SIENTO LA TARDANZA PERO ULTIMAMENTE HE ESTADO OCUPADA CON MUCHAS COSAS, USTEDES SABEN, LA VIDA ES A VECES COMPLICADA. PERO CAMBIANDO DE TEMA TRAIGO EL CHAPTER 4 DE ESTA HISTORIA, UN POCO EXTRAÑA, NO POR SU CONTENIDO SI NO POR LO QUE SIGNIFICO ESCRIBIRLA, FUE UN TRABAJO DE 3 MOMENTOS, TRES EMOCIONES DISTINTAS QUE SURGIERON EN MI INEXPLICABLEMENTE, QUIZÁ POR ESO ESTE CHAPTER EMPEZÓ DE UNA MANERA Y TERMINO EN OTRA, PERO, CREO QUE MEJOR DEJO QUE LO LEAN PARA QUE ME ENTIENDAN, GRACIAS A TODAS LAS PERSONAS QUE LEEN EL FIC Y A LAS QUE DEJAN REVIEW, EL APOYO ES EL QUE AYUDA A QUE UNO LE LLEGUE LA INSPIRACION A OCASAS HORAS DE LA NOCHE CON EFECTOS NO ESPERADOS, SAYONARA.
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Algunos pequeños rayos de la luz del sol entraban a través de la ventana, estos eran leves pero perceptibles, lo que provoco que la chica de cabello acuamarino despertara de su profundo sueño. La noche había sido agotadora, por decirlo de alguna manera, aun medio dormida esbozo una sonrisa y trato de abrazar a su acompañante, sin embargo, allí no había nadie. Michiru abrió los ojos, se vio allí, sola, sin Haruka a su lado.
-Como siempre, uno de sus actos de desaparición, ya debería estar acostumbrada
Pero no estaba acostumbrada, le molestaba que las cosas últimamente fueran así, tan fugaces, tan simples. Era verdad que había pasado una grandiosa noche, pero, a veces deseaba mas, anhelaba despertar al lado de la persona que amaba, aunque fuera un solo día, como lo hacia tanto tiempo. Se preparo el desayuno con mucho desgano, como si ese día fuera a transcurrir insignificantemente como tantos otros. Sin embargo, de pronto, recordó lo sucedido con Amano, aquella invitación. Le pareció interesante, posar para un retrato, seria la forma de sacarlo de su vida, aunque en el fondo no quisiera. A veces pensaba si todo esto que estaba haciendo era por Haruka, por su constante abandono, o realmente empezaba a sentir algo por ese chico. De cualquier forma, sin importar la razón, iría.
Desayuno, tomo un pequeño baño, se vistió para la ocasión, después salio de la casa dirigiéndose al lugar acordado.
FLASH BACK
-Bueno
-Hola, ¿Ocupado? Pensé en tu proposición ¿Te parece bien en una hora?
-¡En serio! Muy bien, nos vemos en una hora en la galería de anoche
-Pero, ¿Qué no se supone que esta cerrada?
-No lo esta
-¿Entonces hay personas ahí?
-Tampoco, no te preocupes, llega en una hora y nadie nos molestara.
-Esta bien, nos vemos en una hora
-Gracias...te amo
La chica colgó el teléfono tan rápidamente que no le dio tiempo de oír las últimas palabras de Amano.
FIN FLASH BACK
Cuando Michiru llego al número 204 de la avenida Luz De Noche, Amano ya la esperaba ahí. Iba vestido sencillamente, con un pantalón blanco y una camisa del mismo color, su pelo negro alborotado y siempre con su inconfundible sonrisa. La chica de cabellos aguamarina por su parte, lucia un taje color beige, que terminaba en un falda que dejaba ver sus torneadas piernas. El chico de ojos grises le sonrió mientras abría la puerta invitando entrar a la sirena.
-Puedo ver que arreglaste todo para la ocasión
-¿Por qué lo dices?
-Porque no hay nada aquí, incluso mis retratos que estaban anoche
-No, en eso te equivocas, esos retratos son míos así que están en un buen lugar, por otro lado prepare algo mejor para nosotros
-Ah si, pues ya quiero verlo
La violinista se acerco rápidamente a besar los labios de Filaret. Fue un beso veloz, apenas perceptible, como queriendo besar al chico pero a la vez no. La chica pensó que si ya había aceptado venir, sacaría el mayor provecho de esto, disfrutando cada momento que pudiera, al fin y al cabo, si Haruka estuviera en su situación si aceptaría.
-¿Y eso que fue?
-No se, ¿Tu que crees que fue?
-Michiru
Amano tomo la mano de Michiru y la encamino hasta un pequeño cuarto que se encontraba hasta el fondo del lugar. Entraron los dos juntos, tomados de la mano. Dentro de la habitación no había mas que un ,pinces, pintura, un banco de madera y una cama.
