Capítulo 6

Todo por Ella

Varios meses después de ardua búsqueda, a Rin le ofrecieron un trabajo. Estaba en su entrevista con el mismísimo dueño y presidente de las empresas. Un viejo bonachón, que a pesar de los años conservaba el carisma y la alegría de un jovencito. El hombre, a mediado de los 60, con el pelo tan rubio que las canas se confundían en el mismo, un semblante determinado y ojos como soles.

-Su hoja de vida es sorprendente…

-Gracias, señor…

Rin estaba extremadamente nerviosa.

-Rin Megan Porter… Rin es un nombre japonés…

-Soy mitad japonesa.

-Habla japonés?

-Sí.

-Tiene problemas para vivir en Japón?

-Ah?

-Claro, uno de los requisitos para este trabajo es la transferencia a Japón.

-En realidad no… pero sí tendré un pequeño percance.

-Cuál?

-Cuál sería el horario de trabajo?

-Posiblemente hasta las 4 o 5 de la tarde…

-Entonces no tendré problemas… hay escuelas cerca de la empresa?

-Hay una un par de cuadras al este. Por qué?

-Tengo un hijo… de 3 años.

-Mis nietas están en ese colegio, es muy bueno, así que se lo recomiendo con confianza.

-Gracias.

-Cuándo puede irse a Japón?

-Tan pronto empaque…

-Bien, entonces, el puesto es suyo.

-Ah?

-Bienvenida a bordo.

-Gracias! Etto… puedo decir algo?

-Claro niña, habla…

Rin se aclaró la garganta.

-Me puede decir cómo me localizó?

-De qué habla?

-Sé muy bien quién es usted, Inutaisho-sama…

Inutaisho sonrió.

-Con las manos en la masa.

-Me cuidé mucho de que mi currículum no viniera a ésta empresa o ninguna de las suyas…

-Y yo me encargué de conseguir sus datos y localizarla.

-Porqué? De lo que sí estoy segura es que su hijo no tiene nada que ver con esto…

-Naturalmente. La verdad es que nada tiene que ver con nada. Yo simplemente mandé a buscar el mejor abogado litigante de empresas disponible. Y la lista fue bastante corta. Lo que me recuerda preguntarle. Por qué no está trabajando?

Rin torció los labios en media sonrisa.

-El bufete de abogados para los que trabajaba, decidieron que una madre soltera no les daría los mismos frutos que una mujer soltera sin compromisos. Y decidieron despedirme faltando dos días para mi licencia de maternidad. Así que al momento en que puse un pie fuera de la puerta, los demandé.

-Y cómo le fue?

-Realmente no necesito trabajar. Ya no. Pero me gustaría mucho mantenerme en movimiento. Después de todo sólo somos mi hijo y yo.

-Quién fue su abogado?

-Quien le habla…

Inutaisho rió a carcajadas.

-No veré a su hijo, verdad?

-No lo creo… tal vez en las reuniones… Qué me dice del padre de su hijo? No tendrá problemas con mudarse a Japón.

-No se preocupe. Sólo somos mi hijo y yo.

……………………………………

Exactamente un mes después, Rin y James, se despidieron de Chandler y Jakotzu antes de abordar un vuelo hacia Japón.

-Te amo, tío…

-Te amo, princesa, ahora vete o perderás tu vuelo…

Rin sonrió entre lágrimas y abrazó a Jakotzu.

-Gracias por todo…

-Oye, no es un hasta nunca. Desde que te asientes, iré a visitarte.

-Sí! Por favor!

Ya en el avión, Rin le mostraba a James todo lo que se veía por la ventana.

-Avió!

-Sí, mi amor, mira qué grande es el avión.

-Avió gdiz!

-Avión gris.

James rió.

-Disculpe…

Rin levantó la vista y se encontró con Inutaisho.

-Megan…

-Inutaisho-sama…

-Pero qué coincidencia!

Una azafata se acercó a ellos.

-Disculpe, ése es el asiento del señor…

-Ah? Parece que me equivoqué, gomen…

-No, para nada. No se preocupe, yo ocuparé este.

De igual manera les tocaría juntos. Inutaicho se sentó. Rin acomodó a James en el asiento del medio.

-Ahora el avión va a despegar. Quiero que te quedes sentado y tranquilo, sí?

Inutaisho sonrió y durante el despegue, James se asustó un poco.

-Mami!

-Tranquilo, mi amor. Estoy aquí…

James se aferró a su mano. Una vez en el aire, Rin lo volvió a sentar en sus piernas.

-James, él es el señor Inutaisho. Es mi jefe en mi trabajo nuevo…

-Belo!

