Gabriel ha tenido suficiente de todas estas chicas peleándose por Adrien. Decide que ya es hora de que Adrien elija uno y organiza la oportunidad perfecta para que lo haga. Cada candidata tiene cinco minutos para presentar por qué sería una buena novia.
Marinette decide aprovechar esta oportunidad para disparar su tiro.
Notas:
Escribí esto en una noche durante un pedo cerebral. Solo quería algo súper esponjoso.
Texto de trabajo:
Adrien llegó a la escuela esa mañana con el peso de todo un futuro sobre sus hombros. Su rostro pálido, sus labios apretados en una línea, y todo tenso.
Pasó por alto a todos los que querían hablar con él, incluidos sus amigos. Chloe y Lila parecían de buen humor, mientras se turnaban para colgarse de sus brazos y lanzarle besos.
Molestaba a Marinette más de lo que quería admitir. ¿Nadie más notó que estaba sufriendo?
En el almuerzo, buscó en lo profundo de sí misma y le preguntó, antes de que pudiera salir del salón de clases. "¿Hola, Adrián?"
Él se encogió ante su voz, pero se relajó un momento después, enviándole una sonrisa fácil. "Hola Marinette. ¿Que pasa?"
La sonrisa apestaba a estrés y desesperación. Dada su pérdida, casi amistad, ella no sabía si tenía derecho a preguntarle, pero siguió adelante de todos modos. "Pareces… estresado. ¿Estás bien? ¿Algo en lo que pueda ayudar?"
La pregunta llamó la atención de Nino y Alya, quienes también estaban empacando para ir a casa a almorzar.
"Sí, amigo, has estado un poco tenso todo el día... Simplemente no sabía cómo preguntar".
Los ojos de Adrien recorrieron la habitación. Chloe ya se había ido, pero parecía que Lila había terminado la conversación y caminó hacia ellos, colocando una mano en el hombro de Adrien.
Está un poco nervioso, eso es todo. ¡El Sr. Agreste ha decidido que finalmente puede tener una novia e invitó a algunos candidatos dignos a la mansión esta tarde!
El corazón de Marinette se apretó dolorosamente. Ella no había oído nada sobre esto, por lo que obviamente no estaba invitada. Pero si Lila lo supiera, entonces...
"¿Eres un candidato?" Alya casi gritó, emocionada.
Eso solo aumentó el dolor en su pecho.
"¡Naturalmente! Adrien y yo tenemos una gran relación de trabajo, ¡y somos grandes amigos! ¡El Sr. Agreste realmente me respeta como artista también! ¡Por supuesto que me invitó!" Ella acaricia a Adrien, como si fuera un animal y no una persona. "Adrien y yo sabemos que ya es un trato hecho. Pero el… concurso, es más una formalidad."
"Aún no es oficial", dijo Adrien, alejándose de Lila. "Todavía tienes que pasar por la entrevista".
"Por supuesto, pero soy una victoria segura".
El temblor de su labio y las cejas tensas le dijeron a Marinette lo contrario.
Adrien respiró hondo y miró a sus amigos. "Mi padre dijo que podía invitar a algunos amigos, para apoyo moral. ¿Estarían dispuestos a venir?"
"¡Por supuesto, amigo!"
"Vendrás a apoyarme también, ¿verdad, Alya?" preguntó Lila.
"¡Por supuesto, niña!"
Los hermosos ojos de Adrien se encontraron con los de Marinette, suplicándole. "¿Marinette? ¿Está usted en?"
"Seguro que está ocupada en la panadería, Adrien", dijo Lila, "no la hagas sentir culpable".
"Soy libre." exclamó Marinette. "Me encantaría estar allí." Ella realmente no quería, en realidad, pero sintió que era mejor ir y clavar el cuchillo y arrancarle el corazón. Con Adrien tomado oficialmente, finalmente podría seguir adelante, ¿verdad?
Al menos, esa era su esperanza.
Adrien le sonrió genuinamente, luciendo ligeramente aliviado.
Él y Nino fueron a almorzar juntos, mientras Alya la seguía de regreso a la panadería, en silencio en el camino.
"Oye... um, lamento que no te hayan invitado a participar".
"Supongo que eso es lo que obtengo por sentarme con un pulgar en mi trasero". Marinette respondió con un suspiro.
"Y sé que no te gusta Lila, pero ella es tan merecedora del afecto de Adrien como tú, ¿de acuerdo? Por favor, por favor, no se avergüence y trate de arruinar esto en un ataque de celos".
Marinette quería decir: 'Sin promesas', pero en cambio, dijo: "No lo haré".
"Kay, porque… eso no sería justo para Adrien, ¿sabes? Esta es su futura novia. Se merece una oportunidad justa de ver sus opciones y elegir a quién quiere".
Marinette miró a Alya con un millón de banderas rojas apareciendo en su mente.
La ira repentina tomó a Alya por sorpresa. "¿Qué?"
"¿Crees que esto es justo?"
Alya solo parpadeó.
"Señor. ¿Agreste ha decidido que Adrien puede tener novia y selecciona un puñado de candidatos para que él elija? ¿Qué es él, un príncipe?
Alya se encogió de hombros. "¡No sé cómo trabajan los ricos! Además, ¡creo que Adrien y Lila tienen verdadera química! Mejor que él y la Reina de Hielo.
