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Alexitimia

Capítulo 13.

Preguntas sin respuestas.

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Se los juro… yo ni quería este poder.

—Sakura, como dije, ya tendrás la oportunidad de explicarnos lo sucedido, lo más importante ahora es encargarnos de esos intrusos con los que peleaste.

La melancólica mirada de la kunoichi se volvió rencorosa al recordar que aquellos sujetos seguían allá en el lago y debido a lo que le había hecho Sasuke de seguro las barreras con las que los había capturado se habían disuelto, lo que significaba que podrían huir en cualquier momento, se mentalizó para ir rápido hacia donde estaban ellos y terminar lo que había empezado, pero ante el primer mínimo movimiento que hizo, su ex sensei se movió más rápido que ella y le impidió el paso, al igual que Naruto que, a diferencia de como la miraba el resto de los presentes, lucía muy preocupado por ella.

—Ya se están encargando, Sakura —advirtió Kakashi con seriedad. —Y los interrogaremos de acuerdo con los protocolos establecidos. Por lo pronto termina de curar a Sasuke.

La médico no muy satisfecha con la encomienda vio de reojo como Sasuke era ayudado por Sai y Shikamaru que lo estaban alzando del suelo, y aunque era evidente que necesitaba ayuda médica, no pudo moverse de su sitio.

La tensión comenzó a sentirse nuevamente entre todos los presentes hasta que de repente unos gritos agitados a lo lejos hizo que esta desapareciera rápidamente.

—¡Hokage! ¡Naruto-kun! —Era Hinata, quien corría apurada hacia ellos. —¡Los infiltrados, ellos…!

—¿Qué pasa Hinata? —Le cuestionó Naruto, enfocándose ahora en ella.

—¡Se están muriendo! ¡Los infiltrados se están muriendo!

—¡¿Qué cosa?! ¡Ellos no pueden…—exclamó Sakura rabiosa, y enseguida evadió y empujó a todo aquel que se le puso enfrente para poder ir hacia el lago!

Al quedar frente a este, vio como varios shinobis se mostraban desconcertados ante los cuerpos que ahora yacían tendidos sobre el hielo y en un estado realmente deplorable; por detrás de ella podía escuchar a Naruto gritar su nombre, pero ignorándolo se adentró al lago deslizándose hacia donde había dejado al principal pervertido, el cual había quedado bajo la custodia de Lee y Tenten, quienes no podían ocultar sus muecas de repulsión hacia lo que veían; y pronto comprendió el porqué, ya que al acercarse la médico observó horrorizada como el hombre parecía disolverse desde adentro hacia afuera, dejando sólo como retazo la piel y muy apenas los huesos más grandes del cuerpo.

—Pero… ¿Qué demonios pasó aquí? —se agachó hacia el cadáver para poder observarlo mejor.

—Ten cuidado Sakura. —advirtió Lee antes de que esta lo tocara. —Su cuerpo de repente comenzó a arder, tanto, que era como si tuviera una hoguera por dentro… Tenten y yo lo tuvimos que soltar porque era demasiado caliente, sólo mira cómo dejó derretido el hielo por debajo de él.

La médico observó lo que Lee señalaba, y pese a la advertencia de cualquier manera tocó el cadáver y en efecto pudo "ver" que hervía, dado que la escarcha que a ella se le había formado en las manos se derritió; sin embargo, en menos de un segundo comenzó a contrarrestar el efecto, y con sólo su tacto comenzó a enfriarlo, pero debido a que había actuado demasiado tarde la mayor parte de lo que alguna vez había sido un ser humano quedó completamente inservible.

—Maldito imbécil… —masculló. —¿CÓMO TE PUDISTE MORIR SIN DARME RESPUESTAS? —gritó con coraje y en un arranque de ira, sacó rápidamente un kunai que tenía oculto entre la ropa, identificó entre los retazos del cuerpo la parte donde había quedado la cabeza y partiendo de ahí se propuso a hacerle ahí mismo una autopsia de lo que fuera que hubiera quedado.

Tenten y Lee se sorprendieron con tan agresiva actitud y se movieron para detenerla, pero alguien fue más rápido que ellos y se entrometió en las intenciones de la kunoichi, que nuevamente quedó desconcertada ya que reconoció la mano que la apretaba con fuerza de la muñeca.

Era Sasuke, quien se había zafado de los que lo sostenían sólo para ir con ella.

Sakura al sólo cruzar su mirada con la de él por un breve segundo, quedó paralizada en su sitio, mientras que él, exhausto, se dejó caer desmayado a un lado de ella.

