N/A: Lo sientooooooo... subí los 4 xapis de BM seguidos y me "olvidé" momentáneamente de mis otras historias. Ahora me tengo que poner seria con estas, sobre todo con Azkaban (k solo me kedan 4 xapis!). Aunque mi mente ya ha empezado a pensar en una secuela de BM... (Joanne se tira de los pelos). NOOOO! ESTO NO PUEDE SER! Más ideas no! Jejeje, siempre toy igual. Nuevos fics a montones y nunca termino los antiguos... aigh, pero es que tengo tantas ganas de escribir a Bella y a Sirius casaditos y felices... jajaj.

Pero vamos, que os voy dejando con esta historia mientras mi mente se dedica a desarrollar la otra. Muxos bechitosss! Joanne

PD: No puedo evitar ponerlo…. Jijiji, toy contenta. SDY ganó un premio en el foro WB al "mejor fic del tomo Español". Weeeeeeee!

VII. Pócimas

'¡James, JAMES!'

El aludido se levantó a toda velocidad, medio adormilado y sin enterarse de nada, alarmado por los gritos de Sirius.

Clonc.

James se encogió sobre sí mismo después de incrustar su cabeza contra el techo de la litera, llevándose una mano al sitio del golpe.

'¡Diez minutos para que empiece Transformaciones!'

'¿Qué dices?', soltó, olvidando el dolor de repente. Pegó un brinco y salió de la cama disparado hacia el baño. Esquivó por los pelos a Peter, que salía en ese momento con el cepillo de dientes en una mano y uno de sus zapatos en la otra.

'¡He perdido el otro!', exclamó, buscando como loco por toda la habitación, girando la cabeza hacia un lado y otro. '¡Ayúdame a buscar, Padfoot!'

'¿Y qué te crees que estoy haciendo?', preguntó, levantando un montón de ropa que había tirada en el suelo.

Él no se había enterado, pues se había dormido pronto al volver el día anterior escoltado por McGonagall a la Sala Común, pero al parecer sus amigos no se habían molestado en recoger la ropa al desnudarse para ponerse el pijama cuando regresaron de madrugada.

Un auténtico espectáculo. Peter seguía a la busca y captura del zapato fugitivo, mientras Sirius peinaba al vuelo a James –batalla perdida-, que intentaba dar la vuelta a su túnica y encontrar el agujero para la cabeza.

'¡Todos listos!', bramó James segundos después, cogiendo las gafas que le tendía Peter para salir disparado a continuación de la habitación.

Sus dos amigos escucharon sus pasos alejarse corriendo... para volver al poco rato más rápido si cabe.

'¡La mochila!'

Sirius, que había estado esperando justamente eso, se la dio, y esta vez salieron los tres corriendo hacia Transformaciones.

¡Dos minutos! Tal vez si usaban algún pasadizo...

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'Diez puntos menos... ¡cada uno!', masculló James, apretando los dientes. 'Después de la prisa que nos dimos. ¡Maldita McGonagall!'

Peter rió, acostumbrado a estos espectáculos de James. Él daba todo lo posible por ganar la Copa de las Casas, pero en ese momento...

James movía los dedos delante de sus narices.

'Contando los cincuenta de ayer tuyos son ochenta puntos. ¡El último puesto! Y eso que se supone que es nuestra Jefa de Casa', maldijo, frunciendo el entrecejo.

'¿Pasa esto a menudo?', preguntó Sirius a Peter con curiosidad, apartando la mirada divertida de su mejor amigo.

'Todos los días después de la luna llena. Como volvemos tarde, nos dormimos... y Remus no está para despertarnos.'

'Podemos ir a la enfermería hoy ¿no?'

'Claro que sí', intervino James, soltando un suspiro amargo al recordar los puntos. 'Aún va a tener que estar allí una semana.'

¿Tanto?', soltó Sirius, con los ojos muy abiertos por la sorpresa.

'Las transformaciones lo dejan muy débil... y mejor, porque así tienes tiempo de sobra para contarnos por qué no viniste ayer. ¿Sabes que te estuvimos esperando media hora?'

