SERÁ

"lo que puede ser con el tiempo se convierte en el será..Lo que fue no será y lo que será tal vez nunca vendrá.."

"pOr que nos moriremos siguiendo esperando esas señales que nos indica el amor..Cuando solo sentimos..una pregunta..¿como sabremos que es el verdadero amor?..Existirá eso?..Si existe por que no les llega a muchos..Por que hay divorsios?.."

"Esperas mis motivos de visita será que no me has podido olvidar?..Será que nos daremos otra oportunidad?"

cap.16 ¿por que?

Los chillidos de las niñas no los dejaban a los tres dormir..No podían terminar lo que empezaban..Cuando comenzaba algo interesante volvía a llorar la de enmedio, su paciencia se agotaba, pero al tiempo se reían de las niñas..

-son hermosas-decía Inuyasha que estaba besando la mejilla de Kagome ella logró sentir como tocaban el timbre, se alejó un poco y fue a abrir..-

Bajó con cuidado las escaleras se estaba reponiendo...Abrío la puerta pero no había nadie solo un simple sobre amarillo con un Kagome Higurashi impresó..Se agachó un poco mientras lo examinaba con sus ojos...Era algo grande y miró más alla pero no había nada, luego entró abriendo el sobre..Era de Naraku..Un escrito una carta..La agarro y lo puso dentró de un recibidor, mientras subia las escaleras ..¿qué pretendía ese sujeto?..Se amargó un poco, mientras lograba ver como estaba Inuyasha contandole un cuento a su hija, esta solo ponía atención y luego boztesaba..Tal vez era más interesante dormir que escuchar palabras que no entendía, se quedo contemplandolas un poco era pleno día casi las seis hora del descanso de las niñas..Agarró a su esposo de la mano llevandolo a descansar con sus ojos cansados a los ojos dorados..Que al verla solo supusierón algo...Iban a descansar...

Se recostarón, manteniendo ese calor que comenzaba a inundar los cuartos..Se quedarón rápido dormidos, sin duda ser padres era agotador..Tal vez sonaba el telefóno pero era algo muy lejano, solamente lograban sentir como una Kaede iba a desconectar el télefono una sonrisa se formo en sus labios..A pesar de dormir podía mantenerse en calma..Tranquila, su cabello se encontraba más brilloso...Se veía mejor su pansa en descanso..Ella en reposo y el manteniendo cuidar o leer algun libro sobre como ser un buen padre..Más eso no viene con un manual..Lo ídeal sería que vinieran los niños con instructivos.Pero no tendría lógica todo estaría estudidado.

No podía estar toda la vida ocultando sus extraños acosos de Kikyo, y ahorita Kagome no podía recibir una noticia como esa..

"buaaa, buaaa"

Otra vez comenzaba a llorar una niña, se levantó intentando que el sonido no despertará a su amada Kagome, llegó al cuarto encendiendo la luz..Por un momentó tubo miedo de que un asesino estubiera con un cuchillo intentando matar a su hija, pero fue un pensamiento. Nada de eso podía pasar, la casa tenía seguridad y por si las dudas un pequeño escondite por si pasaba algo..Un hombre de negocios como el estaba expuesto a que alguien quisiera hacerle algo solo para beneficiarse con su dinero..

Llegó mientras agarraba ese bebé que parecía que cabía en una caja de zapatos le gustaba verla como intentaba abrir sus ojos. Chupando su dedo creyendo que era el seno de la madre, río un poco no pudo evitar su propía hija le daba ternura, miró a las otras dos las tres dormían en una cuna grande hecha para ellas..Una estaba agarrando con su brazo el dedo pulgar del pie de su hermana, la otra estaba como intentando succionar algo dormida, solo faltaba por dormir ella..

-a la ruru niña..duermete princesa duermete ya..Por que viene el coco y te comerá-cantaba mientras la comenzaba a arrullar tal vez se estaba durmiendo con ella..Se fue a sentar en la mesedora mientras miraba a su hija-duerme..y cuando crescas serás rica-le susurraba esperando que su hija entendiera eso, pero la bebe solo se acurruco en el pecho de su padre y se quedó dormida, no sabía si era la mágia del sueño o la mágia de su hija pero el tambien quedo dormido..No quedó completamente ya que tenía miedo de que su hija se callera, pero la mantubo en sus brazos hasta el grado de quedarse despierto..La dejó en la cuna y bajo por algo de comer y luego volvío a subir para darse cuenta y espiar que Kaede estaba cubriendolas con mantitas y estaab sentada cuidandolas..Luego el fue a su cuarto y miró a su esposa placidamente dormida, ella estaba más cansada que el..-

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Sango tambien estaba cansada el niño era tan bonito con su cabello castaño y sus ojos azules..Era pequeño a penas no conocía de la vida lo cuidaba tanto como si fuera un tesoro y el bebe eso era un pequeño tesoro que no necesitaba de nada..Tenía a su madre y un padre...