"¿Te refieres a Kagami? Creo que tiene mejor química con ella que con Lila".
Alya se burló, "sin ofender, niña, pero no creo que puedas juzgar eso objetivamente".
Marinette frunció el ceño, el dolor y la traición pasaron por su cabeza antes de pisotearla. Tal vez no pueda. Pero la felicidad de Adrien sigue siendo importante para mí. Incluso si él no lo encuentra conmigo. Kagami no es tan reina del hielo como parece".
Alya se encogió de hombros. "Vale, puede que me equivoque. Realmente no la conozco tan bien. Tal vez ella también fue invitada".
Estoy seguro de que lo hizo. Siempre fue la cita profesional de Adrien para los eventos. Gabriel parece del tipo que construye relaciones públicas donde puede".
"Mmmm, tienes razón. Apuesto a que Chloe también está allí.
"Ella y Adrien han sido amigos desde siempre. No lo dudaría.
Comieron su almuerzo en silencio, ambos reflexionando sobre sus propios pensamientos.
"Adrien no se veía muy feliz". comentó Marinette.
Está seguro de que sólo está nervioso. Nunca ha tenido una novia antes".
"Derecha…"
Alya suspiró de nuevo. "No puedo evitar sentir que esto es realmente bueno para ti, Marinette. Esto podría ser lo que se necesita para superarlo. Has estado atrapado en Adrien por un tiempo ahora.
"Sí... tonto de mí".
"¡Vamos, no te estoy llamando tonto!" Ella protestó. "Solo… fue frustrante ver cómo te trababas la lengua por él. Quiero que seas feliz, Mari. Lo hago desesperadamente. Pero Adrien podría no ser eso para ti. Tómate un tiempo y luego... ¿quién sabe? Luka tiene sus ojos puestos en ti.
"Lo sé." dijo Marinette, algo de culpa apareciendo por el nombre. "Tal vez... tal vez algún día".
—
Después de la escuela, la limusina llegó para recogerlos. Adrien le dijo a su conductor que Nino, Alya y Marinette se unirían a él, mientras que Lila saltó para tomar un paseo.
Marinette se sentó a un lado de Adrien, mientras que Lila se sentó al otro.
"Entonces, ¿cómo es este concurso?" Preguntó Nino, conversacionalmente.
"Bueno", comenzó Lila, con un pequeño floreo confiado. "Señor. Agreste va a entrevistar a todos los concursantes. A todos se nos ha dado una asignación de cinco minutos para escribir un discurso sobre por qué seríamos un buen candidato. Por supuesto, tiene archivos de todos nosotros para que pueda ver los antecedentes, los ingresos familiares, los logros, las organizaciones benéficas, etc.
"¡Con todos tus logros, apuesto a que tienes una oportunidad real!" Chirrió Nino. "¿Cuántos concursantes hay?"
"No estoy seguro." Dijo Lila, con un honesto encogimiento de hombros.
"¿Tipo?" Nino sondeó a Adrien.
Adrien también se encogió de hombros, ya que había estado callado todo el viaje. "Yo… yo no tengo idea. Me lo dijeron esta mañana.
Marinette respiró hondo junto a él. ¿Él solo había tenido un día para pensar en esto? ¡Esto realmente fue completamente injusto!
Finalmente, llegaron a la mansión y fueron conducidos al interior.
Gabriel los recibió en el vestíbulo de entrada, tan frío y profesional como siempre. Levantó una ceja. "Creo que dije que podías invitar a un amigo para que te apoye", dijo, a modo de saludo.
"Esta es una… gran decisión. Quería gente a mi alrededor con opiniones en las que pudiera confiar".
Gabriel miró a los reunidos, sus ojos se detuvieron en Marinette por demasiado tiempo. "Entiendo. Ven ahora. Los otros llegarán pronto.
Los escoltaron al salón, donde había tres sillas en fila, luego una mesa con otras dos sillas detrás.
"Señorita Rossi, por favor tome asiento. Los otros dos concursantes estarán aquí en breve. Señor Lahiffe, ¿sería tan amable de traer más sillas para usted, señorita Cesaire y señorita Dupain-Cheng?
"Claro amigo, er, sí señor".
Gabriel tomó asiento en la mesa, mirando las tres carpetas sobre ella.
Adrien se sentó a regañadientes a su lado, mientras sus tres amigos se sentaban detrás de él.
Gabriel realmente no quería hacer esto. El emparejamiento no era algo que se sintiera digno de su tiempo. Sin embargo, consideró esto como matar tres pájaros de un tiro. 1) Haría que estas chicas dejaran de pelear por Adrien y de ser una vergüenza para la carrera de Adrien. 2) Tendría un ambiente controlado para que Adrien escogiera a una chica. Quería que su hijo eligiera a una chica que fuera digna de la familia. Después de todo, una vez que Emilie regresara, volverían a ser una familia. 3) Quienquiera que ganara o perdiera realmente no importaba. Obtendría un akuma o dos. Y eso hizo que todo esto valiera la pena.
Y con la sorpresa insospechada de Marinette Dupain-Cheng añadió, que sumó su 4to gol, para finalmente akumatizarla. Él no era estúpido. Sabía muy bien que Marinette tenía sentimientos por Adrien. Era notoriamente obvio. Pero como ella no había intentado invitarlo a salir, él no sintió la necesidad de invitarla. Tal vez debería haberlo hecho de todos modos.
