Alexitimia.
Capítulo 29.
De nuevo en casa.
.
.
Konohagakure, oficina del Hokage.
—Eso es todo, espero que ahora SÍ puedan comprender un poco más el motivo por el cual Sakura está actuando así. Como ya escucharon, se trataba de un tema muy difícil de hablar y si se los cuento ahora, es porque a como dijeron que terminó la reunión de los kages y los hechos sucedidos en el país del agua, esas viejas soplonas dirán todo lo que saben, incluyendo esto. —finalizó Tsunade, quien se encontraba sentada en el lugar que anteriormente había ocupado como Hokage.
Sus oyentes, el actual Hokage y su consejero estaban en silencio.
Kakashi en una parte del relato había quedado en shock, pero se mantuvo en su posición calmada como se suponía se esperaba de un Hokage; sin embargo, en su mente pasaron demasiadas cosas: furia, indignación, para finalizar con la comprensión y la apertura a nuevas dudas de sobre cómo debía actuar a partir de ahora, tanto como kage, así como ex sensei, compañero y amigo de Sakura; y mientras él lidiaba con ese dilema, quien se encontraba a su lado soltó un pequeño quejido.
Shikamaru, quien, a pesar de su actitud generalmente calmada y despreocupada, estaba dando a notar una mueca de furia e indignación.
—Cálmate, Shikamaru. Ya pasó, no se puede hacer nada. —dijo Kakashi, intuyendo lo que pasaba por la mente del Nara.
—Era parte de mi tarea… debí cuidarla. —gruñó Shikamaru con los puños apretados.
—Tu tarea era sólo acompañarla, nadie podría imaginarse que eso pasaría.
—¡Pero de cualquier manera! ¡Yo estaba ahí! ¡A unas habitaciones de donde ella estaba siendo…! No entiendo ¿por qué no escuché o percibí algo?
—Entonces lo mismo aplicaría con Hinata e Ino, quienes tampoco se dieron cuenta. —opinó Tsunade. —Y créeme que, cuando les dije a ellas, también se sintieron igual que tú, así que te diré lo mismo que les dije a ellas: ¡Ya pasó! lo hecho, hecho está y nada lo cambiará.
—Es fácil decirlo, cuando ustedes no eran los que eran responsables de la misión.
—Shikamaru. —reprendió Kakashi.
—Lo siento, comprendo lo que quieren decir, pero por ahora es mucho por digerir, tengo que irme.
—Adelante, vuelve cuando estés más calmado.
Dado el permiso, Shikamaru se retiró ofuscado de la oficina del Hokage, dando un golpazo en la puerta que hizo al actual kage y ex kage resoplar con cansancio.
—Tranquilo, es normal la reacción, si vieras como tuve que reprender a Hinata para que no se pusiera sensible el día que se lo dije, ni que decir de Ino que fue un doble golpe para ella, pues de haber salido antes de la habitación hubiera alcanzado a ver a Sakura siendo controlada por esa tipa a la que también consideraba una amiga.
—Sí, lo entiendo.
—Y tú… ¿estás realmente calmado o sólo eres bueno fingiendo?
Kakashi sonrió detrás de su máscara.
—No sabes las inmensas ganas que tengo de matar ahora… en especial a ese sujeto.
Tsunade sonrió de lado, notando cierta tensión en la sonrisa del kage, lo cual realmente demostraba cuan furioso estaba.
—Toma un turno, sigo sin poder localizar al maldito imbécil, el país de la primavera al parecer ya lo declaró como desaparecido y la policía local lo sigue buscando en el área del último sitio en donde fue visto por última vez.
—De no ser porque Naruto y Sasuke no saben esto, sobre todo Sasuke, sospecharía de ellos, pero por lo que me dices sólo le dijiste a Hinata para que estuviera al tanto de Sakura.
—Así es, sin embargo…—Tsunade suspiró. —No sé porque siento que Sakura es como una bomba de tiempo, que, si no ha explotado aún, está a punto de hacerlo.
—Sólo espero que Hinata, o en todo caso Naruto la puedan calmar, de Sasuke mejor ni opino, no tengo idea de cómo se llevan esos dos ahora, sólo sé que él está enfocado en la misión y eso es todo.
—Tal vez sea lo mejor, Sakura no necesita más problemas de los que ya tiene y más vale que ese chico Uchiha la esté tratando bien.
—¿Aún te cuesta soportarlo? —preguntó Kakashi con una suave sonrisa.
—Lo que le hizo a Sakura no se olvida. —respondió esta tajantemente, levantándose de su asiento. —Si ya no hay más pendientes, me retiro, y si vas a citar a la vieja Akane, que sea solamente para saber qué es lo que pretende junto con las otras viejas.
—Creo que sé cómo hacer mi trabajo, pero una ayuda no está de más, gracias Lady Tsunade.
—Hmph… nos vemos Kakashi. —se despidió esta, pasando a un lado de él para retirarse.
Quedándose solo en la oficina, Kakashi volvió a tomar su lugar y pese a todo, se concentró en seguir con su trabajo, empezando por contactar al equipo de división sensorial para saber si ya habían localizado a Naruto y los demás.
.
.
