Holaa adenuevo a todos .. mm bueno akiles dejo un ficqueencontre ahi hace muchotime ... fueuno de los primero fic que lei ... Esto va en compensa a las pesonas que memelo pidieron nn mm.. y tmb a las que me preguntaron de donde habia sabaco mi Nick.. si, Es este el fic que me nombro "Likos" nn .. jeje

ha.. veran ... con respecto a mi anterior fic.. pues.. he tenido un blokeo de imaginacion TT .. ( la verdad tengo demasiadascosasq hacer) .. en fin ... ojala un dia de estos ( cuando salga de mis examenes) lo termine .. .. Gracias a todos los que me dejaron Reviews nn .. me animaron bastante .. ( pense que no iva a tener ninguno XDD ) Gracias !..

Este fic no me pertenece (lamentablemente)...Es creacion de mi mentora... Daga (viva DagaSama!)(

Hp no nos pertenece ..bla bla. .. . ni los personajes..bla bla ... ni nada.. solo es un Deslis de nuestra imaginacion .. ( o nuestras inquietas mentes )

HARRY POTTER Y EL CORAZÓN DEL DRAGÓN

Por Daga

N/A: Este fic ocurre en un universo paralelo, luego de los tres primeros libros y en lugar del cuarto... Confieso, lo que pasó es que cuando empecé a escribirlo aún no había sido publicado en español el Cáliz de Fuego 3

uno :CUARTO AÑO EN HOGWARTS

"Escuchad, nobles señores y gentiles damas, la canción de este humilde bardo. Esta es la historia de un niño que decidió el destino de reyes y reinos y tuvo en sus manos el poder de salvar el mundo o destruirlo. Esta es la historia de Merlín el mago, nacido para el Mal por designios del Enemigo de los Hombres, pero criado para el Bien por la gracia del Bautismo.
Es la Verdad quien habla por mi boca, que las leyendas de antaño disipen las sombras de la noche y prendan un nuevo fuego en el corazón de los jóvenes."

