Holaaaa a todos!!!!!, (las autoras sacan una bandera blanca suplicando que haya actos hostiles),lamentamos haberlas dejado tanto tiempo sin actualizar pero es que se hecho a perder mi computadora(yui: lo suplico no me maten uu, Frine: ¬-¬, yo estuve a punto, yui: O.o, Frine: u¬-¬), y por este pequeño inconveniente no pudimos subir a tiempo los capitulos, pero no se preocupen en todo este tiempo hemos estado escribiendo los proximos capitulos y les prometemos que los subiremos lo mas rápido que podamos, muchisimas gracias por entender. yui & Frine
HP al estilo troyano
cap 11. La Huida
-Pe... pero, estás seguro de esto Harry?- preguntó Draco, rogando que el chico de ojos verdes no se arrepintiera- yo te amo, quiero que estés seguro.
-Si, totalmente...te amo Draco Malfoy - dijo decidido el moreno- me iré contigo.
-Pero hace apenas un rato dijiste que no te irías conmigo –dijo el rubio apartándose un poco de Harry pero sin dejar de mirar esos bellos ojos esmeraldas- no es que me queje, pero me gustaría saber a que se debe el cambio de opinión
-Simplemente me di cuenta que dejarte ir sería la mayor estupidez de mi vida, escucha, acabo de ver a Oliver con Justin mientras se besaban, al parecer –dijo con una pequeña sonrisa- hace mucho que se entienden a mis espaldas.
-Entonces te vas conmigo por despecho? –cuestionó el rubio algo molesto.
-Sabes que no es así, simplemente me ayudó a darme cuenta que cualquier camino que elija en donde no estés, me hará sumamente infeliz, a nadie he amado como a ti Draco y a nadie amaré tan intensamente como te amo –Harry se acercó al rubio y le acarició el rostro- eres mi vida entera, si te dejara ir moriría lentamente cada día que no estés conmigo, cada día que no me pierda en tus bellos ojos, cada día que tus manos no recorran mi cuerpo, así como yo el tuyo, cada día que no pueda probar el sabor de tus labios –Draco se inclinó y volvió a atrapar los labios de su chico.
-Te amo Harry... mucho
-También te amo Dragón
-Mañana mismo nos iremos, seremos muy felices amor
-Con el hecho de estar contigo ya lo soy –Se volvieron a fundir en un suave beso y poco a poco se acercaron a la enorme, suave y confortable cama, no sin antes, claro, asegurar la puerta, cayeron abrazados y Draco se acomodó encima del moreno, el beso antes tierno, ahora irradiaba verdadera pasión, anhelo por ser uno con el ser amado.
Draco, movió lentamente sus labios de la boca del moreno a su delicioso cuello, el punto débil de su chico, Harry jadeó en repuesta al placer que estaba experimentando, mientras las hábiles manos del rubio recorrían su cuerpo sobre la ropa, pero cuando esta se hizo muy estorbosa se llegó a la decisión de eliminarla. Primero Draco. Tomó la camisa de Harry y la fue deslizando de su cuerpo poco a poco, saboreando cada parte descubierta, lentamente, una vez retirada, el rubio saboreó a placer todo el fuerte pecho moreno, dando especial atención a los pezones del chico, haciendo que éste se arqueara al contacto soltando varios gemidos y pidiendo más. Luego, los pantalones, dejando al descubierto un bóxer negro en el que se podía ver claramente la excitación del Gryffindoriano, a la cuál, Draco dedicó unos segundos sobre la ropa para luego eliminar completamente cualquier cosa que le impidiera admirar en su esplendor el bello cuerpo desnudo de su amado chico.
Harry, una vez libre de ropas, se hincó en la cama y empezó a besar a Draco en el cuello mientras le quitaba la camisa, una vez eliminada y aún los dos hincados, empezó a saborear el pecho desnudo de su amante, centímetro a centímetro con exasperante lentitud. Luego lo recostó sobre su espalda y le sacó los pantalones, acercó lentamente su mano derecha y acarició la zona más sensible de su rubio y la que más necesita atención en ese momento, la punta de los dedos de Harry rozándolo era lo único que sentía el rubio. Harry eliminó los bóxers bastante graciosos que llevaba Draco (Frine: ya saben jeje los de caritas o) y su excitación aumento al ver lo descubierto. Lentamente fue acercando su rostro a aquella parte del rubio que gritaba por su atención y lo tomó en su boca, produciendo un sonoro gemido del chico bajo de él.