Llegó la segunda concursante, como Chloe Bourgeois.
Llegando tarde, ¿somos Chloe? Alya se burló.
"No un poco." Chloe se pasó la cola de caballo por encima del hombro. "No puedes apresurar la perfección, ya sabes".
Gabriel arqueó una ceja y escribió algunas notas. "Por favor tome asiento. El concursante final debería estar aquí pronto".
Lila había tomado el asiento del medio y Chloe tomó el de su derecha.
Casi cuando su trasero golpeó la silla, el candidato final fue escoltado adentro. Kagami Tsurugi.
"Gracias por recibirme, Sr. Agreste". Ella se inclinó cortésmente.
"Gracias por atender." Él respondió, con frialdad. "Por favor tome asiento."
Mientras Marinette miraba a las tres chicas, su estómago se revolvió con sentimientos desagradables. Nervios, náuseas, pavor…
Y la idea apareció en su cabeza, hablando con una voz que se parecía mucho a la de Tikki. Pero ella simplemente lo rechazó con un movimiento de cabeza.
' Por favor, por favor, no seas avergonzado y trates de arruinar esto en un ataque de celos '. La voz de Alya se elevó, como el ángel en el otro hombro.
Tragó saliva y miró a Adrien.
Estaba encorvado en su asiento, su pierna rebotando rápidamente. No podía ver su rostro, pero su cuerpo hablaba de una ansiedad incontestable.
En lo que respecta a Marinette, Kagami era la única que merecía la oportunidad de estar con Adrien. Era honesta y trabajadora.
Pero Marinette temía no ser lo suficientemente cariñosa como para ayudar a Adrien.
Su voz se arrastró hasta su garganta, la resolución bombeando a través de sus venas, golpeando en sus oídos, sudando a través de sus palmas.
Esta fue una mala idea, una muy, muy mala idea—
"¿Disculpe, señor Agreste?" Ella espetó, justo cuando él estaba a punto de hablar.
Todos los ojos estaban puestos en ella, y sintió la inmensa presión de todo. Esto no era como ser Ladybug. Estos no eran akumas y ella no tenía autoridad en su ropa de civil.
"¿Sí, señorita Dupain-Cheng?" Gabriel la miró directamente, mirándola fijamente. Pero su tono no contenía juicio ni impaciencia. Sólo por curiosidad.
Esperaba, si no es demasiado tarde. ¿Puedo también tirar mi sombrero proverbial en el ring?
"¿Tú?"
"Sí. Por supuesto, sé que no fui invitado. Así que entiendo si es un no".
Gabriel se quedó callado un momento, pensando.
Adrien, sin embargo, la miraba fijamente, con la boca abierta y los ojos muy abiertos. Totalmente atónito.
"Adrien, ¿tienes alguna objeción a que la señorita Dupain-Cheng se una a los demás en la entrevista?"
Respiró, todo su cuerpo se relajó de un solo golpe. "No, no me importa en absoluto".
Tal vez fueron los nervios, pero Marinette podría haber jurado que parecía aliviado.
"Entonces no veo ningún problema. Por favor, trae tu silla con las demás".
"Gracias, señor", dijo humildemente.
Mientras se movía, Alya la agarró de la muñeca. "¡Prometiste!" ella siseó.
"Esto no es un ataque de rabia celosa". Marinette dijo tranquilamente. Se acercó y sentó su silla junto a Chloe, que parecía furiosa. Lila le dedicó una sonrisa que parecía competencia amistosa, pero resultó un poco engreída.
Kagami parecía fría y un poco traicionada.
Marinette miró significativamente a los otros concursantes horribles, tratando de enviar un mensaje.
Kagami, inteligente como era, pareció entenderlo y arqueó los labios en señal de perdón. Pero su expresión volvió a ser de acero. Esto era una competencia, y ella no perdería.
"Gracias, señoras, por venir hoy", comenzó Gabriel. "Les pregunté a cada uno de ustedes aquí, porque han mostrado interés en Adrien de una manera romántica. Las relaciones son importantes en nuestra línea de trabajo, pero la pareja de Adrien debe reflejar bien la marca. Por lo tanto, he organizado esta reunión. Cada uno tendrá cinco minutos para presentar por qué sería el candidato adecuado para este puesto. Tendré algo que decir, pero en última instancia, la decisión depende de Adrien".
Alya y Nino compartieron una mirada, ambos recibiendo la misma vibra de la situación.
Esta fue una entrevista de trabajo.
"Señorita Kagami Tsurugi, la palabra es suya".
Kagami se levantó. "Gracias, Sr. Agreste."
El rostro de Marinette palideció. Kagami tenía tarjetas de notas . Ella estaba preparada. ¡Probablemente se había preparado toda la semana para esto!
¿¡Que estaba haciendo ella!? Todo su discurso iba a ser su "Da-uh--eh, chico lindo, ¡amo a Adrien!" ¡Y ella sería una vergüenza para siempre! ¡Perdería todo el progreso que hizo con él! ¡Su amistad había terminado efectivamente!
Y a juzgar por la forma en que Alya la miraba, no era la única amistad que se esfumaba.
