[Base secreta de Cuttlefish]

[P.O.V Tercera persona]

"Vamos, contesta..." dijo Nayls mientras él, sus dos amigos, y las Squid Sister junto el Capitán se lo quedaban viendo con expectación.

Pero lo único que pudieron escuchar, fue el tono de llamada perdida, haciendo que el grupo suspirára con algo de derrota.

"Esta bien Nayls... Solo pensemos en otra forma de salvarla" dijo Levin mirando al Inkling de piel morena.

"Solo una última vez, si?" pidió este mientras volvía a marcar el numero de la cuarta integrante en su equipo.

"Nayls, ya van cuatro veces, Levin tiene razón, debemos centrarnos en lo que importa de verdad, llamarla tal vez solo empeore las cosas para ella" intentó convencer Shara mientras ponía una de sus manos en el hombro de su hermano.

"Demos le una última oportunidad... Ya que esta idea es la mas brillante que se le ocurrió en todo el día" en eso comentó Callie, dándoles una sonrisa.

"Muy bien..." dijo Nayls mientras volvía a marcar el numero de la Inkling de tentáculos naranjas.

Por su parte, todos habían vuelto a poner su mirada sobre el chico pulpo, a la vez que este tenía su SquidPhone en su oreja, esperando que dicha Inkling contestara la llamada.

Pero al solo oír el tono de llamada una y otra vez, sin nadie que lo contestase, todos volvieron a bajar la cabeza con derrota, hasta Nayls, quien ya había quitado el teléfono de su oreja.

"Vamos, debemos pensar en un plan" dijo Marie mientras ella su prima y su abuelo ya estaban por irse a la cabaña.

Pero justo antes de que Nayls diera fin a la llamada, esta había sido contestada, a la vez que una familiar voz sonó a través de dicho teléfono.

"¿Hola?" se escucho la voz de Nary a través del SquidPhone, haciendo que todos se miraran impactados.

"¿Hola, hay alguien ahí?" volvió a preguntar la Inkling, sacando a todos de su impresión.

"¡Nary-...!" trato de decir Nayls, pero su celular fue arrebatado por Levin.

"¡¿Nary, estas bien-...?!" preguntó este, pero tal como fue con Nayls, el teléfono le había sido arrebatado por Shara.

"¡¿Estas herida-...?!" pregunto ahora la morena chica calamar, pero de la misma forma, ahora el teléfono le había sido arrebatado por Nayls.

"¡¿Cuantos dedos te estoy mostrando?!" preguntó este mientras levantaba tres dedos.

"Uno, estoy bien. Dos, no, no estoy herida. Y tres, como voy a saberlo?, ni siquiera puedo verlos..." contesto Nary a las tres fugaces preguntas de sus tres preocupados amigos.

Pero justo en eso, las dos famosas primas se acercaron a Nayls, mientras Callie estiraba la mano hacia el.

"Dejen nos hablar a nosotras un momentos, esta bien?" dijo Callie aún con su mano estirada para que el agente de tentáculos violetas le entregara el celular.

"Jejeje... Si, todo tuyo..." respondió Nayls tontamente, mientras le entregaba su SquidPhone con corazones en los ojos.


[Zona de la excavación]

[Interior de la bóveda]

"¿Hola?" preguntó Nary al no escuchar a nadie por el pequeño altavoz de su celular.

"Hola Nary, perdón por la tardanza" dijo una inconfundible voz, que la chica calamar al instante reconoció.

"¿C-callie?" preguntó esta sorprendiéndose un poco.

"La única e irreemplazable" contestó la idol mientras ahora era alguien más quien hablaba.

"Y no esta sola" dijo ahora Marie, haciendo que la chica calamar se pusiera aun mas nerviosa, hasta el punto en que sus piernas casi se doblaban.

"Escucha, Nary, no hay tiempo para que te dejes llevar... Necesitamos que nos digas, como escapaste?" continuó Marie, yendo de una vez al punto.

"Bueno... No escape, de hecho todavía sigo dentro" respondió esta, volteando a ver a Drake y a Otome.

"¿Estas escondida?" volvió a preguntar Marie.

"Tampoco" contestó nuevamente Nary.

"Entonces eres una rehén..." anegó la Inkling de tentáculos blancos.

"Eso tampoco..." continuó Nary, ahora confundiendo un poco a los que estaban del otro lado del teléfono.

Eso, hasta que súbitamente la voz de Callie volvió a sonar por la de Marie.

"¡¿Lograste vencerlo?!" preguntó esta, ahora en un tomo más alegre que serio.

"¿Vencerlo... A quien?" devolvió la pregunta Nary.

"Ya sabes, a esa... Cosa" contestó Callie, a la vez que todos los que estaban con ella ya querían saber lo que había pasado.

"¿Cosa, pero de que cosa están-?... Oh!, hablas de Drake, no es así?!" volvió a preguntar la inkling naranja, entendiendo de lo que trataban de saber.

"¿Drake, quien es Drake?" dijo Callie, haciendo que Nary recordara que ellos no sabían nada del humano.

"Oh, bueno... Jeje, es una larga historia" contestó la chica calamar, mientras esta se rascaba detrás de la cabeza con nerviosismo.

