Tanto Levin como Nary salieron de su cobertura, reanudando el combate. Marie y Callie no se quedaron atrás y también respondieron, pero no contaron con que los dos se separaron, Levin hacia el lado de Callie, y Nary al de Marie.

La famosa Inkling de tentáculos negros rápidamente empezó a agitar su rosillo, salpicando la tinta de este contra el líder de los SquidFire, pero Levin viéndolo venir, la esquivo haciéndose a un lado, seguido de volver a disparar contra dicha chica calamar.

Callie sonriendo, cargó contra el contrario, pero al instante este retrocedió mientras continuaba disparando, asegurándose de que el acercarse no fuera fácil para ella.

Por otro lado, Marie y Nary tenían una situación similar, solo que en esta ocasión, era Marie la que trataba de poner la mayor distancias entre ella y su adversaria, la cual no dejaba de avanzar, también le parecía algo molesto que cuando creía que tendría un disparo fijo en Nary, la susodicha se ocultaba en la tinta ya disparada, solo para volver a salir y reanudar su avance.

En una ocasión, un disparo de tinta de Nary si acertó en ella mientras que Marie nuevamente fallaba otro disparo contra la chica calamar menor, pero justo antes de que Nary creyera que la tendría, Marie cambió a su forma cefalópoda, aprovechando el chorro de tinta de su disparo fallido, pasando de largo a Nary, y volviendo a su forma bípeda detrás de ella.

Casi patinándose al detenerse tan de repente, la chica calamar menor se dio la vuelta, viendo como Marie saltaba una columna derribada, ocultándose detrás de esta.

Obviamente Nary no desaprovechó la oportunidad, y mientras que Callie estaba ocupada con Levin, como una polilla a un farol, la Inkling fue directo hacia donde había ido Marie. Cosa que obviamente al notar eso, Callie al instante intentó cubrir a su prima, pero Levin se lo impidió poniéndose en medio con una sonrisa.

"¡Tu oponente soy yo!" exclamó el susodicho chico calamar, reanudando su batalla con la famosa Inkling de tentáculos negros.

Y cerca de donde los cuatro se enfrentaban, estaban Shara y Nayls presenciando con impresión los sucesos de como solo dos de sus amigos estaban poniéndoles las cosas algo complicadas a las Squid Sisters. Claramente la base contaba con una plataforma de reaparición, con la que les permitía entrenar con armas de verdad sin ninguna preocupación.

Ya llegando a la cobertura donde supuestamente estaba oculta Marie, Nary saltó sobre esta, apuntando con su Splatershot de Elite al frente y a los lados de ella, pero no pudo encontrarla, cosa que dejó en completa confusión a la chica calamar, mientras que sin darse cuenta, de un pequeño charco de tinta rosa magenta que estaba detrás de ella, un pequeño calamar del mismo color surgió de este, para luego empezar a tomar una forma humanoide, revelando ser Marie la que estaba apareciendo detrás de Nary.

La susodicha agente rodó sus ojos a un lado, sintiendo la presenciar de la idol de tentáculos blancos, seguido de darse la vuelta lo mas rápido que pudo, apuntando su arma contra la contraria. Pero justo cuando creyó que conseguiría dispararla, Marie con una velocidad que rivalizaría con la de su prima, llegó hasta donde estaba la chica calamar menor, seguido de asestar una buena patada en el Splatershot de esta, quitándoselo de las manos.

No terminando con eso, la famosa idol dio un giro mientras que con su otra pierna, barría las de Nary, causando que esta cayera al piso. Tratando de volver a ponerse de pie, de pronto sintió la propia suela de Marie sobre su pecho, evitando que lo consiguiera, a la vez que esta le apuntaba con su arma, teniendo también una sonrisa de suficiencia.

"Je... Nada mal para una novata" comentó Marie, antes de terminar disparando su Carga Tintas, reventándola de la misma forma que lo hizo con Shara.

Regresando al combate entre Levin y Callie. El chico calamar alcanzó a escuchar como alguien era splateado, solo para darse la vuelta y ver como el fantasma de un Inkling se elevaba hasta luego dirigirse a la misma dirección donde los de Nayls y Shara habían ido.

Por un momento sonrió, creyendo que se trataba de Marie, a la cual Nary había conseguido vencer, pero cuando vio a la misma idol aparecer por arriba de la columna donde se habían ido, un escalofrío le recorrió la espalda, al mismo tiempo que tragaba saliva al saber que ahora estaba sólo contra las dos.

Pero otra conocida voz lo hizo enderezarse como un soldado, además de dar un pequeño salto por el susto.

"No te distraigas" comentó una sonriente Callie que estaba detrás de él, cosa que al instante alertó al chico calamar, pero no pudiendo alejarse lo suficiente y a tiempo, este recibió un golpe del rodillo de la ya mencionada Squid Sister, suficiente como para que Levin reventara frente a Callie, concluyendo así el combate y el entrenamiento.

El fantasma de Levin voló hasta la plataforma de reaparición, seguido de que una figura bípeda se alzara de esta, terminando con la forma del líder de los SquidFire, quien solo dio un suspiro con sus brazos colgando en frente de él, en señal de derrota.

"¡Oye, Levin. Casi lo consiguen!" exclamó Nayls mientras él y los demás de equipo se acercaban a este, incluyendo a Nary.

"Si, pero... Nos vencieron de todas formas... Igual que las otras veces" respondió el chico calamar, permaneciendo de la misma forma y cerrando sus ojos.

"De todas formas, nos fue mucho mejor que las anteriores veces" dijo Shara en un intento por consolarlo.

"Es cierto, de seguro nos irá mejor la próxima vez... Bueno, aunque yo haya empezado recién hoy, jeje" agregó Nary, a la vez que se rascaba detrás de la cabeza.

"¡Eso es cierto, chicos!" exclamó ahora Callie, la cual venía junto a Marie mientras que las dos volvían a tener sus respectivos colores de tinta.

"Lo que hicieron esta vez en este entrenamiento fue bastante sorprendente. Y aunque no salieron victoriosos, tenemos que admitir que nos complicaron las cosas un poco" dijo Marie, lo que hizo que Levin volviera a levantar la cabeza.

"Si, lo que hicieron Nayls y Shara fue algo que no me veía venir" comentó Callie, cosa que provocó una sonrisa en la mayor de los hermanos, al mismo tiempo que Nayls ponía una cara de bobo con corazones en sus ojos.

"Y en cuanto a ti, Nary. Muy buena estrategia, no lo hiciste mal para alguien a apenas va empezando" prosiguió Marie, a lo que dicha Inkling menor se rió mientras que se rascaba detrás de la cabeza con un rubor avergonzado.

"Jeje, muchas gracias, pero la idea no fue mía. Levin fue el que me dijo que te atacara de lo más cerca posible" respondió Nary, cerrando sus ojos aún en la misma posición, seguido de que todos voltearan a ver a dicho chico calamar.

"Pues parece que ahora sabemos porqué eres el líder" dijo Callie con una sonrisa divertida, siendo ahora Levin el que se rascaba detrás de la cabeza con algo de pena mientras que todos dejaban salir una corta risa.

Pero las risas fueron cesadas por la misma Inkling de tentáculos negros, la cual levantaba un dedo con sus ojos cerrados, y una sonrisa algo altanera.

"Bueno, hora de decirles en que fue lo que fallaron esta vez" continuó esta, sabiendo que ahora tocaba 'corregir a los alumnos' incluso borrando la sonrisa de los cuatro amigos.

"En primer lugar, tienen que reaccionar más rápido. En un combate real contra los Octarianos, es sabido que de una manera u otra, trataran de tomarlos por sorpresa en todo momento, por lo que siempre deben estar preparados para lo inesperado. En el caso de Shara y Nayls, fue una muy buena idea el que uno de ustedes me distrajera mientras el otro se posicionaba detrás de mí" comenzó Callie con su 'análisis'.

"Sin mencionar que Nary y Levin evitaban que pudiera cubrirle las espaldas" agregó Marie.

"Pero también tuvieron que asegurarse de que no pudiera contraatacar en el último momento. Por ejemplo; si Nayls hubiera estado más atento, habría esquivado a Shara cuando se la lancé, seguido de disparara para alejarme, de esa forma posiblemente habría podido evitar ser los primeros en caer" continuó Callie quien ahora parecía estarse dejándose llevar por su superioridad, ya que esta ahora estaba con sus manos en sus caderas e inflaba el pecho con su frente en alto, a la vez que dejaba ver una auténtica sonrisa altanera de ojos cerrados, provocando solamente una seria mirada con los ojos entrecerrados por parte de los dos hermanos.