Shikamaru llegó a su casa y, de entrada, aún seguía refunfuñando, sin poder olvidar lo detallada que había sido la ex Hokage al contar lo que le había ocurrido a Sakura, su compañera, cuya imagen mental era la de ella siendo violentada en su habitación, mientras que él como todo un idiota, descansaba tranquilamente en la suya.
—¿Por qué no me di cuenta? —gruñó furioso, golpeando la puerta con el puño, se le hacía demasiado extraño que ni Ino, Hinata o él se dieran cuenta de lo que había sucedido y que hubieran caído rendidos al sueño.
¿Coincidencia o algo más había pasado? Fuera lo que fuera, lamentablemente lo hecho, hecho estaba.
—¡Ah! ya estás aquí.
Escuchó la voz de su esposa en el pasillo y fue cuestión de segundos para que el Nara la tuviera frente a él.
Temari inmediatamente notó que algo pasaba con su esposo, pues él no era de los que se perturbaban tan fácilmente. No le había visto ese semblante desde que había fallado en la misión del rescate del Uchiha.
—¿Qué pasó?
Shikamaru volvió a golpear la puerta furioso, y comenzó a negar con la cabeza sin saber si contarle a su esposa o no, ya que era algo delicado y también privado.
—Shikamaru, no me digas que no pasa nada. ¡Anda! ¡Dímelo! ¿pasó algo en la aldea?
El Nara volvió a negar con la cabeza.
—Entonces…
—Es sólo algo con…—resopló. —Algo con el tema de Sakura…—dijo muy apenas.
Temari bajó la cabeza.
—Mmm… entonces… ¿ya lo sabes?
—¿Eh? —Shikamaru se sorprendió. —Tú… ¿Tú lo sabías?
La kunoichi asintió.
—La Godaime me lo contó antes del ritual de Sakura, ¿por qué crees que estuve ahí para ayudarla? Además, también me lo confió para que en el momento en que tú lo supieras pues… no sé, supongo te consolara.
—Pero… pero…—balbuceó el Nara agitado, apretando los dientes. —¿Consuelo? Supongo que sabría que me sentiría una ¡MIERDA! Por fallar de nuevo.
—Exactamente. —asintió Temari con crudeza, algo que realmente ya no sorprendía a su esposo que sólo desvió su furiosa mirada de la de ella. —Escucha Shikamaru, no fue tu culpa, ni la de ella… sólo… pasó, ya no se puede hacer nada al respecto.
—Qué fácil ¿no? Y si tú hubieras sido la líder de esa misión ¿pensarías lo mismo? O peor aún… si a ti te hubiera ocurrido lo que a Sakura. —cerró los ojos y negó con la cabeza borrando esa imagen de su cabeza. —Lo siento, estoy diciendo estupideces.
—Sí, estás diciendo estupideces… y créeme, yo también me sentiría mierda al saber que alguien que estaba bajo mi cargo salió lastimado y más porque esa persona ni siquiera fue capaz de defenderse, en cuanto a lo otro, quiero que entiendas algo, si a mí me hubiera pasado lo que a Sakura le pasó, lo menos que yo quisiera es tener a un montón de llorones sintiendo pena por mí, en especial no me gustaría verte a ti llorando y lamentándote por mí. ¿No crees que así se siente Sakura?
—Sakura no es como tú.
—No, no lo es. Sakura es más sensible y sentimental de cierto modo, pero ¡tú la has visto!, los últimos días antes de marcharse a Sunagakure estuvo como si nada le pasara a pesar de cargar con todos los problemas que tenía. Dile estúpida por callar y lidiar con su dolor a su modo si quieres, pero para mí ese es el tipo de fortaleza que ella tiene, y creo muy sinceramente que lo único que ella quiere es continuar con su vida y que la gente a su alrededor no cambie con ella sólo por lo que le pasó. Así que has todos los berrinches y corajes que quieras ahora, llora, desquítate con algo, para cuando ella vuelva la sigas tratando como siempre, como tú compañera.
Shikamaru soltó una risita sarcástica, pero asintió al consejo de su esposa.
—Cuando te sientas mejor ven a cenar, te estaré esperando, y si quieres que te acompañe también puedes pedírmelo.
—Gracias Temari. —musitó este, pasando a un lado de ella.
La chica de la arena sólo asintió con la cabeza y lo vio marcharse, sabía que su esposo necesitaba estar solo para desahogar sus penas. Lo conocía a la perfección, no en valde era su esposa.
.
.
.
Base abandonada.
Tiempo actual
—¡¿Qué pasa, Naruto?! —preguntó Sakura, al ver a su amigo agitado.
—Ino contactó conmigo. Kakashi sensei quiere que volvamos a Konoha…
—¿Kakashi sensei?
—Sí, y por cómo me lo comunicó Ino parece ser urgente, así que es mejor volver cuanto antes. Además, tenemos que informar lo sucedido en la base de Orochimaru.
—Sí, con todo esto me olvidé de lo que sucedió en ese lugar, espero que el capitán Yamato y los demás estén bien. —murmuró Sakura preocupada.
—Yo creo que sí lo están, no te preocupes Sakura-chan. —sonrió Naruto, para luego volverse a su amigo. —Sasuke… ¿qué tan lejos estamos de Konoha?
—A menos de un día y medio a nuestro ritmo si no nos detenemos.