Rin rió calladamente. Inutaisho ladeó la cabeza.

-Qué dijo?

-Abuelo. Cree que todos los que tienen la cabeza blanca son abuelos.

Inutaisho sonrió.

-Mucho gusto, señor James…

-Porter…

-Porter… James Porter…

-Iutacho!

Inutaisho rió. El pequeño ya se sabía su nombre.

-Es muy listo.

-Sí.

-Ciedo…

-El cielo, mi amor…

-Buelita eztá aquí?

Rin sonrió mientras removía el pelo negro y lacio de la frente de su hijo.

-No, mi amor… mucho más arriba. Donde no podemos llegar.

-Mama…

-Dime…

-Engo zueño…

James se acomodó en su pecho y se quedó dormido casi de inmediato.

-Lo levanté muy temprano.

……………………………

Sesshoumaru llegó a las 7 de la noche a su apartamento. La pequeña Megan, que ya contaba con dos años corrió a los brazos de su papá. Pero se cayó en el intento. Sesshoumaru dejó todo lo que tenía en las manos y levantó a su pequeña del suelo.

-Ya, no llores, mi amor…

-Pa!

Sesshoumaru la besó en la mejilla y limpió sus lágrimas con el pañuelo que llevaba en sus bolsillos.

-Dónde te diste?

-Ti!

La niña le señalaba una rodilla con una marca roja.

-Ele!

Sesshoumaru tomó su piernita y la besó. Luego la besó en la mejilla nuevamente. Una vez que se calmó, y determinada a darle su bienvenida, la niña lo abrazó.

-Ohayo! Pa-pa!

Sesshoumaru rió a carcajadas y la besó en la cabeza.

-Ya es de noche, princesa, se dice konbanwa… pero como eres chiquitita y mi princesa, ohayo se vale.

Sesshoumaru la abrazó.

-Vamos a bañarte, después me baño yo y vamos a cenar…

Después de bañarla y bañarse él, se metió en la cocina para preparar la cena. Su mujer representaba un cero a la izquierda y enormes gastos en tiendas y spas, así que más que un padre, se le podía considerar un padre soltero. Luego de que cenaran, se sentó con ella frente a la televisión y vieron dibujos animados.

-Pa…

La pequeña se subió sobre sus piernas y se acomodó en su pecho.

-Tienes sueño?

Megan asintió. Sesshoumaru la llevó a su habitación y le puso la pijama.

-Dulces sueños, princesa…

-O te valla!

Sesshoumaru se sentó a su lado.

-Quieres un cuento?

-No… omí ontio…

-Dormir conmigo?

Sesshoumaru la complacía en todo. Trataba compensar el error que había cometido al casarse con Kagura. Cargó a la pequeña y la llevó a su habitación. Una vez acomodados, Megan se pegó a su pecho. Sesshoumaru acarició su pelo.

-Te amo, princesa…

Sesshoumaru la besó en la cabeza y la vio quedarse dormida.

………………………………

Habían pasado varios días, cuando Sesshoumaru llegó a la casa, de noche, escuchó a Megan llorar y Kagura gritarle.

-Que te calles!

Sesshoumaru detuvo su mano en el aire, iba directo a la niña.

-Estás loca!

-Uf! Será mejor que te la lleves, me tiene harta!

-Te tiene harta? Tú hija te tiene harta? Vamos a resolver eso ahora mismo…

Sesshoumaru entró en la habitación de Kagura y sacó toda la ropa que le cupo entre los brazos, la tiró en la sala.

-Te largas de aquí ahora mismo!

-Qué!

-Mañana mismo te mando los papeles del divorcio!

-Tú no te puedes divorciar de mí!

-Mírame hacerlo!

Sesshoumaru cargó a la niña y se encerró en su habitación.

-Tranquila, princesa… todo está bien…

Sesshoumaru tardó más de una hora para calmarla. Finalmente, Megan se quedó dormida entre sus brazos cansada de tanto llorar. Sesshoumaru no dudaba que la había golpeado antes de que él llegara. La besó en la frente con los ojos inundados por las cristalinas lágrimas.

-Perdóname, princesa…

………………………………

Rin ya estaba completamente acomodada con James en su nuevo apartamento. Después de la cena, Rin revisaba unos papeles sentada frente a la mesita de la sala, James se lanzó sobre ella a sus espaldas.

-Mama!

-Ay! James!

James la besó en la mejilla mientras ambos reían. Se acomodó entre las piernas entrecruzadas de su madre, quien lo abrazó con ternura.

-Te amo, mi amor.

-Te amo, mama!

Rin lo besó en la cabeza.

-Vamos a dormir. Mañana es tu primer día de clases.

