A la mañana siguiente de estos extraños hechos, se podía ver a un rubio caminando feliz y despreocupado en dirección a su trabajo. Todo normal, algunos negocios abriendo, algunos shinobis en camino a sus casas a descansar después del turno nocturno. Todo normal. Excepto las miradas de la gente le daba al mencionado rubio, el cual poco a poco fue notando y poniéndolo incomodo, miradas de sospecha y preocupación.
Claro, el ninja a cargo de la aldea tenía otras cosas en su cabeza que afectaban su agenda diaria. Y la más importante era como mantener escondida la presencia de los cuatro minininjas y garantizar su seguridad.
Llegar a una torre hokage silenciosa era raro, pero más raro era caminar por ella escuchando ese zumbido de los cuchicheos a su paso, los cuales desaparecían junto a los ninja y civiles que los producían cuando él los miraba.
Su fiel secretaria lo estaba esperando junto a la entrada del piso principal con su café matutino y una cara de relajo al verlo llegar, que Naruto no vio.
Al llegar a la puerta de su oficina, vio a su fiel amigo, apoyado junto a una ventana del pasillo, fumando y viéndose nervioso. "seguramente tuvo otra de esas noches con Temari" pensó Naruto
- Buenos días Shikamaru
- Buenos días Naruto. Como están las visitas?
- Bien – respondió mirando a todas partes – pero pensé que no hablaríamos de ellos fuera de la seguridad de la oficina.
- Si es cierto – respondió Shikamarua mientras se preguntaba que tan despistado podía ser un hokage sin comprometer la seguridad de la aldea – compraste el periódico hoy?
- No tu sabes que solo lo hago cuando viene el suplemento deportivo, y eso sale mañana
- Lo sospeche y es problemático, muy problemático.
El líder de los Nara le lanzo su copia del periódico de Konoha a su jefe – Mira la portada.
Y ahí, en grandes letras negras se veía "Estamos bajo ataque! Que le paso al hokage y los demás héroes?" y debajo de esos titulares habían 3 fotos claras y a todo color de los cuatro viajeros caminando por Konoha.
Escupir el café frente a esta noticia era de lo más normal, considerando las circunstancias del día. Adiós al anonimato, adiós a la seguridad y adiós a la tranquilidad. Bueno no, esa se había ido ayer.
- Que vamos a hacer?
- No lo sé Naruto, esperaba tenerlo escondido un par de días mientras lo pensaba pero eso ya no existe.
- Señor – se escuchó la voz de su secretaria en el intercom – la gente del periódico local esta acá, quieren una declaración, también la gente de la televisora…. Están instalando un punto de prensa en vivo a las afuera de la torre, y la oficina de comunicación del señor feudal quiere comunicarse con usted.
- Menudo lio en el que estoy metido… Shikamaru porque me dejaste ser hokage?
- No habían más idiotas disponibles.
- Nadie me respeta – lagrima correpondiente saliendo de los ojos del hokage.
- Señor, videollamada urgente los kage – nuevamente interrumpió la secretaria.
Hablar con sus compañeros kage siempre era difícil. Siempre todos querían imponer sus opiniones. Eran amigos, si, compañeros de batalla, si, pero eran líderes de sus aldeas también y siempre buscaban como favorecer, aunque fuera un poco, a sus propias aldeas. Por eso verlos a todos formando un solo bloque era muy extraño. Después de un largo rato contándoles lo que había sucedido
- Mantenlos vivos Naruto, ellos son esenciales para nuestro futuro - dijo Darui
- Puedo mandarte refuerzos por si los necesitas – Chojuro
- Como le haces para meterte en tanto problema? – Kutotsuki
Los tres sabían que Gaara y Naruto tenían una relación aun más estrecha por el tema de ser jinjuriki, así que los dejaron solos para que el kazekage lo aconsejara.
Pocas cosas le causan miedo a Naruto, pero verle una sonrisa divertida a Garaa era una de ellas. Este lo miro a través de la pantalla largo tiempo y Naruto ya estaba sufriendo por la regañadilla que su amigo le iba a dar sobre la seguridad y el futuro y todos eso… Gara abrió la boca, "aquí vamos" pensó Naruto
- Shukaku le manda saludos a Hima
La carcajada de Kankuro podía escucharse a través de los parlantes y también el "maldito mapache" en la mente de Naruto.
- Ya sabrás que hacer y cómo protegerlos. Mientras voy a poner a mis jonin a investigar si hay alguna leyenda o alguna información del tema. También se lo voy a sugerir a los otros kage
- Gracias amigo, sabía que podía confiar en ti
La videollamada termino y Naruto comenzó su lucha diaria contra el enemigo invencible, el papeleo.
Todo bien hasta que el teléfono de su oficina sonó
- Si?... Hola Sakura, como estas?...Si, está libre hoy, porque?... este dobe, y después dices que el insensible era yo…..Bien Sakura, nos vemos allá
- Shikamaru, voy a salir un momento. Te dejo un clon por si me necesitas urgentemente
- Problemático