-Ohhh!! Harry... ah...más... mmm... más fuerte –Draco tenía sus manos sobre la morena cabeza y dirigía el candente ritmo de los movimientos, Harry disfrutaba el sabor del rubio con su lengua, tratando de no dejar ninguna parte desatendida mientras que con sus manos complementaba el trabajo. Draco estaba a punto de venirse, así que jaló el rostro del moreno y volvió a besar sus suaves labios, luego lo empujó suavemente y volvió a recostarlo en la cama, una sexy sonrisa cubrió el rostro del Slytheriano y le devolvió el favor a su bello y apetecible chico. Bajo su rostro y mojó la zona con su saliva, luego dejó que su tibio aliento produciera un escalofrío en Harry debido al cambio de temperatura, el rubio solo pudo sonreír.
-Ahhh!! Draco, sigue, no... ohh!... no pares –Suplicaba el moreno. El rubio, como era muy obediente siguió al pie de la letra las indicaciones de su chico, tomándolo por completo en su boca –Dioses!!! Draco...ohhh!! –después de unos segundos, el rubio vio que Harry pronto llegaría al clímax y decidió frenar las acciones un poco, aún faltaba lo mejor...
-Harry... –dijo el rubio entre jadeos- quiero estar dentro de ti... amor... estás listo?
-Si Draco... oh!... - el rubio había rozado su parte más sensible- tómame... no aguanto más –Harry jaló al rubio y lo beso ardientemente en los labios. El rubio terminó el beso y con sus manos separó las piernas de Harry mientras acariciaba y besaba sus muslos. Subió su mano a la boca de Harry y éste la tomó con desesperación lamiendo y succionando cada dedo, una vez que estuvieron bien humedecidos, el rubio los alejó de la boca de Harry para gran disgusto del moreno, los bajó hasta la entrada virginal y aventuró uno de sus dedos al interior, Harry soltó un gemido de placer mezclado con algo de dolor mientras su cuerpo se arqueaba involuntariamente
-Estás bien?
-Si, por favor... Draco... continúa –Dicho esto un segundo dedo siguió al primero y luego un tercero, Harry aún sentía algo de dolor, pero la excitación que sentía al ser tomado por el hombre que amaba lo apaciguaba. Los dedos de Draco fueron retirados y Harry pudo sentir como Draco se colocaba entre sus piernas listo para penetrarlo.
-Harry... –dijo el rubio entre jadeos- te amo
-También te amo, Dragón –Una sonrisa del Slytheriano cargada de amor y se fue introduciendo lentamente, para no hacer daño, en el cuerpo moreno- Ahhhhhh!!! Draco... –Harry gritaba de placer y dolor al sentir a Draco entrar en él, poco a poco hasta que estuvo completamente adentro.
-Ohhhhhh!!! Harry!!... me sientes... puedes sentirme dentro de ti...
-Si... yo... te siento... ahhh!! –Draco empezó a mover sus caderas, primero suave para que su chico se acostumbrara, pero el ritmo fue aumentando, mientras con una mano masajeaba el miembro del moreno, Harry empezó a seguir el ritmo impuesto por su amante, el dolor, en el pasado, ahora, solo infinito placer, las embestidas eran cada vez más fuertes, más deliciosas, ambos chicos se sentían en la gloria, Draco abrió los ojos que había mantenido cerrados debido al enorme placer que experimentaba y se topó con la visión más erótica de su vida, Harry tenía los ojos fuertemente apretados y la boca semiabierta, sus labios rojos y sus mejillas ardiendo por la pasión.
-Harry... amor... abre los ojos... –El moreno obedeció la orden y abrió sus bellos ojos esmeraldas encontrándose con la mirada plateada de su chico, fundieron sus miradas al igual que sus cuerpos, y así, mirándose a los ojos, el rubio dio una última embestida, más fuerte que las anteriores y ambos chicos se vinieron, no pudiendo evitar cerrar los ojos ante la fuerza del orgasmo que invadió sus jóvenes cuerpos y soltar fuertes gemidos llenos de pasión.