'Hacia un frío horrible', comentó Peter con un escalofrío.

Sirius soltó una carcajada, y contó a sus amigos su pequeña aventura del día anterior. Al terminar, James lo miró muy asombrado.

'Para la próxima vez que me pillen ya sé qué hacer. Diré que estoy amnésico.'

'No creo que se lo traguen.'

'Por probar no pasa nada', contestó James, encogiéndose de hombros. 'Los puntos me los quitaran igual... los puntos...'

Soltando un enorme suspiro, James bajó la vista al suelo. Peter lo miró negando con la cabeza, mientras Sirius intentaba aguantar la risa.

'Bueno, ahora tenemos Herbología', dijo Peter. 'Más vale que vayamos yendo.'

'Quedan aún veinte minutos', repuso James, mirando su reloj. 'Tomémoslo con calma... no hay ninguna prisa por ir con los de Slytherin.'

Siguiendo las indicaciones del muchacho de gafas, los tres amigos bajaron a los terrenos despacio, charlando y haciendo bromas sobre las utópicas ideas de James para recuperar los puntos perdidos.

'Creo que lo mejor será ganar en el próximo partido a Ravenclaw por una buena diferencia y...'

James se calló, mirando a uno y otro lado.

'¿No está esto demasiado silencioso?', susurró Peter, haciendo patente lo que a los tres les pasaba por la cabeza.

'¡Ya están en clase!', exclamó Sirius, señalando a uno de los invernaderos. Dentro se podían ver muchas sombras moviéndose y el murmullo de conversaciones animadas.

'¡No puede ser!', bramó James, abalanzándose sobre la puerta del invernadero.

Entraron los tres de golpe y todos los alumnos los miraron, riéndose bajito e incluso se escuchó algún que otro comentario mordaz de los de la casa de la serpiente. Pero, sin duda, la peor de todas las miradas era la de la profesora Sprout.

'¡Veinte minutos tarde!', exclamó con voz aguda, su cara roja por el enfado. '¿Cómo podéis explicarlo?'

'¡Es imposible! Pero si el reloj...', empezó a balbucear James, mirando su reloj. Se detuvo entonces, se quedó mirando la esfera con los ojos como platos y luego dio unos pequeños golpecitos a ésta. '¡Se ha parado!'

'¡Quince puntos menos cada uno!', exclamó cada vez más furiosa. 'Y ahora a trabajar los tres.'

'Pero profesora...'

'¡A trabajar!'

Los tres bajaron la mirada, los tres rojos: James muy enfadado y Peter y Sirius por tratar de ahogar la risa.

'Ya van 125, Prongs...', susurró con una risita Sirius al oído de su amigo, quien le contestó con un bufido de ira. '¡Y en solo dos días!'

'¡Es suficiente, señor Potter, deje de hablar!', bramó la profesora Sprout, echándole injustamente la culpa a James. 'Quiero verlos trabajando ya. Pregúntele que hay que hacer a su compañero de al lado.'

Sirius se mordía los labios, intentando contener la risa. Su espalda se convulsionaba, y él se afanaba escondiéndose tras la enorme maceta donde estaba la planta con la que tenían que tratar.

'Será...', masculló James, levantando la vista para preguntar al compañero que tenía al lado qué diablos tenía que hacer. Cuando vio quién era, se puso blanco por la furia. Snape...

'¡Me niego!', se le escapó a James, volviéndose todo ofendido.

La profesora lo miró con las cejas alzadas; sus carillos regordetes como granadas. Estaba estupefacta por la insubordinación del que era uno de sus mejores alumnos.

Y entonces Sirius no pudo más... Su carcajada resonó por todo el invernadero.

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Cuando la profesora indicó el final de la clase, a Sirius no le dio tiempo a reaccionar. James salió disparado del invernadero, echando humo por las orejas del cabreo que tenía.

Peter tuvo los suficientes reflejos como para salir corriendo detrás de él, pero Sirius tuvo que quedarse recogiendo los libros que había sacado para la clase y que no le había dado tiempo a meter de nuevo en la mochila.

