«Los seres humanos ... tienen almas que viven para siempre, viven después de que el cuerpo se ha convertido en polvo. Se eleva a través del aire claro y puro más allá de las estrellas brillantes»
―Fue un accidente con velas―le dice Tsunade.
Al llegar a la escena, Genma la encuentra luchando con la tierra blanda donde se le clavan los tacones. El olor a humo de madera quemada lo golpea con fuerza mientras más se acerca y todavía puede sentir el calor que emana de la tierra y de los restos de la que alguna vez debió ser una adorable cabaña en el bosque.
Genma se pregunta, brevemente, por la rareza del incendio. Los bordes quemados entre la cabaña y el camino recto de hierba chamuscada hasta la puerta Torii, parecían demasiado regulares para ser accidentales. Como si las llamas solo hubiesen recorrido un camino puntual hasta su objetivo, la vegetación circundante permanece intacta y la llovizna ha controlado el fuego hasta extinguirlo.
―¿Cómo es que nadie lo noto? ―pregunta la rubia. Un incendio como este debió ser detectado por los que patrullan el bosque.
Genma se encoge de hombros sin saber exactamente que responder. Las últimas 48 horas son borrosas en su mente. El exceso de alcohol y fiesta por fin esta pasando factura sutilmente pues lo ultimo que recuerda es salir de un bar junto a Gai a buscar a Kakashi en medio de la noche, y lo siguiente, son ambos despertando un día completo después, con la resaca más grande que han experimentado y sin el susodicho copy nin.
―No me mires a mi―recoge un par de tizones de carbón frente a sus pies―. Gai y yo estábamos desmayados. Aun siento la resaca apoderarse de mí.
Tsunade le da una mirada incrédula y pone los ojos en blanco, claramente resignada a cualquier discusión con él.
―¿Y Kakashi?
El del senbon tuerce la boca en un mal gesto: ―Fui a verlo esta mañana. Creo lo escuche llorar.
Tal vez es un poco exagerado, Genma realmente no lo ha oído llorar, mas claramente ha entrado a su casa y lo ha encontrado sentado al pie de la escalera con la vista perdida en la entrada y las lágrimas derramándose suavemente por sus mejillas pálidas.
―Ya esta sintiendo los efectos del duelo.
―Ya era hora―Tsunade se ajusta el haori―. ¿Estará bien?
Es una corazonada, un sentimiento desconocido, un pensamiento casi fantasma que flota en él, pero Genma lo sabe: Estará bien. Siempre lo está.
―Claro. Solo le llevará un poco.
―Entonces reprogramaré el nombramiento. El nuevo Hokage puede esperar un mes más.
Un anbu se acerca a ellos caminando entre los escombros aun calientes, coloca un pergamino en las manos de la Hokage y regresa a su misión.
―¿Hay víctimas?
Tsunade suspira resignada, y sus hombros caen un poco mas abajo: ―Solo una. La anciana que vivía aquí.
Pero hay un pesar en sus palaras y ceño fruncido que inquietan a Genma hasta el tuétano.
―Hiroko Sato, la abuela de Sakura―continua―. Ya hemos enviado la noticia a Mebuki.
Hay tristeza en sus ojos cuando lo dice. Repentinamente Tsunade parece mucho mayor de lo que aparenta, como la edad que realmente tiene, y Genma no puede mirar en sus ojos cansados.
Es trágico, se dice. Pero es lo que es, la muerte es lo único seguro que tenemos.
―¿Y el cadáver?
―No hay cuerpo, debió consumirse en el fuego.
―Pobre Mebuki-san, dos golpes tan fuertes seguidos.
Tsunade da un vistazo al pergamino brevemente y luego lo enrolla sin problemas.
―No eran tan cercanas―dice―. De igual modo, Hiroko Sato era una sacerdotisa, y los cuerpos de las Miko no pueden ser enterrados.
Ella le tiende el pergamino y hace una mueca, su humor cambia rápidamente como si quisiera partir lo más rápido de ahí, y Genma se encuentra en las mismas. No quiere seguir pisando el lugar del ultimo descanso de aquella anciana.
Mientras se alejan, empieza a llover de nuevo.