Le estaba viendo como estaba gateando..Lo llevó a la cama, mientras lo veía dentro de unos años el niño iba a poder elegir muchas cosas si ahora le gustaba el azul tal vez después le podría gustar el verde, se sentía tan vulnerable, que amaba admirar a su hijo..Su esposo abajo de seguro haciendo un relajo con tal de llevar el desayuno..Ya no quería trabajar de secretaria iba a cuidar a su niño y de ahí quien sabe hacer otro niño..Pero que fuera niña..Vío llegar a Miroku pero ella se encontraba tal vez planeando el futuro de su hijo.

Se veía hermosa pensando, llegó mientras la abrazaba por la espalda mirando por el inicio del hombro viendo dormir a su hijo Jan..

-se parece a ti-dijo Sango que le hablaba al oído mirando a su hijo..-

-pero tiene la hermosura de su madre-contesto, mientras Sango se sonrojaba comenzaba a dudar si se iba a acostumbrar a esos halagos que le gustaban por parte de Miroku, en cambio el señor Miroku le encantaba ver esas mejillas encendidas y esos ojos llenos de amor que se mandaban..Tal vez su felicidad no se apañaba del todo. Y menos por ese grandioso ser que estaban cerca de ellos..Con su piel rosada y sus ojos hermosos que miraban muchas cosas con curiosidad pero para eso iban a estar ellos..Ellos iban a estar para enseñarle muchas cosas-

Terminarón los pensamientos, por que Sango llevo al cuarto de su hijo al bebe, después pensarón en si una de las hijas de Inuyasha se enamoraba de el, y hasta tal vez eran buenos amigos..Sería gracioso, pero mejor no pensaban tanto ya que estaban cansados, los dos se fuerón a acostar.

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Las tres traviesas no hacían tanto relajo, de hecho el tiempo pasaba volando cuando estaban cerca..Ahora Inuyasha se iba a trabajar dejando a Kagome con sus bebes..

-crema-decía, mientras Kaede le pasaba la crema y se la ponía a Sae, Mandy o Kim-

-Kagome ella es..-Kagome la miró, tenía una blusa roja..-

-Kim-decía mientras miraba a las otras dos-

-Kaede y si me equivoco de hija?-preguntó de repente, pero ella tenía una sensación. Por ejemplo las alcanzaba a diferenciar les ponía un puntito con plumón diferente el color rojo de Kim, el de amarillo de Sae y el de azul Mandy...Una forma rara o mejor así la que los despertaba era Mandy, era el despertador de la casa..La que dormía mucho era Sae y la que le agarraba el dedo pulgar a Mandy era Kim, al parecer iban a ser diferentes..-

-las mamás tienen un sentido-decía Kaede que cargaba a Kim, mientras Kagome iba por Sae-

-Inuyasha dice que Sae es la que llora mucho-decía divertida, mientras Kaede se le quedaba viendo sin duda las niñas deben de ser hermosas-

-y tu que crees?-le preguntó la anciana de manera sabia, mientras veía sonreír a Kagome y darle un beso en la nariz a su hija-

-que se equivoca-dijo más divertida al sentir como su hija le daba un beso o intento de beso en la parte de su nariz, más bien parecía una niña comiendo nariz-

Kaede formó una sonrisa, mientras veía como les cambiaba el pañal..Tres niñas estaba segura que ya iban a ser las únicas, trillizas..Quien iba a decirlo..Kagome estaba pensando en como se iban a comportar sus hijas, como iba a poder contestarles preguntas que a veces ni ella de química sabía, que iba a hacer?. Pero se madre tambien es un oficio, es más ser madre es lo más díficil. Solo tendría que dejarse llevar, estaba viendo como las niñas estaban cansadas y bostezaban..Kaede la dejo con sus tres hermosas gemelas.