Aún jadeando, Draco se inclinó y beso los labios de Harry, para luego salir suavemente de él, cayendo exhausto entre los brazos de su chico que lo abrazó recostándolo en su pecho y acariciando sus rubios cabellos.
-Te amo mi pequeño príncipe.
-También te amo Dragón.
-Aunque lo de pequeño ¬¬ no se aplica mucho a tu... –dijo el rubio con sonrisa maliciosa levantando un poco su rostro del pecho de su chico y mirándolo a los ojos pero fue interrumpido por Harry.
-Cállate Draco!! –Harry se sonrojó furiosamente y Draco jaló el moreno rostro para volver a saborear sus deliciosos labios.
Y yendo un poco atrás en el tiempo, encontramos a cierto guerrero con cierto príncipe dirigiéndose a la habitación de este último.
-Vaya!! –dijo un cansado Sirius- por fin llegamos
-Y lo hubiéramos hecho antes si no HUBIERAS INSISTIDO EN IR POR LA IZQUIERDA EN ESA BIFURCACI"N!!!!!!! –gritó un desesperado Remus.
-Oh, ya dije que lo siento –se disculpó por enésima vez el moreno con la famosa carita de perro pateado.
-Quita esa maldita cara Sirius, no me convencerás –respondió Remus cruzando sus brazos y plantándose decidido.
-....
-Quítala ya!!!
-....
-Oh bien, te perdono –suspiró el castaño resignado
-Si!!! No te puedes resistir a tan atractivo chico Jajaja
-No me obligues a retractarme y entremos de una vez –Remus abrió la puerta y se perdió en la habitación, claro que no literalmente (Frine: conozco a cierto chico a quien si se aplica lo literal ¬¬ jeje, yui: por que lo dices ¬¬, a poco se pierde tanto ). Sirius entró tras de él y logró tomarlo de un brazo, jalarlo y unir nuevamente sus labios.
-Remus, que labios tan deliciosos tienes... mmm... –El Slytheriano delineaba los labios del chico castaño con su lengua.
-Sirius... ah... ahora no, aún estoy cansado por lo de ayer –dijo sonrojándose un poco.
-Jaja es cierto, además no hemos venido para eso –dijo Sirius despegando sus labios- aunque si quisieras ¬¬ -una pícara sonrisa cubrió el bello rostro.
-Sirius!!
-Bien, de acuerdo.
-A qué me has traído? –preguntó Remus con curiosidad.
-Siéntate –Remus se sentó en la cama mientras Sirius se movía hacia su armario y sacaba una pequeña cajita verde, luego se acercó a Remus y se sentó a su lado –Remus, mañana zarpo hacia Slytherin y debido a mis múltiples compromisos tal vez pase mucho tiempo antes de que podamos volver a vernos.
-Mañana? Es muy pronto, por qué no me dijiste antes? –sus bellos ojos dorados se habían llenado con la tristeza de la separación.
-Se supone que nos iríamos hasta mañana en la tarde pero mi padre nos aviso hace un momento que lo había adelantado y nos iríamos hoy, sin embargo no podía irme así tan de repente y dejarte –Sirius acariciaba tiernamente el rostro de su chico- por lo que le pedí que Draco y yo nos quedáramos hasta mañana al amanecer, luego debemos partir.
-Pero...
-Es por eso- dijo interrumpiendo suavemente a su chico- que he decidido darte lo más valioso para mí, un recuerdo que espero siempre lleves contigo –Sirius abrió la cajita y Remus quedó sorprendido por su contenido. Dentro había una pequeña cadena de oro blanco con un pequeño dije en forma de serpiente enroscada, sus ojos eran de pequeñas esmeraldas. Sirius lo sacó de la cajita y se lo colocó a Remus en el cuello mientras le decía... – Esto me lo dieron el día en que nací, fue un regalo de mi querido pueblo, siempre lo he llevado conmigo, pero ahora, quiero que tú lo lleves como recuerdo de lo mucho que te amo.
