Lo confieso humildemente... Lo personajes no son míos, pertenecen a J.K. Rowling y a la Warner Bros.
Capítulo 4. Doloroso despertar.
Hermione:
Te envío esta carta para explicarte varias cosas y sobre todo para que seas mi portavoz para con los Weasley.
He decidido irme por una corta temporada. He aceptado una misión en Africa y como te podrás imaginar, estaré fuera de contacto por algún tiempo. Esta vez no será más de un mes, lo prometo.
Te dije que había decidido casarme. Esa desición la había tomado antes de saber que Ginny está viva. De hecho, ya Cho fijó la fecha del matrimonio y será dentro de tres meses. Ella se encargará absolutamente de todo... al menos algo funciona a mi favor... digo yo.
Por favor, dale estas noticias a los Weasley. Quise pedirles perdón por haber protegido a Ginny pero en la confusión, cuando ellos me contaron lo que realmente pasó, salí precipitadamente y lo olvidé... Lo haré a mi regreso.
Espero que tú, quien siempre has sido mi amiga, puedas comprenderme y perdonarme. Nunca abrí ninguno de los mensajes que recibí porque simplemente no quería que me dijeran que no había sido mi culpa o que comprendían mi dolor. No podía soportarlo. Todos piensan que fui yo quien salió victorioso de la lucha con Voldemort. No te imaginas cuantas veces me he hecho la pregunta: Fuí yo quien realmente es el sobreviviente? La profecía decía que sólo uno podría vivir, pero esto que llevo yo no es vida Hermione. Voldemort mató mis sueños, mis esperanzas. Es cierto que ahora todos viven en un mundo mejor... pero yo vivo en un infierno. Estos cuatro años han sido los peores de mi vida. Al principio pensé que vivir con la carga de la muerte de Ginny en mi conciencia era motivo suficiente para estar muerto. Ahora que sé que ella está viva pero que nunca despertará, es doblemente peor. Soy yo el responsable Hermione y si entre Voldemort y yo hay uno que vive, muy seguramente es él, porque yo caí junto a Ginny aquella noche bajo la lluvia de hechizos de los mortífagos.
Ginny fué mi gran amor... qué digo fué! Ahora que sé que ella vive puedo decir que es mi gran amor. Pero sé que la vida continúa y que ella nunca despertará. Así que mis planes con Cho siguen en pie. Sabes que soy un hombre de palabra y que siempre cumplo lo que prometo. Pues bien, ya he dado mi palabra a Cho. No hay vuelta atrás.
Gracias por todo.
Saludos,
Harry
P/D. Cuando visites a Ginny, dale un beso de mi parte, por favor.
Harry ató el pergamino a la pata de su lechuza y la lanzó al aire por la ventana del salón.
- Sabes donde encontrarme- le dijo mientras el ave ascendía hacia el azul del cielo. El joven tomó su escoba que aún mantenía su baúl atado en precario equilibrio, la montó y volando sobre ella, tomó rumbo al sur.
Hermione despertó por el sonido de golpes repetitivos en la ventana. Se estiró y vió a Ron a su lado dormido profundamente. Miró a la ventana y vió una lechuza blanca a la que reconoció inmédiatamente. Abrió la ventana, tomó la lechuza entre sus manos y le dió un beso sobre la cabeza.
-Tiempo sin verte Hedwig –dijo mientras desataba el pergamino de la pata. La lechuza hululó suavemente e instantes después salió volando por la ventana abierta sin esperar recompensa.
- Hey! Espera! Necesito que lleves un mensaje a Harry! –gritó.
- No va a responder – murmuró Ron aún dormido.
Hermione lo miró rápidamente antes de concentrárse en la lectura de la carta.
- MALDITO TONTO! – gritó colérica.
- Hey! Por qué me tratas así? – saltó Ron desde la cama- Ahora qué hice?
- Tú nada, el tonto de Harry.
-Harry? – preguntó Ron sin comprender, todavía estaba somnoliento.
- El muy tonto se ha ido de nuevo- dijo Hermione, Ron emitió un murmullo incomprensible.
-QUIEN SE HA IDO? – preguntó una cabeza que aparecía entre las llamas de la chimenea. Ron y Hermione saltaron en su sitio antes de volverse para descubrir quién era el visitante. Hermione haló la sábana hasta su barbilla para cubrir su revelador pijama mientras al mismo tiempo descubría el cuerpo desnudo de Ron.
-Hey- chilló este tapándo sus partes íntimas con una almohada y lanzando una mirada de odio hacia la chimenea
- Umh, umh- carraspeó la cabeza de Bill entre el fuego ocultándo una sonrisa.- Discúlpen el grito, tenía un hechizo sonorus activado... eh... también detesto interrumpir de esta manera un despertar tan ... coloreado... pero mamá me envía a darles una noticia bomba: HA DESPERTADO!
