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Hola queridos lectores

Les dejo un nuevo capitulo que espero les guste, como habia comentado en alguno de mis fics, sufri un pequeño accidente por eso me tarde un poco en subir un nuevo capitulo

Pero aqui estoy jejjeje

Nos vemos abajo disfrutenlo :)

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CAPITULO 40 LUNA RESPLANDECIENTE


ANNIE BRITTER SE QUIEBRA


Las promesas son votos de fe que se dan a una persona, dependiendo de uno mismo si cumplir o no cumplir, ya que hay veces que no se tiene conciencia aun de lo que se promete o lo que se pide en su momento.

Las promesas no son inquebrantables siempre y cuando sean promesas ingenuas puras y sinceras, inocentes o hechas en un momento de debilidad, en alguna persona debe decidir o no hacerlas valer.

Promesas son importantes pero no son indispensables…

Promesas y más promesas ¿Quién decide la importancia de estas? ¿Qué son promesas? ¿Quién decide que es la promesa?

Tan pureza como la luna y resplandeciente como la persona quien la hace…

S.M.


Annie Britter estaba en el suelo y un pequeño charco de sangre estaba bajo su cuerpo, Candy inmediatamente quiso ir pero antes de que ella pudiera llegar, llegaron Albert, Terrence y los Grandchester quienes comenzaron a llamar a la servidumbre para solicitar ayuda.

-¿Annie?

La pelinegra no respondió al llamado de ninguno de quienes le llamaban.

-Llamen al doctor Laura –Solicito Eleonor

La mucama inmediatamente salió corriendo para ir por el médico.

El pánico comenzó a invadir el cuerpo de Candy

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Candy caminaba de un lado a otro por su alcoba, Annie había sido llevada al hospital del pueblo, esperando que de verdad no hubiera pasado nada pero sabía que no era así, en su corazón algo le indicaba que no era así, no quería ser pesimista pero de verdad no podía dejar de serlo porque en su corazón algo le indicaba que su hermana o quien había sido su hermana, amiga y compañera de vida, estaba mal.

Su Ami-enemiga no estaba bien y ella lo sabía.

Sabía bien que ella le había prometido algo en su momento, una promesa de niños, aquella misma que Annie ocupo para que se alejara de Anthony, pero ahora…ahora no debía ser así, o al menos había decidido que no fuera así, porque deseaba con todo su corazón poder defender su amor contra todos y contra quien fuera…incluso Annie.

¿Por qué habían llegado a esto?

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Albert miraba con molestia a Anthony quien había tenido que permanecer en la mansión de los Grandchester, por órdenes de la señora Elroy, quien había llegado unos minutos después de la pelinegra.

Archie se había ido al hospital con ella y con el duque de Grandchester, ya habían avisado a los Britter que seguramente tendrían que llegar en menos de dos horas, al menos eso esperaban.

La verdad es que no le guardaba ningún rencor a su sobrino, desde niños había querido que Anthony fuera unido muy unido a él, porque al final era el hijo de su hermana, hijo de la mujer que estuvo siempre con él, esa hermana que fue más que eso, una madre y amiga para él.

Pero entonces apareció Terrence Grandchester, siendo sincero…si le guardaba algo de rencor a su sobrino por ello, más que eso, era celos, envidia y molestia porque el era su tío, y Anthony debía de estar más apegado a él, no a un desconocido.

Pero nunca fue así. No era una enemistad la relación que tenían, era solo una relación normal de familia pero….él hubiera querido algo más.

Pero ahora…

Ahora…

No permitiría que Candy estuviera con él, no lo merecía.

Pero sabía que Anthony no se daría por vencido tampoco, su mirada se lo decía.

Pero no importaba, él tampoco lo haría.

-Quita esa sonrisa –Murmuro Terrence quien se había percatado de todo

-No me molestes –Susurro el rubio molesto

-Él no está solo te lo repito

-Lo sé pero yo tampoco –Sonrió –Tengo el apoyo de mi tía Elroy ¿Lo olvidas?

