Tu mirada en mí
Capitulo 13:
El dia en que te volvi a verMiraba hacia la ventana sumergida en sus pensamientos, hacia unos minutos la enfermera habia ido a ver su estado, debia estar alegre porque pronto le darian el alta y el accidente no habia resultado ser tan grave, pero estaba mas preocupada por la conversación que habia tenido temprano con Inuyasha, ¿Cómo les explicaria a todos la causa de su accidente? solo él sabia la verdadera razón y no queria que nadie mas se enterara. Con tanto tiempo para pensar llegó a la conclusion lógica de que Inuyasha habia desaparecido seguramente por alguna maniobra de aquel hombre. Naraku, hasta el mismo nombre le parecia intimidante y lamentaba que Inuyasha no ubiera confiado en ella cuando eran novios, ella lo Habria entendido, como no, si lo amaba con todo su corazón y aun sentia la angustia que tuvo cuando él simplemente desaparecio. Necesitaba tanto saber cuan involucrado estaba Inuyasha con Naraku, cuanto sabia Naraku sobre las vidas de ellos, incluso… cuantas personas más estaban en la mano de aquel villano.
-Inuyasha –susurró, aun decir su nombre le daba fuerzas ¿Cuándo se arreglara todo esto?
-Kagome? –giro su cabeza saliendo de sus pensamientos, conocia muy bien a la persona que la llamaba.
-Mamá! –exclamo mientras la mujer se acercaba y se sentaba en la cama, se abrazon delicadamente pero ambas muy alegres.
-En cuanto me dijeron que habias despertado me alivie pequeña, no sabes lo preocupada que estaba por ti.
-pero mamá viajaste de tan lejos
-como no si eres mi hija y desde hace meses que no hibas a casa, el abuelo y tu hermano te Mandan muchos saludos pero lamentablemente no van a poder venir
-Lo siento mucho, estaba tan ocupada que no pude ir
-no te preocupes de eso hija, lo bueno es que estas bien
-y como estan en casa?
-muy bien, las cosas en el templo estan tranquilas y souta esta concentrado en sus estudios.
-me alegro –Kagome se quedó en silencio por unos segundos sabia que algun dia tendria que contarle todo a su madre pero por ahora no queria preocuparla de mas.
-Kagome hija… puedo preguntarte algo? –Kagome asintio con la cabeza temiendo de que la pregunta fuera acerca del accidente.
-Porqué no me dijiste que Inuyasha habia vuelto? –Miro fijamente a los ojos de su madre, si ella no le habia contado que Inuyasha estaba nuevamente en su vida eso significaba que de seguro lo habia visto, la imagen de Kouga se le vino de inmediato a su mente.
-Porque… -comenzó a titubear, ya que muchas imagenes comenzaban a volver a su mente. –lo que pasa mamá es que todo fue muy confuso
-Pero si lo estuviste buscando por tanto tiempo hija como fue que volvio?
-hace un par de meses lo vi… y te juro mamá que aun no entiendo por qué desapareció.
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Revolvia tranquilamente el trago que tenia frente a ella, aun no le daba ni un solo sorbo es que estaba atenta a lo que Kouga, su novio le hablaba. Habia tratado de postergar la salida durante algunos dias pero la insistencia de su novio al fin la habia convencido. El motivo por el cual Kouga habia insitido tanto era porque queria presentarle a Kagome a su mejor amiga, en realidad Kouga estaba muy entusiasmado con la relacion que habian comenzado y tenia ganas de compartir todo su mundo con ella. Si alguien los mirara sin conocerlos creeria que serian la pareja perfecta, ambos apuestos, sonrientes, felices, pero el corazón tiene la capacidad de sentir muchas cosas y la mente puede guardar muchos recuerdos eso Kagome lo sabia muy bien.
