Las dos familias, mas los genin estaban en la sala de los Uzumaki. El equipo 7 estaba sentados en el sofá con Sakura entremedio y las hijas y Hinata sentadas en el suelo. Boruto estaba sentado en el brazo del sofá.
- Lo que les voy a contar era un secreto grado S – dijo Naruto a los genin del pasado – Ahora ya no lo es, así que los niños lo saben todo, o casi todo. Les pido que – le dijo a sus hijos y a Sarada - no comenten nada mientras cuento la historia. Hima, si en algún momento no quieres seguir escuchando mamá te llevara a tu cama- dijo mirando a Hinata quien afirmo con la cabeza.
Los dos compañeros de Naruto genin se miraron entre si, notando además que las miradas entre los Narutos. El genin se veía preocupado.
- Tienes algún problema con esto?- Dijo el mayor.
- Ufff. En algún momento tienen que saberlo, y que mejor que ahora – Los del pasado se miraron extrañados. Porque el mayor consultaba con el menor?
- Bueno todo comenzó el 31 de octubre del año en que nacimos. Saben que día es?
- El día del ataque del kyubii – Respondió Sakura. Himawari estuvo a punto de corregirla pero una mirada de su padre basto para detenerla.
- Tu cumpleaños – dijo una voz muy bajito. Solo el rubio mayor la escucho la miro y le dio una sonrisa.
- Y supongo que saben que paso? – continuo el hokage.
- No se sabe de donde surgio, pero de repente el demonio de nueve colas estaba atacando nuestra aldea. Muchos murieron esa noche, entre ellos el cuarto Hokage – dijo Sakura – pero al final logro matarlo.
- Bueno esa es la historia oficial. Saben que es el Kyubii?
- El demonio zorro de nueve colas – respondió Sakura.
- Es un ser de puro chacra – dijo Hinata.
- Cierto. Y por eso el kyubii no puede morir.
- Entonces, esta libre por ahí?- dijo asustada la pelirrosa.
- No - respondió Naruto – El Cuarto no lo mató porque no se podía matar, pero al ser un ser de chacra lo puedo sellar.
- Esta sellado? En qué?
- No en que, sino en quien – Dijo Naruto – El kyubii fue sellado en un niño recién nacido – Ante la afirmación Hinata se llevó las manos a la cara con temor, Naruto solo la miro y le dio una cálida sonrisa.
- Jinjuriki – dijo por primera vez Sasuke. Naruto asintió.
- Entonces ese niño tiene que estar bien protegido porque nos protege a todos, especialmente por sus padres.
- Ojala fuera cierto Sakura, pero ese niño perdió a sus dos padres esa noche. Veras su madre llego de tierras lejanas para reemplazar al antiguo Jinjuriki, pero con el tiempo ella se enamoro y se casó con el padre del niño. Sabían que, como jinjuriki, era arriesgado pues al dar a luz el kyubii podría escapar, pero el padre era un maestro en sellado y estaba preparado. Sin embargo algo paso y fueron atacados y el kyubii fue liberado.
- Sabes quienes eran sus padres? – pregunto el naruto menor. El otro afirmo.
- Podrías…. Podrías decirme?
- La madre se llamaba Kushina, Kushina uzumaki – dijo el mayor – y el padre Minato Namikaze
- El niño es hijo del cuarto? – pregunto Sakura, aunque ya sabía la respuesta. El mayor solo asintió con la cabeza. El menor no aguanto más y salió corriendo hacia el patio.
- No te preocupes, yo voy – le dijo Hinata a su marido – continua aquí.
- Que le paso a Naruto – pregunto la pelirrosa mientras se paraba preocupada, principalmente porque ya sospechaba la respuesta.
- Sakura – se escuchó la voz triste de la mayor – el 31 de octubre es el cumpleaños de Naruto.
La pelirrosa solo atino a sentarse ante el peso de la información.