-Es precioso Paddy pero no puedo aceptarlo, es muy valioso para ti
-Pero no más que tú, amor, solo te pido un favor, nunca te lo quites mientras tu amor por mí exista, el día que desaparezca de tu cuello sabré que te he perdido, sabré que ya no me amas más –Remus besó tiernamente a su chico en señal de agradecimiento.
-Siempre estará conmigo, puedes estar seguro de ello, nunca me lo quitaré.
-Te amo Remus.
-Y yo a ti Sirius.
La noche había llegado y una elegante cena se llevaba a cabo en el comedor, los reyes de Slytherin habían partido sin contratiempos por la tarde, pero como sus retoños estaban muy ejem... ocupados, no pudieron ir a despedirlos. En fin, después de la pequeña reunión de Sirius y Remus en su habitación y de una que otra caricia se arreglaron y se dirigieron prestos a la cena que James había mandado preparar para despedir a los jóvenes Príncipes, puesto que sus padres se fueron muy rápido y no pudo despedirlos de manera apropiada, ambos chicos, Sirius y Remus, ya se encontraban en el comedor sentados juntos y degustando la deliciosa comida.
Por otro lado, después del pasional encuentro de Harry y Draco, el primero tuvo que ir a su habitación a prepararse para la cena y de paso lo que se llevaría cuando zarpara con su chico al amanecer, había dejado todo listo y guardado por si alguien entraba a su habitación, era muy poco lo que se llevaba, solo lo indispensable. Ahí fue donde Oliver fue a buscarlo cínicamente preocupado, a criterio del moreno, para escoltarlo a la cena, ya que no lo había visto en todo el día y lo extrañaba mucho, cabe decir que Harry casi le rompe la cara por su descaro, pero como todo un futuro gobernante, aunque ahora dudaba un poco llegar a serlo debido a su próxima huída, mantuvo la calma y la elegancia, tomando a Oliver del brazo que le ofrecía y dejándose guiar hasta el comedor. Draco por su parte, dejó ir renuente al moreno, pero una vez que hubo partido terminó de preparar sus cosas, se arregló espectacularmente y se dirigió puntual a la cena en su honor.
En fin, una vez reunidos todos en el espectacularmente decorado comedor, y con todos me refiero a los reyes, los cuatro príncipes y el fiero guerrero, como Justin era un don nadie no fue invitado jeje, ambientado por sii!!! Un arpa, mientras platicaban animadamente.
-Muchas gracias por sus atenciones, mi hermano Draco yo estuvimos muy a gusto.
-De nada muchacho, lamento que tu padre y yo no pudiéramos llegar a un acuerdo
-Yo también señor Potter, yo también –dijo Sirius mirando de reojo al chico a su lado.
-Y tu cómo la pasaste Draco? –preguntó Lily al rubio mientras éste se encontraba perdido observando al ojiverde, por lo que la pregunta lo sobresaltó, al igual que una discreta pero dolorosa patada de Sirius, quien se encontraba a su lado, todo ejecutado por debajo de la mesa.
-Auch, eh... yo, muy bien gracias, pude observar las bellezas de su reino –dijo el rubio mirando a Harry pícara pero muy discretamente lo que sonrojó al chico, quien se encontraba sentado al lado de Oliver y junto a su madre.
-Me alegro mucho –dijo Lily- me ha encantado tener a unos chicos tan apuestos y educados en mi castillo, espero que todo salga bien y puedan visitarnos nuevamente, he visto que tu Sirius has hecho una buena amistad con Remus y Draco se ha entendido muy bien con mi hijo, no es así Harry? –Oliver frunció el ceño ante este comentario.
-Si madre, nos hemos entendido bien –respondió el Gryffindoriano bajando un poco los ojos.
-Y que lo diga suegrita, pensó el rubio dándole una mirada a Harry que no le gustó nada a Oliver.
-Bien –dijo James levantándose de la mesa y tomando su copa –quiero proponer un brindis por Sirius y Draco y desearles un buen viaje ya que me temo que no podremos verlos mañana al partir tan temprano, por lo que esta es la despedida, así que SALUD!!
-SALUD!! –respondieron todos levantando sus copas y bebiendo el contenido.