Aunque se sentía tranquila y ya se acostumbraba de a poco a su nueva vida, a la nueva ciudad y al cariño de Kouga, habia un pero en su vida, en su interior habia un sentimiento que aun no se conformaba y la hacia anhelar cada noche con volver a ver aquellos ojos dorados, tan amados como habia amado al hombre poseedor de ellos, aun susurraba en vano su nombre teniendo la minima esperanza sintiendo aun que derramaria muchas lagrimas por la falta. Le repetian que luchara, que continuara con su vida simplemente que siguiera adelante, despues de todo los detectives no habian podido encontrarlo, la falta de datos habia dificultado la investigacion, hasta al parecer su apellido era incorrecto, y ella ni siquiera conocia a su familia, los años habian pasado y aun tenia sus ojos dorados marcados en su mente nunca podria olvidarlos y aunque habia sufrido por él, anhelaba que él estuviera bien y feliz.
Ahora que ya mi vida se encuentra normal,
Que tengo en casa quien suena con verme llegar,
Ahora puedo decir que me encuentro de pie
Ahora que me va muy bienBebió al fin el primer sorbo de su trago sacudiendo levemente su cabeza para evitar seguir recordando cosas que la dañaban, ahora estaba con Kouga y él era tan tierno que solo podia tratar de corresponder de la mejor forma sus sentimientos, le sonrio estaba tan emocionado por presentarle a su mejor amiga que ella solo podia apoyarlo. Luego de unos minutos Kouga miró a un lado y sonrio –que pasa? –le pregunto sonriendo.
-es ella, por ahi viene era verdad que vendría acompañada –Kagome se giro y Kouga se levanto de la silla, ella intento adivinar cual de todas las mujeres eran pero se volvio a girar para beber otro poco de su trago se sacudió un poco la ropa, siempre hacia eso cuando le hiban a presentar a alguien solo esperaba caerle bien a la mejor amiga de su novio.
Ahora que con el tiempo logre superar,
Aquel amor que por poco me llega a matar,
Ahora ya no hay mas dolor Ahora el fin vuelvo a ser yoDe pronto un sonido demasiado conocido se escuchó tras su espalda, sintió como se tensaba ante el timbre profundo de aquella voz tan anhelada, quiso girarse y mirar, pero parecía haber quedado detenida en algún momento de su vida. Pudo notar como Kouga hacía un gesto con la mano y la sonrisa que mostraba le indicaba que alguien se acercaba. Hasta que los tuvo ahí.
-Kagome, esta es Kikyo!- dijo Kouga con alegría una vez que se había puesto de pie, ella observó a la mujer que estaba junto a su novio, e intento mostrar un gesto agradable mientras que se incorporaba, pero el estomago se le recogió cuando desvió su Mirada y pudo observar al acompañante de la mejor amiga de Kouga.
Pero me acuerdo de tiY otra vez pierdo la calma
Pero me acuerdo de ti
Y se me desgarra el alma
-¡¡¡¡Dios santo, -quiso gritar, pero nada salió de su garganta, sin embargo las manos viajaron directo a su boca, y cayó sentada nuevamente, los ojos dorados que la observaban con curiosidad no parecían reconocerla y aquello le provocó nauseas, de inmediato notó como todo el mundo a su alrededor parecía querer brindarle ayuda
-Debe haberle sentado mal el licor‚ - escuchó a Kouga excusarla -ella no bebe con frecuencia.
-Reclínate en la silla -escuchó que le decía aquella voz tan preciada, tan extrañada y tan amada‚ lo miraba como encandilada por un foco demasiado luminoso sin escuchar ni estar atenta a lo que pasaba a su alrededor, sentia que sus piernas no la soportarian y que las lagrimas amenazaban con brotar a raudales.
Pero me acuerdo de ti
Y se borra mi sonrisa
Pero me acuerdo de ti
Y mi mundo se hace trizasNo supo como, se encontró en los brazos de Kouga que le susurraba palabras cariñosas, como siempre lo hacía y ya no quiso volver a abrir los ojos‚ -Por qué la había tratado como a una desconocida?... por que no se arrojó a sus brazos diciéndole lo mucho que la había extrañado?... como deseaba hacerlo ella‚ simplemente ¿por qué?
-Kagome quieres que te lleve a casa? –por fin escuchó con claridad una de las frases que Kouga le decia y aun con los ojos cerrados negó con la cabeza –no sera necesario ya estoy bien… -segura? –volvio a preguntar un preocupado Kouga aun con sus brazos alrededor de su cintura. –Sí, estoy segura… -dijo Kagome abriendo los ojos lentamente…
-querido puedes ir por un par de tragos para nosotros y algo de agua para Kagome? –Sintió otra vez su corazón oprimirse al escuchar a Kikyo, pero respiró profundamente y cuando sintió claramente como los pasos de él se alejaban se atrevió a separarse de Kouga.
