Capitulo 4:
Si bien ya no había pasado mucho tiempo de descubrir la gran verdad, cuando ya se encontraban en una cabaña muy distinta a cualquier otra, sin duda esta era mucho más humilde y parecía abandonada... Solo contaba con un pequeño cuarto, en este había una cama de pobres sábanas y al lado de ésta algo que se asimilaba a un buró... Que por cierto tenía madera sucia, y... quemada.
-"Déjenlos en la cama"- Se apresuró a decir Helena mientras atrás de ella aparecían Larah y Murbella con los 2 hombres en brazos.-"¿Dónde se habrá metido Siria?"-
-"Helena..."- Dijo Larah mientras dejaba a Shura lentamente sobre la pobre cama, seguida de Murbella.-"Ya sabes que no siempre la encontrarás aquí..."-
-"Si pero... es que la necesitamos ahora"-
-"Aquí estoy niña..."- La voz de una mujer se hizo presente en ese pequeño momento de silencio perturbador del pequeño cuarto... al voltearse todos los presentes a la puerta ven a una mujer, extremadamente pálida, de cabellos ondulados y largos color castaño amarrados en una coleta de caballo, ojos color miel, con ese aire de frialdad pura que poseía cualquier mujer de ese pueblito... Tenía una espada larga colgando de la espalda por una correa de cuero, que contrastaba perfectamente con la ropa negra ajustada que llevaba, al igual que su capa...Sus labios levemente se movieron dándole de nuevo la palabra.-"¿Qué es lo que deseas ahora?"-
-"Es que... te necesitamos ahora en una pequeña misión"- Helena sonrió nerviosamente ante la mirada de la pálida mujer.
-"¿Qué ocurrió ahora?"-
-"Un grave accidente..."- Era Nisa la que entraba ahora seguida de los 2 vírgenes.-"Confundimos a aliados con enemigos..."-
-"¿Confundi...MOS?"- Era Eliza, quien se había quedado mirando todo lo que pasaba sentada en el piso, la que ahora hablaba casi en un susurro, apoyada en la pared.
-"Hermana..."- La voz de Helena sonaba apagada, mientas sus exóticas orbes se posaban en las rojas iris de su hermana mayor.-"Lo que hace la gente de nuestro pueblo también nos concierne a nosotras..."-
-"Bien, bien... calma... La cosa es que hay que ayudar a estos... tipos, y pedir una disculpa con su pueblo lo antes posible..."- Murbella se acerca a Nisa y a los vírgenes, pasando al lado de ellos, para salir por la puerta principal de la humilde cabaña.-"Voy por unas hierbas para sus heridas..."- Iba a salir ya corriendo, pero Siria la detuvo con la voz.
-"¿Por qué nosotras debemos hacer eso?"-
-"« Porque son unas brujas raras y que me dan mucho miedo... y nos insultaron... ¿Será por eso? »"- Pensó Shaka mientras miraba a Siria a los ojos, esta como adivinando su pensamiento lo miró amenazante, el rubio ni se inmutó y la miró de la misma forma.
-"Porque... este pueblo y el otro son prácticamente aliados..."- Respondió Larah evitando que Siria se lanzara a cortarle el cuello al rubio, haciendo que la mirara arqueando una ceja.
-"¿Cómo es eso?"-
-"Siria... Los de ese pueblo pelean por la misma causa..."- Era Nisa quién ahora aclaraba las cosas.
-"¡¿Radamanthys!"- La mandíbula de la pálida mujer estaba a punto de irse al suelo.
-"Por eso decimos que son prácticamente nuestros aliados..."- Murbella (recordemos que no puedo irse) torció sus labios en lo que podría llamarse una 'sonrisa'.
-"Lamentablemente no..."- Helena sonrió melancólicamente mientras los demás la miraban. Shaka, Nisa, Mu y Eliza ya sabían a qué se refería.
-"¿Te refieres a...?"- Larah se acercó a la 'pequeña' Helena, mirándola a los ojos.
-"Exactamente a eso..."-
-"¿Alguien me podría decir que carajos pasa aquí?"- Siria, quien como siempre no estaba enterada de las cosas alzó un poco la voz haciéndose notar.
-"La desaparición de mi hermana..."- Fue lo único que se limitó a decir Eliza en ese momento, cerrando sus ojos de nuevo, para luego dirigirse a la cama, donde yacían los hombres medio inconscientes.
-"O sea que tu estabas en el pueblo de... ellos..."-
-"Helena estaba en nuestro pueblo luego de haber salvado a Kannon, el líder de este mismo"- El pelilila se acercó a Siria y le sonrió.-"Su estadía ahí iba a la perfección... hasta que Kannon descubrió la verdad, como el resto del pueblo... De nuestro pueblo"-
-"Es...Espera un momento..."- Siria se agarró las sienes masajeándolas con sus dedos.-"¿Me lo pueden explicar más detalladamente por favor?"-
-"Lo que pasa es que esta niña salvó al supuesto líder de Zaelya..."-
-"¿Zaelya?"-
-"El pueblo griego que queda al atravesar este mismo bosque..."-
-"¡ESE!"- Siria se dirigió amenazante a Helena.-"¿¡CÓMO ES POSIBLE QUE SIEMPRE TE METAS EN PROBLEMAS?"- La mirada amenazante de Siria se posó en las extrañas orbes de la más joven, ésta comenzó a temblar como no lo hacía hace mucho.-"¡NO NECESITO QUE ME CUENTEN EL RESTO! ¡SUPONGO QUE TE CONDENARON A MUERTE DE NUEVO, ¿¡NO? ¡Ah! ¿¡QUÉ VAMOS A HACER CONTIGO NIÑITA?"- Siria miró reprochándole a Helena.
