"La unión de dos almas es el requisito para liberar algo inmenso"
Neil.
Mmmlmmmmmmomsmm
mmmmMPmmrmomtmmegmmMmereMmm
MHasmmmtammMMmElmmMFmimnmal.
/God/
– ¿Qué pasa? ¿Dónde estoy? ¿Qué paso? Estaba peleando contra Suicune hace un momento ¿Porque todo esta oscuro? No veo nada y... no puedo moverme... Acaso... acoso estoy... muerto...
Eh?!... Esa luz roja de nuevo, que... ¿qué quieres? Eh?–
Empezaba a abrir mis ojos lentamente pero el cansancio no me dejaba, oí un gruñido y sentí que algo me empezaba a mover entonces volví a abrirlos y vi a mi pequeño amigo.
– ¿D-Disc? – dije con una voz algo agotada, este reacciono alegrándose deshaciéndose la idea de que podría estar... bueno, ya saben. – ¿Dónde estamos? –
Empecé a levantarme pero mi cuerpo no aguanto mucho y caí de rodillas por reflejo, Disc trato de ayudarme pero no era mucho que digamos aunque eso sí, se lo agradecía por dentro, trate de ver alrededor pero la única luz que teníamos era la cola de mi charmander, entre uno de mis movimientos toque un pedazo de madera y vi que era una antorcha apagada.
– Disc ¿Puedo? – dije acercándole la antorcha y el dándose la vuelta la prendió con la flama de su cola. – Gracias. – Le dije mientras me volvía a levantar y me acerque a una pared la cual tenía esos extraños símbolos.
– Debimos haber caído dentro de las Ruinas, tenemos que buscar una salida rápido. – Entonces empecé a caminar buscando algún rumbo por aquellos misteriosos pasillos buscando una de las salidas.
Estuvimos un rato caminando pero estuvimos dando vueltas por un rato hasta que llegó un momento en que vi que Disc se quedó atrás mientras respiraba agitadamente.
– Si quieres podemos descansar un momento. – dije sonriendo pero vi que Disc empezó a acelerar hasta donde estaba yo, empezaba a preocuparme por él, no lo había entrenado aun para ser veloz y su resistencia no era tan buena que digamos, entendía porque no pudo esquivar el Perforador del Fearrow de Falkner, y en parte era su culpa al no darle el entrenamiento adecuado para poder combatir contra algo así.
– Mierda Disc. – Enfrente de mi vi que mi Charmander cayo y fui a recogerlo. Al acercarme a él trate de agarrarlo pero con una de sus garras aparto mi brazo, trato de levantarse pero fue en vano ya que cayó de nuevo, solo podía quedarme observando ese gran esfuerzo que hacia tratando de seguir mi ritmo.
El charmander se sentía frustrado de su propia debilidad, pero aún mantenía su orgullo y no deseaba la ayuda de su entrenador, al menos no ahora. Hasta ahora me estoy dando cuenta que soy un pésimo entrenador, con todo este asunto se me había olvidado que mis propios pokemon estaban bastante mal en fuerza, y además me había enfocado solo en Rayo. Puede que sea el último recuerdo de ella pero esa no es excusa como para dejar botado a Disc, él es parte del equipo y mi familia, debo compensarlo.
Pasado un rato seguíamos caminando, mejor dicho, seguí caminando pero ahora lo llevaba en mis brazos, este veía abajo decepcionado por ser débil.
– No te sientas mal Disc, aun no te he entrenado bien, cuando comencemos de verdad veras lo que se siente ir como la luz. – dije tratando de alegrarlo pero fue en vano, sentí como su llama empezaba a aumentar su tamaño, que curioso, no sabía que la llama de los charmanders aumentaba o disminuía dependiendo su sentimientos, reaccione y vi que era su frustración que aumentaba su calor.
