Capítulo 4
El silencio en la habitación era incómodo y molesto.
¿Por qué estaba tan obsesionada con él en mi otra vida si vivíamos pasando momentos así de incómodos?
"Agh, no puedo con este estúpido silencio."
Por la incomodidad y la impaciencia que comencé a sentir, crucé mis brazos sobre mi pecho e hice un chasquido con la lengua mientras fijaba mi vista a cualquier otro rincón de la habitación que no fuera él.
De repente sentí como pellizcó una de mis mejillas.
– ¡O-ouch! ¡¿Qué creés que estás haciendo?!
– Deja de ignorarme estúpida. – Murmuró con rabia mientras seguía pellizcando con más fuerza mi mejilla.
– ¡Detente! ¡Ay! ¡Ay!
– ¡Entonces mírame!
Soltó mi mejilla y rápidamente la acaricié. Seguro estaba roja por el pellizco pero al fin estaba libre de sus tontas manos.
– Uff... – Suspiré agotada.
Dirigí mi mirada hacia él.
Otra vez se había cruzado de brazos y me miraba con seriedad.
A pesar de tener solo nueve años tenía el seño fruncido peor que un viejo gruñón.
Pero sus ojos rubíes seguían igual de flamantes y brillantes.
– N-No quería lastimarte gravemente... No fue intencional... – Murmuró mientras apretaba sus puños.
– Tú...solo estás algo débil porque no entrenas diariamente, se...que puedes hacerte más fuerte. Así todos e incluso yo, podremos ver que no eres frágil... – Bajo la mirada hacia la cama.
Sin poder evitarlo, mi corazón comenzó a latir apresuradamente.
Ya recuerdo, está es una de las razones de porque comencé un estúpido enamoramiento por él.
Fue la primera vez que me hablo con sinceridad.
No fue porque su madre lo mando o porque todos esperaban que él se disculpará.
Cada palabra que nacía de él eran con sinceridad, no me veía como una princesa tonta y frágil.
De repente, el recuerdo de él mirándome con sed de sangre mientras me perseguía apareció fugazmente en mi cabeza.
Sentí como mi corazón comenzó a latir esta vez con pánico.
Debía calmarme, este es el pasado no el futuro.
Pero esta era una oportunidad única para escapar y alejarme por siempre de él.
Por mi silencio ante sus palabras él volvió a dirigir su mirada hacia mí.
No sé que habré demostrado con mi rostro pero él en un segundo se abalanzó hacia mí apoyándo sus manos en la cama, dejándome más en shock.
– ¡¿Qué sucede?! ¡¿Te duele algo?! ¡¿Por qué ahora estás más pálida de lo normal?! Te ves... – No termino de hablar.
Vi como su seño lentamente comenzó a fruncirse de nuevo y pude notar como apretaba sus labios con fuerza.
Estaba por decirle que me sentía bien para que se alejará de mi pero sus palabras me sorprendieron de nuevo.
– Ahora, ¿Me tienes miedo?
Sentí como mi alma quería salir de mi cuerpo. No podía creerlo.
"¡¿Qué está pasando?! ¡Esto no había sucedido antes!"
En mi otra vida, Katsuki, después de disculparse a su manera simplemente se levantaba de la silla y se iba mientras yo agradecía sus palabras.
Pero ahora, está situación se escapaba de mis manos ...
Aclaré mi garganta y lo aleje un poco de mi.
– Mírame, estoy bien, ¿Si?
Él seguía mirándome con enojo y ¿preocupación...?
– Primero que nada, gracias. Estoy agradecida por tus palabras de hace un momento. – Sonreí – Y segundo, tienes que estar tranquilo, yo no tengo miedo de ti.
– Entonces... ¿Por qué tenías esa cara?
Creo que nunca había visto su rostro así. Era inocente e inseguro pero también sus ojos demostraban lo preocupado que estaba.
– ¿Porqué es mi cara? – Intente bromear para distraerlo.
– Tch, idiota. Sabes muy bien a lo que me refiero. – Gruñó.
– Aaah, solo tuve un leve dolor de cabeza, nada más. No es nada por lo que debas preocuparte.
Movi mis manos frente a su cara de un lado a otro con nerviosismo.
Su rostro seguía serio pero pude notar como lentamente se relajaba.
De un momento a otro, dio un salto exaltado y bajo de la cama.
Era bastante gracioso ver lo incómodo y nervioso que estaba. Al parecer, su comportamiento de recién fue de manera inconsciente a como actúa normalmente.
A pesar de lo cómico que se veía, era también adorable, después de todo, era solo un niño.
– ¡T-Tú! ¡No le cuentes a nadie de esto! ¡Y hazte más fuerte, así podremos pelear juntos! – Salió corriendo de la habitación.
Sus palabras me dejaron aturdida. ¿Este era realmente él mismo Katsuki que conocía?
– Agh, como sea. Debo arreglar esto. – Murmuré.
"Debo crear mis siguientes objetivos, si realmente he regresado... ¡Debo cambiar mi vida por completo si quiero evitar morir en sus manos!"
Apreté mis pequeños puños con firmeza.
– ¡Lo haré! ¡Cambiaré mi vida!
¿Qué será de la vida de Ochako ahora? Lo sabremos pronto :)
Gracias por leer~
