Capitulo 13: "El despertar"
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Cuando llegamos al anochecer, estabamos completamente cansadas, y los chicos no volverían hasta tarde, pues tenían una misión. Nao preparó cena para ocho, nosotras comimos nuestra parte y guardamos lo demás para Ran y compania. Luego, nos dimos una ducha y nos fuimos a dormir.
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/Relata Nao (Ex Iris)/
Un molesto "ringg" me despertó. Provenía del piso de abajo. Me levanté a regañadientes y bajé a ver que era. Era el condenado teléfono.
-"¿A quién demonios se le ocurre llamar a las cuatro de la mañana?"- pensé molesta y atendí-Diga-
-Buenas noches, somos del Hospital en donde esta internada la paciente Aya Fujimiya ¿Se encuentra su hermano?-preguntó un hombre de unos cuarenta años de edad, más o menos.
-En estos momentos se encuentra durmiendo¿Desea dejarle un mensaje?-pregunté aún dormida, mientras tomaba un papel y una lapicera que tenía a mano
-Eh...sí, digale que existe la posibilidad de que su hermanan salga hoy del coma.- informó
-Listo, no se preocupe, se lo diré.- dije anotando lo dicho por el hombre
-Muchas gracias y perdone las molestias.-
-No se preocupe, hasta luego.- dije, luego de escuchar el saludó del otro lado del auricular, corté.
Aún con sueño y sin saber lo que sucedió, me dispuse a volver a mi cómoda cama, cuando me surgieron tres preguntas¿Cómo rayos hice para llegar allí?; ¿Quién era Ran Fujimiya?; y ¿Quién era su hermana y por qué estaba en coma?
Inmediatamente, fui a levantar a Kumi, pues el apellido Fujimiya se me hacia conocido.
-Kumi...- dije entrando en su habitación...Allá a lo lejos pude distinguir la silueta de Kumi sentada, mirando por la ventana
-¿Quién era?- preguntó mientras volteaba a verme
-Eh?-
-El que llamó por telefono, iba a contestar, pero tu te adelantaste...- explicó ella como si nada
-Ah, eso...pues, es de lo que vengo a hablarte...- dije con inseguridad, mostrandole el papel
Kumi prendió la luz mortifera del velador.
-Dame el papel.- dijo ella, yo obedecí y le entregué el escrito, en cuanto lo terminó de leer, se pusó de pie de golpe y me dijo- ¡Despierta a las chicas y diles que se cambien para salir como...en cinco minutos!-y salió de su habitación como un rayo.
-¿Qué bicho le pico?-pregunté y fui a despertar a Nat...digo Namy, Yuka y Yuriko.
-Nat...Namy! Despierta!-grité deseperada
-¿Qué sucede, Iris?-preguntó mi amiga.
-Yo sé menos que tú.- dije- Kumi quiere que estemos listas para salir como en cinco minutos.- informé- Usa ropa normal y ayudame a despertar a las hermanas.-
-Como digas.- dijo volviendose a acostar.
-Esto será tan dificil como en los viejos tiempos.- dije para mí.
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Entré silenciosamente en la habitación de Ran-kun. Si lo que Nao me había dicho era cierto, pues entonces, debería apurarme. Así pues, dejando de tener cuidado con ser silenciosa, ne dirigí a su cama, con desición y esquivando a Yohji.
Me senté en el borde de la cama de Ran.
-Ran...-murmuré suavemente, mirándolo a la cara-"...se ve tranquilo cuando duerme...no parece aquella persona fría que conozco...todo lo contrario, parece una persona dulce y calida...¡Pero qué es lo que estoy pensando?...Estoy aquí por una razón!-me reprendí a mi misma...la verdad, ni siquiera sabía porque había pensado eso. Volviendo a la realidad, moví suavemente el cuerpo de Ran, pronunciando su nombre- Ran... despierta...-
Él se movió un poco y abrió levemente sus ojos. Cuando ya se había despertado (no del todo), me preguntó que era lo que sucedía.
-Llamaron del hospital.- informé con una alegría rara en mí-Ellos dijeron que...es posible...que Aya-chan...salga hoy del coma.- finalicé con una sonrisa¿Primero esta alegre y luego sonríe¿Estará enferma/
Admito que desde que los conocí, mi carácter frío comenzó a desmoronarse lentamente y no sé como demonios sucedió.
-¿Lo dices de verdad?- preguntó Ran terminándose de despertar lleno de sorpresa
-Hey¿Crees que te despertaría a las cuatro de la mañana para decirte una mentira?- contesté con un enojo fingido y sin que aquella sonrisa desapareciera de mi rostro- Iré a despertar a los demás, tú despierta a Yohji.- dije
-¿Despertar a quién?- preguntó una voz de tras de mí.
-Si no escuchaste lo que dije no es mi problema.- dije recuperando mi rostro de frialdad.
Desde que yo estoy hospedándome en el Koneko, he hablado, mejor dicho, he dejado que hablen, conmigo. Y claro, con algunos terminaba haciendo amistad, como Ran o con Omi, y otras, bueno, no es que los odiara o los considerara mis enemigos a muerte, sino, que no me agradaba quedarme encerrada con ellos en un ascensor descompuesto, ustedes entienden. Y Yohji era una de esas personas. Aunque tampoco es que me desagrade, pero no me gustaba los comentarios que hacia sobre "mi falta de feminididad" /No sé si esa palabra existe y no estoy interesada en saber si existe o no/
-Ya que estas despierto, tienes cinco minutos para cambiarte y estar listo para salir hacia el hospital.- dije dirigiéndome a la salida
-¿Para qué iremos?-preguntó y antes de que pudiera añadir algún comentario ya le había respondido: "Para ver a una persona", y salí de la habitación.