Los alumnos fueron saliendo y el invernadero no tardó mucho en quedarse vacío. Sirius, queriendo evitar a toda costa quedarse a solas con la malhumorada profesora Sprout, decidió salir lo más rápido posible.

Al lado de la puerta le esperaba Bellatrix.

'Je... así que veinte puntos menos y detención ¿eh? A este paso vais a tener muy complicado ganar la Copa.'

'No se lo recuerdes a James', comentó Sirius con una risita. Recordaba perfectamente cuando él no había podido aguantar más la risa, y los había castigado a él y a James a limpiar los invernaderos.

'Dudo que pueda recordárselo... No hablo con él.'

Sirius apartó la vista de su prima, fingiendo estar despistado. Lo cierto es que se sentía muy incómodo cuando Bellatrix hablaba de James así; no podía evitarlo.

'Ya se nos ocurrirá algo para recuperarlos', comentó encogiéndose de hombros.

'Más os vale, sino poca competencia auguro este año. Los que habéis perdido en Herbología...'

'Y en Transformaciones.'

'Y los de la noche pasada ¿no?'

'Sí, también', asintió Sirius.

'¿Qué pasó?'

'Me pillaron fuera de la cama a medianoche', comentó riendo Sirius.

'¿Y qué hacías tan tarde fuera?', preguntó Bellatrix con inocente interés.

'Fuimos a ver a...', empezó, pero de repente se dio cuenta de lo que había estado a punto de revelar y rectificó a tiempo, 'a ver las estrellas. ¿No te gustan a ti?'

'Claro', replicó Bellatrix, pensando que Sirius mentía francamente mal, pues recordaba que la noche anterior había estado el cielo completamente cubierto por las nubes. 'Me encantan.'

'Sí.

'Tal vez algún día podamos ir tú y yo...'

Sirius enrojeció, más por lo que se podía entender de esa frase que de lo que verdaderamente había dicho Bella.

'Hum... claro', balbuceó, apartando la vista del rostro de la joven.

Bellatrix escondió una sonrisa, y miró con falsa curiosidad a Sirius.

'¿Qué vas a hacer estas Navidades, irás a casa?'

'No creo... No he recibido ninguna carta', respondió Sirius, indeciso. Miró a Bellatrix a los ojos.

'Oh, bueno', replicó la joven, aunque ya sabía eso. Sirius llevaba sin recibir una carta de sus padres desde que le seleccionaron para Gryffindor. 'Yo creo que también me quedaré.'

'Ah, bien.'

Bellatrix sonrió de medio lado, acercando sus labios al oído de Sirius, y susurró:

'Tal vez entonces puedas llevarme a ver las estrellas.'

Las mejillas de Sirius cogieron un leve rubor, y se limitó a asentir, pues tenía la boca seca.

'Me tengo que ir. Ya nos vemos ¿vale?'

Bellatrix se alejó hacia su grupo de amigas y Sirius la contempló marcharse. Escuchó los comentarios escandalizados de las dos chicas que acompañaban a Bella, referentes a él. Al parecer a su prima no le importaron mucho, porque tras un hosco "cosas mías" empezó a andar hacia el castillo.

Sirius la vio alejarse, sintiendo aún el placentero cosquilleo del aliento de su prima en el cuello.

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(Días después...)

'No sé como Moony lo aguanta', suspiró Sirius, meneando la cabeza.

'No tiene más remedio', replicó James amargamente.

'¿Se puede saber de qué habláis?'

Peter no se enteraba de nada.

'De lo aburrido que es la enfermería...', contestó Sirius, soltando un nuevo suspiro. 'Aunque bueno, también es verdad que nosotros estamos todo el día ahí dentro con él.'

'Sí, claro', rió James. 'Nuestra compañía es de valor incalculable.'

Y era cierto. En cuanto tenían un mínimo rato libre, iban corriendo intentando que nadie los viese a la enfermería a poner al día al licántropo. Remus los esperaba entusiasmado, porque si bien era cierto que estaba acostumbrado, no por eso le resultaba más entretenido pasar las horas muertas al lado de la señora Pomfrey.