Después de lo que pareció, una media hora, Nary les había puesto al tanto de lo que había sucedido con ella, la octoling, y Drake después de que las puertas de la bóveda se habían cerrado. Claro, con el permiso del pelicastaño, y exceptuando algunas 'partes'.

"Mmm... Nary, podrías dejarnos hablar con... Él?" preguntó ahora Marie, con un tono aún mas serio que el de antes.

Nary ante eso, volteó a ver al humano, para luego volver a poner su atención en su SquidPhone.

"Un segundo..." respondió la chica calamar mientras esta se acercaba al pelicastaño.

"Emm... Quieren hablar contigo" dijo Nary mientras le ofrecía su celular.

"¿Conmigo?" pregunto Drake, señalándose a si mismo.

La Inkling solo se dedicó a responder asintiendo con la cabeza, solo para que después de eso, el humano tomara su teléfono.

"Escucha, solo acercalo a tu oreja y-..." trató de explicar Nary como usar su SquidPhone, pero esta se calló al ver como el pelicastaño ya estaba hablando por este, como si ya supiera como se usaban.

"¿Hola...?" dijo Drake seriamente, mientras ponía una mano en su cintura.

Lo único que pudo escuchar este como respuesta, fue un jadeo de sorpresa por parte de Marie, solo para luego escuchar como esta aclaraba su voz.

"Entonces... Es cierto..." dijo Marie manteniendo su tono serio.

"¿Que cosa?" preguntó Drake también en el mismo semblante.

"Que ahora hablas nuestro idioma..." continuó Marie.

"Mas o menos..." respondió Drake.

"Escucha... Vayamos al grano... No hay por que hacer esto de la forma agresiva, así que solo te pedimos que dejes ir a la Inkling" exigió Marie tratando de negociar con el humano.

"Que no escuchaste a tu amiga?... Yo no secuestre a nadie, ella... Se metió sola a mi base..." contestó Drake, frunciendo un poco el ceño.

"Tal vez sea cierto... Pero como saber que ahora no la tienes de rehén?" continuó la agente.

"Contesto ella, no?" discutió el humano.

"Pudiste haber hecho que ella contestara..." discutió ahora Marie.

"Ahh... Esta bien... Que quieren para que pruebe que... No les he hecho nada?" pregunto Drake en un suspiro, mientras se pejizcaba el puente de la nariz, ya un tanto harto.

"Envíanos una foto de ti y ella, en la misma captura..." ordeno esta, mientras estaba por finalizar la llamada, pero justo antes de eso, Drake la detuvo.

"Antes de eso... Dejame preguntarte algo... Tu eres una de esas dos que me persiguió por todos lados, verdad?" pregunto este aun con el teléfono en su oreja.

"Si... Como lo sabes?" preguntó ahora Marie.

"Reconocería sus voces donde fuera... Sobre todo, la de... Tu chillona amiga..." respondió Drake, logrando luego escuchar a alguien decir: '¡Oye!' desde el otro lado del SquidPhone.

"A-apresurate con esa foto..." finalizo Marie, tratando de contener una pequeña risa, para luego terminar la llamada.

Drake ante eso, solo se dedicó a devolverle su SquidPhone a Nary, mientras esta y Otome se le quedaban viendo.

"¿Que te dijeron?" preguntó la Inkling, expectante a lo que diría el humano.

"Quieren una foto..." dijo Drake como si nada, dejando a Nary y Otome con una gran cara de confusión.

"¿Una... Foto?" preguntó la chica calamar, ladeando un poco la cabeza.

"Si... Aún dudan si eres mi rehén... Por eso quieren una... Foto" contesto el pelicastaño cruzándose de brazos.

"No es de sorprenderse, los Inklings solo confían en los suyos, y en nadie más..." comentó la Octoling, ganándose una fulminante mirada por parte de la inkling.

"Muy bien, no empiecen... Haber... Mejor tomemos esa foto de una vez... Aunque no tengo idea de con que hacerlo... Mucho menos el como enviarla..." dijo Drake mientras se rascaba la parte trasera de su cabeza, pensando en una solución.

"Eso es muy fácil, por que no simplemente usamos mi SquidPhone" sugirió Nary, levantando dicho dispositivo para enfatizar.

"¿Tu que...?" preguntó Drake, extrañado por el nombre tan curioso.

"Mi SquidPhone" repitió la Inkling de tentáculos naranjas con una sonrisa.

"¿SquidPhone... Sera un juego de palabras de SmartPhone?... Como sea..." pensó el humano para si mismo.

"Si quieren yo la tomo, y la envío" prepuso la chica calamar, pero en eso, Drake la detuvo.

"Dijeron, que debemos estar ambos... En la foto"

"Entonces, que propones?" preguntó Nary, a lo que el pelicastaño volteó a ver a Otome.

"A mi no me me metan en sus problemas..." discutió rápidamente la teniente, ya viéndose venir lo que Drake le pediría.

"¿Pues entonces... Como aremos?" pregunto el humano.

"Señor... Si me lo permite, puedo tomar yo dicha foto" sugirió Bruce, apareciendo por detrás del pelicastaño, y haciendo que se sobre saltara.

