Hola! ((asterisco + guión + asterisco)) Aquí de nuevo con otro capitulo! Que no será cuando aparezca Kagome, pero en el próximo si… O o ya lo hice así que espérenlo muchas gracias por dejar sus reviews TuT me hacen realmente feliz xD… Gracias a:
Pretear-Princess
Dakota Ikeda
Han-ko
X0x me tengo que ir… me acosan en el msn xDU
Capitulo 3: En Osaka
Dejo el auto frente a la gran colina que se podía subir gracias a las escaleras de roca, nunca le llego a la mente que ese lugar seria un templo y el ver uno le traía gran impresión…
- Inuyasha… es un templo.- dijo Miroku como si hubiera descubierto algo que su amigo no.
- Lo se.- respondió en su típico tono que parecía estar molesto, se apoyo del carro mirando la escalera. – Hace tiempo que no vengo…- susurro captando la atención de Miroku.
- ¿Cuántas veces viniste¿Cómo es¿Quiénes viven¿Qué sentiste¿Posee una leyenda?- interrogo su amigo demasiado de interesado tanto que invadía el espacio de Inuyasha que tuvo que retroceder un poco para no sentirse tan incomodo por la cercanía de Miroku.
- Aléjate o me veré obligado a golpearte.- le ordeno lanzándole otra mirada asesina que provoco que Miroku retrocediera dos grandes pasos sin dejar de mirarlo fijamente y de forma interrogante esperando una respuesta a sus preguntas. – Idiota…- recalco por la actitud de su amigo. -…vine cuando era más pequeño… aquí vive el anciano Myoga… creo que cuando vine tenia 6 años… en ese entonces su hija estaba embarazada… eran felices…- comenzó a relatar manteniendo su posición firme. – Y bueno… es un bonito lugar… muy pacifico si me preguntas… rodeado de la naturaleza y si… posee una leyenda…-
- ¡EN SERIO!- pregunto Miroku acercándose a Inuyasha mirándolo esperando que le contara mas… y sus ojos casi destellaban de la emoción.
- Eh…si.- respondió alejándose de su amigo que ya comenzaba a colmarle la paciencia por la actitud tan estúpida que estaba tomando. – Se dice que aquí se encontraba la aldea donde vivió la sacerdotisa que protegió una perla perseguida codiciada por demonios y humanos por el gran poder que poseía…- relato observando la entrada al templo sin percatarse de la miradas emocionadas que le lanzaba Miroku. -…entre esos demonios conoció a un hanyou… y bueno se enamoraron…- cerro los ojos haciendo una mueca de desinterés por ese tema del "enamoramiento".
- ¿Y que pasó?- consulto Miroku al que ahora si le vio los ojos de cachorritos que le imploraban por más información.
- Eh… por el engaño de un demonio… la sacerdotisa clavo al hanyou a un árbol que ahora se le conoce como el Goshiboku…- cruzo los brazos tomando una actitud seria. -…y murió estando herida…- volteo su cabeza para mirar a su amigo esperando una expresión de satisfacción después de haber oído la historia, pero se topo con un chico que prácticamente casi lloraba por la triste historia.
- Pobres.- musito conteniendo las lágrimas que se asomaban en sus ojos.
- Idiota.-
- Solo bromeo.- sonrió calmado dándole una pequeña palmada sobre el hombro frustrando a Inuyasha.
- He cambiado de opinión sobre ti.- le dijo caminando hacia el templo. – No creo que eres el mismo idiota de antes.- agrego colocando sobre un escalón una pierna deteniéndose a esperar un comentario de su amigo.
- ¿No lo crees?- repitió extrañado a lo que Inuyasha negó la cabeza. - ¿Y que piensas de mi?-
- Eres muchísimo mas idiota que antes.- respondió volteándose para continuar con su camino.
- Ah.- Miroku se quedo helado por tal respuesta y en sus adentros se llamo tonto creyendo que Inuyasha diría algo bueno de el, sacudió su cabeza y siguió a su amigo que ya llevaba cinco escalones de ventaja. - ¡Inuyasha eso me ofendió!-
Terminando de subir las escaleras había un camino de piedra que dirigía directamente a un viejo árbol que se movía con la brisa del viento haciendo sonidos que se escuchaban desde el punto que estaba Inuyasha. Fijo sus ojos a los lados para toparse con árboles de tronco fino…
- I…nu…ya…sha…- dijo Miroku jadeante por el cansado recorrido de las escaleras.
- Imbécil… te cansas muy rápido.- mofo divertido Inuyasha dibujando una sonrisa en su rostro.
- ¡Tu siempre fuiste muy bueno en deportes!- se defendió Miroku algo ofendido.
- Tienes razón… solo te dedicabas al coqueteo con otras chicas…- dijo Inuyasha caminando por el camino de piedra seguido por Miroku que asintió aprobando el comentario. – Me sorprende que hayas tomado un interés en la doctora… em… ¿Sango?- agrego tocando un tema que en el día anterior Miroku toco… hablando de esa doctora de una forma extraña.
- ¿Por qué te sorprende?- consulto extrañado. – Poseo mi corazoncito, jeje…- rió un poco hasta que se detuvo cuando Inuyasha lo hizo.
Finalmente llegaron frente a aquel árbol que continuaba meciéndose al son del viento que movía libremente el cabello de Inuyasha quien fijo sus ojos en aquel árbol… ese era el Goshinboku donde la bestia fue clavada por la sacerdotisa… el punto donde se separaron… aunque no lo admitía aquel árbol llenaba su alma con mucha calma y le recordaba los únicos momentos felices que vivió en su vida.
- Inuyasha…- llamo una voz anciana a su lado trayéndolo de vuelta al mundo.
