Por Duck-Pat-05.
Opinión del escritor: ¡Cuac!
En Angel island luego de muchos años los hombres y mujeres se separaron por conflictos que tenían entre sí, quedaron familias separadas y no les permiten verse. Ocurrirá que una chica decide ir en busca de su hermano que no conoció desde que nació y ahí comienza su aventura.
Una eriza corre por la lluvia cubriéndose con una capa violeta, respiraba entrecortadamente y se apresuraba para seguir a dos equidnas que al parecer se marchaban.
¡Por favor! ¡Esperen! ¡Vuelvan!
¿Qué quieres?
Mi otro hijo ¿dónde está?
Ninguno respondía nada y se miraban.
Vi que se lo llevaron.- dijo enfurecida.- ¿¡Dónde está mi hijo!
Nos quedamos con él, será ahora parte de nuestro ejército.
¡¿Pero por qué! ¿¡Por qué hacen esto!
El otro equidna se preparó para hablar.
Habrá cambios en esta isla y decidimos separar los hombres de las mujeres, será un nuevo plan de vida que iniciaremos.
Él solo tiene nueve años, necesita de mí… por favor.- dijo sin voz.- No nos separen.
Los siento, solo seguimos órdenes.
Le daremos lo que sea necesario y nos ocuparemos de criarlo.
¡Es mi hijo no de ustedes!
Señora cálmese no es el único niño que arrebatamos hoy.
Deje de hablar y denme a mi hijo.- apretó sus dientes y sus puños.
Ellos la miraban pero ningún movimiento, lo único que se movía eran las gotas de lluvia en sus caras.
Como un acto involuntario ella sintió un impulso que la hizo saltar hacia uno de los equidnas y tratar de golpearlo… el otro le pegó con el mango de su lanza y se fueron de allí, dejándola sola en medio de la nada bajo la lluvia.
No estaba tan golpeada de la cabeza como para levantarse pero si algo le dolía en la cabeza eran sus pensamientos. Porque sabía que tendría un hijo pronto, temía que fuera varón y volvieran por él, el viento la estremeció y sus lágrimas se escaparon de sus ojos.
Luego de tres meses nació su segundo hijo, para su alegría era niña y los equidnas no tuvieron que llevarla. Su esposo se había ido al otro bando y su hijo también y a pesar de que los extrañaba mucho no impedían que criara bien a su hija a la que llamó…
- Eres hermosa y eres igual a mí, pero esos ojos son de tu padre. ¿Cómo te llamaré?... mmmmh. Creo que será Miona, si ese me gusta.
Una linda eriza marrón claro con ojos rojos como cualquier otra en la isla pero para la madre era mucho más, y llegará a ser mucho más a medida que pasen los años ¿Sería esta la niña que arreglaría esta grieta que separa de los hombres de las mujeres? No lo se… pero esos ojos son mezcla de valentía y coraje que no se veía en una niña muy a diario.
Pasaron años y años, todos fueron creciendo como los capullos de las plantas que amanecen cada día soleado.
En la parte de la isla derecha habitan mujeres a pesar de que no esté su familia completa quedaron sus hijas. Tenían buena cosecha, animales silvestres y un hermoso río que fluía de una forma que parecían diamantes.
Hoy era un día especial que festejaban cada año agradeciéndole al viento, al fuego, tierra y agua con un baile tradicional.
Las chicas usaban lindos vestidos blancos con un solo color de manchas en ellos y pañuelos en sus cabezas.
Era el día más esperado en el que ellas se divertían bailando la danza de los cuatro elementos.
En una pequeña colina en donde se ponía el sol había una chica alejada de las demás, sentada allí como si la soledad le estuviera haciendo compañía mientras escuchara lo que decía el viento. Miraba el sol con ese color dorado tan majestosos como los colores que lleva una reina.
Era muy bonita y su cabello lucía más dorado con el resplandor de esa bola brillante, en us mano derecha sostenía algo de metal era un collar brillante pero faltaba la mitad, era un círculo partido.
Miraba triste el rosado cielo con esos ojos rojos color lava que al lado de las cerezas no son nada.
En la aldea ya iban a comenzar el festival y las chicas se preparaban para su baila, sus familias esperaban emocionadas. La costumbre es que las mayores sean las que bailen como demostración de su desempeño a través de los años y que ya son mujeres.
Niñas bailen bien.- les decía una jirafa que era su profesora.
Édion.- fue hacia una chica.- ¿Has visto a Miona?
No profesora, no la bi en todo el día.
Ay, esa niña.- dijo chocando su mano contra su cara.- La pusimos delante de todo y no aparece… debemos comenzar sin ella. ¡A sus lugares, todas a sus lugares!
Prendían las antorchas ya que estaba obscureciendo, esta chica tomaba una cajita que estaba a su lado. Unas mujeres tocaban música con sus instrumentos como el comienzo.
Édion, ocupa el lugar de Miona.
Pero, es su danza.
Hazlo por la gente.
Esta profesora estaba muy, muy enojada por la llegada tarde de esta chica, cruzada de brazos murmuraba.
