Hola! Aquí vengo con el cap de la semana, es cortito, pero espero que les guste. POr favor no olviden pasar pro los comentarios, me hacn muy muy feliz.
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Cap 6 Negociaciones estúpidas.
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-¿Donde está mi cheescacke? – preguntó Temari cerrando fuertemente la nevera.
-¿chesscacke? ¿Cual? – Respondió Kankuro desde el sillón apretando un par de articulaciones de madera.
-El que me dijiste que me había traído Baki- sensei – frunció el ceño
-Ah, ese… me lo comí, tu dijiste que podía tragarme la sal del mar si quería, así que lo hice.
-¡Idiota! – Temari lo agarró por el cuello haciéndolo tirar su trabajo – ¿Y te atreviste a tomarlo? Trágate la sal del mar pero no mi cheescacke! Más te vale que me traigas uno ahora mismo.
-Wow, woow, ¡parece que alguien está de mejor humor! ¿Qué te pasa? ¿Quien te manda a andarme regalando las cosas? – dijo soltándose y sacudiendo su ropa.
-Era implícito que no debías tomarlo si no querías mi abanico en tu cabeza. – Temari puso su mano en la espalda lista para sacar su arma.
-Bueno, bueno, ya, luego te traigo uno. – dijo restándole importancia.
-¡Luego No, ahora! – amenazó Temari llevando la mano hacia su abanico.
- ¿Acaso estás en tus días? Andas de un cambio de humor terrible, en la tarde ni me querías hablar, vas a correr por quien sabe cuanto tiempo ¿y ahora quieres postre?
-Es porque ya me liberé físicamente pero aun tengo energía para darte una paliza, así que mejor vas a la pastelería ya. – Dijo agitando el puño.
-¿Quien fue el pobre cristiano que le tocó lidiar esta vez con tu ninfomanía que vienes renovada? Que rápido olvidas al Nara. Ve a bañarte, apestas.
Y lo último que supo Kankuro fue que de un momento a otro tuvo que equilibrarse para caer sobre sus pies cerca de la pastelería, pero lo más probable es que estuvo inconsciente por ocho segundos después de recibir la ráfaga de viento de Temari que lo expulsó de la casa.
-Más le vale a ese tonto conseguirme mi pastel…. Por cierto…- fue rápido a su alcoba y tomó un calendario – uff, que alivio por un momento perdí la noción del tiempo, aún falta para mis días. ¡Maldito Shikamaru debemos cuidarnos! Debemos tratar se tema cuando… nos veamos de nuevo… en cuatro días.
La sola idea le generó emociones encontradas, aún faltaba tiempo para eso provocándole nostalgia, debía ser a escondidas lo que generaba temor, pero estaría con él de nuevo, aun no estaba todo perdido. A veces no podía evitar el pensar que quizá sería mejor si terminaran, el estaría mejor sin ella y todo lo que implicaba como hermana del Kazekage, estaría a salvo y ella no tendría al concejo tras su pista; pero inmediatamente desechaba la idea, ya antes había intentado dejar de pensar en él, ya antes habían "terminado" y solo bastaba con que ocurriera algo emocionante para sentir que quería contárselo.
-¿Kankuro? Estás en casa – le escuchó decir a Baki desde afuera, se levantó de la cama y fue a su encuentro.
-No está, fue a hacer una encomienda. – dijo con una sonrisa
-Ah, Temari, eres tu. En una hora se reunirá el concejo, sería bueno que estuvieras presente.
-¿A esta hora? Por qué no escogen un horario más decente, ya quiero bañarme y dormir.
-Ya sabes que cada uno tiene sus obligaciones, es imposible ponerlos de acuerdo.
-¿De que se tratará?
-Quieren poner en claro los términos de concilio. Las exigencias de sunna en la guerra.
-¡Oh, que fastidio! – la imagen de Shikamaru vino a su cabeza con esa palabra – De acuerdo, iré. Todo con tal de parar esto, si son términos decentes a lo mejor y no autoricen más batallas.
-Cierto, pero la verdad Temari, ambos sabemos que serán términos que Konoha no tendrá tiempo de considerar antes de que los ancianos consideren que es irrespetuoso esperarlos más. Es solo una formalidad pero quieren poner a Konoha en jaque.
-No te preocupes Bakki, ya sabrán hacer algo. Esta guerra no durará mucho.
- Eso espero.
En ese momento, la puerta se abrió con fuerza y apareció Kankuro con una cara de puro enojo.
-¡Aquí tienes tu postre maldita bruja de viento! Y para que sepas, me comí cuatro de esos así que no creas que me interese en lo más mínimo lo que hagas con él.
-Oh, gracias hermanito, eso significa que no te importa que me deleite ahora mismo con él – abrió el contenedor y lo comió lentamente.
- No me importa, estoy lleno, no me interesan tus migajas.
-A mi tampoco me interesa eso, me basta conque hayas ido por él.- Dijo ella comiéndolo con gusto.
-Ya cállense ustedes dos, Kankuro, en una hora tenemos reunión con el concejo, deben estar en el domo del Kazekage a tiempo.
-¿Que? ¿A esta hora?
-Si, a esta hora. – y sin decir más, el sensei se retiró.
-Bueno, yo me iré a bañar. – Anunció Temari dejando en la cocina los desechables del postre.
-Pero no tardes.
-Yo no tardo, tardas más tú con todo tu maquillaje.
Kankuro no replicó, su hermana había cerrado la puerta. Ciertamente apreciaba su cambio de humor, no le importó haber sido blanco de su furia, porque era algo que podía controlar, y eso de cierta forma la hacía feliz, pero no soportaba cuando veía que su ánimo se le iba de las manos.