—¿No puedes utilizar tu rinnegan?
—No es conveniente, ya perdí mucho chakra con el último portal que abrí y necesito conservar lo que pueda para lo que sea que se presente.
—¿Y si te transfiero algo de mi chakra? —preguntó Sakura.
Pero Sasuke negó con la cabeza.
—No te preocupes, tú también debes de recuperar fuerzas, además como dije, no estamos muy lejos de la aldea.
—Sí, Sakura-chan, además, Ino dijo que Kakashi sensei nos dio 3 días para volver, así que estamos en tiempo. No te preocupes. —comunicó Hinata.
—¿Tres días? Fue muy específico ¿No creen?
Naruto se encogió de hombros.
—Supongo que algo pasó.
—En vez de especular, es mejor que nos vayamos moviendo. —opinó Sasuke.
—Sí, claro… sólo iré por mis cosas. ¿Me acompañas, Hinata?
—Sí, vamos.
La Uzumaki, asintió y se fue con ella hacia donde habían dejado sus pertenencias, dejando solos a ambos varones que permanecieron quietos en sus sitios, sin apartar sus miradas de ambas kunoichis, en especial Sasuke que, como solía hacer, no apartaba la mirada de su "protegida", aunque ahora la veía como algo más que eso.
—Algo pasó ¿verdad? —preguntó Naruto, al notar un tanto extraño a su amigo.
Sasuke resopló.
—Le dije a Sakura que quería cuidarla, supongo que sabes a lo que me refiero. —insinuó viéndolo de reojo. —y… ella me rechazó. —contó sin mostrar ningún tipo de afectación en su rostro.
El sorprendido Naruto ahogó un grito sin poder creer que hubiera sido su amigo el que tomara la iniciativa, con un final un tanto desafortunado para su pesar.
—Sasuke…lo siento.
—No lo sientas, Sakura y yo seremos amigos y… estoy bien con eso. —finalizó conforme, para posteriormente marcharse en dirección hacia donde las chicas se habían ido.
—Si tú lo dices, bueno… algo es algo. —pensó el Jinchūriki corriendo para alcanzarlo, esperando que la nueva amistad entre sus dos amigos prosperara con el tiempo y… ¿por qué no? Esperando que algún día esa amistad se volviera algo más, si es que así lo quería Sakura.
.
.
Con un clima frío y nubes grises a lo alto, los cuatro ninjas recorrieron un largo camino de regreso a Konoha, pasando por diversos paisajes y caminos que apenas pudieron admirar ya que, como habían acordado, andarían hasta que la noche los alcanzara. Una vez que la noche pasó y un nuevo día los alcanzó emprendieron nuevamente su camino sin parar en ningún solo momento, hasta que finalmente los grandes muros que rodeaban a la aldea fueron visibles a sus ojos y posteriormente las grandes puertas de Konoha aparecieron frente a ellos.
Habían llegado a Konoha, su próximo destino: la oficina del Hokage.
.
.
—Cuanto tiempo Naruto, Sakura, Sasuke y Hinata. —saludó Kakashi desde su lugar. —Los estaba esperando.
—oh, sí, ya estamos aquí Kakashi sensei… que bueno verlo, Mmm abuela Tsunade, Shikamaru. —saludó Naruto a quienes acompañaban a su maestro a sus costados.
—Kakashi sensei, Lady Tsunade, Shikamaru. —saludó Sakura con una pequeña y respetuosa reverencia al igual que Hinata que inclinó también su cabeza.
Mientras que Sasuke sólo pudo notar cierta tensión en esos tres que, a pesar de querer parecer indiferentes, parecía que algo les incomodaba, en especial por como empezaron a observar a su amiga.
—Sakura, necesitamos hablar contigo en privado. —indicó Tsunade.
—¿Con-migo? —Sakura comenzó a sentir un poco de ansiedad al notar una insinuación en la tonalidad en la voz de su maestra.
—Así es. Naruto, Sasuke y Hinata. ¿Podrían esperar afuera unos minutos? —ordenó Kakashi.
Sakura se ensombreció con su flequillo, intuyendo lo que pasaba.
—Pero ¡Kakashi sensei!
—¿Es… es referente a ese "tema"? —interrumpió Sakura al momento que Naruto comenzó a protestar.
Los presentes se silenciaron.
—Sakura… —susurró Tsunade sorprendida, y más se sorprendió cuando Sakura levantó su mirada, mostrando mucha determinación en su verde mirar.
—Sí es así, Lady Tsunade, lo que tengan que decir lo pueden escuchar ellos. —señaló al equipo. — ellos… ya lo saben. —explicó tranquila.
—Sakura… —trató de articular alguna palabra el Hokage.
—Ya lo saben… ¿No es así? ¿Kakashi sensei? ¿Shikamaru? —cuestionó Sakura comprensivamente.
El Nara a pesar de que había pretendido hacerse el fuerte, y también de haberse desahogado días atrás, no pudo evitar sentir que algo se removiera dentro de él que se sacudió inquieto sintiendo algo en su garganta, y más que nada al ver que Temari había tenido razón. Sakura era más fuerte de lo que aparentaba.
