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Fic basado en la serie Gundam Wing:

SHINIGAMI

En medio el cielo II

Capítulo 5

" La noche me envuelve...

Nací como hijo de la luz

Pero la crueldad me volvió

Mensajero del abismo...

Nunca conocí descanso

Mis piernas no se cansan

De alejarme de los recuerdos

De las voces de mi pasado

De lo que era y

De lo que ya no volveré

A ser...

Jamás..."

Por DarkCryonic.

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¿Cuándo?—Pregunté rompiendo el silencio en que estábamos sumidos.

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Tomamos una decisión. Iríamos a ese lugar esa misma noche, así que Heero se dedicó a hablar de lo que sabíamos del edificio y en como nos repartiríamos el trabajo. Los tres entraríamos al lugar, cada uno se dedicaría a buscar en tres sectores distintos. Como máximo podíamos estar 20 minutos dentro del edificio... pero eso era algo, de lo que no estaríamos seguros hasta que estuviéramos allí.

Aquella misma noche ordenamos todo lo que necesitaríamos en la misión. Extrañamente me sentí algo confundido, tanto que no podía hablar como de costumbre. Había muchas cosas dentro de mi cabeza como para vender el cuento del chico sonrisas eternas y buen humor.

De vez en cuando recibía una mirada extraña de mis compañeros, pero no decían nada. Quizás estaban tan confundidos como yo.

A las 2 AM ya estábamos vestidos y cargados de nuestras cosas. Usaríamos una vieja estrategia. Entraríamos usando una cuerda unida desde el edificio contiguo a la azotea o a algún piso de en medio... ya que la entrada principal debería ser un atolladero de guardias.

2:30 AM estábamos en el edificio contiguo, que en sí era unos 5 pisos más altos. Wufei se encargaba de observar el lugar con los larga vistas infrarrojos, mientras Heero conectaba su laptop a la red de información del sector. Yo me encargaba de preparar la cuerda y el dispositivo para arrojarla.

Aún había oscuridad en el cielo...estaría así por lo menos por tres horas más. El edificio estaba a oscuras, menos la planta del primer piso. Los guardias deberían estar en la recepción tomando café y viendo televisión, o por lo menos esperaba eso.

Miré a mi compañeros y sin esperar aprobación lancé el gancho a la azotea. Quedando listo al primer tiro. Heero levantó la vista por un segundo. Por un momento pensé que se iba a molestar pero no dijo nada.

Wufei me miró como siempre y siguió observando el edificio. Preparé los arneses. Ya sabíamos la rutina... Yo iría primero, además era el especialista, en caso de que la cuerda fallara o pasara algún imprevisto. Además, Shinigami no dejaba la diversión para otros. No hay como hacer las cosas que a uno le gustan.

Enganché mi arnés a la cuerda.

-- Aún no.—Dijo Heero parándose frente a mí.

-- Llevamos 10 minutos... Y aún no hacemos nada.—Dije mirando hacia el cielo oscuro, no tenía ganas de verlo directo a los ojos... Estaba cansado de recibir miradas congelantes... aunque ya mi corazón estaba frío y no podía ser afectado más... pero mejor era no arriesgarse.

-- Sólo espera un poco más.—Dijo con fuerza, al puro estilo de "si no me haces caso, te patearé el trasero", marcar registrada de Heero Yuy.

Así que me desenganché y me quedé parado junto a Wufei mirando el edificio.

-- Maxwell?

-- Mhnnn...

-- No hagas nada estúpido, ok?—Dijo sin mirarme el chino, pero con su típico tono de guerrero orgulloso.

-- ¿Cómo qué?—Pregunté ya que según sabía, Wufei pensaba que toda mi vida era estúpida, de principio a fin... así que entrar a comprender una petición así, era algo difícil para mí.

Me miró de forma interrogativa. Por mi parte le mostré la más inocente de mis sonrisas. Suspiró de forma graciosa. Pobre, siempre terminaba fastidiándolo más de lo que esperaba.

-- Sólo no hagas nada sin pensar.—Concluyó volviendo a mirar por los larga vistas.

