Espacio de la escritora

Hola de nuevo, estimados lectores! Espero hayan pasado una súper genial semana! Una vez más les traigo un nuevo capítulo que espero que disfruten.


Capítulo 12: Ambar y Diamante

"¿Qué es lo que él quiere decir?" preguntó el anciano herrero mirando a la joven deidad.

"La espada me llama y sospecho también que no le permite a Sesshomaru alejarse mucho de mi." dijo ella, pero pronto recordando algo más agregó "Por cierto, al sostenerla sentí una sensación de familiaridad."

"Mjum, ya veo. Bueno, señora no es tan extraño que sienta una conexión con la espada a pesar de haber sido fabricada a partir del colmillo de un yokai y tener energía demoníaca, la que claramente se opone a su naturaleza divina."

"¿Por qué no es extraño?" replicó ella.

"Originalmente el nombre de tensaiga o colmillo sagrado quiere decir "espada del renacimiento celestial." Esta espada fue bendecida por los cielos."

La diosa estaba sorprendida ante la nueva información. Efectivamente no era nada nuevo que los cielos bendijeran objetos o personas, incluso animales. Pero esto era algo nunca antes visto, por lo menos no por ella.

"¿Cómo es eso posible? Tu mismo lo dijiste es un arma hecha a partir de energía demoníaca. Concebida para atacar y destruir, los cielos no podrían bendecir algo tan peligrosamente destructivo."

"Parece que Sesshomaru no te ha hablado de esta arma. Bueno, no es un chico de muchas palabras." Dijo con una mueca mientras miraba al daiyokai. "Tensaiga no tiene propósitos destructivos, señora, todo lo contrario, cuando creé esta espada lo hice con el fin de convertirla no en un arma de ataque, sino de defensa. Colmillo sagrado está hecha para proteger, la espada no puede herir ni matar a nadie."

- Si ni siquiera puede cortar, ¿ cómo protegerá algo?-

Totosai viendo la mirada de confusión en la mujer siguió hablando para aclarar.

"Los únicos seres que morirán por ella son los enviados del inframundo, Tensaiga lucha contra la muerte. La espada revive a los muertos."

Al oír eso los ojos de la mujer se abrieron con exageración.

-Capaz de revivir a los muertos. El poder de cambiar el destino de alguien en las manos de un yokai. Ni siquiera los dioses intervienen en el curso natural de las cosas.-

"Un arma como esa, solo debería ser manipulada por un corazón justo y compasivo." dijo después de un largo silencio la diosa.

"El gran Inu No Taisho, padre de Sesshomaru, pensaba igual que usted, jovencita. Por eso, aunque pueda parecer ilógico le dejó colmillo sagrado a su hijo mayor. El muchacho tiene que aprender una lección."

"Deja de decir ridiculeces. Si alguien es tan débil para no poder cuidar de sí mismo no tiene sentido que viva de nuevo solo para desperdiciarse."

Totosai solo puso sus ojos en blanco y siguió hablando.

"Ojalá tuvieras un poco de la gentileza de tu padre así podrías apreciar la gran espada que es Tensaiga."

"Sí y ya sabemos cómo terminó eso." respondió el daiyokai con sorna levantando una ceja.

"El poder se reduce a nada si no eres es capaz de proteger a quienes realmente te importan. Tu padre quiso proteger a Izayoi e Inuyasha sabiendo que no tenía mucho tiempo, eso no lo vuelve débil."

"Ahora comprendo, debido a la pureza de su intención, la espada fue bendecida por el cielo." la diosa comentó interviniendo antes de que la discusión entre los yokais creciera. " nos conecta nuestra naturaleza celestial."

"Eres una diosa y no fuiste capaz de sentir su aura celestial." replicó Sesshomaru acusativamente.

"La espada no fue creada en los cielos o por los dioses, su aura celestial viene de una bendición,no tiene energía divina netamente. Y esta bendición no fue dada por una o varias deidades en particular. No, en ocasiones el cielo guiado por el destino otorga por sí mismo esas bendiciones, porque hay pureza, compasión y bondad en el propósito que se tiene para dicho objeto. Creo que había algo asombroso en que un poderoso yokai, cuyo poder es demoníaco, deseara salvar algo. Por eso la espada recibió la bendición."