Esperaba, de todas formas, salir pronto. Sus heridas esta vez habían sido menores, y se sentía con más energías. Tal vez rogando un poco a la medimaga...

'¡Ya estamos aquí!'

'¡SEÑOR BLACK, NO GRITE! Esto es una enfermería, por Merlín', bufó la enfermera, haciendo gala de su mal humor. Odiaba que se rompiese la calma de su adorada enfermería.

'Lo siento.'

'Bueno ¿qué tal, Moony?', preguntó James a su amigo.

'Bien, supongo', respondió éste, sin demasiadas ganas. 'Me encuentro mejor.'

'Puede que ya te dejen salir entonces', supuso James, sacando un montón de libros de su mochila. 'Aquí tienes lo que hemos dado hoy.'

'Vale, gracias', replicó, cogiendo el montón de libros, mientras echaba un ojo a las asignaturas.

'Lo que hay que hacer de deberes lo he apuntado en una hoja que está...', James se metió la mano en el bolsillo, y se quedó quieto. 'Um... está... estaba...'

'¿La has perdido?'

'Pues... Sirius ¿has visto la hoja de los deberes?'

'¿Esa qué tenía cosas apuntadas?'

'Sí.'

'¿El pergamino ese medio arrugado?'

'Sí, ése.'

'¿El que estaba escrito con tinta de colores?'

'Ése, justo. ¿Dónde está?'

'Lo tiré.'

'¿Qué?'

'Pensaba que era de sucio... ¿Hice mal?'

James estaba a punto de saltar a su cuello, pero Peter lo retuvo.

'Mejor vamos a preguntarle a la señora Pomfrey si puede salir Moony', dijo, intentando distraer al hombre de gafas de su objetivo.

'Oh ¡buena idea!', exclamó Sirius, caminando inmediatamente hacia la sala de al lado, donde estaba el despacho de la medimaga. Después de llamar, se metió dentro, y empezó a escucharse el murmullo de voces.

Cinco minutos después Sirius salió con una sonrisa triunfante, haciendo el signo de victoria con la mano.

'¡Puedes salir!

'¿En serio?', exclamó un estupefacto Remus, que no podía creerse que su amigo hubiese convencido a la enfermera tan pronto.

'Claro que sí.'

'¿Pero cómo...?'

'Al parecer le atrae mucho la posibilidad de no tenernos más aquí metidos.'

'Lo suponía', intervino James, y a toda velocidad los libros que había tenido para Remus en la mochila. La cerró y se la colgó al hombro. 'Venga, que nos vamos.'

Remus alzó las cejas.

'Por lo menos podías dejar que me levantase de la cama' ¿no?'

Azuzado por James y Sirius, Remus estuvo listo para marcharse en dos minutos. Cogieron todo y salieron de la enfermería bastante más animados que al entrar.

Después de pasar por la Sala Común para que Remus se arreglara decentemente, bajaron a comer, con los dientes afilados por el hambre. Iban charlando de lo que habían estado haciendo esos días sin Remus justo cuando pasaron por delante de los relojes de arena. El licántropo paso de largo al principio, pero de repente se detuvo, blanco. Se giró muy despacio, para observar que sus ojos no le habían engañado.

A Gryffindor no le quedaba prácticamente ningún rubí.

Lo señaló, con la boca entreabierta, incapaz de decir palabra.

'Verás...'

'Pues...'

Sirius y James pusieron cara de inocencia a la vez, llevándose la mano a la cabeza.

'No te dijimos nada porque...'

'Como estabas débil...'

'¿Se puede saber QUÉ ha pasado?'

'Nos levantamos tarde', empezó James, avergonzado.

'Y la clase había empezado.'

'McGonagall...'

'¡Y mi reloj!'

'Y Sprout...'

'¡Me puso con Snape!'

'Y yo te juro que no pude aguantar la risa. Lo intenté, pero...'

Remus los miró. Al final optó por girarse hacia Peter y que éste le contase qué había pasado con frases completas e inteligibles. Poco después ya sabía toda la historia, y Remus los castigó con sendas collejas por estúpidos.