Marie al notar eso, solo se dedicó a dar un suspiro mientras rodaba sus ojos, acto seguido de poner una mano en el hombro de su hiperactiva primar, y hacerla retroceder casi a la fuerza, cosa que Callie respondió haciendo un gesto como si se fuera a caer hacía atrás, exclamando un pequeño grito de sorpresa, seguido de que ahora era la Inkling de tentáculos blancos la que estaba al frente.

"En todo caso. Shara, te dejaste llevar por el impulso y el enojo, eso sólo hace que te vuelvas más predecible, además de que siempre debes de estar atenta a tu entorno. Creeme que los Octarianos no van a dudar en aprovechar la oportunidad, por mas pequeña que sea" luego de decir eso, Marie puso su mirada en Nary, quien al parecer estaba rogando por dentro que no le dieran una reseña a ella.

"Nary, no estuvo mal la forma en que combatiste, pero de la misma forma que Shara, te dejaste llevar por el impulso, y creyendo que estabas ganando, no me fue muy difícil idear una trampa para darte vuelta el combate" continuó la famosa idol, a lo que Nary solo puso sus manos detrás de ella, y bajo la cabeza mientras jugaba con uno de sus pies, como si fuera una niña siendo regañada por sus padres.

"Chicos, nunca deben dar algo por ganado hasta estar seguros de eso, y reiterando lo que dijo Callie antes; Siempre deben estar preparados para lo inesperado" finalizó Marie, por lo que rápidamente Callie volvió a ponerse al frente de un salto.

"Ahora, con respecto a Levin..." dijo la idol de tentáculos negros, posando sus dorados ojos sobre el susodicho Inkling, mismo que solo dio un trago de saliva como repuesta.

"¡Eres... Muy distraído!" sentenció la hiperactiva Inkling mientras le apuntaba con el dedo y se inclinaba un poco hacía adelante.

"¿Eh, d-distraído?" preguntó Levin ladeando la cabeza en confusión.

"Exacto, te distraes con facilidad, una de las cosas por las que casi fuiste el primero en caer, y también lo que me permitió rematarte al final" contestó Callie con el mismo tono, volviéndose a erguir bien.

"Y no es la primera vez, Levin. En varias ocasiones te distraías viendo a Shara, o al saber que uno de tus compañeros splateaba" agregó Marie, a lo que el susodicho Inkling apartó la mirada con un leve sonrojo, mayormente por lo primero que la idol de tentáculos blancos había insinuado, sintiendo también los ojos de Shara puestos en él al escuchar lo que había dicho Marie.

"Escucha, está bien que mantengas un ojo sobre tus compañeros, pero también debes velar por tu propia seguridad" continuó Callie, sin soltar su sonrisa.

Pero mientras las dos primar seguían mencionando pros y contras de los nuevos agentes, no se percataron de que Curttlefish se estaba acercando a ellos, hasta ponerse al lado de Marie, e interrumpiendo los sermones por un momento.

"¿Niñas, no hay algo que se les esté olvidando decirles a los agentes?" preguntó el capitán apoyándose con sus dos manos en su bastón y cerrando sus ojos.

Ambas nietas del Inkling mayor se miraron entre sí, seguido de dejar salir un suspiro al mismo tiempo.

"Crees que podrán hacerlo?, aún no han terminado su entrenamiento" comentó Callie, haciendo un ademán con su manos para que el Inkling de avanzada edad viera al cuarteto.

"Ustedes tampoco lo estaban cuando realizaron su primera" respondió Cuttlefish, algo que provocó un momentáneo sonrojo de vergüenza en ambas idol además de que estas apartaran la mirada, mismo que dejó a los SquidFire en completa confusión por lo que estaban hablando sus superiores.

"Ehhh... Perdonen que me meta, pero... Nos podrían decir de que están hablando?" preguntó Levin poniéndose en frente de ellos, solo para recibir una pequeña risa por parte del capitán.

"De su primera misión, por supuesto" respondió finalmente Cuttlefish. Y tan pronto como esas palabras salieron de la boca del anciano Inkling, los cuatro amigos se quedaron tan quietos como estatuas, al mismo tiempo que no emitían sonido alguno. Incluso Nayls, el cual era el más activo y charlatán de los cuatro.

"¿N-n-nos repite lo que acaba de decir?" volvió a preguntar Levin, tan incrédulo como el resto.

"Que mañana, a las 1400 horas, realizaran su primera misión como agentes del Comando SquidBeak Splatoon" finalizó el capitán, ahora tomando un postura mas firme, y cambiando a un semblante mas determinado.

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Luego una larga discusión, y un buen rato para descansar y asimilar lo que se les había dicho, el cuarteto de amigos ya estaban disponiéndose a volver a sus casas, aunque Nayls y Shara tenían planeado jugar un par de Turf Wars, invitando a Levin y a Nary de paso. El chico calamar de tentáculos azules no se negó a participar, pero para la sorpresa de ellos, Nary tuvo que declinar, cosa que no tardó preguntarse el motivo.

"B-buen, no es que no quiera, es solo que..." dijo Nary a media frase, tratando de encontrar las palabras para responder, a la vez que jugaba con sus dedos.

"¿Mmm?" murmuraron los amigos de la chica calamar, acercándose un poco más a ella, a lo que Nary reaccionó dando un paso atrás con una sonrisa nerviosa.

"Jejeje... R-resulta que olvidé mi Splattershot y mi tanque de tinta en la bóveda de Drake, jejeje" respondió la agente de tentáculos naranja, al mismo tiempo que se rascaba detrás de la nuca con vergüenza.

Como reacción, el resto de SquidFire solo cayeron al suelo al mas puro estilo anime.

"¡Lo vuelvo a repetir, Nary. Tienes que responsabilizarte un poco más por tus cosas!" comentó Shara, a la vez que volvía a ponerse de pie junto a los demás.

"Y bueno, que esperabas?, en mi situación tu también no te habrías dado cuenta de que se te olvidaba algo!" discutió Nary apartando la vista, y cruzándose de brazos mientras inflaba sus mejillas con el ceño fruncido. Levin por otro lado, dejó salir un suspiro y se acercó a su compañera de tentáculos naranja.

"En todo caso, le dijiste ayer a Drake que te habías olvidado tus cosas en su bóveda?" preguntó Levin cruzándose de brazos el también.

"Supongo... Que no. Es que me estaba divirtiendo tanto que no me percaté de eso" respondió Nary permaneciendo en la misma posición.

"Cierto, sin mencionar que en una ocasión casi le robas un- AARGH!!" trató añadir Nayls, pero justo antes de eso, Nary literalmente se había quitado una de sus zapatillas, y se la había lanzado al chico calamar de tez morena, dándole justo en el rostro e impidiendo que terminara la frase, eso y que también provocó que cayera de espaldas al suelo, mientras que un furioso sonrojo cubría el enojado rostro de la Inkling naranja.

Levin con una expresión sorprendida, decidió balbucear su propuesta, viendo que al parecer ninguno de ellos tenía algo mas que hacer.

"Oigan, y si aprovechamos lo de ir a buscar las cosas de Nary para darle una visita?" preguntó el líder del grupo, ganándose la mirada de todos los demás. Bueno, casi todos, ya que Nayls todavía seguía muerto en el piso, a la vez que su hermana lo picaba con un palo que había encontrado por ahí.

"Ehhh, estás seguro?, probablemente esté ocupado con ese asunto de los Octarianos, quien sabe si hay de esos pulpos en su bóveda" comentó Shara, ahora metiéndole el palo por la nariz a su hermano.

"Pues de haberlos, no creo que Drake los deje atacarnos, además de que posiblemente Otome esté con él también" continuó Levin, mientras que sin que se dieran cuenta, Nary estaba intentando escabullirse fuera de la vista de estos, con uno de sus pies descansos y su zapatilla en una de sus manos la Inkling de tentáculos naranja se retiraba a puntita de pie, pero de repente sintió una mano en su hombro, lo que provocó que Nary se tensara, y se pusiera firme como un soldado.

"¿Vas a algún lado?" preguntó Shara con sus ojos entrecerrados, mientras que Nary respondió con una sonrisa nerviosa y una pequeña risa del mismo tono.

"Vamos, Nary. Ya que ahora tenemos todo el resto del día libre, vallamos a buscar tus cosas" dijo Levin tomando a Nayls por sus piernas, y comenzando a arrastrarlo.

