[Interior de la bóveda]

[P.O.V Drake]

"¡¿DOS SEMANAS?!" grito Otome bastante alterada por lo que le había dicho.

"Bueno... Una semana, cinco días y veintiún horas" le respondí, ya un poco mas calmado, incluso con los gritos de la octoling.

En una ocasión, Otome me pregunto si podría dejarlas salir en algún momento.

Pero obviamente le había dicho que el cierre que hice en la bóveda, era un cierre de emergencia, y que no se abriría asta dentro de dos semanas.

Voltee mi mirada hacia la inkling, que no tenía una mejor expresión.

"P-pero... No podrías hacer algo con tu amigo flotante, para abrir esas puertas?" pregunto Otome aun nerviosa por la respuesta que le había dicho antes.

"No lo creo... El pasar del tiempo ha dejado esas puertas muy inestables... Podría intentar hacer algo... Con unas buenas herramientas y algo de tiempo, podría adelantarlo un par de días... Pero no puedo asegurar nada... También esta el hecho de que jamas puedan volver a abrirse" le respondí, haciendo que la chica pulpo dejara su cabeza caer mientras esta daba un suspiro.

/-/-/-/-/-/

[P.O.V Tercera persona]

"Para entonces... Octavio ya me habrá dado por muerta, o tachado de desertora..." dijo Otome en un susurro, aun manteniendo su cabeza baja.

"¿Perdón...?" preguntó Drake, ladeando su cabeza al no escuchar bien lo que la octoling había dicho.

"N-no, nada... Puedo seguís con las preguntas?" respondió Otome, y preguntando a la ves.

"Ehhh... Claro..." respondió el humano, no muy convencido por la respuesta de la chica pulpo.

"Respóndeme esto, es una pregunta que me estuvo dando vueltas desde el momento en que entré aquí... Acaso eres... Un Antiguo?" pregunto Otome, poniendo especial atención a la posible respuesta del pelicastaño.

"Ehh... No tengo idea de que es un Antiguo... Pero lo que puedo decirte, es que soy un humano" respondió Drake, haciendo que Otome se quedara estática en su lugar, casi como si fuera una estatua.

La sala quedo en un completo silencio, con una Octoling de piedra, una Inkling confundida, y un humano tan confundido como la chica calamar.

"Humano, humano, humano, humano" eran las únicas palabras que se repetían una y otra vez en la cabeza de Otome mientras esta hacía una enorme fuerza de voluntad para no desmayarse frente a Drake.

"No es posible... No, ES imposible... Se supone que... Los Antiguos se habían extinto hace milenios, pero si hay uno vivo en frente de mi, entonces tal vez hallan más o el sea el ultimo... Sea como sea, tal vez el pueda ayudar a mi gente!!" pensó la Octoling con sus verdes ojos clavados en Drake.

"Ahhh... Te pasa algo?" preguntó el pelicastaño ladeando un poco la cabeza, haciendo reaccionar finalmente a la chica de tentáculos rojos.

"Eh?, oh!, no nada... Solo pensaba... Oye, y hay más como tú?" dijo la chica pulpo, tratando de sonar normal.

"Eso quisiera saber..." respondió Drake, apartando su vista de la Octoling, haciendo que esta lo viera confundida.

"Ehhh... Yo no he visto a más como él, y eso que pase toda la noche aquí" intervino Nary, logrando captar la atención de Otome.

"¿La noche aquí... Cuanto tiempo estuve inconsciente?" se preguntó a si misma la chica pulpo, para luego ponerse de pie.

"Oye... Podríamos salir de aquí?, no me siento muy cómoda hablando contigo dentro de esta burbuja" propuso Otome, viendo que Drake no se había puesto de pie como ella. Tal vez por su altura.

"Mmmm... Podría... Pero como estar seguro... De que no volverás a hacer lo mismo que antes?" devolvió la pregunta el humano frunciendo un poco el ceño, dudando esta vez si creerle o no.

"Esta vez no lo haré, lo prometo... Ahora que más o menos se tus intenciones... O lo que eres..." dijo la octoling, susurrando la última frase para que Drake no la oyera.

