DE AMOR NO SABES NADA

CAPITULO II: UNA NUEVA MISION

-"Coronel Mustang, ya podemos ir..."- no pudo terminar de hablar porque en cuanto abrió la puerta encontró a Roy con medio cuerpo tendido en su escritorio y sobre este besándole el cuello una mujer sumamente despampanante.

Él en cuanto escucho que la puerta se abría y la voz de su compañera trato de separar se de la mujer que lo acosaba en esos momentos pero le resulto imposible, ella continuo besándolo y su mano poco a poco recorría el pecho de éste.

-"Teniente ya regreso, bueno este..."- hizo a un lado a la mujer, se puso de pie y trato de buscar algo que justificara su comportamiento, pero no supo que decir, en realidad ninguno de los dos hablo, hasta que la voz de Hitomi rompió el silencio.

-"Oiga policía podría decirle a Roy que deje de hacerse del rogar y salga conmigo a cenar. Además tu fuiste el que me invito no lo recuerdas."- diciéndole a Roy una mirada seductiva y acariciando su mejilla.

-"Si es cierto, pero yo quede con la teniente ir a ..."

-"Coronel Mustang yo solo e venido a recoger mis cosas, será mejor que cumpla con su palabra sino que clase de hombre diría que es."- respondió Riza con total seriedad.

Una vez que comprendió que el coronel no tenía nada mas que decir, ni mucho menos fuerza de voluntad para rechazar a aquella mujer, que a simple vista era mas linda que ella, paso cerca de ellos o mejor dicho de él; tomo su abrigo, su bolsa y cruzo con paso sereno y en total silencio la habitación. Cuando estaba a punto de cerrar la puerta escucho a sus espaldas la voz de Mustang.

-"Riza."- era extraño que él la llamara por su nombre pero lo hizo. Tal vez fue la manera en que él le estaba pidiendo disculpas, por no decir nada y perdonarle el no salir con ella.- "te veré mañana cierto?."

-"Por supuesto, después de todo aquí trabajo o acaso se ha olvidado Coronel Mustang."- respondió de manera cortante y cerro la puerta con un fuerte ruido.

Que haya pronunciado su nombre, tal vez en otra situación le hubiera agradado, después de todo seria una de las contadas ocasiones en que lo hacía. Pues por lo normal ella para él era; Teniente o Hawkeye, pero ahora en ese preciso momento con lo que le acababa de hacer lo sintió mas como un insulto que otra cosa.

Camino con paso lento primero hacia la estación del metro. De modo que para cuando llego ya era muy noche y el vagón que había abordado era el último que saldría por ese día y solo llegaría a la estación yooni; tendría que bajarse allí y eso significaba que para poder llegar a su casa tendría que caminar un largo tramo. Pues dudaba que encontrara un autobús, por que para cuando llegara ya pasaría la media noche; de igual forma no se sentía con ánimos de ver gente. De modo que agradeció que en el vagón no hubiera mas gente que ella y un vagabundo al que no le tomo importancia. El trayecto duraba alrededor de 30 min, así que todo ese tiempo Riza trato de no pensar en nada y convino concentrarse en otra cosa tal vez en la música que ponía la estación del metro.

Nagai yoru hitori kohete

En esta larga noche

Tameiki de keshita asa no oto

Una sola voz marca la mañana con un suspiro

Torimodosenai zureta jikan wa

Se que no puedo recuperar jamás

Moo maki modosenai

El tiempo que se me ha ido

Al salir del vagón choco con el hombre que se encontraba en el rincón; simplemente se disculpo y continuo su camino hacía la salida sin advertir que de su bolsa se había salido algo. El frío que la noche acompañado con el fuerte viento que en esos momentos empezaba a soplar hicieron que la teniente se abotonara bien su abrigo, se cubriera con este parte del rostro y se llevara sus manos a los bolsillos, aun así no acelero el paso continuo con su lento andar de alguna manera esa sensación del viento y el frío cortarle la piel, el arremolinar de su ropa y el obligarse a centrar todos sus sentidos hacía el frente la hacían sentir bien. Pareciera que de esta manera podía olvidarse aunque fuera por muy poco tiempo de aquel hombre, que en esos instantes aborrecía mas que nada en el mundo.

Introdujo lentamente la llave en la puerta ésta rechino un poco, indicativo de que estaba abierta, estiro la mano hacia el apagador que se encontraba a un lado de la puerta. Una tenue luz ilumino la sala de su departamento, dejo su abrigo y demás cosas sobre la mesa, camino con paso vacilante hacía su recamara, se dejo caer en la cama abatida por todo lo que había experimentado en menos de una semana.