"Dios mío, Bruce... No te me aparezcas así..." se quejó Drake, poniéndose una mano en el pecho, y apoyando su otra mano en la rodilla.

"Lamento haberlo asustado, pero he estado escuchando lo que intentaban hacer, y quise ver si les podía ser les de utilidad" dijo el robot, ganándose la atención del trío.

"Pues no es mala idea..." comentó Drake, volteando a ver a ambas cefalópodas.

"Si, pero... Creo que tenemos un problema" dijo Nary con algo de preocupación en su rostro.

"¿Y ese sería...?" preguntó Otome.

"¿Como hará el para enviarla?" dijo la inkling también mirando al androide flotante.

"De eso no tiene de que preocuparse, señorita Nary, solo dejémelo a mi" respondió Bruce.

Nary solo se dedicó a suspirar, para luego ofrecerle su SquidPhone.

"Eso no es necesario, solo pongan se uno al lado del otro" continuó el robot. Y haciendo caso a lo que este había dicho, tanto Drake como Nary se pusieron uno al lado del otro.

"Espera, Bruce... Nary, mejor ponte a un metro de mi... Así no parecerá que te sujeto de... Alguna forma" dijo el pelicastaño.

"¿Así?" preguntó la chica calamar, poniéndose a lo que le pareció a ella un metro.

"Si... Y muestra ambas manos también" volvió a pedir Drake.

"¿Así?" preguntó nuevamente Nary con una sonrisa juguetona, poniendo en ambas manos el signo de la paz.

"Perfecto... Ok Bruce, ya puedes tomarla" indicó Drake mientras este se cruzaba de brazos.

"Lo siento señor, pero aún no puedo hacerlo" dijo el robot, confundiendo a los dos.

"¿Y eso por que?" preguntó Drake levantando una ceja.

"La señorita Otome todavía no está junto a ustedes" contesto Bruce, llamando la atención de la octoling.

"¿Yo que?" preguntó la misma chica pulpo, volteando a verlos.

"Creo que... Bruce tiene razón... Deberías estar en la foto también" comentó el humano, mientras también volteaba a verla.

"Oye, ya les dije que no me metieran en sus problemas" volvió a quejarse Otome con el ceño fruncido.

"Oh vamos... Si no vas a tomar la foto... Al menos podrías salir en ella" discutió Drake con una sonrisa.

"No quiero...!" respondió Otome, apartando la vista de ellos.

"¿Por favor?" continuó el pelicastaño, manteniendo su sonrisa mientras se acercaba a la octoling.

"No..." volvió a decir Otome, permaneciendo en la misma posición.

"Significaría mucho" volvió a hacer el intento Drake.

"¡Dije que-...!" exclamó la Octoling volteando a ver al humano, pero se detuvo a medie frase, quedándose mirando fijamente a los profundos ojos marrones de este, los cuales también estaban viendo fijamente a los suyos.

Y el hecho de que este todavía conservaba su sonrisa, hizo que la chica pulpo tragara saliva, hasta incluso por un momento sintió como sus mejillas comenzaban a calentarse. Eso hasta que esta volvió en sí, apartando la mirada de él, para luego dar un suspiro resignada.

"Esta bien, lo haré... Pero con una condición!" dijo Otome aun sin voltear a verlo.

"¿Y esa sería?" preguntó Drake, ladeando un tanto su cabeza.

"¡Luego te la digo... Ahora tomemos ya esa dichosa foto de una vez...!" respondió Otome, comenzando a caminar a pisotones hacia donde se tomarían la foto.

Mientras se acercaban, a Nary se le podía notar un rostro serio, con unos ligeros toques de celos, mientras miraba a la Octoling, pero logrando disuadirlo cuando el par llegó a su posición.

"Bueno... Listas?" dijo Drake poniéndose en medio de ellas.

"¡Claro!" respondió Nary.

"¡Solo tomala Ya!" contesto Otome.

"Bien, Bruce... Tomala!" ordenó Drake, y sin discutir, de la lente del robot se proyecto un pequeño flash, señalando que la foto había sido tomada.

"Esta hecho, señor" respondió Bruce, proyectando dicha foto en un holograma frente a ellos.

"Genial, ahora solo queda enviarla" dijo Drake mirando a Nary.

"Señorita Nary, podría acercarse un momento?" pidió el robot, a lo que la inkling, algo extrañada se acerco a este.

"¿Podría extenderme su celular?" volvió a pedir Bruce, mientras que la chica calamar aun sin entender lo que tramaba Bruce, volvió a hacer lo que decía.

Y al instante, de la parte inferior del androide, salió un cable USB, que se conecto con la entrada del SquidPhone de Nary, y que por suerte, encajaba a la perfección.

Y tras unos tres segundo, el celular de la SquidFire emitió la notificación de mensaje, a la vez que Bruce desconectaba su cable USB del teléfono de esta.

Nary al instante abrió el mensaje, y efectivamente ahí estaba la foto, la misma que supuestamente el ser flotante había tomando.

"Ahora el resto depende de usted" finalizo el robot, para luego desmaterializarse frente a ella.