Leyenda de Merlín, contada por Henry Hyde

Las manecilla del minutero se encontró con la horaria al dar las doce. Harry sonrió. Acababa de cumplir catorce años.
Hasta hacía poco tiempo, su cumpleaños no era motivo de alegría, pero las cosas habían cambiado mucho desde su entrada al colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. Toda su vida había cambiado para mejor, y su cumpleaños era un buen momento para contar sus bendiciones.
Tenía buenos amigos (Ron, Hermione, Hagrid, Neville, Dean, Seamus...), tenía a su lechuza Hedwing, una magnífica escoba y, de tiempo en tiempo, las cartas de Sirius y las de Remus.
Dondequiera que Sirius se encontrara, por lo visto estaba a salvo y recuperándose de su experiencia en Azkaban. Remus, por su parte, había estado viajando por todo el mundo, sin quedarse mucho tiempo en ninguna parte, Hedwig había pasado por verdaderos problemas para encontrarlo y darle las cartas de Harry.
-¡Harry!... ¡Eh, Harry!
La voz de Ron, gritándole en el oído, lo obligó a despertar, había estado soñando con su cumpleaños más reciente, y mientras tanto el tren que los llevaría a Hogwarts se había puesto en marcha.
-¿Eh¿Qué?
-¿Piensas dormir todo el camino?
-No sería una mala idea, tuve uno que otro problema anoche¿sabes? Dudley pensó que sería una buena broma encerrarme en mi cuarto para que perdiera el tren hoy y no podía usar la magia para escaparme ni enviar a Hedwig por ayuda... Por cierto¿sabías que usar un alambre para abrir una cerradura es mucho más difícil que como lo pintan en las películas?
-¿Las qué?
-Recuérdame que te lleve a ver una película las próximas vacaciones -respondió Harry, con un bostezo como punto final de la frase.
-¿No nos ibas a contar lo que pasó en Diagon Alley cuando estuviéramos en el tren? -preguntó Hermione.
-Ah, sí, es cierto.
Harry se acomodó un poco más en su asiento y empezó con su relato.
Los señores Dursley estaban más que felices de deshacerse de su sobrino aunque fuera por un rato y no pusieron ningún pero cuando Harry pidió permiso para ir a Londres para comprar el material escolar de su cuarto año en Hogwarts. A decir verdad, habían optado por ignorarlo en tal forma que Harry terminó por imaginar que el silencio que siguió a su petición era una respuesta afirmativa, por aquello de "el que calla, otorga.
El caso es que había ido solo a Londres y había entrado a Diagon Alley por el mismo camino que habían usado Hagrid y él la primera vez, para encontrarse en medio del bullicioso callejón. Lista en mano, empezó a recorrer las tiendas, y cuando iba por la mitad de las compras, dobló una esquina sin fijarse por dónde caminaba y chocó con alguien.
-¡Lo siento! -exclamó el chico que había tropezado con él.
Harry no atinó a responder de momento, la cicatriz le ardía como si tuviera un hierro al rojo aplicado contra la frente y le resultaba difícil ver, pero el dolor pasó tan rápido como había llegado y lo olvidó casi enseguida, parpadeó unas cuantas veces para enfocar la vista y entonces descubrió que otro chico, que acompañaba al primero, estaba ofreciéndole la mano para ayudarlo a levantarse.
-¿Estás bien?
-Sí, sí, no ha pasado nada -dijo Harry mientras se sacudía el polvo-. Sólo ha sido un encontronazo... Eh, hola, mucho gusto, soy Harry Potter.
El chico de cabello oscuro enarcó una ceja y Harry tuvo la impresión de que intercambiaba una mirada con el chico rubio (que era con el que había tropezado) antes de contestar.
-Encantado. Mi nombre es Henry Hyde. Él es mi primo, Galahaad Brightstar.
-Es un placer conocerte -aseguró Galahaad con una sonrisa tímida-. ¡Vaya! Parece que también estás de compras -añadió, mientras los tres recogían los paquetes desperdigados por el suelo.
-La lista de útiles para Hogwarts -explicó Harry.
-¿Hogwarts¡Qué casualidad! Estamos en el mismo trance -dijo Henry, otra vez enarcando una ceja, cosa que hizo sentir incómodo a Harry por alguna razón.
