Wolas a todo el mundo! Siento haberme tardado tanto (en realidad no sé ni cuánto tiempo ha pasado desde el último cap O.o) pero supongo que habrá sido bastante xD No sabéis lo que me he reído al abrir este archivo, porque lo cierto es que tenía escrita esta introducción desde hacía ya bastante tiempo, lo cual quiere decir que iba a actualizar hace bastante, pero la pereza me pudo --u Fijaos si hace tiempo que lo escribí que os hablaba de que hacía una semana había sido feria aquí en mi pueblo, y la feria es la primera semana de Junio… Pa fliparlo xDDDDD

Bueno, tras mucho mirarme esto he llegado a la conclusión de que: 1. Esto ha cambiado mucho desde la última vez O.o 2. O la última vez subí dos caps de un tirón o se me olvidó escribir la introducción del cap 12 xDDD y 3. No he llegado a ninguna conclusión más, pero sólo 2 quedaba feo u

Bien, después de sacar estas conclusiones me he dado cuenta de algo más… Tengo que responder reviews O.o Así que mejor paso a eso y os dejo el cap. 13. y de regalo el 14 xD

Reviews!

Mish1: Wolassss! Hace tiempo k no te leo u Tu último fic nunca me acuerdo de pillarlo… En fín, sí, poco a poco se avanza :P Y ya sale la chica fantasma, algo es algo. Besos!

Iraty Rowling: Hey wapa! Desde k te fuiste a NY no hay kien te vea el pelo! xDD Bueno, bueno. El ángeles y demonios ya lo tng abandonao --u Me puse con Hp6 en inglés y al otro lo dejé tirao xD Y al final el otro tmb lo tng abandonao desde k tng novio… ya te contaré, k seguramente te habré metío el gusanillo ahora xD muajajaja.

Iraty Rowling: Jajajajaja Harry un viejo xD K bueno! A ver si llega ya la parte en la k tú te quedaste, sí xD xk a este paso se me desespera la peña… Lo de subirlos de 2 en 2 es mejor, xo tmb peor, xk sinceramente, el último cap aún no lo tng terminado… En fín, cosas k pasan xD Vaya, pos sí k hacía tiempo k no actualizaba esto O.o Me preguntabas qué tal me iba con mi ex! Wooo xD Bueno, besos!

Ely-Chan: Wenas wapa! (K)(K) Este review llegaba hasta el cap 10, así k supongo k algunas dudas ya te las responderían los siguientes caps xD Y otras no te las puedo responder xk sería contar el final… xo weno, sigo con tu otro review!

Ely-Chan: Oh, cuánto tiempo! xD Me alegro de k ya te hayas puesto al día con los caps ;) Nadie confía en Johnny… Xk será? Muajaja, ya se verá más adelante xD Bueno, sobre la misión de Draco consiste en… creías k iba a decirtelo? Sería contarte la historia entera! xD Pronto lo sabrás, te lo prometo. Y sobre el comportamiento de Harry… digamos k éste Harry es un poco más paranoico y agresivo k el k presenta el libro xD La chica fantasma me temo k tmp puedo revelarte nada sobre ella… Y bueno, mejor k leas el cap siguiente ;) Y gracias x lo k dijiste del chat mágico! Besos! Me encantan tus reviews!

Bueno, muxísimas gracias en conjunto para todas estas personitas k han dejao review xD Y ya, no me enrrollo más.


Capítulo 13.

Era medianoche cuando me desperté el notar que la temperatura sufría un grave descenso. Miré al termómetro que había en la pared, aún con los ojos nublados por el sueño. Tan sólo marcaba 1ºC, 34 menos que al acostarme. Una bajada así no era normal, y menos en pleno mes de Julio...

Me bajé de la cama y salí al pasillo. Un viento acalorado me golpeó en la cara, casi quemándome las mejillas.

- "Qué raro..."

Me volví a la cama pensando que estaba soñando; todo se arreglaría por la mañana. Antes de intentar dormirme de nuevo, le eché un vistazo al espejo que había en el cabezal de la cama, colgado en el muro. Me llamó la atención el reflejo de una rara silueta, formada sólo por una línea. Estaba quieta, junto a la puerta. Me giré y no ví nada.

- "Debo estar volviéndome loca del todo..."

Volví a mirar al espejo y ahí estaba, algo más nítida que antes. La miré fijamente, casi sin parpadear. Poco a poco iba tomando una forma más clara y reconocible. Pasados unos segundos, entorné los ojos para verla mejor todavía. Y entonces la reconocí¡era la chica de mi visión! Me giré rápidamente. Iba hacia la puerta, caminando dispuesta a salir. Se paró en el umbral y se volteó un momento para mirarme. Sus ojos brillaban como dos focos de luz espectral. Me pareció que quería que la siguiera, y eso fue lo que hice.

Me puse las chanclas y salí de la habitación con paso ligero. La vi en la esquina del corredor, caminando con sus pies descalzos y arrastrando el borde de su vestido. Me apresuré para alcanzarle, aunque manteniendo una distancia considerable entre las dos. Al llegar a la esquina, ya no estaba, la había perdido de vista.

