Beyblade no es mío, no me pertenecen sus hermosos y divinos personajes y no pienso, hacer un negocio con esta historia, ni mucho menos recibir dinero por ella, solo deseo ofrecer algo de entretenimiento a Tods aquells lectors y tal vez recibir uno k otro correo, ok? Ya explicado todo, pasemos a la historia.
Pd. Como siempre se me olvida escribir esto, lo copiaré y pegaré para k no haya malos entendidos.
SIMBOLOGÍA
--'pensamientos'--
-- diálogos--
Onomatopeyas
'sueños'
Capitulo VII
--'Que más puedo pedirte, vida, si ya todo me lo has concedido.
Que más puedo desear, si yo ya estoy completo.
Solo puedo agradecerte, por escuchar mis suplicas, por atender a mis llamados, y entregármelo todo con forma de ser humano'--
Siempre se ha sabido que el tiempo es un aliado muy poderoso, en ocasiones causa estragos en la gente, en otras, te sonríe. Cual niño pequeño, el tiempo parece no parar nunca, y corre veloz, día tras día, hora tras hora, y en un abrir y cerrar de ojos, nueve años de tu vida han trascurrido dentro de un orfanato.
Cuantos cambios no había presenciado el pequeño chinito, ahora de 16 años, todo un adolescente, tan normal, tan feliz. Su rostro era ya casi adulto, su largo cabello negro era atado por una trenza, su piel tersa, rosada, siempre suave, y su magnifica sonrisa adornando su rostro. Cualquiera diría que era un jovencito alegre que pasaba por aquellos parajes, nadie nunca imaginaría la tristeza que su corazón aun guardaba, celosamente oculta bajo esos bellísimos ojos color ámbar.
Ray dirigió su vista a su amigo, lejos, solo, siempre callado, él también había cambiado mucho, su cuerpo ahora no se parecía a nada al del niño serio y pálido que había entrado hacía tanto tiempo a aquel horrible lugar, no, ahora era fuerte, atlético, alto, ahora tenía 17 años, y la mirada rojiza no había cambiado en nada, era fría, dura e impenetrable, excepto para Ray.
--¿que me ves? -- preguntó el chico ruso acercándose a su amigo de negro cabello
-- nada, solo… -- sonrió -- recordaba -- soltando un suspiro, bajando su rostro
--¿alguien volvió a molestarte? -- indagó, Kai odiaba ver al chinito triste, desde aquella noche en el árbol, cuando cayó en cuenta de que él no era nadie para hacer sufrir a un niño que solo quería su amistad, se juró que lo cuidaría de todos y de todo, quizá para limpiar sus culpas, pero el tiempo se encargó de formar un hermoso lazo y pronto todo lo que hacía por Ray era insuficiente, le agradaba cuidarlo, protegerlo y le agradaba mucho. Y es que ¿como era posible no querer al chinito?
-- no, no, no es eso, ya te dije, solo recordaba -- y sonrió de nueve cuenta -- además, nadie se atrevería a molestarme -- rió por lo bajo
-- mas les vale -- sonrió también
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Que difícil es la vida, sobretodo cuando te ocultas de algo, cuando sabes que algo no debió de ocurrir, cuando has hecho algo de lo que debes de arrepentirte, más la avaricia siempre es mas grande, mas fuerte y te ciega y crees que lo que lo que sientes pronto pasará por que fue lo correcto, y te engañas y te sientes feliz de día y te corrompes, y muere dentro de ti lo más preciando que tenemos, nuestra alma, nuestro corazón, la nobleza, pero eso… eso no te importa ya, y todo lo malo que haces te resulta agradable, ya no eres capaz de distinguir lo bueno de lo malo, ahora ya estas podrido como la manzana que tiene dentro un asqueroso gusano.
-- estúpido mocoso -- repetía una y otra vez el hombre oculto tras las sombras -- si te sigues negando a firmar… voy a tener que -- y riendo calló un momento, su sonoras carcajadas creaban un eco casi demoníaco en aquella habitación prácticamente vacía -- tendré que "obligarte".
Sabía que ya casi no tenía tiempo, solo tenía un año para lograr que el chiquillo que habría creído débil, firmase un documento esencial para que su plan se ejecutara con éxito. Pero el niño ya había crecido, era casi un adulto y pronto podría hacerse cargo de todo, después de todo ese era su legado, su herencia y estaba en todo su derecho, pero entonces, ¿En donde quedaba él? ¿Que acaso nunca fue suficiente lo que hizo por esa familia? ¿No era lógico que tratara de proteger sus propios intereses? ¡Claro que si! Estaba en su derecho y no dudaría en usarlo.
Caminó lentamente por la oscura habitación hasta llegar a la ventana, tan limpia, tan transparente tan diferente a su mirar; allí, abajo, cientos de personas caminaban apresurados, algunos en bicicletas, otros en auto y miles por las banquetas, tan insignificantes. Sonrió, si todo salía bien, pronto ya no sería uno de ellos, sería su líder, ¡su Dios!
--Y así será -- se dijo y regresó al único mueble de la habitación, un escritorio. Tenía que trabajar.