- ¿Eh…?- musito algo turbado hasta que cayo en cuenta de quien tenia frente a el. - ¡Anciano Myoga!- dijo acercándose a el sin evitar sonreír al encontrarse con ese señor que estimaba mucho pues era otra de esas personas que acepto su diferencia. - ¿Cómo esta?-
- Muy bien.- respondió dibujando una sonrisa en sus labios arrugados. - ¿Quién es ese?- pregunto señalando con su bastón a Miroku que sonrió al ser visto.
- Uhm… soy Miroku Genda… el mejor amigo de Inuyasha, es un placer conocerlo…- respondió haciendo la reverencia de cortesía como era debida.
- Ya veo… pasen… pasen… mi nieta no esta…- comento caminando hacia la casa seguidos por los dos jóvenes.
- Por cierto… Myoga¿Cómo sigue tu hija?- pregunto Inuyasha despreocupado pensando que probablemente ella se encontraba dentro de la casa preparando algo de comer…sin esperar tal noticia…
- Ah… supongo que esta bien… después de todo esta con Kami…- respondió con total calma incomodando a Inuyasha que creyó estar siendo imprudente.
- L-Lo siento.- se disculpo…
- No te preocupes… ya supere aquella perdida… tengo a mi querida nieta conmigo…- dijo.
- Me disculpo de ante-mano si lo ofendo señor, pero…- se entrometió Miroku observando desde atrás al anciano. - ¿Es acaso su nieta una mujer bella?-
- Ohhhh… si lo es…- respondió orgulloso el anciano ignorando la escena que se presenciaba tras el… - Es muy hermosa y además posee un gran corazón…- agrego…
Dentro de la casa, dejaron los zapatos en la entrada y se aproximaron al comedor donde se sentaron a hablar con más calma.
- Señor Myoga… Inuyasha necesita reposo y un cambio de vendaje todos los días…- le dijo Miroku que poseía un ojo cerrado y lastimado manteniendo una pose firme y seria como el doctor que era…
- Yo me encargare de los vendajes…- dijo Inuyasha tomando la cajita que Miroku coloco sobre la mesa mientras hablaba. – No quiero causar molestias…-
- ¿Estas seguro, Inuyasha?- consulto Miroku preocupado recibiendo una mirada asesina.
- ¿Te estas burlando de mi?- pregunto lanzándole las acostumbradas miradas de hielo. - ¿Quieres otro golpe?-
- No… hablo en serio…- respondió nervioso.
- Jaja… no te preocupes Inuyasha… aquí no causas molestias…- dijo el anciano observando divertido la escena.
- ¿Cree que sea conveniente que su nieta me vea?- consulto Inuyasha refiriéndose al tema de que sea observado, sorprendiendo a los demás…
- Yo…- se detuvo sin saber que responder… - ¿Qué piensas tú?- le pregunto.
- Tengo miedo… de…- se quedo callado cerrando el puño con fuerza de solo recordar lo que sucedió antes de que Naraku lo secuestrara.
- Oí el incidente con Kikyo…- comento el anciano. – Pero… debo de recordarte que no fue tu culpa lo que sucedió…-
- ¿Qué sucedió?- consulto Miroku preocupado y algo desorientado.
- Cállate Miroku… no estoy de humor para contarte…- se levanto tomando camino hacia las escaleras. - Gracias anciano Myoga… por aceptarme a vivir aquí…-
- No te preocupes… lo hago con mucho gusto.- sonrió mirándolo subir las escaleras desde la mesa dejando escapar un suspiro…
Miroku se quedo pensativo intentando formular una respuesta a la pregunta que no le quisieron responder… había tantas cosas que aun debía de saber en el tiempo que estuvo sin saber de Inuyasha…
- A decir verdad…- irrumpió Myoga en los pensamientos del joven doctor que lo miro con urgencia con la espera de algo que le diera una pista. -…tengo miedo de cómo mi nieta reaccione al verlo.- concluyo levantándose pesadamente de su silla.
- Pero¿Qué sucedió?- repitió con insistencia.
- Solo Inuyasha podría decirte, no es mi vida de la que te estaría contando.- respondió seriamente, volteo a verlo y sonrió. - ¿Quieres algo de tomar, un te, café?- pregunto…
Arriba en el cuarto en que le toco dormir cuando visito esta casa observaba a través de la ventana sentando sobre la cama el patio trasero donde se encontraba algunas cuerdas amarradas de dos postes en posiciones diferentes, seguramente allí se tendía la ropa…
- No permitiré que se repita lo que sucedió…- bajo la cabeza, mortificado por sus recuerdos… todo lo malo de su vida provenía de su apariencia… - ¿Por qué tuve que nacer así?- se pregunto molesto contra si mismo observando sus manos angustiado.
Continuara…
. . Mier… coles… apenas me doe cuenta de que no puedo hacer lo que quiero hacer… AH! Quiero poner caras! actúo como una maldita niña sin expresión O óUUUU y Quero ponerlas T0T… Veamos¿Cuál era el tema que escogí para hoe? Creo que era… em… wa… lo olvide así que inventare uno u ú… bueno yo… diré que soe algo repetitiva en mis fics xDUuUu me refiero al sufrimiento de los personajes lo repito una y otra fuckng vez hasta cansarme así que intentare no hacer lo mismo esta vez o.o ok? Ya mucho… me voe . .U aios…. Ah no esperen! xD acabo de recordar lo que quería decir… bueno veamos… o.o Soy Kagome-fan… pero no significa que no me agrade Kikyo…. . no me gusta hacer de Kikyo una persona mala xDu pero si tengo que hacerlo lo haré xDUuUu . . es solo una aclaración… tengo experiencia con otras personas que me han pedido que la hagan sufrir a muerte X0xUUU xD ahora si aios!
Lucid K. Nightmare