Mientras que Kakashi mostrándose inalterable como solía ser, sólo resopló como si estuviera exhausto y se levantó de su asiento para dirigirse hacia a su alumna, la cual sólo se sintió paralizada al momento que este la acercó hacia él para envolverla en un abrazo protector como si fuera de un padre a su hija.
Naruto, Sasuke y Tsunade al ver tal tacto del Hokage para su alumna se tensaron por dentro tal como Shikamaru, los cuatro tratando por todos los medios de mostrarse serenos y calmados, mientras que Hinata no ocultó su sentir y unas lagrimillas se le formaron en los ojos, y más al ver como su amiga parecía también tratar de contenerse para probablemente no mostrarse débil ante su maestro y compañeros; aunque pensaba que lo mejor para ella era soltar de una vez por todas ese dolor que probablemente nunca se iría, pero que, a lado de sus seres queridos se apaciguaría.
—Has sido muy valiente Sakura, y has pasado y sigues pasando por mucho sin dejarte vencer, no esperaba menos de mi alumna. —acarició Kakashi su cabello.
Sakura sintió un nudo en la garganta al escuchar sus palabras y al sentir tan cálido tacto.
—Solo te pido que no nos dejes fuera, somos equipo, lo sabes ¿verdad? déjanos ayudarte en todo lo que necesites. ¿Entendido?
Sakura exhaló, dejando escapar un pequeño gimoteo de dolor al momento que asintió con su cabeza.
—No estás sola Sakura. Quiero que tengas siempre eso presente.
En ese momento la kunoichi ya no pudo evitar esconder lo que de verdad sentía y se apoyó en su maestro para llorar una vez más, esta vez no por el dolor o la tristeza de lo pasado sino por toda la comprensión recibida.
Los demás sólo presenciaron tal desahogo en silencio, Naruto y Hinata por supuesto no pudieron ocultar algunas lagrimillas que dejaron escapar sin más, al igual que Tsunade que estaba más que orgullosa por como se estaba manejando la situación, mientras que Sasuke y Shikamaru optaron por mantener su porte de siempre, no por falta de empatía sino todo lo contrario, llegaría un momento en que todos de alguna manera superarían ese infortunio.
.
.
Pasados los minutos y que el llanto cesó, fue el momento de intercambio de reportes, siendo el equipo 7.2 y Sakura los que empezaron por contar su parte de la historia acerca de los acontecimientos sucedidos en el país del agua, desde los enemigos infiltrados que los atacaron usando drogas y máquinas extrañas, hasta el ataque que hizo Sakura contra la anciana y la Mizukage en donde admitió, para su pesar, que sintió que Yuki tomó posesión momentáneamente de su cuerpo.
Luego contaron los acontecimientos sucedidos en la base de Orochimaru, en donde el enemigo nuevamente apareció con formas de títeres de zetsus mecánicos, detallaron el ofrecimiento que se le hizo a Sakura, la revelación de los sucedido con el cantante Hideki Sato (para sorpresa de los Hokage y consejero) y el ataque que estos arrojaron contra ellos y que los dejó con la duda sobre el destino del Capitán Yamato, Orochimaru y compañía.
—Ya veo, con que así se dieron las cosas. —Musitó Kakashi procesando todo lo que recientemente había escuchado.
—Kakashi sensei… ¿Hay noticias del capitán Yamato?
—Sí, Naruto. No se preocupen por ellos. Tenzou y los demás están bien, al parecer pudieron salir librados de esa explosión, pero según el reporte que recibí de él, la guarida de Orochimaru quedó dañada y aparentemente inhabitable, van de camino a moverse a la antigua guarida que tenían en la aldea del sonido, por cierto, Sakura…
—¿Eh? ¿sí?
—Me harán llegar los análisis que hiciste de los sujetos que atacaron el país del agua, al parecer los registros se salvaron en el laboratorio y contienen información importante.
—Oh, sí, así es, lo siento Kakashi sensei, yo sólo me enfoqué en ese momento en compararlos con la información que tenía de la autopsia, para saber si esos hombres habían sido… bueno, usted sabe.
—No te preocupes, lo entiendo. —le sonrió Kakashi. —Hiciste bien de cualquier manera, pues nosotros también hemos descubierto cosas interesantes.
—¿Qué cosas Kakashi sensei? —preguntó Naruto.
—Por fin tenemos información más concreta sobre los que empezaron este lío.
—¿La organización flor de loto? —intuyó Sasuke.
—Ah… con que ya lo saben, las noticias parecen volar, pero sí, así es. La organización flor de loto, una organización que se cree que nació en la zona industrial de Amegakure, financiada por varios magnates que se cree provienen de distintas naciones.
—¿Algún sospechoso? —cuestionó el Uchiha de inmediato.
—Por el momento tenemos a varios. —respondió Shikamaru, sacando una carpeta con nombres y fotos.
Naruto abrió la carpeta y con su equipo atento en las hojas comenzaron a analizar a cada uno de los sospechosos.
—¿Por qué estos? —preguntó Sakura, sin poder reconocer alguno de los rostros en el informe que en su mayoría eran hombres de entre 25 a 40 años que tenían un porte fino y elegante, tenían toda la pinta de tener una buena condición económica.