"No es necesario, chicos. Otro día le digo a Drake si me las puede traer" respondió la chica calamar, nuevamente disponiéndose a retirarse a quien sabe donde, pero aún teniendo la mano de su amiga de tez morena, dicha acción se le fue impedida.

"No fue una pregunta..." fue lo último que dijo Shara, antes de que sorpresivamente cargara a Nary y la pusiera sobre su hombro, comenzando así a seguir a Levin hacía la dirección en la que se saldría de Inkopolis.

Nary por supuesto reaccionó pataleando con sus piernas y agitando sus brazos en un intento por zafarse del agarre de su amiga, al mismo tiempo que gritaba con unos cómicos ojos llorosos, cosa que a Shara no le importó en lo más mínimo, incluso si los Inklings que estaban cerca volteaban a verlos con algo de incomodidad.


[Territorio Octariano]

[A las afueras de Octomburg]

[Superficie de la ciudad]

Drake caminaba por las afueras de Octomburg, buscando en cada lugar algún río lo suficientemente grande, o zona con buenas ráfagas de viento, pero el resultado había sido el mismo desde que comenzó a buscar desde hace más de dos horas. Incluso a una buena altura, Bruce calculaba la velocidad del viento que había en ese momento, pero las ráfagas mas grandes de viento, no superaban los 50 kilómetros por hora. No suficiente como para hacer girar unas hélices gigantes.

"Será por que todavía es verano..." comentó Drake mientras veía un pequeño datapad electrónico que Bruce le había entregado para darle los resultados de los análisis.

"Supongo que por ahora lo de la energía eólica queda descartado" continuó Drake con una mano en su mentón de forma pensativa. Claro que tampoco estaba sólo en ese entonces, ya que no muy lejos Otome había salido con el también, sin mencionar que esta ahora tenía su visor puesto, buscando lo que el humano le había pedido antes de salir, pero al parecer la suerte tampoco estaba de su parte.

"Vamos, es un bosque... Debe haber un río lo suficientemente grande" se dijo el pelicastaño a sí mismo, pero por más que buscaran, los pocos río que encontraban no eran lo suficientemente grande o fuertes para construir una central hidroeléctrica en . Otra cosa que tendrían que descartar por el momento.

"Tampoco parece que pasen muchas tormentas eléctricas por la zona. Bruce, que me dices, algún indicio de que valla a haber alguna tormenta, o lluvia por lo menos?" preguntó Drake presionando un botón en el datapad para poder comunicarse con su ayudante cibernético.

"Lamentablemente no, señor. Y ya he calculado la humedad del aire, el movimiento de las nubes, y el lapso del tiempo, por lo que temo decirle que no valla a llover por lo menos dos semanas, señor" respondió Bruce a través del dispositivo.

"Ahh... Otra cosa que tendremos que descartar hasta el momento. Y la energía geotérmica llevaría demasiado tiempo y recursos conseguirla. La energía nuclear no es una opción, por lo que quedaría la energía solar como única opción por ahora. Al menos eso es lo único a lo que Bruce le a dado el visto bueno" pensó Drake para sí mismo, aunque luego recordó lo de los Zapfish.

"Cierto que dije que los analizaría después. Tal vez les encuentre un uso mayor para el tema eléctrico" continuó sumido en sus pensamiento el pelicastaño, pero luego fue sacado de su cabeza por una conocida voz que lo estaba llamando.

Dándose la vuelta, el humano se dio cuenta de que se trataba de Otome, la cual se acercaba a él trotando, y levantando su visor para que se pudieran apreciar sus lindos ojos verdes.

"Dime que encontraste algo, por favor" pidió Drake con una leve expresión de suplica, pero solo obtuvo como respuesta un suspiro y una negada de cabeza.

Drake ante eso, solo dio un leve gruñido cansado, pero luego formando una pequeña sonrisa de lado.

"Bueno, al menos ya decidí que energía alternativa pueden usar" respondió Drake, cosa que hizo que la chica pulpo volviera a levantar su mirada.

"¿A sí, y cual de ellas sería?" preguntó Otome ya un poco interesada en la solución que ayudaría a su ciudad.

"Pues viendo que por ahora no podemos usar otra, decidí en que usaremos la energía solar para sustentar parte de Octomburg" respondió el pelicastaño, pero claramente la Octoling no entendió a que clase de energía se refería.

"Perdona mi ignorancia, pero... Con solar te refieres al sol, no es así. Entonces como haremos para conseguir energía de una estrella a millones de kilómetros de aquí?" preguntó Otome ladeando la cabeza, a lo que Drake dejó salir una pequeña risa.

"No es necesario ir hasta el sol para conseguir lo que queremos, tenemos suficiente con la luz que proyecta" contestó el pelicastaño, pero la respuesta que este hizo solo causó todavía más preguntas en la teniente de tentáculos rojos.

"¿Su luz?" volvió a preguntar Otome, esta vez levantando una de sus cejas.

"Jejeje, te lo explicaré todo junto a los ingenieros. Ahora, volvamos" dijo el humano, comenzando a caminar de regreso a Octomburg, a la vez que era seguido por la chica pulpo.

Y mientras que el par volvía de regreso a las puertas de dicha ciudad subterránea, no se dieron cuenta de que una figura los estaba observando desde no muy lejos, al mismo tiempo que parecía informarle algo a alguien.

Solo para que de un momento a otro, Otome se diera la vuelta para ver detrás de ella al sentir por un momento la presencia de alguien más, obligando a la figura a esconderse bien detrás del árbol en el que estaba, pero al no ver nada, mas que hacerla sentir más segura, le dio una sensación mayor de mala espina, motivo por el que esta entrecerraba sus ojos de forma desconfiada, aunque un llamado de Drake fue suficiente para hacer que volviera a poner su vista al frente y reanudar sus pasos con los del humano.

La silueta por su parte, después de asegurarse de que no estaban viendo a su dirección, nuevamente se asomó por uno de los lados del árbol, teniendo su mirada sobre el Antiguo que se estaba alejando junto a la Octoling, para luego llevar los dedos de una de sus manos a su sien, generando así un par de flashes desde sus ojos. Acto seguido la silueta se dio la vuelta, y emprendió su regreso al lugar de donde sea que hubiera venido.

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De regreso a la central eléctrica de Octomburg, Drake no había tardado en empezar a relatar sobre la idea de usar la energía solar para sustentar a una buena parte de la ciudad, claro que con algo de ayuda de Bruce para no saltarse las partes mas complejas, poco a poco los ingenieros fueron sintiéndose cada vez mas interesados por el nuevo sistema de energía alternativa, incluyendo al Jefe Ingeniero. Aunque obviamente algunos se habían sentido mas fascinados por el ayudante cibernético que Drake poseía.

Pero volviendo al tema, el humano después de terminar con la explicaciones, habría empezado a diseñar los planos de los paneles solares, el sistema de almacenamiento eléctrico, los recursos que se necesitaría para hacerse, y las zonas donde se podrían colocar, etc, si no fuera por un gran factor importante al que el pelicastaño no le había dado mucha importancia hasta ahora. El no sabía escribir el dialecto de los Inklings, y peor aún, al parecer el dialecto de los Octarianos no era el mismo que el de sus ya mencionados rivales, lo que volvía el trabajo todavía más difícil.

Drake ahora sentado en una mesa de diseño mientras golpeaba la punta de un lápiz en esta, miraba el holograma que Bruce proyectaba sobre una enorme hoja azul para la misma tarea, siendo este uno de los diseños de los paneles solares al cual debía replicar sobre dicha hojas, pero al paso de unos quince minutos, el humano no había movido su muñeca de otra forma mas que el ya mencionado golpeteo del lápiz.

"Señor, no es por apurarlo, pero... Le recuerdo que no tiene que diseñar los planos usted mismo, solo tiene que copiar el que estoy proyectando sobre la hoja, y pasar al siguiente" dijo Bruce, notando el nerviosismo del ex-comando, como si fuera un niño en un examen.

"Lo se, Bruce, es solo que... Nuestra lengua escrita y la de los Octarianos no es la misma, como podrán entender esto de todas formas?" preguntó Drake volteando a ver al robot esférico.

"De eso no tiene que preocuparse, después yo lo traduceré al idioma de-..." trató de explicar Bruce, pero fue interrumpido por el pelicastaño, ahora girándose hacia él.

"Tampoco tienen el mismo idioma que los Inklings, Bruce" dijo Drake viendo el holograma que el robot todavía proyectaba sobre la mesa de diseño.

