Notas Del Autor: ¡Yay! ¡Planeo actualizar el feriado! De todas formas, este ingeniero vino e intentó arreglar mi computadora. Encontró cinco virus pero no pudo hacer nada con mi problema de Internet, así que se llevo mi computadora para ver si la puede arreglar... pronto. Realmente desearía que fuera ingeniero y no apenas un individuo de la calle que mi mamá invitó otra vez...
Dead Famous
Por Rozefire
Capítulo 6
La Caminata-Perruna
Traducido por LR CHAN
Kagome decidió que era tiempo de ir a caminar al día siguiente... sobre todo porque Kikyo marchaba alrededor del chalet con el humor más asqueroso que Kagome había visto hasta ahora. Ella había despedido ya a tres personas inocentes, al los que cogió totalmente desprevenidos - dos limpiadores y un cocinero. Kikyo realmente estaba de malas.
¿ por qué estaba de tan mal humor? Debido a Inuyasha, Obviamente.
Él no estaba.
¿Dónde esta? Donde - esta?" Era generalmente el pensamiento que rondaba la mente de Kikyo mientras que se detenía en cada cuarto y pasillo en busca de la superestrella perdida.
Si había algún buen momento para dejar el chalet, era ese. Kagome saltó las ultimas escaleras del chalet antes de examinar el área alrededor suyo. Kagome podía ir a pasear alrededor de los jardines y oler algunas flores , o podría ir abajo a la playa y construir algunos castillos de la arena.
O quizá podría correr a buscar un taxi y regresar a su casa, a donde ella pertenecía. Comenzaba a sentir nostalgia. Extrañaba el no poder ver a su familia...a su madre especialmente. Extrañaba no poder descargar sus problemas con sus amigas, aunque sabia bien que aunque ellas estuviesen a su alrededor no les interesarían sus problemas – solamente le prestarían atención a cierto individuo que la sacaba de sus casillas.
"Me sentiré muy feliz cuando esto termine..." murmuró terminando su marcha por la escalera y continuándola sobre la calzada.
"Oye Kagome! Que estas haciendo?"
Kagome se dio la vuelta para encontrar el origen esa voz , dándose cuenta que se trataba de Sango que venía de una de las esquinas del chalet, traía tres pastores alemanes adelante suyo que la arrastraban adelante por la correa. Después de Sango vino Miroku con cuatro perros y atrás de él siguieron muchos más voluntarios que al parecer también estaban acarreando perros.
"Que es lo que hacen?" les preguntó Kagome cuando estos se acercaron. "alguno clase de propaganda patrocinada por perros?"
"no, no," Miroku sacudió su cabeza. "Necesitan hacer ejercicio una vez al día y como hay tantos prácticamente todo el mundo tiene que participar para darles una caminata."
Kagome le mando una mirada . "Están escapando de Kikyo, no es verdad?"
"Igual que tu?" le devolvió el tiro.
Sango tiró de sus perros para que se detuvieran mientras se acercaba a Kagome. "Acaso la has visto? Kikyo se pone furiosa cada vez que él hace algo como esto."
"A hecho esta clase de cosas antes?" Kagome pregunto.
"Bueno..." Sango se encogido levemente. "lo hace generalmente en las noches de Luna Nueva... solamente porque ésa es la una época del mes en la que él puede mezclarse con la gente normal y no ser reconocido ."
"personalmente no lo culpo por salir y especialmente si tiene esa gran oportunidad de hacerlo." Miroku dijo seriamente.
"Lo malo es que nunca avisa, no deja ninguna nota, ningún adiós, solo desaparece y está generalmente de nuevo en su cama antes de que Kikyo pueda decirle desaparecido." Sango continuó. "Lo raro es que esta vez él no ha vuelto."
"Quizás ya se hartó de ser famoso?" Había sonado razonable en su cabeza. Pero en el momento en que ella lo dijo, Miroku y Sango se empezaron a asfixiar de risa. Kagome se sintió realmente estúpida de haber tenido esa idea... ¿Inuyasha, cansado de la fama? Quizá en una cierto universo alterno o en una galaxia paralela.
