Amores extraños 1.

Una terrible noticia para Christ su padre murió en un accidente y llora día y noche por él. Su madre no puede trabajar debido a ello, alguien de esa fiesta le llegan nuevos sentimientos y atracciones y empezará a ver a la mamá de Christ muy atractiva ¿tomará el lugar del padre? ¿Cómo reaccionará su hijo? Averíguenlo. Quiero decir también que me gustó la historia "frutos del amor"

Un día muy triste para la familia y amigos, había ocurrido un accidente uno muy feo.

Las personas que fueron invitadas entraban a la gran mansión, algunas lloraban otras no decían nada. La casa estaba más llena de lo normal y todos vestían de negro, en la entrada se dejaban los regalos y más adelante estaban los bocadillos.

Una señora con un vestido negro muy fino lloraba sosteniendo un pañuelo.

¿Cómo fue que pasó? ¿Por qué estas cosas deben pasar?

Así es la vida, querida, todos nos iremos algún día.- su esposo le daba palmadas.

Otras personas hablaban de lo sucedido.

¿Cómo fue que pasó?

Iba en un viaje de negocios en helicóptero y chocó contra una montaña.

Oh, que terrible.

Si, pero no creo que halla sentido dolor.

Ahí estaba, la viuda, en el medio de la recepción saludando a los que llegaban. Ahora saludaba a Topacio que la abrazaba.

Fue un buen hombre, nunca lo olvidaremos.

Lo se, pero es difícil.

Lo será para todos Mitxi.

Siguientes que venían a saludarla eran Amy, Nudillos, Rouge, Colas, Crema y Queso.

Hablo por todos cuando digo mi más sentido pésame.- dijo Amy.- Y que el señor (apellido) lo extrañaremos por siempre, te lo juro.- Amy sollozaba y abrazaba a (nombre)

Gracias Amy… gracias.

Más arriba subiendo las enormes y blancas escaleras de mármol, había un pequeño al que faltaba consolar. Muy, muy al fondo en el pasillo que conducía a los cuartos y en una ventana observando como entraba la gente ahí estaba Christ. Con esos lindos ojos azules que derramaban lágrimas, estaba vestido con traje negro como uno más en la casa.

Ahí sin nadie que lo consuele sostenía un collar que le había regalado su padre entes de saber que moriría.

Había pasado media hora y estaban listos para comenzar, faltaba una persona por llegar pero no podía retrasar más el velorio.

Los invitados subieron a las limusinas que los llevarían al cementerio a despedirse del cuerpo de Harold.

Colas subió arriba y se encontró con Christ, no le causaba ningún honor tener que avisarle que tenía que subir al auto para ver a su padre por última vez.

- ¿Christ?

- ¿Qué?

- Debemos irnos.

-…………..

- Se que es difícil y si necesitas cualquier cosa puedes contar con nuestra ayuda.

- Gracias Colas.

Dejó ese espacio vacío en el que se lamentaba y siguió a su amigo el zorro.

Cuando todos habían salido hacia allá una persona más llegó a la casa, abrió la puerta y entró con su pequeño esmoquin negro, parecía un pingüino azul.

Hola… ¿hay alguien?

El erizo Sonic entró a la mansión y nunca la vio tan vacía.

¿Se habrán ido? ¡Holaa!

Subió las escaleras y buscó a su amigo y pensaba que decirle, nunca consoló a laguien por esa pena.

Creyendo que era Christ entró a una habitación que no conocía, escuchó a alguien llorar y entró sin preguntar y lo que encontró fue a la madre de Christ llorando sentada en su cama, se veía más vacía con ella sola allí.

¿Señora?

Oh, Sonic, no te vi entrar.- se secaba las lágrimas, sus mejillas estaban rojas por tanto lloriqueo.

No hay nadie abajo.- serró la puerta.

No, todos se fueron al cementerio donde enterrarán a Harold. No podría ir, no quiero recordar a mi esposo en un cajón.

Volvió a llorar, Sonic la compadecía mucho, veía como esas lágrimas hacía que sus ojos brillaran más.