Una vez que terminaron de degustar la deliciosa cena, los príncipes Slytherianos se despidieron de sus anfitriones no sin dejar de agradecer su hospitalidad, dirigiéndose cada uno a sus habitaciones, el primero en partir fue Sirius y detrás de él un Remus que se decía muy cansado. Luego Draco, que antes de salir del comedor y aprovechando que Oliver discutía con James y Lily sobre la boda se acercó a Harry y le dijo...
-Te espero en mi habitación con tus cosas, tenemos que prepararlo todo –conectó su mirada con la verde y pudo notar cierta angustia –aún quieres hacerlo Harry? No voy a obligarte a que vengas conmigo
-No te preocupes, ahí estaré, te amo, me iré contigo –sonrió el ojiverde
-Bien, no sabes cuanto me alegra escuchar eso –rozó suavemente la mano de Harry evitando ser vistos por los otros comensales y se retiró. Harry suspiró y se acercó a donde se encontraban sus padres y su prometido.
-Oh amor –dijo Oliver- llegaste, qué tanto hablabas con "ese" chico?
-Él se despedía de m
-En serio? –dijo el castaño y Harry pudo observar que le dirigía una mirada peligrosa.
-Vamos Oliver –interrumpió James, al girarse el castaño hacia su suegro, aquella mirada peligrosa había sido substituida por una de fingida vergüenza –no te pongas celoso, solo trabaron una muy buena amistad, Draco es un buen chico.
-Lo siento James, es que quiero tanto a Harry que temo perderlo
-Jajaja –rió divertido el apuesto rey- que muchachos estos, bien a dormir, mañana empezaremos con los preparativos del castillo para la gran boda del domingo y tenemos que estar descansados.
-Si amor- respondió Lily- a dormir, estoy muy cansada. Buenas noches Oliver, que descanses
-Buenas noches Lily, James, tu también descansa
-Gracias chico.
-Harry te veo mañana –se acercó al moreno y depositó un tímido (solo en apariencia) beso en sus labios, luego se retiró.
-Harry, descansa amor –dijo Lily y le dio un beso en la mejilla a su hijo, sorprendiéndose cuando este la abrazó con un gran amor apretándola fuerte contra su pecho pero sin lastimarla –te pasa algo Harry?
-No madre, solo... descansa, te quiero mucho mamá –le respondió el chico mirando los bellos ojos verdes de su madre.
-También te quiero Harry, buenas noches –le dio otro beso al que aún consideraba su bebé –te veo en la habitación James –y abandonó el comedor.
-Sucede algo Harry? –le cuestionó su padre.
-No, por qué lo preguntas? –dijo el moreno algo nervioso.
-Tus ojos me dicen que algo te angustia, es acaso la boda?
-No, yo estoy bien – se obligó a sonreír – no te preocupes.
-Bien, eso me tranquiliza –se acercó y le dio un beso a su hijo –descansa, te veré por la mañana- Harry, al igual que con su madre, lo abrazó y le respondió el beso –cálmate hijo, pareciera que no me vas a volver a ver- le dijo el rey sonriente.
-Lo siento padre –Harry se ruborizó- tu también descansa.
-Hay hijo, ya quisiera pero me imagino que tu madre se pondrá a hablar de todos los preparativos u.uU en fin, hasta mañana –El príncipe sonrió ante el comentario y la cara que había puesto su padre, siempre se habían llevado muy bien.
-Hasta mañana –vio como su padre abandonaba la habitación, miró por última vez el comedor en el que había tomado sus alimentos cada mañana de su vida, suspiró y se dirigió a su habitación para tomar sus cosas e ir con Draco.
Miraba con detenimiento cada pasillo por el que pasaba, si pudieran hablar contarían muchas historias de la feliz vida que había llevado en su castillo, en su hogar, como cuando su padre solía jugar con él y le enseñaba a como ser un príncipe, más que eso, a como ser una buen persona, el como su madre lo cuidaba cuando se enfermaba o se lastimaba en sus entrenamientos, sus suaves caricias llenas de infinito amor, recordaba el día que llegó Remus para dirigir el ejército de Gryffindor, Harry apenas tenía 12 años, estaba convirtiéndose en un hombre, Remus se convirtió inmediatamente en su mejor amigo, tal como el guerrero lo había dicho, se convirtió en su hermano, lo cuidaba, lo protegía, le ensañaba e incluso encubría sus travesuras, se entristeció aún más al recordar su charla con Remus.
