Disclaimer: todo este mundo de fantasía, del que hay tantos fanáticos, le pertenece a la talentosa J. K. Rowling
Jon Smith
Al fin en casa, en su verdadero hogar, la única diferencia que no se encontraba con sus amigos, sentado en el asiento de un escritorio, especialmente el de su nuevo despacho (al pasar por una puerta estaba su cuarto), lo que en años anteriores, en sus antiguos profesores de Defensa Contra las Artes Obscuras había estado decorado el espacio, esta ves se encontraba vacío, no había nada, ni una foto, algún póster de su equipo favorito, nada… Creyó mejor tener consigo su antiguo baúl, ahí habían muchas pertenencias preciadas para él, entre esas el álbum de sus padres, fotografías de él con sus amigos, viejos regalos, la capa invisible y algo que le podría de ser de gran utilidad, el mapa merodeador, así que hizo aparecer con tan sólo un trueno de dedos de su mano (algo que aprendió, en aquel lugar, era poder aparecer cualquier cosa) y este apareció encima de su escritorio. Ni lo abrió no tenía ganas.
Harry James Potter Evans ahora un castaño de "19 años" y con el nombre de Jon Smith impartiría a partir de mañana como profesor del colegio de magia y hechicería Hogwarts.
Viendo en un punto fijo de la pared, se quedó pensando en la mirada de sus amigos al verle, claro no sabían que era él, pero se sintió extraño, era una mirada de desconfianza, se imaginó sentados con ellos y viendo a un profesor que llega a mitad de curso y además que oculta su identidad, y en estos tiempos, no era para darse el lujo confiar en cualquiera, así que era entendible su comportamiento.
Otro punto a tratar, se los iba a decir, no, esa no era una posibilidad, podría ser sospechosos para los demás profesores que lo vieran hablando con ellos, o incluso que los llegasen a escuchar, además… no debía distraerse mucho de su objetivo primordial, mucho había en juego, mejor dicho todo, esa cosa podía acabar con el mundo y él ahí preocupado por si decirles o no a sus amigos.
Se paró y fue a darse una ducha (el baño estaba al pasar al cuarto detrás de una puerta), al día siguiente tendría su primera clase, y con sexto, solo que, debido a que con todas las casa juntas, iba a ser entretenido, o eso esperaba. Ya fresco después de un rico baño con el agua tan perfecta como siempre, ni muy caliente o muy fría, se fue a dormir asegurándose de cerrar la mente, ahora de nuevo en Hogwarts era seguro que volviera a tener la conexión con Voldermort y no podía dejar que se entere que regresó.
Un poco cansado de despertar temprano y no poderse quedar dormido hasta tarde se levantó, era lo malo cuando uno se acostumbra, ya se había abierto los ojos hace unos cuántos minutos, no podía, estaba ahí acostado sin conciliar el sueño y apenas comenzaba a amanecer, así que fue a arreglarse, se puso una túnica azul con todo y capucha, dejando medio ver unos ojos café y algunos mechones de pelo.
Su estómago reclamaba algo de alimento, hizo orden a las peticiones de su hambruna, comió algo ligero en las cocinas, dudó mucho que haya alguien en el comedor, saludó a Dobby, aunque este ni en cuenta, se fijó que seguía poniéndose aquellos gorros que Hermione hizo, ya que acabó, salió de las cocinas rumbo a ningún lugar, cuando se le vino a la mente algo, La Mansión Merlín, podría pasar un rato en esta después de todo faltaban tres horas para comenzar con la clase.
Llegó al lugar, observando cada uno de sus rincones, ya terminada de ver el salón de práctica, o de baile, en fin era un salón, que según le dijo uno de los elfos tenía distintos tipos de uso, fue directamente al cuarto de Godric, a primera vista, le encantó, la cama se veía comodísima, todo decorado de café (en caso de los muebles), y las cortinas y colchas, de color naranja y amarillo, había una chimenea en frente de la cama, arriba un escudo (un león), y algo que le pareció ser un tipo porta espadas, se acercó y curioseó en una caja que habían encima de la chimenea, la abrió con cuidado, dentro halló un anillo de oro con un león, lo cogió y se lo puso en el dedo gordo de su mano derecha, con esa misma levantó su mano hasta quedar a la distancia de donde se supone que debía de estar la parte de dónde se agarra la espada de la pared, fue cerrando su mano lentamente y en lo que debía de sentir el roce de sus yemas con su palma estaban envolviendo un metal frío.