Nary saliendo de su asombro, volteo a ver al par detrás de ella, y mostrarles la foto con una radiante sonrisa.


[Base secreta de Cuttlefish]

Los cinco agentes estaban sentados, esperando que un mensaje por parte de Nary les llegara.

O mas bien dicho, solo tres de ellos. Levin, Shara, y Nayls, ya que Callie y Marie estaban caminando de un lado a otro, esperando una notificación.

"¡Ahhh, por que tardan tanto?!" exclamó Callie ya un poco harta, y deteniéndose de golpe.

"Tal vez ni siquiera la envíen... Probablemente era mentira lo que ese tipo decía" comentó Marie también deteniéndose.

"Si, mejor volvamos idear un pla-..." trató de decir Callie, pero esta fue interrumpida por una notificación del SquidPhone de Nayls.

Y casi como en sincronía, todos se pusieron frente a Nayls, esperando a que este dijera de quien era.

"¿Es ella?" preguntó Shara, siendo la primera en hablar.

"Ahhh... No, es solo es una propaganda" dijo Nayls dando un suspiro decepcionado al igual que los demás.

Pero justo en ese momento, otra notificación había llegado, y para la alegría del grupo de agentes, esta si era de parte de su amiga.

"¡Oigan, es de Nary, y mandó la foto... Wow!" exclamó Nayls volviendo a llamar la atención de todos.

"Dejanos ver!" dijo Levin.

Haciendo caso a lo que su amigo de tentáculos azules le había pedido, este puso el celular en frente de ellos, mostrándoles la foto, en la cual se podía ver a una sonriente Nary, haciendo lo que Drake le había pedido, además de que este se veía con un rostro serio, y con los brazos cruzados.

"Entonces, así se ve sin estar cubierto de tinta y con una sabana atada a su cintura" comentó Marie observando al humano.

"Si, hasta podría decir que se ve fresco..." dijo Callie, ganándose una mirada por parte de su prima.

"¡P-pero esta claro que no lo es!" volvió a decir Callie, con una sonrisa nerviosa mientras negaba con su cabeza y movía sus manos frente a ella.

"Oigan... Que no es esa una de las Octoling que nos encontramos en esa caverna?" preguntó Shara, mientras que ahora ponía su atención sobre Otome. La cual al igual que Drake, tenía un rostro cerio, solo que esta tenía una mano en su cintura, y una expresión de molestia.

"Y ahora que haremos?, parece que ese ser decía la verdad, Nary no se ve muy secuestrada que digamos" preguntó Levin, mientras miraba a las Squid Sisters.

"Lo único que nos queda ahora es esperar, y rezar porque a su amiga no le pase nada" dijo Cuttlefish, quien se había quedado sentado mirando al grupo de jóvenes.

"Aún así, llamaremos a su amiga cada dos días, para saber de su estado" dijo Callie.

"Pero mientras, debemos estar preparados por si cualquier cosa llega a pasar" dijo ahora Marie.

"Si, si quieren estar a nuestra altura, tendrán que entrenar, y mucho...!" continuó la idol de tentáculos negros con una sonrisa retadora.

"¿Están listos reclutas?" preguntó ahora Cuttlefish poniéndose de pie con su bastón.

"¡SI SEÑOR!" exclamaron los tres amigos al unísono mientras se ponían firmes.


[OctoValley]

[Zona de la excavación]

[Bóveda]

[Una semana y dos días después]

Ya más de una semana había transcurrido desde que Nary, Drake, y Otome estaban encerrados en la bóveda.

Nada había cambiado mucho, excepto que ahora Nary todos los días se la pasaba jugando en la consola que al parecer, Bruce había restaurado, además de recibir llamadas por parte de sus amigos o las SquidSiters para saber de su estado.

Claro que principalmente el uso de dicha consola sería para Drake. El que el humano se distrajera jugando algunos videojuegos de vez en cuando, evitaría que este perdiera el juicio estando solo, o eso es lo que Bruce afirmaba.

Aunque ahora estando, mas o menos acompañado, no sería tan necesario.

La inkling por supuesto, estaba maravillada con la calidad de dichos vídeojuegos, no eran pixelados o de un modelo sencillo como los de Inkopollis, sino que los personajes y escenarios se veían casi reales, claro que exceptuando algunos de ellos, en los que sí mostraba cierto grado de píxeles, pero la calidad de movimiento y fluidez de estos, era lo de menos.

En cuanto a que consola era, pues digamos que Sony y Microsoft había dejado atrás sus diferencias, y entre ambas compañías habían creado una nueva consola, a la cual había bautizado como 'Play X', la más poderosa consola habida y por haber del mundo, misma que rivalizaría con la PC Gamer. Y ahora Nary era la primera Inkling en probarla.

Claro que Bruce también había restaurado barios juegos de todo tipo, a los que por supuesto Drake optaría por esconder los juegos de guerra. Tales como Call Of Duty, Battlefield, Medal Of Honor, Gear Of War, Halo, Doom, etc. Y entre otros como Mortal Kombat, u otros generos de pelea con esa cantidad de violencia, también los había confiscado.