-Remus, lamento romper la promesa que te hice, pero... preferiría la muerte a separarme de él, de verdad hermano, perdóname, pensaba con dolor el moreno, sé que lo comprenderás.
Llegó a su habitación y entró, sacó sus cosas que ya tenía listas y no pudo evitar soltar las lagrimas que había tratado de contener, al pensar que tal vez, esa era la última vez que estaba en su cuarto, analizó todo con la mirada, cada rincón, cada objeto que dejaba y que encerraban innumerables recuerdos, y con una enorme fuerza de voluntad tomó sus cosas y abandonó su habitación.
-Remus, esta es la última noche que pasamos juntos –dijo Sirius suavemente, se encontraba en su habitación recostado en la cama con el castaño entre sus brazos- te voy a extrañar mucho.
-Yo también Paddy, me harás mucha falta, pero sé que nos volveremos a ver, y eso es lo que me mantendrá vivo.
-Y a mí... –se besaron suavemente- trataré de comunicarme contigo muy pronto, espera mi carta.
-Lo haré, no te preocupes –y así, abrazados, se durmieron, disfrutando del calor del compañero amado hasta que el cruel amanecer llegara a separarlos.
Draco escuchó como al puerta se su habitación se abría y levantó la vista de la maleta que estaba terminando de cerrar (bueno, baúl). Inmediatamente se dirigió hacia su chico y lo ayudó con su equipaje, lo asentó cerca de donde tenía sus cosas para que lo subieran al barco todo junto y volvió a fijar la vista en el bello moreno, notó sus ojos rojos, había estado llorando.
-Harry, amor –se acercó, cerró la puerta con seguro, tomó sus manos y lo sentó en la cama, luego lo imitó- no quiero que luego te arrepientas de esto, no quiero que te sientas obligado a irte conmigo, si en realidad no lo deseas solo dímelo, aunque me duela yo sabré comprender y respetaré tus deseos.
-Draco... sabes que lo que más deseo es estar siempre contigo y no pienso cambiar mi decisión, lo hice una vez porque era la equivocada, pero esta es la correcta, admito que es muy doloroso dejar todo, dejar mi vida, pero el saber que estaré contigo me hace feliz, estaremos siempre juntos y eso es lo único que ahora me importa.
-Oh Harry, desearía que todo fuera diferente, que no tuviéramos que escondernos, que todo fuera perfecto –el rubio acariciaba con enorme dulzura la tez morena.
-Para mí lo es, puesto que estoy contigo –respondió Harry con una dulce sonrisa, se besaron y se acostaron en la cama, Harry en los brazos de Draco, protegiéndolo, amándolo, pronto se quedaron dormidos, soñando con el maravillosos futuro juntos que les esperaba.
La madrugada llegó implacable, los primeros rayos del sol inundaron la habitación, Draco despertó sobresaltado, ya era tarde, si no salían antes que todos despertaran, no podrían cumplir su cometido, escapar juntos. Contempló al chico que dormía apaciblemente entre sus brazos, era tan bello, tan perfecto, acarició su rostro suavemente.
-Harry, amor, despierta
-Mmmm... –Harry se revolvió entre sus brazos y abrió los ojos lentamente.
-Buenos días amor.
-Buenos días.
-Ya es hora, debemos apurarnos, escucha, deben venir por mis cosas de un momento a otro, tenemos que salir antes de que lleguen, luego abordaremos y nos quedaremos en mi camarote, estás de acuerdo?