"Lo dudo ." Miroku rió, sus ojos estaban llenos de lagrimas "Lo mas probable es que haya estado en una fiesta, emborrachándose toda la noche y haya pasado la noche en una zanja, donde probablemente unos niños lo están picoteando con palitos y no estaría-" paró de hablar cuando Sango le mando un codazo en el estomago. "Um... Lo que quiero decir... es que eso es lo que yo habría hecho. Probablemente ahora Inuyasha este allí afuera donando dinero a algún orfanato y este demasiado ocupado jugando con los niño."
Kagome no creyó eso ni por dos segundos. Sango tampoco. La muchacha más vieja suspiró pesadamente y rodó los ojos, "Sigamos gran bolsa de gas, debemos conseguir que todos estos perros tengan su caminata antes de su postre a las tres."
Algo brillante, una idea impulsiva llegó a Kagome. "Oigan - porqué no me dejan tomar uno de los perros para caminar con él abajo en la playa?"
Miroku paró y miró tras ella. "puede manejar un perro, verdad?"
"Claro que puede." Sango hizo una muecas. "ella maneja a Inuyasha mejor que cualquiera de nosotros."
Miroku, probablemente convencido por las palabras de Sango, le dio la correa de uno de los pastores alemanes más pequeños. "Bueno, Toma a Bess, a ella le gusta mucho la playa. Pero cerciórate de traerla de vuela antes de las tres o si no Kikyo nos gritara a nosotros. "
"esta bien," Se despedía Kagome mientras se alejaba.
Decidió tomar el camino hacia la playa que Sango le había enseñado ayer, cuando le daba el pequeño recorrido por el chalet. Era una ruta que conducía bajo el área de la piscina, abajo de los acantilados y a lo largo de un sistema de caminos empedrados, que estaban integrados a la superficie rocosa
Comenzando el recorrido de Kagome, esta fue sorprendida por mas de media docena de guardias de seguridad - incluyendo una cerca eléctrica acompañada por guardias que tenían ropas similares a los de la swat.
"Um... Soy una de las paseadoras de perros." Kagome señaló a Bess que caminaba alrededor de sus tobillos como si intentara enredarla para tirarla al suelo. El guardia presionó el gran botón que se encontraba en el panel, para desactivar la corriente eléctrica antes de abrir la puerta que le permitiría pasar a través de ella.
La playa estaba prácticamente llena de gente a la que mirar. Kagome sospechaba que todos poseían al menos la mitad de dinero que tenia Inuyasha para poder estar cerca de su chalet. La mayoría eran mujeres jóvenes que probablemente vagaban por allí para ver si tenían la suerte de encontrarse con cierta superestrella de blanca cabellera.
Bess el perro, parecía estar muy entretenido con la tierra, porque arrastraba a Kagome en círculos sin despegar su nariz del suelo... probablemente persiguiendo algún olor misterioso que Kagome no podía detectar. Ella solo seguía a Bess hiendo a donde ella la llevara.
Era un día agradable, no había nubes en el cielo y la arena estaba tan caliente que se quemo los dedos del pie. Era la clase de clima que solamente se experimentaban en los días de fiestas en verano... pero era más probable que aquí todos los días eran mucho mas bonitos para Inuyasha.
Hablando de eso, ese ultimo evento la había llenado de dudas y molestias de él, mas que cualquier otra cosa .¿Qué clase de persona se desaparecía en medio de la noche con ninguna indirecta o advertencia y también desaparecer el día siguiente? Cualquier persona con un poco de consideración habría dejado por lo menos un mensaje que dijera adónde había ido o cuando estaría de regreso. Aparentemente nadie sabia si debía empezar a preocuparse por Inuyasha, o simplemente aceptar que él estaría de regreso en la tarde.
Probablemente Miroku estaba en lo correcto... probablemente estaba metido en alguna zanga con una botella de cerveza en la mano. ¿Y que era lo que tenia la Luna Nueva ? Qué hacia a la Luna Nueva tan especial...?
Una vaga memoria de la noche anterior volvió repentinamente a Kagome, pero era tan vaga y distante que no podría decir si era un sueño o una clase de sensación de déjà vu. Ella habría podido jurar que había visto a alguien, posiblemente Inuyasha, saltando sobre su balcón... pero no podría determinar si realmente lo había visto o no.