'¿Y a Peter ninguna?', protestó Sirius, rascándose la zona dolorida. '¡Llegamos tarde a clase porque no encontraba su zapato!'

'Tendrás morro...', protestó éste.

'No cuela, Sirius. Ya podéis idear algo para recuperar todos esos puntos.'

'Lo sé... Todo Gryffindor está furioso', susurró James, y un sudor frío le recorrió la espalda. 'Tenías que haber visto a Lily. Lleva sin hablarme desde entonces.'

'Con razón.'

'No hace falta que me des tantos ánimos, Moony', protestó James, entrando en el Gran Comedor.

Iba a seguir andando cuando una mano lo detuvo por la espalda. Al girarse, James se encontró con un primer plano de una estricta McGonagall.

'Vuestra detención será hoy a las cuatro, en los terrenos', dijo secamente, echando una mirada furiosa a Sirius y a James. Al parecer ella también estaba molesta por los puntos perdidos. 'Y más vale que se os ocurra una forma de recuperarlos, porque no quiero escuchar ni una sola vez más a Nevrer (el jefe de Slytherin) recordándome que no tenemos ninguna opción.'

'Entendido, profesora', replicó James.

'Podéis ir a comer. Y ajuste su reloj, señor Potter. No pienso tolerar que lleguéis tarde.'

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Habiendo estado al menos dos horas ayudando a Remus a ponerse al día, Sirius y James casi agradecieron la excusa que les brindaba el castigo para escabullirse de allí.

Se despidieron de Remus y del pobre Peter, que no había tenido tan "buena" suerte, y salieron los dos por el retrato hacia los terrenos. Por lo menos esta vez llegarían a tiempo.

Hacía mucho frío, y Sirius maldijo por haberse olvidado la capa arriba. Un descuido que seguramente le costaría un buen catarro.

En las escaleras delante de la enorme puerta, McGonagall los esperaba. Indicó a James que bajase a los invernaderos, donde le dirían qué hacer. Sirius iba a seguirlo, cuando la profesora lo detuvo.

'¿Él no viene?', preguntó James, asombrado.

'Tiene que acompañarme un momento. Creemos haber encontrado una cura para su amnesia.'

'¿En serio?', saltó James, tan emocionado por la noticia que casi se abalanza sobre la profesora.

'Aún no sabemos si funcionará, pero sí, creemos tenerla', dijo, escrutando con la mirada al joven mientras reprimía una sonrisa. 'Y controle su entusiasmo.'

'Claro, claro, profesora', dijo James, con una sonrisa enorme.

'Baje ya. El señor Black vendrá dentro de poco.'

Mientras James bajaba en dirección a los invernaderos, Sirius siguió a McGonagall al interior del castillo. Ésta avanzaba rápido por el pasillo, y Sirius tuvo que acelerar el paso para no quedarse atrás.

'¿Y cómo es la cura?'

'Se lo explicaremos cuando lleguemos, señor Black', contestó McGonagall, ajustándose las gafas. 'Es algo complicado.'

A buen paso, llegaron rápido a la enfermería. Habiendo estado allí esa mañana, a Sirius se le antojó horriblemente familiar.

La señora Pomfrey los esperaba colocando una hilera de pociones en una mesa. Cuando los escuchó entrar, la mujer se volvió.'

'Ah, bien. Acérquese aquí, señor Black.

'¿Me tengo que beber todo eso ahora?', preguntó inseguro el joven, recordando el repugnante sabor de las pócimas que el día del partido le había dado.

'Ahora no. Veamos... se las he dividido por días', explicó, señalando las hileras. 'Éstas dos de aquí –la azul y blanca- se las tiene que beber nada más levantarse. Tres horas después tiene que venir a por estas tres y tomárselas en el orden en el que están colocadas. Y, finalmente, cada dos horas tiene que venir para tomarse un frasquito de esta verde. El último tendrá que ser a las nueve de la noche.'

'¿Y esto durante cuántos días?'

'Cuatro', respondió, alzando la mirada. '¿Ha entendido todo?'