"Adrien", comenzó Kagami. "Tú y yo nos conocimos en un duelo. Un partido que se repitió una y otra vez porque estábamos en perfecta sincronía. Perfecto en ritmo y tiempo, y perfecto fuera de la lona también. Coincidimos en ingenio y calificaciones, y en talento y gracia. Nos emparejamos en familia, y fondo. Nuestra relación solo será buena para los dos y para nuestras familias. Busco la perfección en todo lo que hago. Cada tarea que encuentro, la completo perfectamente. Eres el único chico para mí, ya que has alcanzado un nivel de perfección sin igual en el hombre. Tú y yo nos conectamos y entendemos cosas que la mayoría de la gente no entiende. Buenos modales y relaciones públicas. Necesitas una chica que pueda soportar el escrutinio de los medios. Una chica como yo. Puedo ser examinado y no ceder ante la presión, porque no tengo defectos que mostrar. Juntos, tú y yo seremos perfectos. Ella asintió una vez y se sentó.
"Gracias, Kagami". Adrien dijo, sinceramente. Le gustaba Kagami, realmente le gustaba. Era agradable y se llevaban bien... pero la cantidad de veces que soltaba la palabra 'perfecto' era un poco inquietante. No se olvidó de Oni-chan. Y aunque los akumas no podían hacerse responsables de lo que decían, Kagami había anunciado que lo merecía porque era perfecto.
Pero seguramente, había más en ella que eso, ¿verdad?
Gabriel no dijo nada, solo escribió algunas notas. Luego, "Señorita Lila Rossi, es su turno".
Marinette observó a Lila ponerse de pie y asumir ese aire de confianza que solo se lograba al vivir en un estado de negación. "Adrien, como tú y yo hemos discutido antes, tú y yo hacemos una pareja maravillosa. Como puede ver en mi larga lista de logros, puede ver que tengo un amplio repertorio de habilidades, que van desde ayudar y poner en marcha obras de caridad, liderazgo, académicos y, por supuesto, diseño. Como hija de un diplomático, soy bien hablada y naturalmente carismática. Tengo una vasta red de conexiones, y le resultará un beneficio unirse a esa red. Aunque no dudo del poder del nombre Agreste, puedo ponerlo en contacto con personas con las que ha querido conectarse antes. Como artista, tengo buen ojo para el diseño y puedo prestarme al negocio familiar. Estoy familiarizado con el funcionamiento de la industria del modelaje, y por lo tanto no requieren entrenamiento para recogerlo. De hecho, puedo trabajar como enlace entre diferentes departamentos con mi amplio conjunto de habilidades. Además de todo esto, tú y yo tenemos buena química en el plató como modelos. Trabajamos bien juntos. Y seremos aún más increíbles juntos".
Marinette se habría quedado impresionada si no fuera porque todo eso era basura en llamas.
Pero a juzgar por la forma en que Alya le estaba dando el visto bueno, debe haber sonado algo convincente.
Adrien asintió, "Gracias Lila". Dijo claramente. Parecía muy profesional para alguien que acaba de mentir en su currículum. Pero extrañamente, parecía que Lila se estaba presentando más a su padre que a él.
Él ya sabía que no la iba a elegir, pero se preguntaba si ella estaba jugando con la conexión que tenía con su padre. Eso no sería bueno... a menos que su padre realmente lo dejara elegir.
Eso sería lo primero.
"La señorita Chloe Bourgeois. Tienes la palabra.
Chloe se puso de pie, con una mano en la cadera. —Adrikins —empezó ella.
Marinette no pudo evitar sonreír. Buena vieja Cloe.
"Tú y yo hemos sido amigos desde siempre. Sabes en qué se construyen las amistades, ¿verdad? Recuerdos. Y tú y yo hemos compartido mucho. Estuvimos allí el uno para el otro cuando nuestras madres se fueron. Sobrevivimos a eso juntos, así que ¿por qué no podemos hacer más? Por supuesto, no necesitas mi dinero o mi fama, pero hablando de negocios, somos geniales. Ya estamos genial. Adrien Agreste y Chloe Bourgeois, heredera y supermodelo, ¡la belleza encarnada!"
Eso realmente hizo reír a Adrien.
"Seremos la Brangelina moderna. ¡Tendremos clubs de fans! ¡Incluso podríamos hacer una película sobre nosotros!". Luego sonrió, una sonrisa que Marinette nunca antes había visto en su rostro. Uno que era realmente feliz. Y sabes, me gusta imaginar un futuro contigo. Creo que podría ser divertido".
Él le dirigió una sonrisa. "Gracias Clo".
Fue un sentimiento agradable. Pero nunca tuvo ningún sentimiento de romance hacia Chloe. Ella siempre fue una hermana para él. Y ella había comenzado a caer en desgracia con su trato a otros compañeros de clase. Simplemente no iba a suceder.
Marinette presionó sus palmas con fuerza en sus rodillas para evitar temblar. ¿Sería horrible retirarse ahora? ¿Sería eso grosero y poco profesional? ¿El Sr. Agreste le prohibiría a Adrien hablar con ella, ya que ella era tan rara? Tragó saliva, una, dos veces, pero aún tenía la garganta seca. ¿Por qué hizo ella esto?
Adrien miró a Marinette mientras su padre terminaba de escribir notas sobre Chloe. Kagami había sido algo predecible. No estaba siendo completamente honesta acerca de sus sentimientos con su padre en la habitación. Pero, ella tenía una racha competitiva en ella. Y... ella siempre quiso lo mejor.