-estan cansadas?-al parecer las niñas no sabían solo veían a la que era su madre, y mantenían sus ojos intensamente en ella-duermanse mamá aquí estará-decía maternalmente, mientras las niñas comenzaban a dormir, después cerro la puerta asegurandose de que las ventanas estubieran bien cerradas, que la noche no atemorizará a sus bebes, una pequeña lampara infantil estaba adornando el cuarto. Salío dejando la puerta entre abierta, mientras salía a pasos rápidos ya era noche e Inuyasha no llegaba..pues donde podría estar?-

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-dejarás a tu mujer por mí?-preguntó una mujer que estaba casi subiendose al escritorio con tal de tener la atención de su ojidorado favorito..¿pues cuantos tendría?-

-Kikyo no haría eso además ya dejame en paz me hartas-pero Kikyo lo calló-

-apoco el capítan no puede manejar en dos ríos-decía burlesca, mientras se mordía coquetamente el labio y pasaba su lengua dando a entender lo excitada que estaba tan solo de ver a Inuyasha, el perfume mascúlino estaba ambriagandola, el simplemente arqueo la ceja lo más despota posible se levanto y abrío la puerta de su oficina-

-vas a quedarte ahí encerrada?-preguntó con molestía al ver como Kikyo tomaba su bolso y salía de manera extraña caminando presumiendo sus hermosos encantos. Una ramera que se creía cara, desgraciadamente solo tomó unos segundos para poderse dar cuenta del error que cometía en no decirle nada a su esposo, de seguro estaba esperandolo y a penas eran las nueve..Bajó y sin preguntar dejó plantada a Kikyo, si la dejo fuera de la empresa que le pasará lo que pasará a el que le importaba?-

Aceleró no tenía animos de esperar el maldito semaforo, solo siguio su curso, estaba errado a una nueva forma de vida, como pretender borrar todo si cuando existio..El fue el, el fue el que empezó todo al principio los pleitos terminaban en reconciliaciones pero después..No después vinierón los gritos y excitantes labios de Kagome, pero después de eso y dentro del que era el "eso" solo era sexo, cuatro letras un rudo significado..Pero se enojada con el mismo, es más no estaba agusto no podía sabiendo todo el maldito mal que le había logrado hacer a Kagome, pero no toda la culpa la tenía el. Su cabello negro parecía noche plasmada en el, sus ojos dorados restalaban en la noche, estacionó el carro mientras se bajaba no tenía ningún sentido, entró de manera mecánica estaban sus pensamientos en blanco, no hayaba que sentir solo confusión..Amaba tanto a Kagome su Kagome, que a veces sentía los celos..Entró quitandose el agarre de la corbata, y la luz se encendio ahí estaba su esposa esperandola con la voz más seria del mundo un aspecto jovén y con unos nervios, movía su pierna que estaba cruzada, se levantó y entonces el supo que no la quería perder jamás..

-que hora crees que es?-preguntó de manera amarga más que un limón, mientras veía llegar a Inuyasha cerca de ella, pero solo lo miraba fríamente. Estaba algo molesta-

-las diez?-respondío con otra pregunta. Odiaba ese aspecto de no pasaba nada y esa coraza de misterios que lograba dejar ver Inuyasha, ¿de que demonios estaba hecho?. Le toleró una borrachera de esos nueve meses y le toleró esas respuestas nerviosas pero esto, sin duda esto ya era demasiado..Llegar tarde, no llegar a comer y de por sí llegar molesto, y ella que, bien contenta gracias o que?-

Simplemente dio un paso atrás y dio media vuelta..El rápido llego en frente de ella.

-y lo dices como si nada..-decía de manera intranquila, esa mirada la estaba haciendo ceder. Pero su orgullo era grande ambos orgullos, si antes no calló ahora menos, esta vez Inuyasha iba a ver que no era fácil..Como el pensaba-

-que quieres que haga tube trabajo-decía defendiendose, quien sabe que cosas estaba pensando Kagome pero estaba algo exaltada y tambien intranquila..Será que Kikyo le hablo, de repente la fuerza se le derrumbó, no, no, no estaba listo para esta situación para perder a su esposa, puso una cara como si hubiera visto un fantasma comenzó a sentir frío..Erizandosele la piel como a un gato, no podía pensar con claridad, hasta que Kagome lo miró-

-no..no me a hablado ninguna de tus amantes-decía enojada, al ver tal expresión de Inuyasha como si tubiera paro cardíaco-

