¡¡HOLA!! Ya que ustedes lo pidieron, un capitulo mas de esta locura... Ojala y lo disfruten.
Agradezco todos los hermosos reviews que me han dejado, su apoyo es muy importante para mí.
Disclaimer: Nada es mió, todo es de Rowling y La Warner, yo solo quiero divertirme.
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Capitulo 5 – Hora de Almorzar
Me levanto casi instantáneamente. Sin ser capaz de pronunciar palabra.
Y ahora son mis mejillas las que se tiñen de escarlata...
ºOoº
Que ridículo soy, prácticamente me le tire encima... Y ahora mi querido Draco, a librarte de esta embarazosa situación de la forma mas sencilla, pero efectiva. Huir.
- Tengo que asearme.
Granger abre la boca, pero yo me le adelanto.
- Me encargare del desastre de la cocina luego.
Me encamino hacia mi cuarto, pero el hecho de que me hablara hace que me gire para encararla.
- No te preocupes por eso, Malfoy... -Me dice de una forma suave. Esto es imposible. ¿Granger siendo amable conmigo? Creo que tendré que lanzarme sobre ella mas seguido- No quiero que estés en peligro de muerte nuevamente. Al terminar su frase, suelta una pequeña risita, y, dedicándome una sonrisa burlona, se dirige a la cocina. No se en que momento se me pudo ocurrir que la Srita. Antipatía llegaría a ser amable. Así como esta en mi naturaleza ser perfecto, esta en la de ella ser una pesadilla.
Lo único que me alegra de todo esto es que no me reclamara nada. Seguro que se sonrojo por la falta de oxigeno o algo así... Al igual que yo, por que, que quede muy claro, yo no me sonroje, solo fue una reacción involuntaria a causa de la agitación.
Subí las escaleras y entre a mi habitación para poder quitarme toda esta cosa de encima. El baño fue agradable, aparte de fastidiar a las personas, bañarme es mi actividad favorita... Lo haría a toda hora si pudiera. Me acerque a la cocina mientras secaba mi cabello con una toalla, me sentía tan fresco y relajado que ni siquiera la fastidiosa de Granger podría arruinarme el animo.
Antes de abrir la puerta, senti un agradable olor... Exquisito, para ser más exacto. No se en que momento perdí conciencia de la realidad, pero solo pude quedarme ahí parado, disfrutando de tan deliciosa fragancia. De un momento a otro, la realidad se estrella contra mi cara... Si nos hacemos a la idea de que la realidad tiene forma de puerta.
Me siento muy cómodo, supongo que estoy en uno de los sofás de la sala. Abro los ojos, y lo primero que veo es la cara de Granger, que esta sentada junto a mí. Esto es a lo que yo llamo un amargo despertar.
- ¿Estas bien, Malfoy? Pregunta con preocupación... Un momento ¿Preocupación?
- Si un terrible dolor en la cabeza es señal de estar bien... Supongo que si Granger, estoy bien. Que pregunta más estupida, para ser tan lista sus preguntas no son muy lógicas.
- Lastima. Dice y se levanta.
- Lamentablemente tu intento de homicidio no funciono. Murmuro mientras me toco la frente. Siento una pequeña y dolorosa protuberancia.
- Si, el que abriera la puerta pudo acabar con tu vida. Me dice mientras rueda los ojos.
- No era necesario utilizar tanta fuerza... Es solo una puerta, no un muro de concreto ¿Sabes?
- ¿No crees que el que estuvieras parado como un idiota frente a ella pudo influir en algo?
- No. Ella es muy brusca. Fin de la discusión.
- Dejémoslo así -Dice y aparece un paño en mi frente- Bonito hematoma... Susurra.
- Y tiene tu nombre... Si deja una cicatriz, LA MATO.
- No te preocupes Malfoy, desaparecerá en un par de minutos sin dejar rastro. Esta bien, esto es extraño... ¿Y ahora que? ¿Lee mi mente?
- ¿Y puedo saber por que me ayudas? Inquirí suspicaz. Granger nunca da puntada sin dedal.
- Soy tu niñera ¿Recuerdas? -¡Mierda!- Y no quiero que el bebe que esta a mi cargo reciba a sus padres con un chichón en la cabeza. Yo y mi gran bocota.
Prefiero guardar silencio, el solo recordar mi situación me hace enfermar.
- Bien, ya son las 3:00 p.m -Anuncia mirando su reloj-.... Supongo que te traeré algo de comer.
- No tengo hambre. Digo, pero mi estomago no esta de acuerdo y hace un terrible sonido para hacérmelo notar. Traicionado por mi propio cuerpo.
- Creo que eso no es cierto.
- Claro que si. Afirmo, y mi estomago entra de nuevo a escena. No puedo creer que, indirectamente, le este dando la razón a Granger. Mi estomago se confabulo con ella para hacerme quedar mal.
- No te preocupes, cocine yo esta vez. No es solo mi estomago... ¡¡El universo entero conspira en contra mía!!
- Prefiero beber cianuro. Susurre.
- Lo harás. Añadí un poco en la comida. Bromea... o al menos eso espero.
Estoy seguro que apenas pruebe su asquerosa comida, vomitare. ¿Cómo se les puede ocurrir que mi fino paladar podrá soportar algún tipo de alimento preparado por las manos de Granger? Me preparo psicológicamente para el tormento que significara eso. Esta vez si moriré, pero de un agudo dolor de estomago. ¡Ahora que sufra el desgraciado por hacerme quedar como un idiota!
Y de nuevo ese olor que me dejo idiota frente a la puerta. Comienzo a olfatear para averiguar de una buena vez de donde proviene tan delicioso aroma... y simplemente muero de horror. Granger se acerca con una bandeja entre sus manos. El olor casi orgásmico que hace minutos me tenía deleitado proviene, ni más ni menos, que de la comida de Granger. La pone sobre la mesa que esta junto a mí.
- ¡¡Estas loca!! ¡¡Ni por todo el oro del mundo comeré eso!! -Pero huele tan bien... Y luce tan bien... ¡Genial! Ahora estoy delirando- ¿Cómo esperas que coma esa.... cosa?
- Se llama Lasagna. Explica levantando una ceja
- Le queda mejor "Porquería". Añado cruzando los brazos
- Vamos Malfoy, nunca lo has probado.
- Y así estoy bien, gracias. Prefiero seguir viviendo.
- La idiotez mata -Dice señalando mi frente-, la Lasagna no.
- No comeré. Fin de la discusión.
1. La miro con decisión
2. Granger sonríe
3. Acerca el plato a mi cara
4. El olor me hace babear
5. Mi estomago comienza a gruñir
6. Pongo mi fuerza de voluntad a prueba...
Y finalmente, como para variar...
7. Como
- Esta... -¡¡Delicioso!!- aceptable. Digo mientras intento comer lentamente, aunque se me hace algo difícil. Solo fue ponerlo en mi boca para sentir la imperiosa necesidad de comer más.
- Me alegra que te guste. Responde sarcásticamente, sin separar la vista de su plato.
- Nunca había comido algo tan... -¡¡Exquisito!!- extraño. Añado degustando más de mi rica comida. Aun no puedo creer que esto lo haya preparado Granger.
- Es mi comida favorita -Comenta-, mi madre me enseño a hacerla.
Continuamos comiendo sin pronunciar palabra. Cada uno concentrado en su plato. Entre mas comía, mas me extrañaba que me gustara.
- Ahora a esperar que el veneno haga efecto. Dice finalmente recogiendo su plato
- Al menos podré morir -¡¡¡Feliz!!!- lleno. Le susurro levantándome tambien.
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