El humano se la quedó viendo fijamente a los ojos, para ver si lograba encontrar algo de mentira en su expresión.

Otome por su parte se le quedó viendo de la misma forma, manteniendo una lucha de miradas con los profundos ojos marrones del pelicastaño. Pero después de un minuto, que para la chica pulpo pareció una hora, esta no pudo resistir más, y aparto su mirada de él, mientras un ligero rubor se asomaba por sus mejillas.

Ante eso, Drake solo se dedicó a suspirar mientras bajaba la cabeza.

"Esta bien... Pero te advierto que si haces otra artimaña... Te quedaras aquí dentro, hasta que las puertas se abran... Ok?" propuso Drake mirándola seriamente.

Otome tragó saliva y solo se dedico a asentir con la cabeza, para luego ver como la puerta de la esfera se abriera detrás de Drake.

Con cuidado de no golpearse la cabeza, el pelicastaño comenzó a salir de la esfera mientras la Octoling se le quedaba viendo.

Hasta que cuando ya estuvo afuera, tanto el humano como la Inkling se la quedaron viendo, esperando a que la chica pulpo saliera también.

Otome sin esperar a que le dijeran nada, esta salió tranquilamente fuera de su prisión, y caminar unos pasos fuera de esta.

Luego la chica pulpo se detuvo, quedando a medio metro frente a Drake, la cual esta levanto la mirada para verlo al rostro, mientras que el humano la bajo para ver al suyo.

Ambos se quedaron viendo fijamente una vez mas, desatándose otra confrontación de miradas, y otro silencio incómodo.

Pero después de lo que pareció una eternidad, la chica calamar decidió cortar con el tenso ambiente.

"Bueno... Por que no le muestras a ella también la bóveda, Drake?" propuso Nary rascándose detrás de la cabeza con nerviosismo.

"Eh?... Oh, claro, si van a estar aquí un tiempo, tienen que conocer por donde van, así no se pierden" dijo Drake dando una pequeña carcajada.

"¿Va a... Mostrarme su base?" se preguntó Otome algo impresionada.

"Vamos... Y de paso podemos comer algo" continuó el humano, apartándose de la Octoling, seguido de acercarse a la puerta por donde llegaron, mientras era seguido por Nary.

"¿Vienes?" preguntó ahora la Inkling, volteándose a verla, y quedándose esperando en la puerta.

Otome solo tomó aire, para luego dejarlo salir por su nariz, y comenzar a seguir a ambos individuos.


[OctoValley]

[Base secreta de Cuttlefish]

[Una hora después]

De entre una rejilla, se pudo ver como dos calamares emergían de ella, para que luego estos tomaran forma humanoide, mostrando que se trataban de las famosas Callie y Marie.

Y al instante, al igual que ellas, otros tres calamares emergieron de la misma entrada, para luego tomar forma humanoide y dejar ver que eran los amigos de Nary.

"¡Sean todos bienvenidos a nuestra base secreta!" exclamó Callie alzando sus brazos, mientras que sus tres acompañantes miraban a su alrededor, viendo nada mas que unos cuantos carteles y una cabaña a unos metros de ellos.

"¿Se ve fresca, verdad?" preguntó Callie nuevamente, esperando con una sonrisa la respuesta de los tres amigos.

"Pueees... Se ve..." dijo Levin, tratando de encontrar las palabras.

"Luce tan... Es muy..." dijo ahora Shara, también intentando buscar una buena respuesta con la cual decirles.

"Esperaba algo mejor..." comentó Nayls sin prestarles atención, y aún mirando su panorama.

"¡NAYLS!" regañaron Shara y Levin al unísono al nombrado, haciendo que este se diera la vuelta con un brinco, para luego darse cuenta de lo que había dicho.

"¡D-digo... Claro que se ve totalmente fresca, y espectacular... Es mas, creo que-..." trató de especular el moreno Inkling, solo para ser interrumpido por Marie.

"Se ve aburrida, lo sabemos" dijo la chica calamar de tentáculos blancos con una pequeña sonrisa.