'Hum... ¿puede apuntármelo en un papel?', preguntó Sirius mirando desesperado el montón de botellitas que tenía delante. Era imposible recordarlo todo.

'Aquí tiene, dijo, tendiéndole un pergamino con todo. 'Mañana empieza ¿de acuerdo?'

Sirius asintió, medio perdido aún. Leyendo una y otra vez el pergamino, intentando aprendérselo, salió de la enfermería. Amablemente la profesora McGonagall lo siguió, recordándole que aún tenía que cumplir su castigo.

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Desde su sitio en el Gran Comedor, James tenía la vista fijada desde hacía rato en un punto en la mesa de Slytherin.

Sirius había pasado la mano por delante de su cara varias veces, pero él fingía no darse cuenta. Estaba pensando.

Cuando una sonrisa verdaderamente malévola cruzó su rostro, Remus no necesitó nada más.

'Se le acaba de ocurrir una broma para Snape.'

'Oh... ¿y te parece mal, Moony?', dijo James, mirándole suplicante. 'Hace tanto que no le gastamos una buena broma. No podemos dejar que se acostumbre a tanta calma. Se aburrirá.'

Remus puso los ojos en blanco, pero James siguió a la carga, soltándole una enorme lista de razones por las que hacer una broma a Snape era una buena idea.

'Me pregunto qué se le habrá ocurrido', pensó en voz alta Peter, mirando la discusión entre el licántropo y el chico de gafas.

'A saber... cualquier cosa', dijo Sirius, mirando también con interés a su mejor amigo. Echó un vistazo rápido a Snape, y pensó que verdaderamente tenía cara de estar muy aburrido.

'Por cierto ¿no tenías que haberte ido a tomar la poción ya?'

La cara de Sirius se transformó al recordar que Peter tenía razón. Se levantó como si hubiese estado sentado encima de un muelle y salió disparado del Gran Comedor, sin dar tiempo a que James y Remus preguntasen qué pasaba.

Sirius, corriendo por los pasillos, rogaba porque la señora Pomfrey no estuviese... o que se encontrase en su despacho y no se hubiese enterado de que no había ido a tomar la poción ese día.

Se detuvo en una esquina, resoplando, intentando recuperar el aliento.

'Te veo bajo de forma', rió una voz a su espalda, que Sirius reconoció de inmediato. '¿Y esas prisas?'

'La poción...', explicó atropelladamente el joven, de forma que Bellatrix no se enteró de nada. 'Es que estoy tomando unas pociones para recuperar la memoria. O eso se supone, porque yo no tengo ni un recuerdo nuevo.'

El rostro de Bella se ensombreció momentáneamente, pensando que si Sirius recordaba todo tan pronto, nada de lo que estaba haciendo serviría para nada. Necesitaba más tiempo.

Sonrió, ocultando sus pensamientos.

'Tal vez se necesitan unos días para que haga efecto.'

'No sé yo', dijo Sirius, bromeando. '¿Me acompañas entonces?'

'Sí, claro', aceptó Bellatrix, acercándose a su primo para andar a su lado. 'Pero no pienso ir corriendo.'

'Claro que no... total por un poco más tarde que llegue no va a pasar nada.'

'Eso mismo pienso yo', dijo, regalando a Sirius una sonrisa tan sensual que a éste le temblaron las piernas.

'Eh...'

'Vamos ¿no?'

'Sí, eso.'

Se hizo un silencio entre los dos, algo incómodo, por lo menos para Sirius, que con cada paso que daba sentía el brazo de Bellatrix rozando su propio brazo. Ésta lo miró con una nueva sonrisa. A Sirius le encantaba ese detalle... Ella parecía tan contenta siempre de verlo, de estar con él. Adoraba su sonrisa perenne.

'¿Has decidido entonces si vas a quedarte por Navidad?'

'Creo que sí. ¿Por?'

'Bueno, pensé que a lo mejor te ibas con Potter y su familia.'

'No, él se queda.'