Ante eso, por primera vez el robot no supo como responder, quedándose callado por un momento. Pero luego propuso algo que también Drake ya esperaba que fuera a decir.

"Señor, podría analizar la escritura de los Octarianos y añadirla a mi base de datos para que pueda-..." volvió a tratar de sugerir el robot flotante, pero nuevamente fue interrumpido por el pelicastaño, esta vez sin voltear a verlo.

"Y cuanto te tomará, Bruce?, todavía no terminaste de asimilar el idioma escrito de los Inklings, solo sabes lo básico y poco más. Empezar con el de los Octarianos solo nos hará tardarnos un mayor tiempo. Hablarlo es una cosa, escribirlo es otra" dijo Drake rascándose detrás de la cabeza en busca de una conclusión a este percance.

"¿Y que es lo que sugiere, señor?" preguntó ahora Bruce, dejando de proyectar el holograma sobre la mesa.

"Creeme que eso es algo que me gustaría saber también..." respondió Drake con un suspiro, pero en eso, una conocida voz hizo que el humano se diera la vuelta, y asomándose por la puerta de la habitación en la que estaba, Otome parecía estarle hablando de algo importante.

Pero el hecho de no poder entenderla, le hizo recordar que no tenía puesto su parche traductor, por lo que buscando el transparente estuche en uno de sus bolsillos, el humano sacó el parche con cuidado, seguido de colocárselo en su respectivo lugar.

"Lo siento, Otome. Me repites lo que dijiste?" preguntó Drake con una sonrisa mientras que la susodicha Octoling se adentraba, cerrando la puerta tras de sí.

"El Jefe Ingeniero Tane pregunta si les permitirías a él y a sus compañeros ver uno de los planos que estás diseñando" dijo Otome hasta estar frente al humano, al mismo tiempo que ladeaba su cabeza de un lado a otro para ver las dichosas 'instrucciones' de la construcción de los paneles solares, mismo que el pelicastaño también movía su cuerpo de un lado a otro para que evitar que Otome viera que no había hecho absolutamente nada.

"Sí, bueno... Acerca de eso..." trató de dialogar el humano, buscando una respuesta a esta incómoda situación. Pero de un ágil movimiento, Otome logró evadir al ex-comando con una divertida risa, solo para quedarse en silencio al ver la hoja azul completamente limpia, seguido de voltear a ver al pelicastaño con una ceja levantada y una expresión de confusión.

"Ehhh... He de suponer que ya terminaste, verdad?" preguntó la Octoling, esperanzada de que ahora Drake sacaría los planos ya hechos de quien sabe donde.

El humano continuó pensando en una salida de esto, pero al ver los verdes ojos de Otome, no se vio capas de inventar una mentira, por lo que derrotado solo dejó salir un suspiro cerrando sus ojos.

"No te voy mentir, Otome... Ni siquiera empecé a hacerlos" confesó Drake, llevándose una mano detrás de su cabeza con vergüenza, al mismo tiempo que la chica pulpo abría un poco más sus ojos por la impresión.

"P-pero por qué?, creí que estabas muy ansioso por que probaramos tu idea" preguntó Otome, ya un poco nerviosa, y por algún motivo, preocupada de que se hubiera dado cuenta de los planes de Octavio.

"Sí, es solo que... Me di cuenta de que ustedes los Octarianos no tienen el mismo lenguaje en escritura que los Inklings, y no quería darles unos planos en un idioma que no pudieran entender" contestó el pelicastaño todavía con una mano detrás de su cabeza, cosa que hizo sentir un poco aliviada a la chica pulpo, ya que también tenía la solución a eso.

"Oh, y por que no me lo dijiste antes?. Yo se un poco de la escritura Inkling, y creo que el Jefe Ingeniero Hiaku también" respondió Otome colocando una de sus manos en su cadera, y sonriendo de lado.

Dicha confesión provocó que Drake abriera sus ojos bastante, y volteara a ver a su amiga cefalópoda.

"¡¿En serio, de verdad pueden hacer eso?!" preguntó Drake, al mismo tiempo que tomaba a la Octoling de sus hombros, y acercaba 'peligrosamente' su rostro al de ella, motivo suficiente para tomarla por sorpresa y las mejillas de esta tomaran un tono rojizo.

"S-sí... Si quieres podemos yo o Hiaku traducir t-tus planos..." sugirió la chica pulpo mientras apartaba la mirada, y una nerviosa sonrisa se formaba en sus labios.

"Gracias, Otome. No sabes el peso que me acabas de-..." Drake dejó su frase a medio terminar, ya que pudo darse cuenta del rubor que la Octoling ahora tenía en sus mejillas, cosa que al humano se le formó por un momento una sonrisa de gato, seguido de ocurrírsele una jugarreta.

"Otome, mira esto..." dijo Drake mientras hacía su movida, logrando hacer que la mencionada volviera a poner su vista sobre él. Pero aún mas grande fue la sorpresa de esta al sentir como su nariz se encontraba con la del humano, quien otra vez había acercado su rostro al de la Octariana a tal punto que como ya se había dicho, sus narices se encontraban con la del otro, sin mencionar que Drake le estaba regalando una seductora mirada de ojos entrecerrados, lo que intensificada todavía más la reacción de Otome.

Como fue de esperarse, ahora todo el rostro de la teniente fue cubierto por un tono carmesí, su respiración se entrecortó y sus pupilas fueron remplazadas por espirales, los cuales giraban entorno la situación. Poco a poco la boca de la Octoling fue abriéndose lentamente mientras parecía querer decir algo, aunque las voz se le cortaba.

De pronto, la chica pulpo no sabiendo como proseguir a esto, dejó salir un corto y agudo grito que fue escuchado hasta por fuera de la puerta, seguido de que esta se volteara mientras se cubría su colorado rostro, hasta incluso se podía jurara que algo de vapor se desprendía de este.

Por otro lado, Drake se estaba carcajeándo en su silla, a la vez que se cubría los ojos con una de sus manos. La teniente pronto al escuchar la risa de su amigo humano, su apenado rostro fue cambiando a uno de sumo enojo, para que luego bajara sus manos y convirtiera una de estas en un puño.

No hizo falta ser un genio para saber lo que pasaría después, solo para que por fuera de la habitación mientras la risa del pelicastaño todavía seguía presente, pronto se escuchara un fuerte golpe sordo, silenciando así las carcajadas del ya mencionado humano.

Después de eso, se pudo ver a Otome con una expresión de entre seria y molesta.

"Avisame cuando tengas listo los planos..." fue lo único que dijo esta mientras dejaba la puerta abierta, la cual lentamente fue cerrándose, pero no sin antes dejar ver a un Drake arrodillado en el suelo con una de sus manos sujetando su vientre, y con la otra apoyándose en el suelo, casi estando en una posición fetal.

El pelicastaño no respondió nada a lo que Otome le había dicho, solo dejó salir un par de ahogadas toses antes de que la puerta terminara de cerrarse.

/-/-/-/-/-/

Y así, ya con el problema de la traducción solucionado, Drake finalmente había empezado a replicar los dichosos planos que Bruce le proyectaba, claro que después de que se le pasara el dolor por el golpe que una supuesta Octoling le había dado, además de pedirle a Bruce que le recordara no volver a hacerle otra broma a la teniente, mientras que con su monótona voz, Bruce respondía; "Recordatorio guardado".

El tiempo que se habían tomado para diseñar había sido mas tardío de lo que se esperaba por ya mencionadas razones, aunque ahora estando más seguro, el humano lo había hecho sin pausa. Si bien Drake no era un científico como su padre, o un ingeniero de algún tipo, estaba seguro de que no sabría siquiera como funcionaría un panel solar, por lo que agradeció de tener a Bruce, pero de igual forma replicar hasta el mas mínimo detalle le resultó complicado.

"Bueno, ya tengo la mayoría listos... Solo espero que Otome no siga enojada por la broma... Je, quien abría imaginado que seres que no poseen huesos pegaran tan fuerte" comentó Drake volviendo a sobarse el abdomen, recordando el que la chica pulpo le había dado.

"Calculo que al no contar con una estructura ósea, sus cuerpos se mantienen por un mayor numero músculos" contestó Bruce, haciendo que el ex-comando rodara sus ojos al no entender que solo estaba haciendo un comentario.


[Bosque de OctoValley]

[17:00 de la tarde]

[Cerca de la zona de excavación]

Nary ahora estaba con una expresión de aburrimiento mientras todavía era cargada por Shara, la cual solo se centraba en su SquidPhone. Mientras que al lado de la Inkling de tez morena estaban Levin y Nayls, quien este último finalmente había recuperado la consciencia.

