ELLOS FUERON EL MOTIVO…

Esperanza de vida

(life expectancy)

Capitulo XVII

Todo había terminado, por fin me había decidido a cruzar aquella puerta. Desde ese momento, planeaba ser independiente a las decisiones ajenas impuestas sobre mí, ya no ser más "la niña invisible" que servia de burla y regocijo para cualquiera que pensara humillarla. Creo que fue un gran paso, al fin me había atrevido a hacer lo que siempre había temido; dejar mi hogar. Entonces miraría la luz, después de 22 largos años de sueño y tempestad. Ninitsu, por fin estabas cuerda en tus decisiones. Debías celebrarlo, aunque no sintieras motivos de felicidad…

Después de haber cruzado aquel umbral, ya nada más importaba, ¿cierto? De todas maneras estabas muriendo, tu cuerpo, al que creíste haber apartado del dolor físico; te reclamaba a gritos y sollozos que pararas de caminar, que te detuvieras y pensaras mejor lo que estabas a punto de hacer… Estabas herida! Desangrándote! Al menos debías esperar un poco antes de marcharte totalmente, te faltaba consideración contigo misma, carecías de afecto por tu propia persona. Como era posible eso?

E inevitablemente, tu físico severamente dañado cobro cuentas contigo…

Ya no pudiste continuar, en esos momentos; que habías avanzado cuando mucho mas de diez metros lejos de la puerta, tu cuerpo resintió tanto daño y te hizo caer de frente al suelo, estabas deplorable, tu misma lo sabias. Pero que mas se podía hacer, ¿no? Sencillamente todo estaba terminando allí, en ese lugar, en ese momento, ya no había esperanzas de vida. Por fin podrías ser feliz? Si así era, entonces por que sentías ese miedo interior? Por que no querías cerrar los ojos? A que le temías? Suspiraste con coraje hacia tu propio ser, y apretaste tus manos frente a ti, descargabas tus débiles fuerzas ensangrentando la arena, con tus manchadas manos. Pero aun así, ya no lamentabas haber vivido hasta ese momento. En cierto punto, estaba orgullosa, de esos pocos logros que tuve…

Sin percatarme que dos personas me miraban con agradecimiento y pena, continué maldiciendo mi suerte al viento, estaba desquitando toda una vida de frustración en aquellos débiles puñetazos que vanamente descargaba contra el suelo. Nunca pensé que alguien pudiera acudir a mi "auxilio", yo sabía que necesitaba de ese alguien, pero también sabía; que nunca iría nadie por mí. Con el pasar de los minutos, mi cuerpo fue pidiendo calma, ya no podía mover si quiera mis manos, me sentía totalmente entumecida, y un crucial frió me estaba invadiendo. Ese era el abrazo de la muerte? Ninitsu estaba siendo victima de aquellos brazos? Pues ya no se movía en lo absoluto, solo el vaivén de su pecho al respirar indicaba lo contrario, por muy débil que fuera. Yo misma estaba escribiendo mi epitafio…

-Permítenos ayudarte, por favor –escuche, entre arrulladores brotes de silencio…

-Vamos, Ninitsu, despierta. No te rindas… -volví a escuchar, solo que esta vez, la voz sonó un poco mas pasiva

Aunque mi respuesta no pasó de un doloroso quejido, yo quería hablar, quería decirles tantas cosas a ambos, quería que me escucharan y que entendieran mis razones por marcharme. Es verdad, no los conocía aun, pero necesitaba decir tantas palabras, antes de…morir. La desesperación se estaba apoderando de mis sentidos, sentía la angustiosa necesidad de escucharles claramente, si, alguna vez desee morir, pero rápidamente taché la idea, al reconocer que por algún motivo me encontraba en esta existencia. Soy difícil, desde siempre lo he sabido, pero también he querido aprender a vivir, aprendiendo a ignorar mis molestos problemas; sociales y sentimentales. El que alguna vez halla querido atentar en contra de mi hermana, no justifica los malos tratos que recibí desde antes de aquel crimen. Ninguna de ellas goza de inocencia, eso lo puedo asegurar apostando mi vida…

Rasgue mi destino, para comenzar uno nuevo, guarde mis recuerdos y empecé desde cero. De todas maneras; que mas podía exigir? Si desde siempre he sido conformista, por que debía renegar de la nueva esperanza de vida, que posiblemente vendría a mi? Extenuando pensamientos adyacentes al problema que en ese momento sufría, decidí solamente fijar mis pensamientos en aquellos dos, a los que posiblemente si les había parecido…importante. Moví mis ojos, hasta uno de ellos y traté de sonreír. Aun estaba algo aturdida por aquella irrelevante caída de momentos atrás, o tal vez era que realmente mi estado era serio, solo que quería ignorarlo.