Con la espada en la mano, la acercó hacia él, era hermosa, la sostuvo con la otra mano, comenzó a moverla suavemente de un lado a otro en alto. La colocó en donde debía ir, sólo que esta ves se encontraba ahí, no desapareció, esa espada era la misma que sacó del sombrero seleccionador, por lo tanto la misma que debía de estar en el despacho de Dombledore, se preguntó si se fijaría de su ausencia.
Fue al closet, vio todo tipo de ropa, desde unas que le parecían un poco excéntricas y payasas a muchas formales y de diario, agarró una que le llamó la atención, era de color verde oscuro, con capucha, en las muñecas un león dibujado, de tamaño pequeño de color dorado, se la puso, dejando ahí la suya. Creyó que ya era tarde, regresó, se apareció en la sala multiusos.
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En el comedor de Hogwarts, específicamente en la mesa de Gryffindor, se encontraban dos del "trío dorado" y una nueva amiga, su nombre era Emma, y a ella no le traía nada de gracia el nuevo profesor, todo era mucha coincidencia, llega en el momento en el que Harry debería de regresar y además no se veía tan grande, ella no aprendió a reconocer a las personas durante su tiempo de "desaparecida", sólo saber si tenían buenas intenciones o no.
Una idea se le vino a la mente, cómo no se pudo dar cuenta antes, era fácil la solución, se paró rápidamente de su asiento, dejando un plato de avena y fruta a medio acabar
.- Emma que sucede!
.- Hermione, tú me dijiste que el nuevo profesor no te traía buena espina – le comento en voz baja agachándose un poco para que sólo sus amigos la escuchen, como respuesta Hermione asintió con la cabeza – voy por el mapa merodeador – en ese momento los dos jóvenes Gryffindors tuvieron todo muy claro, Emma se apresuró a echar carrera en busca del mapa, Lupin que tenía el baúl del ojiverde, creyó que sería bueno entregarle el mapa, les podría sacar mucho de apuros, y Sirius no estuvo más que de acuerdo, después le dio unos tips para que se pudiera escapar o hacer bromas y los profesores no se den cuenta.
.- No llegues tarde a Defensa – le alcanzó a gritar el pelirrojo antes de que atravesara la puerta del Gran Comedor
A mucha prisa, esquivando a muchos alumnos, llegó a su habitación, miró su reloj de pulso, la clase estaba por comenzar y el aula no estaba nada cerca, ya mero llegaba "mal día para tener el pelo suelto" pensó, ya que este se encontraba revuelto, nada que le quitara menos atractivo a la chica, sin darse cuenta chocó con alguien "mierda" insultó mentalmente.
Cayeron al suelo, el mapa cayó del lado de la otra persona, levantó su vista y era el de Smith, apreció mejor sus ojos color café claro gracias a que la capucha se le recorrió un poco quedando a la altura de su frente, el tipo, desde su punto de vista era atractivo, muy atractivo, a pesar de aquella pequeña barba y la capucha que no dejaba ver a la perfección su cara. Jon agarró el "pergamino", se levantó para después ayudar a su alumna a pararse.