-o-
Es escalofriante como se mueve el tiempo. Un reloj de arena donde puede escuchar cada grano caer, una aguja marcando el golpe de cada segundo, un latido para llenar el silencio. Para Kakashi no hay algo que lo asuste mas que el paso del tiempo.
Durante el día, Genma viene y trae comida. Algunas veces es Gai que se sienta con él y lo ayuda a comer. Otras, Yugao le ayuda a bañarse.
Pero el latido nunca se va, y el espacio ―de sus voces y su presencia― lo llenan los granos de arena cayendo.
Kakashi tiene miedo de moverse de su lugar, tiene miedo de despertar un día y darse cuenta que el tiempo se ha acabado. Cuando duerme, no hay sueños hermosos, cuando se despierta solo hay un gran vacío. Ya ni siquiera hay enojo, ya no hay dolor. Solo hay un vacío muy grande que se llena con cada tic tac del reloj.
Pero un día cualquiera, Kakashi se levanta en medio de la noche. Apenas puede pestañar, moviendo el rostro con desaprobación frente al espejo, y ve su propia boca moverse, y escucha su propia voz decirle que se ha ido. Y entonces lo cree, por fin lo cree.
Por la mañana barre los vidrios, lava los platos y abre las cortinas. Por la tarde come algo por su cuenta y organiza el librero.
Y en la noche, cuando sus amigos se van, se sienta en la cama y contempla el ultimo regalo de Sakura. Su libro favorito:
"LA MARIPOSA BLANCA"
Y una frase lo estremece: El amor eterno no entiende de tiempos.
Mientras lee, puede sentirla dentro de su pecho, cercana y cálida en su corazón, incluso cuando de la última página cae una carta con la letra de su abuela.
"Para cuando leas esto, mi espíritu no existirá mas en este plano. Y eso está bien, hombre-perro. Soy una sacerdotisa, mi cuerpo no puede ser enterrado, debe arder para purificarse.
No lamento haberte engañado, hay cosas mas grandes que tu y yo no podemos entender, por lo que no fui capaz de tomar tu vida y decidí poner la mía sobre la mesa.
La decisión ya estaba tomada incluso antes de qué pusieras un pie en mis tierras. Los espíritus del bosque han sido benevolentes con mi nieta. Una noche me han dicho que esperase por la razón y al día siguiente has llegado tu: "Merece vivir la vida que le quitamos".
Y los espíritus me han dejado que se la devuelva. Si ti, sin mí y sin este lugar. Eso he hecho. En algún lado, ella está viva, ella está bien y tiene lo que se merece: Una pagina en blanco. Podrá reescribir su historia y con suerte ser feliz.
Tu deseo desinteresado ha sido concedido. Ahora, cumple el de ella y sigue adelante"
Es entonces cuando el ultimo grano de arena cae, el silencio se llena con todos los ruidos de la noche: La gotera del baño, los grillos del jardín, los gatos en el tejado.
Se siente como si estuviera tan alto que se marea y no puede respirar, y el ruido amortiguado va subiendo de volumen y la imagen distorsionada de la chica de pelo rosa sin rostro se va perdiendo mientras absorbe las palabras en la carta.
Una noche como cualquiera, Kakashi cae de lo alto de su torre y el golpe lo devuelve a la realidad.
Ella está viva. Ella está bien. Ella será feliz.
-O-
FIN
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Playlist: Roslyn de Bon Iver & St. Vicent. Y Sign of the Times de Harry Styles.
N/A 1: Entonces, hasta aquí llega este viaje.
De nuevo, muchas gracias por llegar hasta acá, y por votar, y por comentar. Me hace muy feliz leer todo el apoyo que recibo de ustedes en cada idea que tengo.
N/A 2: Y la sorpresa es ―inserte redoble de tambores aquí― ¡Hay una secuela en proceso! No sé cuántos capítulos tendrá ni que tanto tardará en publicarse, pero siento que debo hacerlo. Yo también quiero juntar a estos trágicos amantes y darles su final feliz.
Por favor, díganme que opinan de todo el fic y dejen sus criticas en los comentarios.
Recuerden compartir y recomendar este fanfic c:
Gracias por todo y disculpen lo malo c: Estoy trabajando para mejorar día a día y traerles buenas historias.
¡Nos leemos!
¡FELIZ NAVIDAD 2021!