Él también sintió una terrible culpa al arrastrar a Shikamaru de la oficina para que se fuera, porque al volver a casa solo vio en la oscura penumbra que Temari estaba sentada en la ventana a la luz de la luna con una mirada nostálgica sin lágrimas…
… – "No me dejaste despedirme… quizá ya nunca más vuelva a verlo y no pude despedirme"
Con esas palabras pudo confirmar que su hermana en verdad amaba a ese vago, pero lo peor fue cuando ella se encerró en su cuarto por días y la llegó a escuchar llorar varias veces. Necesitaba a su hermana, a la kunoichi más cruel, a la de mal humor que golpea a todo el mundo y tiene una mirada altiva y orgullosa, la que actúa como una madre que no se desmorona frente a sus hijos, pero tras el altercado, conoció el lado débil de Temari, el que le indicaba que también era una persona con sentimientos, que era una mujer sensible.
Pero nada se podía hacer, ella tenía que olvidarlo, no lo podría ver de nuevo o sería traición y la guerra proponía durar varios años, en los que quizá tuvieran que matarse el uno al otro.
-Estoy lista, vámonos. Dijo saliendo de su alcoba terminando de alisar su falda.
-Dios! Temari, ¿Si eres una mujer? ¿Te bañaste bien? Para mí que hiciste el baño del gato.
-Que no me demore no significa que no me bañe bien, ¡significa que soy eficiente con mi tiempo! ¡No como tu idiota! Vámonos ya, ¿o tendré que sacarte de nuevo por la ventana?
-Ya, ya, calma. Ya vamos. Pero deja el abanico, recuerda que no lo dejan entrar – Temari resopló recordando la nueva restricción.
-¿Sabes que? Lo voy a llevar, lo dejaré en la oficina de Gaara, no me quitarán lo único que ahora siento que me reconforta. - Su hermano no dijo nada y la dejó cargarlo, había sido como una patada en los huevos pensar que un abanico era lo único que la hacía sentir bien ahora.
-¡Tiene que ser una broma! ¡Esas exigencias fueron lo que nos llevaron a la guerra! No solo no han cedido sino que las empeoraron! ¿4mil hectáreas de tierra? ¿Propiedad sobre los recursos hídricos y fuentes fluviales? ¿El bosque Murakami? ¿Libertad de comercio con una baja de impuestos al 2%? ¿Ventas aumentadas a ellos al 25%? - Temari entró en la oficina de Gaara pateando la puerta, su berrinche no aguantaría a que estuviera en la casa.
-Calma Temari – dijo Gaara entrando tras ella y seguido por Kankuro quien cerró la puerta conmás calma.
-¡No sé como pudiste permitir eso! – Temari sentía furia y lo encaró a pesar de la mirada apacible de su hermano
-Se hizo lo que se pudo, sabes que eran peores al inicio de la reunión. – Gaara se sentó en su silla respirando profundamente.
-A duras penas se modificaron unos cuantos números!
-Hey. Hey, Gaara también logró que sacaran al Kyubi de la negociación, eso hubiera sido el colmo. – Dijo Kankuro defendiendo al menor.
-¡El colmo! El colmo es ahora, en 5 días enviarán el consolidado a Konoha y no esperarán respuesta, si no aceptan si o si, atacarán el límite sur! ¿Eres consiente de eso? Si viste bien lo que firmaste Gaara?
Gaara guardó silencio, no lo quería admitir en voz alta pero sabía que de alguna forma todo se le estaba escapando de las manos. Ni siquiera se sentía ya como una figura de poder, se sentía atado de manos y su título para él era como una simple formalidad. ¿De verdad había aprobado ese ataque? ¿De verdad se sintió victorioso al lograr modificar las cifras de esa forma tan insignificante? El ataque implicaba un punto estratégico de Konoha donde había alta seguridad al estar en la frontera del mar, era bien sabido de que había población civil que los hacía vulnerables; si la toma era pacífica, por medio de la toma militar se obtendrían esos territorios y la fidelidad de los habitantes; el país de los ríos no implicaría un gran problema al no tener una resistencia contra el país que había destruido una de sus aldeas ninja y permitirían el fácil ingreso, pero si Konoha se resistía, la toma podría implicar la destrucción total del pueblo y quienes habitaran en él.
-Tienes razón… esto no está bien… pero esto es una guerra. Y hasta que no lleguemos a un punto medio, las negociaciones deberán seguir su rumbo, tenemos que escuchar a continuación las exigencias de Konoha.
-Esto es una estupidez, no estarán de acuerdo y puede que también ataquen, no tenemos tantos poblados, estamos en una gran desventaja, esta guerra solo nos va a desaparecer. Los viejos creen que esta es la forma correcta de mejorarnos pero es la peor!
Sin esperar más se retiró, llegó rápido a su alcoba a escribir todo lo que recordaba, Shikamaru debía estar preparado para estas propuestas para responderlas en el menor tiempo posible.
Continuará...
Y hasta aquí el cap de hoy, sé que es cortico de y de poca emoción, pero en un par de días mas o menos, subiré otro fic aparte que CONTIENE UN GRAN SPOILER para el cap 7... ok, no es un Spoiler, pero considero que sería bueno que le den una revisadita.
Por otro lado, me gustaría que me hicieran saber que les pareció el cap, por aquí dejé ver en algo a Kankuro que siempre me ha parecido un excelente hermano y también aparece Gaara entre la espada y la pared, pero dejo a sus criterios qué les pareció las dinámicas familiares.
Sin más que decir, les deseo una excelente semana, Lxs quiero.
(Un mes y cinco días desde la declaración de guerra) FEBRERO