Rin lo cargó y luego de hacerlo reír a base de cosquillas, lo besó en la frente.

-Buenas noches, mi amor.

-Mama, quiero dormir contigo…

Rin sonrió.

-Está bien, pero sólo esta noche.

…………………………………

En la mañana, Rin llevó a James al colegio y le explicó a la maestra que James entendía el japonés, pero no lo hablaba muy bien.

-No se preocupe, señora, yo hablo francés.

-Perfecto.

-Mama, ya te vaz?

-Sí, me tengo que ir a trabajar.

Rin se bajó a su altura y lo besó en la frente.

-Quiero que te portes bien y haces lo que la profesora te diga. Sí?

-Zí!

Rin sonrió y luego de un gran abrazo, James se fue a sentar dónde la profesora le indicó. Desde su silla se despidió de su mamá sacudiendo su mano.

-Así sin más?

-James es muy extrovertido.

Rin se marchó segura de que lo dejaba en buenas manos. Aunque fuera sólo párvulos, tenían normas y era lo que a Rin le gustaba.

……………………………

Sesshoumaru estaba petrificado aún con Megan de la mano. Pensó que debía estar alucinando, así como se pasó toda la noche soñando con Rin. Luego de despedirse de su pequeña se dirigió a su oficina. Una vez sentado tras su escritorio, llamó a Inuyasha.

-Estoy llevando a Kira al colegio…

-Entonces paso por tu oficina en un par de horas.

-Está bien…

Cerró la llamada. El ver a Kagura violenta con Megan era la gota que derramaba el vaso y no le importaba quedarse en la calle con tal de no tener que soportarla un segundo más. Hacía meses que dormían separados y hasta semanas desde que hablaron civilizadamente.

……………………………

Rin estaba en su nueva oficina. Mientras acomodaba lo esencial, Inutaisho entró en la oficina tomado de la mano de Izayoi.

-Cariño, ella es mi nueva abogada, Megan Porter…

-Ah! Señor Kazami! Ohayoogozaimasu!

-Vamos, niña, es muy temprano para tantas formalidades.

-Mucho gusto, señora Kazami…

En ese momento, Inuyasha entró en la oficina.

-Mamá, qué haces… Rin?

-Hola, Inuyasha…

-Hijo, Rin es nuestra nueva abogada…

Inuyasha sonrió.

-Me alegra tenerte aquí…

……………………………

Sesshoumaru entró en la oficina de Inuyasha, al instante en que lo vio, se dio cuenta de que no había dormido casi nada.

-Qué te pasa? Pareces de ultratumba…

-Quiero divorciarme de Kagura, no importa lo que cueste, no importa lo que pierda, sólo quiero la custodia exclusiva de Megan.

-Hasta que s te iluminó el cerebro. Pero yo no soy abogado de divorcios.

-Rayos, Inuyasha! Entonces búscame uno!

-Respira, de acuerdo. Siéntate, déjame ver si la nueva abogada puede.

Sesshoumaru se tiró sobre el sillón mientras Inuyasha trataba de ocultar su alegría. Llamó a la oficina de su padre donde sabía estaba reunido con Rin.

-Papá, ella está ahí? Pregúntale si puede manejar divorcios? Sí? Perfecto…

Inuyasha cerró la llamada.

-Vuelve mañana, te diré lo que se hará.

-No puedo! Tiene que ser hoy!

-Tengo que reunirme con ella! Hay que revisar tu contrato de fusión y hay que revisar tu prenupcial!

-Pues que venga!

-No puede.

-Maldita sea! Insecto! La quiero lejos de Megan hoy mismo!

Rin se petrificó con la puerta aún agarrada por el pomo. Sesshoumaru la vio y no supo qué le pasó. Rin recobró la compostura.

-(Kami! Se ve tan enfermo! Qué le pasara? A quién quiere lejos de mí?)

-Inuyasha, qué necesitabas? Hola, Sesshoumaru…

-Rin… q-qué haces aquí?

-Trabajo aquí… desde hacen dos semanas…

Sesshoumaru fulminó a Inuyasha con la mirada. Inuyasha se levantó de su sillón y se dirigió a la puerta.

-Los dejaré solos unos momentos.

Inuyasha salió cerrando la puerta tras su paso. Rin no sabía qué hacer. Sesshoumaru sentía que parte de lo que le pasaba era culpa de Rin por haberse casado con otro hombre.

-Qué haces aquí? No que no puedes salir de Marseille? Que no podías venir conmigo? Sólo dime una cosa, te gustó jugar conmigo como lo hiciste? Aquí estoy, vamos a jugar otra vez!