Nary solamente dejó salir un suspiro viendo los árboles pasar constantemente. Ya hace tiempo que la susodicha Inkling de tentáculos naranjas había dejado de forcejear, dedicándose ahora a dejar sus cuatro extremidades colgando.

"¿Ya me puedo bajar...?" preguntó Nary con una voz monótona, sin siquiera voltear a ver a cualquiera de grupo.

"No..." respondió Shara sin mas, todavía estando centrada en su teléfono.

"Se me están durmiendo las piernas..." volvió a decir la agente de tentáculos naranja, apoyando su mejilla izquierda en su mano del mismo lado.

"Lo sentimos, Nary, pero como estar seguros de que no vas a intentar escaparte otra vez?" preguntó Levin, moviéndose detrás de Shara para entablar conversación con la mencionada de frente.

"Por que esta vez no voy a hacerlo. Ya me di cuenta de que no puedo escapar de ustedes..." contestó Nary todavía en la misma posición, pero cambiando a cruzarse de brazos con un ceño fruncido, e inflando las mejillas.

"Mmmm... Segura que no intentarás escaparte de nuevo?" preguntó el chico calamar de tentáculos azules con una mano en su mentón, y luego señalando a su amiga cargada con la misma mano.

"No, no lo voy a hacer" respondió Nary en la misma posición, y con el mismo tono monótono.

"¿Segura, segura?" volvió a preguntar el líder del grupo.

"Sí...!" nuevamente respondió la Inkling naranja, frunciendo un poco más el ceño, y alzando levemente la voz.

"¿Mas que segura?" siguió insistiendo Levin.

"¡Que sí!" una vez más respondió Nary, ya un poco molesta por la insistencia de su amigo de tentáculos azules.

"¡¿Total, y completamente segura?!" preguntó ahora Nayls, uniéndose a la discusión.

"¡¿ME PUEDEN BAJAR YA DE UNA VEZ?!" gritó ya una molesta Inkling naranja mientras sacudía sus brazos y sus piernas, a lo que tanto Levin como Nayls se apartaron un poco, seguido de mirarse entre ellos, y terminar con un suspiro por parte de el líder de los cuatro.

"Ahhh... Esta bien, Shara. Puedes bajarla" dijo Levin con sus ojos entrecerrados, mientras que la mencionada chica calamar de tez morena giraba sus ojos hacia un lado en dirección al líder, seguido de detenerse y dejar que Nary vuelva a poner los pies sobre el suelo.

Esta al instante que fue puesta sobre sus pies, no tardó en estirarse un poco para que su tinta volviera a circular, terminando con un suspiro de alivio, además de hacer un par de sentadillas para que sus piernas se despertaran.

"Gracias, pero eso no quiere decir que ya no esté enojada con ustedes!" respondió Nary volviéndose a cruzar de brazos, y darles la espalda con sus ojos cerrados.

"Oh vamos, Nary. Ya solo dínos por que no quieres ir a la bóveda de tu amigo Antiguo, acaso se pelearon sin que nos diéramos cuenta?" preguntó Levin con sus manos en sus caderas.

"¡Oh, ya se. Seguro todavía sigue apenada por lo que pasó aye-...!" trató de decir Nayls, pero al ver como la Inkling naranja se disponía a quitarse una de sus zapatillas con intenciones no muy benévolas, este calló de golpe, a la vez que se rascaba detrás de la nuca con una sonrisa nerviosa.

"Como sea, ya nos falta poco, así que sigamos" dijo Levin, a lo que tanto él como el resto volvieron a reanudar su caminata, aunque Nary seguía con una linda expresión de enojo, y con sus brazos cruzados.

/-/-/-/-/-/

No tomó más de unos treinta minutos para que finalmente llegaran a la entrada de la caverna, viéndose de igual forma que cuando vinieron por primera vez.

Si bien los SquidFire bajaron al interior de esta, se mantuvieron alertas por si algo los sorprendía. Algo que también recordaron, fue que ninguno había traído un arma con ellos, por lo que tendrían que valerse con las enseñanzas que las Squid Sisters y Cuttlefish les habían dado en combate cuerpo a cuerpo, ya que como les habían advertido, una lucha contra los Octarianos no era lo mismo que los Turf Wars, ya que en dicho juego estaba prohibido usar demasiada violencia, pero aquí a fuera todo estaba permitido.

Con cuidado se movieron cada vez más cerca de la puerta de la instalación humana, mirando hacia todos lados, pero al parecer nada se presentaba a su encuentro, o por lo menos eso creían.

Con algo de impresión, Levin, Shara y Nayls se quedaron viendo la enorme puerta abierta frente a ellos, recordando también que esta sería su primera vez entrando a la bóveda de Drake, cosa que al instante fueron sacados de su leve estupor por la voz de Nary llamándolos.

"Chicos, van a entrar o que?!" Nary exclamó estando ya en la entrada del agujero en la primer puerta.

Los tres mencionados amigos se miraron entre ellos, seguido de trotar hasta donde estaba la agente de tentáculos naranjas, la cual ya había entrado.

En el interior los cuatro cefalópodos se quedaron mirando hacia todos lados, viendo la inmensidad del lugar, y dejando salir uno que otro 'wow', con excepción de Nary por supuesto. Pero la tranquilidad fue rota por un comentario de Nayls.

"Esta lugar está hecho polvo!" dijo Nayls inesperadamente.

"Concuerdo" agregó Shara sin mas.

"Oh vamos, chicos, no está tan mal" discutió Nary cruzándose de brazos y mirando desaprobatoriamente al par de hermanos.

"Eh?... Oh, no, no es eso. Este lugar realmente está hecho polvo, mira" explicó Nayls mientras daba un leve pisotón, causando que una pequeña nube de polvo se levantara.

"Oh, bueno... Drake siempre se centro mas en arreglar las cosas de este lugar, muy pocas veces lo vi limpiando o algo parecido... Por no decir que nunca lo vi" respondió Nary, susurrando la ultima frase de para si misma, y entrecerrando los ojos con algo de decepción.

"Entonces busquemos al grandullón, si está aquí seguramente lo encontráramos por ahí" propuso Levin mientras tanto el como los demás se adentraban todavía mas en la bóveda.

"Mejor dejen que yo los guíe. Estuve aquí por dos semanas y conozco mejor el lugar, así que no se despeguen de mi espalda" dijo la chica calamar naranja algo altanera, mientras se señalaba a sí misma con el pulgar.

Pero al momento en que dio un paso, un recuerdo le golpeó como un yunque, siendo este el de su momento con Drake en aquel lugar secreto suyo, haciendo que su leve altanería cambiará radicalmente por nerviosismo.

Ante estos, los tres amigos de Nary ladearon la cabeza un poco para ver por que la mencionada chica calamar no se movía de su lugar, hasta que fue Shara la que la hizo volver en sí, carraspeándo la voz a propósito.

"Eh?, oh si... P-por aquí" contestó Nary con una sonrisa nerviosa, comenzando a caminar con los demás detrás de ella.

Como era de esperarse, el par de hermanos y Levin no tardaron en mirar hacia todos lados con curiosidad, notando las diversas cajas y objetos que se encontraban por el camino, además de las cápsulas que los hacían pensar un momento en qué había pasado con los demás que eran como Drake.

Hasta que sin darse cuenta, habían llegado a lo que para estos era un comedor para un gran numero de personas, aunque sin nadie en ninguna de las mesas.

"Parece que no está aquí... Vengan, tal vez esté en otro lado" comentó Nary dándose la vuelta y tomando otro camino, pero en eso, Levin antes de seguir a su equipo, por un momento le pareció haber escuchado a alguien al fondo del comedor. Quedándose por un momento quieto y concentrándose en escuchar algo.

Pero el sonido no se volvió a escuchar, por lo que este se rascó la cabeza mientras levantaba una ceja en confusión.

"¿Habrá sido mi imaginación?" se preguntó el Inkling de tentáculos azules todavía haciendo el mismo gesto, solo para luego ser llamado por una de los hermanos.

"Oye, Levin. Vas a venir o que?" preguntó Shara con sus manos en sus caderas, tomando momentáneamente por sorpresa al líder del equipo.

"Ah, si. Lo siento!" respondió el susodicho chico calamar, trotando hasta Shara, y reanudar la búsqueda del Antiguo.

