Wojolas!!!!!!!!!! Cómo están ustedes?????? (sí, tengo cierto aire a miliki. K pasa, eh?? ù.ú). Yo estoy muuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuy bien. Tan bien como puede estar una persona que acaba de tirarse todo un día estudiando literatura con el estrés que supone tener al día siguiente un examen, pero bien al fin y al cabo. Si suelto cualquier paranoya de magnitudes algo mayores de lo normal en mí no os extrañéis, mi cerebro ta ya más saturao que una tubería atascá u.u'. En fín, no me quiero poner ahora a contaros todas mis desdichas (exageramiento marca peye ;) no lo encontraréis en ningún otro lao), así que mejor hago una pequeña introducción (cambien la palabra "pequeña" por "gran") y luego os dejo con el cap.

Bueno, estaréis impresionaos de que últimamente actualice tan seguido. La razón? Qué sé yo... Me aburro, acaba de terminar uno de mis fics favoritos (pork lo hiciste, Mish?? Pork??? :'( .. Tú sabes de qué hablo, pero no es plan de contarlo aquí y destripar el fic xDDD), y pa colmo me estoy volviendo una blanda. Lo unís todo, y qué tenéis?? (no, no es al Papa vestio con un traje de Dior, no) nuevo cap en tiempo récord!! Aunque claro, está to escrito, lo k no tiene mucho mérito u uhss. Bah, el caso es k ta aquí, esperando a que lo leáis y dejéis un bonito review a su adorada e ingeniosa madre (otro yo: bájate esos humos k te pasas). Yo??? O.o Pero si no he dicho ná.

En fín, me despediré antes de que se me gaste la última neurona que ha sobrevivido a mi ataque de estudios. A ver si la puedo usar pa escribir el último (espero) cap, que el joio se resiste más que un portero en un derby. Contesto reviews y listo ;) Besossss y gracias a to aquel lee esto!!!!!!!

Mish1: Wolas!!!!!!! Qué fiel que me eres, chikilla!!!! xDDD Siempre, ahí con tus reviews. Hay k ver. Ya era hora de que te recompensara de alguna forma!!! Espero k disfrutes el cap k te mandé en exclusiva ;) (u.u' como se enteren las demás me matan). En fín, todavia sigo impresioná con el final de tu fic O.o En serio lo hiciste? xDDD Oju oju... Poz weno, disfruta las navidades, come muxo turrón (pami k esto ya te lo dije, pero weno O.o) y nah, a seguir esperando más caps ;) por lo menos has tenío un adelanto ;) Besossssss. Y gracias por tu apoyo!!!!

Pamylp: Hola wapa!!!! Muchas gracias por tu review!!! No estés tan ansiosa, k ya no vas a tener k esperar más :P:P Besossss!!!!

Morgana : Holas!!! Muchísimas gracias por tu review!! Aquí tienes el siguiente cap ;) disfrútalo.

NeLi BlAcK: Wolasssss. Muchas gracias por tu review, muxaxa encantadora!! Me has subido el ánimo, joer xDDD En serio te gusta tanto??? Bueno, no te voy a responder aquí tu duda porque si no ya no tendría gracia la cosa, pero creo recordar que lo desvelaba en este cap. Así k nada ;) Leelo por ti misma. Besos!!!

Wowowo, ya voy teniendo más reviews!!!! XD En fín, na más, disfrutad este cap ;)

Disclaimer:

1.- Todos los personajes que reconozcáis no me pertenecen. Como ya sabreis, son propiedad de la gran Rowling ù.ú Algunas nacen con suerte.

2.- La protagonista, entiendase Amy, sí que me pertenece, así como los miembros de su familia.

3.- La historia tambien me pertenece. Algo de mérito debía tener, no??

A Pamylp, Morgana y NeLi BlAcK, por unirse a mí en esta gran aventura. Muchas gracias!!

Capítulo 5.

- ¡Hola!- me dijo.

Era un chico guapo, con el pelo negro azabache y los ojos verdes. Llevaba gafas redondas.

- Hola- contesté un poco cortada (aunque no lo parezca soy muy tímida).

- ¿Cómo te llamas?

- Amy, ¿y tú?

- Harry, encantado.

- Igualmente.

- Bueno... ¿Qué hace una chica tan guapa como tú sola por aquí?

- Estoy esperando a alguien.

Menos mal que el color de mi piel impedía que se me notara que me había ruborizado, porque si no...

- ¿Y tú?

- Yo... Eh... Digamos que estoy aquí sin permiso.

Le dirigí una sonrisa. No se parecía nada al otro chico. Bueno, los dos eran guapos, tal vez el otro lo fuese más, pero en la personalidad eran totalmente opuestos.

- ¿Potter?

- ¿Malfoy?

- ¿Ya se conocen?

El chico rubio acababa de llegar. Los dos se miraban con odio.

- Sí, nos conocemos bastante bien- dijo Harry sin apartar la mirada del otro.

- Por desgracia- añadió el otro chico.

- Ah, por lo que veo no son amigos, precisamente...

- ¿Y ustedes dos de qué se conocen?- preguntó Harry.

- Somos...

- Soys...

- Amigos.

- Primos.

- ¿En qué quedamos?