— Porque estos sujetos se han visto envueltos en escándalos ya sea por malos negocios, situaciones ilegales e incluso de índole sexual. —explicó Shikamaru. —Pero dado los hechos sucedidos en el país del agua pudimos reducir la lista a las 10 primeras personas de la lista.
—¿Qué tienen ellos? —cuestionó Hinata.
Naruto por su parte, volvió a repasar a las 10 primeras personas de la lista.
— Verán, 8 de esos sujetos se dedican al sector energético. —respondió el enseriado Nara. —Los otros 2 se encuentran en el sector médico y farmacéutico.
El equipo, incluyendo a Sakura, comenzaron a sacar sus propias conclusiones.
—Y en base a lo que sucedió en el país del agua, las teorías de Sakura que por cierto nos compartió la Mizukage, así como las teorías de Orochimaru creemos que estos sujetos se aliaron para dominar todo el sector energético con la ayuda de armas que no estoy seguro si se podrían catalogar como biológicas.
—Por supuesto. —dijo Sakura. —Esos malditos bastardos, usando la medicina para esto….
—No sólo eso, también la lista se redujo a estos sujetos, porque al parecer todos ellos presentaron proyectos de su sector que fueron rechazados no tanto por la falta de presupuesto, sino por lo contaminantes que eran y la explotación que se haría a los recursos naturales. —contó Shikamaru.
—Así que supongo que se aliaron con el tiempo, buscaron donde realizar sus proyectos, pero les faltaba el combustible con el cual hacerlo funcionar. —teorizó Sasuke.
—Así es. Un combustible aparentemente inagotable y que pensaron que podían tomar de manera gratuita. —insinuó Kakashi.
—La flor de la pureza.
—Así es Sakura, sin embargo, lamentablemente estos sujetos aún se consideran como sospechosos, por lo tanto, en este momento tenemos a varios de nuestros shinobis en misiones de encubierto y espionaje para investigar cada una de sus actividades, tanto en las naciones a las que pertenecen estos hombres, como en Amegakure, en donde por cierto sigue sin llover.
—Son ellos. —concluyó Sakura. —No es por parte de Yuki, ella fue clara al decir que congelaría a todo el mundo, no creo que Amegakure sea una excepción.
—Entiendo, informaremos a nuestros espías la información que nos acaban de dar, para que sigan investigando y en todo caso para ver si logran dar con la base o lugar en donde están fabricando esas máquinas y armas.
—Entiendo, muchas gracias Kakashi sensei.
—Por cierto, Sakura…—interrumpió Tsunade. —Con respecto al otro tema… —insinuó mirándola fijamente. —hay otro problema.
—¿problema? ¿Qué problema?
Kakashi resopló.
—Sakura, verás, los kages de las demás naciones, exceptuando a Gaara, querían encerrarte por los supuestos delitos que cometiste en el país del agua.
—¡¿Qué?! —exclamó Naruto indignado.
Sasuke bramó en su interior, despotricando maldiciones.
—Por supuesto la decisión no fue unánime, por eso aún sigues libre, sin embargo, si era necesario que volvieras, digamos que por el momento ellos no te tienen confianza, así que lo mejor por ahora es que permanezcas en la aldea.
—¿Y… ahora qué? ¿qué pasará con los demás sitios que tienen problemas? —cuestionó el Uchiha molesto.
—Por el momento ya no irá a ningún lugar, y quiero que se tranquilicen con lo siguiente que les voy a decir, pero esas viejas, me refiero a las sacerdotisas. —explicó Kakashi. —Informaron a los demás kages sobre la situación del ente que vive dentro de ti, y no sólo eso, también les revelaron el cómo llegó ahí, lo sucedido contigo y cómo la has contenido.
Al escucharlo, Sakura sintió nuevamente un bajón en su estado de ánimo que se vio reflejado en la palidez de su piel.
—¡¿Qué? ¡¿Con qué derecho se ponen a hablar de cosas privadas de Sakura chan?!
—Calma Naruto. ¿Sakura te encuentras bien? —preguntó Kakashi preocupado.
—Sí, continué por favor. —pidió esta, tratando de calmar las luces que se alborotaron dentro de ella en varios colores.
Tanto Hinata como Naruto se pusieron a sus costados, por si en algún momento ella sufría algún tipo de colapso. Mientras que Kakashi se esperó unos segundos hasta que se cercioró que Sakura estuviera un poco mejor.
—Bien, no estoy muy seguro de que pretendan esas viejas, la sacerdotisa Akane no me quiso dar detalles al saber que estaba en contra de sus decisiones, pero, lo que Shikamaru, lady Tsunade y yo creemos es que de alguna forma intentarán sellar al ente que está dentro de ti, y también buscarán una forma para quitarte la flor de la pureza.
—Que estupidez. —volvió a bramar Sasuke.
—Sí, así es, sin embargo, Sakura…—habló Tsunade. —¿Sigues sin considerar la opción del sello?
—No creo que funcione Lady Tsunade. —disintió Sakura, bajando la cabeza y llevando su mano al pecho. —Creo que sólo la haremos enojar. —explicó preocupada. —Eso puede ser peligroso para nosotros y….
—No quieres que el espíritu de esa chica se quede lleno de odio —completó Kakashi, conociendo ya muy bien la situación.