" Aunque eso solo explicaría porqué al sostenerla la sientes familiar." el anciano rascó su cabeza pensando en porqué el arma se había apegado a la chica.

" Tal vez nuestra conexión va más allá del hecho de que soy una criatura celestial. Como diosa también he desarrollado habilidades curativas y de sanación, quizás al compartir ese objetivo se ha desarrollado una unión."

"Sesshomaru debo saber, ¿qué pasa cuando tienes la espada, qué te ha dicho?" inquirió el viejo herrero.

"Tensaiga se niega a dejar a la mujer, no es un asunto de distancia, es más bien cuando tengo intenciones de separar nuestros caminos y abandonarla."

"¿Estuvo la divinidad en una situación de muerte?"

"No,solo fue herida, pero sanó rápidamente, no tenía necesidad de la intervención de Tensaiga. Pero desde aquella ocasión se ha comportado de forma extraña." contestó secamente el poderoso señor.

"Entonces podría ser…" el anciano pensó bien lo que iba a decir, con sorpresa de su descubrimiento. " es posible que la espada haya logrado adquirir la capacidad de predecir una gran amenaza. Señora, su vida estará en grave peligro, y ya que ambas tienen una naturaleza curativa, la conexión que tienen tirará de usted hasta que Tensaiga cumpla su cometido. "

" ¿Colmillo sagrado volverá a la normalidad cuando la haya revivido? " más que preguntar, el daiyokai parecía estar afirmando un hecho.

" Así es. Su conexión sólo le hará estar cerca de ella hasta que pueda salvarla. No irá en contra de su naturaleza. "

-Entonces voy a morir. Si lo pienso bien tiene mucho sentido, si Ryu tiene la gema y me enfrentó a él seguramente no viviré mucho y menos ahora que mi energía está contra reloj. Tener un comodín como Tensaiga no es algo que esperaba, pero no puedo decir que no sea oportuno.-

Sesshomaru cerró los ojos y frunció un poco el ceño molesto por la nueva situación.

"¿algo más que deba saber?" preguntó con su voz profunda y un deje de molestia en su tono.

"Sesshomaru debes estar más atento a la voz de tu espada, esta ha evolucionado seguramente porque tu poder creció cuando fuiste capaz de crear a bakusaiga de ti mismo, pero aún no podrás dominar su máximo potencial si no tienes lo que se requiere. Ignoro qué otra habilidad pueda ocultar porque su poder crecerá a partir de tu yoki, pero considera que sigue siendo de naturaleza compasiva por el deseo de tu padre, así que, cuán más grandiosa pueda ser dependerá únicamente de si su portador puede explotarla."

Sesshomaru ya estaba de salida y no se volteó a responderle, así que cuando el herrero de grandes ojos terminó su mensaje, el daiyokai ya caminaba listo para emprender su camino de regreso volando.

La deidad inclinó brevemente el mentón agradeciendo al anciano la ayuda brindada y caminó hacia la salida.

"Ese muchacho no sabe de modales, sea paciente diosa."

La diosa regresó su rostro y asintió con una sonrisa casi imperceptible.

El viaje de regreso continuó en silencio, si seguían a la misma velocidad estarían de vuelta para el atardecer. Pero la dama invernal no creía que podría mantenerse en el aire por mucho tiempo. Poco a poco la distancia que los separaba se hizo más grande, y lentamente la doncella de hielo empezó a descender.

Cuando Ria estuvo en el suelo tomó grandes bocanadas de aire, el pecho no dolía, pero se sentía algo mareada por pasar tanto tiempo expuesta al calor infernal de la montaña de fuego. Su naturaleza fría era vulnerable a grandes exposiciones de calor.

El peliplateado se dio cuenta que la mujer se había quedado atrás y no tardó mucho en unirsele.