Es la segunda vez en dos años que se escapa, pero será la última.
La eriza de cabello rubio abrió la cajita y sacó de ella una paloma blanca.
Las chicas salieron a bailar y el público aplaudía, dando vueltas y moviendo todo su cuerpo con alegría y entusiasmo. Las cuatro que estaban a delante, bailaba su danza del elemento.
La primera movía sus manos para arriba y luego hacía vueltas y estiraba sus manos y danzaba. Ese era el fuego. La segunda apoyó su mano contra las otras así de frente y las elevaba lentamente hacia arriba abriendo sus dedos y haciendo una danza. Ese era la tierra (árbol)
La eriza color marrón claro que estaba en la colina miró a la paloma con cara triste y desinteresada. La paloma tenía un mensaje en la patita.
Vuela y encuentra ayuda… alguien que pare con estas diferencias que tenemos.
Mandó a volar la palomita y encaminó su camino hacia el sol.
La anteúltima chica terminaba de bailar su danza del viento y venía la del agua. Émion corrió desde atrás hacia delante a bailar la danza del agua que le pertenecía a Miona.
Nadie notó la diferencia y aplaudían excepto una mujer de piel naranja clara con capucha violeta que miraba triste el lugar en que debía estar Miona.
Ya era tarde y las flores serraban sus pétalos como si fuera una orden de la luna.
El hermoso paisaje mantenía su belleza pero a en la obscuridad.
Esta mujer con capucha corría yendo hacia esta eriza rubia. Con mirada triste la contemplaba y ella sabiendo que estaba atrás igual no se dio vuelta.
Estoy bien.- dijo la chica.
Faltaste al festival.
No creo que halla que festejar un día así.
Oh, ¿qué pasa contigo Miona?
No quería bailar ene esta fecha. ¿U olvidas qué pasó en esta fecha?
Se sentó a su lado.
Entiendo que estés triste, pero no podemos hacer nada.
¿Por qué, mamá? ¿Por qué se los llevaron?
Nunca entendí bien por qué, hija.
Se que nunca lo conocí pero, no tenía derecho a quitarnos nuestros hermanos y padres.
Créeme, a mí también me costó. Pero la vida continúa. Pero por suerte tengo una hija que me haga compañía.- puso un brazo alrededor de su cuello
Cuéntame como era papá.- dijo más sonriente.
Siempre la misma pregunta, ¿Cómo es papá? ¿cómo era mi hermano? …
Dime.
A ver, tu padre era muy apuesto y buena persona. Tiene ojos rojos como los tuyos y tiene ese carácter terco que tú heredaste. Jejeje.
¿Y mi hermano?
Salió como tu padre pero con mis ojos y…
¿Cuál era su nombre?
Tú lo sabes ¿para qué me lo vuelves a preguntar?
Anda.
Bueno se llamaba Kionijiro.
Quedaron un momento en silencio mirando las estrellas que aparecían acompañando la luna
¿Cuándo volveremos a verlos?
Eso no sucederá.- cambió de cara.
¿Por qué separaron hombres y mujeres?
Porque su manera de pensar era otra, pero no estoy muy segura de que fuera por eso.
- Alguien debería buscar la forma de unirlos.
Pero eso sería difícil, se necesita a alguien con mucho valor y mucho corazón para llegar al otro lado de la isla. Hay una leyenda que dice que los hombres se apoderaron de un templo donde se escondió algo muy importante que aún no ha sido abierto… pero se rumora que es la respuesta para acabar con esta guerra. Pero es solo una leyenda y hasta ahora nada ha pasado.
-Espero que alguien lo descubra pronto.- dijo Miona.
- Trata de no vivir tanto en sueños Miona, si no resulta como soñaste luego te decepcionas.
-Siempre me dices eso.
Miró las estrellas y una estrella fugas pasó delante de sus ojos. El viento movía los sauces y las flores volaban en el aire.
Mamá ¿ellos son muy diferentes a nosotras?
No, no tanto, verás por fuera somos todos diferentes pero tenemos las mismas manos, iguales pies, dos ojos… solo que cada uno es diferente a los otros porque es especial.
Pobre el que tenga un gemelo.
Las rieron y la estrella fugas ya se había ido.
Me gustaría conocer uno, espero que no se hallan acabado.
Yo también… ups, lo digo por tu padre. Vamos a casa.
No, cántame mamá, vamos cántame.
Miona se hace tarde.
Por favor por favor, no puedo dormir si no lo haces.
Bueno, bueno, pero luego irás a dormir.
Estabien.
Su madre la abrazaba.
-"La luna te enseñó ese camino en el mar… donde brillan los sueños y la esperanza. Y verás que cruzando la montaña la luz te espera y el sol sonreirá… Si en la noche sientes temor busca a alguien y te cuidará…… y si le enseñas esta canción para aliviar su corazón esas lágrimas no brotarán… esas lágrimas no brotaráaaaaaan. Es la esperanza que los unirá."
Continuará…