"Aun así él sigue siendo un grosero." Ella le dijo al perro que insistió en jalarla hasta la superficie del agua (una sensación sumamente agradable para sus dedos calientes).
La única razón por la que Inuyasha era un caso de dolor de cabeza era porque nadie se había preocupado de formarlo apropiadamente. Sus padres habían muerto cuando él tenia apenas once años, aunque Kagome tenía dudas de que un primer ministro y una modelo de ropa interior se fuesen a encargar de un papel-modelo para un niño creciente. Y después de haber sido criado por una tía que no le había dado obviamente amor o bolsas de dinero que lo hicieran cambiar. ¿Qué clase de vida era ésa para un niño de todos modos?
¿Y qué había sucedido exactamente en 1992 , que nadie se atrevía a hablar?
Kagome había ido por los alrededores intentando conseguir hablar con gente acerca del tema, pero la gente con la que hablaba la evitaba o no recordaba acontecimientos importantes que ocurrieran en esa fecha, o apenas evitaban hablar del tema.
Lo que había sucedido en ese año era un tema que no mucha gente se veía dispuesta a discutir. Parecía como si la mayoría de los miembros nuevos del personal estaban tan informados como Kagome de lo que había sucedido en 1992, aunque viejos miembro que habían permanecido allí once o más años al parecer habían hecho votos de silencio.
Kagome no conseguía ninguna respuestas...
"Oye!"
Dos muchachas con bikinis que eran obviamente demasiado pequeños para ellas prácticamente saltaron sobre ella. Kagome tuvo que clavar los talones en la arena para evitar Bess que la arrastrara.
"Díganos," la muchacha vestida de color de rosa golpeó su cabeza y puso un dedo en su barbilla. "Es usted es esa muchacha Higurashi que ganó el concurso!"
"Que Es Higurashi." Pareciera como si Kagome estuviera plagada de gente que la incomodaba diciendo su nombre.
"Podrías hacernos un pequeñísimo favor?" la muchacha en púrpura le pidió con las manos juntas.
Allí venia. Siempre iba a ser famosa como esa muchacha qué conoció a Inuyasha '. Kagome realmente estaba comenzando a odiar su oportunidad de oro '.
"Podrías conseguirnos el autógrafo de Inuyasha!" dijeron ambas en coro.
Kagome sintió compasión por ellas . Esas dos probablemente pasaban su vida en la playa para ver si conseguían ver a Inuyasha. ¿A caso no tenían una vida por la cual preocuparse? Y con la intención de decirles que no, Kagome dijo "no".
"Qué?" las dos muchachas lucían confundida.
"Bueno...no debería , pero estoy preocupada por el analfabetismo de Inuyasha. No puede ni escribir su propio nombre, pobre." Kagome suspiro de forma melodramática a su audiencia.
Las dos muchachas parecían aun mas confundidas y un poco aturdidas. "No lo sabia" dijo la rosa.
"Oh sí. Cuando se suponía que tenia que aprender el alfabeto, él estaba demasiado ocupado en los negocios del comercio de perfumes. Y debido a que era demasiado famoso, cuando estaba en las pasarelas de modelaje, se suponía que debía aprender a multiplicar." Kagome les dijo. "Inuyasha es retardado..."
"Como es que lo sabes?" la muchacha en la púrpura le preguntó sospechosamente.
"Bueno, le pedí un autógrafo para mi hermano menor pero cuando lo hice los ojos del pobre se pusieron cristalinos... verdaderamente deprimente." Kagome suspiró deprimida.
Mientras que las dos muchachas discutían mientras se alejaban, sobre el nuevo descubrimiento que habían hecho sobre su superestrella favorita, Kagome finalmente tuvo la oportunidad de tirar al perro y trotar tras ella, dirigiéndose hacia el suelo rocoso que estaba mas alejado de la playa.
Ahora, Kagome se preguntaba cómo ese rumor se esparciría por el público...
Dio un vistazo a su reloj y frunció el ceño. Marcaba cerca de las tres, ella sabía que tenia que llevar a Bess de vuelta al chalet para no meterse en problemas con Kikyo, o que ella les echara una reprimenda a Miroku y a Sango. De ninguna manera iba a permitir que alguien más pagara por las cosas de las que ella era responsable. Así que Kagome tiró de la correa "venga Bess, Tenemos que volver."