"Continúa por favor, yo seguiré después" dijo la deidad, quien planeaba seguir el resto del camino a pie hasta encontrar alguna fuente fría de energía.

"Hn" el yokai la miró indiferente. Notó que la frente de la chica estaba un poco empañada de sudor, sin duda el choque de calor de aquel lugar le había afectado, era una deidad del frío después de todo. "camina." le dijo y él avanzó unos cuantos pasos delante de ella.

Al principio a la diosa le extrañó la actitud acomedida del inu yokai pero rápidamente comprendió que, aunque sin duda él no hubiera pensado dos veces en irse, Tensaiga lo habría hecho volver. Al final el demonio perro tenía una 'correa' temporal.

Ella no argumentó nada más y lo siguió.

"Tensaiga es una espada curiosa" comentó la dama del hielo después de unas horas de caminar en absoluto silencio. Sabía que probablemente él no respondería, pero hoy tenía ganas de tentar su suerte. " pensar que tu padre tendría un sentir tan benevolente. Sé bien que hay yokais de gran corazón, pero no es algo muy común. Además, tu personalidad no es muy acorde con sus acciones. Quizás tu hermano, se parezca más…"

Sesshomaru se detuvo abruptamente haciendo que la chica de ojos oscuros también se detuviera.

" ¿No piensas callarte?"

" Aún queda un largo camino. " respondió ella tan impasible como siempre. Ignorando la voluntad del yokai ella prosiguió.

" Totosai dijo que no tienes una buena relación con él. Entiendo que no toleras la debilidad, pero según entiendo, era la vida de tu hermano y de tu madre."

"No hables de lo que no sabes, esa humilde humana no era mi madre." interrumpió una vez más el yokai que seguía su paso con firmeza.

-¿Humana? ¿La madre de Inuyasha era humana? Bueno, no es tan extraño que yokais se involucren con humanos, pero sé bien que no es bien visto, sobre todo en este tiempo. Su hermano, no, su medio hermano es un hanyo. Es una pena, los hanyos no son ni uno ni otro, son despreciados tanto por humanos como por yokais en este tiempo. Debe ser difícil ser rechazado por tu familia por quien eres.- pensó la diosa con empatía y un deje de tristeza. Ya no tocaría más el tema, no quería molestar más al daiyokai.

"Un noble deseo el darles una segunda oportunidad a otros."

"Hn,¿noble?" dijo con burla el inu yokai "la brújula moral de los dioses no les deja ver con claridad. Si revives a alguien que dices querer realmente lo haces porque tu debilidad emocional no soporta el dolor de la pérdida. Al final lo haces por ti mismo."

-Eso es correcto, al final las buenas acciones se dan por interés propio.-

"Tienes razón, pero tu padre no sólo tuvo intención de que Tensaiga salvara a Izayoi e Inuyasha, te la dejó a ti. Quería que fueras compasivo y comprendieras la fragilidad de la vida. Si la intención de la espada fuera tan egoísta no hubiera sido bendecida. Es interesante como el destino diseña las cosas para que ocurran. Primero pensé que era inadmisible que algo tan poderoso existiera, cambiar el destino al hacer que alguien que debería morir reviviera, pero si hay algo claro para los celestiales es que cada cosa ocurre porque así debe ser.

Si alguien muere y revive, era su destino hacerlo. Esto no cambia nada. El que tu padre creara Tensaiga, que los cielos la bendijeran, que la gema se perdiera, mi presencia aquí…"

"Dices que todo estaba dispuesto para que colmillo sagrado te salve." comentó con ironía

"Digo que las cosas pasan por un motivo. Colmillo sagrado está en tus manos por algo. Haz lo que debas."

De repente, en un abrir y cerrar de ojos la hoja de bakusaiga rozaba peligrosamente el cuello de la dama invernal.

"Entonces debería apresurar las cosas y hacer que Tensaiga te reviva para deshacerme de tu desagradable presencia." dijo el daiyokai con malicia.

La deidad no se impresionó, ni siquiera parpadeó cuando el filo casi la toca.

