Cuervo
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Se quedó pensando todo el resto del día, enfurruñado. Hablaba con monosílabas, y eso cuando contestaba algo. A veces porque no estaba escuchando, otras veces porque no quería contestar. Dark recibió el mismo trato, por más que le dijera que lo que pensaba hacer era una locura inútil y peligrosa.
"Ajá. ¿Y vos me hacés caso cuando estás en primer plano y yo te pido que hagas algo?" le contestó Daisuke.
"No sos vos, Daisuke, y esto está empeorando. Te lo digo en serio: no va a funcionar. Y no sólo no va a funcionar, sino que te estás arriesgando demasiado" le dijo Dark.
"No me importa. Si no lo hago, mi conciencia no me va a dejar en paz"
"¿Sos pelotudo o te hacés? Ese Cuervo es capaz de matarte de forma lenta y dolorosa. Ya te lo dijo Hiwatari: puede que vos seas su elegido"
"Pero yo no soy un ser triste, por más que tenga muchas razones para serlo"
"No empecés con boludeces..."
"Comparto mi cuerpo con alguien que no me respeta ni me trata bien, tengo que salir a robar en las noches, mi vida dista mucho de ser tranquila y cada vez que hacés una buena me quitás varios años de vida. No sólo no puedo negarme, sino que entraste en mí sin mi permiso, y manejás mi cuerpo a veces sin importarte lo que yo diga. Además, mi familia espera que yo sea un buen ladrón, y no les importó que yo me negara. Aparte de Riku y de Hiwatari (y el último no tanto) ¿hay alguien a quien le importe por como soy y no por quien quieren que sea?"
"..." el ladrón estaba sorprendido.
-¿Ves? A nadie. Por eso no estés tan seguro, Dark- hizo una pausa y recostó la cabeza en el marco de la ventana de su pieza, en donde estaba sentado –Si hubiera sido mujer, o si hubiera nacido en otra parte, quizás tendría una vida propia, con personas que me quisieran por lo que soy. Y vos tendrías otro cuerpo más dispuesto a dejarse usar, Dark- y habló con su vínculo mental –"Y todavía no sé que es eso de ser transversal"
"Es un ser que puede pasar a través de varios seres, que tienen algunas características en común"
"¿Y por qué los Hikari tuvieron mujeres entre sus 'domadores' y los Niwa no pueden?"
"No lo sé, nunca se lo pregunté a los Hikari"
"Y aún no entiendo por qué Hiwatari se puso así. Primero estaba muy nervioso, después estaba tranquilo y a lo último tenía ganas de zarandearlo. Si no salía corriendo, le pegaba"
"Y yo te iba a ayudar, Daisuke"
"No me estás ayudando ahora" el pelirrojo frunció la boca.
Silencio.
"Daisuke, estás muy cambiado. Demasiado. Y empezaste a cambiar desde que vino ése... Cuervo"
"Dijo llamarse Arashi"
"Puede decir muchas cosas, pero nada asegura que lo que diga sea la verdad"
"A ver, entonces, ¿por qué, si vino a anunciarle la muerte a Hiwatari, me "eligió" a mí? ¿Porque mi otro yo tiene alas negras? ¿O por qué otro motivo?"
"Quizás le gustas"
"Pero yo no estoy tan triste como Hiwatari"
"No dije para Cuervo, sino que quizás VOS LE GUSTAS"
Silencio.
Daisuke estaba paralizado, sin saber bien cómo reaccionar. Encajaba, sí, peor la idea no se le había pasado nunca por la cabeza.
-Creo que te subestimé- dijo alguien, afuera.
Daisuke giró la cabeza para ver quién había hablado. Se le había pasado el tiempo y ya era de noche, así que en principio creyó que era una cabeza la que le hablaba. Pero el reconocer a Arashi no lo tranquilizó del todo.
-Pero no puedo dejar que interfieras- levantó su mano, acercándose al pelirrojo.
Daisuke no se quedó quieto, y le agarró la mano antes que lo tocara. El vaivén de las alas de Arashi hacía que subiera y bajara un poco en cada aleteo. Miró su mano, agarrada por Daisuke, y luego lo miró a los ojos.
-Dark no tiene por qué estar en vos-
-No quiero que hagas eso- le dijo el pelirrojo.
