el joven de espaldas, estaba intrigado: ¿Por qué un joven totalmente desconocido para él lo invitaría a su casa? Pronto lo sabría.
- toma... es chocolate, espero que te guste
- claro, oye, quisiera saber...
- vivo solo y necesitaba compañía, por eso te invite a mi casa
- ¡Ah! Ya sabías de mi interrogatorio je, yo igual estaba solo... por cierto ¿Cuál es tu nombre?
- Horokeu
- ah... mi nombre es Ren, mucho gusto -. Con educación le extendió la mano para saludarlo pero se quedó esperando, el muchacho solo tomó su taza y sorbió despreocupadamente.
- eh... ¿Por qué no te quitas esos googles? No puedes ver bien por que acabo de extenderte la mano y...
- mmm -. El joven un poco apenado extendió la mano esperando a que Ren lo estrechara y éste respondió al saludo riendo en sus adentros de Horokeu, aquellas cosas en los ojos le impedían ver bien.
- ¿Y cuántos años tienes? ¿Horokeu?
- si, es Horokeu, tengo 17 años
- ¡Vaya! Yo igual tengo 17
- ¿Qué haces por aquí? Pareces un visitante
- si, estoy de vacaciones, no sé, se me ocurrió venir a las montañas
- ¡Que bien! ¡Hay muchos deportes para practicar en este ecosistema!
- si, suena interesante pero desgraciadamente no traje nada más que equipo de alpinismo, pues solo pensé en las montañas
- jeje, pero no importa, algo es algo y te puedo prestar equipo para otros deportes, yo igual soy alpinista, pero... ya tiene un tiempo que no escalo
- mmm... ¿No te aburres de vivir tú solo? ¿No tienes familia?
- si me aburro a menudo
- ¿Y tú familia?
Se quedó esperando otra vez, Horokeu solo bajó la cabeza con gesto triste.
- perdona, fue una imprudencia de mi parte
- olvídalo ¿Y tú tienes familia?
- por supuesto, a mis padres y a mi hermana mayor sin embargo ya tiene años que no vivo con ellos
Conversaron por largo rato, Ren, a ratos, trataba de distinguir el color de ojos de Horokeu cuestionándose continuamente el por que el joven no se quitaba los googles, ni siquiera se encontraba afuera. Mientras seguía platicando sin percatarse del tiempo, ni el clima, se dieron cuenta de todo cuando amenazó una tormenta, la noche ya había caído.
- disculpa ¿Cuánto tiempo ha pasado?
- mmm... calculo 5 horas
- ¡Son las 9:00! Ya debo regresarme...
- es muy peligroso salir a esta hora y en medio de una tormenta
- bueno, tienes razón...
- puedes quedarte esta noche, en la mañana te regresas sin correr muchos riesgos
- pero ¿No soy una molestia para ti?
- como te había mencionado, vivo solo y una compañía no me cae mal
- muchas gracias
Se envolvió en su futón a la perfección, él era por naturaleza friolento por lo que prestó varias cobijas. Horokeu entró a la habitación y se acomodó en su respectivo futón, hasta aquel momento no se había quitado los fastidiosos googles, Ren estaba ansioso de ver sus ojos, para decepción suya, Horokeu se los quitó y tenía los ojos cerrados disponiéndose a dormir dejando al otro joven con la duda
- disculpa Horokeu ¿Puedo hacerte una pregunta sin que te ofendas?
- mmm... bien, dime
Ren se acercó a él
- ¿Por qué no me muestras tus ojos? Simple curiosidad
Horokeu se incorporó aún con los ojos cerrados y volteando instintivamente hacia Ren... abrió sus ojos... grandes y hermosos ojos que daban una extraña impresión de gris...
- perdona, no vi necesidad de enseñarte mis ojos siendo inútiles
Efectivamente, Ren se horrorizó... Horokeu era ciego
- pero... ¿Cómo? Lo siento mucho, perdóname
- no te disculpes, cualquiera hubiera tenido curiosidad pero, realmente no quería que te dieras cuenta...
- y no me había dado cuenta, debes estar muy acostumbrado
- si, es algo común
- mmm ¿Sabes? Resolví la duda por la cual no me mostrabas tus ojos pero ahora tengo más...
- está bien te contaré todo...
... Cuando tenía 8 años salí con mi padre y con mi hermana menor a conseguir leña, ya llevábamos medio día recolectando, de paso conseguíamos alimentos. Todo iba bien, al menos eso parecía, estas zonas son demasiado peligrosas, escuchamos un horrible estruendo y en efecto, era una avalancha, lo único que recuerdo fue que abracé a mi hermana... de ahí no supe nada, absolutamente nada, no supe del tiempo que transcurrió o si por lo menos habían sobrevivido mi padre y mi hermana, solo sé que cuando me desperté me hallaba en casa, recostado, a mi lado pude sentir la cálida presencia de mi madre, pude sentirla pero... nunca más la pude volver a ver; mi madre estaba destrozada, nos habían encontrado a mi padre y a mí, lamentablemente a él lo encontraron sin vida, a mi hermana no la encontraron. Desde ese momento me volví algo serio y callado, recuerdo que yo había sido una persona muy divertida y alegre, jamás pude retomar esa expresión; un día, luego de ese horrible incidente, mi madre salió hacia el pueblo para comprarme unos medicamentos, me acosaban una terrible fiebre y dolores de cabeza que no me dejaban dormir... esperé todo el día, esperé toda la noche, esperé por varios días y me fui dando cuenta que debía acostumbrarme a una vida oscura y solitaria. Han pasado 9 años, la hermosa vida que llevaba dio un vuelco, donde quedé totalmente solo...
Ren no tuvo la fuerza necesaria para evitar soltar una lágrima, no podía imaginarse por completo el sufrimiento que Horokeu había vivido, éste último sintió de repente el cuerpo del joven invitado sobre el suyo, lo estaba abrazando, lo invadió el sentimiento, tampoco evitó llorar y le respondió el abrazo. Ren volvió a sentir aquel extraño sentimiento, no dejaría a Horokeu, lo ayudaría a retomar su antigua expresión además... los dos se necesitaban y no iban a alejarse uno del otro.
- sabes Ren, desde lo que me ocurrió siempre soñé que alguien venía a buscarme, no se quien era, pero alguien me buscaba... me estaba buscando... para hacerme compañía
Ren ahogó un gemido y lo estrechó mas fuerte contra su pecho, Horokeu era la persona de su sueño a la que estuvo siempre buscando... y la había encontrado. Sin importar la circunstancia... besó a Horokeu, fue un beso lleno de lágrimas en el cual compartían dolor... y a la vez algo más grande y profundo, jamás había cruzado esa palabra por su vida... amor... había llevado una vida monótona y rutinaria sin sentido, le había dado igual morirse hoy a mañana ó luego, ahora acababa de encontrar a alguien especial que en adelante le daría significado a su destino... Horokeu, y con este nombre en sus labios se quedó dormido... protegiendo su sueño.
Espero que les haya gustado mi fic, para mi este fic tiene un significado muy profundo por que siempre estoy soñando, aunque no cosas bonitas sino cosas raras, últimamente he estado soñando con violaciones y muertos XD jeje, pues dejen review, para que me digan si les gusta y si lo continúo o lo dejo en one-shot... Cuídense!!