Al llegar a la habitación en donde dormían Ken y Omi-kun, entré y los desperté de una manera un poco distinta a la que desperté a Ran /Omitiré detalles, para que ustedes se lo imaginen... en otras palabras, no tengo ni idea de cómo los despertó ù.ú/
Unos minutos luego, ya estaba lista. En un bolso había puesto unos vaqueros que le pedí Yuriko (que milagrosamente eran de color azul) y una remera blanca y rosa. A Nao le pedí un suéter beige y unas zapatillas que tenía de antes/Bueno, si tenemos en cuenta de que Nao y compania empezaron el viaje hace dos años, o sea, cuando Nao tenía 17, Namy, 19, Yuriko 15 y Yuka 13, y que aún tenían la ropa de esa época...y si consideramos que Nao solo usa las mismas zapatillas durante toda su vida y había traido otro par de zapatillas...bueno, ustedes entienden ù.ú/. En tanto, yo aporté una campera marrón oscuro.
Cuando preguntaron para qué, yo solo les dije: "Es para una chica" Pues realmente, no tenía ni la más minima intención de decirles quién era Aya.
-¿A dónde vamos, Kumi?-preguntó Yuka por decimoquinta vez.
-Al hospital.- contesté por decima vez
-¿Para qué?-
-Para ver a Aya-chan.- solté con un tick nervioso en el ojo derecho.
Estabamos en el presioso auto beige de Namy. Yo conducía, delante de nosotras, iban los chicos.
-¿Quién es "Aya-chan"?- preguntó Namy que estaba en el asiento del copiloto.
-Una chica.- contesté con sequedad.
-Eso ya lo dijiste, pero ¿Qué chica?.- insistió Namy
-Ah!-grité molesta- Aya es la hermana de unos de los integrantes del Weib!- dije completamente harta.
-¿En serio¿De quién?-preguntó Yuriko
-Supuestamente, su memoria lo debe saber, y si no... ajo y agua!.- dije en español co mucha molestia
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Por fin llegamos. Wl hospital tenía pinta de una lugar embrujado, como todo hospital de noche. Mientras espabamos a unos pasos de la recepción, Aya-kun y Kumi estaban hablando con una de las secretarias.
-¿Quién es "Aya-chan"?-preguntó Yuca
-Es la hermana menor de Aya.- explicó Yohji-Como el amargado que es no nos ha contado nada de ella.-
-No sabía que Aya-kun tenía una hermana que se llama igual que él.- comentó Namy
Los chicos nos miraron con interrogación.
-Ustedes no recuerdan la vez que nos pusieron contra la espada y la pared /cap. 8?-preguntó Ken
-Es que después de todo lo que sucedió, al parecer, lo hemos olvidado.- dije con una mano en la cabeza.
-Como siempre.- dijo Kumi volviendo con nosotros junto con Aya-kun-Namy¿El bolso que pedí que bajaran?
-Eh...jejeje... creo que lo he dejado en el baúl...jeje- dijo Namy
-Ve a buscarlo.- ordenó- Entretanto estaremos en la habitación 240, en el cuarto piso.-
-Entendido.- se dio media vuelta y se fue.
En tanto nosotros iniciamos el camino a la habitación y piso antes nombrados.
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Llegamos al lugar. Esperamos un rato hasta que viniera el doctor, como nos había indicado la recepcionista. Y me había sentado a la izquierda de Ran, todos los demás estaban a mi derecha. Él parecía fuera de sí. Nunca lo había visto comportarse de esa manera. Estaba feliz, impaciente y demás. Miraba constante mente a la puerta de la habitación 240. Disimuladamente, apoyé mi mano derecha sobre la su mano izquiera y lo miré por el rabillo del ojo. Al instante, él aparto su vista de la habitación y me miró por unos segundos. Apreté mi mano entre la suya, y mi mirada se llenó de brillo, de felicidad. Era mi forma de decirle que todo estaría bien. Él, sus ojos, sonrieron, y luego volvió su vista a la puerta.
Unps minutos luego, salió el doctor y su sequito de hombres blancos. Inmediatamente, como un reflejo y sin pensar las cosas, me levanté con él y fuimos a hablar. El doctor habló conmigo y con Ran durante un rato. Él decía que Aya ya había despertado, pero existía la posibilidad de que no recuerde a su familia ni nada de lo sucedido. Dijo que seamos pacientes con ella, si nos recuerda, con el tiempo lo hará y toda la charla de media hora en la que te somete una persona que tiene el presunto titulo de ser doctor especializado en un área que no recuerdo, para quitarte tiempo, aburrirte más de la cuenta y demás.
Luego, nos dejó pasar a mí y a Ran...digamos que confundió nuestra amistad con algo parecido...al amor... eso, o habrá creído que soy pariente de ellos...vaya uno a saber.
El doctor nos semiabrió la puerta. Ran dudó en entrar o no, yo lo miré alentándolo. Ambos entramos y cerramos la puerta detrás nuestro.
Allí estaba, recostada en aquella cama de hospital con mantas blancas y varias maquinas a su alrededor. Sus ojos de color esmeralda brillaron intensamente de felicidad al ver a su hermano, sonrió llena de felicidad y pronunció el nombre de Ran en alto, llena de felicidad. Tanta era su felicidad que no notó mi presencia. Ran se acercó a su hermana, llevaba esa sonrisa que pensé que nunca vería en él. Abrazó fuertemente a su hermana.
Fin del cap...13? O.O
bueno, cuando me refería a ajo y agua, es ...creo que una frase hecha, no sé y no me interesa, pero cuando digo ajo y agua, es como decir "a joderse y aguantarse"...en todo caso, shady lo sabe. u.u...no soy muy culta en estas cosas