Y mientras la pareja se alejaba, no se habían dado cuenta de que una Octoling se había percatado de que habían llegado al comedor. Y a la vez que Levin y Shara se alejaban, esta salió de su escondite seguido de tomar otro camino para salir del lugar.

/-/-/-/-/-/

Nary por su parte, después de salir del comedor, guió al grupo hasta las habitaciones donde Drake antes las había guiado a ella y Otome para pasar las noches. Aunque por algún motivo estas se veían un tanto mas solitarias por así decirlo.

Sin mencionar que Nary seguía pensando en qué cara podría cuando se encontrara al humano, sabiendo lo que había pasado ayer, pero ella ya se había jurado así misma que conseguiría hacer que el Antiguo sintiera algo por ella, y dejarse llevar por los nervios no le ayudaría a conseguirlo.

"¿D-Drake?" llamó la Inkling de tentáculos naranjas con un hilo de voz, al mismo tiempo que habría la puerta de la habitación del ya mencionado pelicastaño.

Pero al no recibir respuesta, Nary presionó un interruptor que estaba a un lado, iluminando el cuarto con la luz de los focos. Pero de la misma forma que en el comedor, el humano también estuvo ausente en su cuarto, algo que hizo a Nary sentirse aliviada por un lado, pero también desilusionada por otro.

"¿Entonces este es el cuarto de Drake?" preguntó Levin viendo bien el interior de la habitación, la cual aunque poco iluminada, se podía distinguir bien la cama, el placar, y demás cosas.

"Oigan, esta también está abierta!" llamó Nayls, viendo junto a Shara el interior del cuarto que estaba en frente.

Nary al darse la vuelta, al instante reconoció la habitación, dejando salir una momentánea sonrisa.

"Oh, esta es la habitación que Drake nos dio a mi y a Otome para pasar las noches" dijo la Inkling de tentáculos naranjas, adentrándose en el interior de ella, también recordando las veces en las que ellas habían discutido, ya sea por quien debía tener la cama de arriba, quien pateaba los zapatos de la otra, por hacer mucho ruido, etc.

Pero mientras recordaba, su rostro se tornó ligeramente de color rosa, recordando las veces en las que se escapaba a la habitación del humano, cosa que no fue desapercibido por Shara, quien sonriendo de lado, se acerco a su amiga de piel más clara mientras colocaba sorpresivamente uno de sus brazos en el hombro de esta.

"Entonces, dormiste en una habitación que estaba justo al lado de la de un chico?" preguntó la chica calamar de tez morena, usando un tono levemente travieso.

"¿Eh... S-sí, por que?" respondió Nary, casi temiendo en haber preguntado ella ahora.

"¿Y no te escabulliste dentro de ella ni una sola vez?" volvió a preguntar Shara, fingiendo asombro por la supuesta, 'oportunidad' no aprovechada.

Ante tal pregunta, el rostro de la Inkling contraria se volvió todavía más colorado. No por la pregunta en sí, sino por el hecho de haberlo hecho varias veces.

"¡C-claro que no, por que clase d-de Inkling me tomas?!" mintió Nary apretando los puños con una evidentes vergüenza, a lo que Shara dejó salir una pequeña risa, viendo que la actitud de su amiga de tentáculos naranjas decía lo contrario.

"Jejeje, solo pregunto. Yo de haber sido tú, habría aprovechado, porque... Bueno, es un macho Antiguo, no te da algo de 'curiosidad'?" nuevamente insistió Shara, dándole juguetonamente un par de codazos en el costado a la chica calamar de tez mas clara.

"B-bueno... Sí, un poco. Pero no de la curiosidad que estás pensando!, además... Que Levin no te escuche hablando así de otros chicos a sus espaldas. Yo se también que él te gusta en secretó" contraatacó Nary poniendo un dedo en el pecho de la contraria de tentáculos morados, al mismo tiempo que se inclinaba un poco hacia el frente con su otra mano en su cadera, sin mencionar la sonrisa con el ceño fruncido que tenía.

"Qué, gustarme, él?, pfff!... En primer lugar, el es un buen amigo y eso, pero tampoco es para gustarme de esa manera. Y en segundo lugar, un ladrillo sería más entretenido que él" se defendió Shara, haciendo su mejor intento por una expresión fresca, pero delatando un pequeño rubor en sus mejillas, cosa que Nary no dejó desapercibido.

"Entonces no te importará que le pregunte, verdad?" dijo la agente naranja, disponiéndose a hablar con Levin, el cual estaba regañando a Nayls, puesto que este se había subido a la cama superior de la litera.

Pero justo antes de que Nary alcanzara a ponerle una mano en el hombro, Shara rápidamente la jaló para devolverla al lugar en el que estaba antes, provocando una sonrisa de victoria en su amiga de tez mas clara.

"¡Ja, lo sabía!" exclamó Nary en un susurro, por lo que Shara solo suspiro, y volvió a su actitud despreocupada.

"Esta bien, tu ganas... Ya no te molesto, solo si tu no abres la boca" negoció la chica calamar de tentáculos morados, apartando la vista y poniendo una mano en su cadera, aunque todavía seguía con un leve sonrojo en sus mejillas.

"Hecho. Muy bien, como Drake no está aquí, será mejor que lo busquemos en otra parte!" proclamó Nary con una mano levantada para que los dos chicos también la escucharan.

Nary dándose la vuelta, salió de la habitación mientras era seguida por Shara, luego Levin, y al final Nayls, quien este último casi se tropezó mientras se apresuraba para no quedarse atrás.

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Luego de otro tiempo buscando al dichoso humano por los lugares en los que mayormente se lo veía transitar, Nary de último dejó al laboratorio, siendo este el lugar que en varías ocasiones ella había visto al pelicastaño tratando de llamar a alguien en su idioma original, o eso es lo que parecía.

El cuarteto de amigos pasaron por el pasillo que llevaba a los laboratorios del establecimiento, pero al momento de abrir la puerta, se encontraron con el mismo resultado que todas las anteriores veces.

Una sala vacía mas que los instrumentos que usaban los científicos para hacer su trabajo, y otras cosas que no reconocieron, mientras que los tres Inklings que no habían venido hasta ahora, miraban con asombro el lugar.

"Wow, miren esto... De seguro si esos científicos en Inkopolis vieran este lugar, se les caerían hasta los tentáculos" comentó Nayls, acercándose a una de las máquinas, y disponiéndose a oprimir uno de los botones en ella, pero un golpe en la mano por parte de su hermana mayor fue suficiente para hacerlo retractarse de eso.

"Drake no nos había dicho que era un científico también" dijo Levin tomando una de los tubos de ensayo y mirando en el interior de este como su fuera una mira.

"No creo que lo sea. Digo, es listo y eso, pero me parece más un soldado que un científico, además de que los científicos no parecen caerle demasiado bien" respondió Nary con una sonrisa nerviosa al recordar los momentos que tuvo con la Dr.Jenny y el Dr.Binz.

Pero luego sus mejillas y nariz tomaron un pequeño rubor al recordar la parte en la que el humano casi se desnudó frente todos, dejándole ver mejor el trabajado cuerpo que él tenia, y no fue hasta que recibió un llamado de Levin que la hizo reaccionar, dándose cuenta también de que estaba poniendo una sonrisa boba.

Rápidamente la agente cambió su expresión mientras que se daba la vuelva con una risa nerviosa.

"¡Lo siento, me distraje un poco, jeje... Oigan, que es eso?!" exclamó Nary mientras apuntaba a un casillero que estaba semiabierto, aunque eso último lo dijo más para despistar que por otra cosa.

La chica calamar se acercó al contenedor metálico para luego abrirlo, ganándose una gran sorpresa al ver su Splattershot y su tanque de tinta en el interior de este.

"¡Oigan, chicos. Los encontré!" llamó Nary a la vez que tomaba su Splatershot y revisaba que no tuviera algún daño.

"Bueno, supongo que ya podemos irnos, verdad?" preguntó Shara, ganándose la atención de todos.

"Sí, pero... Y que hay de Drake?" preguntó ahora Nary, volviendo a poner su mirada sobre su arma de tinta.

"Es obvio que él no está aquí, seguramente ya esté con los Octarianos haciendo quien sabe que. Tal vez otro día podamos visitarlo" ofreció Levin antes de caminar hasta la puerta por la que habían entrado, seguido de hacer una seña con su mano para que lo siguieran.

El par de hermanos no discutieron, y fueron hasta donde estaba Levin, saliendo del laboratorio junto a él.