"Puedes hacerlo." respondió indiferente ella como si lo retara. "Pero creo que no moriré por tu mano. Supongo que mi destino es morir buscando la gema, y es exactamente lo que haré." la diosa tomó con sus dedos la hoja de bakusaiga apartandola de ella con suavidad y pasando al lado del peliplateado continuó:

"Entiendo que esto te irrite, cuando vine aquí tampoco pensé que esto ocurriría. Pero esta es la situación, toleralo hasta que encuentre a Ryu y muera."

Ria miró los dedos con los que había movido la espada y vio que se habían quemado levemente, aunque pronto comenzaron a sanar.

"No te confundas mujer, no somos aliados. El gran Sesshomaru te permitirá vivir hasta que el asunto con Tensaiga culmine. Pero no olvides que tenemos un asunto pendiente, y cuando el momento llegue no habrá segunda resurrección. Morirás por mi mano." dijo fríamente el hombre de ojos dorados que no apartó su mirada fulminante de los orgullosos ojos oscuros de la doncella de hielo.

Sesshomaru enfundó su espada y rápidamente recuperó su posición varios metros delante de ella.

La noche había caído, y dado que aún avanzaban a pie, no habían llegado al campamento.

La deidad aún sentía los estragos del fuego por lo que para no interrumpir su andar ella sacó su chal invernal que estaba cargado de energía fría al ser el símbolo de las deidades de invierno. Lo puso sobre sí y esperó a que el frío de su cuerpo se restaurara. No lo había usado antes porque esperaba guardar su frío para una situación de emergencia, pero ahora si no se recuperaba podría volver a su estado anterior y los dolores por la reducción de energía divina se presentarían otra vez.

Sesshomaru percibió el aura fría que cambiaba en ella, así que se detuvo apoyándose en una roca y cerrando sus ojos, había decidido que se detendrían unas horas. La mujer empezaba a debilitarse de nuevo y si empeoraba lo retrasaría aún más.

-Es una constante molestia-pensó.

Por la razón que haya sido, ella le agradeció, aunque por supuesto no hubo respuesta de parte del demonio perro.

Ella recolectó las ramas y encendió el fuego, no era lo ideal en su situación pero necesitaba iluminación, más ahora si se disponía a tomar energía de la naturaleza. Fue algo bueno que el yokai se detuviera cerca de una laguna, ya había practicado noches antes de unirse al viaje con él. Tomar el frío del agua resultaba mucho más fácil que hacerlo del viento. Pero ya que el viaje con el daiyokai se hacía volando y sin paradas tuvo que limitarse a tomarla del aire frío nocturno.

Esa noche ella podía ayudarse con el lago, pero en su mente aún dudaba si debía o no hacerlo frente al yokai, porque aunque estuviera con los ojos cerrados, sus sentidos eran muy agudos y seguramente no estaba durmiendo.

Pero no podía darse el lujo de desaprovechar, así que una vez alistado todo camino en dirección al lago y un pequeño camino de nieve y hielo se formaba por donde pisaba abriéndose pasó hasta el centro de éste.

Ahí ella se sentó rodeada de la fría agua sin mojarse. Cerrando sus ojos puso la punta de sus dedos sobre la superficie líquida y se concentró tanto como pudo. Korihana buscaba sentir la tangibilidad del frío en el agua para poder absorber la energía.

Una extraña sensación molestaba el descanso del yokai. Era una presencia en el aire que lo rodeaba, que en noches anteriores ya había sentido, provenía de la mujer. Era extraño, era una sensación arrebatadora, cuando sucedía usualmente percibía una pequeña variación en la temperatura del aire, duraba unos minutos y después todo volvía a la normalidad. Pero hoy era diferente, el frío del aire no estaba variando.

Al abrir los ojos la imagen ante él era la de la mujer rodeada de una luz plateada con destellos azules, sobre ella caían copos de nieve. Del agua subía una suave neblina hasta entrar a la palma de su mano. Sus ojos la siguieron por unos instantes hasta que los de ella se abrieron y ambas miradas se cruzaron.