Bess no le hizo caso, arrastrándola mas lejos de la muchedumbre, hacia las rocas que estaban cerca al acantilado, las rocas eran dentadas y resaltaban de la arena y los acantilados se encontraban a continuación. Kagome lo miró peligrosamente. "No creo que sea una buena idea ir por allá... se ve muy peligroso." Trato de tirar mas fuerte de la correa que sujetaba a Bess.
El gruñido de Bess fue feroz. El hecho fue que parecía peligroso oponerse a ella, así que Kagome se calló al instante y siguió obedientemente al pequeño perro. "Esta bien... algunos minutos más". Y luego tendrían que regresar.
Pasearon alrededor de las rocas por un rato mas. Kagome tenia la vista fija en su reloj, tratando de convencer al perro de que tenían que regresar porque ya era tarde, pero no consiguió nada. Bess seguía siendo guiada por algún olor que Kagome suponía que debía ser algún pescado muerto que probablemente se comería, luego sufriría una intoxicación y Kagome seria la responsable de la muerte de uno de los perros de seguridad...
Por otro lado ella se encontraba muy sumida en sus pensamientos.
De repente Bess paró repentinamente y Kagome miraba arriba suyo. El pequeño pastor alemán tenia la mirada clavada hacia abajo del acantilado, su cara parecía alerta y tensa. Un débil gruñido retumbaba en su pecho. Kagome frunció el ceño y se dispuso a ver lo que Bess había estado siguiendo con su olfato. Observo lo que captaba la atención del perro totalmente confundida antes de comenzar a hundirse en que...
Por un segundo creyó que lo que miraba se trataba de un cadáver.
Pero se dio cuenta de que ese cuerpo pertenecía a...Inuyasha
En shock lo único que hizo fue soltar la correa de Bess y sin pensarlo dos veces bajo lo más rápido que pudo el rocoso acantilado intentando bajar desesperadamente sin caerse o romperse el cuello. Se deslizó en algunas partes fangosas, logrando rasparse la parte posterior del muslo, pero sus lesiones no impidieron que llegara lo más rápido posible al lado de Inuyasha, tropezó en con una roca, cayendo sobre él.
"Inuyasha!" Se inclino a su lado y comenzó a sacudir sus hombros, pero su entrenamiento básico de medicina que tomo en la escuela la detuvo. Si él se había roto algo entonces no debía moverlo tanto, si no quería que se pusiera peor. De lo único que estaba cien porciento segura era que él estaba vivo, solamente se encontraba inconsciente. Su respiración era audible, aunque lenta. Su pecho se movía tan despacio que la mitad de ella temía que parara en cualquier momento.
"Oh Dios mío, Oh dios mío..." Estaba en problemas. Kagome pensaba que tal vez esta clase de accidentes ocurrían regularmente cerca al chalet, de modo que encontrar a Inuyasha en ese estado no era extraño... rogó que no fuera nada serio.
Kagome comprobó automáticamente su pulso, asegurándose que lo media en el sitio correcto. Lo sintió, en ritmo debajo de la yema de sus dedos...lento y débil.
Algo extraño estaba pasando...pero Kagome sabia cuando alguien estaba en apuros, él había sido un imbécil pero aun así necesitaba ayuda.
"Bess!" miro alrededor donde el perro estaba parado oliendo algas. Bess miraba hacia arriba cuando fu nombre fue llamado "Ve a conseguir ayuda! Ve y trae a Miroku o Sango! Consigue a Kikyo!"
Bess le lanzó una mirada al chalet antes de empezar a jugar con el agua como un perrito. Algo le digo a Kagome que Bess no era un digno ejemplo de Lassie. Ella iba a tener que conseguir ayuda por si misma, lo que significaba que tendría que dejar a Inuyasha donde se encontraba.
"Inuyasha?" movió su hombro lo mas fuerte que se atrevía "escucha...vas a tener que quedarte justo aquí no te...muevas..."
Si hubiera hablado con una roca hubiera obteniendo la misma respuesta. Kagome se paro mientras mordía su labio inferior y lo miraba, preguntándose si era lo correcto dejarlo allí. Pero mientras mas demorara en decidir, su vida se encontraría en un mayor peligro, sin vacilar comenzó a trepar el acantilado, llegando de nuevo al nivel de la arena. Ahora Bess se encontraba dando vueltas alrededor suyo.