"De hecho, barias veces intentamos remodelarla para que pareciera un poco más a una base secreta, pero el abuelo insiste en que la dejemos tal y como esta" añadió Callie con una mano en la cadera y una sonrisa.

"¿Esperen, abuelo?" ahora preguntaron los tres amigos algo sorprendidos por lo que la idol de tentáculos negros había dicho.

Y como si este esperara a que hicieran esa pregunta, de dentro de la cabaña, un Inkling de avanzada edad, con un bastón, y una gran barba salió de esta, captando la atención de todos.

Con un paso calmado, el anciano Inkling se acercó al grupo, hasta llegar junto a ellos.

"Chicos... Permitan nos presentarles al veterano héroe de guerra y nuestro abuelo, el gran Capitan Cuttlefish" presentó Marie, haciendo un ademán con la mano hacia su abuelo, mientras que este hacía la señal de la paz con sus dedos.

"¡¿Veterano?!" preguntó Levin estupefacto.

"¡¿Héroe de guerra?!" preguntó esta vez Shara con la misma reacción de Levin.

"¡¿Abuelo?!" finalizo Nayls tan sorprendido como su hermana y su amigo.

"¡Saludos, jóvenes aspirantes a agentes!" saludó el veterano Unkling, con una cálida sonrisa, a pesar de que esta estuviera oculta por su barba.

"Entonces... Estos son los reclutas de los que tanto me hablaron?" continuó Cuttlefish dándole una ojeada a cada uno de ellos.

"Esperen... Reclutas?!" preguntó Levin mientras el y sus dos amigos se quedaban sin habla por lo que había dicho el anciano capitán.

"Exacto... Veran, chicos... Antes de encontrarnos, hemos hablado con nuestro abuelo, sobre sus capacidades, y situación. Y hemos decidido dejarlos ser parte de nuestra organización, como agentes" respondió Callie con una radiante sonrisa.

"Claro, eso si ustedes están de acuerdo" continuó Marie pero aparte de su prima, esta solo dando una pequeña pero genuina sonrisa.

"¡¡Pues claro que estamos de acuerdo!!" contestó Nayls por sus otros dos amigos, solo para luego ser jalado por su hermana y traerlo junto a ellos.

"¿Nos dejarían... Pensarlo un poco?" pidió Levin nerviosamente, a lo que ambas primas contestaron con un asentimiento de cabeza.

Los tres integrantes de su equipo, se apartaron un poco del otro trió de Inklings, para luego hablar lo que harían a continuación.

"Okey chicos, ustedes que piensan?" preguntó Levin mientras los tres formaban un circulo con los brazos.

"¡Yo creo que es una gran idea, ser agentes junto a las Squid Sisters no es algo que le pasa a cualquiera!" respondió Nayls con estrellas en los ojos, ganándose una mirada de regaño por parte de su hermana.

"Torpe, recuerda que no debemos olvidarnos de Nary... Aunque si lo pienso un poco, no es una mala idea que digamos" dijo Shara mirando a Levin.

"Además, con su ayuda, podremos salvar a Nary de una vez por todas" continuó Levin, mientras se ganaba una sonrisa por parte de ambos hermanos.

"Bueno, esta decidido!" finalizó nuevamente el Inkling de tentáculos azules.

"¡Sabíamos que se unirían!" exclamó Callie, siendo parte del circulo con los tres SquidFire.

"¡¿Eh?!" ante eso exclamaron Levin, Shara y Nayls, sorprendidos volteando a verla.

"Aunque de no hacerlo, de todos modos los habríamos ayudado" comento esta vez Marie, también en el circulo.

"¡¿EH?!" volvieron a exclamar los tres amigos, ahora volteando a ver a Marie, preguntándose en que momento se habían metido al circulo.

"Pero volviendo al tema... Niñas... Hay una duda que quisiera que me aclararan" dijo Cuttlefish mientras se pasaba una mano por la barba.

"¿De que se trata abuelo?" preguntó Marie acercándose a este.

"¿No eran cuatro inklings de los que me habían hablado?" preguntó el anciano, ladeando un poco la cabeza.