Por detrás de ellos estaban los demás observando, entre estos Kakashi y un preocupado Naruto, este último había tenido la intención de intervenir también, pero su sensei se lo impidió ya que quería que prestara atención a la situación y realmente le impresionó ver a su amiga con una actitud tan agresiva y hasta despiadada, una que no titubeaba, pero más le impresionó ver que Sasuke, pese a las órdenes de Kakashi había intervenido para detenerla y creía saber el motivo.

—Que interesante. —fue lo único que comentó el Hokage, viendo el panorama donde ahora tenía a un montón de cadáveres que literalmente se habían derretido, su exalumna paralizada y Sasuke derrotado por una persona que pensó nunca le haría frente.

—Comenzó a nevar.

Se escuchó la tenue voz de Hinata que hizo a todos los presentes, excepto a Sakura y Sasuke, mirar al cielo donde las nubes comenzaron a verse más oscurecidas.

Algo malo presintió el Jinchūriki al ver el cielo y enseguida se enfocó de nuevo en sus dos amigos.

—Hinata… ayúdame, por favor. —pidió a su esposa, quien atendiendo a su petición lo siguió hacia donde estaba el resto del equipo 7, todo esto ante la atenta mirada de los shinobis de la nube.

—Lord Hokage. —habló Darui. —Comprenderá que ahora su aldea se encuentra en una situación complicada, espero que se apliquen las medidas correspondientes con respecto al tema de la reliquia y Sakura Haruno.

Kakashi le miró de reojo y luego se volvió hacia donde estaban sus alumnos, en donde contempló como Naruto ahora cargaba por un costado al desmayado Sasuke, mientras que Hinata y Tenten trataban de hacer entrar en razón a Sakura, que lamentablemente para ella y para él, había tenido de nuevo uno de sus colapsos y se había hundido en su propio vacío, pero la ley era la ley, y teniendo la presión de los de la nube tendría que aplicar lo que se hacía con cualquiera que era acusado de robo.

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"Ya no puedes hacer nada por mi… Sasuke-kun"

La chica de cabello rosa que había pronunciado aquellas palabras comenzó a cristalizarse en hielo sin que él pudiera hacer algo, por más que estiraba su mano para alcanzarla y pronto esta desapareció en la oscuridad al igual que él.

—¡No te vayas! —gritó, sobresaltándose en su sitio, viendo desconcertado que estaba en una especie de habitación luminosa.

—Acabo de llegar. —murmuró una voz femenina.

Sasuke al escucharla, parpadeó un par de veces y nuevamente sus ojos visualizaron con claridad el panorama que le rodeaba, estaba en una camilla de hospital y quien había hablado era aquella mujer que también había sido discípula de la quinta, cuyo nombre no podía recordar.

—Dame un momento, enseguida prepararé una solución con la que de seguro te sentirás mejor. —dijo esta comenzando a preparar un brebaje desde la pequeña mesita que había en la habitación.

El Uchiha no mencionó nada, sólo se limitó a ver hacia el techo, hasta que escuchó otra voz más familiar.

—¿Cómo te sientes Sasuke? Por fin despiertas.

Giró su cabeza con lentitud hacia el umbral de la puerta, donde vio a un Naruto que parecía estar tan animado como siempre o sólo estaba fingiendo estar de buen humor.

Detrás de él iba su esposa, la chica Hyuga o más bien Uzumaki.

—¿Qué me pasó? —preguntó, reincorporándose a duras penas.

—¡¿Qué no lo recuerdas?! —dijo el rubio con sonora burla en su voz. —Sakura-chan te dio una paliza que te mandó al hospital por dos días.

El Uchiha gruñó y su sharingan de inmediato se activó, no le gustaba para nada que se burlaran de él.

—Naruto-kun… no me parece apropiado decir eso. —le susurró Hinata, tratando de ser discreta.

—¡¿Por qué no, Hinata?! —exclamó Naruto sin dejar la sonrisita burlona. —Ya se lo dije a medio mundo a Kiba, a Shino, a Konohamaru, a todos los que estaban comiendo en Ichiraku, en fin, y ¿sabes lo que todos me dijeron?

—No creo que alguien aquí quiera saber. —musitó Hinata nerviosa, al percibir los nervios crispados del Uchiha que no hacía más que oír.

Mientras que la pobre Shizune no encontraba el momento oportuno para interrumpir para que el paciente tomara lo que le había preparado, pues al igual que Hinata podía percibir el aura de ira del Uchiha.

—¿Qué dicen de mí, Usuratonkachi? —retó este a que su amigo continuara con sus burlas.

Y Naruto se lo concedió y respondió sin borrar su sonrisita.

—Que hubieran pagado por ver cómo Sakura-chan te daba una paliza, y no sólo ellos opinan eso, también Sai, Shikamaru, Lee, Tenten, todos se lamentaron el no haber estado presentes cuando Sakura-chan te dejó así. —lo señaló.

