Holaaaaaaa! Bueno, pedíais un capitulo romántico... bueno, creo que este es bastante... Asi que sin mas rodeos... aquí os dejo el mejor capitulo. (Para mí...)

Capitulo 12: Un paseo a caballo y un secreto revelado

Al día siguiente por la tarde le pedí a mi abuela el coche de caballos, para ir a ver a Tormenta y Duncan, mis caballos.

Tormenta es de color castaño con las crines y la cola en color negro.

Duncan es marrón con las crines más claritas…

Hacia buena tarde así que le propuse a Erik ir a dar un paseo por la playa, un poco mas tarde, el acepto encantado, pero antes yo tenia que montar un poco a Althea ya que como yo no estaba nadie la montaba, le puse la silla, el freno y procedí a subirme.

Al principio mientras que no la hacia trabajar muy bien, pero en cuanto la mande galopar, se dio un brinco que me tiro al suelo, Erik vino corriendo a mi lado, me pregunto si estaba bien, yo le dije que si, fui a la bodega donde guardaba las sillas, cogí una fusta, me volví a subir a ella. Cuando quiso hacer lo mismo, llevo un pequeño golpe entre oreja y oreja, que no lo volvió a hacer.

Después la deje descansar un rato, cuando se hizo de noche prepare a Duncan se lo di y fuimos a dar un paseo por la playa.

Era de noche, la playa estaba desierta atamos los caballos a un árbol y nos tumbamos en la arena a mirar las estrellas, nuestras miradas se cruzaron, alargue la mano y le rocé la mascara, quería saber lo que ocultaba tras ella, sentí una mezcla de expectación, emoción, pero a la vez estaba muy nerviosa.

"Al notar que me rozaba la mascara, sentí, terror a que me la quitara pues sabía que todo el que me veía salía huyendo y nunca volvería a saber nada de ella, no quería que hiciese eso…"

Sentí como el comenzaba a temblar.

"Mi corazón se aceleraba por momentos, me paso por la mente una idea que salio de lo mas profundo de mi alma, cogerle la mano y revirársela para que no me la quitara, pero solo duro unos segundos, se esfumo como un relámpago"

Con temor empecé a deslizar la máscara, me quede un instante paralizada, mis ojos solamente le observaban, mi cuerpo se olvidaba del exterior, sólo podía sentir mis pensamientos atropellándose, respire profundamente para tratar de ordenar los pensamientos y temores que me acechaban, al sentir como deseaba aferrarme a sus labios, sumergirme en su olor, simplemente dejarme guiar por la impaciencia, por los latidos frenéticos de su corazón que me llamaban al refugio de sus brazos, al refugio de su calor, al refugio de su piel... ¡a mi refugio! Sin importarme nada más.

-Por favor no lo hagas- me pidió

Su respuesta me choco e irrumpió en todo mí ser, me quede unos instantes sin controlar la situación, enseguida volví a ser dueña de mis actos; Tan horrible era lo que escondía la mascara, por que dudar si en mi interior sabía que lo amaba y que hubiese lo que hubiese detrás, mis sentimientos no iban a cambiar; desde hacia unos meses sentía algo especial por el, hasta el momento no sabía si era, compasión, temor, admiración… pero ahora lo tenia claro le amaba.

De repente se alejo del alcance de mi mano, parecía nervioso, se levanto, me miro triste, se acerco al árbol donde estaban atados los caballos.

-Te quiero – le dije

Se dio la vuelta, me miro a los ojos y me pregunto con inseguridad.

-¿Estas segura?

-Si – afirme tajantemente

Muy lentamente echo la mano a la mascara, no perdía el contacto visual en ningún momento, se la fue retirando muy lentamente, y poco a poco se acerco a mi, estábamos a menos de un metro de distancia, le examine el rostro muy detenidamente, por fin sabia lo que ocultaba la mascara

"Estuvo un rato mirándome, sabía que después de esa noche nunca la volvería a ver"

Extendí la mano y le acaricie la mejilla que habitualmente estaba cubierta… me acerque un poco mas a el y le bese suavemente donde había tenido la mano, poco a poco fui bajando hasta encontrarme con sus labios y besarle, fue correspondido al principio con timidez, pero a cada segundo se hacía mas pasional.

Le agarre de la mano y lo lleve a donde habíamos estado tumbados mirando las estrellas solo que esta vez le hicimos poco caso a las estrellas, nos miramos el uno al otro, sus ojos brillaban de felicidad, me acerque a el de nuevo y le bese, el nivel del mar había subido y las olas nos mojaban cada vez que rompían en la playa.

Después de un rato, regresamos, a guardar a Tormenta y Duncan, Erik acabo rapidísimo de desensillar, yo como venia siendo costumbre tarde mas, ya que Tormenta, no paraba quieta, entro en la cuadra y la yegua se quedo quieta, acabe de desensillar, fui a guardarlo todo, estaba poniendo el freno de Tormenta en su sitio cuando note que alguien me cogía por la cintura y me estrechaba contra el para luego besarme, con un dedo le perfile la mejilla para llegar a la comisura de sus labios, fue allí donde deposite un beso.

-Althea, esta ha sido la mejor noche de mi vida.

-Y no será la ultima – dije con una sonrisa picara

Cogimos el coche de caballos y volvimos a casa de mi abuela, la suerte fue, que estaban todos en la cama, con el mayor sigilo que pudimos, preparamos los caballos, entramos en mi habitación por la ventana, nos cambiamos y nos metimos en nuestras camas…

Por la mañana, me desperté con el aroma del café recién hecho, encima de la mesita de noche había una bandeja con una taza de café y unas galletas, esto venia acompañado de una rosa roja con un lazo negro atado en el tallo.

Después de aquella noche, los días que nos separaban de nuestra vuelta a Paris, se pasaron volando.

Bueno deciros... que la cosa se va a complicar un poquillo en los próximos capítulos, van a aparecer personajes nuevos... solo me quedan 3 capítulos por publicar... Espero que ahora os pique más la curiosidad y sigáis leyendo.

Desde aquí aprovecho para deciros que el SABADO 20 de MAYO, por la noche, comenzare a publicar uno nuevo. Titulado: ¿Quien se oculta entre sombras?