En primer lugar estaba la carga de trabajo que había tenido que hacer y el hecho de que no había tenido oportunidad de descansar y que desde el martes que salió temprano de su casa no había vuelto hasta ahora. Menos mal que Black Hayate era alimentado por una vecina; en último lugar o debería poner la situación de Roy como primer lugar y culparlo a éste de todos sus problemas, y es que con lo que sucedió en el día sintió que la relación entre ellos estaba mejorando, llego a pensar que esa era la prueba de que él confiaba plenamente en ella y la admiraba no solo como compañera de trabajo sino también, porque no como mujer.

Pero con lo que le hizo y vio cuando regresaba de la ver a su superior se dio cuenta de que el alquimista de fuego solo se preocupaba por él, por ser el mejor, por ascender lo mas pronto posible y usaba a los demás a su conveniencia...incluso a mí.- lo dijo con resignación al darse cuenta de que solo la había usado, y muy a su pesar lo termino aceptando en la soledad y oscuridad de su departamento.

Permaneció mucho tiempo acostada en la cama miro de reojo el reloj que se encontraba en una mesa. Creyó haber visto mal, así que enfoco mejor su vista al objeto y comprobó con cierto asombro que hacía mucho pasaban de las tres de la mañana; fue hasta ese momento en que reparo que llevaba mas de tres horas acostada en ese lugar sin pensar en nada solo sintiendo como el tiempo pasaba, o por lo menos eso hubiera deseado pero por desgracia llevaba mas de tres horas pensando en él, en Roy Mustang.

Dentro de poco amanecería y eso significaría que tendría que volver al cuartel, a la oficina y por conclusión indiscutiblemente tendría que verlo; después de todo que probabilidades tenía Riza que un gran demonio se tragar a en menos de una noche todo lo concerniente a Roy Mustang inclusive al propio Roy.

Trato de dormir un poco; pero por mas que trataba no lograba conciliarlo; todos sus métodos cedían ante la insistencia de retomar una y otra vez su experiencia en el trabajo. Cerraba los ojos con la esperanza de obtener el tan preciado sueño, tenía que descansar a como fuera lugar no podía llegar a la oficina y que todos la vieran con esa cara, esas ojeras que delatarían una mala noche para la chica.

Se dice que para poder dormir el cuerpo debe de estar en un estado de relación y la mente estar en blanco, no pensar en nada; pero para Riza Hawkeye era todo lo contrario, estiro su mano con la intención de encender la radio tal vez si escuchaba un sonido aparte de su respiración y el tic tac de su reloj llegara a aburrirse y relajarse. Y tal vez llegaría a quedarse dormida; no fue hasta que estiro la mano que se percato después de todo ese tiempo que la radio estaba encendida; cambio de posición, coloco una mano debajo de su nuca, encogió sus piernas, cerro los ojos y sin que se lo propusiera centro su atención en la canción que sonaba en ese momento, después de todo la conocía. Era la misma que escuchara en la cafetería y en el metro, comenzó a cantarla primero con su mente mas tarde en voz baja. Sin saber el porque comenzó a sollozar, primero lento después fue aumentando hasta convertirse en un llanto de autentica desesperación.

Mr. Déja vu kimi ga inai

Señor deja vu, no estás aquí

Maboroshi ni natta hibi

Desde el días que te volviste una ilusión

Kizuitara kimi ga inai

Cuando me di cuenta que te habías ido

Tokei no hari wa ugukanai. Speak to me

El reloj se detuvo. Háblame

Aprisiono con fuerza la almohada con la mano que tenia debajo de su nuca, la otra se encontraba a la altura de su cintura la cerro y apretó con fuerza el puño, como si por medio de estas fuerzas externas pudiera controlar la debilidad de su interior, pareciera como si esto surtiera efecto pues poco a poco su respiración antes agitada se iba volviendo mas relajada hasta que finalmente pudo hallar el tan preciado sueño.

Despertó debió a que sintió como la palma de su mano era humedecida constante mente, abrió lentamente sus somnolientos ojos y se encontró con el rostro juguetón de su ahora único compañero le dirigió una triste sonrisa, se incorporo de la cama con pesar camino hacia la ventana y descubrió que hacia mucho el sol había salido.

Mayor evidencia de que había faltado al trabajo no podía haber, en otro tiempo, en otro estado de animo o en otras circunstancias se abría alterado, se hubiese bañado, cambiado y salido rumbo al cuartel en menos de 15 min. Pero ahora el faltar a cumplir con su deber no le intereso en lo mas mínimo y es que a pesar de que ya no se sentía cansada físicamente, sentía un cansancio que provenía mas aya de sus entrañas, era como si toda esa fatiga proviniera de su corazón mas que de su mente, algo que ella nunca antes había sentido, se vio tentada a regresar a su cama y permanecer ahí toda la mañana, toda la tarde y toda la noche recostada ahí.