Un gruñido salió de Sasuke que poco a poco comenzó a manifestar al Susanoo ante la aterrada mirada de las kunoichis.

—Por favor, chicos, aquí no. Estamos en un hospital. —pidió Shizune tomando su distancia.

—Sí, Teme, relájate… específicamente estamos en la clínica que Sakura-chan ayudó a construir y si lo destruyes, ella se enojará más contigo y más si hieres a alguno de sus niños.

Con dicha advertencia el Uchiha se relajó y lo que había manifestado se desvaneció en un parpadeo.

—Hmph… —ya no dijo más y desvió la mirada de su burlón amigo, que parecía estar muy feliz de estar leyendo todas sus expresiones.

Ambas kunoichis que estaban de espectadoras sólo suspiraron con alivio al sentir nuevamente el ambiente relajado.

—Bien, Sasuke, por favor toma esta solución de hierbas, ayudará a que tu cuerpo mantenga su temperatura corporal normal.

—¿Mi temperatura? ¿Qué me pasó realmente? —preguntó inquieto.

—No sabría explicarte a ciencia cierta. —comentó la médico enseriada. —Pero sea lo que sea que te hizo Sakura, hizo que tu temperatura corporal disminuyera drásticamente, por eso colapsaste y de hecho sufriste algunas quemaduras causadas por el mismo frio, como puedes observar. —señaló su mano.

Sasuke observó su palma y en efecto vio que se encontraba enrojecida, también ahora comprendía porque de repente sintió un abrupto cambio de frio a calor, cuando su cuerpo comenzó a colapsar.

"¿Qué demonios le había hecho Sakura?" pensó, tomando el liquido que le ofrecía Shizune, para beberlo de un solo sorbo que, en efecto a los pocos segundos, ayudó a que no sintiera el cuerpo tan entumido.

—Vaya… ese parece ser un gran medicamento. —observó Naruto, notando como su amigo comenzaba a mover el brazo con más facilidad.

—Sí, es una receta de Sakura.

Explicó Shizune precavidamente, observando que ambos ninjas se ponían serios ante la sola mención de la kunoichi.

—Hace unas semanas ella dijo que presentía que tendríamos un crudo invierno en la aldea, así que se dedicó a investigar soluciones que ayudaran más rápido en dado caso de recibir a pacientes con problemas de hipotermia.

—Eso es admirable de parte de Sakura-chan. —comentó Hinata al ver muy serio a su esposo y al Uchiha.

—Sí. Ella es genial… —concordó Naruto susurrante.

Mientras que el Uchiha, cabizbajo, sólo se observó la mano la cual aún se mostraba enrojecida. De saber Sakura que su receta no curaba del todo las heridas causadas por el frio de seguro buscaría una forma para hacerla más efectiva, o al menos eso se imaginaba él.

—Bueno, yo me retiro por el momento, tengo otras cosas que hacer. —se despidió Shizune, presintiendo que el Uzumaki y el Uchiha necesitaban hablar a solas.

Dicho pensamiento también pasó por la cabeza de Hinata cuando la médico se fue, pero no sabía si ser demasiado obvia y retirarse por su propia cuenta o esperarse a que Naruto se lo pidiera.

—Naruto…—habló Sasuke de repente, aun cabizbajo.

—¿Mmm?

— ¿cómo está Sakura?

Hinata observó de reojo a su esposo, expectante de lo que fuera a decir y el cómo lo diría.

—La encerraron. —respondió Naruto sin rodeos. —Está acusada de robarse la tal reliquia esa de la que hablaba Darui.

Sasuke gruñó, apretando la sábana que lo cubría.

—Teme… ¿qué está pasando? ¿Qué es esa reliquia de la que hablan?

—Ni yo lo sé exactamente y es lo que quiero averiguar…. ¡Eh! ¡tú! —

Hinata se sobresaltó, pues ahora él le estaba hablando, nunca lo había hecho.

—Se llama Hinata, Teme… —regañó el rubio, viendo el poco tacto que tenía Sasuke.

—Cómo sea, necesito que me respondas algo… ¿hay algo relevante que deba saber sobre la misión que hicieron cuando Sakura fue a hacerle la autopsia a esa chica? No estoy seguro si algo se me escapó, pero sólo pude ver lo mal que estaba antes y después de, y también los eventos sucedidos en ese hotel.

La sorprendida Hinata no cayó en cuenta de cómo él sabía esas cosas, hasta que rememoró que este había hurgado entre los recuerdos de Shikamaru e Ino.

—Por respeto al Usuratonkachi no me meteré en tu cabeza para averiguarlo. —continuó Sasuke. — pero a cambio quiero que me respondas con la verdad.

