Sid cruzo los brazos, mientras miraba de mala manera a su novio, el cual intentaba nerviosamente convencerla de que el error no era completamente su culpa.
- - Te lo juro – replico Lincoln visiblemente nervioso – la invitación no especificaba que fuera una fiesta de disfraces – continúo buscando el e-mail en su correo electrónico, maldiciendo en silencio la posibilidad que hubiera borrador el mismo.
Un resoplido por parte de su pareja indicaba que estaba a poco de perder la paciencia e iniciar a repartir culpas, a un que, en este caso, posiblemente él se llevaría la mayor parte de estas.
Por fin lo había encontrado, cuando su novia lo arrastro de vuelta a la fiesta, entrando rápidamente al baño de invitados que se encontraba casi en la entrada de la casa.
- - Quítate la ropa – comento la chica, mientras se quitaba su playera dejándole ver a su pareja el lindo sostén de gatito que solía usar cuando quería ponerse un poco juguetona.
Un abundándote sonrojo cubrió las mejillas del chico, pensando en todas las implicaciones, no es que no tuviera ganas de eso, después de todo Sid lo ponía duro, con solo susurrarle algo al oído, pero que era una fiesta, que si alguien abría la puerta en el momento equivocado.
Negó levemente, intentando no pensar en el torbellino de chismes que se formaría, y además en buena hora recordaba que no traía un jodido condón consigo, se mordió el labio intentando recordar el ciclo de la chica, era algo arriesgado, pero si ella quería hacerlo, él no iba a negarse ¿verdad?
Sid miro a su novio quieto y pensativo, sumamente sonrojado, no le tomo mucho tiempo darse cuenta en que pensaba, era más que obvio dado el bulto que se formaba en sus pantalones, negó levemente, que le pidiera quitarse la ropa no era con esas intenciones, quizás más tarde, la noche a un era joven, y por suerte traiga un condón en su bolsa.
- - Toma – aventó juguetonamente su playera a la cara de su amado – póntela mientras yo me pongo la tuya – explico ayudando a un desorientado chico a quitarse la ropa rápidamente.
No era disfraces muy originales, pero había algo que resaltaba a la vista, y era el hecho que Lincoln Loud podía lucir un pantalón de mujer bastante bien.
- - Me pondré celosa – cuestiono Stella, mientras intentaba no reírse de su mejor amigo – tienes más caderas que algunas de mis amigas – continúo molestando al chico.
Que traía la ropa de su novia, la cual parecía divertirse vestida como chico, coqueteando y bailando con Jordan y Ronnie Anne.
Algunas horas después, la fiesta se iba animando bastante, y la plática con sus amigas, subía bastante de tono, pero cuando Lincoln iba a contestar sobre si él y Sid lo habían hecho en un elevador, sintió una mano tocándole el culo, arrancándole un ligero gritito de nerviosismo y la risa de sus amigas presentes.
- Tranquila nena – exclamo juguetonamente Sid – que solo soy yo – susurro tomándole de la barbilla y robándole un beso – tu novio -.
Arrancando las risas y comentarios jocosos de las presentes, y a un que no lo dejarían en paz una temporada, todo eso quedaba en segundo término, ante la pequeña travesura que Sid le susurraba al oído, que tenía mucho que ver con un cuarto en la segunda planta, el cual tenía un diván donde ambos podían "descansar" un poco si todo salía de acuerdo, al plan.