Pronto se molesto con ella misma, se pregunto el porque de su repentino cambio de ánimos, el porque de sentirse así, se lo reprocho una y otra vez hasta convencerse ella misma de que todo lo sucedido anteriormente era algo superfluo, sin importancia y vano. Así que retomando de nuevo sus ánimos se dispuso a tomar una larga ducha la cual termino por mejorar sus ánimos. Para tratarse de otoño era ese un día muy brillante así que no quiso desperdiciarlo quedándose en su casa y salió a pasear acompañada de Black Hayate, en realidad fue una tarde placentera para Riza, paseo por el parque se detuvo a contemplar el ir y venir de las personas, cuando sintió hambre no la reprimió como hiciera cuando se encontraba en el trabajo. No esta vez fue diferente en cuanto sintió que su cuerpo le pedía algo de alimento se dirigió a un restauran se instalo en las mesas del exterior del lugar pues con Black Hayate le era imposible el acceso a éste, aun así fue grato permaneció aquí mas tiempo que en el parque pudiendo observar como caía lento pero seguro el manto de la noche. Se encontraba jugueteando por debajo de la mesa con su perro, cuando sintió que alguien la observaba, se incorporo rápidamente y giro en dirección donde sintiera la vista, pero no había nadie solo a lo lejos pudo vislumbrar una figura tal vez humana, vio como le dio la espalda y se alejo de ahí sin siquiera voltear, tal vez lo había confundido o visto mal pero aquel hombre le recordó al que viera ayer por la noche en el vagón del metro.

Contrariamente a lo bien que la estuviera pasando Riza en su improvisado día libre, en el cuartel general mas específicamente en la oficina de Roy, pareciera como si un huracán hubiera arremetido contra este dejando todo de cabeza, y es que dentro de éste lo único que se podía ver era miles de papeles esparcidos por todos lado que de no existir esas cuatro paredes éstos habrían ganado mas terreno y de entre todos éstos ahí a lo lejos casi imperceptible se encontraba un hombre sosteniendo lo que alguna vez fuera una cafetera, su turno estaba por finalizar y aun seguía lamentándose y refunfuñando la ausencia de la única persona que podría traer el orden a ese lugar. Desesperado por no saber que hacer estuvo a punto de gritar, pero en su lugar alguien toco su puerta.

-"adelante, no.. no mejor espere un momento."- con dificultad se abrió paso entre los papeles hasta llegar a la puerta, tuvo que empujar con el pie algunos para poder abrirla. - ahh mayor que lo trae por aquí.

-"teniendo problemas Mustang, acaso falta el toque femenino."-pregunto al ver el desorden.

-"No para nada, aquí toda marcha de maravilla, pero mejor dígame a que ha venido."

-"Me temo que estas no son buenas noticias."- su rostro cambio radicalmente de expresión se sereno y hablo en voz bajo pero firme.- "eh recibido un reporte de arriba es algo concerniente a lo sucedido en Ishbal, y como podrás adivinar tu pronto te veras involucrado en esto."

-"Ja, pero que cosas tan absurdas estas diciendo Ishbal quedo en el pasado, fue hace tanto tiempo que solo me quedan vagos recuerdos, además esa vez llevamos con éxito nuestro cometido y no quedo nadie con vida."- al principio su voz fue en tono de burla aunque al decir lo último su voz fue pausada y a manera de arrepentimiento.

-"Pues en eso te equivocas, hubo sobrevivientes de entre toda aquella masacre y es precisamente uno de esos sobrevivientes el que ha regresado y esta haciendo justicia por su propia mano."

-"Es decir que lo que busca es venganza."-Cuestiono con tono severo Roy

-"Si bueno, no quería que se escuchara tan desagradable. El caso es que este sujeto no solo ha estado asesinando a varias de las personas que participaron en la matanza de Ishbal, no solo ha asesinado a los militares y alquimistas que fueron, sino también a mandatarios y demás gente del gobierno que autorizo y organizo todo ese asunto.2

-"Pues bien merecido se lo tiene esos infelices."

-"Ojala fuera así de simple, pero aquí no terminan las cosas ese sobreviviente no solo los ha asesinado a ellos sino también a sus familias desde esposas, hasta hijos, y lo terrible del asunto es que los elimina de una manera que se ha comprobado conlleva métodos de tortura."- A Roy Mustang toda esta conversación no le interesaba en lo mas mínimo. Suponía que era normal que después de tanto tiempo alguien buscara cobrar venganza; en resumidas cuentas nada de lo que pudiera estar sucediendo le interesaba en lo mas mínimo después de todo si alguna vez se llegase a encontrar con aquel sujeto, el seria el que se vería envuelto en serios problemas al tener que enfrentar al alquimista de fuego.