-Tal vez tú nos puedas ayudar -la voz de Galahaad estaba tan llena de esperanza que casi resultaba cómica- tenemos que encontrarnos con mis hermanos en un sitio llamado Ollivander's, pero estamos ligeramente extraviados.
-Yo diría "completamente perdidos" -dijo Henry.
-¿Es la primera vez que vienen a Diagon Alley? -preguntó Harry.
-Es nuestra primera vez en Inglaterra, incluso. Llegamos ayer -dijo Galahaad.
-Somos de Avalon -terminó de explicar Henry.
-¿De Avalon? -exclamó Hermione.
-Sí, Avalon fue lo que dijeron. Por cierto, Herm¿tú sabes dónde queda eso?
-¡Nadie lo sabe, Harry¡Sólo los que tienen sangre de Avalon pueden encontrar la Isla! Y no invitan a mucha gente que digamos para que los visiten. ¿No has oído de Avalon?
-Pues no... -Es una isla mágica, un país en el que sólo viven magos auténticos, hadas y seres mitológicos. Ahí está la tumba del Rey Arturo, tú sabes, el Rey Arturo que era dueño de Excalibur... se dice que él algún día despertará y reclamará el trono de Inglaterra... Ah, y la familia real de Avalon está emparentada con Oberon y Titania¿recuerdas "Sueño de una noche de verano", de Shakespeare?
-Vagamente -contestó Harry, que no tenía ni idea de lo que le estaba hablando Hermione, pero sabía que Shakespeare escribía teatro y poesía.
-Pues sí, descienden de ellos y también del segundo hijo del Mago Merlín. Tanoc, sí... El primogénito se llamaba Vanoc y.
-Hermione -interrumpió Ron-¿qué tal si dejas que Harry termine de contarnos lo que pasó en Diagon Alley antes de que nos recites todo el árbol genealógico?
-Uh.
Minutos después del encontronazo, el trío estaba frente al establecimiento del señor Ollivander. Galahaad suspiró dejando los paquetes en el bordillo de la acera.
-Parece que llegamos primero -observó.
-No por mucho -Henry señaló a ambos lados de la calle. Un muchacho de cabello negro, algo mayor que Harry, y una chica rubia y otra de cabello negro estaban llegando desde distintas direcciones, todos cargando algunos paquetes.
Galahaad se encargó de presentarlos y Harry se encontró con la sorpresa de que los hermanos Brightstar eran dos parejas de mellizos: Arturo y Shikena, de 15 años, y Galahaad y Sonsioré, de trece.
Los cuatro, junto con Henry, entrarían ese año a Hogwarts y tenían que ponerse al día con materiales y libros, así que habían repartido la lista entre los cinco con la idea de reunirse finalmente en Ollivander's para comprar las varitas.
-¿Qué¿No tenían varitas? -preguntó Hermione.
-Eso me intrigó mucho -dijo Harry-, porque Arturo y Shikena van a quinto año, Henry a cuarto y Galahaad y Sonsioré a tercero, pero ninguno había tenido antes una varita.
-¿No estudiaban magia en Avalon?
-Sí, iban al Colegio Reina Titania, pero me dijeron que practicaban otro tipo de magia.
-Otro tipo de magia... -murmuró Hermione, aquello ameritaba una larga investigación en la biblioteca del colegio.
-Pero todavía no he llegado a la parte interesante.
Nunca había visto unos hermanos tan iguales y a la vez tan diferentes, y las varitas del señor Ollivander parecieron estar de acuerdo. Arturo y Shikena obtuvieran varitas con núcleo de pelo de unicornio, pero la de él era de encino y la de ella era de roble; las de Galahaad y Sonsioré eran de endrino y sauce respectivamente, con núcleo de plumas de fénix. Henry, por su parte, obtuvo una de ébano cuyo núcleo era de fibras de corazón de dragón.
Iban saliendo de la tienda, con los gemelos más jóvenes comentando con entusiasmo las cualidades de sus primeras varitas cuando Galahaad tropezó con alguien. Parecía que era su día de chocar con la gente. El problema fue que esa vez no se trataba de alguien tan amable como Harry.
-¡Fíjate por dónde caminas, idiota! -exclamó Draco Malfoy.
-¡Lo siento mucho! -respondió Galahaad.
Draco se levantó gruñendo y miró a Galahaad de arriba abajo. El chico rubio era bastante más bajo que él... y Harry estaba un poco detrás.
-¿Otro de tus amigos sangre sucia, Potter¿Todavía no ha aprendido suficiente magia como para poder caminar derecho?