– Oye tranquilo. – dije mientras seguía caminando. – Sabes, entiendo lo que sientes, se cómo es querer superar a alguien que admiras, créeme lo he vivido con mi hermano, él ha sido desde siempre un ejemplo de un entrenador nato, siempre quise ser como el pero luego entendí que debo superarlo. – Discharger se me quedo mirando un momento algo asombrado. – No debes pensar que eres menos que Rayo, él y yo hemos pasado muchas cosas tanto buenas como malas, pero las hemos enfrentado juntos, mientras que contigo hemos comenzado a viajar y aún no he visto lo mejor de ti, pero te diré de donde viene la verdadera fuerza de nosotros. –
– No somos los más fuertes pero usamos algo que los demás no pueden y es que unimos nuestras fuerzas, como la lección más sabia que he tenido, la unión de dos almas es el requisito para liberar algo inmenso y yo quiero formar ese gran lazo también contigo, te lo prometo, Juntos nos haremos mucho más fuertes. – Voltee a ver y vi su mirada, sus ojos tenían ese brillo de soñador y asintió con la cabeza, pero algo que no entendí es que vi que su mirada se fijó en el vacío y ahí salto empezando a correr. – Oye Disc espera, no te alejes tanto, este lugar es un laberinto– dije mientras lo seguía, logre seguirlo gracias al brillo de su flama.
– Disc, que pa... pero que... – Voltee a ver dónde estaba y vi que estaba enfrente de una inmensa pared donde terminaba el pasillo, era parecida a la otra pero a la vez se sentía una extraña sensación cruzar por todo mi cuerpo. Empecé a acercarme hacia la pared hasta estar a una cierta distancia de ahí oí una voz muy familiar.
– Eres tú. – Al voltear vio que era el ayudante del profesor, Cyrus. –
– Profesor Cyrus. – dije sorprendido al verlo.
– Entonces es cierto... – dijo el profesor. – Entonces tú también viniste a parar el plan del profesor. –
– ¿Que? ¿De qué habla? – dije un tanto confundido ante sus palabras.
– Entonces no sabes que el que está detrás de Suicune, él lo está controlándolo. – Aquellas palabras bastaron Ha estado todo este tiempo atacándonos como avanzaba la investigación para así deshacerse de nosotros con el temor a ese ser. – dijo el profesor con una mirada seria, yo no podía creer eso, el profesor... ¿estaba detrás de todo?
– God, escúchame. Necesito tu ayuda, no sé por qué pero tú eres la clave para descifrar ese poder, es lo único que podrá parar al legendario. Por favor ayúdame a salvar este mundo. –
– ¿Salvar... el mundo? –
Ya con esa frase mi mente se fijó un poco más en la expresión del sujeto, era fácil notar el miedo y la seriedad en sus palabras. De verdad podría ser esa la posibilidad, el mundo en si pudiera tener problemas con esto y yo solo vine a comprobar algo que me dijo un sujeto desconocido, ya ni siquiera sabía que pensar.
– Necesitamos detenerlo cuanto antes, si pone sus manos en esta energía entonces estaremos todo el mundo en problemas. Debemos parar a suicune y solo con esto podremos vencerlo. –
– No... No puede ser. Si el profesor controla al pokemon porque este se enfrentó contra él, no tiene sentido que pelee contra su pokemon. – dije tratando de mantener la ultimo de confianza que me quedaba.
– Es la mejor cuartada. Así nadie pensaría que era el quien lo controlaba, ninguno de nosotros pensó que él podría haber sido quien estaba tras estos ataques pero míralo de esta manera, él nos manipulo a cada uno para luego ir deshaciéndose de nosotros como si fuéramos fichas de un juego. De manera que pudiera trabajar a sus anchas ha podido deshacerse de cada investigador e incluso ha mandado a varios de mis compañeros al hospital, no fue hasta muy tarde que lo descubrí y de verdad lo lamento pero necesito que me apoyo. Ya no puedo detenerlo por más tiempo. Por favor, God, ayúdame a detenerlo. –
– Pero… ¿Por qué yo? – Un montón de dudas cruzaban por mi cabeza, no sabía del todo que estaba pasando y apenas entendía lo que estaban diciendo, pero estaba seguro de que esa cosa detrás de aquel gran muro algo lo llamaba, era como si le estuviera pidiendo ayuda. Una de las miles de preguntas que cruzaban por su cabeza era esa en específico; ¿Por qué el, y por qué sentía que ya había hecho esto varias veces?