Sakura sólo bajó más la cabeza.
—Haré todo lo posible por contenerla, y por ver si su alma puede ser salvada. —dijo con voz bajita, como si no quisiera que el ente que vivía dentro de ella se enterara. —perdónenme, sé que es un plan estúpido e igualmente peligroso.
—Sakura…
—Pero… ¡Kakashi sensei! ¡Naruto! ¡Sasuke-kun! ¡Shikamaru! ¡Hinata! ¡Lady Tsunade! —levantó la cabeza para ver a cada uno de los que estaban presentes. —quiero que sepan que tengo un límite.
—¿Un límite? —repitió Sasuke.
— Si veo que la situación se está tornando peligrosa, o si ustedes ven que este ente se apodera de mí, no duden en tratar lo del sello o incluso matarme, yo no dudaré y si estoy en mis facultades yo misma lo haré, preferiría morir a ser manipulada o lastimar a los que quiero.
—¡¿Qué?! ¡Por supuesto que no, Sakura-chan!
—Si no hay otro remedio tendré o tendrán que hacerlo, Naruto, por favor, se los pido…
Kakashi negó rotundamente con la cabeza, y a su mente llegaron los recuerdos de cuando su fallecida compañera le pidió acabar con ella. Por supuesto él no permitiría que esa historia se repitiera.
Con las negativas, Sakura se dirigió hacia quien creyó no dudaría en hacerlo si la situación lo requería.
—Por favor, Sasuke-kun.
—Yo… no…
Sasuke desvió su mirada, gruñendo con la ira contenida y sin darle una respuesta clara, ya que de cierto modo le daba la razón a su amiga, si ella perdía el control y la situación lo requería no habría de otra más que acabarla, tal y como Sakura alguna vez lo intentó cuando creyó que no habría remedio para él. La pregunta era, ¿tendría la determinación para hacerlo? Sakura había fallado en hacerlo en aquel momento.
Sólo Sasuke se quedó con esa duda ya que, por otro lado, tanto Shikamaru y Hinata también se negaron a la petición de la reliquia.
—No llegaremos a ese punto, Sakura, ten fe. —fue lo único que pudo decir Tsunade ante la insistencia de su alumna. —Por favor, confía en que todo saldrá bien, por el momento sólo concéntrate en seguir siendo tu misma, olvídate por un momento de ser la reliquia e incluso de esa chica Yuki. Mientras tanto, nosotros seguiremos con el plan inicial, buscar a los verdaderos criminales para ajusticiarlos por todos sus crímenes cometidos.
Sakura sólo bajó la cabeza rendida.
—Calma Sakura, Lady Tsunade tiene razón, por favor, confía en nosotros. —pidió Kakashi. — tú por lo pronto dedícate a descansar, puedes volver al hospital si quieres, trabajar en la clínica… como tú lo veas.
—De acuerdo Kakashi sensei. —aceptó exhausta.
—Kakashi sensei, ¿seguiremos custodiando a Sakura-chan? —preguntó Naruto.
—Dentro de la aldea no creo que sea necesario, pero si uno de ustedes puede acompañarla me sentiría tranquilo, claro que no sé cómo lo veas, Sakura.
—Me sentiría mejor si ellos me siguen vigilando. —respondió ella con una leve sonrisa.
—Entonces yo me encargaré de ello. —habló Sasuke dando un paso hacia adelante.
Todos, a excepción de Naruto y la sonrojada y cabizbaja Sakura, se mostraron sorprendidos ante semejante reacción.
—Lo haré a lo lejos. —explicó este gruñendo, pensando que se podrían malinterpretar sus "buenas intenciones".
—Y si quieres de cerca también. —rio Kakashi al notar una situación muy peculiar, pero no sólo él, su consejero y la ex Hokage también. —Bien, entonces Sasuke quedas como su principal custodio, Naruto y Hinata…
—¡¿Sí?! —respondieron estos al unísono.
—¿creen que puedan darles asilo a Sakura y Sasuke en su casa?
Los cuatro shinobis se sobresaltaron.
—Eh… ¿Kakashi sensei? Pero yo…
—Nada Sakura, me temo que tu departamento quedó inhabitable después de lo que esas viejas te pidieron hacer, además que creo que el casero estaba en plan de rentarlo a otra persona.
La de pelo rosa se sintió congelarse ante tan mala noticia.
—Sasuke, tú ni casa tienes, el departamento que tenías obviamente fue desalojado hace muchos años, las pocas cosas que dejaste están guardadas aquí en la torre Hokage, pero dudo que funcionen o la ropa te quede.
El Uchiha ni mencionó nada, había pasado tanto tiempo vagando que ya no tenía un lugar (refiriéndose a una casa) a donde llegar y la verdad no consideró necesario tenerla si solamente eran él y sólo él en su solitaria vida.
—¡Ah! No se preocupe Kakashi sensei, nosotros les daremos asilo. —reaccionó Naruto tan energético como siempre, abrazándose a su esposa. —¡¿No es así, Hinata?!
—Por supuesto, son bienvenidos. —aceptó esta nerviosa.
—Ah ¿sí?... ¿No les estorbamos? —insinuó Sasuke con mala cara, al presentir que les quitarían privacidad a esos dos.