Hinata siguió a Naruto al patio de atrás de la casa Uzumaki. Lo encontro sentado contra un árbol, escondiendo su cara entre las rodillas.
- Porque? Porque lo hizo? – escucho que lloraba el niño.
- Sabias que lo golpeaste en el estómago? – dijo Hinata, sentándose a su lado.
- Que? – respondió el rubio. La pelinegra le sonrió, feliz de haberlo distraído con tan insólita declaración.
- En el futuro, por ciertas….. circunstancias, vas a encontrarlo. Naruto kun me conto que cuando lo vio lo primero que hizo fue golpearlo en el estómago.
- Hizo que?
Hinata solo lo miro y le sonrió – crees que no debió hacerlo?
- No. Si, Digo….. se lo merece no?
- Tienes que entender que el cuarto no tenía muchas alternativas. Kurama-san estaba atacando y
- Quien? – la interrumpió el rubio.
- Kurama san. Es el nombre real del kyubbi.
- El kiubbi tiene nombre? – pregunto incrédulo
- Si. Y es una parte importante de esta familia, así que cuando te refieras a él hazlo por su nombre – luego señalo hacia su estómago – Incluso él podría agradecerlo.
Naruto llevo su mano hacia su sello y luego miro a la mujer.
- Pero sigo sin entender? Porque lo hizo? Porque yo?
- Que hubieras hecho tú?
- No sé! Pero hubiera hecho algo… otra cosa.
- No creo que haya sido una decisión fácil, pero lo hizo porque sabía que tú podrías controlar su poder. Por un lado estaba atrapar a kurama y detener la matanza y por otro seguir luchando hasta derrotarlo, si es que podían y a costa de muchas vidas.
- Pero sacrifico la mía!
- Que hubieras hecho tú? – repitió.
- No sé. Hubiera luchado….. hubiera…hubiera…. - miro al suelo - No podía hacer nada cierto? Solo podía sellarlo y no podría haber sacrificado a nadie más. Era yo o no era nadie – dijo entendiéndolo finalmente.
- Naruto, si tu hubieras estado en la situación del Cuarto y hubieras tenida la opción de transformar a tu hijo en jinjuriki o a, digamos, al hijo de Lee, que hubieras elegido.
El silencio inundo el patio de la casa Uzumaki.
- Hubiera tomado la misma decisión del Cuarto…. Mi padre.
Hinata puso una mano sobre la cabeza del rubio y le revolvió los pelos para luego acercarlo y estrecharlo en un abrazo.
- Son las difíciles decisiones que tiene que tomar un hokage – le dijo mientras lo soltaba.
Los dos quedaron sentados juntos, en silencio.
- Bueno, es hora de volver – dijo Hinata mientras se ponía de pie y le estiraba la mano para que el genin se la tomara. Cuando el rubio logro ponerse de pie, la pelimorado lo atrajo hacia ella apretándolo contra su pecho, lo que hizo que el rubio se pusiera colorado.
- Discúlpame Naruto kun – mientras lo soltaba.
- No, por favor – dijo el rubio – no me sueltes.
- Sabes, apostaría que mi yo menor estaría feliz de estará si en este momento.
- Pero ella siempre se desmaya.
- Sabes? Eres bien distraído – dijo mientras lo soltaba y le volvía a dar la mano.
Naruto miro la mano y la tomo, rojo en su cara pero feliz y así entraron a la casa.
Hinata y Sakura se taparon la boca con enorme pena. Ambas entendieron que su amigo era quien llevaba al kyubbi en su cuerpo.
- Es por eso que los aldeanos te tratan tan mal? – pregunto la pelirrosa.
- Si. A la edad de ustedes la gente de la aldea aún tiene miedo de que libere a kurama y cause la destrucción de la aldea.
- Kurama? – pregunto Hinata.
- Si! Kurama chan es el amigo de papá – contesto rápidamente Himawari pero antes de continuar miro a su padre, quien le respondió con una sonrisa.