-Deberías apoyar al único hijo de tu hermana ¿No crees? Creo que eso hubiera querido tu hermana

-No me digas nada de lo que no sabes…

-Lo sé, he sido amigo de Anthony desde niños, se mucho y tú lo sabes, como sabes el cariño que le tengo y que no permitiré que le hagan daño, no mas

Albert no dijo nada porque en aquel momento se acercó el medico a la señora Elroy y al señor Grandchester.

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En una pequeña habitación del hospital una joven pelinegra iba abriendo los ojos lentamente intentando ubicarse, estaba en una cama sintió que tenía algo conectado a su brazo y tenía vendas en las muñecas ahora, no recordaba con exactitud lo que había pasado, solo sabía que había estado viendo la escena donde Anthony defendía el amor que le tenía a Candy y que esta también ya defendía su posición y la inocencia del rubio, ¿Cómo se atrevía? ¿Acaso olvido su promesa?

Entonces tomo lo primero que tuvo a la mano para hacerse daño y así fue como pensó se ha de ver desvanecido.

Suspiro lentamente mientras acomoda su cuerpo bajo el colchón posando una mano en el estómago y otra en la cadera, entonces se dio cuenta de que…

Algo faltaba…

Su hijo…

Inmediatamente se levantó y se siguió tentando el estómago bajo las sabanas, no sentía el pequeño bulto que ya tenía, ¿Cómo era…? ¿Qué era lo que había pasado?

-No te levantes Annie

Archie había entrado a la habitación en ese momento para poder estar unos minutos con ella, pero no esperaba encontrarla despierta y menos buscando…

-Mi…mi bebe –Susurro débilmente la pelinegra asustada aun.

-Annie

La joven le miro algo alterada -¿Dónde…donde esta Archie?

-Annie lamentablemente…

-No

-Es que el golpe fue muy fuerte y…

-No

-Annie…estabas delicada y…

-¡No! –Annie se sujetó el estómago y comenzó a sollozar en sus rodillas

Todo estaba perdido, perdió al bebe pero sobretodo había perdido cualquier oportunidad de tener a Anthony junto a ella.

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Ya estaba casi amaneciendo cuando la rubia escucho un pequeño ruido de coche a la entrada de la mansión Grandchester, inmediatamente deicidio ir a la puerta para ver quién era, entonces vio a Terrence y Anthony bajando del automóvil, fueron los primeros en bajar, inmediatamente se acercó al más cerca que fue para fortuna de ella misma y de este joven Anthony, quien la recibió con los brazos abiertos para darle un dulce y tierno abrazo.

-¿Qué paso Anthony?

-Annie perdió…perdió al bebe

-No –Susurro débilmente la rubia, inmediatamente sus ojos se anegaron de lágrimas

-Candy –Murmuro el otro rubio que se estaba acercando a ellos –Sera mejor que entres está fresco aun aquí afuera

Candy le miro con un poco de vergüenza, separándose lentamente del rubio quien le miro con sorpresa un momento, para después y aun con su tío ahí, tomando su mano para que ella no se separara por completo de su lado.

-Vamos hermanita –Terrence le extendió su mano para alejarla de la tensión que se estaba formando entre tío y sobrino.

Ella sonrió dulcemente

-Si –Tomo la mano de Terrence y soltó lentamente la de Anthony quien comprendió y la dejo ir sin decir nada

-Anthony –Albert le tomo del brazo –No te le acerques, recuerda que oficialmente ella es…

-Albert –Se soltó del agarre de su tío –No la voy a dejar, han pasado muchas cosas, tío, peor sobre todas esas situaciones el amor que ambos nos hemos tenido ha prevalecido, ¿No te parece que es por algo?

-Por favor Anthony yo no….

-¿quieres que me aleje de ella verdad?

-Si

-¿Cómo puedes…?