-Hola Kikyo –se atrevio a saludar intentando sonreir lo mas natural posible y luego agregó. –disculpa lo que paso…
-No te preocupes –añadió la mujer sentandose al igual que Kouga y Kagome. –a cualquiera le puede pasar.
Kagome sonrió y tomo una de las manos de Kouga intentando protegerse de lo que sentía, respiró profundamente y sintió que su corazón se aceleraba cuando luego de unos minutos él regresaba a la mesa. Cuando el se sentó alzó su mano para ofrecerle el vaso de agua que le traia, Kagome se quedó inmovil estaba agena a todo lo que pasaba a su alrededor y fue Kouga quien finalmente le entregó el agua a ella.
-Bueno Kouga, él es Inuyasha… -dijo Kikyo sacando a Kagome de sus pensamientos, ya que por el pequeño incidente que ella habia tenido Kikyo no habia alcanzado a presentarlos formalmente.
-Mucho gusto. –exclamó Kouga sonriendo quien estaba ageno a todo lo que Kagome sentia, -ella es mi novia Kagome. –escuchó que Kouga le decia a Inuyasha, mientras que ella solo podia mirarlo, miraba sus ojos dorados que siempre habia recordado tan bien, lo miraba suplicante tratando de que él la reconociera, de que dijera que la conocia que habian sido novios hace un par de años, pero Inuyasha no decia nada.
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Tenia los ojos empapados por las lágrimas al experimentar nuevamente aquella angustia solo por recordar la noche en que lo habia vuelto a ver.
-Mamá. –exclamó ya con las lagrimas en sus mejillas, su madre la abrazó y ella comenzó a sollozar tratando de hablar explicando lo que sentía.
-es tan complicado mamá… después de todo lo que lo busqué… y el…. Apareció como si nada….
-tranquila hija.. –le susurraba tratando de calmarla acariciando su cabeza y atenta a lo que el llanto ahogado de kagome le decia
-es que no se que hacer… yo de verdad lo amo… pero ahora el esta con kikyo y kouga…
Kagome dejó que todas sus lagrimas salieran, haber recordado aquella noche la hacia sentir muy trizte y solo queria desahogarse estuvo llorando por algunos minutos eran muchas las lagrimas, tantas como el sufrimiento que sentia… no sabia como lograrian arreglarse las cosas.
-Kagome hija… -la nombró para que ella la mirara a los ojos, trato de limpiarle las lagrimas a su hija, y le sonrio de la manera con que siempre lograba darle tranquilidad.
-hija yo se que debe ser dificil… pero tambien se que eres una niña fuerte… y si Inuyasha volvio eso significa que hay una segunda oportunidad, nosotras provenimos de un templo y sabemos que Dios siempre actua por un proposito y que despues todo se va a volver muy claro, por eso trata de dejar de llorar si?
-las palabras de su madre le sonaron tan agradables y sabias que solo pudo sonreir y asentir con la cabeza, quizas su madre tenia la razón y ella podia sentir esperanza…
Continuará…..
Hola a todos los lectores de este fanfic! Al fin pude actualizar otra vez y aunque el capitulo no quedo tan largo a mi me gusto mucho, creo que esta claro que lo que Kagome recordo es como volvio a ver otra vez a Inuyasha, esta escena la tenia en mi cabeza desde que comenze a pensar en el fic ojala les haya gustado el capitulo tanto como a mi.
Ahora solo quiero agregar que este cap se lo dedico a mi amiga Anyara que me ayudo mucho en la falta que tenia de inspiracion:MUCHAS GRACIAS! Ojala te guste como quedo.
La cancion de Cristina Aguilera lo acompaña bien, solo espero sus comentarios, ojala les haya gustado saben que tambien les agradesco a todos los que me han escrito algun review!
Cuidense mucho
Tratare de continuar pronto
Porfiss algun review!
Atte:
Isis