- Eh... Yo soy prima lejana suya, pero nos llevamos tan bien que somos como amigos.

Dos mentiras por el precio de una. ¿Quién quiere?

- Ah... Pues no os parecéis en nada.

- Esque ella salió a la familia del padre- se apresuró a decir el chico rubio.

Yo asentí exageradamente. Un poco más y me rompo el cuello de tanto asentir.

- Ah... Yo me voy a ir ya... Encantado de conocerte, Amy. Y a tí... Supongo que ya te veré en Hogwarts.

Le dirigió una mirada de desprecio y se marchó.

- ¿Hogwarts?

- Es una escuela de magos. Los dos estudiamos allí.

- Ah, ya entiendo. Y... No os lleváis muy bien, ¿verdad?

- ¿Llevarnos bien?- soltó una carcajada- Nos odiamos desde siempre.

- Soys muy distintos...- dije casi en un susurro.

- ¿Qué quieres decir?

- Pues eso, que soys distintos.

El chico se encogió de hombros y se dio la vuelta dispuesto a seguir el viaje.

- A todo esto, ¿cómo te llamas?

Era increíble que aún no me hubiese dicho su nombre.

- Draco Malfoy. ¿Y tú?

- Amy Lee.

¿Draco? ¿Ese nombre existe?

- Bonito nombre- me dijo.

Yo me quedé sorprendida. ¿Había dicho eso de verdad o me lo había imaginado yo?

- Gracias, el tuyo también es bonito.

- Esque estaba hablando de mi nombre. El tuyo es horrible.

- ¿Horrible?- dije furiosa.

- Tranquila, era una broma- contestó Draco con una sonrisa.

Y qué sonrisa... Me quedé mirándole embobada. Él dejó de sonreír y se puso muy
tenso. Juraría que se había sonrojado.

- ¿Seguimos?- pregunté reaccionando.

No me puedo explicar cómo pude quedarme mirándole así. Aunque tuviese la sonrisa más bonita que había visto en mi vida, eso no quitaba que fuese tan... Tan... ¿Irresistible? No, no, eso no era de lo que estaba hablando... Quería decir tan cabrón.

- Sí, mejor que sigamos.

Como siempre, él iba delante, guiándome. Yo me limitaba a seguirle, mirando a mi alrededor. Estaba harta de ir cargando con la bolsa. ¿No pensaba echarme una mano?

- ¿Tengo que llevar la bolsa yo todo el tiempo?

- Tú fuiste la que compraste eso.

Ala, vaya descaro. Yo me gasto el dinero, él come, y luego la que tiene que cargar la bolsa soy yo. De eso nanay.

- Pero tú también has comido- le contesté levantando una ceja.

- Ay, qué pesada eres...

Cogió la bolsa mientras murmuraba varias maldiciones.

- Tampoco pesa tanto.

- Tú llévate media mañana cargando con la bolsa y ya verás como sí pesa.

- Será quejica...

- ¡Te he oído!

Qué tío menos caballeroso... Si no llega a ser porque se lo dije me podría haber quedado manca y le hubiese dado lo mismo. Sin darme cuenta ya nos habíamos alejado bastante. Los edificios altos eran cada vez más escasos y ahora podían verse unas casas que parecían muy acogedoras. Todas tenían unas pequeñas ventanas y estaban rodeadas de plantas. Pasamos por delante de ellas y no pude evitar quedarme mirando los jardines. Pero claro, allí estaba el señorito agradable para meterme prisa.

- ¿Seguimos o qué?

- Sí, hijo, sí...

Dejamos atrás las casas para dar paso a los terrenos desiertos. De vez en cuando podíamos ver una pequeña cabaña, pero lo demás era tierra y más tierra. ¿Acaso los ingleses no sabían organizar sus construcciones? Todas las edificaciones estaban amontonadas, casi sin dejar aire para respirar, y allí no había ni un maldito edificio. Ver aquel paisaje me aburría profundamente, por lo que preferí centrarme en otra cosa. Pero, ¿en qué podía centrarme? En nada, absolutamente nada.

- Paremos para descansar- dijo Draco de repente.

- ¿En dónde? Mmm, me gusta aquel montón de arena, aunque ese de allí tiene un aspecto más cómodo. Pero claro, si tú prefieres otro...

- Muy graciosa, ¿olvidas que soy un mago?

Sacó su varita e hizo aparecer un cómodo sofá en mitad de la tierra.

- ¿Eso lo puede hacer cualquier mago?- pregunté curiosa mientras me sentaba en el sofá.

- No, sólo los mejores podemos hacerlo- contestó haciéndose el importante.

- ¿Ah, sí? Pues que raro que tú puedas...

- ¿Dudas de mi habilidad como mago?

- ¡Oh, no! Estoy muy segura de tu "calidad"... Mala calidad, claro está.

- Bueno, si no crees que soy buen mago, quítate del sofá.

- Ja, ni hablar.

- Pues entonces pídeme disculpas.

- Perdone usted, Señoría. ¿Cómo habré podido ser tan tonta de dudar sobre su gran majestuosidad?

Ya me había quedado claro, este chico tenía la modestia muy pero que muy escondida.

La Peye Malfoy