"hey!" ella llamó al guardia de seguridad que se encontraba en la puerta "Ayúdeme- es Inuyasha- lo he encontrado y –ow!"
Sin darse cuenta cogió la cerca eléctrica logrando que su cuerpo tuviera una pequeña descarga, su pelo se encontraba algo parado de los costados. "Maldición" dijo mientras frotaba su cara para que parara de zumbar. En ese momento supuso que al guardia no le importaba en lo mas mínimo que ella tenía una misión"Oh- tiene que conseguir ayuda! Encontré a Inuyasha tirado por esas rocas, el esta inconsciente pero estoy segura que es algo grave- ayúdeme! De prisa!"
"Claro." El guardia no le hizo caso y le dio la espalda, Kagome corrió hacia donde se encontraba Inuyasha, tratando de sacarse el ese sentimiento de correr y tocar la cerca eléctrica.
Inuyasha todavía estaba donde ella lo había dejado, estaba casi segura de que había rodado un poco en su ausencia, estaba muerto para el mundo pero su pulso parecía de ciento treinta por minuto –calculó el tiempo que le quedaba l.
"Maldición... " dijo mientras caía de rodillas en el suelo, insegura de que podía hacer con él hasta que la ayuda llegara – " Que es lo que te hizo meterte en esto?"
¿Qué sucedió ayer en la noche?
El fantasma de pelo oscuro que ella pensó haber visto debió haber sido solo un sueño , porque Inuyasha seguía teniendo el pelo tan blanco como cualquier otro día. Pero él se veía inusualmente pálido. Un color púrpura azulado formaban parte del color de su piel debido a las contusiones ... pero eran contusiones extrañas, como si no hubiera recibido ningún golpe. No había daños... apenas lisas contusiones.
Eso no era todo lo raro ya que sus labios estaban teñidos de azul como si hubiera conseguido hipotermia, pero cuando ella comprobó su temperatura él estaba tan caliente como ella.
Kagome luchó con el impulso de agarrarlo por los hombros y de sacudirlo para exigir una respuesta de que demonios le había pasado. No sería muy agradable por parte de ella, a pesar de cuánto ella lo odiaba, ella no era cruel. Ella trato de mantener un acercamiento apacible. "Que es lo que te pasa...?" ella se preocupó, mordiendo su labio inferior, Kagome se inclino sobre el y colocó sus manos gentilmente sobre su pecho, se sintió algo preocupada al notar como una mueca de dolor se dibujo en su rostro y su respiración se agitaba por el tacto.
Ella movió las manos hasta sus mejillas, intentando una vez más comprobar su temperatura, pero estaba caliente a pesar del tinte azul que estaba en sus labios. Sus manos continuaron su camino hasta llegar a sus ojos, al momento de apoyarlos uno de los ojos se abrió como para tomar una mirada.
Sus ojos estaban desenfocados, dilatado en rajas minúsculas , pareciendo aún más felino. Se inclino rapidamente, desconcertandose aún más. Intentó sacudarir su brazo suavemente, intentando moverlo, pero su cuerpo no parecia trabajar.
Entonces su salvación llegó.
"Kagome!"
Kagome levanto su mirada hasta ver como Miroku y Sango venian corriendo por la playa hasta donde ella se enontraba, estos estaban siendo jalados por los perros con los que ella los dejo en la mañana. Detrás de esos dos vino Kikyo trotando levemente - pero por lo menos esta leventaba sus talones de la tierra para ir lo más rapidamente posible.
"él está aquí - rápido!" Kagome los llamó, parándose para hacerle espacio al trío. Ahora empezaba a sentir comezón en la raspadura que se encontraba en la parte posterior de su pierna.
Cuando Miroku cayó de rodillas al lado de Inuyasha, este fue mucho menos cauteloso que Kagome. Él lo agarro fuertemente por los hombros y lo sacudió fuertemente, Kagome se preguntaba si Inuyasha sufriría un daño en el cerebro "Inuyasha- Inuyasha!" gritó en su cara, pero al no conseguir respuesta cayó bajo las rocas cubiertas de arena. Sango lo llevó fuera para comenzar a comprobar sus vitalidad - su pulso y su respiración. Mientras que ella hacía esto Kikyo llegó.
