Y la acción empieza, jejeje. Besos para todos.


CAPITULO I

-¡Corre¡¡Harry corre!

-¡No voy a dejarla aquí, Hermione!

-Yo me quedo con ella.

-No tenéis ninguna posibilidad contra él. Yo soy el único que puede matarlo.

Hermione miro a Harry perpleja¿Qué acababa de decir? Harry la miraba con su ya habitual mirada fría, entre sus brazos Ginny apoyaba su cabeza en el hombro de él, totalmente inconsciente debido a un fuerte golpe en la cabeza.

-¿Cómo?

-Según la profecía soy el único que puede vencerlo. O muere él o muero yo.

-¡Harry, aún no estas preparado!

-Lo sé pero no voy a dejaros aquí.

-¡Desaparécete ahora que puedes! Que tú seas el único que puede vencerlo hace que el que ahora huyas sea aún más importante.

-NO, vete tu. Yo me quedo con Ginny.

Hermione miro a Harry con lágrimas en los ojos, ahora entendía la forma de actuar de Harry en los últimos dos años.

-Me quedo contigo.

Harry la miro y una suave sonrisa se dibujo en sus labios. Sabía que no podía evitar que Hermione se quedara con él.

-Tendrías que haberle hecho caso Potter¿de verdad crees que puedes conmigo?

Voldemort acababa de encontrarlos y por lo visto ya sabía la profecía. La acababa de oír de los labios de Harry.

Harry se dio la vuelta con su varita en la mano, mirando a Voldemort con una frialdad y tranquilidad que le atribuía una fuerza mayor que cualquiera.

Ambos atacaron a la vez, una Avada Kadabra salió de los labios de ambos magos. Unos rayos verdes salieron de las varitas y chocaron entre sí. Era la segunda vez que pasaba, la segunda vez que ambas varitas se veían obligadas a enfrentarse.

Pero esta vez actuaban de forma diferente. Un canto de Fénix era lo único que se asemejaba a la primera vez.

Una bola de energía crecía allí donde las dos maldiciones se habían unido, creciendo cada vez más y más. La bola crecía y crecía, y ninguno de los dos magos podían soltar su varita. La bola fue creciendo poco a poco, y acercándose cada vez más a Harry y sus amigos. Poco a poco. Harry cayo de rodillas, sujetando con sus dos manos la varita, con un esfuerzo sobrehumano. Su rostro era pura concentración, Voldemort avanzaba hacia él como si fuera impulsado hacia el chico con una fuerza invisible. De golpe la bola de energía se dirigió a Harry y sus amigos con rapidez.

-¡Hermione corre!

No hubo tiempo, la bola que en esos momento tenia de diámetro 2 metros, encerró a los tres chicos dentro de ella. Voldemort quedando fuera, mirándolos con odio y sorpresa ante lo que acababa de ocurrir. Harry estaba en el suelo, agotado, sin fuerza y respirando con rapidez.

Hermione estaba estupefacta¿Qué estaba pasando? Se llevo la mano al cuello, tocando en ese momento el giratiempos. Una idea le cruzo por la mente. ¿Y si pudiera trasladarse solo unas horas atrás? No podría evitar este final tan desastroso. No podría quizás evitar la victoria de Voldemort, porque eso era una victoria y Voldemort en cuanto se recuperara de su sorpresa los mataría.

Hermione no lo pensó dos veces, no pensó en las posibles consecuencias. Dio dos vueltas al giratiempos, eso debía bastar, cogió a Harry y Ginny de la mano y todo se volvió negro.


¿Gusta? Espero que si, ahora mismo bajo el continue, jejeje.