.- Gracias
.- No debe correr por los pasillos – sin ninguna expresión en su cara, pero la voz con que la dijo aunque arrastró las palabras sonó divertido
.- Se me hacía tarde para su clase – le sonrió de una manera seductora – eso es mío – dijo señalando el mapa que tenía en una de sus manos el profesor de DCAO
.- Esto – lo levantó hasta la altura de su cara, levantó la ceja de una manera muy Slythering, Harry estaba que reía por dentro, pero decía que era suyo, si se lo dieron a él, era de Harry Potter, no de Emma Ohmann, actualmente Black – parece muy… viejo, es tuyo? – preguntó acercándose a la chica
.- Claro, y si es un pergamino, es que no... me quedaba otro – trató de sonar lo más convincente posible
.- Sí – Jon se acercó más a la chica quedando a diez centímetros de su cara
.- Lo pensaré si se lo regreso después de clase, señorita Ohmann, y por favor pase, no me quiero retrasar
.- Pepepero… - su cara de confusión pasó en un segundo de furia, cómo se atrevía a quitarle eso, a él que le importaba, recuperó su postura, el profesor ya había entrado al aula al igual que el resto de la clase y dijo antes de sentarse con sus amigos, no muy fuerte, lo suficiente para que el maestro lo escuche y no muchas personas – soy Black
Harry se sorprendió de eso pero no lo dio a demostrar "qué bien ya hicieron el cambio de apellido, era de esperarse", sin sacar la lista, mejor dicho por que no la llevaba, observó a todos, era una suerte que le tocara los de sexto ya que se sabía el nombre de todos, aquí estaban todos los alumnos de ese año
.- Buenos días – su mirada se posó en la de Malfoy – veo que están las cuatro casas juntas – comentó como quien no quiere la cosa arrastrando las palabras (se le estaba haciendo una costumbre pero sin sonar muy Snape, sólo muy Slythering eso de arrastrar las palabras), su mirada cambió y se dirigió a la de Ron y Hermione, cómo los extrañó – alguien me puede decir que fue lo último que vieron – y cómo era de esperarse para TODOS la chica más inteligente de ese grado fue la que se atrevió a levantar la mano – si señorita Granger – se asombró un poco porque supiera su apellido
.- Si, pues hemos visto muchas cosas, pero muchos no las sabemos llevar a la práctica
.- Es decir sólo tú las sabes – dijo una Slythering en voz inútilmente baja, aunque en realidad no era totalmente cierto, Ron y ella lo aprendían con Emma, los hechizos de clase, de otra manera hasta a Herm se le complicaba
.- Señorita Parkinson, 5 puntos menos por interrumpir a su compañera – las tres casas restantes sonrieron con satisfacción, se volteo hacia su amiga – continúe
.- Pero tampoco sabemos lo de 5°, bueno muy pocos, sólo los que eran miembros de un grupo
.- Muy bien – la interrumpió antes de sonrojarse por el comentario, era obvio que se refería al ED – ya veo, entonces hay mucho por hacer, con el regreso de Voldermort – un escalofrío pasó por la mayoría de los presentes - deben de ser personas preparadas para cualquier cosa, y si no hay ninguna pregunta comencemos
.- Profesor – lo dijo con sorna – me preguntaba…; es cierto lo de Voldermort – nuevo escalofrío – y pues ya ve lo de los mortífagos y pues usted – "usted" lo remarcó – usa capucha, eso podría incomodar a algunos, ya que pues es lo mismo que hacen los mortífagos, por cobardes – todos miraron con miedo al maestro, Emma había llegado lejos, y no conocían al presente por lo tanto no sabrían su actitud ante esto, aunque Black sólo se encontraba furiosa por que le quitaron el mapa.
.- Les agrade o no – hizo una pequeña pausa – yo la seguiré usando, así que acostúmbrense – Harry estaba molesto, era lo que menos le agradaba que le dijeran… un cobarde…, el tono que usó para decirlo, uno completamente frío, dejó claro con eso a los demás que era mejor llevársela en paz con el señor Smith
La clase transcurrió normal, empezó por explicar algunos conceptos para luego ponerse a ensayar los hechizos, la mayoría se encontraba encantada, tenían que aceptarlo, era bueno enseñando, sin buen carácter, o sin expresiones, opinaron unos, pero muy bueno.
Hasta Harry se sorprendió no tener problemas con las serpientes y se fijó en un detalle, Malfoy no estaba con sus guaridas, era raro, al contrario de los algunos Slytherings él se portó bien, ya ni sus amigos (Emma les contó lo del mapa y también le agarraron coraje) se portaron bien, se la pasaron sin hacerle mucho caso, provocándole una y otra ves, actitud que los demás no compañeros no llegaron a comprender de los Gryffindors.
El final de la clase terminó, Emma se acercó muy encabronada con el profesor junto con sus dos amigos, todos ya habían salido, a excepción Draco, que prefirió esperar para ver que salía de esa reunión, no todos los días se les veía al grupo preferido de todos comportarse así con un maestro que no ha hecho nada para merecer ese comportamiento, lo tenía que admitir, a Draco le cayó bien, no supo porqué pero ese tipo al que le decían profesor le cayó bien.