—No… sé… que tanto habrás visto en la cabeza de Ino o Shikamaru. —comenzó a hablar ella con un poco de nerviosismo. —Pero cuando nos dieron la noticia de su muerte, Sakura realmente se puso muy mal, estaba muy deprimida. Después cuando nos asignaron la misión la mayor parte del tiempo se mantuvo silenciosa.

—Eso es cierto, Teme, de hecho, te lo escribí en esa carta. ¿Lo recuerdas?

—Sí, pero ¿qué más? ¿No les comentó nada sobre la autopsia ya después de que se marcharon?

—No. Al terminar la autopsia, ella sólo nos dijo "Ya quedó" y se retiró sin esperarnos, se notaba exhausta, Shikamaru, Ino y yo no supimos nada de lo que ella había averiguado hasta que finalmente leímos su reporte.

Sasuke gruñó, todo eso ya lo sabía y al parecer no podría sacarle más a la chica de Naruto, por lo que no le quedaba de otra más que interrogar de nuevo a Sakura.

—¿Dónde la tienen? —se levantó, tambaleándose un poco al hacerlo.

—La tienen encerrada en el departamento de investigación, hasta donde tengo entendido la tienen aislada…

—¿Aislada? ¿Por qué?

—Ella lo pidió. —contó Naruto. —después de que te desmayaste, ella tuvo uno de sus colapsos, pero recobró el sentido unos minutos después, cuando Kakashi discutía sobre a dónde enviarla, ella misma pidió que fuera en un lugar apartado ya que dijo que no sabía si podría controlarla.

—¿Controlar qué?

Naruto se encogió de hombros.

—Supongo que ese poder nuevo que tiene.

—Hmph… mejor dejemos de especular y vayamos a verla.

—¡Espera, Sasuke! ¡Aún no te recuperas del todo, además está nevando y no ha parado, de hecho, te tuvieron que ingresar aquí en la clínica infantil porque empezaron a llegar muchas personas afectados por la nevada!

Para demostrárselo, Naruto abrió la cortina que cubría la ventana y le mostró lo que más bien era una terrible nevasca.

—Tsk… como si eso pudiera detenerme. —chistó el Uchiha. —Dobe, recuerda que cuento con el rinnegan.

—¡Oh, es cierto! —chocó el rubio sus puños.

—¡Así que andando!

—¿Eh?

Sin siquiera meditarlo un poco, Sasuke abrió un portal en medio de la habitación y se adentró en este.

—¡Hinata, vamos! — le siguió Naruto rápidamente, tomando la mano de su esposa, quien tambaleante se dejó llevar por él al interior de ese extraño portal.

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Centro de investigación de Konoha.

Un grupo de ninjas y kunoichis se encontraba reunido en una habitación, en donde el Hokage encabezaba la mesa, mientras que del otro extremo se encontraba el líder del grupo que venía de la nube, todos parecían estar esperando por algo o más bien por alguien y en lo que lo hacían sólo se dedicaron a permanecer en silencio.

En ese momento, un portal bidimensional comenzó a formarse en la esquina de la habitación y de este salieron un cansado Sasuke, un relajado Naruto y una muy impresionada Hinata que no pudo evitar alterarse al ver que había varias personas ahí, incluyendo a los miembros de su equipo.

—Ya decía que ustedes dos no tardarían en llegar. —dijo Kakashi, girándose en su silla para recibir a los recién llegados.

—¿Lo sabía? ¿cómo Kakashi-sensei? —preguntó Naruto.

—Fácil… Shizune se comunicó conmigo y me dijo que Sasuke había despertado y que tú habías ido a verlo, así que creí que sería sólo cuestión de minutos para que ustedes aparecieran aquí.

—Dejemos los detalles de lado, Kakashi. —interrumpió Sasuke. —¿Dónde está?

—¡Oigan, oigan! Antes de que sigan… Eh… Uchiha… ¿es cierto que Sakura te dio una paliza? —preguntó Kiba burlonamente.

Sasuke gruñó para sus adentros.

—Es algo que me hubiera gustado ver. —comentó Shino con la tranquilidad que lo caracterizaba.

Eso encolerizó más al Uchiha y más al escuchar el "a mí también" del sonriente Sai.

—¡¿Qué te dije Teme? —se burló Naruto también.

La ira de este sólo se incrementó más.

—Chicos… —interrumpió Kakashi aburrido. —Concentrémonos…—pidió para evitar una pelea absurda.

—¿Qué hacen estos escandalosos aquí, Kakashi? —preguntó Sasuke rabioso. —Dudo que sean de utilidad en este caso.

—¡Oye, teme, nosotros no estamos aquí por el problema que tienes con Sakura! —se adelantó Kiba a responder.