– Tú eres la llave que abrió este lugar, debe ser ese el motivo de que Napol te trajera. Él sabía que tú eres la llave, deberías ser capaz de poder abrir esta última puerta. –
– Yo... – No sabía que a quien creer, lo más que quería era evitar las bajas– ¿Que tengo que hacer?–
– Al parecer las Ruinas responden solo contigo, entonces pienso que ese sello se abrirá si tú lo tocas, solo debes sacar esa esfera negra e insertar la llave, entonces yo me encargare del resto. –
– ¿Solo eso? –
– Así es. – Dijo el profesor acercándose a la inmensa pared. – Solo así podremos salvarlos. –
Mi cabeza empezaba a dar vueltas, ya no sabía que pasaba aquí, quien creía el bueno es el malo, tome de mi bolsillo aquella daga que me había dado el profesor y empecé a caminar hacia la esfera negra.
Tome la esfera y vi que estaba incrustada a la pared entonces con fuerza empecé a jalar hasta que por fin salió, al soltarse la esfera como si fuera de cristal se partió en miles de pedazos y un fuerte sonido agudo sonó pero donde estaba había una clase de orificio y vi que tenía la forma de la punta de la daga, entonces con mis dos manos levante la daga preparado para meter ese rubí dentro del orificio.
– Ahora. – dije entonces comencé a descender y la inserte, toda la pared empezó a temblar pero después de un minuto paro, no entendía lo que paso ni porque había parado.
– No lo entiendo, debía de funcionar. – dijo Cyrus mientras revisaba unos papeles que tenía ahí consigo, hice lo que me pidió pero faltaba algo, intente sacar la daga pero no se movía aún no estaba del todo dura, ahí se me ocurrió mover un poco hacia un lado y se movió hacia la darle la vuelta completa.
Entonces en pleno hueco empezó a brillar un resplandor dorado y dividió a la mitad la pared, entonces la pared como si fuera una puerta empezó a abrirse dejando ver una habitación iluminada cegándonos, empecé a caminar hacia dentro mientras abría mis ojos y vi esa habitación tan rara, iban como 25 metros hasta el final y el techo era sujetado por unos imponentes pilares llenos de extraños circulo con detalles raros.
Al dar unos pasos adentro sentí un cosquilleo en mi cuerpo y antes de que me diera cuenta antorchas entre los pilares se empezaron a prender consecutivamente desde la entrada hasta el fondo donde habían antorchas aún más grandes que las demás, tenía que admitirlo, estaba realmente impresionado, si me hubiera visto en un espejo seguro vería mis ojos como platos, pero no es el momento, mejor sigo contando.
Paso por paso sentía ese sentimiento cada vez más fuerte, era como cuando probábamos por primera vez el thunderbolt de Rayo pero a una escala menor, aun así se sentía raro pero me parecía familiar, como si alguna vez hubiera estado aquí pero eso no era imposible, bueno, sé que no puedo hablar mucho de recordar pero aun así reconocería el lugar.
Al llegar al final vi una ruleta de piedra muy extraña unida a la pared y en todo el medio de esta se encontraba una esfera como antes pero esta era de piedra y parecía más pequeña que las demás, era como un poco más grande que una canica pero más pequeña que una pelota de baseball, trate de agarrar y extendí mi brazo para hacerlo pero de ella un pequeño rayo rojo me electrocuto haciéndome retroceder, estaba acostumbrado a recibir electricidad gracias a Rayo pero de verdad era un infierno cuando recibía electricidad por el metal de mi brazo derecho, sentía como me quemaba por dentro, luego de un rato se pasó el dolor pero note algo en mi brazo, parecía como si pasara por mi brazo de un lado para otro, empecé a moverle viendo que pasaba pero solo eso paso, nada.
Levante mi vista hacia la piedra en la ruleta, esa cosa me había hecho algo y desde que llegue aquí debió ser lo que me trajo, ya estaba realmente harto de todo esto trate de nuevo (Ahora con la izquierda, no me quería arriesgar a otra descarga).
Al tocar esa esfera sentí algo realmente diferente, era una sensación que me hacía sentir fuerte pero a la vez débil, no sabía porque pero era realmente agradable pero también me lastimaba esa sensación. Con solo poner mi mano en esa piedra podía sentirlo, si con solo tocarlo sentía eso no me imagina que se escondía detrás de esta pared.