Naruto y Hinata sudaron en frio.
—¡Por supuesto que no! ¡dattebayo! —rio el rubio fingidamente. —Hay un tiempo para todo, encontraremos el nuestro, cuando ustedes no estén por supuesto. ¡¿Verdad, Hinata?!
Su esposa sólo pudo enrojecer ante semejante insinuación.
—Naruto ya deja de hablar de más. —reprendió Sakura con voz bajita y sonrojada. —Pequeño tarado.
—Bien pues no se diga más. —sonrió Kakashi al notar que de un modo u otra algunas cosas seguían estando igual. —Equipo 7.2 seguirán a cargo de custodiar a Sakura. Sasuke, tú serás su principal custodio y los Uzumaki les darán asilo.
—¡Entendido Kakashi sensei! —acataron el trío de energéticos shinobis, mientras que Sasuke sólo respondió con su amargado "ah".
—Bien, entonces pueden retirarse a descansar.
Dándose por terminada la reunión y habiéndose dicho y aclarado todo, el cuarteto de shinobis se retiró de la oficina dejando a los kages y consejero nuevamente solos, los cuales comenzaron a comentar sobre ciertos detalles que notaron con esos cuatro.
—Ya se enamoró ¿verdad? —resopló Tsunade. —El chico Uchiha.
—¡Ah! ¿También lo notaste? —se burló Kakashi.
—Ver para creer, pensé que Sasuke era asexual. —opinó Shikamaru. —¿Debería entonces creer en los milagros?
—Ni tanto, algo me dice que Sakura es la que no quiere ahora nada con él. —dijo la ex Hokage complacida. —Lo que me parece perfecto, él no le conviene y ella aún debe superar muchas cosas.
—Que ruda.
—Sólo la cruda verdad, Kakashi… bien, en cuanto a los otros dos….
—Sí, lo sé, mandaré a Hinata a hacerse estudios, antes de asignarla a una misión. —completó el kage. — si esos dos siguen así, pronto habrá otro Naruto hartando a todos.
—O una Hinata. —opinó Shikamaru con una sonrisita.
—Preferible, por favor. —rio Kakashi.
—¡Ah! Que tontos. —rio Tsunade. —En fin, creo que me siento un poco más en paz, no sé ustedes.
—Lo mismo. —dijo Shikamaru, más tranquilo consigo mismo, pero con ciertas dudas aun rondando por su mente.
—Igualmente. —concordó Kakashi. —En fin, sigamos trabajando, aún hay muchas cosas qué hacer e investigar.
Dicho aquello, tanto el Hokage como Shikamaru se concentraron en los pendientes que aún tenían, en tanto Tsunade, ella se retiró de la oficina.
.
.
.
Casa Uzumaki.
—Por favor, pasen, pasen…—invitó Hinata, dándole el paso a Sakura y Sasuke para que entraran en la casa, los cuales agradecidos entraron sin más llevando unas bolsas de plástico llenas de víveres.
Después de que ellos entraron, Hinata y Naruto le siguieron, siendo este último el que cargaba más bolsas con víveres que posteriormente fueron acomodados en el refrigerador o gavetas de la cocina.
Luego, el cuarteto se organizó para realizar una cena de "auto bienvenida" y pese a la amargura de Sasuke se integró bien en las tareas que le correspondieron.
Finalmente llegó el momento de que se instalaran en el lugar donde dormirían los invitados. Sasuke y Sakura acordaron quedarse en la misma habitación, a petición de la última que sentía que en cualquier momento ese alguien que estaba dentro de ella podría apoderarse de su cuerpo y hacerla salir de la habitación para hacer alguna atrocidad.
El Uchiha ni siquiera replicó y aceptó, después de todo ya lo habían hecho anteriormente y por supuesto era más que nada para evitar a toda costa que ella volviera a sufrir de nuevo por causa de esa tipa, así que la acompañaría de día y de noche si era necesario.
—Uff… Naruto y Hinata me prestaron algo de su ropa para dormir, ya no soportaba estar con esa ropa de Orochimaru. —comentó Sakura echándose sobre la cama.
Sasuke, quien se encontraba a unos cuantos pasos de ella tendiendo el futón con lentitud, desvió su mirada para constatar lo que Sakura había dicho, notando que vestía una playera que pertenecía a la mujer de Naruto, así como unos pantaloncillos algo largos y anchos pero que había ajustado fuertemente a su cintura con una cintilla, era una prenda de hombre evidentemente. Supuso que las prendas inferiores de la mujer de Naruto eran demasiado pequeñas para el tipo de cuerpo que tenía Sakura, pensamiento que lo hizo apenarse por dentro, aunque en el exterior seguía viéndose totalmente indiferente.
—¿Sucede algo? —preguntó Sakura al momento que percibió que su "amigo" no le quitaba la mirada de encima, y que para su pesar provocó que la luz dentro de ella se volviera a mostrar con una coloración rosa muy tenue.
—Nada. —respondió Sasuke, volviendo a su labor de tender el futón.
Sakura al ver que tenía un poco de problemas, por la falta obviamente de su brazo, se levantó de la cama y se puso a ayudarlo. Sasuke no mencionó nada, y se dejó ayudar, viéndola de vez en cuando, y notando por su puesto que ella hacía todo lo posible para evadir su mirada, en especial con la cercanía que ambos tenían.