—Gracias Kiba, por interrumpir. —dijo el Hokage. —Pero en efecto, Sasuke… estoy atendiendo varios asuntos al mismo tiempo y por eso ellos están aquí, ya que como te podrás dar cuenta, si es que viste como está el clima, estamos en medio de una contingencia por causa de esta nevada.

—Hmph… —el Uchiha le restó importancia a todo eso, a él sólo le interesaba un asunto cuyo nombre era Sakura.

—Hokage, creo que deberíamos empezar por ese "asunto". —sugirió Darui insinuante.

—Por supuesto. —concordó. —Naruto, Sasuke requerimos que entre los dos interroguen a Sakura y le extraigan toda la información que tenga acerca de la reliquia.

Ambos ninjas se mostraron enseriados ante la encomienda.

—El día de los hechos y el día de ayer tratamos de hacer que hablara, pero ella sólo contestó a medias, con evasivas o sólo recrimina.

—¿recrimina? —repitió Hinata confundida.

—Así es, cuando intenté interrogarla, ella sólo me respondió con evasivas, recriminándome el motivo por el cual nuestra aldea le daba prioridad a una reliquia a buscar a los verdaderos criminales. —respondió Darui. —Fue imposible hablar con ella, fue una verdadera molestia.

Sasuke gruñó al escuchar esa palabra que constantemente se repetía en su cabeza.

—Entonces Ibiki trató con ella. —siguió relatando Kakashi. —pero sus métodos no funcionaron en Sakura, ya que cómo sabrán, ella ha estudiado la psicología y el comportamiento humano en los últimos años, así que sólo contestó con lo que según Ibiki dijo: —leyó en el informe. —"Sólo me dijo lo que quería escuchar".

—¿Cómo que cosa, Kakashi-sensei? —preguntó Naruto.

Kakashi regresó unas cuantas páginas de su informe y leyó unas de las tantas preguntas que le hicieron a la kunoichi.

"¿Te robaste la reliquia?" pregunta el interrogador

"Sí, si lo hice". Responde la acusada.

"¿Por qué?" Pregunta el interrogador

"No tenía nada mejor qué hacer". Responde la acusada.

"¿cómo lo robaste?" pregunta el interrogador.

"Con un beso" responde la acusada.

—Claramente esta fue una forma de protestar para Sakura, así que no se puede tomar como una declaración válida. —dijo Kakashi. —Y debido a este fallo, es que…se tomó la decisión de utilizar una opción más invasiva.

—Trataron de meterse en su cabeza. —afirmó Sasuke.

—En efecto, para eso solicitamos la ayuda de Ino, creímos que, siendo su amiga, Sakura sería más flexible con ella.

—¿Y qué pasó? —preguntó Naruto.

—Ino primero intentó sacarle la información a la buena, le preguntó directamente qué era lo que le estaba pasando. —interrumpió Sai enseriado. — Perdón, Hokage.

—No adelante, continúa. —concedió este.

Sai asintió.

—Sakura se negó a hablar sobre lo sucedido, pero se sinceró en algo con ella, le dijo que no quería involucrarla, que no quería que viera lo que había pasado.

—¿Qué quiso decir con eso?

—Ni idea. —fue el turno de Shikamaru en hablar. —Ino se exasperó con ella, le advirtió de las acusaciones que estaban haciendo en su contra y que si no hablaba tendría que hurgar en su mente.

—Y de seguro no lo logró, pero qué idea más tonta, desde niños ya habíamos visto que Sakura tenía resistencia al jutsu de Ino. —comentó Naruto.

—No lo creas tanto, Naruto. Ino en todos estos años ha perfeccionado su técnica. —defendió Sai.

—Sí, claro… entonces hablen… ¿Yamanaka logró sacarle algo? —cuestionó Sasuke.

Shikamaru y Sai se miraron entre sí, mostrándose preocupados y dando a entender al Uchiha que no habían logrado sacarle nada.

—Hmph… como era de esperarse y eso es porque Sakura no es débil.

—Claro…. Y tú apenas te estás dando cuenta de eso. ¿verdad? —dijo Sai con cierto tono insinuante.

Sasuke volvió a gruñir.

—Bueno, ya… ¿qué pasó con Ino y Sakura? —retomó Naruto la conversación.

—Cómo dije, Ino se exasperó y comenzó a regañarla, pero Sakura volvió a negarse una y otra vez y le suplicó a Ino que no intentara nada, pero Ino no hizo caso y usó su jutsu en ella.

—Cuando lo hizo. —continuó Shikamaru. — ambas entraron en trance, hasta que Ino volvió en sí, pero cayó desmayada, mientras que Sakura volvió a colapsar tal como le pasó el otro día.