.- No pienso soportar ese comportamiento de nuevo en clase – les dijo al trío de una manera intimidante, se sentó en el asiento de su escritorio – les puedo ayudar en algo – dijo como quién no quiere la cosa de una manera inocente
.- El pergamino es muy importante para mí, además no es mío, es de Ron
.- A… señor Weasley, así que es suyo
.- Si, me lo dieron mis hermanos, ellos fabrican bromas y pues es un juego – dijo de una manera que sorprendió a Jon Smith en lo bien que fingió, sacó el pergamino y se le quedó mirando con la ceja alzada, Draco reconoció el mapa, varias veces había visto a Potter con eso
.- Que dice señorita Granger es cierto lo que dice su amigo Weasley?
.- Estoy completamente segura que lo que dice mi novio – Harry tuvo ganas de gritar un "AL FIN" pero no lo creyó prudente – es verdad
.- Bien y me pregunto cómo funciona esta cosa – los tres alumnos se movieron intranquilamente, los miró a ver, para que le dijeran, pero cómo él esperaba no tenían nada planeado para ese momento, y a decir verdad el no sabía que hacer para quedárselo, una idea se le vino a la mente – bien probemos, esto es una de las cosas que se dicen unas palabras y hacen o dicen cosas – nerviosamente asintieron con la cabeza – probemos "Saltarín, chapulín quiero saber que traes allí" (N/A, no sabía que más poner, si lo sé es tonto…) – con su varita dio un toque al mapa, los tres chicos respiraron aliviados, lo único que salió fue, y para su suerte el maestro se rió:
En nombre de los Merodeadores (desaparecieron las letras para escibir)
QUIÉN INVENTÓ ESA CLAVE TAN TONTA! (Sucedió lo mismo y esta ves apareció)
Corrección Wormtail dice que le agradó, pero no es la correcta
.- Que ingeniosos tus hermanos – Ron rió nerviosamente mientras Black se sentía orgullosa – una ves más – sonó inocentemente pero sin dejar la arrogancia de un lado en su tono – "Juro solemnemente que mis intenciones no son buenas" – los ojos de los chicos, contando a Malfoy que aunque se encontraba un poco alejado veía a la perfección, se podía leer ahora en el pergamino palabras en caracteres grandes, verdes y floreados que proclamaban
Los señores, Moony, Wormtail, Prongs, Padfoot
Proveedores de artículos para magos traviesos
están orgullosos de presentar
El Mapa Merodeador
Después desaparecieron las letras y se dejaron ver los pasillos de todo Hogwarts y los nombres de los que lo habitaban también, Harry tuvo mucho cuidado con tapar la parte en la que ellos estaban mostrando asombro ante lo que tenía, inmediatamente lo envolvió y mostrando un rostro relajado y decidido dijo
.- Esto es el mapa de Hogwarts, den gracias de que no les voy a quitar puntos, esto puede ser de gran ayuda para saber si un impostor entra al colegio, es mejor si se lo entrego al director – los tres jóvenes no acababan de su asombro, perdiendo la lucha apenas habiendo comenzado se fueron encabronados, no tenían oportunidad.
Ya que salieron del aula, Jon mostró una sonrisa olvidando que estaba Draco, con su varita le dio un toque al mapa y pronunció – "travesura realizada"
.- Así que así hacían sus salidas nocturnas – se acercó un poco más al escritorio – si yo hubiese tenido eso, Potter me las habría pagado, aunque, lástima que no está
.- Lástima? – pregunto realmente asombrado, porque no sonó sarcástico para nada, y su forma habitual de hablar no era tan marcada
.- Sí, porque sin él no tendré oportunidad de ver que esta asquerosa guerra acabe antes de que yo me tenga que convertir en…- se dio cuenta de que hablaba de más
.- En mortífago – atinó a decir, jamás habría pensado que Draco Malfoy no seguiría los pasos de su padre, y si no oyó mal dijo "asquerosa guerra" eso ya era increíble, primero sus amigos se molestan con él, claro no lo sabían, aún así… y ahora esto… - ya pensaste en decir No?
.- Já!... primero me tortura – nunca le había dicho eso a nadie, creía que cómo el profesor no lo conocía no tendría prejuicios de él, a lo mejor sólo cómo una posibilidad el veía a su maestro cómo alguien con quien hablar – ya lo ha hecho, después a mi madre y si me sigo negando la mata, ni yo tengo escapatoria de que me mate, preferiría verme muerto a que diga que no me les quiero unir
.- Yo te ayudo, sólo di que te espere a que acabe el curso, ya pensaremos en algo – le brotaron de su boca esas palabras, sin saber exactamente el por qué.