-Kagome..no soy un moustro-decía defendiendose al sentir un alivio..por que estar desgastando su tiempo por pletios y celos, curvo sus labios en una sonrisa ella estaba celosa..Lo entendía, si la entendía ya que el más de cinco veces experimentaba esa sensación al escucharla decir que Naraku hizo esto, Naraku dío clases de esto al final de que le sirvio, de que le sirvierón los celos?. Para darse cuenta que en verdad amaba a su esposa y que tal vez no podría sobrevivir estando lejos de ella..Cursi pero era cierto-

Si como creer de nueva cuenta en el?..

-Inuyasha todavía vez a Kikyo?-preguntó dolida, mientras veía como Inuyasha estaba mirandola se veía muy interesante solo era cuestión de esperar la reacción de Inuyasha..Cualquier cosa que negará eso..-

-Kagome ella no me interesá si no otra persona-se acercó, mientras acariciaba el mentón de Kagome e intentaba acercarla a su boca, pero ella se hacía la complicada-

-cerdo entonces cuántas necesitas Inuyasha?-más bien este comentario Kagome lo dijo por broma, pero Inuyasha seguía mirandola de manera tranquila, como si todo lo malo que cargaban sus hombres se extinguiera con solo consentrarse en ver su mirada quedó hechizado otra vez en esos ojos chocolates-

Ella se acercó a los labios de Inuyasha, mientras la besaba con mucha ternura de manera que el aire se acabará de manera poco a poco. Luego el la abrazó, solo con esto pudo sentir que Inuyasha no la engañaba, que la amaba si la amaba y le gustaba pensar que este hombre que años atrás tubo muchas fans era de ella..La chica que menos caso le hizo, la que lo dejó plantado solo por que su gato se rompío una pierna..Si esa vez Inuyasha se molesto mucho y después ella le sonrío y fue como si todo se acabará.. A veces ella soñaba que estaba atrapada en un espejo y que Inuyasha estaba del otro lado, viendo el alma de Inuyasha ese espejo eran los ojos dorados cerveza de su esposo, siempre fue extraño..

Se besarón y después ella dijo que estaba cansada..La dejo descansar mientras tocaba el vientre de su esposa, deseaba mucho ver crecer a sus hijas sin ningún maldito mal cerca de ellas, sin nadie que quisiera lastimarla.

Se quedó dormido, cerca de Kagome abrazandola mientras sentía esas suaves manos que le recorrían el rostro le traía paz..Le reconfortaba curvo sus labios..

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Iba de visita al doctor fue hermoso el descanso ahora se encontraba de regreso a su trabajo, donde los alumnos le preguntaban sobre su hijo, ni se notaba que acababa de ser mamá..Pasaban de las diez y media y necesitaba ir al doctor, Inuyasha la iba a compañar..No se había vuelto a tocar el tema de Kikyo desde hace como dos semanas..Y eso que pasaba el tiempo rápido. Estaba tomando un poco de agua y vio llegar a Inuyasha mientras las muchachitas se le quedaban viendo..

-se te hace tarde-decía Inuyasha que le daba un beso de saludo en los labios a Kagome, lo sentimos pequeñas adolescentes el esta ocupado-

Bueno Inuyasha la secuestro, mientras iban pláticando sobre cosas de las niñas sobre que iban a hacer mientras esperaban a que comenzarán a hacer travesuras..A lo cual Kagome dijo que si eran traviesas era por Inuyasha siempre fue problematico..

-Kagome te veo encantadora-decía el doctor, mientras Inuyasha se molestaba, era Koga quien no paraba de mirar a Kagome y luego a el..Intensamente-

-si dicen que las mamás son hermosas-decía bromeando, Inuyasha miraba a los dos-

-y bien ya nos vamos es todo?-preguntaba de manera rápida, mientras Kagome y Koga lo miraban de la nada se hiso silencio-

-bueno pues veo que estas bien no sientes dolor, duermes bien, estas en perfectas codiciones estas dada de alta-bromeaba. Kagome reía, mientras Inuyasha simplemente ya se estaba despidiendo..Kagome se despidio mientras le seguía el paso a Inuyasha le agarró del brazo..-

Al salir Kagome chocó con una mujer que usaba lentes parecía familiar pero mejor lo olvido..Si la mujer iba al consultorio pero no con Koga si no con otro doctor.