Cierto que cuando uno se propone ser torpe, lo logra…

Uno de ellos dos me tomo entre brazos y volteo mi cuerpo, dejándome boca arriba, admito que eso le hizo bien a mi salud, al menos pude respirar con un poco mas de libertad. Entonces pude apreciarlos con mayor resolución, eran dos seres anatómicamente bien parecidos, pero mas allá de eso, sus ojos transmitían tanta melancolía y tristeza que no supe manejar aquel encuentro ocular, rápidamente baje los ojos hacia algún lugar fijo del suelo y me dispuse solamente a escucharlos, tratando de responder sus preguntas…

-Te agradecemos de corazón, lo que tu y tus compañeras hicieron por nosotros, pero ahora permítenos ayudarte. Por favor, amazona –susurro quien me tenía en brazos- Así no conseguirá llegar a ningún lado.

-En serio…solo desean hacerlo por…pagar cuentas?...O por que desean ayudarme? –logre articular. El otro me miro angustiado- Díganme sus nombres, por favor…

-Saga…-Respondió quien me tenia en brazos

-Kanon –en seguida contesto el otro- Permítame decirle; que no planeamos ayudarla solo por pagar cuentas, si no por que lo deseamos de corazón. Pero solo podremos hacerlo, si nos lo permite, señorita –Sonrió débilmente

Entonces, ¿desde siempre estuve equivocada? Si hay un "alguien" para quien lo pide y lo necesita, lo comprendí ese mismo día. Pensé que era un bello momento, por fin se hacia realidad, tantos años de espera, y alguien al fin se animaba, se preocupaba por mi. Dibujé un poco de felicidad en mi entorno y suspiré asintiendo. No quería que me ayudaran, lo deseaba con todo el corazón. Y desde entonces he aprendido a callar tantos resentimientos contra la vida. Pase lo que pase, siempre pensare en ese momento, y mis penas se irán por mas insistentes que sean. Los miré a ambos y sonreí tratando de ponerme de pie.

-Claro…por favor…ayúdenme chicos…

Por: Ninitsu

La preocupación no tenia que invadirnos, teníamos que estar 100 conscientes y atentas si queríamos que todo saliera bien… Demonios! Red estaba cada vez peor, se podría jurar que estaba inmovible, todas teníamos miedo de lastimarla mas, incluso llegue a pensar que ya había muerto. Siempre estuvo allí, tendida en las gradas, arropada con las capas de todas, aparentemente el frió que sentía era horrendo. Pero después de la pelea que tuvo Laina, dejo de hacer todo tipo de movimiento que nos daba una esperanza más. Melanie y Yarell no se despegaban de ella, siempre estuvieron a su lado, para motivarla y tratar de darle fuerzas, mientras que yo no dejaba de caminar de un lado a otro…

-Por que no nos vamos ya? –grite, saliendo de mis cabales

-Primero tenemos que hallar la manera de moverla sin lastimarla mas! Por favor Eryosdil, calmate un poco, comienzas a ponerme nerviosa –Contesto Sharyoli con la voz un poco quebrada.

-Por favor, por favor, tienen que guardar la calma –interrumpió Milo- Los gemelos ya fueron por Ninitsu, La amazona de Aries y el caballero de Acuario fueron por Ligabiss, solo tienen que esperar un poco mas…

-Claro! Y que se muera, ¿no? – grito enfadado el caballero de Cáncer. Realmente lo siento al no mencionar sus nombres, pero no me aprendí los de todos.

-Nadie mas va a morir! –Chilló Melanie- No seria justo…

-Jajajajaja, que graciosa es la impaciencia humana –intervino Zeus-Vamos! No se hagan complicado el momento, solo pidanme que yo los ayude a marcharse, y lo haré.

Quien lo diría? El ser más ególatra, imposible, arrogante y pedante del universo, nos estaba ofreciendo ayuda. Debíamos confiar en el? Debíamos depositar nuestra integridad en sus ideas? Solamente una mirada a todos fue suficiente para hablar, en esas gradas estaban demasiadas almas cansadas, tantos ojos deseosos de sueño. Podíamos pedirle la misma ayuda a Meludi, pero ella se encontraba totalmente nerviosa, en esos momentos no confiaba en ella misma, se sentía temerosa de cometer un error y llevarnos a otro sitio. Entonces la misma idea recayó sobre Mu, pero fue algo imposible de lograr. Cuando el Lemuriano intentó tele transportarse; simplemente no pudo, no podía ni siquiera encender su cosmo. Al parecer Zeus no permitía que los caballeros prendieran sus energías, los tenia a todos reprimidos…