Bellatrix se mordió el labio inferior, con expresión soñadora. Sirius la contempló, pensando si esa aparente alegría era por que él se quedaba. Intentó controlarse para no ponerse rojo, y bajó la mirada.

Fue entonces cuando se chocó con Dumbledore.

'Lo siento', exclamó Sirius, y al ver quien era empalideció levemente.

'Nada, nada, señor Black', replicó éste, con la expresión risueña de siempre. 'Veo que va a tomar la poción... ¿Funciona?'

'Pues creo que no.'

'Todo a su tiemp...'

Dumbledore se calló al ver quién había detrás de Sirius. Bellatrix le mantuvo la mirada, con una sonrisa desafiante en los labios que le salió involuntariamente.

El director disimuló rápido su sorpresa, pero el brillo de sus ojos parecía haber disminuido algo.

'Vaya a tomarse la poción, señor Black, o Poppy se enfadará', dijo, intentando que su voz sonase casual.

'Claro', replicó éste, y se volvió hacia su prima. '¿Vienes, Bella?'

La joven se acercó a él, ante la atenta mirada del director. Rodeó el brazo de Sirius, haciendo que éste se sonrojara, y se puso de puntillas, acercándose sus labios al rostro de él.

'Estate quieto', dijo, soplándole cerca del ojo. Luego le rozó con la yema del índice y sonrió. 'Tenías una pestaña.'

'Ah', alcanzó a decir Sirius, abrumado por el cercano contacto que habían mantenido; su corazón latiendo a toda velocidad.

'Venga, pide un deseo.'

'Ya', dijo Sirius, después de pensarlo durante un instante.

Bellatrix sopló la pestaña y ésta salió volando del dorso de su mano. Ladeando la cabeza, miró a Sirius divertida.

'¿Qué has pedido?'

'Eso es secreto. Si te lo digo no se cumple.'

Distraído como iba, Sirius no se dio cuenta de que Bellatrix volvió la mirada atrás un momento. Sus ojos coincidieron con los del director, que mirando fijamente la escena, tuvo un terrible presentimiento.

N/A: Muahhahaha, que mala es Bella... es retorcida la tía. Me encantan estas escenitas en las que Sirius se derrite por ella. Y jejeje, tb me encanta sacar de quicio a James, me río tanto... xDD En fin, se puede decir que en este xapi no pasa nada. Es que veréis, este no es el típico fic de acción. El argumento gira en que Bella trata de atraerlo, y para eso son pequeñas conversaciones, frases sueltas; esas cosillas... Entonces claro, entre conve y conve pues tengo que rellenar con escenas sueltas. Se puede decir que es "unos meses en la vida de los Merodeadores", nada del otro mundo. Espero de todas formas que os esté gustando. Y además me quedó largo! (casi 9 hojas!)

Si vierais lo que me pasó... Recordáis la frase cuando McGony dice que no quiere escuchar al jefe de Sly diciendo que no pueden ganar la copa? Pues al principio había puesto Severus... –la costumbre-. Os imagináis que lo llego a subir así? XDD Que palo. Os habriáis quedado todos como O.o

De Bella os voy a recomendar un nuevo fic que me gustó, lo que pasa es que es en inglés. Se titula ... de ... He decidido que ahora que empieza el verano y eso pues os recomendaré alguna cosilla buena que lea.

Por cierto, necesito además una foto para un RGP con urgencia. Tiene que ser de alguna persona de verdad que os recuerde al Rody de mis historias LDP y EBDJ. Si la encontráis, por favor, mandarme el link o la foto a mi mail, lo que queráis.

Y ya me queda solo un día de exámenes! YEPEEEE... (se supone que debía llevar una hora estudiando jeje). Ahora que tengo este xapi hecho, pues escribiré o el 9 de Azkaban o el 12 de SDY. Depende de para el que me sienta más inspirada.

Y os dejo ya (x cierto, mi blog ya casi está. Weeeeee!)

Bexitos! Joanne

CONTESTO REVIEWS:

AnnaTB: Juju, pues sí, McGony sabe que está amnésico, pero supongo que Sirius la saca de quicio en todas sus formas XDD Lo cierto es que cuando la saco se me descontrola la situación, por eso parece estar de tan mala leche siempre. Jjeje, tengo que aprender a manejarla mejor. En fin, bxtos, wapa!