Intente mover la piedra como con la otra pero esta no se movía, y sin darme cuenta mi bolsillo empezó a vibrar, revise y era mi Pokedex, no entendía que pasaba ya que si no estaba en batalla o cerca de algún otro Pokedex holder entonces no debería de sonar así, revise curioso mientras el profesor Cyrus veía y trataba de analizar con asombro aquella habitación, un gran error fue tomarlo con mi mano derecha y al ver vi que la electricidad roja entro en la Pokedex, ahí pensé que se descompondría pero vi que seguía funcionando.
En mi Pokedex usualmente estaban las opciones: Pokedex que me permitía ver los pokemon registrados, Pokemon que me permitía ver el estado de mis pokemon, sus ataques, naturalezas, etc. y Datos que me permitía acceder a mis datos como entrenador, pero había algo mal con ella, había una cuarta opción con ? Puesto en la pantalla, dude un segundo antes de oprimirla.
Una gran luz empezó a salir de la pantalla cegándome de nuevo el rostro, después vi que había un extraño símbolo, era un círculo rojo en el medio mientras que habían cuatro rayas alrededor del círculo con quien formaban una X inversa y esta estaba unida por un circulo que tocaba la mitad de todas las rayas. La imagen estaba muy pixelada y la luz tampoco me ayudaba a ver del todo, pero lo que más me sorprendió fue oír esa voz computarizada.
– Estas en el punto sin retorno en donde se juegan los papeles de este antiguo mundo. – Escuche esa voz de mujer de computadora impresionado– Si liberas a este ser harás un cambio para bien para mal, determinara el camino que elijas a partir de ahora ¿Estás seguro de querer liberar a Ryuu? –
– ¿Ryuu? – repetí impresionado entonces vi que salió un cuadro de texto donde me salían dos opciones.
– Si
– No
En ese momento ya no sabía qué hacer ni lo que pasaría pero estaba seguro de algo y era que esto afectaría de verdad todo, me puse en la opción Si y apunto de oprimirla note el temblor de mi mano, hasta ahora había notado que mi cuerpo estaba temblando por los nervios, me llene de valor y trate de oprimir el botón pero no podía sentir mis dedos, sin más cerro los ojos y con lo que tenía iba a oprimir el botón A pero...
– ¡God, no lo hagas! – Escuche aquel grito del otro lado de la habitación, era el objetivo inicial de mi búsqueda, el profesor Napol.
– Pr-profesor Napol. – dije en voz baja sorprendido.
– Chico, no importa lo que te haya dicho Manu, no liberes a Ryuu ahora. – dijo Napol.
– ¿De qué habla? Si usted dijo que quería usar esta energía para alimentar a la región, Y con ella ayudarla ¿Eso acaso no era su plan?– le grite con fuerza enojado.
– God tranquilízate, déjame explicarte bien. El...
–NO, no quiero oírlo, ya me contaron lo que pasaba, ya entiendo porque Destiny me dijo que me quedara cerca de ti, él sabía que usted haría esto, ahora entendí que quería que lo detuviera a usted y a suicune para evitar que esta energía sea suya. –
– Chico, espera, no te hagas teorías locas ahora, déjame contarte por favor, solo quiero que me escuches. – dijo el tratando de calmarme mientras caminaba hacia mí, en ese momento estaba a punto de ordenarle a Disc que atacara con Lanzallamas.
– Quédese ahí– dije con fuerza. – Disc prepara un Lanzallamas– El pokemon empezaba a dudar por unos instantes pero luego empezó a cargar una bola de fuego en su boca. –
– God, por favor, permíteme explicarte– dijo el mientras paraba, no sé porque lo hice pero baje mi mano y con una seña le dije a mi charmander que parara.