Lila también era bastante predecible. Todo era mierda de caballo. Incluso si su padre lo compró y lo presionó para que la eligiera, ella no duraría porque no podría cumplir sus promesas.
Cloe. Chloe fue un poco refrescante. Informal, sin ver realmente la necesidad de elaborar. Se conocían desde siempre, como ella dijo.
Pero Marinette era un comodín. Dulce, amable, servicial, Ladybug todos los días. Por mucho que detestara este estúpido truco, tener a Marinette hablando para participar lo hizo un poco más tolerable. Pero… si decía algo como las otras chicas, no sabía si podría mirarla de la misma manera.
"Señorita Dupain-Cheng. Disculpe que no haya tenido tiempo de prepararse, pero tiene cinco minutos, al igual que los demás. Comienza ahora.
Ella se puso de pie. "Gracias, Sr. Agreste."
soy mariquita se dijo a sí misma. Yo lo valgo. Merezco mi oportunidad de ser feliz.
Adrien la observó mientras cerraba los ojos y respiraba. Cuando los abrió, lo miró directamente.
¿Sus ojos siempre fueron tan azules?
"Adrien", su voz era suave y tierna. Esto no era un lanzamiento, era un secreto, solo para él. "Te amo."
Adrien jadeó levemente, el calor se instaló en su pecho de inmediato.
"Cuando nos conocimos, te odiaba. Vi a este elegante niño rico que era amigo del otro niño rico malcriado, e hice una suposición. No entendí bien tu buena acción. Nunca fue la fama o la riqueza lo que me atrajo hacia ti.
"Fue ese momento bajo la lluvia. Te humillaste y confesaste que no sabías cómo hacer amigos. Me burlé de ti, fui grosero y tenías todas las razones para descartarme y nunca volver a hablarme. Pero no lo hiciste. Me ofreciste ese paraguas y te tomaste el tiempo de explicarte, porque querías ser mi amigo. Esa amabilidad fue una flecha en mi corazón, Adrien. Y cada vez que veo esa amabilidad, me encuentro cayendo una y otra vez". Su voz vaciló, ya que comenzó a perder el coraje.
Adrien solo le sonrió y asintió con la cabeza, desesperado por escuchar lo que tenía que decir.
No tengo mucho que ofrecerte. Soy hija de un panadero, lo que hace que me gane la vida modestamente. Los Dupain-Cheng son famosos, pero solo por nuestros macarons, y solo en París. Vengo con un suministro de dulces y carbohidratos para toda la vida", se rió. "Y um, puedo hacer cosas para ti. Sé que puedes conseguir la ropa que quieras, pero… puedo tejerte unas manoplas que combinen con esa bufanda azul que tienes. Y... sobre todo, puedo ofrecerte a mí. Mis oídos para escucharte cuando tengas un día difícil o cuando solo quieras hacer juegos de palabras. Mis ojos para observarte en tus torneos y apoyarte. Mis manos para jugar videojuegos contigo y masajear tus hombros después de una larga sesión de fotos. Mis brazos para abrazarte cuando te sientas solo. Y mis labios, para besarte y tranquilizarte cuando te sientas inadecuado." Luego tragó de nuevo, frunciendo las cejas. "Si… incluso si no me eliges. Todavía te ofrezco todo esto. Porque eres mi amigo, y me preocupo por ti. Quiero que seas feliz. Incluso si no es conmigo. Ella sonrió levemente y se sentó.
Por un momento, Adrien se quedó mirándola, luchando por respirar. Podía verla temblar. Quería correr hacia ella y abrazarla. Nunca antes había sentido un impulso tan fuerte, pero eso era lo que quería hacer.
"Marinette, yo... gracias..." finalmente logró decir.
"Señorita Dupain-Cheng", habló Gabriel. "Debo preguntar, eres un diseñador en ciernes, ¿correcto?"
"Sí, señor."
"¿La relación con mi hijo parece una oportunidad para ti en mi compañía?"
Adrien casi quiso gritar ante la acusación, pero se quedó callado.
Marinette pensó un momento y luego respondió. "Estoy aquí por Adrien. Si tengo la oportunidad de trabajar en la industria, sería increíble. Pero si salir con Adrien significaba sacrificar mi propia carrera… creo que valdría la pena".
"Gracias, por ser sincero".
"Sí, señor."
"Ahora bien", Gabriel se puso de pie. "Adrien y yo, y compañía", señaló a Alya y Nino, "pasaremos a la otra habitación para tomar una decisión. Por favor, permanezca sentado".
Cuando la puerta se cerró detrás de ellos, Marinette dejó escapar un suspiro de alivio y dejó caer el peso de sus hombros. Ella lo hizo. Ella le confesó a Adrien. Ella hizo su tiro. Ahora dependía de él.
—
En la otra habitación, Gabriel, Adrien, Alya y Nino se reunieron alrededor de un televisor que proyectaba el salón en la pantalla.
"¿Qué es esto?" preguntó Alya.
"La gente actúa diferente cuando piensa que los demás no están mirando". Respondió con sencillez y subió el volumen.
Chloe tiró y golpeó a Marinette en el brazo. "¿¡Qué mierda, Dupain-Cheng!?"
"¡Ay!" Marinette gritó, más por el shock que por el dolor.
"Sí, ¿en qué diablos estabas pensando?" preguntó Lila.
