Hola, es otro fic de Gundam Wing, jejeje, esta vez va a ser un poco largo, espero que lo disfruten, cualquier cosa la dicen no más, jejeje, estoy en línea cada vez que pueda (casi todos los días ¬¬... fanática del Internet), bueno yo me largo (despido), los quiere Carol .
CAMBIO MORTALCap. 4
Duo poco a poco abrió sus ojos y lo primero que vio fue la silueta de alguien sentado a su lado.
-Hola Duo… ya despertaste- Heero lo miró tristemente, mientras que su amado lo miraba de forma fría, restando importancia a la preocupación.
-¿Dónde estoy?- miró a su alrededor.
-En casa de Wu Fei-
-Te dije claramente que no quería venir, imbécil- se levantó adolorido por su costilla fracturada, aunque nunca demostró dolor alguno.
-Quédate quieto, no debes moverte aún- de nuevo su mirada triste, al ver a Duo de espaldas ya no se divisaba su hermosa trenza, ya no la tenía… lo único que veía era un muchacho desvalido y atormentado… herido en el corazón profundamente, pero ignoraba el significado de ese cambio mortal de Duo, ignoraba su sufrimiento, las penalidades por las que seguramente tuvo que pasar; en el cuello de Duo habían numerosas contusiones, horribles marcas de lo que fueron cuchillas o arañazos.
-Duo, mi amor… yo-
-No me digas "mi amor", me das asco- lo abofeteó fuertemente, lucía furioso.
-Duo… ¿por qué?- se frotó la mejilla colorada por el golpe, una lágrima surcó por ella.
-Jajajajajaja… pero que patético- se giró caminando hasta la puerta hasta desaparecer por ella.
-Duo… Duo…- sollozó, realmente sufría, por él, Duo, ya no era… su Duo.
-¡Duo!- gritó emocionado Quatre corriendo hacia él abrazándolo con ternura, -Duo amigo mío… te extrañé tanto, creí que jamás te volvería a ver, yo…- fue alejado bruscamente, Duo lo había empujado, su mirada seguía fría.
-No me toques, todos… - miró a Trowa, Wu Fei, -Todos me dan asco-
-Maldito, no te permito que agredas a Quatre- Trowa se dispuso a golpearlo, pero Duo más rápido esquivó el golpe, logrando ponerse detrás y lanzarle un codazo en la espalda, lo cual provocó que Trowa escupiera sangre y cayera al suelo lastimado.
-Arrg… maldi... ción-
-¡Trowa!- exclamaron Wu Fei y Quatre asustados.
Duo los miró de forma desafiante, se aproximó a Quatre sacando lentamente su arma apuntándolo, pero Wu Fei se interpuso entre ellos.
-Ya es suficiente Maxwell, estás completamente loco, no toleraré que lastimes a nadie más.
-Jajaja… pero si es Wu Fei Chang, ¿no eras tú el que decía que los débiles no deben pelear, es increíble que ahora defiendas a uno-
-Yo protejo a los débiles Maxwell, lo sabes-
-Los débiles…- susurró cabizbajo, unas imágenes recorrieron su memoria, en las que se observaba al lado de Heero en incontables ocasiones, siendo rescatado, por él y por sus amigos de batallas, le produjo nostalgia. –Es cierto… yo fui débil y ustedes me ayudaron, pero… ya no lo soy más… ¡ahora soy muy fuerte!- tiró del gatillo y la bala se incrustó de lleno en el pecho del ex piloto de Shenlong, la sangre se esparció llenando el rostro de Quatre que gritó horrorizado.
-Ahora, ¿quién es el débil?- Duo guardó nuevamente el arma, encaminándose a la salida, pasando sobre el agonizante cuerpo del chino.
-Max… Maxwell… por… ¿por… qué?- fueron sus últimas palabras, la muerte lo alcanzó, de forma cruel.
-Wu… Fei… ¡Nooo!- exclamó llorando el árabe, abrazando el cuerpo inerte.
-Wu Fei… no…- Trowa se puso de pie.
Heero que había visto todo, corrió hasta alcanzar a Duo.
-Detente-
-Yuy… ¿qué quieres ahora, retírate de mi vista sino quieres terminar como Chang-
-No lo haré, debes reaccionar, ¿¡no te das cuenta?... ¡haz matado a uno de tus amigos por Dios santo!-
-No me importa-
-Mentira, sí te importa-
-¡Cállate, ¡no te atrevas a decirme lo que me importa y lo que no, tú no eres nadie, te aborrezco!-
-Duo…-
Heero se alejó, le dolió en el alma escuchar esas palabras, realmente, ese chico, ya no era Duo.
El ex trenzado abandonó la residencia, se adentró en la noche, se confundió con la niebla, ahora todo aquel que se le cruzaba acababa muerto, ahora él era el legítimo Dios de la muerte.
-Bip bip bip- se oyó en la lejanía, el sonido de un beeper.
-Mmm… es Hilde… ¡ENSEGUIDA IRÉ POR TI HERMANITA!- Duo corrió desesperado, probablemente ella lo llamaba para darle una buena noticia.
-Duo Maxwell ésta es tu nueva misión, te infiltrarás en la red del sistema de seguridad del banco Multicast, deberás desconectar hasta la más mínima alarma, una vez completado, entrarás por el ventanal de la parte inferior y vaciarás la caja fuerte, si alguien te ve… abortarás y… - la horrible voz se acercó y le entregó un cuchillo, -Acabarás con tu vida en ese preciso instante, ¿queda claro, esclavo?- le acarició repugnantemente los labios.