- Es una… verdadera lástima.

- Nos costará a los dos olvidarnos de Harold.

- No, nada de olvidar el señor Sondaik, en que se halla ido no quiere decir que ya no exista.

- Es verdad, pero ¿cómo aré para seguir? ¿Cómo crecerá mi hijo sin él presente?- se tapaba la cara.

- Yo me ocuparé de cuidar a Christ, seré como su padre… no, lo siento mucho no quería decir eso.

- No Sonic, él necesita a alguien como figura paterna, alguien que le enseña a valorar las cosas. Creo que nunca lo valoré demasiado.

- No diga eso, usted cuidó bien a Christ aunque estaba ausente algunas veces.

Mitxi miraba a Sonic como si fuera su hijo y veía esa cara de ángel comprensivo.

Cuando me miro al espejo veo una persona que no sabe ser madre y aunque intenta nunca lo logra.

Seque esas lágrimas, yo no veo eso cuando la miro a la cara.

¿Y qué ves en mí?

Veo… una mujer que quiere mucho a su hijo, una mujer que tiene todo lo que cualquier mujer querría… esa luz en su cara que… la veo y me hace feliz.

A Mitxi le hacía sentirse muy bien escuchar eso, tanto que la hacía sonreír con sus ojos serrados.

El erizo se quedó un rato mirándola medio boquiabierto y sus ojos se iluminaban al verla.

Sentía que su corazón hacía un nuevo latido que nunca había sentido. Era como saborear algo dulce.

Qui… quizás nun… nunca se lo dije……………. Pero es muy hermosa.

¿Lo crees?

Si… y mucho…… tiene mucho por vivir y no debe desperdiciarlo llorando.

Los dos se miraron sin perderse de vista, el erizo se acercaba más a ella, besó sus labios y se tiró sobre ella y quedaron en la cama besándose.

El padre había dado sus palabras para poder enviar al señor Sondaik las campanas sonaban anunciando su entrada al cielo, se retiraban de a poco para ir a sus casas. Christ vio por última vez a su padre como lo entraban con su cajón lleno de flores.

Todos se retiraban y Christ resignado también. Justo cuando se dirigía con los demás apareció Sonic, el chico pensativo se preguntó por qué no había llegado a tiempo y esa que es el erizo más rápido del mundo.

¿Sonic? ¿Qué pasó?

Lo.. lo siento Christ, no encontraba la ropa y… Cielos lo lamento mucho Christ. Me siento muy mal. Amigo.- le puso una mano en su hombro.- Vendré a verte cuando quieras.

Gracias Sonic.- el niño observó la ropa de erizo mientras lo abrazaba.

Sonic, tienes la camisa al revés.

¡Oh, Oh.

El primer ¡Oh! Fue como si delatara frente a sus ojos lo que había pasado con Mitxi y el otro Oh, fue para disimular la tensión.

¿Te sientes bien?

Si, si.- decía nervioso acomodando su corbata.- Te acompaño a casa Christ.

Claro.

Alguien estaba presente en esa escena melancólica y era un equidna con el seño fruncido y un aire de, esto me parece raro.

Luego de unos minutos llegaron a la mansión Sondaik, Christ entraba y Sonic ni siquiera puso un pie.

¿Qué pasa Sonic?

No, no puedo quedarme quizás venga después. Yo que tú voy a ver a tu madre seguro que te necesita.

Bueno, adios.

Adios.

Con la velocidad del sonido preparó para irse pero hubo alguien que se interpuso en su camino.

Sonic.- dijo cruzado de brazos Nuckles.

¿Nuckles qué haces aquí?

Yo soy el que hace las preguntas aquí. Respóndeme esto ¿cómo el erizo más rápido del mundo puede recorrer cualquier lado con solo minutos y no puedes llegar al funeral de su amigo?

No, si, no, si yo llegué… a la casa.- juntó sus dos índices.

¿Y quién estaba en la casa?

Nadie… solo la madre de Christ.

¿Y por qué no vinieron ninguno de los dos?

Porque… porque…

Fin de la primera parte.