"Creí que eras mi amigo." mordió Kagami. "¿Cómo pudiste hacerme esto a mí?"
Marinette se frotó el brazo. "Yo solo… solo quería tener la oportunidad de decírselo. Antes de que fuera demasiado tarde.
Lila se burló. "Fue absolutamente patético. ¡Y arruinaste tu propia oportunidad! Dijiste 'No puedo ofrecer mucho, pero lo que puedo ofrecer, también puedo darlo como amigo'. ¿Por qué consideraría salir contigo entonces?
"¡Al menos tenía algo que ofrecer!" Marinette gritó de vuelta. "¡Tu currículum es todo mentiras!"
"¡No importa! Al Sr. Agreste le gusto más que a su propio hijo. No importa si Adrien sabe que estoy mintiendo, Gabriel no. Y papá mueve todos los hilos. Voy a ser la novia de Adrien.
"¡Vaya, vaya, vaya!" Cloe gritó. "¡De ninguna manera! ¡Gabriel me quiere más! ¿Quién no? ¡Tengo fama y notoriedad! ¡Y yo soy más bonita!
"¡Para!" gritó Marinette, genuinamente molesta. "¡Deja de hablar de Adrien como si fuera un premio por ganar! ¡Él no es un trofeo o un pedazo de carne! ¡Es un hombre inteligente, amable y cariñoso! ¡Se merece a alguien que lo ame!".
"¡Lo amo mucho!" Chloe gritó indignada.
"¡Lo amo más!" intervino Kagami. Y Marinette tiene razón. el es una persona Necesita a alguien de su nivel que entienda su vida. Marinette... esa persona no eres tú. No entiendes bajo qué tipo de presión está. No entiendes las familias estrictas y las altas expectativas… no has hecho nada para merecerlo".
Marinette cerró los ojos, tratando de no llorar. Eso fue un golpe bajo.
Lila se rió entre dientes. "¿Viste la mirada en el rostro de Alya cuando te invitaste aquí? ¡Estaba tan enojada! Probablemente porque está tan harta de que te avergüences.
"Fue realmente vergonzoso". agregó Cloe. "Tú súper no perteneces aquí arriba. Me sorprendería si Adrien volviera a hablar contigo después de ese truco.
Lila sonrió ante eso. "¡Oye, buen trabajo! Hiciste mi trabajo por tu cuenta. Te lo dije, ¿no? Perderías a todos tus amigos, y Adrien sería mío. Los celos realmente son una pequeña perra, ¿no es así?
Marinette cerró los ojos con fuerza, meciéndose en su silla y rogándose a sí misma que no llorara. Todo esto había sido un gran error.
"Entonces, ¿qué vas a hacer ahora?" preguntó Lila, burlándose de ella más. "Espero que cambies de escuela. Sería mucho más fácil. Pero si te quedas, estoy seguro de que sería aún más divertido. Después de todo, ahora tengo todas las cartas. ¡Nadie te volverá a escuchar!".
La boca de Alya se abrió tan pronto como Lila se fue. "¿Ella... ella mintió?"
"Ella ha mentido todo este tiempo". Adrien proporcionó suavemente. Marinette trató de decírtelo. Supongo... no me di cuenta de por qué no le creíste.
Gabriel silenció la televisión. "Bien. Tenemos cuatro candidatas, cada una con algún beneficio… excepto la señorita Rossi, obviamente". Cerró su archivo. "Pero, fiel a mi palabra, la decisión final es tuya".
"Sé a quién quiero".
"¿Tan pronto?"
"Es fácil."
Gabriel asintió. "Entonces regresaremos".
—
Marinette respiró y se secó las mejillas con un pañuelo para secarse las lágrimas. Si así era como terminaba, ella permanecería digna.
La puerta se abrió y los demás regresaron. Adrien parecía nervioso de nuevo, pero mucho más optimista.
"Adrien ha tomado una decisión". Y Gabriel le hizo un gesto para que avanzara.
Adrián tragó saliva. "Lamento que todos ustedes tuvieran que involucrarse en esto. Me duele que hoy tenga que romper corazones. Eso es algo que nunca quise hacer. Kagami... lo siento mucho. Disfruté la diversión que tuvimos juntos y espero que todavía podamos ser amigos".
"Por supuesto, Adrián. Entiendo." Parecía un poco triste, pero ocultó bien la angustia, por el bien de Adrien.
"Chloe, tienes razón. Somos amigos desde hace mucho tiempo. Y te amo, pero como una hermana".
Cloe hizo un puchero. "Ugh, ahórrate tu ridículo discurso de lástima".
Lila se enderezó un poco más, su sonrisa de suficiencia emergió cuando Adrien se giró para mirar a Marinette.
Marinette lo miró, preparándose para el rechazo que vendría.
"Marinette... yo..." se acercó. "Estoy sin palabras. ¡Yo… estoy tan contenta de que hayas hablado!" Y corrió hacia ella, levantándola de la silla y aplastándola contra él. "Gracias. Por verme.
Ella parpadeó hacia él, todavía en estado de shock. "¿Eso... significa que gané?"
"¡Sí!" Él se rió, exasperado. "¡Yo te elijo!"
Marinette tembló antes de aferrarse a él con fuerza y sollozar. "¡Estas son lágrimas de felicidad!" ella declaró.
Él se rió de ella y simplemente la apretó con fuerza.