-Si, lo que decidas está bien para mí, confío plenamente en ti Draco –el rubio sonrió feliz y acercó su rostro al moreno, besándolo suavemente
Minutos más tarde salían rápido de la habitación, Harry iba cubierto de pies a cabeza con una túnica negra, iban muy cuidadosos tratando de no encontrar a nadie por el camino, tuvieron suerte hasta que salieron del castillo y Harry se atoró con una maldita rama, no podía soltarse y no podía quitarse la túnica ya que quedaría al descubierto, el rubio sacó su espada y cortó de un tajó el inoportuno obstáculo, tomó a Harry de un brazo y lo jaló hacia el muelle que los llevaría al barco llevando su espada desenvainada en la otra mano, iban tan aprisa que la capucha de la túnica resbaló dejando al descubierto el rostro moreno quien rápidamente la devolvió a su lugar. Lograron llegar al barco y una vez dentro del camarote del rubio respiraron aliviados, solo era cuestión de esperar a que terminaran de cargar y que llegara Sirius para partir hacia Slytherin.
Sirius despertó por el rayo de sol que caía directamente en su cara, ya era el momento de partir, sintió los brazos de Remus rodeando su cintura, se veía tan bello, le dio un beso y los apartó suavemente para evitar despertarlo. Se levantó y se dirigió al baño, unos minutos después salía completamente listo para su largo viaje, se acercó a la cama donde descansaba su amor y volvió a depositar un suave beso en sus labios.
-Adiós Remus, pronto estaremos juntos de nuevo- dijo melancólico. Sus cosas ya habían sido embarcadas desde la noche pasada, solo faltaban las de Draco que ya deberían estar subiendo. Dio un último vistazo a Remus y cerró la puerta tras de sí.
El primogénito Slytheriano se encaminó hasta el muelle y pudo ver a su hermano esperándolo ansiosamente en la cubierta del barco.
-Vaya!! Hoy si madrugaste Dragón
-Si, bueno, solo quiero llegar a casa –mintió el rubio
-Si, ya extraño mi habitación y sobre todo el viñedo, ya está todo listo?
-Si, solo esperamos por ti –respondió el rubio.
-Pues ya estoy aquí, Vámonos!! –Sirius dio la orden y el ancla fue levantada, iniciando el largo trayecto hasta Slytherin –Lo superarás Draco, haces lo correcto- dijo abrazando al rubio, obviamente refiriéndose a Harry.
Remus despertó buscando el calor de su chico, pero ya no estaba, había partido, suspiró, se vistió y se dirigió a su habitación donde tomaría una ducha y se cambiaría de ropa, tenía que buscar a Harry, debía estar destrozado por la partida del Slytheriano y tenía que darle su apoyo, era un momento muy difícil. Una vez arreglado, se dirigió a la alcoba del joven Príncipe, tocó varias veces, pero al no recibir respuesta entró, buscó al chico por toda la habitación pero no lo encontró, supuso que ya había bajado a desayunar así que se dirigió al comedor. Al llegar, encontró a James y a Lily conversando animadamente con Oliver.
-Buenos días –saludó Remus.
-Buenos días Remus –devolvió el saludo James- pasa siéntate, hoy tenemos un desayuno exquisito- Oliver no respondió, lo único por lo que aceptaba comer en la misma mesa que un plebeyo era por su poder para vencer en las batallas, era conveniente tenerlo de su lado.
-Si gracias, pero no han visto a Harry? Pase a su habitación y no lo encontré, pensé que estaría aquí.
-No, no lo hemos visto hoy –contestó Lily –pero no te preocupes debe andar por ahí.
-Si, claro –dijo pensativo- de todos modos mandaré a buscarlo- hizo una seña y un sirviente se acercó rápidamente, le dio órdenes que lo buscaran por todo el castillo hasta encontrarlo, tenía un mal presentimiento. Cuando el sirviente se fue, se sentó a desayunar, tal vez todo estaba bien, solo tal vez.
-Sirius?- Draco se acercó a su hermano que se encontraba en la popa del barco contemplando el esplendoroso mar.
-Draco!! Por qué te has pasado encerrado en tu camarote con este maravilloso día.
-Yo...
-Definitivamente este barco que compré es sorprendentemente rápido, apenas llevamos unas horas viajando y ya estamos bastante lejos de Gryffindor, já, y papá decía que no era buena inversión, pero yo sabía que...
-Sirius –Draco lo interrumpi
-Sí?
-Hay algo que quiero mostrarte en mi camarote
-Si? Y qué es?