Ámbar y Diamante.

Y como sucede con las piedras preciosas, sus choques provocan cortes.

Ambas miradas, frías y fulminantes, se mantuvieron por unos instantes hasta que la doncella del invierno bajó sus pestañas apretandolas un poco, al abrir los ojos de nuevo sus orbes chocolate ébano con destellos rosa-rojizos habían regresado, y la mirada fría se había suavizado.

La neblina y los copos de nieve se habían disipado por completo y ella se puso de pie y regresó por el pequeño camino de hielo flotante que había hecho, al hacerlo cada rastro de hielo o nieve invernal desaparecía, como regresando a su señora.

Los ojos del yokai la siguieron inadvertidamente hasta que ella tomó asiento a unos metros de él. La deidad percatandose de eso creyó necesario explicar lo que había sucedido, aún si el hombre no le había preguntado.

"Necesitaba recuperar energía fría"

El yokai ya había vuelto su cabeza hacia otro lado ignorándola, pero aún así respondió.

"¿Por qué esta vez fue diferente?"

A Ria no le sorprendió mucho que él se haya dado cuenta, sus sentidos son los más agudos de todos los yokais que ha conocido, algo como eso no se le habría escapado. Aún así, ella solía hacerlo de la forma más discreta posible para no llamar la atención, pero hoy considerando su estado prefirió hacerlo con toda la concentración necesaria tomando cuanta energía podía, eso claro se haría evidente de una u otra forma. No podía ocultarse.

"Al hacerlo mientras realizo otra actividad como volar, se me dificulta encontrar el punto exacto de frío en el aire, por eso la absorción no es mucha. Pero hoy tuve la oportunidad de tomarla del agua, y como pude detenerme, pues mi capacidad de absorción se potencia." contestó ella a su pregunta.

" tus ojos cambiaron de color."

Ahora, eso sí era algo novedoso, nunca le había ocurrido. Al menos no que ella supiera, Fubuki y Shimo no le habían comentado algo como eso cuando absorbía energía con ellos presenciandolo, y la deidad no creía que ellos le ocultarían algo así.

" ¿Cómo dices?"

"Como hielos durante un instante."

La divinidad subió su mano tocando su párpado y comprobó que estaban algo fríos. Parpadeo varias veces mirando a la nada tratando de entender qué es lo que el yokai había visto. Entonces recordó que había abierto sus ojos abruptamente cortando el ritual de absorción porque su aura fría se incomodó.

-Claro, su energía y la mía no se llevan bien-.

"Oh, creo entender qué pasó" dijo sonriendo levemente sin darse cuenta de que por un instante sus siempre indiferentes gestos habían cambiado. "Al estar concentrada entré en un tipo de trance. Como dije para absorber correctamente debo encontrar el punto frío adecuado. Uso la energía del frío para recuperar mi energía divina. Pero ya que mirabas, tu yoki probablemente estaba 'alerta' por la fuerte presencia de mi energía fría. Y como sabrás la naturaleza de ambos se repelen al ser opuestas, lo que provocó que la absorción terminara antes de tiempo. Lo que viste fue el frío corriendo dentro de mí. Una lástima, hubiera querido verlos."

El yokai había notado el cambio de gestos en el rostro de la mujer. Fue fuegaz, pero fue genuino. Sus mejillas se habían alzado un poco y sus ojos se habían cerrado formando pequeñas líneas, casi imperceptibles a su alrededor. Pero pronto volvió a su singular forma de ser. Parecía que realmente le entusiasmó la idea de que sus ojos cambiaran de color.

-Rara mujer- pensó. Y no respondió a su explicación.

El hombre pensó que la próxima vez se distanciaría un poco de ella para realizara sus enseres sin problemas y pudiera ponerse en marcha pronto.

Un vaso humeante se posó frente a él y levantó la mirada a la mujer que estaba a pocos pasos de él que sostenía otro vaso, con lo que suponía era té.