-- Pensar... lo intentaré.—Dije mientras buscaba mi mochila. Cogí mis implementos de espionaje... me gustaba llamarlos así, aunque no fueran nada espectaculares, pero lograban el propósito.

Mi automática y mi cuchillo, mis fieles compañeros estarían conmigo como siempre. Mi cruz de plata, colgando a mi cuello. Mi gorra negra, y mis ganas de tener algo de diversión. Sí. Todo estaba bien.

Suspiré involuntariamente. Aun ahora no podía dejar de penar en "Shadow"... ¿Reemplazable? No... yo no lo era y les iba a demostrar que nadie, era mejor que Shinigami. Así que mirando el edificio en cuestión, me prometí internamente no hacer ninguna estupidez y cumplir con la misión.

--Es la hora.—Dijo Heero entregándome parte de un plano. – Revisen lo que se pueda, sólo nos quedaremos 20 minutos. Los comunicadores los usaremos para reportarnos cada 5 minutos... Si se puede evitar un enfrentamiento, lo haremos.—Agregó mirándome. Acaso creía que iba a ponerme a disparar... bueno... Jajajaa... la idea había pasado por mi cabeza, así que era totalmente culpable...

--Bien.—Dije sonriendo como de costumbre. Pero no creo que haya sido muy convincente.

Me puse el arnés y sujetándome a la cuerda, miré levemente a mis compañeros.

--Nos vemos en 20 minutos.—Dije. Y me dejé deslizar por la cuerda, a gran velocidad. Al llegar al otro lado, rápidamente revise la azotea, y el cable. Todo estaba bien. Hice una seña, y antes de que se deslizara el siguiente me dirigí a la puerta que me llevaría a la escalera.

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-- ¿Crees que estará bien?—Preguntó el chino, mientras se preparaba para cruzar.

-- Shinigami lo estará.—Dijo Heero preparando su bolso.

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2:45

-- Shinigami reportándose.—Murmuré desde debajo de un escritorio de una oficina que me pareció sospechosa.

-- "05, Reportándose".—Escuché.

-- "01, Reportándose".—Escuché luego.

Por lo menos estábamos vivos, aún teníamos 15 minutos más, y aún no daba con nada que sirviera. Había encontrado documentación bancaria y otras cosas, pero nada que indicara alguna pista a seguir. Esperaba que los gruñones tuvieran mejor suerte que yo, en los otros pisos asignados.

Cuando me disponía a salir de esa oficina, pasó lo que no debía. Una luz de la oficina de enfrente se prendió. El as de luz se dejó ver por bajo de la puerta. Instintivamente me agaché junto a la puerta entreabierta con un ojo observando el oscuro pasillo. Esperaba que no fueran tantas personas o por último, que no les diera por pasearse por el piso.

La idea de que fuera la oficina que tanto buscaba, cruzó mi cabeza. Aunque quién trabajaría horas extras... sería que estaban durmiendo en aquel lugar y que sólo ahora despertaban.

¿Averiguar que pasaba o salir y meterme a buscar en otro lugar? La segunda opción se me hizo la más indicada, más que había prometido actuar como un buen soldado y no como el loco del grupo. Me levanté cuidadosamente y abrí más la puerta. Asomé mi cabeza por el pasillo. Todo seguía callado, tanto en el, como en el cuarto iluminado.

Salí de mi escondite y pegándome a la pared caminé por el pasillo. Mi mano derecha ya tenía mi automática en caso de que tuviera que hacer algo extremo.

--¡¡Debes encontrarlo como sea!!—Escuché que gritaron. Volteé levemente y me di cuenta que la voz venía de la oficina.—No importa que diablos hagas, maldito Lewis, tienes que encontrarlo o me encargaré de destruirte la vida a ti y a todos los que hayan tenido la mala suerte de conocerte.!!—Volvió a gritar la voz.

--Que mujer...—No pude evitar murmurar. Porque de algo estaba seguro. Esa voz era de una chica y de una muy enojada.