Por otro lado, Nary todavía seguía teniendo ese debate de si sentirse aliviada de que él pelicastaño ahora no estuviera en su bóveda, o sentirse desilusionada por el mismo motivo, y más aún al saber que ahora Otome tenía la oportunidad de estar todo el tiempo con él.

Dando un suspiro, la misma chica calamar se ajustó su contenedor de tinta en su espalda, y se dispuso a salir del laboratorio con su Splattershot en mano, teniendo en mente que Otome no podría conquistar a Drake tan fácil, mas aún cuando ella y él casi tuvieron un momento mas allá de la amistad.

Cerrando el casillero de nuevo, se dispuso a salir, pero luego le vino a la mente que el humano luego se daría cuenta de que alguien entró a su base y tomó su equipo de Turf War mientras él no estaba.

Ante eso, la chica calamar regresó a la mesa donde estaban todos esos instrumentos para la ciencia, buscando un papel y un lápiz, o algo con lo que poder escribir en él, sin importarle mucho desordenar un poco las cosas.

"¡Nary!" la susodicha pudo escuchar a Levin llamándola desde el pasillo, haciendo que esta volteara por un segundo a la puerta por la que había venido la voz.

"¡Ya voy!" contestó la Inkling buscando con un poco más de brusquedad, hasta que por fin pudo encontrar un papel rasgado, pero lo suficientemente grande para poder escribir en él, además de un bolígrafo para talonarios.

No le tomó mucho tiempo escribir una rápida nota en el papel, pero si un poco el hacer un simple pero lindo dibujo, el cual luego de terminar llevó hasta el casillero, y lo colocó entre la puerta de este, cerrándola después para que quedara ajustado.

Nary dejó salir una pequeña risa mientras veía el papel con la nota, pero la voz de Levin le volvió a recordar que ya se iban.

"Nary, si no vienes, nos vamos sin ti...!" finalizó el chico calamar desde el pasillo, para luego escucharse los pasos del grupo alejarse lentamente.

"¡Ya voy, ya voy!" exclamó Nary casi con urgencia mientras salía corriendo de la sala, escuchándose sus apurados pasos alejarse también.

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No tomó mucho tiempo para que el cuarteto casi llegara a la puerta, siendo nuevamente guiados por Nary, mientras que Nayls ya estaba preguntando por la anterior tardanza de su guía en el laboratorio.

"En serio, Nary, por que te tomó tanto en salir de ese lugar?" fue la pregunta que el hermano menor hizo mientas tenía sus manos detrás de su cabeza, ganándose la atención de la susodicha Inkling.

"No me tardé tanto, y solo fue para dejarle una nota a Drake de que estuvimos en su bóveda" respondió esta.

"¿Y entenderá lo que le escribiste?" preguntó ahora Levin alsando una ceja y cruzando los brazos.

"No lo creo, pero de seguro Bruce si podrá" respondió nuevamente Nary con una sonrisa, y volviendo a poner su vista al frente.

"¿Bruce?" Shara levantó la vista de su celular para ver a su amiga de tentáculos naranjas.

"Ya saben, el robot flotante que siempre está con Drake" contestó Nary, riéndose un poco por ya haberse olvidado del ayudante del supuesto pelicastaño.

Pero mientras más se aproximaban a la salida del lugar, mejor pudieron ver que alguien estaba parado justo en frente de la abertura, por lo que de forma rápida y por instinto, los cuarto amigos se escondieron detrás de las cajas, asomándose levemente para ver de quien se trataba. Y no era uno sólo, sino que eran varios los que bloqueaban la salida de la bóveda. Un grupo de Octolings estaban al parecer reuniendose en la abertura de la primera puerta, a la vez que discutían silenciosamente, pero lo suficientemente fuerte como para que el grupo de agentes pudieran escucharlos.

Pero lo que más llamaba la atención, era el oficial que los lideraba, siendo ni mas ni menos que Reinek, quien no parecía ponerse muy alegre por las respuestas de sus soldados.

"Entonces, encontraron?" preguntó el oficial mirando a cada uno de su equipo.

"Lamentablemente no pudimos encontrar nada, señor. Este lugar parece un laberinto, y las palabras escritas no dicen nada acerca de armas o algo por el estilo" respondió uno de lo integrantes, a lo que Reinek solo se frotó los ojos con frustración.

"Se aseguraron de haber traducido bien el idioma Antiguo?" preguntó otra vez el Octoling lider.

"Si señor, hasta ahora lo único que hemos encontrado fue: 'Zona de entretenimiento', 'Comedor', 'Baños', 'Oficina del Director', 'Almacén de suministros', y 'Puesto de Ingeniería'. Pero nada acerca de un depósito de armas o algo por el estilo" contestó el contrario mientras revisaba una libreta por las posibles anotaciones que habían hecho en ella.

"¿Armas, a que clase de armas creen que se estén refiriendo?" susurró Levin poniendo su vista sobre sus compañeros.

"Tal vez estén creando una nueva arma" dedujo Nayls, también volteando a ver a sus tres amigos, y regresando su vista al grupo de Octarianos.

"Si, pero... Buscarlas aquí?" cuestionó Shara con una ceja levantada, no muy convencida de eso.

"A no ser que..." murmuró Nary mientras pensaba, solo para luego abrir los ojos como platos, al recordar el primer enfrentamiento que tuvieron ella y Otome contra Drake, el cual estaba usando una rara especie de arma que disparaba proyectiles demasiado rápidos para ser vistos, y que podían sacar pedazos del concreto bajo tus pies, sin mencionar las extrañas granadas que el pelicastaño usó contra ellas.

Y eso que solo habían visto una sola de ellas, quien sabe si habían armas todavía más peligrosas guardadas por ahí, y lo que harían los Octarianos si las tuvieran en sus manos.

"¡A no ser que sean las armas de Drake lo que buscan!" exclamó Nary sin pensarlo, completando la frase, pero provocando que el escuadrón de Octolings casi los escucharan.

Reinek y el resto de Octolings de elite al creer haber escuchado algo, pusieron su mirada hacia el escondite de los agentes, quienes ahora estaban tapando entre todos la boca de la Inkling de tentáculos naranjas, a la vez que se aseguraban de no ser vistos. Nary también al darse cuenta de lo que había hecho, sumó sus manos a los de sus tres amigos, mientras que sus pupilas se habían convertido en espirales por los nervios.

El oficial Octoling dio un paso hacia el frente, levantando una mano y estando a punto de dar la orden para revisar que había sido ese sonido, pero en ese preciso momento, el llamado de otra Octariana corriendo hacia ellos los hizo olvidarse de eso por un momento.

"¡Capitán Reinek, señor... Tenemos problemas!" advirtió la chica pulpo, la cual resultaba ser la misma que había visto a los SquidFire en el comedor.

"Soldado, cual es el problema, y por que te tardaste tanto en reagruparte con nosotros aquí?" preguntó el susodicho oficial, mirando severamente a la Octoling llegar hasta ellos y empezar a jadear por haber corridos tanto.

"¡Lo siento, señor... Me perdí, este lugar es... Muy grande, y... Tenemos Inklings!" exclamó la misma, provocando una leve sorpresa en el grupo de Octarianos, pero una más grande al cuarteto de calamares escondidos tras las cajas.

"¿Que, Inklings, aquí?" volvió a preguntar con seriedad Reinek, acercándose a su subordinada.

"Así es, señor. Los vi en los comedores cuando recorría... El lugar para encontrar las armas del Antiguo... Eran un total de cuatro" respondió la chica pulpo, ya recobrando un poco más el aliento.

"¿Te vieron?" otra pregunta más salió del oficial, poniendo su rostro ligeramente de perfil para enfatizar la preocupación de haber sido descubiertos, y la amenaza indirecta de dicho gesto.

"N-no, logre esconderme antes de que llegaran a verme. Luego los vi irse, y ahí es cuando me puse a buscarlos a ustedes!" respondió la Octariana, levantando sus manos en frente de ella con un claro índice de nervios.

Reinek se quedó viendo unos segundos a la contraria, antes de voltear a ver a su escuadrón, quienes ya estaban esperando cualquier orden que fuera a darles.

"¿Que ordena, señor. Los buscamos y los eliminamos?" ofreció otra de los Octolings conformando el equipo.

"Mmmm... Lo mejor sería no dejar testigos si nos hubieran visto, pero como no lo han hecho, sería un desperdicio de tiempo y tinta el ir por ellos, así que de momento nos retiramos. Es muy pronto para que se inicie el asalto contra los Inklings, además que todavía no hemos encontrado las armas del Antiguo" explicó el oficial con una mano en su mentón de forma pensativa.