- Y porque mamá se despierte tienes que venir a husmear sin anunciarte? – preguntó Ron molesto.
- Tus neuronas aún están a media noche, no es así hermanito? -dijo Bill irónicamente.- Es Ginny. GINNY HA DESPERTADO.
-QUEEEE?- gritaron al unísono Ron y Hermione. Ron olvidó que no tenía ninguna prenda de vestir sobre su cuerpo y se lanzó de la cama, luego arrodillándose frente a la chimenea, se apoyó en sus manos y miró a Bill directamente a los ojos.
- Dime que es verdad – suplicó a la cabeza de Bill.
- Ehhhh... – dijo éste medio avergonzado. – Sí, es verdad. Despertó hace menos de media hora. Los viejos fueron advertidos por una sanadora de San Mungo que les envió un mensaje mágico. Ellos ya están allá. Yo le estoy avisándo a toda la familia. Y... hermanito... Sabías que esa posición no te favorece en nada desde mi punto de vista? Futura cuñada – dijo dirigiéndose a Hermione- si yo fuera mujer, habría comprendido como tú, que Ron tiene más posibilidades de las que se pueden percibir... a simple vista. Hasta pronto, nos vemos en San Mungo – dijo, y guiñándole un ojo a Hermione que estaba sonrojada hasta la raíz del cabello, desapareció de entre las llamas.
Ron saltó para tomar un cojín y cubriéndose nuevamente sus partes íntimas, murmuró como para sí mismo:
- Ha despertado, ha despertado.
- Ron, muévete. Tenemos que ir a San Mungo! – exclamó Hermione. Y mientras Ron se ponía de pie y se dirigía a la sala de baño, Hermione, con una sonrisa en los labios, se apoyó lentamente sobre las almohadas para disfrutar del espectáculo de ver a su novio desnudo.
En la sala de espera del piso cuatro del Hospital San Mungo, en el ala de casos Desesperádamente Desesperados, una numerosa familia donde la gran mayoría eran pelirrojos, esperaban con impaciencia la autorización para entrar al área donde están los enfermos con daños irreversibles. En una esquina de la sala, colgaba una pintura en la cual se habían reunido los personajes de todos los cuadros ubicados en el piso cuatro.
-Con permiso, con permiso, habrán paso – decía una mujer vestida a la usanza de hace tres siglos, abriéndose paso entre los personajes aglomerados en el cuadro.- Desde mi cuadro en la recepción he visto llegar a unos excitados Weasley y sus parejas, cuál es el motivo del alboroto?- preguntó Dilys Derwent, sanadora de San Mungo y Directora de Hogwarts.
-SHHHHH- dijeron todos los otros personajes.
- Es la chica Weasley, ha despertado. Yo también vine a darme una vuelta por aquí, ya sabes que conocí muy bien a su padre hace algunos años cuando fué mordido por la serpiente. – dijo en un susurro Urquhart Rackharrow.
Una sanadora con aspecto severo se hacercó al grupo de pelirrojos que esperaban impacientes.
- Podrán pasar todos a verla – anunció- pero de uno en uno. Recuerden que no deben hacerla hablar mucho. Está aún débil y necesita descansar.- Todos asintieron con la cabeza. - Usted señora, - dijo dirigiéndose a Fleur- lo lamentó, pero es mejor que espere aquí con su bebé.
- No hay problema- dijo Fleur decepcionada y se sentó sobre un mullido sillón al fondo de la sala.
- Tú primero Molly- dijo el señor Weasley dirigiéndose a su esposa.
- Los padres pueden entrar a la vez- anunció secamente la sanadora, luego dió media vuelta y se retiró.
Arthur y Molly entraron tomados de la mano, un segundo después la puerta se cerró silenciosamente detrás de ellos. Casi inmédiatamente, los gemelos se dirigieron hacia la puerta.
- Hey! Qué se supone que hacen! – atajó Percy.
-Vamos a entrar – dijo George.
-Pero la sanadora dijo que de uno en uno, solamente papá y mamá podían entrar juntos.- agregó Percy frunciéndo el ceño.
-Exactamente! – exclamó Fred. – Dijo "entrar de uno en uno", no dijo que había que esperar a que saliera para entrar el siguiente, así que... después de de ti George.
-Gracias, Fred- dijo el aludido con una sonrisa en los labios, inclinándose ceremoniosamente hacia su gemelo.
- Síganme los valientes – agregó Fred mientras abría nuevamente la puerta que se cerraba detrás de George y lanzándo una sonrisa desdeñosa hacia Percy que aún mantenía su ceño fruncido.
Uno a uno, todos los miembros de la familia Weasley y sus compañeras entraron en la habitación de Ginny.