Quién iba a imaginar que Harry Potter, enemigo de Draco Malfoy, le iba a ofrecer ayuda para que no se convirtiera en Mortífago, fue algo inimaginable que su padre lo castigaba de formas crueles cada vez que no hacía las cosas como él quería, antes él le admiraba, pero después comprendió con ayuda de su madre que eso estaba mal. Le dijo también que Severus Snape, había tratado de que no le hicieran mortífago pero a falta de la poca confianza que ahora le tenían a Snape no pudo insistir mucho o lo descubrirían y ya no podría ser un espía para la Orden.
A partir de ese momento comenzaron hablando después de clase, a los pocos días Smith le dijo que podía ir a su despacho a la hora que él quería, se decían por sus nombres, y Harry olvidando que Draco era su archienemigo descubrió que podía llegar a ser un gran amigo si no es que ya lo eran, la confianza entre ambos era mutua, el tono de voz y carácter que tenían cuando estaban solos era completamente diferente a la que mostraban a los demás, el ojiverde se sentía fatal sabiendo secretos de Malfoy pero no le quedaba de otra, no le podía decir nada así que tuvo que mentir, pero agradecía tener su compañía, ya que era la única, su relación con los demás alumnos solo era eso, alumnos. Cuando estaban solos se quitaba la capucha, siempre cuidando de cubrirse la cicatriz.
Se enteró de muchas cosas, como que él sólo hablaba con Blaise Zabini, adecuadamente, pero ni él que también se rehusaba a ser Mortífago, como otros pocos, podía hacer amistad nunca hablaba en serio (y con todos los problemas de Draco) y pues era sólo para hablar de estupideces con él. Y tal cómo pudo comprobar Harry hablar una ves que los dos se quedaron después de clase para comentar una tarea y después se les fue el tiempo en otras cosas (más bien Zabini y Draco comentaban con quienes se habían acostado), como dijo su nuevo amigo, Zabini no era mala persona.
En cambio los de Gryffindor especialmente los de sexto no hablaban para nada con Jon Smith, pues se enteraron de la amistad que tenía con Draco, era extraño que su propia casa y él siendo el heredero se comportaran con él de esa forma.
Las clases iban bien, a todos les gustaban las clases, el carácter de Jon casi no, pero si las clases, el único problema eran sexto, los demás era todo normal, y muchas de séptimo le coqueteaban, al igual que las de quinto, cosa que hacía reír a Draco, cuando él se lo comentó.
En esas dos semanas que llevaba se dio cuenta de que iban y venían más aurores de los que habían ido a Hogwarts en sus años pasados. Una vez vió a Sirius pero ni oportunidad de acercarse, no sabía nada de él ni de Remus, no se atrevía a usar la Oclumancia con ninguno de sus amigos, aunque con el Slythering sí la utilizó, sólo para asegurarse de que era verdad lo que decía Draco, y como vió que sí, decidió prometió no volverla a usar a penas que fuera necesario.
Era difícil para Harry ver a Emma y resistirse las ganas de besarla, todavía recordaba aquella noche en el que por primera ves juntaron sus labios, y mantenerse ella con él a la defensiva se le hacía más provocativo evitar acercársele y robarle un beso. Su amigo se dio cuenta de eso, y le había estado haciendo burla, auque el lo negaba. Sabía que no podía hacer nada respecto a eso, y veía cómo se le iba de las manos, decidió dejarla libre, lo más seguro es que ella ya no le quisiera (según él), se tocaba el tema de Harry Potter y ella se encabronaba rápidamente saliendo del lugar, una ves vió ese comportamiento en el aula y sin importarle el maestro salió de clase; además escuchó (mejor dicho Draco le contó) que iba a salir con uno de séptimo de Ravenclaw. No le quedaba otra cosa mejor que olvidarse de ella y que cada quien siguiera sus caminos.
Estaba Malfoy en el despacho de Jon, y como veces anteriores mientras hablaban, el alumno hacía su tarea y el profesor no despegaba la vista del mapa merodeador, necesitaba ver cuándo Snape saliera de Hogwarts porque seguramente ese día iría con Voldermort.
Hasta la fecha su ex enemigo no le había preguntado por qué siempre tenía la vista pegada al pergamino o si quiera para husmear un poco por él y se lo agradecía.