"Um, no pretendo interrumpir." Dijo Lila, obviamente interrumpiendo. "Pero Adrien, creo que debería advertirte. Marinette no es tan inocente como crees…
"Oh, cállate Lila". Alya escupió. "Nadie está comprando tu mierda".
Lila la miró boquiabierta. "¡Pero-Pero Alya! ¡Ya sabes cómo se pone Marinette!
"Sí, ella no es tan mala como tú. No tenía que mentir para hacer amigos. Y ciertamente se preocupa por Adrien más que tú.
"¿Qué? Yo nunca-"
"Amigo, hay una cámara. Lo vimos todo".
Gabriel se cernía sobre Lila. "'Papá mueve los hilos' ¿hmm?"
"¿Es... una forma de hablar?"
Gabriel no estaba impresionado. "Sal de mi casa. Si toca a mi hijo oa la señorita Dupain-Cheng, no dudaré en solicitar una orden de restricción. Considera esta tu única advertencia.
Furiosa, Lila salió de la mansión.
Kagami se acercó a la pareja. "Perdón por lo que dije, Marinette. Supongo que realmente te lo mereces.
Marinette se secó las mejillas. "Te perdono Kagami. Yo tambien lo siento."
"No tienes nada por qué disculparte. Lo amas, y mereces poder decírselo. Los veré por aquí. Se inclinó ante ellos y luego ante el señor Agreste. "Gracias por la oportunidad."
Entonces Chloe se quedó. Ella los miró, y 'hmph'ed. "No lo apruebo. Pero... mientras seas feliz.
"Soy." Adrián confesó.
"¿Y Dup-Marinette?"
"¿Sí, Cloe?"
"Rompe su corazón y arruinaré tu vida".
"Señalado."
"Bueno. Ahora, me voy a comprar mis problemas. Incluso podría elegir algunas cosas para ti, Marinette, ahora que estás saliendo con el hijo de un magnate de la moda, tienes que lucir presentable".
"Eso es muy amable de tu parte, Chloe". Marinette sonrió suavemente.
"Por supuesto, soy el más amable". Y ella también se fue.
"Ahora", dijo Gabriel. "Señorita Dupain-Cheng, por favor dígales a sus padres que esperen una llamada de Nathalie en los próximos días. Organizaremos un momento para que todos nos sentemos a cenar y discutamos esta relación en el futuro".
Marinette asintió, tratando de recomponerse. "Sí señor, absolutamente".
"Y, con respecto a la pregunta que hice. No espero que dejes de diseñar. De hecho, tal vez pueda darle una revisión de la cartera, cuando esté listo".
"Eso sería maravilloso, señor".
"Ahora que eso está resuelto, debo volver al trabajo. Adrien, tus amigos pueden quedarse a cenar, pero deben irse antes de las 8:00. ¿Acordado?"
"Sí señor, gracias".
Asintió una vez y luego se dirigió a su oficina.
Alya miró a Marinette a los ojos y se encogió de hombros avergonzada. "Mari yo… no sé qué decir. ¡Me alegro de que me hayas ignorado!"
Marinette ofreció una sonrisa. "Está bien Alya".
"No, no, no lo es. Lila nos estafó a todos durante mucho tiempo. ¿Qué fue eso que dijo? '¿Todos tus amigos te dejarán y Adrien será mío?'"
"Sí, fue una amenaza que hizo contra mí, la primera vez que la llamé".
"Dios, soy tan idiota. Lo pensé dos segundos después de que ella admitiera haber mentido sobre sus logros y vi sus historias. ¡No tengo idea de cómo estaba tan ciego!"
"Bueno, tenemos algo de control de daños que hacer", dijo Adrien.
"No, eh". Alya lo golpeó en el pecho. "Tenemos control de daños que hacer. ¡Ustedes dos, tengan una hermosa primera cita!"
Marinette parpadeó, un rubor corriendo por su rostro. "¡Oh!"
El brazo de Adrien se enganchó alrededor de su cintura. Pasaremos el tiempo de alguna manera. ¿Videojuegos?"
Marinette respiró. Todo estuvo bien. Esto fue genial. "Sí, eso suena divertido".
"¡Los veo luego, amigos!"
—
En la habitación de Adrien, Marinette se sentó en el sofá mientras Adrien echaba un vistazo a su colección de videojuegos. "Veamos, sé que te gusta Ultima Mecha Strike, pero quiero ganar un poco".
"Oh, ¿no dejarás que la chica gane en la primera cita?"
"Eres lindo, pero no eres tan lindo".
Ella se rió, su rostro se iluminó con un sonrojo. ¡Adrien pensó que era linda! "¡Brusco!"
"Sí, olvidé que soy malo para las bromas".
"No eres malo en…" A la chica que amo tampoco le gustan misbromas . "Vaya. Oh Dios mío."
"¿Qué?" Adrien regresó, escuchando el pánico en su voz.
Marinette se puso de pie, preparándose para irse. "Adrien, yo... yo no puedo hacer esto".
Parpadeó. " ¿Qué? "
"Tú no me amas".
"Bueno…" se frotó la nuca, torpemente. "No… no del todo. Pero realmente me gustas, y sé que si paso un poco más de tiempo contigo…
"Pero, ¿qué pasa con la chica de la que estás enamorado?"
Se marchitó, al instante. "Vaya. Derecha."