Ginny estaba apoyada sobre dos grandes almohadones y sonreía débilmente mientras veía llegar el desfile de todos los miembros de su familia. Molly mantenía una mano de la joven entre las suyas mientras sollozaba en silencio y la miraba con una sonrisa. Arthur acariciaba suavemente la cabeza de su hija.
- Cómo te sientes? – preguntó Bill.
- Como si acabara de despertar de un largo sueño. – contestó Ginny. Ella pasó una mirada sobre todo el grupo y se detuvo en el rostro de Percy que se asomaba sobre el hombro derecho de Charlie. En las últimas circunstancias que ella recordaba, Percy no tenía contacto con la familia. Algo había pasado.
- Cuánto tiempo he estado aquí? – preguntó la pelirroja dirigiéndose a su padre. Este enrojeció y sonrió a la chica.
-Eso no es importante ahora- le dijo.- Lo importante es que descanses y te recuperes pronto.
-Y Harry? -Preguntó ella. – Cómo está Harry?. Todos se miraron unos a otros.
-Está bien – dijo suavemente Hermione.- De hecho, te envía saludos.
-Tienes que ponerte bien pronto, hermanita – dijo Charly cambiando de tema.
-Tenemos muchas cosas por contarte- agregó Ron.
- Sí, tenemos que actualizarte. Nosotros de daremos toda la información. – dijo Fred.
-Y la información es poder- completó George. A Ginny no se le escapó el esfuerzo de su familia por cambiar de tema, así que simplemente dejó caer:
- Harry. Yo lo escuché, él estuvo aquí... – dijo las últimas palabras como para sí misma, tratándo de convencerse que no había sido un sueño. Nuevamente, todos los miembros de la familia se miraron entre ellos. Ron se volvió hacia Hermione con una expresion de "de qué diablos habla?" en su rostro. Hermione bajó la mirada.
La puerta se abrió y dió paso a una sanadora joven que sonrió y movió negativamente la cabeza.
-Señores- dijo ella- la visita-colectiva-no-permitida ha terminado. Son un poco impacientes, no es así?. Por favor, salgan. Necesito examinar a Ginevra y ella debe descansar. Se recuperará muy pronto, pero ustedes deben cooperar. Son demasiadas personas en esta habitación.
Todos empezaron a salir lentamente mientras le lanzaban besos a Ginny y le hacían saludos con la mano.
-Hermione!- llamó Ginny- Puedes quedarte un momento?
-En quince minutos, Ginevra- interrumpió la sanadora. – Primero lo primero. Luego usted puede entrar señorita, sólo por cinco minutos y después, sólo dos al final de la tarde. Sin exepciones.- Dijo en un tono que no admitía réplica.
Hermione asintió con la cabeza y murmurando un "gracias" salió de última en el grupo.
-Por qué diablos no me dijiste que Harry estuvo aquí? – preguntó Ron volviéndose hacia Hermione. Ron se acababa de enterar que Harry había regresado.
- Cuando llegué a la casa ya estabas dormido- contestó la chica.
- HERMIONE GRANGER, ESO NO ES EXCUSA- Exclamó Ron mirándo fijamente a Hermione.- Además, - prosiguió- un rato después estaba despierto y bien despierto.
-SHHH- dijeron desde el cuadro.
- SI, RON WEASLEY! – contestó Hermione bajo el mismo tono. –Pero después estabas muy ocupado como para hacer preguntas y yo... – se cortó de pronto viendo que todos los miraban divertidos..- Yo... yo, bueno, yo... también. SIMPLEMENTE SE ME OLVIDO- agregó furibunda e impotente ante semejante espectáculo que estaban dando.
-Stop! Stop! Stop!- interrumpió Penélope. –Sabemos lo encantadores que son los Weasley en la mañana, sobre todo si tienen poco o nada de ropa encima. Pero el punto en este momento ni siquiera es Harry, es Ginny.
-Demasiada información junta sobre mis hijos- murmuró por lo bajo Arthur Weasley.
-Si te pregunta, qué vas a decirle? – quiso saber Bill, dirigiéndose a Hermione.
-Bueno, ustedes son los que deciden, pero creo que lo justo sería decirle la verdad. Además... – vaciló un poco antes de agregar. – Harry se casa en tres meses, mientras más pronto salgamos de eso, mejor.
-QUE? – exclamaron todos al unísono.
-Recibí una carta esta mañana, Harry partió para hacer una misión en Africa y me escribió que en tres meses se casa con Cho Chang. Ya es un hecho.
-Y por qué no me dijiste lo de la carta esta mañana? – quiso saber un malhumorado Ron.- Parece que siempre soy el último en enterarme de todo!.
- Ronald Weasley, basta ya!- exclamó Hermione frunciendo el ceño.- Te parece que hemos tenido el tiempo y la oportunidad?