La agente le dio una mirada a Inuyasha, analizó la situación y dio inmediatamente un suspiro cansado. "no otra vez... Juro si tenemos que... " detuvo lo que estaba diciendo al notar que Kagome estaba para al lado.
Kagome tenía esa sensación de que ella era una niña alrededor de adultos que necesitaban urgentemente discutir problemas de los cuales los niños no debian escuchar. La irritó levemente, en vista que ella no tenía nisiquiera una pista de lo que estaba pasando.
"El esta bien?" Ella le preguntó a Miroku mientras Sango le tomaba la temperatura a Inuyasha . "Significa, que el estara bien?"
"Oh por supuesto que estara bien. Él es un Hanyou. Él no puede o - "
"Llevémoslo de vuelta." Kikyo lo interrumpió rapidamente mientras le mandaba una mirada significativa a Miroku que fue silenciado con eficacia.
Esa sensación repugnante que mantenía en la obscuridad comenzó a emerger amargamente otra vez. "Que problema hay con él?" Kagome pidió poco más autoritaria.
"Solo esta un poco enfermo. Se repondrá, no tienes porque preocuparte." Sango dijo , aunque se sintió un poco hipócrita, pues Kagome nunca la había visto tan nerviosa y estresada durante el corto tiempo que había estado en el chalet- y eso que Sango se había mostrado estresada de muchas maneras.
Miroku se dobló hacia abajo y levantó a Inuyasha por los hombros mientras que Sango tomaba sus pies. Él miraba para a Kikyo mientras que lo levantaron. "Sera mejor que valla por Bess no valla a ser que esos niños decidan llevársela a su casa" Dijo mientras se alejaba "Tambien asi puede causar una distracción mientras lo movemos"
Grandioso... ella era una distracción...
Buno, tampoco pensaba que la dejaran ayudar a cuidar a su preciado Inuyasha (N.T: cuando me refiero a "su", no lo tomen como si Kagome pensara que Inuyasha fuese preciado para ella, a lo que se referia con "su" era a Sango, Miroku y Kikyo, no a ella, así que la mejor manera de ayudar era obedecer. Se dirigío a la playa por el pastor aleman mientras le lanzaba algunas cautelosas miradas a Inuyasha
"Bess!" llamó al perro.
La perra fue entrenada bastantes bien para reconocer su propio nombre y vino rapidamente hacia Kagome abandonando el lugar donde se encontraba jugando con los niños. Kagome odió arruinar su diversión, pero en un momento ella estaba a punto de arruinar la diversión de todos .
Tan pronto como ella tuviera la correa de Bess sujetada firmemente en su mano y tomara una respiración profunda y la gritara con todas sus fuerzas . ¡"ONDA DE MAREA! ¡Hay Una ONDA DE MAREA QUE DIRIGE DERECHO A LA PLAYA! CORRAN POR SUS VIDAS!"
La gente se sento en sus toallas y levantaba sus lentes de sol para mirar a la muchacha loca con el perro que gritó . Pero por lo menos ella tenia la atención de todos. La musica que se escuchaba, se apagó de repente y Kagome sentia todos los ojos puestos en ella.
Era extraño que ella se sintiera mas nerviosa que cuando estuvo en el cuarto de prensa donde no solo una playa llena de gente la miraba, sino todo el país. Era extraño sentir que los nervios la inundaban...
"No me oyeron!" ella gritó. ¡"el guardacostas acaba de anunciar el tifón más grande que ha habido en diez años y llegará en DIEZ MINUTOS! CORRAN MIENTRAS PUEDAN!"
Por nada esto funcionaba en las películas .Quizás no la habían oído la primera vez, pero definitivamente la carga captaron el mensaje la segunda vez. Había varios gritos y entonces se formó una atmosfera llena de histeria . Todos en quince segundos corrian hacia la salida , lejos de donde Inuyasha era arrastrado hacia la puerta eléctrica. Nadie vió nada...
Kagome se apresuró a correr para arriba con ellos. Y pasaron todo a través de la puerta, Miroku le guiñó el ojo. "Buen trabajo ."