"De eso queríamos hablarte abuelo... Veras, una de los nuevos reclutas fue secuestrada por..." trato de decir Callie, pero fue interrumpida por su mismo familiar.

"¿Un especie de ser?" pregunto Cuttlefish, terminando la oración de su nieta.

"S-si... Como?" trató nuevamente de decir la chica calamsr, pero otra vez fue interrumpida por el veterano capitán.

"Recuerda que nuestro trabajo es vigilar los planes y movimientos de los Octarianos por OctoValley. Y lo que pasa por Inkopolis no es una excepción" respondió Cuttlefish con una sonrisa.

"Entonces... Ya somos agentes?" preguntó Levin tratando de llamar la atención de las famosas primas y el veterano capitán.

"Casi... Solo tienen que hacer un juramento para poder volverse oficialmente agentes" respondió Callie acercándose a ellos junto a Marie.

"Acerquen se, y ponganse firmes" ordeno Marie mientras que obedientemente, los tres amigos hacían lo que dijo.

Cuttlefish se puso frente ellos, con las Squid Sisters a ambos lados de él, mientras aclaraba su vos.

/-/-/-/-/-/

Después de un increíblemente largo juramento, por fin habían llegado a la parte que tanto esperaban.

"¡Como líder del Escuadrón Branquias, los nombro agentes 3, 4, y 5... Bienvenidos" finalizo Cuttlefish por fin, pero antes de que Callie y Marie les dieran la bienvenida también, Levin los interrumpió.

"Disculpe... Pero quisiera ser yo el Agente 4" dijo Levin con una sonrisa.

"Y yo la Agente 5" comentó Shara, cruzándose de brazos, y frunciendo el ceño, pero con una sonrisa de lado.

"¡Y yo obviamente el Agente 6!" exclamó con entusiasmo Nayls, levantando un puño.

"Pero... Por que todos rechazan el puesto de Agente 3?" preguntó ahora Marie un poco sorprendida de la decisión que tomaron los tres nuevos agentes.

"Es que queremos dejarle ese puesto a Nary, nos querían a los cuatro, no es así?... Así que cuando logremos salvarla, podrán darle ese puesto a ella... Además, el 3 siempre fue su numero favorito" contestó Shara, logrando que el anciano Inkling diera una amable y silenciosa carcajada.

"Y así será" respondió Cuttlefish, aún carcajeándose.


[Zona de la excavación]

[Bóveda]

[P.O.V Otome]

[30 minutos después]

Por un buen tiempo estuvimos caminando por el interior de esta bóveda, mostrando que era mucho mas grande de lo que ya parecía.

Pero yo en lo que más prestaba atención, era en el Antiguo frente a mí.

Como fue que pudo haber sobrevivido todos estos milenios?, se suponía que el y toda su raza se había extinto por la inundación.

Pero aquí esta él, vivo, un Antiguo, un Humano vivo en frente mio. Definitivamente no podía dejar pasar esta oportunidad para mi pueblo.

"Oye... Pasa algo?, te estas quedando atrás" escuché al sujeto llamado Drake hablarme, haciendo que reaccionara de mis pensamientos.

"No, nada" respondí mientras aceleraba el paso y me ponía a la par de ellos.

Continuamos con nuestro toor por esta interminable instalación, hasta que pudimos llegar a lo que parecía una cafetería, muy parecida a las que teníamos en los cuarteles en Octomburg, solo esta estaba mucho mas descuidada.

"Y esta es la cafetería, no... Se fijen en lo mugrienta que está... Yo limpiarla cuando... Tenga tiempo" dijo el Antiguo mientras se adentraba en esta.

Y la verdad es que eso espero, por que la verdad es que este comedor estaba mas lleno de polvo y tierra que debajo de una alfombra, sobre todo las mesas.

Claro que con excepción de una, que era a la que el humano se acercaba.

"Pueden esperarme aquí... Yo ahora regreso" pidió el Antiguo Drake, antes de ver como la Inkling se sentaba en la banca de dicha mesa.

Yo por otro lado, en vez de sentarme, solo me apoye en un costado de la mesa, con mis brazos cruzados y mirando cada rincón del lugar.