—Mañana iré a comprar algo de ropa. —avisó Sakura mientras alisaba las mantas, sin levantar la mirada. —Hinata me acompañará y le avisaré a Ino también, luego creo que pasaré a la clínica, puedes alcanzarme ahí si quieres.
—No, has tus cosas, yo estaré vigilándote a lo lejos, ni siquiera me notarás.
—Mmm… de acuerdo.
—¿Irás a la clínica a trabajar?
—No precisamente… sólo quiero conocer los resultados de unos estudios que dejé pendientes, ver a algunos niños y también quisiera hablar con uno de los médicos que los atienden para…bueno…—trató de explicar, retirándose del futón una vez que quedó listo.
—Buscarás tratamiento. —dedujo Sasuke, listo para acostarse.
—Umm, sí… —Sakura se acostó en la cama, apagando la luz de la habitación, la cual sólo quedó iluminada por la luz que se filtraba en el exterior. —Eventualmente todo el mundo, o más bien mis allegados sabrán lo que pasó, ya sea porque yo se los dije o porque lo escucharon de otra persona. Debo estar preparada mentalmente para cuando pase, y más que nada debo encontrar las fuerzas para seguir mentalizándome con la idea de que lo que pasó no fue mi culpa, porque así fue, y también para no sentirme tan avergonzada como a veces suelo sentirme. —suspiró.
—No te preocupes, te entiendo, sé que lo harás bien.
—Pero además…—continuó Sakura sin apartar su vista del techo. —No sólo quiero acudir al médico por mí, también quisiera saber si… hay alguna esperanza…
Sasuke con sólo escucharla podía intuir lo que Sakura pensaba. Ella buscaría algún tipo de consejo con esos médicos para intentar calmar de alguna forma la ira de la tal Yuki, pero podía ser un camino difícil, él mismo lo había experimentado en el pasado cuando no escuchó a nadie y se hundió en la oscuridad.
—¿Ya no lo has escuchado?
Pero la chica que reposaba en la cama no respondió.
—¿Sakura?
El Uchiha rápidamente se salió del futón y se acercó a la cama de su amiga, viendo asustado que ella estaba en un estado de trance, con sus ojos abiertos, pero sin tener esa luz que él tanto admiraba.
—¿Sakura? ¿Me escuchas?
La estrujó sutilmente por el hombro en un intento por despertarla, pero Sakura no reaccionó, así que aguardó unos segundos que le parecieron horas, esperando a que ella reaccionara por su cuenta o si no, no estaba seguro de qué iba a hacer; sin embargo, antes de que llegara al limite de su paciencia, Sakura reaccionó dando varios parpadeos, aunque luego se revolvió en la cama al ver la silueta de un hombre sentado en su cama.
—Calma… soy yo… —aclaró Sasuke encendiendo la lamparilla para que lo viera.
—Ush… shannaro… —refunfuñó molesta, llevando sus manos a las mejillas las cuales golpeó un par de veces para despertar bien.
—Tranquila, estoy aquí recuerda…
Sakura suspiró exhausta
—Gracias. —musitó.
—¿La volviste a ver? —concluyó rápidamente el Uchiha al ver su estado de ánimo. —¿Qué te dijo? ¿Te volvió a amenazar?
Sakura apretó las sábanas de la cama que la cobijaban y negó con la cabeza.
—Al parecer no pretende nada, eso creo, no por el momento, sólo me dijo:
No importa si unos cuantos te escuchan, lo importante es que todos te escuchen, y… ¿adivina qué? No lo harán.
Eventualmente te darás cuenta de ello y cuando eso pase yo… seré libre.
Disfruta mientras de tu vida Sakura, porque un día será mía.
Con los melancólicos y preocupados ojos de Sakura mirándolo, el desconcertado y frustrado Sasuke frunció el entrecejo sin saber cómo interpretar esas palabras que a su perspectiva eran claramente una amenaza que atentaba contra la vida de su amiga
Ahora que ya se conocía el secreto de Sakura y la existencia de Yuki en ella, era claro para el Uchiha que ese ente ya no podía regocijarse con el dolor de su amiga; más eso no la descartaba de que estuviera planeando algo peor a lo que ya le hacía.
¿Qué era lo que tramaba esa tipa?
Continuará.
N/A: bien final del capítulo, por el momento no sé me ocurre que decir más que manden su teorías acerca de lo que creen que pasará. Por cierto, que hice unas imágenes de cómo me imagino a Yuki, disponibles en wattpad y mi FB
Como spoiler, en el próximo capítulo será un tipo especial (algo que suelo hacer en mis fics) algo más ameno y tranquilo para dar un respiro a tanta tragedia. ¿quieren saber de qué se tratará? Entonces Keep Reading…
Spoiler: Sakura recibirá un nuevo sobre con semillas para plantar. ¿Quién es el sujeto que le da las semillas? Lo sabrán en el próximo capítulo.
Agradecimientos especiales a: Susana, Blossomarie, Sarib, Sara1407, Maryeli, Margaces, Belen, y los guest de fanfiction, también a todos los lectores de wattpad y a quienes me escriben por Facebook.
06 de noviembre de 2022