-¿Qué?-
-¿A qué viniste? ¿A anunciar una muerte o...?-
-No tengo por qué decírtelo-
-¿Eh?-
Se acercó más, hasta poner la otra mano en el marco de la ventana, y arrimó la cara a la de Daisuke. Al pelirrojo no le gustaba tenerlo tan cerca...
-Entonces, ¿acaso te obligué a sentarte cerca la última vez?-
-¿Cómo?-
"Mierda, Daisuke, pegale en las bolas y que se vaya, déjame a mí..."
-Vos te sentaste solo. Yo no te obligué. Así que no digas que no te gusta, porque no podés disimular frente a Dark, ni frente a mí-
Daisuke tragó saliva y desvió la mirada.
"Carajo, Daisuke, ¡reaccioná!" chilló Dark, al borde de la desesperación.
-¿Viniste acá para anunciarle la muerte a Hiwatari?- le preguntó el pelirrojo, de repente.
-No tengo por qué... –
-Y yo no tengo por qué impedir que Dark te haga pedazos, pero lo hago-
Silencio.
-No siempre es inevitable. Eso sólo sucederá si no pasa otra cosa antes- dijo Arashi después de una larga pausa.
-¿Qué otra cosa debe pasar?-
-Debo encontrar un sucesor-
A Daisuke se le heló la sangre y le dio un escalofrió. Los ojos del Cuervo no combaron de expresión. Dark quería ir a matarlo, pero el pelirrojo no se lo permitió.
-¿Y quién... es?-
-Está frente a mis ojos-
Y desapareció.
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"Daisuke"
Nada.
"Daisuke"
Nada.
"DAI-SU-KE"
Nada.
"¡Joder, ¿te vas a quedar así todo el día! ¡Te dije que era mala idea y no me diste pelota! Ahora afronta las consecuencias"
-Ah, que lindo es saber que te preocupás por mí, Dark- dijo el fin el pelirrojo, levantándose del piso, en donde había estado sentado desde que Arashi había desaparecido –Y en especial en que me ves no como un objeto de tu propiedad, sino como una persona con derecho a seguir vivo-
Dark se calló.
-Vos también cambiaste, Dark. Y no me gusta cómo sos ahora-
"Y a mí tampoco me gusta cómo sos vos ahora"
-Me alegra que estemos de acuerdo en algo-
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Hiwatari no volvió a la escuela, y Daisuke estaba al borde de la desesperación. Eran demasiadas cosas, demasiado juntas, y Arashi no volvió a aparecer. Dark comentó que debía estar con Hiwatari, pero el pelirrojo trataba de no prestarle atención.
Sentía que algo grande se aproximaba, y lo sentía con intensidad. Seguía amaneciendo pálido, y cada vez le tomaba más tiempo volver a su color –y temperatura- habitual. Ya no salían a sus "trabajos": Emiko quería tenerlo cerca, y Kasuke y Daiki revisaban cualquier documento que hablara sobre algo remotamente similar a los Cuervos.
Escondían algo, y Daisuke lo sabía. No tenía pruebas suficientes para decirlo, pero Hiwatari no le había dicho todo. Y en lo que no le había dicho estaba la solución al enigma. El pelirrojo centró todas sus dudas en tres preguntas, que tenían muchas respuestas, pero no podía asegurar que alguna de ellas fuera la correcta. O varias. O ninguna.
Primero: ¿A qué vino el Cuervo?
Segundo: ¿A quiénes afecta?
Tercero: ¿Qué pasará después que todo suceda?
Arashi no apareció en la siguiente semana, y cuando el pelirrojo fue a golpear la puerta de Hiwatari, nadie le abría. No sabía si estaba en su casa o no, y Krad no había vuelto a aparecer. Dark sospechaba que había algo entre Krad y el Cuervo, pero Daisuke no lo creía.
Hasta que vio, por última vez, al Cuervo.
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Cuando estaba en la facultad, me pasó algo terrible. Perdí algo que me dio una persona que quiero mucho, y no doy más de nervios. Supongo que alguna ordenanza lo habrá encontrado ene l baño de mujeres, pero no sé qué va a hacer con eso: si se lo guarda, lo tira o lo pone en la sección de objetos perdidos. Ruego para que sea la última opción.
También pasó algo bueno: se me ocurrió cómo va a terminar esta historia. En el final va a haber muchas escenas fuertes y no es recomendable que lo lean si no quieren impresionarse en serio: son cosas que en DNAngel no se han visto nunca. Sé que la mayoría no me va a hacer caos, pero están advertidos.
Nos leemos
Nakokun