"Por ahora es mejor que tome algo frío" dijo agitando sus dedos sobre el vaso que ella sostenía, haciendo que trozos de hielo refrescaran la infusión.

"No necesito este tipo de cosas." respondió distante el peliplateado.

"Lo sé, pero no quería ser descortés." dijo después de dar un sorbo a su bebida refrescante.

El daiyokai siguió mirando hacia otra dirección sin hacer algún ademán de que tomaría el vaso ofrecido.

"Entonces lo tomaré yo, si no te molesta."

"Haz lo que quieras."

La diosa hizo que de su mano una ventisca invernal le trajera el vaso cuidadosamente sin derramar el contenido, lo que también hizo que la enfriara.

Después de una hora de disfrutar la paz del silencio y sintiendo que cada parte de ella había recuperado su temperatura normal le dijo.

"Podemos volver"

El yokai se levantó y se alzó por los aires seguido por la mujer que había apagado el fuego dejando caer un poco de nieve sobre él. Viajaron bajo el manto oscuro de la noche donde solo algunas pocas estrellas brillaron aquella noche. El cielo estaba algo nublado.

Cuando los sirvientes yokais despertaron esa mañana, se sorprendieron al ver que sus señores ya habían vuelto. Para los kamaitachis era extraño que su señora saliera sin ningún aviso, pero para Jaken la cosa no era nada novedosa. Su amo ya lo tenía acostumbrado a irse por su cuenta y luego volver, además solo había pasado un día de su partida. Sin embargo lo que sí era extraño para el diablillo es que su señor aparentemente se había ido con la bruja.

-¿Dónde pudieron haber ido? - pensó el hombrecillo de ojos amarillos, quien no sabía si preguntarle o no a su señor.

"Mi señora, ¿ a dónde fue? Se fue sin decirnos nada." habló Shimo

"Cuando despertamos ayer usted y el yokai no estaban. Estábamos muy preocupados." continuó Fubuki

"Lo sé, lo siento. Pero había un asunto que atender." contestó la dama invernal disculpándose con sus compañeros.

"¿Sobre el dragón Ryu?" preguntó el ojiazul.

"Así es, fuimos a ver a un herrero que nos dio una pista de lo que sucederá cuando encuentre al yokai dragón."

En teoría, lo que decía era parcialmente cierto, el hecho de que Tensaiga tenía que revivirla, indicaba que ella moriría. Y ya que su más grande enfrentamiento sería por recuperar la gema, eso sucedería cuando encontrara a Ryu. Pero la deidad no quería preocupar a los gemelos, quienes probablemente le harían desistir de seguir con la búsqueda y le pedirían regresar a su tiempo. Las cosas sucederían como el destino las había planeado, y cuando su muerte viniera y colmillo sagrado la devolviera a la vida se disculparía con los pequeños.

"¿Herrero? ¿Hablas del viejo Totosai?" preguntó muy extrañado el diablillo.

"Claro, seguramente lo conoces, Jaken. Sí es él."

"¿Qué podría saber él?" siguió preguntando desconfiado de las palabras de la deidad, hay algo que no estaba diciendo. "¿Y por qué mi señor te llevó?"

"Sesshomaru tenía sus propios asuntos que tratar con el hombre. Si quieres saber sus razones deberías preguntarle a tu señor."

La diosa volvió a dar una respuesta vaga que aún tenía algo de verdad, esquivando el interrogatorio del diablillo. Ella debió suponer que él conocería bien al herrero, y que la razón por la que su amo lo buscaría se relacionaría únicamente por sus espadas. Sin embargo, no quería que el asunto se mencionara delante de los kamaitachis por lo que desvío las preguntas dejándolas a que le preguntara a su señor, cosa que ella estaba segura no haría, o por lo menos no ahora.

Efectivamente como la diosa había previsto el diablillo se calló. Él había sentido que su señor no estaría de humor para ser molestado puesto que lo vio sentado varios metros de ellos con los ojos cerrados.