-Ven, te lo mostraré –Draco tomó a su hermano del brazo y lo jaló hacia su camarote. Al llegar, abrió la puerta y entró, seguido de cerca de su hermano. Cuál va siendo la sorpresa del mayor al encontrarse con una persona parada junto a la ventada cubierta con una túnica negra –Puedes quitarte la túnica –dijo el rubio suavemente. La figura obedeció y dejó caer la túnica por su cuerpo revelando la identidad que ocultaba. Sirius enseguida reconoció esos ojos verdes inconfundibles llenos de temor.
-Harry?!! –Sirius no lo podía creer, Harry Potter estaba ahí, en su barco, definitivamente esto traería muchos problemas.
-Señor Remus, no hemos podido encontrar al Príncipe Harry, hemos buscado por todo el castillo y no hay rastro de él –le murmuró un sirviente al fiero guerrero.
-Estás seguro? Buscaron bien? –dijo también en voz baja el chico castaño.
-Si señor, el Príncipe no está.
-Pasa algo Remus? –preguntó James.
-No, no pasa nada, un recado de mis Mirmidones, si me disculpan -dijo levantándose y haciendo una reverencia- debo atender unos asuntos, con permiso.
-Adelante, no te olvides que nos vemos en el almuerzo –dijo una sonriente Lily.
-Por supuesto su alteza, hasta entonces –Remus salió disparado del comedor hacia el exterior del castillo donde se habían reunido muchos sirvientes que habían estado buscando a Harry al igual que los guardias reales. –No puede ser que nadie pueda encontrar a Harry!! –gritó apenas llegó.
-Señor!!! – un hombre venía corriendo desde el puerto –creo que lo he visto!!!
-Dónde? Responde inmediatamente!!! –Remus estaba muy alterado.
-En el puerto, lo vi subir al barco de los Príncipes de Slytherin, pensé por un momento que no era, que me había confundido, pero después de escuchar que estaba desaparecido supe que si era él.
-Estúpido!!! Por qué no avisaste de inmediato!!
-Yo... lo...lo siento... no
-Dime detalladamente que fue lo que viste –dijo Remus tratando de tranquilizarse, debía saber si el chico se había ido por convicción propia pero... eso era imposible!! Le dio su palabra que se quedaría, que dejaría ir a Draco!!!
-Estaba acompañado por el más joven de los Príncipes, el rubio, el Príncipe Harry llevaba una túnica negra que lo cubría completamente, pero el Slytheriano lo jalaba de un brazo y... si, tenía la espada desenvainada!! Con un brazo llevaba al Príncipe Harry y en el otro su espada, iban muy a prisa!!
-Maldito Draco!!! –pensó- Todos, regresen a sus labores- lo sirvientes lo miraban con miedo, Remus solía ser muy amable, pero cuando estaba enojado era muy peligroso- que no escucharon? Fuera!!! –todos desaparecieron rápidamente. Ese maldito niño se llevó a Harry a la fuerza!!! Pagará con su vida, lo juro!!! Pensó colérico el de usualmente tranquila mirada. Se encaminó al castillo, tenía que hablar con James y enterarlo de la situación, pero no pensaba decirle del romance de Harry con la asquerosa serpiente, tenía que proteger al moreno ante todo. Se detuvo y no pudo evitar golpear con su puño la pared en varias ocasiones, no encontraba otra forma de externar su furia.
-Maldito chico!! -pensaba- cómo pudiste llevarte a Harry!!!
-Remus? Qué sucede? –Cedric estaba parado a la entrada del pasillo mirando con miedo a su querido primo, Remus se detuvo y se giró hacia el chico.
-Prepárate Cedric y avisa a los Mirmidones, habrá guerra –sentenció el castaño, se dio la vuelta y desapareció en busca del Rey de Gryffindor.
Esperamos que este capitulo haya sido de su agrado, y de nueva cuenta les pedimos una sincera disculpa por hacerlas esperar. Antes de irnos queremos darles las gracias a ArwencitaGadriel, Michiruthe Sea Queen, Futhark, Murtilla, Galy-chan, o0clomalfoy0o, Amaly Malfoy, Agus y Moony, por los reviews que nos mandaron brindandonos su apoyo y tambien a todas aquellas que nos siguen, gracias en serio nos animaron a seguir adelante, muchas gracias.
atte yui & Frine