– Muy bien ¿cuál es su escusa? –
– God, escucha. Hace cuatro años un extraño acontecimiento ocurrió en toda ciudad de Johto, hubo un apagón general debido a que los generadores se destruyeron por sobrecarga, esto era algo que podría ser imposible ya que esos generadores eran de lo mejor y podían almacenar el triple que otra región. Esto era tan extraño que un grupo de varios científicos y profesionales empezaron una investigación en la búsqueda de esa energía, acerca de su origen tras bastante esfuerzo en un año la localizamos alrededor de esta zona. Un grupo de valientes exploradores de tumbas se nos unieron para encontrar esa extraña energía pero había una cosa que no contamos y era que en la búsqueda por estos túneles nuestra presencia despertó al guardián de estas Ruinas, es ese Suicune de antes. –
– Al comienzo este solo nos observaba de una cierta distancia, entendíamos que no debíamos hacer daño a las Ruinas así que nos mantuvimos a raya y hasta ahí Suicune nos mantenía vigilado hasta que... Tiempo después, alrededor del 27 de febrero unos compañeros fueron encontrados lastimados y unas partes congelada, entendíamos que algo había pasado con las ruinas y suicune entonces pusimos prevenciones pero ninguna funciono, un par de días después encontramos a un par de nuestros compañeros siendo atacados por suicune, esa vez esa aura negra con relámpagos lo rodeaba y sus ataques tan fuertes como lo eran haya arriba. Varios de nuestro grupo abandonaron la investigación al ver que ese pokemon era casi invencible tras tantos ataques, pero yo me quede a buscar respuestas a todo este asunto. –
– Vaya al grano. Usted dijo que quería usar esta energía para ayudar a la región y ahora no quiere usarla ¿Que fue eso que lo hizo cambiar? –
– A eso llego chico, déjame continuar. Pasado el año Suicune no volvió a aparecer hasta hoy en dia, creíamos que ya no seriamos una molestia para él, pero no me rendí y continúe buscando, hasta que note algo raro en uno de los viajes había aquí abajo. –
– El 10 de Marzo a las 12:53 se escuchó un extraño sonido en lo profundo de las Ruinas, el rastreador había encontrado una enorme esencia de poder, aunque fuera por unos segundos las maquinas en el laboratorio enloquecieron. Ahí empecé a dudar si lo que íbamos ser sería correcto. Alrededor de este mes han ocurrido cosas iguales hasta que el 28 cuando estaba abajo revisando y tratando de resolver el sonido de las frecuencias de los uknown descubría algo que no creí posible, a las 7:12 en la frecuencia 14, una gran cantidad de ondas empezaron a formarse y justo antes de que llegaran al nivel máximo el aparato exploto recibiendo un extraño sonido parecido al rugido de un animal, pero era mucho más fuerte de lo que creía que podía hacer cualquier pokemon, el rugido se reproducía por toda la ruina entonces logre saber de dónde venía, hasta ahí fue como encontramos la imponente pared de antes, pero hasta hace unos días no entendí que lo hacíamos no ayudaría a la humanidad, sino que solo la destruiría junto a todo. –
– Hace dos días en la madrugada utilizando el rastreador del Laboratorio me puse a buscar indicios de esa energía hasta que a las 3 de la madrugada empezó a sentir ondas como antes, no, más intensas que antes, tanto fue que se elevaron los números que empezaron a fallar y se reiniciaron, pero al encender de nuevo las ondas desaparecieron. Con todo lo que había pasado me puse a pensar en que efectos tendría esta energía en el mundo y ahí comprendí, no nos ayudaría sino que nos destruiría. –
– ¿Qué quiere decir con eso?– Empezaba a perder la paciencia.
– ¿Aun no lo entiendes? Esa energía es tan fuerte que no hay forma que podamos contenerla para su uso, de hecho pienso que lo que hemos visto hasta ahora no es ni una pequeña parte de lo que se encuentra encerrado detrás de estos muros. Hasta hace ayer entendí una cosa y era que esos muros no son para esconder ese poder, sino para mantenerlo controlado, este lugar no es un escondite, es una...
– Una prisión… – susurre en voz baja mientras miraba al vacío, eso tenía sentido pero también podía ser una excusa bien planeada, bajaría la guardia y ahí si me acabaría, pero... Si ese era su plan ¿Cómo podría obtener esa energía si necesita de mi para liberarla? ¿A quién debo creer?
– Exacto, ahora entiendes, esto no nos ayudara, si liberamos lo que haya del otro lado podría ser el fin de todo, por favor no lo hagas...
/RUINAS ALFA/ SUPERFICIE/
– Spike, Furia Dragón. – dijo Naomi, la serpiente dragón soltó un ataque de luz que en pleno camino tomo forma de un dragón morado impactando contra el suicune que cada vez más se veía que sus esfuerzos eran inútiles, Suicune era conocido por ser una leyenda y unos pokemon comunes no podrían hacer algo contra él. Aun recibiendo ese ataque Suicune no mostraba cambio en la salud tachando todo el esfuerzo de God.