-Mi madre murió hace poco más de un año… necesitaba el trabajo y me eligieron desde Francia…

Sesshoumaru se sentía como la más rastrera de las alimañas. Y para sentirse peor, Rin estaba llorando aunque trataba de controlarse.

-Tú no tienes derecho a reclamarme… eres un canalla!

Rin salió de la oficina y en el camino chocó de frente con Inutaisho.

-Megan…

-No creo que esto funcione… no si tengo que verlo…

-De qué hablas?

-De su hijo…

Inutaisho la llevó a su oficina y trató de calmarla.

-Qué es lo que pasa con Inuyasha?

-Inuyasha no, Sesshoumaru…

Rin se repuso y volvió a lograr compostura. En ese momento sonó el celular de Rin. Al ver que era del colegio, no tardó en contestar.

-Me tengo que ir…

-Qué pasó?

-James se cayó de uno de los juegos…

Rin salió de la oficina como un rayo, fue a la suya por sus cosas y al salir se encontró de frente con Sesshoumaru.

-A dónde crees que vas? Tú y yo no hemos terminado.

-Tengo cosas que atender mucho más importantes que tú…

Rin lo esquivó y llegó al ascensor. Sesshoumaru nunca creyó que Rin pudiera ser tan fría como él pretendía serlo.

Al llegar al colegio, Rin fue hasta la enfermería donde atendían a James.

-Mama!

-James, mon amour, ce qui se sont produits? (James, mi amor, qué pasó?)

-Je zuiz tombé de l'échelle géante. (Me caí de la ezcadela gigante)

Rin lo revisó y sólo tenía el golpe que ya estaba curado, en su frente.

-Me alegro tanto que estés bien, mi amor…

-Mama, yo no quiedo idme a caza…

-Te quieres quedar aquí?

-Zí…

-Por qué?

-Podque puedo juga' con mis amiguitos…

Rin sonrió y lo besó en la frente.

-Está bien, mi amor… Te quiero…

Rin habló con la profesora y estuvieron de acuerdo en que si algo surgía la llamarían. Rin volvió a su oficina más calmada. Inutaisho entró en la misma.

-Estás bien?

-Sí… disculpe por los percances de hoy…

-No te preocupes. Cómo está James?

-Está bien. Tiene un raspón en la frente, pero está bien. Hasta me pidió que lo dejara en el colegio, porque así puede jugar con sus amiguitos.

Inutaisho sonrió.

-Tienes hambre?

-Ya casi salgo a comer…

-Ven, te invito…

-Pero…

-No rechazarás una invitación de este viejo?

Rin sonrió.

-Ya sé de dónde viene ese encanto Kazami.

Rin aceptó.

………………………………

Megan se acercó a Kagura.

-Mama, ía…

-Ugh! Vete de ahí, niña molesta!

-Mama…

-Qué no entiendes? Que te vallas! Eres una niña estúpida, vete de ahí!

Kagura le gritaba como si se tratara de un perro y no de su hija. En ese momento, Sesshoumaru llegó y cargó a la niña, la llevó a su habitación y luego de cerrar la puerta enfrentó a Kagura.

-Lárgate de mi casa!

-Es mí casa también!

-La compré antes del arreglo! Lárgate! Estoy harto de ti, de cómo la tratas, de cómo respiras! Lárgate!

Kagura le dio una cachetada.

-Tú no tienes ningún derecho a reclamarme nada.

-Al menos no trato a mi hija como basura.

-Y qué te hace pensar que es tuya?

Aquello hizo que la sangre de Sesshoumaru hirviera. Sabía bien que ella haría lo que fuera con tal de herirlo.

-Eres un marica impotente!

-Cállate!

-Cómo sabes si es…

Sesshoumaru levantó la mano, pero de inmediato la bajó. Se encerró en su habitación con Megan. Quien lloraba sentada en la cama. Sesshoumaru la abrazó.

-Papa!

-Tranquila, princesa… todo va a estar bien… me voy a encargar de que nadie te haga daño… Te lo prometo…

Sesshoumaru la besó en la frente y logró calmarla.

-Papa, ía…

La pequeña le enseñó una hoja llena de rayones y garabatos. Sesshoumaru sonrió y la besó en la mejilla.

-Eres toda una artista, ah?

La guardó entre sus papeles de oficina.

-Tal vez debemos mudarnos… y así podrías ser feliz… los dos… tu papá es un tonto… lo sabías? Tu papá es un estúpido…

………………………………

Gracias a Ceci, Eli, Lou, Mary, Esme, Kagi 35, Hanadark, HawkAngel XD, Saya, Karina, FENIXGIRL, Elen-Ses, Clau…

Jeje, ahora es que la cosa se pone buena!

Besitos

Mizuho