Marin Black: Jijiji... después de leer BM sigues pensando que Siriusin no se ve sexy de malo? Uhhh, love! Jejej, me animaste con lo que te hacían gracia mis fics. K mona! Jejeje... Tenemos que hablar antes del miércoles. Tienes que encontrar una foto para tu RPG de Lucius. Encontré una que más parece Draco, pero a falta de nada mejor... ya te la pasaré.

Yare: Veamos, el título de tu historia me suena pero muchísimo. No sé si es que he visto tu historia por ahí u otra que se llama igual. De todas formas en cuanto tenga tiempo me pasaré. Así que no te imaginabas a Bella-Sirius? Ohhhh... como adoro a esa pareja! XDD Es genial, en serio. Espero que a medida que vayas leyendo sobre Bellatrix dejes de odiarla, xq junto a Sirius y Remus es el mejor personaje de los libros. Muxas graxias por tu review!

Angie Crowe: Wenas! Jjejej, ya exaba de menos tus reviews. La verdad es que hablar sobre lo que me decías en el review jeje... hace tanto que no actualizo que en fin. Espero que te guste también este xapi, y weno, en cuanto a tus fics ya los guardé, pero aún tengo k leerlos. Bxtos!

Bellatrix Black: La verdad es que Bellatrix está saliendo menos de lo que planeo... Tengo que meter más conversaciones con ella o no va a terminar de convencerlo, aunque weno, puede k nunca lo convenza. Muahahha! Ya se verá eso. Me alegro que te hiciese gracia la escena del perro... me cuesta muxo escribirlas XDD

Akasha: Uhhh... jeje, aquí parece que su cita se acerca, como ves. Me encanta la frase de "me puedes llevar a ver las estrellas" ajajaja, se puede interpretar muy pero k muy mal XDDD Ains, los fics me afectan! Y lo de la pulsera, pues como se me ocurrió sobre la marcha, pues vosotros imagináis que la primera vez que hablan (esa ocasión en los terrenos) se la da. Ahí no puse la conversación entera, así que podéis meterla. Y x cierto, tenemos que hablar de la foto de Rabastan y Rodolphus. Creo que para Rody meteré a una de Jude Law, pero no sé. A ver si el lunes coincidimos en el msn. Bss!

Vampisandi: jejee, muxas graxias por tu opinión. Me gusto muxo! Me alegra ver que te pasas tanto por mis fics. Creo que fue lo mejor del concurso, conseguir una lectora como tu. A ver k te parece el 7!

Agus y Moony: Bueno, estoy deseando que subas cosas en la web de Bella-Sirius. Ahora que viene el verano a ver si puedo ayudaros con algo. En cuanto al fic, me alegro que te guste tanto esta pareja jejeje... Es k es... uhhh, sin palabras! Ya ni me fijo en que son primos jejjejeje.

Lily Dark Black: Oh, me encantaría contra con tus fics y dibujos! Tal vez puedas pasármelos por internet, no? Tienes msn? Además asi hablamos! Pues la web aún no está publicada, pero cuando esté lista ya te pasaré el link sin falta. Por lo demas, muxas graxias por tu review, wapa! Jejeje, y ya de paso agradecerte tb el concurso de WB. Debiste leer un monton! Bechiiitosss!

KaicuDumb: Bueno, de tu parte dos reviews enormes jejeje; me encantaron! Comentas un montón de cosas, así que no sé x dnd empezar. Primero que creo que tienes razón con lo de Dumby... jeje, no lo sé manejar bien. También tiene muxo k hacer en este fic así k weno. En cuanto a Bella, me estoy dando cuenta de que sale demasiado poco. En este en especial fue prácticamente todo de los merodeadores. Ah, tengo k arreglar eso! Y x ultimo MDUL... Mi ultimo exam es el lunes, así que espero poder ponerme pronto con todos los que llevo de retraso. Me encanta!