—Ino aún no se recupera del todo del trance. —dijo Sai preocupado. —Me contó que cuando entró en la cabeza de Sakura fue como haber caído en un pozo sin fondo, que todo estaba muy oscuro.

Sasuke comparó aquella sensación a cuando la había tratado de meter en el genjutsu.

"A menos que quieras ver todo negro, no te lo recomendaría"

Ella ya se lo había advertido, pero hasta ese momento no había entendido lo que había querido decir.

—Cuando Sakura recobró el sentido y rememoró lo que había hecho se sintió culpable. —siguió Kakashi. —Fue mi turno en intentar hablar con ella.

—¿Eh? ¿Cuándo? —preguntó Darui, no enterado de aquello.

—Cuando suspendimos el interrogatorio y todos se fueron, ciertamente fui a hablar con ella tal cual un maestro lo haría con su alumna. Sé que es en contra del protocolo, pero creí que era necesario, Darui, comprendo que es una situación complicada, pero consideré que era necesario que lo hiciera.

Darui se ensombreció, no le agradaba que la hoja involucrara lo personal con un asunto totalmente diferente.

—¿Y logró decirle algo Kakashi-sensei? —preguntó Naruto preocupado.

—No mucho en realidad. Estaba triste y cabizbaja, me preguntó si Ino estaba bien y pidió perdón por lo que le había hecho a Sasuke y a ella, también por mentirle a Ibiki y por supuesto preguntó por lo que se estaba haciendo con lo que quedó de los infiltrados, cuando respondí a sus dudas, me repitió que no quería involucrar a nadie más, pero a la vez dijo que parecía ser inevitable; fue entonces que le pedí que se sincerara conmigo, pero ella se negó, eso sólo me hace pensar que lo que oculta es algo muy grave. — suspiró. —Iba a insistir hasta que me dijera algo que fuera relevante, pero ella sólo me pidió que me fuera, dijo que necesitaba "rezar" para atrasar los malos tiempos que se aproximaban, y extrañamente a partir de ese momento se intensificó la nevada. Nadie la ha molestado desde ese entonces.

—¿Rezar? —repitió Sasuke susurrante, tratando de atar cabos, pero sólo había intriga tras intriga.

—Por eso, Naruto y Sasuke les pido ahora que ustedes hablen con ella, más que interrogarla quiero que se acerquen como el equipo que solían ser. En el caso de Naruto. —señaló Kakashi al Uzumaki. —Sé que ella no se atrevería a mentirte, no sí vive consiente de lo que alguna vez le dijiste.

Naruto asintió, rememorando un viejo recuerdo de cuando estuvieron en el país del hierro.

—¿De qué hablan? ¿Qué le dijiste? —preguntó Sasuke sin comprender.

—Nada Teme.

—¿Por qué no le dices la verdad Naruto? —habló Sai, esbozando una sonrisita.

—¡Sai, cállate! —exigió el Jinchūriki enrojecido, viendo discretamente hacia donde estaba su esposa, pues ni Hinata sabía lo que alguna vez había hecho Sakura por él. —Pero con respecto a eso, quiero aclarar que no pienso prestarme a un chantaje emocional contra ella, Kakashi-sensei. No obligaré a Sakura-chan a hablar si no quiere.

—Sí, claro… nadie está diciendo algo sobre que la obligues. —respondió este tranquilamente y luego se volvió hacia el Uchiha. —En tu caso Sasuke, no sé que es lo que siente realmente Sakura por ti, solamente sé qué está arrepentida por lo que te hizo, y en cuanto a ti, noto que tienes la intención de ayudarla.

—No te confundas Kakashi, mi misión es sólo averiguar qué es lo que está pasando. —se evadió este molesto.

—Ush… tú no cambias, Teme, sigues siendo el mismo cabrón de siempre. —dijo Naruto, colocando sus manos detrás de la cabeza. —En lo que a mi respecta no es necesario que vengas, yo solo puedo hablar con Sakura-chan.

—Hmph… tengo una misión que cumplir, es lo único que diré.

Los dos siguen preocupándose por ella a su modo. —pensó Kakashi por sus adentros. —Bien, Naruto y Sasuke, vayan al cuarto de interrogatorios enseguida unos escoltas llevarán a Sakura con ustedes; en cuanto a los demás, pueden marcharse a sus respectivas asignaciones, recuerden que estamos en contingencia; los que tenían la misión asignada para ir a la arena, debido a las actuales condiciones meteorológicas y a los sucesos ocurridos fue suspendida temporalmente, así que vayan a ayudar en lo que se requiera en la aldea, Hinata, ve con Kiba y Shino y ayúdalos con la asignación que les di.

