Capitulo 8: Una propuesta

Llegamos al parque y lo invite a sentarse en un banco.

- Erik, esta mañana cuando fui a trabajar me entere de que…me han dado permiso para irme en Navidad a casa.

-Enhorabuena – me dijo, pero sus ojos reflejaban, tristeza

-¿Tu que aras en navidad?

No me contesto, así que supuse que se quedaría solo en la mansión del Lago, así que le propuse algo.

-¿Por qué no te vienes conmigo, a pasarla conmigo y con mi familia

- Althea, yo no puedo, todos aran preguntas… Seria muy agobiante para los 2.

- Nadie te preguntara nada, bueno alo mejor los mas pequeños, pero les cuentas un cuento y listo.

- ¿Y el viaje, ¿Y nuestros ensayos?...

- Erik, relájate solo me tienes que decir si vienes o no, y no pienso aceptar un no por respuesta. Genial, entonces les escribiré a mi madre y a mi abuela, para decirles que te vienes conmigo.

Se hacia tarde así que volvimos caminando a la Opera, pasamos por delante de mi casa, seguimos caminado, ya estábamos cerca de la Rue Scribe, cuando de repente, vi a Meg, me reconoció.

-Hola, ¿Qué haces tu por aquí a estas horas, ¿Y este chico quien es?

- Hola Meg, nada por aquí dando un paseo con…

-Ay, se me hace tardísimo, ya sabes noche de estreno.

Llegamos a la reja y entramos por ella, una vez en la mansión Erik me dijo:

-Althea es muy peligroso que sigamos saliendo de la opera. Me podría conocer alguien.

-Erik, no digas tonterías, no puede pasar nada. Te lo prometo.

Así transcurrió todo el mes de Noviembre, entre ensayos, paseos por Paris y yo trabajando. Durante ese periodo me pidió una par de veces más Morfina, pero un día le dije:

-Erik, ese vicio no me gusta, nada deberías dejarlo.

Y así transcurrió el resto del mes de diciembre, ensayos y más ensayos, salimos poco de la mansión, ya que me decía que teníamos que ensayar ya que en navidades no lo íbamos a poder hacer. Pero yo tenía que hacer las compras de navidad, para todos los pequeños. El día 19 fuere nuestro último ensayo, ya que después tenía que hacer las maletas. Íbamos muy avanzados, ya conseguía hacer yo sola el aria de Margarita. Antes de irme le informe.

-Erik, vengo a buscarte mañana a las 8, ¿si?

- Esta bien – dijo, algo nervioso.

Durante el día siguiente estuve preparando la maleta, la única que llevaba casi no cerraba, eran los regalos de los más peques, pues no necesitaba llevar ropa, porque tenía en casa. Como había prometido al día siguiente a las 8 fui a buscar a Erik, pero debí de llegar antes de tiempo, porque estaba sin camisa, corriendo de un lado para otro, tan apurado que no se dio cuenta de mi presencia, asta que le dije:

-Buenos días Erik –

Se quedo clavado en el sitio mirando para mí, como si no se creyese que estaba allí, pues alo mejor esperaba que no fuese a buscarlo, pero enseguida reacciono, se puso la camisa, fue a la habitación y agarro una chaqueta, se la puso, cerró la maleta y me dijo:

-Ya estoy, ¿Nos vamos?

-No te olvidas de nada… - Se quedó pensativo, pero no me contesto – El gorro y la bufanda Erik

Una vez hubo acabado, salimos de la mansión para decirle adiós por una buena temporada, ya que no volveríamos hasta el 18 de Enero. Cogimos un coche de caballos, fueron 4 días de viaje en un carruaje, pero no hubo mayor problema. Vimos varios amaneceres, desde la ventanita, ocasionalmente, parábamos en alguna posada para asearnos, darle de comer y agua a los caballos...

Nota de la Autora: Espero que os guste, y quiero ver esos rewires. Que a lo mejor mañana actualizo de nuevo. Todo depende de vosotras.