-¿Esa es tu idea de pintura?-. Sonrió picadamente
-No, pero si tu quieres
-Talvez
-Quiero retratarte como nadie mas lo ha hecho no lo hara, hacerlo inolvidable, tocar tu piel como he anhelado tanto tiempo en mis sueños
El chico de ojos grises la beso y la violinista respondió. Involuntariamente ambos cayeron en la cama; la chica comenzó a besarlo con largos besos apasionados que Amano respondió. El chico se sentía contento, por fin, en unos instantes, rozaría su piel como había deseado tanto tiempo, como había imaginado varias veces en su imaginación, ahora seria ese momento. Deslizo su mano sobre el traje de la chica, e intento desabrochar suavemente los botones, sin embargo, Muchiru se lo impidió separándose abruptamente del chico de ojos grises.
-Otra vez con tus miedos ¿Qué sucede? Creí que estabas de acuerdo
-Creo que esto ha llegado demasiado lejos
-¿Qué dices? ¿Te parece demasiado lejos? Si no hemos hecho nada, se que tu quieres estar conmigo
-Eso es lo que crees, yo creí que quería pero, no me interesa. Te dije que era una despedida, te lo dije anoche, así que me voy
-¿Y los besos?
-Me deje llevar, simple pasión, pero alguien como yo ve mas allá de los deseos, no quisiera perder lo que mas amo en un juego de niños
La pintora se dio la media vuelta para salir de la habitación. Amano solo se le quedo mirando, agacho la cabeza observando el suelo mientras pensamientos confusos comenzaban a avalanzarse en su cabeza.
-¿Un juego? ¿Un juego de niños? Te enseñare que es un juego de niños. No ha nacido mujer que no quiera estar con Amano Filaret, y te lo enseñare, serás mía, quise hacerlo a la buena, pero eres una estupida, así que tendrá que ser a la mala
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La violinista llego a la casa con la idea de una gran tarde. Preparo una exquisita comida para sorprender a Haruka, aun lucia aquel hermoso traje que llevaba por la mañana, tenia el cabello suelto cayendo sobre sus hombros, y había adornado la mesa con mantel largo, 2 velas blancas escondidas alumbrando la aproposita oscuridad del comedor. Espero ahí, hasta que llegara Haruka, para darle su sorpresa. Por fin llego.
-¿Y esto?
-Supongo que es lo menos que puedo hacer por la persona que mas amo en este mundo
-Entonces deberías invitar a esa persona
-Oye...
-Ja, solo bromeaba, te vez preciosa
Haruka sonrió por unos segundos. Michiru pudo notarlo, su sonrisa era fingida y en su mirada se podía observar un poco de tristeza.
-¿Qué te sucede?
-¿Por qué dices que me sucede algo?
-Haruka-san, no me mientas, se que te pasa algo
-(suspiro) Tienes razón, lo que pasa es que estoy teniendo muchos problemas con la empresa
-¿Eso es todo?
-No, lo que sucede es que....¿Te acuerdas de Amano Filaret? El chico de la otra noche. Pues, mi empresa tenia un contrato con la de el, donde deposite todo mi capital, sin embargo, no se porque, esta tarde sin mas ni mas lo cancelo, eso deja un desbalance económico, con una pedido pendiente que no podré completar a mis clientes; trate de hacerlo desistir, pero si no acepta, quedare en la ruina pro las perdidas, además de perder la empresa.
-Haruka lo siento, yo...
El teléfono celular de Michiru comenzó a sonar interrumpiendo las palabras de la chica. Corrió al cuarto para sacar el móvil de su bolso, predecía saber de quién era la llamada.
-bueno
-¿Te gusto el regalo?
-¿Qué dices? Amano ¿Por qué hiciste eso?
-Por ti, nadie rechaza a Amano Filaret
-Estas diciendo tonterías, tus juegos pueden dejar a haruka en la calle.
-Y a mi que, eso no me importa, aunque a ti si. Pero, que pierda su empresa por incumplimiento de contrato es lo que menos debe preocuparte, creo que luciría bien con un uniforme de cárcel
-¿Qué dices?
-Lo que oiste, puedo hacer muchas cosas, no me conoces, puedo arreglármelas para que le suceda una que otra cosa, quizá hasta la mate, quien sabe.
-Ni te atrevas porque si yo no....
-¿Si no que nena? Michiru no seas estupida, ya te dije que arruinarla es lo menos que puedo hacer, matarle, también podría ser lo mínimo igualmente, puedo hacer mas y que parezca que yo no lo hice, así que si intentas algo contra mi perderías tu tiempo, ¿Quieres ver lo que puedo hacer? Yo tendría mucho cuidado.
-¿Qué quieres?
-¿Qué es lo que quiero? Aun no lo se, aunque no te interesa saberlo
-No digas tonterías, se que quieres algo, por eso llamaste
-Esta bien, tienes razón, si quiero algo, pero no te lo diré por teléfono, ven ahorita a mi casa, y talvez te lo diré, pero yo que tu me apuraba, porque quien sabe que podría pasar, chao
-¡Amano!
Filaret le colgó rápidamente el teléfono sin decir nada más. Michiru cerró su cel muy confundida ¿Qué había sido todo eso? ¿Mentiras? ¿Un juego? De pronto, un bip se oyó en su celular, abrió su cel rápidamente y vio un nuevo mensaje, era de Amano, con una dirección, la chica supuso que era de la casa del chico.