Aunque todavía me daba vueltas en la cabeza el hecho de estar en una muy bien conservada instalación de la raza Antigua, con un Antiguo vivo.

Ya se que se llaman humanos, no por el hecho de que el me lo dijo... Sino por que nosotros los Octarianos hemos estudiado su raza mas afondo que los Inklings. Hasta el punto de descubrir el verdadero nombre de su especie.

Pero a pesar de eso, el hecho llamarlos Antiguos por tanto tiempo, ya nos quedó la costumbre.

Aun así, cuando pueda, debo tener una charla con él, y convencerlo de que venga conmigo a Octomburg, antes de que los Inklings se lo lleven para ellos.

Al cabo de unos quince minutos, mi nariz pudo sentir el agradable olor de una carne bien hecha. Logrando que mi estómago volviera a entrarle el hambre.

Pude ver a Drake acercarse con un par de platos, con los que ahora rogaba por que fueran nuestro almuerzo.

"Buen provecho" anunció el humano mientras depositaba ambos platos en la mesa.

Yo por mi parte, ahora estaba tan hambrienta que ni siquiera preste atención a lo que me llevaría a la boca, por lo que solo me senté en la mesa, frente a la Inkling, a comer de una buena vez.

Pero algo era seguro, lo que comía estaba delicioso, así que comí sin importarme los modales, solo quería matar de una vez el hambre que hace rato me estaba matando a mi.

/-/-/-/-/-/

Después de por fin saciar mi apetito... Con otros dos platos más... Que?, estaba hambrienta.

El Antiguo se sentó al lado de la Inkling, para hacerme otras preguntas, que respondí cada una de ellas, hasta que llegó a una en particular.

"Entonces... No me dijiste por que... Tu raza y la de ella están en disputa" dijo el ser de cabello castaño.

"Pues... Es por que-..." traté de decir, pero antes de terminar mi oración, la Inkling metió sus tentáculos donde no la llamaron.

"Eso es por que los Octarianos son unos ladrones" dijo la chica calamar.

"¡Eso no es cierto, es por que los Inklings son unos egoístas!" proteste yo apuntando con el dedo a dicha Inkling.

"¡No somos egoístas, solo llegamos antes que ustedes!" exclamó la irritante enana de tentáculos naranjas mientras se ponía de pie.

"¡Y nosotros no somos ladrones, es que no tenemos de otra!" respondí yo también poniéndome de pie y apoyando mis manos sobre la mesa.

/-/-/-/-/-/

[P.O.V Tercera persona]

Ahora otra discusión se había librado entre la Inkling y la Octoling, hasta el punto en el que ambas se levantaron de la mesa y se pusieron frente a frente.

"¡MENTIROSA!" gritó la chica de tentáculos naranja mostrando los dientes.

"¡SE QUE LO ERES, PERO QUE SOY YO?!" respondió la teniente tocando la frente de la contraria con el dedo índice, y luego señalándose a si misma con el pulgar.

Ante eso, Drake se levantó también para tratar de calmarlas, al escuchar que empezaban a insultarse, y a empujarse entre ellas.

"¡Muy bien, las dos... Ya basta!" exclamó Drake tratando de separarlas, pero en un descuido, uno de los pies de Nary se enredo con uno de los pies de Drake, haciendo que este cayera junto a ambas cefalópodas en una posición muy comprometedora.

En el suelo, ahora se encontraban tanto el humano como ambas chicas, las cuales estaban las dos apoyadas en el pecho de este, mientras que el pelicastaño tenía ambas manos en el glúteo de las dos, agarrándose los bien.

"Ahh!~" "Nng!~" exclamaron la Inkling y la Octoling al sentir las manos de Drake en el trasero de ambas, haciendo que estas se sonrojasen hasta la nariz, incluyendo al humano.

Incluso inconsciente, Drake apretó mas sus manos, estrujando todavía más los grandes y suaves glúteos de las dos, ganándose un jadeo por parte de las dos.