Otome por otra parte, ella solamente se dedicaba a explorar la basta base. Claro que con la compañía de Drake, para que no se perdiera, hasta el punto en que la octoling pudiera orientarse por si sola.

Pero eso si, también habían secciones en las que el humano ni le permitía pasar, ya que era restringido o secreto, haciendo que a la chica pulpo le picara la curiosidad.

El día en que Drake se puso manos a la obra con la puerta, ambas chicas se decepcionaron un poco al saber que no había nada que hacer con dicho portal, puesto que los componentes de esta estaban en tan mal estado, que solamente soportaría abrirse cuando el tiempo acabara, y por lo que habían escuchado de Drake; si el tocaba algo, probablemente la puerta tardaría aún más en abrirse, o lo mas seguro, es que jamas se abriera, por lo que lo único que les quedaba, era esperar a que el lapso de las dos semanas terminara.

Aunque tampoco era algo que 'ahora' los molestara mucho.

Ya que mediante los días pasaban, los tres empezaban a llevarse un poco mejor

Incluso Drake jugaba un poco con Nary, diciéndole lo que decían los personajes y/o diciéndole lo que tenía que hacer o adonde ir cuando ella no sabía que hacer.

También aveces acompañaba a Otome en sus paseos por la base, incluso cuando ella ya sabía por donde iba, y tampoco era que a la octoling le molestara. De hecho, habían algunas veces en que se lo pedía.

En cuanto a entre ellas dos. Ya no se llevaban tan mal como antes, pero aún así, de vez en cuando se miraban con algo de rivalidad.

Lo que causaba que una simple partida de PvP en un juego de pelea como el KOF, se convirtiera en una batalla campal por la victoria.

O que una simple caminata, se transformara en una carrera por toda la base.

Y así casi todos los días.

/-/-/-/-/-/

Era de noche en la bóveda, alrededor de las 02:00 de la noche, y los tres únicos seres vivos en ella, ahora se encontraban en sus respectivos cuartos.

O mas bien, solo dos de ellos, ya que una Inkling estaba asomando su cabeza por fuera de su habitación, mirando a ambos lados del pasillo, solo para luego a hurtadillas, esta se adentrar en la habitación de en frente.

[N/A: muy bien señores y señoras, hasta aquí nuevamente empieza lo rikolino 7u7, por lo que como dije antes, para los que no les guste o no estén interesados, simplemente adelántense hasta la siguiente nota que ponga, hasta entonces... Oh, y para los que lo esperaban, Bon Apetite 7u7]

Por alrededor de los últimos cinco días, Nary se había escapado de su habitación sin despertar a Otome, para meterse en el cuarto de Drake, a... 'Ayudarlo a dormir', y hoy no era la excepción.

Ahora esta deleitándose con la virilidad del humano, Nary chupaba con sumo gusto el pene de este, rodeándolo con su larga lengua, y cubriéndolo con su saliva, mientras con una o ambas manos, masturbaba la base de este.

Mientras que en la zona baja de la chica pulpo, esta había bajado completamente sus pantaloncillos y ropa interior, dejando ver bien tu carnoso y redondo trasero, sin mencionar que esta movía hábilmente sus dedos dentro y fuera de su vagina.

He impulsada por el deseo, la chica calamar introdujo el pene de Drake dentro de su boca hasta donde ella pudiera alcanzar, el cual era casi hasta la mitad de este, el cual eso ya era un logro para ella, siendo que el miembro del pelicastaño era demasiado grande para su boca.

Y permaneciendo alrededor de un unos diez segundos con el pene de Drake hasta su garganta, Nary se separo su boca de este bruscamente por la falta de aire, y el sentir como si se atragantara.

Manteniendo su lengua afuera mientras jadeaba, un hilo de saliva, y 'algo mas', todavía conectaba el pene de Drake con su boca.

La Inkling se le quedó viendo unos segundo, solo para luego volver a tomarlo con ambas manos, y darle una gran lamida de la base hasta la punta mientras tenía sus ojos cerrados.

Pero en eso, la chica calamar volvió a abrir sus ojos como platos, y eso se debió a que esta escuchó un jadeo de impresión por parte de Drake.

Nary levantó lentamente su rostro, aún en la misma posición, y con su lengua en el pene de este. Solo para ver con impacto a un despierto Drake, el cual la veía con impresión, y un rostro sonrojado a mas no poder.

Tanto el humano como la Inkling permanecieron mirándose fijamente a los ojos sin saber como reaccionar.

Eso hasta que inconscientemente, la lengua de Nary se movió aún en el miembro del pelicastaño, provocando que este diera un pequeño espasmo.

Ante eso, la chica calamar aflojó un poco su expresión de nerviosismo, solo para luego dar otra lamida más en el pene del humano.

"N-nary... P-pero que-...?" dijo Drake mientras intentaba mover sus brazos para detenerla, pero eso se vio frustrado, al sentir como algo lo sujetaba de sus muñecas.

Y al ver de que se trataba, el humano se impresionó al ver que sus manos estaban atadas a su cama con unas playeras suyas.

Y no solo eso, también sus pies se vieron sujetados, lo que eso causo que el pelicastaño se sintiera algo asustado, pero al sentir la suave lengua de la SquidFire en su miembro, hacía que este se estremeciera.