Voltee a mirar a los ojos de cada uno y avancé hasta la ultima grada, allí mire a Zeus y aspire todo el aire que mis pulmones dejaran entrar, si quería que Zeus nos cumpliera ese único favor, tenia que buscar una "bonita" manera de pedírselo y dejar mis impulsos a un lado, después de todo, a la fuerza tenia que guardarle un gran respeto, por ser el mayor de todos los dioses…

-Señor, le agradeceríamos si nos pudiera ayudar a regresar al Santuario de nuestra Diosa Athena, se lo pedimos en manera de favor –pronuncie con voz suplicante, Zeus se llevo una mano a la barbilla y asintió

-Claro! Por que no? Han peleado excelente amazonas! Como dije anteriormente, me dejaron totalmente satisfecho! Por eso, ahora los devolveré a todos a la tierra, inclusive, les obsequiare una sorpresa maravillosa a todas ustedes

-Le agradezco en nombre de todos nosotros… -respondí inmediatamente

La risa de Zeus retumbó por todo el estadio, fue algo escalofriante y a mi parecer: ridículo, que quería probar con eso? Ya todos sabemos que el es Máximo dios de todos! Que en pocas palabras; es el "mejor", entonces que ganaba, presumiéndonoslo, una y otra vez? Aparentemente nada. Suspire y fingí una sonrisa, a la vez que aun seguía mirándolo. Un aura blanca me cubrió, debo admitir que por momentos me asuste, eso era nuevo para mí. Traté de ver a través de los orificios de aquel cosmo, pero el pánico tomo control sobre mí, todo era totalmente oscuro. Cerré los ojos y me lleve ambas manos a la boca, estaba comenzando a marearme, pero mas que nada, yo sabia que tenia que guardar compostura y tenia que tratar de confiar en aquel dios.

Me quedé así, por más de 2 segundos. Entonces fue cuando aparecimos nuevamente en el Santuario, en las escaleras del templo de Aries, yo estaba boca abajo, tirada en el suelo. Sacudí la cabeza enérgicamente y me puse con habilidad de pie, recordé que las cosas no estaban muy bien, por lo que no debíamos perder tiempo. Regados, por toda las escaleras, estaban los demás, cada quien en algún sitio, cerca o lejos de mi, no tenia importancia, solamente quería hallar la manera de hacernos todo mas fácil, Red aun estaba muriendo, y a mi parecer, ella es quien se debía llevar toda la atención posible. Miré a todos lados y traté de encontrarla, pero no había rastro de ella, ni de Melanie. Que les pudo haber pasado? Como habían desaparecido así? Seguramente esa era la "sorpresa" a la que Zeus se refirió antes de llevarnos a la tierra…

-Están todos bien? –preguntó Yarell, subiendo al escalón mas alto

-Inmediatamente buscamos por todos lados, pero Ninitsu, Red, Melanie, Aeris ni Ligabiss aparecen! –Contestó Meludi, con voz preocupada.- Al parecer, ni siquiera están en la tierra!

-Y tampoco los gemelos están en el Santuario, que habrá sido de todos ellos?–Suspiro Laina

-Aparentemente Zeus nos había traído a todos a la tierra, que ganaría con no traerlos a ellos? –pregunto preocupado, el caballero de Leo

-Diversión, al vernos preocupados –contesté, cruzándome de brazos

Nuevamente iba a continuar hablando, estaba tan confundida y enojada, como era posible que ellos no estuvieran entre nosotros? Si Zeus quería jugar con todos los que servimos al bien de su hija, por que no nos dejo varados para siempre en el Olimpo? En ese momento mi cabeza no pensaba en otra cosa que en maldiciones y reparticiones de golpes, realmente estaba ofuscada! Pero algo calmo todo el coraje y la represión que sentía dentro de mí, un cosmo, divinamente hermoso, calido y reconfortante, se anuncio en la entrada del primer templo. Sabía inmediatamente de quien se trataba, nadie mas en la tierra podía hacerte cambiar tan lindamente de ánimo, solamente nuestra Divinidad Athena. Todos los presentes en ese momento, hicimos una respetuosa reverencia y recargamos la rodilla en el suelo, era una manera de respeto, que se muestra frente a tu Dios protegido.