-¡Oye! -exclamó Sonsioré, haciendo retroceder a Galahaad y encarando a Draco-. ¡Es a mi hermano a quien estás insultando!
-¿Ah, sí¡Pues repito lo que dije y lo sostengo!
Sonsioré parecía estar a punto de comerse vivo a Draco, pero Arturo y Shikena la sujetaron al mismo tiempo.
-No vale la pena -dijeron ambos.
-Por supuesto que no -respondió Draco, burlón- Si ese incapaz no puede defenderse por sí mismo sino que se esconde detrás de una niña.
-No me escondo -dijo Galahaad, frunciendo el ceño, pero sin moverse de su sitio.
-A mí me parece que es justo lo que estás haciendo.
Harry calculó que Crabbe y Goyle no debían estar muy lejos de ahí, para que Draco se dedicara a provocar de esa manera y alzando tanto la voz. Sin duda lo estaba disfrutando.
-Ya basta, Malfoy, déjanos en paz -dijo Harry, con su tono más severo.
-¡Habló Potter, finalmente! La calle es pública. ¿Qué vas a hacer si no quiero callarme?
-¿Malfoy? El hijo de Lucius Malfoy, supongo -dijo un caballero que acababa de acercárseles. Draco lo miró con desconfianza.
-Sí. ¿Y usted es?
-Merlín Brightstar. Lord Wintergem.
Al escuchar el título, Draco se puso pálido, tartamudeó algo y al final no consiguió decir nada comprensible. El señor Brightstar dejó de prestarle atención y miró a Harry.
-Me pareció escuchar que tu apellido es Potter. ¿Tienes algún parentesco con James Potter?
-Era mi padre. Soy Harry Potter.
Para sorpresa de Harry, el señor Brightstar hizo una respetuosa inclinación de cabeza.
-Estudié en Hogwarts en la misma época que tu padre, y aunque no estábamos en el mismo curso, tuve el honor de que me considerara su amigo. Me alegra mucho volver a saber de ti, Harry, no te había visto desde el día de tu bautizo, fue la última ocasión que estuve en Inglaterra hasta ahora.
Fue entonces cuando Harry lo reconoció¡en efecto, lo había visto en varias de las fotos de su álbum! Un muchacho rubio, casi tan alto como Remus, y con una insignia de prefecto, siempre aparecía junto a una muchacha de cabello negro que solía llevar un collar con una extraña águila de oro.
-He visto fotografías suyas con mis padres -dijo Harry alegremente-, pero no tenía idea de cuál era su nombre, Lord Wintergem.
El señor Brighstar sonrió, le aseguró a Harry que tendrían ocasión de conversar y compartir anécdotas y le indicó a los nuevos amigos de Harry que ya era tarde y que la señora Brightstar se disgustaba mucho con los atrasos.
Así que todos se despidieron y Harry continuó con sus compras.
-¿Y Draco? -preguntó Hermione.
-Se había esfumado en algún momento entre "Lord Wintergem" y "tuve el honor de que me considerara su amigo.
Ron trató de contener una carcajada cubriéndose la boca con la mano, no lo consiguió y empezó a reír con todas sus fuerzas.
-¿Pero qué te pasa! -exclamó Hermione.
-Malfoy debe estar buscando un agujero en donde enterrarse -logró decir Ron después de un buen rato-. ¡Tanto presumir de ser sangre limpia y no se le ocurre nada mejor que insultar a los hijos de Lord Wintergem¡Una de las familias de sangre limpia más antiguas de las que se tiene noticia, descendientes directos del mago Merlín!
-¿Del mago Merlín? -Harry y Hermione abrieron mucho los ojos.
-Exactamente, como la familia real. Wintergem es el condado más antiguo de Avalon, allí se resguarda el Corazón del Dragón, la joya mágica que perteneció a Merlín, y los Brightstar están emparentados con toda la nobleza mágica de Europa. Cuando alguien recibe la Orden de Merlín, el documento oficial debe llevar el sello de Lord Wintergem.
-Wow... ¿Y sus hijos y su sobrino irán a Hogwarts? -dijo Hermione.
-Todo indica.
-¿Qué casa les tocará?
-Yo diría que Galahaad va derechito a Hufflepuff -dijo Harry con una sonrisa-, no recuerdo haber visto a nadie tan tímido, pero tal vez los demás queden en Griffyndor.
-Bueno, ya tendremos ocasión de verlo.
El cielo del salón principal lucía de un azul profundo sembrado de estrellas durante el banquete que daba inicio al curso lectivo en Hogwarts.