"Ehhh... Interrumpo algo?" de la nada preguntó Bruce, apareciendo de quien sabe donde, y ganándose una mirada de sorpresa por parte de los tres.

Y la leyenda dice; que lo único que se pudo escuchar después de eso, fueron dos terribles bofetadas, que posiblemente habían resonado en toda la base, poniendo así fin a la vida del pobre Drake, el ultimo humano.

/-/-/-/-/-/

Al cabo de una media hora, ahora los tres se encontraban caminando por los pasillos de los dormitorios en los que Drake y Nary habían dormido, mientras que el humano se sobaba ambas mejillas, mismas que estaban al rojo vivo, con la marca de una mano en cada una.

Por otro lado, ambas chicas estaban un poco mas delante de Drake, con sus brazos cruzados y rostros bastante molestos.

Siendo que Otome tenía un rostro entre serio y enojado, Nary también tenía el ceño fruncido, pero con la diferencia de tener sus mejillas infladas.

Luego tanto la Inkling como la Octoling voltearon a verlo, sin cambiar la expresión que tenían.

"Ya les dije que fue un accidente..." dijo el pelicastaño, aún pasando sus manos por sus marcadas mejillas.

Estas simplemente se dedicaron a apartar la mirada bruscamente de Drake, mientras exclamaban un '¡Hum!', para enfatizar que todavía estaban enojadas.

Llegando a dicho dormitorio, el cual era el mismo donde Nary había 'dormido', el humano abrió la puerta, dejando pasar a las dos cefalópodas, a lo que Otome no tardó en inspeccionar todo el bloque con la mirada.

"Y este es donde van a dormir... Lo digo de nuevo por que ahora... Ustedes serán compañeras de cuarto... Hasta que las puertas se abran" aclaró Drake. Y tal como se esperaba, las dos chicas se miraron con indiferencia, mostrando que no les gustaba mucho la idea.

"Se que aún es muy temprano para dormir... Pero quería mostrarle de ante mano... El dormitorio a la nueva invitada" continuó el humano, haciendo que Otome volteara a verlo.

Después de eso, un silencio se generó en la habitación, pero justo antes de que se volviera incómodo, la Inkling fue la que decidió romperlo.

"¿Y que se supone que haremos ahora?" preguntó Nary un tanto aburrida.

"Pues... Yo voy a ver que puedo hacer con esas puertas, ustedes... Pueden pasearse por la bóveda... Solo no toquen nada... Ok?" respondió Drake poniendo una mano en su cintura.

"Por mi esta bien..." dijo Otome aun cruzada de brazos.

"Oye, espera... Yo no voy a ir de un lado a otro en este lugar hasta cansarme, yo quiero hacer otra cosa...!" se quejó Nary, mientras también se cruzaba de brazos e inflaba las mejillas con el celo fruncido.

Drake al ver a Nary poner esa cara, le fue demasiado adorable como para poder negarse. Por lo que solamente se dedicó a suspirar y entrecerrar los ojos.

"Esta bien... Dejame pensar en algo..." pidió el humano, a la vez que salía un momento de la habitación.

Drake llamó a Bruce, el cual al instante se materializó frente a él, sin mencionar que se quitaba el parche de su frente.

Por otro lado, las dos cefalópodas se asomaron por la puerta para ver de que estaban hablando, pero al escuchar que el pelicastaño estaba hablando en su idioma, volvieron al interior de su cuarto, ahora, compartido.

"¿De que crees que estén hablando?" preguntó Nary rascándose detrás de la cabeza.

"No hablo Antiguo..." respondió Otome manteniendo su mirando en la puerta.

"¿Antiguo, el no es un Antiguo, no lo escuchaste?, dijo que era un humano, o algo así" respondió la Inkling mientras que la chica pulpo volteaba a verla, solo para dar un suspiro.

"Me sorprende que aún no te allás dado cuenta" comentó la Octoling, dejando a Nary un poco confundida.

"¿Cuenta de que?" preguntó la nombrada, a la vez que ladeaba su cabeza.

"De todo... Él, su amigo, este lugar, donde se haya, el por que nuestra tinta no le hace nada... Y el hecho de que jamás vimos a otros como de su tipo" respondió Otome seriamente, mientras que la Inkling se ponía a analizar lo que había dicho.