—Oh, sí Hokage. —asintió esta, acudiendo con su equipo, no sin antes mirar a su esposo quien sólo asintió dándole a entender que estaría bien.

Los shinobis que estaban sentados alrededor de la mesa se levantaron y de uno en uno abandonaron la habitación.

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En una celda poco iluminada y que sólo tenía una pequeña e incómoda cama, la kunoichi de cabello rosa se encontraba de rodillas frente a la pared que apenas y contaba con una pequeña ventana enrejada en donde se podía apreciar la fuerza con la que caía la nieve.

Con sus manos unidas en modo de rezo, imploraba susurrante oraciones o más bien súplicas desesperadas.

Por favor, tranquilízate, tranquilízate… tienes que calmarte, por favor, por favor.

Pero lo único que conseguía conforme más rezaba era que su celda se pusiera cada vez más fría, que poco a poco comenzó a escarcharse desde las esquinas.

—Sakura…

Ante el llamado de alguien en el exterior, dejó de rezar y se volvió hacia la puerta la cual después de retirar algunos candados y seguros fue abierta por el dúo de ninjas de Kotetsu e Izumo, quienes al apenas dar un paso dentro de esta percibieron el tremendo frío que se sentía, uno de ellos incluso estornudó ruidosamente, salpicando con mocos a su asqueado compañero.

—Por kami, que frío hace aquí… Sakura, ¿tú no tienes frío? —se quejó Izumo sorbiendo sus mucosidades.

—No.

El dúo se vio entre sí, extrañado.

—Bien, como sea… te esperan de nuevo en el cuarto de interrogatorio, así que andando.

La kunoichi sólo asintió, tratando de descifrar durante su recorrido al cuarto de interrogatorios si sería su sensei quien terminaría con el interrogatorio de la noche anterior.

Pero como usualmente pasaba, se había equivocado.

—Hola, Sakura-chan.

—Naruto… —mencionó ella, viendo a las dos personas que se encontraban en la habitación, mientras Izumo cerraba la puerta tras ella.

—Toma asiento, Sakura-chan. —le invitó Naruto a seguir, mientras que Sasuke sólo la acechaba con la mirada.

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—¿Crees que vaya a hablar? —preguntó Darui, desde otra habitación, donde a través de un cristal que no era visible para los que estaban en la otra habitación veía todo lo que acontecía.

—Eso espero. —respondió Kakashi atento a lo que conversaban sus alumnos.

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—Kakashi-sensei decidió mandar a la artillería pesada ¿eh? —comentó Sakura con una sonrisita mientras tomaba asiento. —Sabe que no te puedo mentir.

—jejeje… así parece ser, Sakura-chan, pero no lo tomes así, él está preocupado por ti. ¡Todos! Lo estamos.

—Hmph…

El resoplido molesto de Sasuke no pasó desapercibido por los dos ninjas, Sakura, aunque no se atrevía a verlo por completo, vio que estaba con ropa casual, lo que significaba que había estado en reposo.

—Sasuke-kun yo… lo sie…

—No tiene importancia. —interrumpió este, desviando su mirada hacia otro lado.

—Dah! No le hagas caso Sakura chan, está enojado porque lo derrotaste.

Y nuevamente ese irritable y burlón comentario crisparon los nervios de Sasuke, quien iracundo se volvió molesto hacia su amigo.

—¡Usuratonkachi! Ya cierra la boca.

—¡¿A quién le dices Usuratonkachi, teme?!

De repente una risita interrumpió la pelea entre ambos ninjas. Tanto Naruto como Sasuke se mostraron confundidos pues ambos llevaban mucho tiempo (uno más que otro) sin escuchar a Sakura reír así.

—Ustedes no cambian.

El rubio inmediatamente se abochornó y rascó su cabello avergonzado, mientras que Sasuke sólo desvió su mirada hacia otro lado, otra vez.

—Pero en serio, Sasuke-kun, siento mucho lo que hice. —dijo Sakura tranquilamente. —Y descuida, Naruto y tú siguen siendo más poderosos que yo, así que no te preocupes por eso, y cómo les había dicho en el lago yo ni quería este poder.

El Uchiha la observó de reojo y realmente le incomodó que ella pensara que le tenía envidia a ella o algo por el estilo, cuando eso no era más que una errónea suposición.

—Sakura-chan, acerca de eso, ¿puedes contarnos qué te pasó? Necesitamos que nos respondas algunas cosas. —pidió Naruto gentilmente. —Queremos ayudarte.

—Sí, me imagino, así como imagino que detrás de alguna de estas paredes está Kakashi -sensei observando y escuchando. —miró alrededor de la habitación.

Kakashi del otro lado, sólo se limitó a sonreír por detrás de su máscara.