"¡Tenemos que rehacer este concurso o algo así! ¡Ella tiene que saber! ¡Ella también necesita una oportunidad justa!"
Adrián le sonrió. Incluso por el bien de su propio corazón, todavía estaba pensando en los demás. "No, Marinette, ese barco ha zarpado. Me aferré a ella... pero ella me rechazó. Mucho en realidad.
El corazón de Marinette sufría por él. Ella se acercó y tomó su mano. "¿Adrien?"
Sacudió la cabeza. "Durante un tiempo creí que cualquier otro romance era serle infiel. Pero, ¿cómo puedes serle infiel a alguien con quien no estás en una relación? Es estúpido."
"No, no, no lo es". Ella insistió. "Sé exactamente cómo te sientes".
"Tú ... no renunciaste a alguien que me esperaba, ¿verdad?"
"Rechacé a alguien, pero no lo amaba. Le tenía cariño, y es un gran amigo… pero no lo amaba".
"Oh... ¿Luka?"
"Oh… vaya, él también. y Nathaniel. Caramba, soy un rompecorazones".
Él se rió. "No Mari, creo que eres muy adorable". Él besó su frente. "No te preocupes por esa otra chica, ¿de acuerdo?"
"Pero como… me voy a preocupar. ¿Puedes decirme quién?
Hizo un puchero. "No te rías".
"Nunca."
"Está bien... es Ladybug".
Ella parpadeó. "…¿Mariquita?"
"Sé que suena loco, pero… ella me ha salvado un par de veces, así que…"
Adrien nunca le había confesado a Ladybug. A menos que lo haya hecho como Aspik y ella no lo recordara, pero sabe que le habría dicho que sí. Ladybug había obtenido muchas confesiones, pero no varias de la misma persona, excepto por—
No.
De ninguna manera.
Marinette se alejó de él, con las manos sobre su boca.
"Oh, genial, ahora piensas que soy una especie de bicho raro, ¿verdad?"
Ella negó con la cabeza, pero no quitó las manos.
"¿Entonces que es eso?"
Marinette era la nueva guardiana. Solo ella tenía la responsabilidad del Miraculous. Pero este pensamiento seguía atormentando la parte posterior de su cabeza. Algún día, tendrían que revelar sus identidades el uno al otro. Necesitaría saber quién era en caso de emergencia.
Parecía que hoy era ese día.
Apartó las manos y las apoyó en el corazón. Luego lo bebió, dejando que las piezas se juntaran.
"Oh, gatito".
Los ojos de Adrien se agrandaron. "¿Qué-?"
"Siento mucho haberte lastimado. Tú eras el otro chico.
Él se atragantó con la respiración y luego dio un paso tambaleante hacia ella. "¿Mi señora?"
"Sí, gatita. Estoy aquí. Me encontraste."
Cerró la distancia, aplastando su cuerpo contra el suyo una vez más, esta vez con sus propias lágrimas. "¡Sabía que había elegido bien! ¡Lo sabía!"
"¡Ay charla! ¡Eres tu! ¡Estoy tan contenta de que seas tú!"
"¡Mi señora!" Presionó sus labios contra su rostro una y otra vez, sin importarle si se conectaba a su boca o no. Solo quería colmarla de afecto. "¡Te amo! ¡Te amo, te amo, te amo!"
"Adri-" Sus palabras fueron interrumpidas por sus besos y sus risitas. "Yo también te amo, niño tonto".
Él ahuecó sus mejillas abrazándola como si fuera preciosa y delicada. "Tenemos que ser parejos. Puedo ofrecerte mi billetera, para pagar la escuela y cualquier material que puedas desear. Ofrezco mis ojos para beber en tu rostro perfecto todos los días. Mis oídos para escuchar tu adorable risa ante mis perfectos juegos de palabras".
Ella se rió.
"¡Como eso! Y ofrezco mis manos, para abrazarte cuando estés solo. ¡Y mis labios para besarte sin sentido cuando necesites un descanso de todo tu estrés! Él la besó profundamente, haciéndola confusa. "¡Y ofrezco mis abdominales, para llevarte a través del umbral cuando estemos casados!"
"Te levantas con las piernas, Dingus".
"Entonces, ¿para qué puedo ofrecer mis abdominales?"
"Esos son solo para mí", bromeó ella, pasando una mano por su camisa.
"Voy a besarte de nuevo".
"No voy a detenerte".
La empujó para que se acostara en el sofá, mientras se inclinaba sobre ella y la besaba de nuevo. Sus dedos se sumergieron en su cabello mientras los de él la acunaban. "Mi señora", susurró.
"Mi príncipe."
Una explosión sacudió la ciudad y separó a los dos adolescentes. Se miraron y luego se rieron.
"Está bien, cuatro macarons dicen que es Lila".
"Hmm... cinco dice que es Chloe".
Una tercera voz, perteneciente a Plagg, habló. "¿Y si es Kagami?"
"Un empate." Dijeron juntos.
"Oh, ¿un beso más antes de irnos, mi amor?" Adrián sonrió.
Marinette puso los ojos en blanco. ¡ Le puso los ojos en blanco a Adrien ! "Oh, supongo que uno no haría daño". Ella lo besó suavemente. "Puedes tener más después".
" besos Gracias! "
"¡Besos revocados!"
"¡¡Nooooo!!"