Esa noche era la indicada, Snape iba rumbo al bosque prohibido "seguramente para desaparecer" pensó Harry, e iba con mucha prisa. Dejó de contar una de sus historias en "el colegio que estudió toda su vida" que no eran muy falsas diciendo que su mejor amiga se había ido, dejándolo solo por tres años más, bla bla lba…
.- Emm Draco, voy a salir, no se a que hora llegue, puedes salir a la hora que quieras – guardó el mapa primero haciendo desaparecer sus contenido, antes de salir cambió su ropa por una túnica de color negro con todo y la capucha ya puesta (con magia), sin darle tiempo de que el alumno reaccione salió de su despacho.
Corría por los pasillos, era de agradar que ya era tarde pues casi no se topó con alumnos, se introdujo en el bosque, para hacer más rápida la búsqueda del profesor de Pociones, se transformó en su forma animaga, en instantes, un hermoso fénix negro de ojos verde esmeralda volaba sobre el bosque, recorrió una larga dista en poco tiempo, al ver su objetivo, descendió en picada y cayó parado ya en su forma humana, Snape detuvo el paso, no supo si porque hizo ruido o porque estaba simplemente verificando si había alguien, de cualquier forma se preparó.
Severus miró hacia los dos lados, "es el momento" pensó Harry, y salió del escondite agarrándose de la túnica de Snape, desapareciendo los dos.
Una sala enorme, llena de mortífagos, parecía ser el hall, todo decorado de color negro, verde y poco de rojo, parecía una junta importante, no se veía (por lo poco que se podía apreciar por las capuchas) mortífagos jóvenes. La cicatriz de Jon comenzó a emitir unas punzadas en su frente, cerró su mente, no podía dejar que Voldermort se entere que regresó y que a pesar de todo está entre ellos, el dolor de la cicatriz disminuyó y ahora sólo se sentía como si se hubiera hecho un pequeño raspón en la frente.
Una mano lo jaló a una esquina de aquella sala
.- Porque diablos has hecho eso? – nunca había visto tan molesto a su antiguo profesor de pociones – nos van a matar a los dos – dijo esto en un susurro, habían suficientes seguidores como para que no se den cuenta de lo que sucedía en ese rincón
.- Sé sobre lo que tiene Voldermort y está aumentando su poder, puedo deshacerme de eso, siempre y cuando no le digas nada a Dombledore – le contestó de la misma forma sólo que en este caso a Severus la voz que usó provocó que se le erizaran los pelos
.- Muchacho engreído y cómo planeas hacerlo?
.- No tengo idea – contestó alejando las manos que lo mantenían en la pared, ya que todos caminaban a otra parte de la casa, caminó hasta un salón de una pared reluciente color negro brillosos y con un borde dorado, el piso color caoba, unas cuantas antorchas que adornaban el lugar, estas emitían un fuego verde y una lámpara enorme de oro con cristales en forma de lágrima colgando del techo. Se acomodaron en semicírculo en frente de un escudo que había en la pared (era una calavera de esta salía una serpiente, de color rojo brilloso) en el piso estaba Nigini, la mascota del Señor Tenebroso. Un silencio se apoderó de la sala, entonces apareció Voldermort, todos sin excepción realizaron una reverencia hacia su amo.
Recorrió con la vista a sus vasallos, un silencio sepulcral gobernaba en ese lugar nadie decía nada, todos esperaban a que su amo hablase, la mirada de Tom Riddle quedó en medio de varios mortífagos, comenzó a caminar a paso lento, sus seguidores le fueron abriendo paso hasta que llegó con una de las personas más jóvenes que se encontraban en el lugar
.- Será mejor que digas cómo has llegado a este lugar – le amenazó con su varita apuntando en su pecho.
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Bien ya he acabado con este capítulo, creí que no podría escribir nada, acabo de terminar mis parciales, intentaré adelantar el próximo para evitar retrasarme ya que el lunes comienzo con los ordinarios.
Mil gracias a Serenitakou, Khye, Guarumo, Ginebra, no saben los ánimos que le dan a uno para seguir con la historia, sobre si se lo voy a decir a Emma, hasta ahorita no, quien sabe más adelante, sólo a una persona se lo va a decir, mmmm adivinen, es fácil saberlo (eso creo), bueno ahí les dejaré con la duda.
Sin más que decir me despido, los quiero mucho.
Atte:
Karla (VialindaPotter)