Antes del mediodía el grupo ya había abandonado la provincia de Hitachi con dirección a Mutsu, región que estaba en su camino al norte. Su velocidad de vuelo era muy buena, en cuestión de semanas habían dejado atrás Musashi, Shimosa e Hitachi, ahora solo les quedaba atravesar la provincia más larga, antes de llegar a las tierras del dragón del Norte en Yeso, actual Hokkaido. Si el conocimiento histórico de la deidad no fallaba, las tierras a las que pronto llegarían se ubican en la actual Fukushima.

La joven diosa, también había hecho otro descubrimiento. Se había equivocado en la fecha de llegada a la era Sengoku. Al llegar pensó que por el clima había aparecido en algún punto entre mediados y finales de Junio, pero aparentemente había llegado a inicios.

La lluvia torrencial que la recibió había marcado de forma adelantada el inicio de la temporada de lluvias y calor, el verano. Había descubierto aquello porque usualmente el resplandor del sol era cada vez más intenso al volar, pues siempre se mantenían a gran elevación. Por otra parte la humedad también era alta aunque aún no tanto como en Julio o Agosto. Sin embargo, ni ella ni sus siervos resultaron afectados por ello, su naturaleza y poder frío los mantenía frescos. Otra era la suerte del diablillo, quien no gozaba de ese tipo de ventajas, él debía soportar el incandescente sol y el sofocante calor por él mismo. Por lo que la diosa, sintiendo algo de pena por la situación del siempre gruñón sirviente, expandía frecuentemente ventiscas heladas que refrescaran su espacio de vuelo. Ignoraba cuál era la posición del daiyokai sobre el sofocante clima, ya que siempre mantenía la misma actitud fría e indiferente. Aún así, a ella no le molestaba compartir su frescor.

El verdadero problema se presentaba cuando aparecían las lluvias, puesto que entorpecía su avance por aire, así que debían hacerlo a pie. Así fue como el viaje se fue alternando hasta que en la primera semana de Julio llegaron a las tierras del clan samurai Iwaki, donde por fin hicieron una parada.

El Tanabata estaba a la vuelta de la esquina.


Ahora ya descubrimos cual es la conexión entre tensaiga y Ria. Parece que nuestro daiyokai favorito no podrá dejarla por un tiempo. Por si no quedó muy claro explico:

Tensaiga vibrará y se inquietará cada vez que Sesshomaru pretenda seguir su camino y abandonar a la diosa, mientras más luche con eso más intenso será el llamado. Pero eso no significa que él no pueda alejarse de ella si fuera necesario, independientemente de la distancia. Siempre y cuando su intención no sea no volver a ella. Tensaiga estña conectada a su señor, así que siempre sabrá sus intenciones. Como lo explicaba en la historia, cuando él se alejó porque le molestaba el ruido de los kamaitachis, colmillo sagrado no hizo nada, porque sabía que su alejamiento no significaba que fuera a abandonarla.

Bueno, las amenazas no faltan de parte de Sessh, pero Ria no se va a dejar. Una vez más sus personalidades y naturalezas chocan.

Hice mi tarea y estuve averiguando un poco sobre el perido Sengoku y su división politica, asi que las ciudades mencionadas existieron en verdad. (Hice mi mejor esfuerzo para recolectar un poco de info histórica, aunque podrían haber errores.)

¿Podría ocurrir algo en la famosa festividad? Lo sabremos en el seguiente capitulo.

IMPORTANTE: El capítulo es largo, pero he decidido que dependerá de ustedes si lo subo completo o fraccionado. Si en los proximos días podemos subir el numero de reviews, seguidores o favoritos a 10 o 15, entonces el siguiente sábado subiré el capitulo completo, sino pues habrá que esperar un buen tiempo parasa saber como avanza esta historia.

Proximamente habrá una corta pero interesante comparativa entre los portagonistas de Inuyasha y Kamisama Kiss. Estén atentos!

Por favor si te ha gustado esta historia, o tienes dudas, deja tu comentario, no importa si lo dejas en tu propio idioma.

Anímame a seguir escribiendo! XOXO.