Kikyo puso una mano en el hombro de Kagome y ordenó a Sango y a Miroku. "llévenlo hasta cama y llamen a Kaede, le dicen... dígale que el tiene un problema y que ella lo diagnostique, los alcanzaré en un momento ."
Kagome supuso que estaba a punto de tener una charla con Kikyo. Y bien... Kikyo era de la clase que asustaba a las personas y Kagome sentía naturalmente un poco de nervios. La sorprendió cuando Kikyo la llevó hasta las escaleras que se encontraban al lado de la piscina y le dio la sonrisa más suave, más buena probablemente había dado en su vida. Su mirada fue encantadora, y los nervios de Kagome se comenzaron a calmar levemente cuando supuso que no la iban a echar ni tampoco iba a ser forzada a firmar un contrato de silencio.
"deseo agradecerle, Kagome," Kikyo le dijo seriamente. "nadie va abajo por esas rocas... si usted no hubiera ido allí puede ser que no lo hayamos encontrado ni hoy, ni en un buen tiempo."
"Que es lo que le pasa?" Kagome preguntó. ¿Kikyo le diría ahora que estaban solas?
"él esta apenas enfermo. Él se mejorara." Kikyo parecía repentinamente mas tensa . "maldición... la lucha es mañana también..."
"Esto tiene algo que ver con con la Luna Nueva?" Kagome pidió.
"de alguna manera."
"Ya a sucedido esto alguna vez ?"
"no generalmente..."
"Ya ha ocurrido esto?"
Kikyo agitó una mano . "una vez o dos veces. Él estará bien, Kagome, no te preocupes por él."
"Pero es difícil no preocuparse..." No cuando él se veía así. "él parecía estar en coma."
"Mm. Bueno." Kikyo le dio una mirada extraña antes de tomar la correa de Bess que se encontraba en su mano y comenzó a caminar hacia la entrada trasera al chalet con el perro. "si desea puede conseguir algo de comer en la cocina. Dígale al cocinero que tiene mi autorización de hacer cualquier cosa que desees - mis gracias especiales por salvar su vida."
Una manera mejor de agradecerla sería decirle la verdad. Kagome la miró suspicazmente mientras que desaparecía dentro del chalet. Ella comenzó a caminar alrededor del borde de la piscina , sintiendo como la parte posterior de sus muslos que comenzaba a picar; la arena había entrado en los cortes ahora.
Kagome tendría quizás que descubrir la respuesta por ella misma...?
Ella miraba al balcón de Inuyasha y notó que sus puertas de cristal estaban abiertas... una idea estalló en su cabeza y ella compitió con su cerebro antes de decidir rápidamente hacerle caso.
Kagome se apresuró a entrar, tomando las escaleras (el elevador le parecía demasiado lento para ella) y corrió hasta su cuarto. Ella metió la tarjeta a través de la cerradura en la puerta y se metió como un relámpago adentro. Kagome salió inmediatamente hacia fuera en su propio balcón tratando de escuchar cualquier indirecta de la conversación que se estaba manteniendo en el cuarto de arriba .
Alguien debe haber estado satisfecha con su trabajo hoy (o era que justo estaban teniendo compasión por ella) porque ella oyó voces, ruidosamente y claramente.
"pensaría que él tendría algún sentido de hacer esto... el imbécil ese..." Sango decía ásperamente. Su voz era más alejada que las otras significado que ella estaba probablemente al lado de la cama.
Miroku habló más claro, posiblemente porque él estaba al lado de la ventana. "delen una oportunidad, casi muere." Kagome coincidió con él. Aunque quizás deberían darle una gran reprimenda por idiota...?
"y él tiene la lucha contra Kouga mañana. Él no puede ahora luchar." La voz de Kikyo parecía fría y enojada.
"Seguramente se recuperara para mañana." Miroku razonó.
"Oh sí, seguro que él se recuperara para luchar pero que pasara cuando nos pidan el prueba de drogas?" Kikyo se encajó a presión. "Que se supone que haremos cuando salga positivo?"
Kagome se contrajo nuevamente dentro de su sitio levemente. ¿Drogas...? Esto estaba fuera de su experiencia...
"Quizás estarán fuera de su sistema mañana." Miroku todavía parecía defender a Inuyasha.
la "heroína no se desaparece en una noche."