"Pero... Eso es imposible, yo no habré sido la maaas lista de mi escuela, pero hasta yo se que los Antiguos se extinguieron hace más de doce mil años, por la gran inundación" contestó Nary tan seria como la teniente.

"¿Y si no todos ellos se extinguieron, y que tal si algunos, o por lo menos, unos de ellos se salvara?" preguntó Otome volviendo a ver a la puerta.

"Espera, espera, espera... Suponiendo que lo que dices es cierto, y Drake es uno de ellos... Como es que le hizo para permanecer con vida todos estos años?" devolvió labpregunta Nary, ahora un poco convencida.

"No lo se... Pero lo que el me dijo, y las preguntas que me respondió... Me hacen entrar en dos teorías... Una, es que de alguna forma halla permanecido dormido todos estos milenios... Y la otra es que halla venido de otro lugar, buscando supervivientes aquí" respondió Otome con una mano en su barbilla.

Nary por supuesto también estaba pensando en eso, pero en ese momento, de golpe le llegaron los recuerdos de lo que había pasado a noche, haciendo que sus mejillas y nariz se pusieran rojas.

Si Drake en realidad era lo que Otome decía, entonces eso quería decir que ella había tenido sexo oral con un Antiguo, aunque fuera su primera vez. Y pensar en eso la hacía sentir de dos formas: una era que se sentía avergonzada a más no poder. Y la otra... Pues de una extraña forma, afortunada.

Pero los pensamientos de ambas fueron interrumpidos, al ver como el humano volvía a entrar en la habitación, con el parche de vuelta en su frente.

"Bueno... Creo que ya encontré... Una solución para lo de Nary" dijo Drake mientras se le quedaban viendo fijamente.

"Pero antes de decir que es... Quiero preguntarles algo... ¿Ustedes saben... Lo que son videojuego?" continuó el pelicastaño rascándose detrás de la cabeza.

Y apenas terminar su oración, este había sido empujado contra una pared, mientras alguien le agarraba del pecho de su remera.

"¡¿TIENES VIDEOJUEGOS?!" gritó Nary con sus ojos bien abiertos, aún sujetándolo contra la pared. Con una fuerza que Drake jamás pensó que tuviera.

"S-si... Si tengo... Aunque solo algunos" respondió el humano, un poco asustado y sorprendido por la reacción de la Inkling. Hasta incluso Otome estaba algo sorprendida.

"Llevame con tu líder..." ante eso dijo Nary con un rostro sin emoción, haciendo que Drake se pusiera todavía más nervioso. Hasta incluso si fuera un anime, ahora mismo Drake tendría la típica 'gota' detrás de su cabeza.

/-/-/-/-/

Ahora el grupo de tres, se encaminaban a una zona que el humano no les había mostrado, por que pensó que no sería necesario.

Al mismo tiempo que Nary ahora se comportaba como si fuera una niña, mientras daba uno que otro salto, y pequeña risa.

Otome por otra parte, decidió venir con ellos solo por curiosidad, pero al ver el comportamiento de la chica calamar, estaba empezando a arrepentirse de eso.

Llegando a una zona, que obviamente Drake no les había mostrado, pudieron ver barias maquinas, y mesas en muy mal estado, ya sea por la corrosión, el óxido, o el pasar de los años, etc.

Y viéndolas bien, Nary pudo identificar que algunas se parecían mucho a las que habían en Inkopolis, pero desafortunadamente, no daban ningún signo de poder volverse a usar, o encenderse siquiera.

"Vengan... Es aquí a la vuelta" dijo el humano señalando una esquina. Pero justo antes de llegar, un tono musical muy familiar comenzó a resonar con eco por casi toda la bóveda.

"¿Eh... Que es eso?" preguntó Otome mirando hacia todos lados, al igual que Drake.

"¿Acaso ese es mi... SquidPhone?" preguntó Nary bastante extrañada, pero al instante esta abrió sus ojos a mas no poder, puesto que había logrando enterarse de algo.