– Es impresionante, aun después de varios ataques se ve como si no hubiera pasado nada, sabía que un legendario era un gran reto pero esto ya pasa a ser absurdo, no puede ser tan fuerte, debe tener algo que ver con esa aura negra pero que puede ser... – dijo antes de caer de rodillas, veía con asombro al ser legendario, con un solo rayo hielo impacto al misterioso pokemon dragón dejándolo debilitado y regresándolo hacia su pokeball, tras esto Naomi cayo desmayada.
– Naomi. – grito Hadson al ver lo que paso y fue sin importar la presencia de aquel gran ser divino tomando a aquella chica y con la poca fuerza física que tenía intento levantarla pero el legendario no le dio tiempo, al voltear Hadson vio muy cerca al legendario preparando lo que sería su rayo hielo, su mirada se perdió en el brillo de aquella luz y cerró los ojos con fuerzas pero recordó aquellas palabras.
… No permitiré que mis camaradas mueran...
Esas palabras retumbaron en su cabeza y entonces su mirada cambio lanzándose contra su amiga inconsciente por el cansancio así esquivando el rayo (apenas).Hadson al voltear vio que en unos pocos centímetros estaban el polvo congelado como estalactitas.
– Por poco. – Hadson con esfuerzo empezó a cargar a Naomi mientras con dificultad se alejaba del peligro pero era imposible, suicune no espero ni dos segundos para que escapara ya que estaba cargando un segundo rayo hielo.
– Mas rápido, más rápido, más rápido. – decía mientras saltaba tomando distancia pero suicune estaba listo.
– (Él no nos dejaría a nuestra suerte, tengo que hacer algo, tengo que ayudar). –
Una onda color rosado eón empezó a cubrir por unos instantes al suicune obligándolo a parar el ataque, pero no acababa ahí. Un montón de rocas cayeron entre los entrenadores y el ser divino y una que otra le había caído encima bajándole la velocidad.
– Ocúltate mocoso, yo lo distraeré– se escuchó decir antes de ver una enorme figura envuelta en luz ir contra el ser legendario. Montado en el Onix variocolor, el cazador había llegado como refuerzo, se preparó para atacar con todo lo que tenía, su objetivo no era ganar si no perder tiempo o al menos eso Destiny le había comendado.
PLAY
Most Epic Music Ever: Suspense
/RUINAS ALFA/PUERTAS/
Mi dedo está casi en cima del botón pero la duda que me atormentaba era si debía hacerlo o no.
– ¡¿Qué crees que estás haciendo?! – se escuchó en la entrada de la habitación, era el profesor Cyrus quien veía con furia a quien era su compañero. – God no lo escuches, trata de confundirte, si no hacemos algo Suicune empezara a descontrolarse, si no actuamos rápido entonces el mundo se podrá acabar, rápido oprime ese botón. – dijo Cyrus.
– Manu, Deja de manipularlo, confundes sus pensamientos. – dijo Napol. – God por favor escucha, si lo que te dijo el fuera cierto entonces como podría tomar el poder si sigue aprisionado ahí, entiende que te está utilizando, por favor no te dejes tentar. – No sabía que hacer ya que mi teoría era cierta según las palabras del profesor, empecé a alejar mi dedo del botón aceptar.
– ¿Y qué hay de tus amigos? Ellos están haya arriba enfrentándose al Suicune mientras hablamos ¿No te importa que pase con ellos?– dijo el profesor Cyrus. – Aun sabiendo de que tus amigos podrían estar muertos ahora mismo–
– ¡¿Que?!– dije con fuerza, se me había olvidado por completo ellos, Hadson, Naomi ¿Porque están aquí? No quería que se metieran en esto, por–por–por que pasa estas cosas a mí, no puede pasar eso otra vez... Lo prometí... debo proteger a los que quiero... pero ¿Cómo?
Mire a mi mano y entendí que tenía chance, si decían que ese poder sería suficiente como para salvarlos, por fin puedo cumplirlo... pero si lo libero podría ser demasiado ¿Mis amigos valen más que el mundo?
.
.
.