-Compréndeme –Albert bajo la mirada suspirando –Me arrebataron a mis padres, ambos –Añadió cuando vio que Anthony iba a replicar –También tú las tuviste lo sé, pero te encontraste con Terrence, has estado con el toda tu vida y no estuviste en la soledad que yo tuve, la tía abuela era más condescendiente contigo y yo….yo siempre tuve el peso de que sería el patriarca de la familia algún día y eso provoco que fuera más dura conmigo, no la culpo pero…pero me sentía muy solo y a…nadie le importo, ni a ti –Le miro con más firmeza de lo que pediría –Candy cuando me conoció me mostro una sincera y dulce amistad, ha sido la única que llena ese hueco en mi corazón –Dijo volviendo a bajar la mirada –He podido tener algo de felicidad que no tenía hace mucho…me ha ayudado pese a que no me ama como a ti, sé que me quiere y yo…

-Albert yo…

-Por favor –Albert le miro con suplica –Nunca he pedido nada pero ahora si, por favor…aléjate de ella, para que…para que Candy se pueda enamorar de mi

-Pero

-Si me quieres Anthony, si realmente existe cariño entre nosotros como debió ser siempre, quiero por favor…por favor dame la oportunidad de hacerla feliz.

Anthony miro sorprendido a su tío, nunca pensó que estuviera tan necesitado de amor como para poder pedir tal cosa, con tal de que el tuviera amor, sin importarle dejarle a su propio sobrino sin amor.

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Miraba hacia la nada mientras la soledad le abrazaba, aquella que siempre le acompañaba desde el Hogar de Pony.

Sola, siempre bajo la sombra de Candy, siempre buscando que la amaran igual que a ella, siempre viendo como todos le tomaban más atención a esa rubia pecosa y a ella, a ella le hacían a un lado.

Y ahora…ahora ella tendría al joven que siempre quiso a su lado, que mostrara interés por ella, le gustaba ser el centro de atención, atención que nunca tuvo como tanto deseaba, en realidad siempre quiso lo que Candy tenia y cuando por fin iba a tener que ella no tenia, lo pierde.

Sus lágrimas rodaron por sus ojos, que no se dio cuenta hasta que Archie le quito unas…

Le miro con dulzura, con dolor, con amor, ¿Por qué seguía amándola? ¿Cómo seguir amando a quien tanto daño te hizo? ¿Cómo amar a quien ni siquiera lo veía como amigo? Solo lo veía como un aliado para sus planes, para poder convencer al mundo entero de que Anthony debía casarse con ella. Con ella y no con Candy.

Y cuando iba a lograrlo Anthony huyo.

E iba a tener un bebe, algo que no iba a tener Candy pero ahora….ahora también lo había perdido

-Archie….yo lo…lo siento –Sollozo fuertemente mientras se tapaba con sus manos

La habían sedado para que durmiera el resto de la noche y parte de la mañana, ya pasaban del mediodía, pensó que podría verla nuevamente antes de que comenzaran las visitas, sus padres ya habían llegado pero él quería permanecer junto a ella, pese a todo lo que había pasado, pensaba que Annie aún tenía algo bueno en su interior, eso creía hasta que perdió al bebe.

-Tranquila Annie, yo…

-Archie perdóname porque él bebe, nuestro bebe

Archie sintió un brinco en su corazón

-Lo perdí

-Annie

-Sé que en un principio todo esto comenzó por el odio que le tengo a Candy, ella siempre ha tenido todo lo que me hubiera gustado tener a mí, el amor de las hermanas, el amor de los demás niños, el amor de mis padres y también el amor de….un amor de infancia

-¿Enserio amas a mi primo? –Pregunto el castaño con dolor

-No lo sé –Murmuro la pelinegra con más lagrimas –Solamente quiero pedirte perdón porque entre todas estas locuras que he tenido y mi odio he dañado a personas inocentes como…como este bebe que nunca conoceremos y… -Miro al castaño –Tu

-Annie

Archie la miraba con compasión

-Lamento mucho todo por él bebe que perdimos Archie yo…

-¡¿Qué?!

Ambos se sobresaltaron con el grito que se escuchó en la puerta de la entrada y al voltear a ver, vieron a una rubia entre sorprendida y enojada.


Hola queridos lectores

Espero que les guste el nuevo capitulo

Muchas gracias a todos por sus hermosos reviews y por su apoyo son los que me impulsan a seguir escribiendo

por favor dejen sus votos para saber que fic ganara para la siguiente semana actualizar diaramente

saludos y bonito miercoles