—Necesitamos que hables para que podamos entender qué es lo que pasa tanto contigo como allá afuera. —recalcó Sasuke, siendo ahora él el que evitaría contacto visual con ella.

—Claro, lo haré… hablaré.

—¿En serio?

—Sí, Naruto. Lo he pensado mucho y creí que podría solucionar las cosas por mi cuenta, pero… —bajó la cabeza. —Todo se está saliendo de control.

—pero… ¿Qué cosa? ¿Qué se está saliendo de control?

—Tal vez necesite empezar desde el principio para que me entiendan.

—Adelante Sakura-chan te escuchamos. —alentó Naruto.

—Pero con una condición.

—¿Cuál?

—Que Sasuke-kun se quite la camisa.

Ambos varones se sobresaltaron, al aludido incluso se le activó el sharingan de la impresión. Los del otro lado de las paredes igualmente se apenaron y se mostraron confundidos ante dicha solicitud.

—Eh… Sakura chan… etto…cómo pides eso, hace mucho frío aquí y, de hecho, entraste y se sintió todavía más. —dijo el rubio sonrojado.

—¿En serio?... bueno, no importa… no piensen mal, sólo quiero ver y comprobar algo.

—¿Y por qué debo ser yo? —replicó Sasuke, tratándose de no verse alterado con dicha propuesta.

—Sólo hazlo, soy médico recuerda, no tienes nada de que avergonzarte. Además, no es como si fuera la primera vez que te viera.

El Uchiha gruñó y le dio mentalmente la razón, pues ella era quien lo había atendido en el pasado. Entonces ya considerando la situación, si quitarse la camisa era el único modo para que ella hablara, entonces accedería.

Con su único brazo se removió la camiseta negra que le habían puesto en el hospital, sólo esperaba no escucharla gritar como una fanática loca o algo parecido; sin embargo, nada de eso pasó, de hecho, hasta él mismo se sorprendió con lo que vio en su torso pues había varias manchas rojas, símbolo de que su piel se había quemado con el frío.

—Oye, Sasuke…—murmuró Naruto también sorprendido, y atrevidamente le picó con un dedo una de las quemaduras. —¿Te duele?

—¡¿qué te pasa, Dobe?! ¡Por supuesto, es una jodida quemadura! —se quejó este, no le gustaba que cualquiera lo tocara.

—Siéntate. —pidió Sakura después de verlo y comprobar lo que quería.

El Uchiha aun con el sharingan activado, se sentó en su respectivo asiento, sin saber qué era lo que tramaba Sakura.

—Tu mano.

El frunció el entrecejo, pero de igual manera estiró su brazo por encima de la mesa para que ella alcanzara su mano; entonces Sakura colocó sus manos cerca de la de él, pero sin tocarlo, aun así, Sasuke pudo percibir lo helada que ella estaba, o al menos eso sintió hasta que de repente comenzó a sentir algo más cálido al momento en que ella empezó a emanar aquel sanativo chakra color verde que llevaba tiempo sin ver.

—Lo siento mucho. —repitió nuevamente ella, con su vista atenta en su mano.

Sasuke no dijo nada, sólo dejó que la sensación de confort lo rodeara tal como aquella vez cuando ella curó la herida de su brazo.

Las marcas en la palma de su mano poco a poco fueron desapareciendo y después le siguió el resto de las quemaduras que tenía en el torso, hasta que estas finalmente desaparecieron por completo.

—Listo. Te puedes vestir. —sonrió la kunoichi, satisfecha con su labor.

—ah…—fue lo único que pudo pronunciar él sin atreverse a verla, para luego levantarse de su asiento y volverse a colocar la camisa con un poco de dificultad.

—Bien Sakura, retomemos, empieza cuando quieras. —dijo Naruto, una vez que Sasuke volvió a sentarse.

La kunoichi suspiró y les sonrió a ambos melancólicamente.

—Verán… todo empezó cuando…

Continuará.

Notas de autora: algunos anuncios:

Trataré de que la actualización del fic sea cada semana, o cada dos semanas como mínimo, también retomaré mi otro fic que se llama "Guardian" y el cual es un fic AU basado en una película, por si gustan leer.

Para el próximo capitulo de Alexitimia, habrá una serie de Flashback que en su mayoría serán sobre los acontecimientos que Naruto contó en sus cartas, pero a la vez estará en una perspectiva general para ver algunas cosas que pasaron con otros personajes. Así que atentos :D

Espero que les haya gustado y nos seguimos leyendo.

Agradecimientos especiales a: Sarib, Margaces, KassfromVenus, Emilia Tsukino, Blossomarie, Nina page y los guest.

Saludos.

12 de junio de 2022