Athena se acercó más a nosotros. A pesar de tanto trabajo por nuestra parte…aun se miraba triste, sus ojos estaban vidriosos y sostenía su Niké con debilidad. Verla en ese ánimo, me derrumbaba totalmente, a pesar de ser una diosa, era una niña también, de no mas de 14 años. Toda mi vida he entrenado para servir a esa niña, desde pequeña me han metido en la cabeza, que solamente existo para proteger a la Diosa de la tierra, entonces cuando sucedió la pelea de Athena contra el dios de los muertos, con angustia todas esperamos las noticias, teníamos tantas esperanzas de que ella resultara victoriosa y que pudiera gobernar nuevamente la tierra, que durante esa noche de suspenso; todas nos reunimos y espiritualmente apoyamos el cansado cosmo de Athena. A mi se me enseño a serle leal, y a nunca abandonarla, por lo que también yo daría mi vida por ella…

-Así no ha sido, mis queridos caballeros –habló delicadamente, mirándonos con una débil sonrisa- Mi padre a cumplido lo que dijo, el los trajo a todos a la tierra, sin embargo, no a todos los trajo a las entradas del santuario. Red y Ninitsu, en estos momentos están en el hospital más cercano al santuario, a su lado, se encuentran los caballeros de Géminis y Melanie.

-Pero…y donde se encuentran…lo cuerpos de Aeris y Ligabiss, princesa? –preguntó Teris, con algo de miedo en la voz

-Los cuerpos… -repitió Athena, llevándose una mano a la boca- No puede ser… ellas…Ustedes prometieron volver…todas- sollozó e inevitablemente se inclinó hacia al frente, solamente apoyándose en su báculo- No me pueden hacer esto.

-Athena…Lo lamentamos tanto –susurré

Sabia que demasiadas lágrimas serian derramadas por su ausencia, ellas permanecían dentro de cada una de nosotras, muy en el fondo de nuestro corazón. Como no se les podría extrañar? Ellas eran nuestras amigas, esas dos mujeres que no debieron morir, desde que las conocí, fueron buenas personas, aunque muy aledañas a todas nosotras. Posiblemente estarían soñando, o recordando eternamente lo que vivieron a nuestro lado, mientras las sonrisas de sus rostros eran permanentes, no se podía pensar otra cosa, que imaginarlas paseando por algún hermoso paraíso, mientras disfrutaban con gratitud el sonido del viento…

Yo, ni nadie; queríamos que se sintieran solas para siempre. En cambio, si queríamos que supieran que por siempre estaríamos con ellas, a su lado. Aeris siempre había sido una excelente amazona, pero sobre todo, muy buena amiga, de Ligabiss solo sabia, que su manera de ser, era por su estilo de vida anterior, pero aun así, podrías confiar plenamente en ella…

Las lágrimas se apoderaron de mis sentidos, puse mis manos sobre mi rostro y me incliné en el suelo, no lloraba plenamente, si no, con débiles sollozos. Habíamos hecho tanto, y perdimos por ello a dos compañeras, cual fue nuestro descuido? Por que Zeus había tenido que tomar esas decisiones? Solamente me sentía mas hundida en la desesperación…

-Señora Athena… Pero su padre nos hablo de una posible sorpresa, no hay que dar todo por perdido, posiblemente…

-Tienes razón, Teris, la esperanza nunca se pierde, encontrare la manera de tenerlas nuevamente con nosotros… -respondió, parándose derecha, dejando que algunas pequeñas lágrimas escurrieran sus mejillas

-Athena, estamos nuevamente a sus cuidados y ordenes, lo que usted pida, será cumplido por nosotros. Hemos vuelto gracias a estas amazonas, y a usted. Se lo agradecemos profundamente – Expuso el patriarca, adelantándose a todos.

Nuestra princesa sonrió, reflejando un lindo brillo en sus ojos y suspiro llena de calma. Realmente tenia pensado hacer lo imposible por volver con Aeris y Ligabiss, pero… Era como nuevamente empezar esta historia, pensé; que nuevamente tendríamos que pasar por todo lo anterior…

Por: Eryosdil

Continuara…

-------------------------------

N/A: Pues los argumentos son los mismos de siempre, la escuela, las tareas y en este caso, que mas puedo decir? Me enferme horrendamente de la gripe, pido disculpas por no actualizar pronto, pero nuevamente la inspiración estaba lejos, mi musa a veces no halla como seguir activa, jeje. Pues estamos cerca de nuestro no esperado final. Espero este capitulo les halla agradado aunque halla quedado un tanto corto. Y ya saben lo que pido no? SI! DJEN REVIEW! SE AGRADECEN!

Responderé Reviews de personas anónimas en mi profile

Gracias a mi mom, por incitarme a seguirlo, ella tiene la culpa!

Nos leemos.

Até Logo.