-"Roy tal vez después de que leas el informe puedas cambiar de parecer y llegues a aceptar lo que en este se te pide; pues aunque lo dudes tu eres de todos el que mas involucrado esta. Nos veremos mañana para saber tu decisión."

En cuanto se quedo solo escombro lo mejor que pudo su escritorio, se sentó y abrió lentamente el sobre, extrajo de este algunos papeles color blanco con tinta negra detrás de este el gran sello de los alquimistas lo leyó detenidamente. El documento decía mas o menos lo siguiente.

Alquimista de Fuego, Coronel Mustang Roy.

A principios de otoño nos han llegado noticias que nos han hecho dejar a un lado asuntos de menor importancia, frente a este y es que últimamente se ha suscitado una extraña serie de asesinatos en masa de altos funcionarios, en un principio estos se suscitaron a las márgenes de ciudad central fuera de nuestra periferia, así que todo esto nos era ajeno a nuestros deberes, pero desde la semana pasada esta ola de crimines se ha extendido hasta llegar a nosotros dejándosenos a nuestro cargo averiguar, dar con el asesino y de la misma forma eliminarlo.

En cuanto llego el asunto a nuestras manos e puesto a mis mejores hombres a recolectar la mayor cantidad posible de información que nos pudiese ser útil logrando recolectar lo siguiente:

Se sabe que el asesino es un hombre de aproximadamente 35 años, tez morena, alto; descendiente de Ishbal, nacido y originario de esta región, vivió en carne propia la llegada de los alquimista y la destrucción de su ciudad natal, causada por los mismos, así como toda su familia; tal vez se pregunte de tantos que se eliminaron quien podrá decir fue su familia, acerca de este no se recabo mucha información solo se sabe que tenia un hijo no menor a los 10 años el cual murió a manos de uno de los alquimistas estatales. Este era el mejor capacitado y mas audaz de todos, inclusive hoy lo sigue siendo; a estas alturas ya sabrás de quien hablo sabrás quien es aquel niño y quien lo asesino. Ese fuiste tu Coronel Roy Mustang, el nombre del niño era Ernest Grimdsom. Por desgracia para nosotros su padre sobrevivió y espero todos estos años, ideo un plan, trazo todos los puntos, consecuencias, ventajas y desventajas, espero no uno, ni dos años, ese hombre espero mas de cinco años para cobrar lo que tanto ha buscado: venganza, ahora a aparecido y parece que su plan es perfecto ha eliminado a casi la mitad de todos los que se encuentran en su vista, a ellos y a su familia y todo esto va mas allá de una simple venganza en contra de varios hombres; parece que solo busca a uno solo. Ese hombre solo te quiere a ti Mustang. eso lo sabemos porque en cada escena del crimen deja la leyenda: Hasta no encontrarte y destruir todo tu mundo, tu felicidad; podré descansar en paz. Quiero que sientas lo que es la verdadera desesperación, el quedarte solo en un mundo donde solo existe el dolor y sufrimiento. Roy Mustang.

Hasta el momento en que esto llegue a tus manos ese sujeto estará por llegar a ciudad central o inclusive ya estará ahí. Todo esto le ha sido informado con un solo propósito el cual consiste en que usted se haga cargo de este asunto, queremos que sea usted el que de con ese hombre, que según se sabe se llama Hank Grimdson, le pedimos que tome a sus mejores hombres y parta cuanto antes en su búsqueda, antes de que este se adelante; acerca de cual será su posible siguiente victima no te podemos asegurar nada, pero a juzgar por los movimientos de éste hay un gran índice de probabilidad de que seas tú. Es esta la principal causa por la cual nos vemos en la necesitad de pedirte cumplas con esta misión.

Roy piensa en esto último. Si no deseas hacerlo para ayudar a los hombres que tanto aborreces entonces hazlo por tu seguridad y lo mas importante por lo de tus seres queridos.

Sin mas por el momento esperamos tu respuesta a mas tardar mañana a primera hora.

P.D. tal vez te sea útil esta información, tal parece que Hank utiliza un tipo de alquimia que puede resultar muy peligroso.

CONTINUARA...

Gracias a todos los que leyeron el primer cap. "de amor no sabes nada". Ojala y les guste este cap. II; espero sus comentarios.

KAT (jeje..voy a escuchar la cancion y ya veremos) rena ( si pobre Riza Roy es un vil mujeriego) SanNeechan ( muchas gracias por tu comentario y espero te guste este 2do cap.) Gaby Y.S. ( pues por desgracia Riza dejo sus armas y pobre..aun así las cosas no van a poder empeorar).

ARIGATO GOZAIMASU

TAO JUN SHINOMORI.