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'--¿cómo amaneciste hoy mi gatito?--'
La oscuridad reinaba en aquel recinto, más no así el silencio, algunas lágrimas y sollozos hacían aparición como todas las noches en aquel lugar.
'-- muy bien mami -- dijo con una alegría falsa y tristeza en sus ojos --¿Hoy nos encerraremos de nuevo?-- preguntó inocente el pequeñuelo.'
Todos parecían dormir tranquilos, con sueños inocentes y quizá felices, propios de chicos de su edad, sin embargo el dulce chino de largos cabellos jamás había conocido un sueño tranquilo, su destrozada mente lo transportaba noche tras noche a escenarios horrorosos e inimaginables.
'--Creo que si, porque no te sientas a almorzar... -- el miedo se adueñó de sus hermosos ojos, y el pánico se apoderó de su cuerpo entero.
-- ¿Mami?... ¿que pasa?...-- cuestionaba preocupado el niño de tan solo 3 años, pues su madre palideció de pronto y miraba un punto fijo en algún lugar lejano.'
Su suave voz se escuchó en aquel lugar, y el silencio roto desde hacía muchas horas, creó un eco que solo un par de oídos pudieron captar. Rápidamente sus rojizas orbes fueron descubiertas, e inevitablemente su rostro giró hacia su amigo.
'--... CORRE ¡!—gritó la madre a su hijo, al tiempo que lo tomaba de su manita y lo jalaba lejos de aquel lugar – CORRE ¡! – repitió su madre – sal por la ventana, pide ayuda y sálvate ¡! – decía desesperada, al ver que a su hogar comenzaban a salirle llamas de fuego – Te quiero mucho hijo mío, nunca lo olvides ¡!'- se despidió la madre por la ventana, al tiempo que las abrasadoras llamas consumían todo a su paso…'
--¿Mamá? -- decía entre sollozos el chino -- no… mamá… por favor no… no-- y las enormes lágrimas corrían con libertad por sus mejillas, mientras se movía sin control entre las sábanas.
--¿Ray? -- llamó el ruso, sabiendo de antemano de lo que se trataba, noche tras noche, siempre era lo mismo, las terribles pesadillas aquejaban a su amigo, sin que él pudiera protegerlo, y lo que era peor, ignoraba de lo que se trataban; siempre que le preguntaba a su amigo, este se negaba a comentar algo, solo decía algo parecido a "hoy no por favor".
--¡No!… No… no -- repetía un sin fin de veces de manera lastimera, suplicando por su ayuda.
Kai salió de su cama, como todas las noches y tomando por los hombros al chino, para mantenerlo quieto, le llamó -- ¡Ray, despierta Ray, despierta -- sacudiéndolo ligeramente.
--¡NO! -- gritó el oji-ambarino, cubriendo con sus manos su boca, lo último que quería era despertar a todos y que lo castigasen por eso, sin embargo, sintió como unos fuertes brazos le protegían de cualquier mal, abrazándolo con ternura, él sabía que era Kai, siempre era él, consolándolo, cuidándolo, y se lo agradecía infinitamente.
¿Cuántas noches no hubo deseado un amigo que le regalara ese abrazo después de una pesadilla? ¿En cuantas ocasiones no deseó una palabra de aliento cuando estaba deprimido? Y ahora lo tenía todo.
--Fue horrible -- sollozó abrazándose más al cuerpo de su amigo
--tranquilo, ya pasó… --dijo tratando de calmarlo --… ya pasó
Ray solo asintió en silencio, a pesar de sus 16 años, en ocasiones aún se comportaba como un niño pequeño, y aferrándose más a ese anhelado abrazo, cerró sus dorados ojos.
--¿Quieres hablar sobre eso? -- preguntó el ruso más por costumbre que por que pensara que pudiera pasar
--no… si, si -- contestó dudoso el minino
--¿Seguro? -- preguntó lo más normal que pudo, pues la alegría de saberse su confidente, lo envolvía y se apoderaba de él, al igual que la sorpresa de aquella respuesta.
El chino simplemente asintió en silencio, mientras deshacía el calido abrazo del ruso bicolor -- pero en la mañana
Kai asintió, Ray jamás rompía una promesa, y sabía lo difícil e importante que era un paso así.
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To Be Continue (continuará)
Ora si me puse las pilas, y ya terminé el capitulo 7 de esta historia, que como ven, está tomando un rumbo distinto, ahora ya son grandes y como me lo pidieron mucho, tal vez hasta algo mas k amigos, son Best friends , y dependiendo de los correos, en petición de que formalice la pareja, serán los capítulos siguientes, así que ya saben, si quieren Romance, solo pidanlo! No es genial?
Muchas gracias a las lectoras & escritoras, que hacen el favor de leer este humilde Fic, saben que gracias a ustedes estamos aquí, gracias a sus correos y a sus sugerencias, pero en ese capitulo, un agradecimiento especial a mi Hermanita Asia Black M. y a una grande de los Fic's Nekot Thank's for your's Mails
En verdad muchas gracias, por que a pesar de que son pocos, son de mucha ayuda para mi autoestima y ego, ya sabe lo que dicen, Mas vale calidad que cantidad!
Bueno yo me despido, que la pasen muy bien y Feliz regreso a clases! Tan lo menos para mi. Jijijij
See you later!