No escuché respuestas, así que era obvio que estaba usando el teléfono o algo parecido. Me quedé quieto esperando. ¿qué será lo que tanto busca?... me pregunté mientras me metía a la oficina contigua a la encendida. Cuando cerré la puerta a mis espaldas, la imagen de "Shadow" vino a mi mente. ¿Sería que se refería a eso... al Gundam...? ¿sería ella el piloto que tanto estaba ansioso por conocer?

-- "01 reportándose"—Escuché en mi oído.

-- "05 reportándose"...—Por unos cuantos segundos no dije nada... aún estaba pensando en la voz de la chica que se mezclaba con las imágenes del Gundam.

-- "¿Duo?"—Escuché la voz de Heero en mi oído.

-- 02 Reportándose.—Dije con sequedad.--10 minutos...—Murmuré para mí. Levanté mi vista y recorrí la habitación con detalle.

Tenía que encontrar algo... Lo que fuera. Mi razón me gritaba que debía salir de allí. Pero no quería salir con las manos vacías. Revisé unas gavetas con detenimiento. Parecía una oficina de archivos, lo que me dio algo de esperanza de encontrar aunque sea alguna mísera pista.

No pude evitar sonreír al ver un grupo de planos. ¿sería lo que estaba buscando? ... Rápidamente les di un vistazo.

--Diablos... esto es mejor que los planos de la base... – Dije guardándolos dentro de mi mochila. Por lo menos no me iría con las manos vacías...

Un sonido en la oficina del lado, provocó que me quedara quieto. Habían salido al pasillo.

--"Diablos"...—Gritó mi cerebro. Mi primer reflejo fue apegarme a la pared junto a una gaveta. Aunque abrieran la puerta no me verían a primera vista, y estratégicamente me daba algo de ventaja.

Los pasos sonaron firmes... dejé de respirar cuando se detuvieron fuera de la puerta... pasaron quizás 2 minutos o 2 segundos... quien sabe...

La adrenalina viajaba por mi cuerpo mientras mi corazón latía con intensidad llevando sangre a todo mi cuerpo con todas sus fuerzas.

"Que no entre... que no entre..."—Repetía mentalmente cuando en mi oído sonó el último reporte de mis compañeros.

--"O1 reportándose."—Escuché la voz fría y segura de Heero.

--"05 reportándose..."—Escuché a Wufei, parecía molesto por algo...quizás no había encontrado nada... No pude evitar sonreír, hasta que me di cuenta de que estaban esperando mi respuesta. Pero no podía responderles, me arriesgaba a ser descubierto... ¿Qué diablos podía hacer? Podía jurar que aún estaba esa persona en el pasillo... y sólo me quedaban 5 minutos para salir... ¿por dónde diablos lo haría? Me pregunté mientras miraba el lugar. Había una pequeña ventana... pero estaba en el piso 15 y entre mis implementos no había una cuerda...

-- "¿Maxwell?"...—Escuché esta vez la voz de Wufei. Podría jurar que sonó preocupado. Quizás era mi imaginación, era de lo más seguro. Me puse de pie lentamente y caminé sigilosamente hacia la ventana. Abajo, la calle se veía oscura.

Abrí con suavidad el cerrojo y me asomé... el viendo golpeó mi rostro con fuerza. Afuera, la pared no era pareja, había algunas variaciones que me permitirían desplazarme por fuera, aunque el viento podía estar en contra. Pero era Shinigami y estaba acostumbrado a estas cosas, o por lo menos eso me había convencido a creer los últimos años.

Cuando tenía mitad del cuerpo fuera, sentí que la manilla de la puerta estaba girando. Más que raudo salí al borde del edificio y cerré la ventana. Me apegué a la pared con todas mis fuerzas. La luz de la oficina se prendió. No pude evitar contener la respiración.

Una silueta se paseó por el lugar... reconocí una melena corta y una silueta delgada. No pude ver más... pasaron unos minutos antes de escuchar que cerraba la puerta con fuerza.

Respiré nuevamente.

--Shinigami reportándose.—Respondí al final, mientras mi trenza se bamboleaba a 15 pisos del suelo, mientras mis uñas se clavaban en el cemento a todo lo que podían. Era Shinigami, pero me había dejado las alas en casa...

--"Maxwell... ¿Dónde diablos estás?" – Preguntó Wufei con enojo.