Harry, Hermione y Ron habían escogido buenos lugares en la mesa que correspondía a Griffyndor, desde donde podrían contemplar a gusto la ceremonia del Sombrero Seleccionador.
-Eh, miren -dijo Harry-. El señor Brightstar está en la mesa de los profesores.
Así era, efectivamente, y lo acompañaba una dama de cabello negro que sin duda era la misma joven que aparecía junto a él en las fotos del álbum de Harry.
-¿Serán invitados de honor? -aventuró Ron.
-Shh, ya van a empezar -interrumpió Hermione.
Los nuevos alumnos fueron llamados por orden alfabético para probarse el sombrero que les indicaría cuál casa les correspondería mientras estuvieran en Hogwarts.
-¡Brightstar, Arturo!
El mayor de los cuatro hermanos no tardó mucho en tener su respuesta.
-¡Hufflepuff! -exclamó el sombrero.
-¡Brightstar, Galahaad!
Esta vez el sombrero se demoró un par de minutos antes de anunciar el lugar que le correspondía al muchacho.
-¡Slytherin!
Harry se sorprendió como nunca al escuchar eso, jamás se hubiera imaginado a Galahaad en la misma casa que Draco.
-¡Brighstar, Shikena!
-¡Ravenclaw! -exclamó el sombrero, luego de un par de segundos.
-¡Brighstar, Sonsioré!
-¡Griffyndor! -exclamó el sombrero casi en seguida.
Con una gran sonrisa, Sonsioré fue a ocupar un sitio cerca de donde estaban Harry y sus amigos. La lista de los nuevos estudiantes continuó un rato más.
-¡Hyde, Henry!
Esta vez el Sombrero Seleccionador tardó un buen rato en decidirse.
-¡Griffyndor!
Henry fue a reunirse con Sonsioré.
-Quedamos muy repartidos -comentó al llegar-. Hola, Harry, nos volvemos a encontrar.
Sonsioré volteó a mirarlo con cara de sorpresa.
-¡Harry¡No te había visto! Perdóname, estaba muy concentrada en la selección, esperando que llamaran a Henry.
-No te preocupes -sonrió Harry.
Luego de unas presentaciones, Sonsioré charlaba con Hermione y Ron como si los conociera de toda la vida. Henry se limitaba a sonreír y asentir de vez en cuando.
-Este siempre es un momento muy emocionante -dijo Hermione-, la duda, la inquietud de a dónde te enviará el Sombrero Seleccionador.
-Y que lo digas. ¡Mi primo favorito y yo en la misma casa! Por lo menos no estaré sola -la sonrisa de Sonsioré se desvaneció para ser reemplazada por un aire de preocupación-, me pregunto si Galahaad estará bien en esa otra casa, me pareció ver a aquel desagradable sujeto con el que tropezó en Diagon Alley en la mesa de Slytherin.
-Él estará bien -dijo Henry-, Galahaad es una persona de muchos recursos y el parecer indefenso es sólo uno de ellos.
Sonsioré iba a decir algo más, pero en ese momento el profesor Dumbledore pidió silencio para decir algo importante: darle la bienvenida a dos nuevos maestros: el profesor Merlín Brightstar, quien se encargaría de la clase de Derecho Interdimensional, y la profesora Nakuri Brighstar, quien tendría a su cargo Defensa Contra las Artes Oscuras.
Sonsioré y Henry aplaudieron a más y mejor, riéndose un poco de las caras de sorpresa de Harry, Ron y Hermione.
-¿Ellos van a ser nuestros profesores? -logró decir Hermione finalmente.
-Por eso fue que nos mudamos a Inglaterra. El Ministro Fudge se comunicó con la reina Eleonor porque no conseguía en Inglaterra a nadie para el puesto de profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras y la reina prometió enviar a Inglaterra a la persona más calificada de Avalon. Mamá -dijo Sonsioré con una gran sonrisa.
-Pobre Snape -comentó Ron con solemnidad-, esta vez sí que vino de lejos el golpe.
-Una cosa es segura, este año será cualquier cosa menos aburrido -apuntó Hermione.
-¿Alguno lo ha sido alguna vez? -Harry levantó su vaso de jugo de calabaza-. ¡Un brindis por Hogwarts!

Continuará...

Notas de la autora (Daga):

Nakuri ("Amiga"), Shikena ("Amanecer") y Sonsioré ("Belleza de la mañana") son nombres indígenas americanos. Comentarios, sugerencias y tomatazos, pueden enviarlos a

Nota de Likos:

nn Esto se pone interesante ..