Nary por supuesto, ya sabía que algún día Drake la descubriría, de una forma u otra.

Y además de que hacerle una felación al pelicastaño mientras se masturbaba, comenzaba a no ser suficiente para ella.

Así que antes de que salieran, la Inkling se había decidido en tener su primera vez con el humano.

Y eso era por que la chica calamar había empezado a sentir algo más que solo amistad por Drake.

Nary continuó lamiendo el miembro de Drake, mientras este movía débilmente sus brazos para librarse de sus ataduras, pero sin éxito.

"N-nary... Esto no esta b-bien..." dijo el humano intentado detenerla, pero en eso recordó que no tenía puesto su parche para hablar su idioma. Por lo que la chica de tentáculos narnjas hacía poco o nada de caso a lo que el pelicastaño decía.

Pero el forcejeo de Drake se detuvo, ya que sintió como algo húmedo se envolvía alrededor de su miembro.

Este volvió a mirar a la Inkling, y vio con asombro, como la lengua de esta se enrollaba alrededor de su virilidad como una serpiente.

No conforme con eso, la chica calamar volvió a introducir su pene dentro de su boca, comenzando a chupar, y causándole un espasmo a Drake por la increible sensación.

"Nary... A-ah!~..." Drake trató de articular alguna frase, pero esas fueron las únicas palabras que salieron de sus labios.

El humano trató de mantener la compostura, y el control de si mismo, pero el hecho de que una linda Inkling estuviera lamiendo, chupando, y ahora también masturbando lo, todo a la vez, no lo ayudaba en nada.

Hasta incluso el sonido de succión que Nary hacía, solo causaba que el pelicastaño se excitára todavía mas.

Días atrás, las mamadas de la chica calamar eran bastante inexpertas, pero con el pasar de los días, practicándole una felación a Drake todas las noches, había empezado a tomarle el truquillo.

Y de entre gemidos y jadeos, Drake comenzaba a sentir que llegaba a su limite, por lo que su pene comenzó a palpitar. No obstante, Nary al notarlo, supo perfectamente que el humano estaba cerca de tener un orgasmo.

Sin esperar a que el pelicastaño le advirtiera, la chica de tentáculos naranjas comenzó a subir y bajar su cabeza más rápidamente, además de que también había empezado a masturbarlo y mover su lengua con más brusquedad. Empujándolo sin piedad al borde.

"¡N-nary... Detente, v-voy a-...!" nuevamente trató de advertir Drake, pero ya era demasiado tarde, un inminente orgasmo llego al pobre humano, quien empujó instintivamente su pene aún más adentro en la boca de la inkling.

Nary claramente se sorprendió un poco al sentir el miembro del humano entrar hasta su garganta, y todavía más al sentir esa enorme y caliente carga de esperma inundando su boca.

Tragando todo lo que podía, Nary cerró sus ojos con fuerza, intentando mantener el pene de este en su cavidad oral el mayor tiempo posible

Pero como las últimas veces, la cantidad fue demasiado para ella, y esta se separo bruscamente de su miembro, dejando que el resto de chorros cayeran sobre ella.

Y por supuesto que Drake, ahora estando despierto y consciente de lo que Nary hacía, su cuerpo tuvo una reacción más intensa, por lo que su orgasmo fue incluso mayor que los demás en los que estaba dormido, cosa que tomó desprevenida a la Inkling.

Jadeando levemente y con sus ojos cerrados, Drake permaneció inmóvil por unos instantes, ahora con su cuerpo un poco más relajado.

Pero en su zona baja, su 'compañero' seguía de pie, y listo para seguir con la noche.

Y esto no fue ignorado por parte de la chica calamar.

Nary con algo de nerviosismo y ansiedad, esta se puso de pie sobre la cama, con sus pies a ambos lados de Drake, más específico, sobre su pene.

Lentamente el humano volvió a abrir sus ojos, solo para ver que la joven Inkling estaba sobre él, o mas bien, justo sobre su miembro, dejando ver bien su pequeña y húmeda vagina.

Drake por supuesto al verla, no pudo evitar dar un trago de saliva, mientras que su pene daba un ligero pálpito, pero al instante, el pelicastaño supo lo que la chica calamar estaba por hacer.

"¡N-nary... E-esto esta mal, por favor d-detente, y haremos que esto nunca paso, por favor!" trató de negociar Drake con una temblorosa voz, y una expresión casi desesperada, pero al igual que las otras veces, esta no hizo caso a lo que el humano decía, solo para luego tomar su erecto miembro, y colocar la punta de este en su entrada.

Y lo vieras como lo vieras, cualquiera aseguraría que algo de ese tamaño jamás podría entrar en ella, pero al parecer, a Nary eso no le importaba.

"Por favor, no hagas esto... Se que ahora no me entiendes pero-...!" Drake no pudo terminar su oración, al sentir como la SquidFire colocaba un dedo sobre los labios de este, mientras le dedicaba una sonrisa.

"¡Woomy!" fue lo único que dijo Nary, para luego quitar su dedo de los labios del pelicastaño. Y antes de que este dijera algo, la chica calamar, comenzó a bajar su cuerpo.