-Michiru ¿Quién era?
-Haruka
Haruka entro a la habitación y encontró a la violinista con la mirada desconcertada.
-¿Qué sucede?
-Nada
-¿Entonces quien llamo?
-Nadie, numero equivocado
-¿Numero equivocado en un celular?
-Si, vamos ¿Estas celosa? No te preocupes
La chica le dio un pequeño beso.
-Sabes...acabo de recordar que tenia que firmar unos papeles de autorización para una exposición que se va inaugurar mañana
-¿Ahorita?
-Si, regreso en un rato
-Espera, te acompaño
-No, no te preocupes, tienes cosas que pensar, regreso rápido
-Esta bien
La chica de ojos verdes acepto con mucho desgano. Michiru salio velezomente, temiendo que su amada sospechara algo. No entendía lo que estaba ocurriendo ¿Cómo un chico que parecía tan lindo le estaba haciendo todo esto? Quizá solo estaba molesto, talvez en el fondo no quería hacer nada de esto, al final de cuentas, Michiru de una u otra forma estaba tratando de justificar a Amano.
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-Debe ser aquí
La sirena llego a una imponente mansión a las afueras de la ciudad. Tenia una imponente constitución, estaba hecha de diversos materiales, tenia colores sobrios y se alcanzaban a ver extensos jardines verdes. La violinista toco el timbre, inmediatamente un señor de edad avanzada salio y abrió. La guió hasta la puerta de la entrada principal de la mansión donde otro hombre la estaba esperando. Este le abrió la puerta y le ofreció su brazo para continuar pero la pintora no la acogió. Al hombre no pareció importarle y camino dirigiendo a la chica, esta la siguió. Llegaron a un amplio comedor repleto de antigüedades y lujosos detalles. En el sillón principal se encontraba Amano cruzado de brazos, con una sonrisa triunfal.
-Que bueno que viniste
-Déjate de cortesías ¿Qué quieres?
-¿Es esa la manera de tratar a su mas ferviente admirador?
-No, tienes razón, esa es la manera de tratar a Amano Filaret
-Tranquila. Toma asiento. Michiru me resultaste muy descortés
-Quizá no deba desperdiciar mis buenos modales en alguien como tu, pero, una dama es una dama en cualquier circunstancia, así que, perdone mi descortesía anterior ¿Qué se le ofrece?
-¡Ya! Dejemonos de juegos, es simple, vente a vivir conmigo
-¿Quee?
-¿No entendiste? Te lo repetiré otra vez, si no te vienes a vivir conmigo no se que pueda pasarle a tu amiga
-Pero ¿Por qué haces esto? Podemos entendernos de otra forma, no es necesario que...
-Claro que si, tu me obligaste a esto
-Pues...olvídalo, yo no me voy a dejar chantajear por alguien como tu
-Entonces, atente a las consecuencias
Michiru salio de ahí molesta, enfadada consigo misma por haber sentido o estar sintiendo algo por aquel lunático. Llego a su casa. Cuando entro a la habitación se encontró con una Haruka dormida por el cansancio, exhausta por las preocupaciones. La violinista solo se limito a recostarse al lado de ella ¿Qué era todo esto que estaba sucediendo? No entendía nada, abrazo a su pareja mientras la noche la abrazaba en un mar de dudas.
¡!!!!!!!!!!!
Cuando Michiru despertó esa mañana no sabía el día que la esperaba. Había caído rendida en la noche y no se dio cuenta cuando Haruka se levanto para ir al trabajo. Se lamento por ello, quería platicar con ella, contarle lo sucedido, advertirle que todo era un plan de Amano, aunque en el fondo temía que ella se enojara por el simple engaño, pero, ambas se amaban, y no terminarían por un simple error, solucionarían esto juntas, para después dejar todo como un recuerdo desagradable. Pensaba en todo eso, cuando, como de costumbre, su teléfono celular interrumpió sus pensamientos.
-Bueno
-¿Michiru Kaioh?
-Si, soy yo
-Disculpe señorita. Pero Haruka sufro un accidente y esta en el hospital
-¿Cómo?
-Según testigos, un auto se le atravesó sacándola del camino, lo que provoco que chocara contra un árbol, no se preocupe, esta fuera de peligro, no fue nada grave
-o.k, gracias, voy para allá
La violinista comenzó a entender lo que sucedía. Amano estaba cumpliendo lo que había advertido ¿Por qué? ¿Por qué estaba haciendo todo esto? ¿Acaso prefería tenerle a la fuerza? Ella sabia la respuesta, comenzaba a odiarlo, porque se había atrevido a tocar a la persona que mas amaba, Haruka. Sin embargo, por ese mismo amor, tendría que sacrificarse, no permitiria que arruinara la empresa Tenouh, no que volviera intentar hacerle daño, aunque esto le costara su libertad, su felicidad.
-Amano, aquí estoy
-Que bien que decidiste venir
-Pasa, ponte cómoda, porque de aquí nunca te iras...
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