- ¿Y ahora qué hago?

Ví una puerta. Tal vez la chica había entrado allí...

Me acerqué lentamente y agarré el pomo con la mano temblorosa. Lo giré un poco y me sobresalté al oír el chirrido que produjeron sus bisagras oxidadas al abrirse la puerta, ampliado por el eco. Dentro estaba oscuro, demasiado oscuro. Alargué el brazo y tanteé por la pared, en busca de un interruptor. Lo encontré tras unos segundos de búsqueda a ciegas, y al fín pude ver la habitación. Lo primero que resaltaba era un gran caldero que había sobre una mesa.

- ¿Qué hará esto aquí?

Lo toqué. Estaba frío, como cualquier otro objeto de acero, salvo que éste vibrara levemente. Me fijé en el resto de la habitación. Las paredes estaban cubiertas por una larga estantería, llena de raros frascos con contenidos aún más extraños. El suelo, algo deteriorado, parecía haber sufrido un terremoto.

Una especie de silbido, producido por una repentina corriente de aire helado, me interrumpió, centrando mi atención en la puerta, donde la chica me miraba impaciente. Sus ojos brillaron antes de que se marchara de nuevo. Dejé de lado el caldero y volví a seguirle.

Recorrí ese pasillo y al doblar en la esquina me encontré justo delante de la mesa en la que me había fijado el día anterior. Y allí estaba ella. Su pierna derecha flexionada, ala que se abrazaba dejando reposar la cabeza sobre su rodilla. Y su otra pierna estirada hacia abajo, casi flotando en el aire, con los finos dedos de su pie moviéndose graciosamente y las tiras sueltas de la venda que cubría su tobillo serpenteando con la brisa que corría por el largo y lúgubremente iluminado pasillo. En su mano derecha, agarrada casi por el borde, lo que parecía ser una foto.

- No debí dejarle escapar- se lamentó sin levantar el rostro.

Parecía haber advertido mi presencia.

- ¿A quién?- pregunté dejándome llevar por la curiosidad, cosa que más tarde lamenté haber hecho.

Por suerte, mi interrupción no le molestó.

- No cometas tú el mismo error que yo cometí- me dijo por toda respuesta- No lo hagas.

Se bajó de la mesa y desapareció delante de mis propios ojos, dejando caer la foto que llevaba sujeta.

Después de asegurarme de que no volvía, me agaché lentamente para coger la foto, sin llegar a comprender sus últimas palabras.

- ¡Lo sabía!

El grito me cogió por sorpresa, así que sin saber de qué se trataba, eché a corre por el pasillo hasta que llegué a las escaleras, sin percatarme de que correr con chanclas no es lo mío.

- ¡Aaaahhh!

Uno, dos, tres, cuatro... No sé por cuántos escalones rodé. El caso es que llegué al piso de abajo, de culo, pero llegué al fin y al cabo.

La luz del salón estaba encendida y la puerta entreabierto, por la que se escapaban algunas exclamaciones e insultos. Al entrar, ví a Draco tirado en el suelo boca abajo y Johnny montado encima de su espalda. No penséis mal, éste último le estaba apuntando con su varita en la sien.

- ¿Qué pasa aquí?

Sus miradas se posaron en mí al instante.

- Amy, te dije que no era de fiar...- me dijo Draco con algo de dificultad, lo normal cuando alguien te aprisiona los pulmones.

- ¡Cállate!- bramó Johnny mientras me apuntaba con la varita de Draco- Y tú quieta ahí, no des ni un paso más.

Yo me quedé sorprendida de la paranoia tan grande que se habían montado estos dos.

- No seas ridículo, Johnny. Aparte esa cosa de mí.

- No hasta que me asegure de que no eres como ESTE.

- ¿A qué te refieres?- pregunté desconcertada.

- Ya sabes.

- No, la verdad es que no sé de qué coño me estás hablando. ¿Te crees que hago la pregunta por gusto?

- Amy¿no sabes que él es un Mortífago?

- ¿Un qué?

Inesperadamente, Draco se dio la vuelta y empujó a Johnny hacia atrás, tirándolo al suelo. Luego, antes de que éste pudiera hacer nada, le arrebató las varitas y me pasó una de ellas. La cogí sin entender muy bien lo que había ocurrido y apunté al moreno.

- No le hagas caso a este Auror de pacotilla, él no sabe nada.

Ni sabía lo que era un Mordífato, ni sabía lo que era un Faunor, ni sabía de qué me estaban hablando. ¿Se habían vuelto locos todos o era yo la loca?

- Amy, te arrepentirás de hacerle caso a ESTE, recuerda mis palabras- me advirtió el del pañuelo.

- ¿Ah, sí¿Y qué me harás?

- ¿Yo? Nada, el problema es lo que te haga él.

- Tranquilo, lo conozco mejor que tú- en ese momento mis palabras me sonaban muy convincentes y sinceras.