Drake no pudo hacer más que ver con asombro como la pequeña vagina de Nary, lentamente engullía la punta de su miembro, causando que una repentina corriente eléctrica recorriera su cuerpo al sentir esa sensación.

La Inkling por supuesto, tampoco se quedó atrás, ya que esta arqueo su espalda mientras abría bien sus ojos, al sentir como el caliente miembro del humano entraba en ella, y eso que era solo la punta.

Nary comenzó a bajar un poco más, haciendo que dicho miembro continuara introduciéndose dentro de ella. Drake levantó su mirada para verla, y notó que esta no tenía un rostro de dolor, sino de un tanto de esfuerzo.

Para los que quisieran saber, Drake por supuesto hace tiempo que había dejado de ser virgen, pero ahora mismo, se sentía como si de verdad lo estuviera haciendo por primera vez en su vida.

Deteniéndose entre jadeos, Nary por fin había metido hasta la mitad del pene humano dentro de ella. El pelicastaño miró su vagina, esperando que de esta saliera algo de sangre, o tinta en esta ocasión, pero para la sorpresa del mismo, nada había salido de la intimidad de Nary.

(N/A: un poco de información para los que estén confundidos... Verán, las mujeres Inklings no poseen una virginidad como las mujeres humanas. La razón?, pues eso se debe a que al cambiar de forma o ser splateados, sus cuerpos se moldean y regeneran constantemente.

Y si estas poseyeran esa virginidad, sería en vano, puesto que esta se regeneraría una y otra vez al perderse, y sería algo muy doloroso para ellas.

También esta el hecho de que al no poseer huesos, y estar hechos casi en su totalidad de agua y tinta, pueden ser muy flexibles, tomando en cuanta sus zonas intimas también 7u7.)

La sensación que ahora la inkling estaba experimentando, no se podía expresar con palabras, pero el rostro que ahora tenía lo decía todo.

Sus ojos estaban entrecerrados, y su lengua colgaba fuera de su boca, a la vez que jadeaba pesadamente.

La sensación de tener el enorme y caliente miembro de Drake dentro suyo, la hacía casi enloquecer.

Y Drake tampoco se quedaba atrás, lo que el humano esperaba, resulto ser algo un poco más diferente. El interior de la chica calamar se sentía fresco, pero no fresco de una forma fría, sino una agradable sensación fresca.

Sin mencionar que la vagina de esta apretaba con fuerza su miembro, pero a la vez, sutilmente.

Otra cosa que sorprendió al humano, era que se sentía como si la estirada entrada de Nary hiciera succión sobre su pene.

Así que sin perder mas tiempo, Nary comenzó a moverse de arriba hacia abajo, mientras daba gemidos y quejidos con cada bajada que daba.

Drake por supuesto se dio cuenta de los inexpertos movimientos de la Inkling, por lo que esto confundió un poco al pelicastaño, creyendo que ella tampoco era virgen como él.

Deleitándose con el gran miembro del humano, esta no pudo evitar comenzar a moverse aún más rápido, mientras que en la zona abdominal de la misma, un bulto producido por el pene del pelicastaño, comenzaba a asomarse cada vez que estaba bajaba.

Los gemidos y jadeos llenaron la habitación, lo que por suerte no despertaron a la Octoling, ya que tanto su puerta como la de Drake estaban cerradas. Nary había pensado en todo.

La mente del pelicastaño ahora estaba en blanco, lo único en que podía pensar era en los lindos gemido de la chica calamar, y la sensación que le producía entrar y salir del interior de esta.

Pronto con cada bajada que Nary hacía, el erecto pene de Drake comenzaba adentrarse todavía más profundo en ella, haciendo que el bulto en su vientre comenzara a hacerse aún mas grande también, hasta el punto en que el humano sintió como su pene chocaba con algo.

La Inkling de tentáculos naranjas al parecer también lo había sentido, ya que esta se había detenido de golpe, con casi todo el miembro del pelicastaño en su interior, al mismo tiempo que esta dejaba colgar su cabeza hacia atrás mientras apretaba sus dientes por el intenso placer.

Y al instante Drake pudo darse cuenta de con lo que su pene había chocado, era nada mas ni nada menos que el cuello uterino de la dominante cefalópoda, por lo que esta no espero mas, y volvió a subir y bajar sobre el miembro del pelicastaño más bruscamente, con el fin de volver a sentir esa vara de carne chocando con su punto G.

"N-nary... Espera un m-momento...!" pidió Drake al sentirse llevar por el placer, y haciendo que su respiración se entrecortara.

Nary solamente respondió con gemidos y jadeos, mientras se movía con mejor ritmo que antes. Y moviendo sus brazos hacia atrás, apoyando sus manos sobre las piernas de Drake, la chica calamar puso su mirada sobre el bulto en su vientre, mirándolo como subía y bajaba con una mezcla de impresión, miedo, y lujuria.

Drake por otra parte también tenía su mirada en el mismo lugar que la Inkling. Otra cosa que notó también, es que el interior de la chica calamar, había empezado a calentarse, a la vez que inconscientemente, este también había comenzado a mover sus caderas junto a las de Nary.