- Creo que Hermione tiene razón- interrumpió Arthur Weasley.- Qué opinas tú Molly?.
- Parece que no tendremos otra alternativa. Si no es ahora, será en la tarde o mañana, es algo inevitable. Así que si ella pregunta, imagino que estará preparada para escuchar las respuestas. Mentirle sería peor.
-Esperemos no equivocarnos- agregó el señor Weasley. Todos asintieron en silencio.
Quince minutos depués, Hermione estaba sentada junto a la cama de Ginny y ésta le decía:
-Y bien? Por dónde empezámos?
-Por donde tu quieras amiga.- contestó Hermione.
-Cuánto tiempo pasé aquí?
-Cuatro años, dos meses y tres días para ser exactos.
Ginny no pudo evitar de hacer un movimiento de sorpresa, luego se dejó caer sobre los almohadones.
- La sanadora me dijo que había sido mucho tiempo, pero no esperaba algo así. -dijo con una profunda tristeza en la voz. – Imagino que me he perdido de muchas cosas, verdad?.
-Francamente, sí. –Dijo Hermione.
-Gracias por no evadir mis preguntas, Hermy.
-Siempre hemos sido amigas sinceras.
-Sí, así es. Harry estuvo aquí?- preguntó sin rodeos.
-Sí, Gin. Harry estuvo aquí.– dijo Hermione- ayer... – agregó bajo, casi como un silbido.
-Lo sabía!. Lo sentí, lo escuché. No me preguntes cómo Hermione, pero estaba segura! Un momento. – dijo interrunpiéndose de pronto. – Dijiste... ayer?
-Sí.
-Es que no había venido antes?.
-No.
-Pero, por qué? Estaba tambien enfermo!- exclamó. – Oh, no! Harry!. El está bien?
-Cálmate Ginny.- suplicó Hermione.- Harry... él pensaba que tú habías muerto.
Hermione hizo el relato abreviado de los eventos más importantes, de cómo Ginny había sido atacada, la partida de Harry, su desición de romper todo contacto con las personas que conocía y por último de su regreso el día anterior.
- Cómo debe haber sufrido! -Exclamó Ginny. – Quisiera verlo, Hermy.
-Ginny, eso no podrá ser, al menos no por ahora. Harry partió nuevamente esta mañana y no estará de regreso antes de un mes. Al menos esta vez prometió que regresaría.
Ginny dejó escapar un suspiro.
-Aún lo quieres? – se aventuró a preguntar Hermione.
-Herm – dijo Ginny mirándola con seriedad. Para mí es como si hubiese sido ayer. Lo amo, no puede ser de otra manera. Lo amo con locura.
-Hay otra cosa sobre Harry, Gin- dijo Hermione. – Creo que deberías saberlo.
-Sí?
-Yo... bueno, no sé cómo decirte esto, pero por favor trata de entender. El no sabía que tú despertarías. De hecho, nadie lo sabía, llevas tanto tiempo así que...
-Si? -Interrumpió Ginny impaciente. – Dime lo que sea de una vez.
- Harry se casará dentro de tres meses con Cho Chang.
Ginny hizo una mueca de sorpresa y dolor, sus fuerzas estaban al límite. La sanadora que había estado antes con Ginny abrió la puerta y dijo:
-Señorita, debe partir. Ginevra necesita descansar, ya pasaron los cinco minutos.
- Lo siento- dijo Hermione dirigiéndose a Ginny.
-No te preocupes, estaré bien- Ginny sonrió débilmente. Cuando Hermione desapareció detrás de la puerta, Ginny dejó escapar todo el llanto de dolor y de decepción que estaba conteniendo. Minutos después, con lágrimas en los ojos, se durmió.
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Bueno, ya saben como es esto…. Necesitamos comentarios los humildes aspirantes a escritores... Bueno, no exageremos... Digamos los que procuramos un poquito de placer haciendo lo que nos gusta ESCRIBIR!. Espero sus dudas, comentarios, críticas, elogios, sugerencias, albanzas y todo lo que se les pase por la mente... al botoncito de abajo a la izquierda.
Y mil gracias por seguir esta historia!
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Anilec : Gracias por tus comentarios. Te prometo que actualizaré pronto. Y MIL GRACIAS por avisarme del pequeño problema que tuve cuando subí el capi 2. Espero que sigas disfrutando de la historia. Un abrazo.
Nayades: Mil gracias por tu comentario. A tí tambien te prometo actualizar con más frecuencia ... Varios capítulos están ya escritos pero estoy en revisión de ideas y haciendo algunos cambios... pero tendrás más y pronto. Un abrazo latino.
Sophie Grint: Para complacerte... continúo... Y gracias por tu comentario. Saludos!