Se moría de ancias esta elegante mujerzuela, mientras entraba al escuchar su nombre con su fino camiado cruzo el umbral de puerta y cerrarón la puerta, esta vez estaba nerviosa que no se fijo con quien chocó..

-Kikyo-dijo el doctor, que miraba a la hermosa mujer en frente de ella..Sin duda sus rasgos finos que atemorizaban a los hombres especialidad en ella ser la cazadora y no al revés..-

-Onigumo estoy si o no embarazada?-decía de manera ruda, mientras miraba al doctor. Por una parte esperaba que sí, Onigumo reía de manera elegante su sonrisa sádica llena de celos y hasta lujuria...No lujuria destilaban sus ojos..Si con la miraeda podía desearla como a las enfermeras que entraban de esta oficina-

-lo estas querida Kikyo..dime quien es el padre?-La cara de duda de Kikyo se hizo grande en verdad el padre podía ser Onigumo, u otro maldito ricachón..Tambien podía ser Inuyasha por que no?..Si estaba planeando quedarse con el sin importar el presio..Se amaba, si aun que se le iba a desfigurar el cuerpo se amaba..-

Onigumo sin duda la estaba mirando..

-que piensas Kikyo?-pero Kikyo, ya estaba con los resultados de sus ánalisis en la mano y saliendo del lugar.-

Ni siquiera se despidio, solamente salío con una grande sonrisa..Le alegraba estar embarazada s eimagino que iba a atar a un compromiso a Inuyasha con Kikyo pero a el no le importaba no era de su incunvencia..verdad?..

En cuanto salío marco al celúlar de Inuyasha este lo tenía apago, ni modo sería mañana ahora celebraría su embarazo..De manera inteligente le salierón las cosas claro nunca penso que quedaría embarazada de cual quier hombre, ya que era una grande mujerzuela encargada de capturar hombvres y absoerverles el dinero, nunca se cansaría de hacer eso..Pero Inuyasha vaya, el si le le entró a la mente le emocionaba, le emocionaba cuando se veían a escondidas solo para hacer el amor..Para ella era hacer el amor pero para Inuyaha era infidelidad y sexo..

Y llevaba ese peso durante toda la vida, ser infiel..Fue algo grave..Pero no debería ponerse así deberia de ser féliz tenía cuatro hermosas mujeres claro no contando con la anciana que se peleaba...Pero tenía cuatro mujeres hermosas que vivían con el no debería de sentirse miserable al contrario debería de sentirse contento y complacido..Llegó con Kagome y ahí estaban Miroku y Sango comiendo un poco y jugando con las bebes..

-son hermosas no entiendo como un bruto fue a tener tanta suerte-dijo Miroku, Kagome sonrío..Miró a Inuyasha el no era feo de hecho Inuyasha era muy guapo, era lo mejor..-

-Miroku te estoy escuchando-¿por que hablaban como si el no estubiera ahí?-

Se quedó viendo a sus tres hijas, bueno una que estaba en manos de Kagome..Era Kim no lo podía discutir Kim estaba con Kagome..

-es Sae-decía Kagome que le enseñaba el punto de plumón amarillo sobre su brazo. Nunca iba a acertar-

-Miroku tiene a Kim y Sango a Mandy-decía mientras ellos dos acentían-

-no es díficil!-decía Kagome dandole ánimos a su esposo para que siguiera intentando adivinar a cual de sus tres hijas tenía..Por cierto los que apostarón cuantos niños iban a tener si dijerón que tres ganarón y el sexo..Pues digamos que en esa Miroku ya sabía y fue el que ganó más que todos.-

Pasarón una agradable mañana. Y después llegó el niño favorito Jan que estaba sonriendo..

-Jan, Jan, Jan-Jan tenía mucha curiosidad por ver esas bebes, no le interesaba ahora el tío Inuyasha no..le interesaba ver a esas tres pequeñas cosas que eran pequeñas..Estaba pidiendo que lo cargarán e Inuyasha lo cargó para que vieran, puso cara de sorpresa al ver a las tres niñas iguales..-

Continuación..

Notas de la autora:

xD jaja me dan ganas de poner a las niñas de grandes y ver en todas las cosas graciosas..Tambien un poco de drama...Kikyo se morira creanme, bUeno gracias por sus reviews...

espero que les guste Nous vemos..!

atte:Willnira;+