Retrocedimos de espaldas, sin despegar la varita de su coordenada. Al cruzar el quicio de la puerta, nos giramos rápidamente y salimos corriendo hacia la entrada. Abrimos los portones, bajamos los tres escalones de roca y cruzamos el extenso jardín sin echar ni una sola mirada atrás. Paramos para tomar un poco de aire después de haber saltado la valla que delimitaba su propiedad.

- ¿Qué... pasaba?- pregunté a duras penas, intentando recuperar el ritmo de mi respiración.

- Nada, ya te dije que...

- Ya, ya, ya, lo sé. Estaba equivocada, tú tenías razón, blablabla...

El rubio sonrió.

- ¿Cómo hiciste para librarte de él cuando te tenía medio asfixiado?- pregunté alucinada.

- Fácil, estaba fingiendo- contestó él simplemente.

- Sí, ya, parecía demasiado real para ser fingido...

- Soy muy buen actor- dijo reuniendo toda la humildad que tenía; nula.

- Oh, usted perdone¿cuántos Oscars le han dado en su extensa y brillante carrera?

- ¿Cuántos qué?

- Que no sepas eso es para pegarte un tiro, pero bueno... A propósito, ya que hablamos de no saber cosas... ¿Qué es un... de eso que dijo Johnny?

- ¿Un Mortífago? A ver... Son un "tipo" de magos, por así decirlo...

- De acuerdo, con eso me lo aclaras todo...

- Qué quieres que te diga, no sé explicarlo.

- ¿Tú eres uno de ellos?

- Sí, me viene de familia.

- ¿Y qué hacen exactamente?

- Pues...- el chico desvió un poco su mirada- Oh, mira, ahí está mi lechuza.

Un ave negra, de pelaje brillante y muy cuidado, se acercaba a nosotros, perfilada por la luz de la luna. Tenía los ojos amarillos con una fina línea verdosa alrededor de la pupila, y un pico resplandeciente, en el que portaba una carta. En pocas palabras, era la lechuza más extraordinaria que había visto en mi vida.

- Es preciosa- comenté con admiración mientras la veía hacer una elegante pirueta en el aire.

- ¿Te gusta?- Draco se volvió hacia mí- Se llama Shadow.

Shadow planeó sobre nuestras cabezas y bajó hasta el hombro de su dueño.

- Gracias- dijo Malfoy cogiendo la carta y acariciándole la cabeza.

El gracioso pajarillo le picoteó levemente en el dedo como respuesta.

- Cógela si quieres- me dijo.

- ¿Puedo?

Me acerqué a ella, o debería decir a él porque era macho, y le acaricié un poco para ver cómo reaccionaba. Me aceptó muy bien, así que lo cogí y jugué un rato con él. Mientras tanto, Draco abrió la carta. De reojo, a la vez que fingía jugar con Shadow, observé su cara al leerla. No parecía muy tranquilo.

- ¿Ocurre algo?- inquirí al ver que la guardaba y se quedaba mirando al suelo.

- ¿Eh? Oh, no... Sólo era para recordarme que hoy es mi último día.

Levantó la cabeza y miró al cielo. El sol casi había aparecido del todo.

- Será mejor que sigamos- sugirió con apremio.

- De acuerdo.

- Bueno, Shadow, ha sido un placer volver a verte.

La lechuza revoloteó hacia sus brazos.

- Hazles saber que me ha llegado su aviso- le guiñó uno de sus grises ojos como despedida y lo soltó.

Su elegante figura se perdió en la inmensa lejanía del espacio celeste.

- Hombre, al fín encuentro algún ser vivo con el que te lleves bien.

- ¿Quién?

- Shadow, reí.

- Siento ser repetitivo, pero esque no tienes remedio.

- Tú mismo lo has dicho, eres MUY repetitivo.

- Deberías aprender a cerrar el pico, Amy, no vaya a ser que más tarde te tengas que tragar tus propias palabras.

- Por ahora no ha llegado ese momento, así que esperaré a que ocurra para hacerte caso.

- Como quieras- se encogió de hombros y emprendió el camino.

Para variar, yo le seguí. No sé cómo me las arreglaba para ir siempre detrás de él aunque si tenemos en cuenta que yo no tenía ni la más mínima idea de por dónde había que ir... Mejor seguirle.

- Oye, no me has llegado a contestar.

- ¿A qué?

- Al e-mail que te mandé el otro día, no te jode... ¿A qué va a ser? A la pregunta de antes, so idiota.

- ¿Y te crees que hablándome así te voy a contestar?- se giró un segundo para mirarme- Qué ingenua eres...

- Déjate de tonterías y contéstame.

- ¿Tanto interés tienes?

- Pues sí, Johnny lo decía como si fuera algo poco común...

- Para los muggles todo lo que tenga que ver con magia es poco común¿no?

- ¡Ya lo sé! Yo lo que quiero saber es la contestación a mi pregunta¿tan difícil es que me la des?

- Mira, te contestaré en otro momento. No creo que éste sea el apropiado para decírtelo.

Paré en seco, asombrada por la mala leche que podía llegar a tener. Y así me quedé, mirando su espalda que se alejaba poco a poco, sabiendo que tras ese torso una sonrisa de triunfo se perfilaba en su cara.


La Peye Malfoy