-- Digamos que más que Shinigami parezco hombre araña...—Dije con algo de risa, aunque mi corazón ya no estaba tan tranquilo. Mi respiración se hacía dificultosa, más ahora que el viento estaba arreciando con más fuerza. Mala noche para volar... Miré hacia arriba... y luego, después de tragar saliva, hacia abajo... era lo mismo...15 pisos para los dos lados...

-- "Shinigami..." – Escuché la voz de Heero. No sé porque, pero miré hacia arriba, y no pude evitar sonreír al ver a mis dos compañeros mirándome desde allí con cara de "que diablos"

--Y me van a ayudar o se quedaran con cara de bobos...—Dije.—Además lo que llevó conmigo lo vale.—Dije mientras soltaba una de mis manos y la dejaba junto a mi cuerpo... ya estaba acalambrándome.

--"¿Duo?"

--No es nada... creo que los brazos se me duermen...—Dije apoyando mi frente en la pared, tratando de mantener mi peso apoyado hacia ella. Además las últimas heridas sufridas me estaban pasando la cuenta. Podía sentir una especie de quemazón en los brazos y espalda.

--"Voy por ti."—Escuché a Heero. No quise mirarlo. Si dijo que venía era porque lo iba a hacer. Aunque la duda de saber cual era su motivación, me arremetió con fuerza...

-- Sólo tírame una soga, Heero... Yo subiré... – Dije, al mismo tiempo que parte de mí se reía, porque sabía que en el estado en que estaba no podría hacerlo. Lo más era volver a entrar por la ventana y arriesgarme a un encuentro con la chica de mal genio... pero sólo sería yo contra el resto del mundo y tampoco había muchas posibilidades de sobrevivir...

--"Voy por ti."—Volvió a repetir con más fuerza. Quizás pensaba que iba a arruinar todo...

--Vienes por mí o... por los documentos que encontré...—Murmuré, mientras notaba que estaba más frío de lo que había creído, y que parte de mí tenía la loca idea de dejarme caer... era la embriaguez del vértigo que almas como la mía siempre sueñan en sus pesadillas cuando deciden dejarse caer en los abismos más extraños, profundos y sin sentido.

--"¿Dijiste algo Maxwell?"—Preguntó Wufei con fuerza.

-- Nada amigo Fei...—Dije mientras volvía a sostenerme con la mano, y soltaba la otra, para recuperar la movilidad.—Ya sé la respuesta a mi pregunta.—Dije con algo de tristeza, cuando sentí un par de brazos sosteniéndome desde atrás.

-- Ya estás muerto, Shinigami.—Preguntó una voz con algo de sarcasmo a mi oído.

--Shinigami no muere, Heero... Duo Maxwell, sí.—Respondí sin pensar mucho.

-- Ya puedes soltarte...—Me susurró... seguí sosteniéndome a la muralla. Por qué diablos no podía soltarme. Era Heero... él no me dejaría caer o si? – ¿Duo?—Preguntó apretando más sus brazos a mi alrededor.

-- Salgamos de aquí...—Dije soltándome de una mano... él se tiró hacia un lado y pude pasar mi brazo derecho por su hombro. Así que subí el edificio en la espalda del soldado perfecto... quien lo diría... no sé porque, pero estaba seguro de que era más probable llegar vivo colgando de él, que haberlo intentado por mis propios medios.

Pero aún la maldita cuestión de ser un mero soldado sustituible me bombardeaba la cabeza, no dejándome pensar con claridad.

Cuando llegamos a la azotea, me dejé caer sentado en el suelo. Wufei me miró con curiosidad, y antes que me diera cuenta estaba revisando mi estado.

-- Cómo lo imaginaba, tus heridas está abiertas...—Dijo con seriedad, pero en voz baja.

-- No es nada...—Dije en voz baja también, mientras sonreía.

-- Estás loco sabes... -- Dijo poniéndose de pie y mirando hacia otro lado.

-- Les traje un regalo.—Dije lanzando mi mochila hacia Heero que me miraba con cierto dejo extraño en sus ojos.

Continuará...

DarkCryonic...
Chile, 2006-03-22

3:02 AM