"Oh, hablando de eso... De camino aquí encontré unas escaleras que iban hacia abajo, y cuando bajé por ellas, encontré una puerta completamente sellada, solamente había un detector de algún tipo al lado de la puerta. Traté de abrirla, pero ni si quiera se movió, y sobre esta tenía algo escrito, pero la mayor parte estaba cubierta por el óxido, solamente habían tres letras, creo... Creo que decía 'ARS'" volvió a hablar la Octoling que había descubierto a los agentes.

"¿'ARS', estás segura?" preguntó Reinek, frunciendo un poco más el ceño bajo su visor, y volviendo a acercarse a la chica pulpo.

"N-no lo se, puede que también lo halla traducido mal" respondió esta, volviendo a sentir nervios, pero tratando de no tartamudear frente a su superior.

"Mmmm... ARS, ARS, ARS..." se repitió a si mismo el líder Octoling mientras caminaba de un lado a otro, pensando en qué podría significar, incluso sin importarle que el resto de su equipo lo estuviera viendo algo extrañado, incluso los cuatro amigos se preguntaban que estaba haciendo.

Hasta que de un momento a otro, Reinek se detiene de golpe, volteando una vez más su mirada hacia la misma Octariana, quien rápidamente se puso firme.

"Soldado, dijiste que solo pudiste traducir 'ARS', pero que el resto de la palabra estaba cubierta por óxido. Y que la puerta estaba totalmente sellada, verdad?" preguntó el oficial, poniendo especial atención a lo que diría su subordinada.

"Así es señor, aunque no se a que quiere llegar" contestó la chica pulpo ladeando un poco su cabeza.

El oficial no dijo nada, sólo se dedicó a sonreír con malicia, dejando salir una pequeña carcajada.

"Es hora de irnos, soldados. Puede que no tengamos las armas, pero al menos algo nos llevamos con nosotros" finalizó Reinek mientras hacía una seña para que todos los demás se retiraran, a lo que estos hicieron caso saliendo por la abertura lo más rápido que pudieron.

Y el Octoling líder habría hecho lo mismo, sino fuera por hecho de haber recordado aquél ruido que les había llamado la atención por un momento, por lo que apartándose de la abertura, el chico pulpo fue acercándose al grupo de cajas en el que los novatos agentes estaban escondiéndose.

Por otro lado, la tensión en el cuarteto iba en aumento, lo último que necesitaban ahora era que el oficial viniera a investigar su escondite. Si los encontraba, era seguro que habría un combate, y más aún por el hecho de haber escuchado el plan de Reinek.

"¡Rayos, viene hacía acá!" susurro Levin tan bajo como pudo, pero asegurándose de que sus compañeros lo escucharan.

Eso no ayudó con la tensión del momento, y solo causó más nervios en Nary, Shara y Nayls.

"¡¿Ahora que vamos a hacer?!" preguntó Nary en el mismo tono que Levin.

"Tal vez podamos someterlo entre todos" sugirió Shara, pero el Inkling de tentáculos azules al instante lo negó.

"No sin hacer ruido, y alertar al resto" dijo Levin asomándose apenas para ver a Reinek aún caminando hacia ellos.

"Y que mas da?, podemos luchar contra ellos también!" propuso Nayls aún susurrando.

"¡Con que armas?, la única armada ahora es Nary, y ella no es tan buena para enfrentarse a todos ellos!" continuó Levin, tratando de pensar en un plan para poder salir de esta situación.

"No tenemos de otra, si nos movemos de aquí nos verá, y si no nos movemos, nos terminará encontrando... Por lo menos intentar someterlo tiene menos posibilidades de que terminemos como un charco de tinta en el suelo, así que... Preparence, y Nary... Contamos contigo si esto estalla" finalizó Levin volteando a ver a los hermanos y luego a la susodicha chica calamr naranja, quienes le asintieron con dudas, pero aún así lo suficientemente decididos.

Reinek se aproximaba cada vez más al escondite de los agentes, llegando a cierta distancia cuando llevó uno de sus brazos detrás de su espalda y desenfundando su Octoshot, con el cual fue acercándose de una forma mas precavida y alerta mientras apuntaba con su arma por sobre las cajas.

Levin por otro lado, se posicionó para saltar sobre el Octoling cuando se acercara lo suficiente, sin mencionar que los hermanos hicieron lo mismo, y Nary preparó su Splattershot si llegara a necesitar disparar.

A este punto, el oficial ya estando casi del otro lado de las cajas, se preparó para saltar del otro lado y recibir a quién fuera que hubiera hecho ese sonido.

Y así, los cinco ya estando lo suficientemente cerca del otro, hicieron su movimiento. En el caso de Reinek, fue el primero en saltar del otro lado de las cajas, apuntando adonde estarían los agentes, pero se llevó una sorpresa al no encontrar nada más que aire, en su lugar, una rata pasó corriendo mientras chillaba por la repentina aparición del Octariano, quien la siguió con la mira de su arma hasta que se escondió por algún agujero.

Reinek lentamente fue bajando su arma hasta que la dejó colgando en una de sus manos, terminando con un audible suspiro de frustración, pero a la vez de alivio mientras que bajaba la cabeza. Luego, el oficial volvió a poner la cabeza en alto, al mismo tiempo que colocaba nuevamente su arma en su espalda, disponiéndose ahora mismo a salir del complejo.

En cuanto a los agentes, pues estos al último momento habían cambiado a su forma de calamar, y se habían escondido en un lado de una de las cajas mientras estos se abrazaban entre sí para ocupar el menor espacio posible, además de temblar como gelatina.

Lentamente Levin aún en su forma cefalópoda, se asomó por uno de los bordes de la caja, viendo como Reinek finalmente salía por la abertura. Ante eso, uno a uno fueron asomándose el resto de los SquidFire, solo para luego volver a sus formas humanoides, tirándose al suelo, y suspirando un gran alivio.

"¡Creí que... Nos encontraría!" exclamó el líder del grupo, jadeando con evidente tensión.

"¡Mis corazones... Se me van a salir del pecho!" comentó ahora Nary, llevando sus dos manos a su ya mencionada zona.

"Supongo que hay que agradecerle a mi hermano... Su cobardía nos salvó el trasero" dijo ahora Shara, jadeando al igual que todos.

"¡No fue cobardía... Fue una idea que se me ocurrió!" exclamó Nayls molesto, volteando a ver a su hermana mayor.

"Ya, está bien... De todos modos, si Nayls no se hubiera convertido en calamar, no se nos habría ocurrido evadir a ese Octariano de esa forma!" dijo Levin sentándose, seguido de ponerse de pie.

"A todo caso, creo que tenemos un grave problema" dijo Shara, también poniéndose de pie.

"¡Sí, tenemos que ir y decirle a las Squid Sisters, y al Capitán Cuttlefish sobre el plan de esos Octarianos!" exclamó Nayls sumándose también al resto.

"Esperen, no creen que sería mejor contárselo a Drake primero?" sugirió Nary tomando su Splattershot y parándose de un salto.

"Pero Drake no está aquí, lo que seguramente quiere decir que el todavía esté en la ciudad de Otome" volvió a decir el menor de los hermanos.

"Por primera vez, Nayls tiene razón. No podemos avisarle al grandullón sin arriesgarnos a que los Octarianos nos splateen apenas vernos, así que de momento le avisásemos a las Squid Sisters" propuso Levin dándose la vuelta para ir hacia la abertura de la puerta.

"Hablando de Otome... Creen que ella... También esté inmiscuida en ese plan?" preguntó Shara, a lo que todos bajaron la mirada para pensar en esa posibilidad, aunque proferían que no fuera así, ya que la teniente había demostrado que no era mala, sino que algo desconfiada, y ya les había caído bien a los agentes, incluida a Nary, quien ya tenía cierta 'rivalidad' con ella.

"Luego pensaremos en eso, lo primero es llegar lo más rápido a Inkopolis. Callie, Marie y el Capitán ya sabrán que hacer. Vamos!" ordenó Levin, reanudando su camino hacia el agujero en la puerta, ahora siendo seguido por sus tres amigos.

Aunque una preocupada Nary se quedó unos segundos viendo al suelo, pensando en lo que estuviera haciendo el humano en Octomburg. La chica calamar llevó una de sus manos a su pecho, sujetando su playera, orando por dentro que el pelicastaño estuviera bien.

Luego de eso, la Inkling de tentáculos naranjas volvió a poner su vista al frente, y se dispuso a irse con sus compañeros.