Esta ahogándose de placer, comenzaba a sentirse un poco cansada, pero tampoco quería detenerse, quería seguir sintiendo como si su cuerpo se fusionara con el de Drake.

Solo hasta que en un mal movimiento, la joven inkling resbaló uno de sus pies, haciendo que pusiera todo su peso sobre el pene del humano.

Lo siguiente que Drake sintió, fue que su miembro había entrado por completo en la vagina de Nary, eso y de sentir como si hubiera entrado en algo más.

Nary por otro lado, tenía sus ojos perdida mente mirando hacia arriba, a la vez que comenzaba a babearse, aún con su lengua fuera de su boca.

Confundido, Drake se preguntó que había pasado, pero al instante, como un martillazo en su cabeza, una idea había llegado a su mente.

Y esa era que probablemente la punta de su miembro había traspasado su cuello uterino, y entrado en su útero directamente.

Pero el pelicastaño no tuvo mas tiempo de pensar, ya que sintió como la lujuriosa chica calamar había comenzado a mover sus caderas nuevamente.

Y ahora moviéndose hacia adelante, la misma dominante apoyó sus manos sobre el abdomen bien marcado del humano, para luego levantar su cabeza, mostrando una sonrisa totalmente pervertida.

Nary simplemente dijo unas leves palabras que Drake no entendió, para luego moverse con mucha más fuerza, sintiendo su interior siendo estirado con brusquedad.

Drake, solamente podía sentir todo su miembro penetrando la vagina de la pobre Inkling. También la sensación de entrar y salir del útero de la chica calamar, le causaba un placer todavía mas intenso, como si una segunda boca dentro de la primera se tratara, y empujándolo cada ves más a su limite.

Y con la chica calamar no era la excepción.

"Oye... N-nary, creo que y-ya voy a..." trataba de advertir Drake, intentado resistir lo más que podía. Pero la inkling continuó dando fuertes sentones, haciendo que sus glúteos chocaran con la pelvis del humano, e inundando la habitación con el rítmico sonido de palmadas.

Sintiendo su pene palpitar, el pelicastaño volvió a intentar zafarse de sus ataduras, y quitar a la inkling antes de que se corriera, pero al igual que con la anterior vez, sus fuerzas le traicionaron, haciendo que ni siquiera pudiera forcejear con ellas.

Nary por supuesto también podía sentir el miembro del humano palpitando en su interior, advirtiéndole que este ya estaba en su limite.

Pero lo que hizo la inkling no fue quitarse o detenerse como Drake le estaba pidiendo, sino que esta comenzó a menear sus caderas mas vigorosamente, mientras esta centraba su vista en el rostro de pelicastaño, viendo las expresiones que el hacía.

El placer ya era insoportable para el pobre de Drake, y haciendo un en vano intento por impedir que pasara lo que sabía iba a pasar, intento sacudir su cuerpo para tratar de volcar a la Inkling de sobre el.

Pero ya era demasiado tarde. Una ola de éxtasis se apoderó de su cuerpo, e instintivamente empujo todo su pene en el interior de la chica calamar, para luego dejar salir otra enorme carga dentro de ella.

Nary lo único que pudo sentir, fue como su interior era inundado por el espeso y caliente semen del humano.

La Inkling dando un grito de puro éxtasis, esta también tuvo su propio orgasmo, sintiendo como su vientre era llenado cada vez mas y más por el pelicastaño.

Incluso este comenzó a hincharse como un globo por la enorme cantidad de semen que Drake estaba depositando en su útero, lo que causaba que pareciera que su propio orgasmo no fuera a tener fin.

Y después de dos minutos, que para ambos pareció unas interminables par de horas, Drake simplemente se quedó recostado en la cama, jadeando por el agotamiento mientras este tenía los ojos cerrados.

Nary con unos ojos entrecerrados, se quedó sentada en la entrepierna de Drake, aún con el miembro de este en su interior, sin mencionar los espasmos que de vez en cuando daba.

Hasta que bajando su mirada, la Inkling contempló su, ahora, gran vientre hinchado, al cual esta acarició con una de sus manos, mientras sonreía cansadamente.

"Sabes?... Yo también esperaba algo mas... Romántico..." finalizó la chica calamar, para que luego al instante esta se desplomara sobre el pecho de Drake.

(N/A: bueno, hasta acá llega lo rikolino, espero que lo hallan disfrutado como yo escribirlo 7u7)

Por un momento este se asustó al pensar que algo malo le había pasado, pero al sentir la respiración de ella en su pecho, se tranquilizó un poco.

Y con una durmiente Nary sobre él, Drake comenzó a pensar en lo que había pasado. El había sido violado por una Inkling, una criatura no humana, un calamar humanoide.

Ahora acaso el podría considerarse un zoofílico?, esa opción tampoco era muy probable, ya que estos seres eran inteligentes, probablemente tanto como los humanos, por lo que tal vez ya ni se les pudiera considerar animales.

"Bueno... Tampoco estuvo tan mal..." terminó Drake mientras que los párpados comenzaban a pesarle. Y sin poder resistirse, se dejó llevar por el sueño.