- Ya puedes decir todo lo que quieras, ya dije lo más importante.
- Si!- y salió corriendo subiendo las escaleras.
- No corras – dijo Naruto preocupado – si te pasa algo tu madre me mata – o me deja en el sofá por un mes, pensó solo para él.
Todos vieron desaparecer a la feliz Uzumaki antes de que el rubio continuara.
- La verdad es que la vida de un jinjuriki no es fácil. A la mayoría se les teme y se les aísla.
- La mayoría? Hay mas? – lo interrumpió Sakura.
- Si. Hay nueve bijuu en total, y por lo tanto nueve jinjuriki. En la actualidad solo quedamos dos. Yo – dijo mientras se tocaba el abdomen donde está el sello - y el viejo Bee, quien tiene al ocho colas. Los demás murieron antes de la guerra. Así que solo lo conocí en persona a él y a Gaara.
- Gaara? – pregunto asustada Hinata quien aún tenía pesadillas de él en el bosque de la muerte.
- Gaara está muerto? – pregunto Sakura
- Si, Hinata y no Sakura. Aunque ahora cambio. Es el kasekage hace muchos años. También Yagura, el misukage, era un jinjuriki. El resto? Bueno, el resto lo pasamos bastante mal, aunque por lo que sé, yo fui el que mas mal lo pasó.
Al terminar la frase un borrón pelinegro lo abrazo – Lo siento Naruto kun.
- Hey – le dijo – no te preocupes. Ahora soy feliz. Tengo una familia, el trabajo que siempre quise y la gente me quiere y respeta. Él, en cambio, si esta solo. Creo que podría aceptar un abrazo y tal vez un beso - Ante eso Hinata alcanzo uno de sus niveles de rojo más intenso – En la mejilla, eso, en la mejilla – dijo para tratar de arreglar la situación.
- Yo también lo siento Naruto – dijo la pelirrosa menor – No sabía por todo lo que has pasado.
- No te preocupes. Si no fuera por todo eso, yo no sería el grandioso ninja que soy ahora.
- Hmf – se escuchó desde donde estaba el Uchiha mayor.
- Eso explica muchas cosas – dijo, por fin, el Uchiha menor, recibiendo un codazo de su compañera. La pelirrosa mayor le sonrió con soberbia a su marido.
En eso Himawari volvió a la sala, trayendo consigo a tres peluches – Este es Shika kun – dijo mientras le pasaba a Sakura el peluche – Este es Kurama kun - dijo mientras le pasaba el zorro peluche a Hinata – y este es Hachibi san – dijo mientras mostraba su pulpo toro a la concurrencia.
- Ese es nuevo – dijo la pelirrosa mayor.
- Si. Me lo envió el tío Bee. Dijo que Hachibi san dice que yo no podía no tenerlo a él también.
En eso volvieron Hinata y Naruto. Todos notaron que venían tomados de las manos. Naruto venia rojo, no estaba acostumbrado a las demostraciones de cariño. Además la mirada "hey esa mano es mía" que le mando el mayor le hizo soltar a la Hinata mayor rápidamente. En cambio la Hinata menor miraba la escena con una mezcla de celos y esperanza. El hokage, habiendo logrado su objetivo, ahora miro hacia la Hinata pequeña y le sonrió mientras subía y bajaba las cejas y señalaba al rubio menor con la cabeza. Elle respondió colocándose colocándose colorada y negando con la cabeza. El incómodo momento paso cuando Himawari rápidamente intercambio a el Kurama de Hinata por su Hachibi y le entrego al zorro al rubio – Mira papá, este es Kurama.
- Vaya – dijo el rubio – no se ve tan temible.
- Es un peluche, idiota.
- Claro que lo sé, tarado.
- Y volvimos a la normalidad – dijo la pelirrosa menor, tomándose el puente de la nariz y ganándose las risas de todos.
- Itachi es inocente.