-Entendido amo- Duo lo miró a los ojos, decisión, eso era lo que se vislumbraba en ellos, -Cumpliré con la misión designada de inmediato- se disponía a salir, pero aquel hombre grotesco lo tomó de la cintura impidiendo su escape.
-No tan rápido esclavo, primero quiero que me asistas en la cama, jajaja-
-S… Si… amo- Duo se giró, su mirada cambió a una de resignación, se colocó en cuclillas y procedió a darle placer al hombre.
-Aaaahhh… mmm… siiii… maaassss-
Duo hábilmente masturbaba con su boca el hinchado pene de su apresador.
-Mmm… siiii… no te detengas putita… mmmm…-
Duo derramó lágrimas amargas, era la primera vez desde hacía años que no las derramaba, pero… su frustración e impotencia por no poderse defender eran increíbles, sentía que cada vez que tenía que entregar su cuerpo a esos asquerosos hombres, una parte de su corazón moría… su bondad y alegría murieron hace tres años, ya no sentía compasión, ni reconocía a sus amigos, tan solo le quedaba el camino de la perdición, pero debía aceptarlo si deseaba rescatar a su hermanita menor Hilde, la pobre niña fue secuestrada y Duo tuvo que obedecer todos los mandatos que le daban si quería volverla a ver con vida, por eso… y solo por eso… él hacía lo que hacía.
El hombre se vació en la boca de Duo, éste se alejó para no tener que saborear esa semilla tan desagradable, sin embargo gran parte de ella se embarró en su cara, recorriendo sus mejillas, sus labios y bajando hasta su quijada, cerró los ojos con fuerza.
-Jajaja… que puta te vez todo embarrado, jajaja- lo golpeó tirándolo al suelo.
-Me das asco… putita barata, ¿verdad que eres mi puta?- Duo no contestó, las lágrimas aún salían de sus ojos, trató de incorporarse, pero fue nuevamente golpeado.
-¡Responde!- Duo sollozó frases incoherentes.
-¡RESPONDE!-
-Si, mi amo… yo… yo soy su puta barata- se abrazó a sí mismo, estaba humillándose e intento hacerlo más, -Siempre seré su puta mi amo, yo le daré el mejor sexo que hubiera deseado, tómeme ahora, por favor… estoy… muy caliente… ne… necesi… necesito su pene en mi culo… mi amo- Duo comenzó a llorar, se sentía de lo peor, sabía que si se humillaba lo suficiente era posible que su "amo" se hartara y lo dejara ir, al menos, ese era su plan.
-Jajaja siii… sé que quieres que te tome… jajaja… mastúrbate, quiero verte- Duo cerró sus ojos abatido, su plan fracasó.
-Si- se desnudó completamente, se puso de pie y empezó a masturbarse con violencia.
-Si… así… gime putita… ¡gime!-
-Si mi amo… aaahhh… mmmm… que rico…- Duo lloró aún más, la humillación era terrible, demasiado, ya no lo soportaba.
-Si más fuerte, más fuerte, uyy siii-
-Ah… ah… mi amo… que rico se siente… aaaaahhhh-
El hombre también se desnudó, jaló a Duo hacía él y lo besó con vehemencia, lo levantó, las piernas de Duo se enlazaron a su cadera, el hombre rozó su miembro en la entrada de Duo, quién tembló de pies a cabeza, cerró sus ojos, derramando las últimas lágrimas.
-¿Lo quieres verdad, aahhh pues pídeme que te viole, pídemelo, puta-
-Mi… amo… vio… ¡vióleme ya!-
Lo estocó salvajemente, lo hirió.
-¡Aaaahhhhhhaaahhhh!- Duo clavó sus uñas en sus hombros.
Ya no pudieron mantenerse en pie, cayendo al suelo, con el hombre encima, no parando de gemir de placer y Duo de dolor.
-¡Aaaahhh siiii… estooo es la gloriiiaaa!…. mmmm- cada estocada era violenta.
-Aaahhh ya… ya no… me… duele-
-¡Cierra la boca!- le golpeó el rostro rompiéndole la nariz.
-Aaahhh… amooo… pare… por favor-
-¡Caaaalllaaaa!- exclamó llegando al orgasmo… salió de Duo sin cuidado alguno, su pene aún seguía goteando, así que los residuos los tomó con su mano acercándola a un lastimado Duo.
-Trágatelo, perra, puta barata-
-No… no quiero…-
-Maldito mal nacido hazlo-
-No…-
El hombre lo obligó a abrir la boca, le restregó su semen por toda la cara, metió sus dedos en su boca llegando casi a ahogarlo; Duo tosió.
-Jajaja… te gustó… jajaja- se vistió y salió de la oscura habitación.
Duo usó dos de sus dedos para meterlos en su garganta, provocándose el vómito y así poder expulsar el semen de ese hombre, tosió varios segundos.
-Hermanito… ¿hermanito?- una vocecita irrumpió en la habitación.
-¡Hilde!-
CONTINUARÁ...
Notas de la autora:
Hola de nuevo, jeje, esto sí que me salió muy macrabo, pero como dije, ¡soy pervertida, muajajaja, cof, cof, jeje… mmm…Duo no sufre, lo hace Heero, sé que aquí sufre, pero ya verán que pronto no lo hará, jaja, es enserio, dije que no estaba en mis planes hacerlo sufrir y no lo haré ¡nunca! Yo amo a mi Duo, es mi amor, jeje… bueno, espero les haya gustado, pobre Wufei, él me agrada, pero alguien debía morir, jeje, bien les dejo, porque ya me aburrí.
Ya saben cualquier cosa, me la mandan a: vemos pronto! O mejor al grupo en todo caso, jejeje, chau!