Los ojos de Kagome se ensancharon enormemente. ¡Heroína!
La voz de Kikyo parecía aun más distante cuando ella se marchado a la cama. "Afuera con esto - cuánto tomaste esta vez?"
¡Esta vez!
Kikyo suspiró en voz alta cuando no consiguió la respuesta que ella deseaba. "tendremos que tirar de él. Perderá el campeonato. Perderá nuestro patrocinio de Addidas. ¿Espero que estés feliz ahora? Apuesto a que no pensaste en las consecuencias ayer por la noche l"
"Oh dale un respiro Kikyo, el idiota tomo una sobredosis. No me sorprendería que dejara de respirar en un minuto." Miroku dijo de una manera que indicaba que estaba tan enojado con Inuyasha como todos lo demás.
"él es un Hanyou - él no puede tener una sobredosis!" Kikyo lo presionó.
"sí, solamente que ayer por la noche él era humano." Sango dijo uniformemente.
Había un silencio largo en el cuarto de arriba pues cada uno reflexionaba esto. Los pensamientos de Kagome daban vuelta mientras que intentaba recoger toda la información que tenia . ¿Inuyasha con sobredosis? ¿Y él fue humano la noche anterior? Entonces quizás la sombra que ella había visto caer abajo de su balcón no había sido un sueño.
Las palabras siguientes de Kikyo pusieron a tierra Kagome levemente. "Acaso intentaste matarte?"
Otro estiramiento largo de silencio siguió mientras que Kagome esperaba con la respiración hostigada... pero no podía oír que ninguna respuesta de Inuyasha, si es que él respondía. Kagome tenía la sensación que él seguía estando inconsciente y que Kikyo pudo haberle preguntado eso al cuerpo inconsciente de Inuyasha.
"Quizás fue un accidente." Miroku intervino diplomáticamente.
"Fuese lo que fuese..." Kikyo comenzó lentamente. "si Kagome no lo hubiera encontrado él estaría muerto. Kaede llegara en cualquier momento. Le dijo que trajera alguna medicamento?"
"ella está trayendo las píldoras." Sango le dijo.
"bueno... llámeme si hay algún cambio en su condición. Mantengan la vista puesta en él y no dejen que Kagome este cerca de aquí. Lo que menos necesitamos es ella que descubre sobre esto." Los pasos de Kikyo se retiraron. "esto tiene que parar..."
La puerta del dormitorio se cerró de golpe y Kagome se sentó lentamente en el frió piso de piedra del balcón, procesando lo que acababa de oír. Un minuto antes de que oyera más diálogo arriba.
"Cierra la ventana, Miroku, mejor mantengamos el aire afuera."
Había un tecleo sobre su cuarto y Kagome se encontró sentada en silencio otra vez. Ahora no había nadie en la playa, haciéndose una misteriosa tranquilidad y con todas las paredes insonoras en el edificio, el resto de la casa pudo haber andado de puntillas alrededor para no hacer ruido.
Kagome se sentía horrible. Se sentía traicionada y rebelada que Inuyasha era capaz de tales cosas. Ella estaba enojada con él... probablemente nunca había odiado a una persona tanto como ella odiaba al individuo enfermo que se encontraba en el cuarto sobre ella. No solamente porque qué él hecho era horrible... sino porque la hizo sentir como una tonta.
Kagome nunca se había sentido tan inocente. Pero se sentía increíblemente ignorante, así como oculta y estúpida.
Ella nunca consideró que algo como esto podría suceder... el abuso de la droga era algo que había estado siempre en un mundo paralelo al de ella. Pero ahora Inuyasha la había forzado a chocar con su vida y eso la hacia sentir enferma.
Kagome solo deseaba ir a casa y no tener que saber de las personas del chalet nunca mas en su vida.
: Dun, dun, dun... allí esta - la edición de la vida mas real y seria que cubriré en mis fics probablemente (aparte de la que esta' Father Figure´)
Notas de la Traductora: lamento en retraso, pero les aviso que tardare una semana normalmente en actualizar un capitulo ˆˆU. Así que espero que disfruten este capitulo ˆˆ por esta semana, en el próximo se rebelara es misterio de 1992, no se lo pierdan.