Eliza atrajo hacía si a su hermana y la puso atrás de ella, desafiando con esa típica mirada suya inyectada de sangre a Siria.
-"No es su culpa que salve a cualquier bicho que se encuentre en el camino"- Era ahora Nisa quien defendía a Helena.
-"¡Debería tener más cuidado!"- Siria posó su mano izquierda contra la pared más cercana.
-"Es suficiente Siria"- Larah tomó el puño de Siria delicadamente entre sus manos y le hizo relajarse.-"Nisa tiene razón, Helena es así y no hay caso... pero por ahora solo debemos curar a estos tipos y pedir una disculpa lo antes posible..."-
-"Pero... Está bien, no importa"-
-"¡Murbella, por favor, ve por las hierbas"- Nisa vio a Murbella, terminando de pedir el favor con sus ojos.
-"En seguida..."- En el momento que dijo esto, la morena salió corriendo del humilde lugar... Todos quedaron en silencio, Siria miraba con reproche a Helena, esta le sonreía tiernamente a Mu quien tomaba su mano para 'reconfortarla'.
-"Pues... yo no te ayudaré en esto... Y que te quede bien claro..."-
-"Pero... ¡Siria!"-
-"En primer lugar es tu problema lo que pasa con ese pueblo, no mío... Entiéndeme, no quiero seguir esta discusión, y punto."-
-"E-es... está bien..."-
Siria se alejó de la cabaña y dio un portazo, trizando pedacitos de la madera de la puerta. Todos quedan viendo a su dirección, Helena sonrió tristemente mientras se acercaba a los hombres recostados en la camita.
-"¿Por qué siempre me meteré en problemas?"- Helena cerró sus ojos y sonrió infantilmente. Mu se acercó a ella y le tomó una mano.
-"No te preocupes"-
-"Cierto bruja, de errores se aprende"- Era ahora Shaka quien le tomó la otra mano a Helena.
-"Gracias"-
-"Ahora lo importante es..."- Larah no terminó de hablar, ya que la puerta se abrió dando paso a una agitada Murbella.
-"Es tiempo de curarle las heridas a estos tipos, ¡ya tengo las hierbas!"-
-"Pásamelas"- Dijo Eliza al momento que se acercaba a Murbella y le quitaba bruscamente las hierbas.
-"Oye, solo tenías que decir por favor"- Criticó Murbella medio ofendida.
-"..."- Eliza la miró y siguió con el trabajo de curar a los hombres de Zaelya.
-"Bueno, está bien, perdón"-
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-"Maldición"- No muy lejos de allí, estaba Siria, apoyando su espalda contra un viejo árbol. Se maldecía una y mil veces, con esa niña siempre era lo mismo, y lo peor es que todo el mundo debía terminar ayudándola...Siempre que se metía en problemas, ahí iban sus súper aldeanas a salvarla, era increíble... Aunque debía aceptar que gastaba su tiempo en algo.-"No... Debería aprender a cuidarse por si misma..."-
-"« Pero, ¿quién te dijo que no sabe, Es solo que si le dieran una oportunidad...»"-
¡Y DE NUEVO, ESA ESTÚPIDA VOCECITA DE LA CONCIENCIA!
-"Mmm... tiene razón, de todos modos si sabe defenderse... ¡Pero busca muchos problemas!"-
-"« Pero, ¡espera un momento! Ella no los busca, es solo su forma de ser...»"-
-"¡No debería intrometerse en lo que no debe!"-
-"« ¿Desde cuando juzgas a la gente así? ¿ella te juzgó?...»"-
-"¡No puedo creer que hable con una vocecita rara en mi cabeza!"-
Era cierto, siempre que ella estaba en un problema moral, aparecía esa desconocida voz hablándole en su cabeza. ¡Era insoportable! Y lo peor era que... ¡tenía razón!. Pero de todos modos, y si hacía eso, la gente del pueblito se le quedaba mirando feo. No era muy común, que además de ser una guerrera, hablaras contigo misma... Bueno, con una vocecita de tu cabecita.
-"Ay, está bien, está bien, la ayudaré... pero no seguiré todas sus mañitas"-Tomó la larga espada que siempre llevaba a su espalda, enterrándola en el árbol, y sacándola en un instante, dejando otra marca en el pobre verdoso envejecido.-"Pero antes me debo preparar..."- Fue lo último que se escuchó, antes de que se perdiera en el bosque.
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-"¿Ya está?"- Preguntó Helena, viendo como su querida hermana guardaba el resto de las hierbas en una especie de mochilita de cuero.
-"Si..."- Respondió secamente Eliza, mientras se sentaba al lado de una pobre ventana, la que al parecer no había sido limpiada en varios años, por el polvo que llevaba encima.
-"Ahora hay que esperar a que despierten, ¿no?"- Respondió Larah, la mujer de cabellos negros se acercó a Nisa, pasando por su lado, acercándose a la puerta. Nisa le quedo mirando.
-"Yo creo que si... ¿Vas a buscar a Siria?"- Sus ojos verdes camaleónicos se giraron viendo directamente a los dorados de la pelinegra.
-"Tengo que prepararme...A que ya recapacitó, lo apuesto, así que me voy a entrenar con ella, de seguro anda en el bosque, como siempre"-
-"Jeje... Si, con Siria es siempre igual"- Finalizó Murbella con una sonrisa medio torcida en su rostro.
-"Bueno chicas, Larah tiene razón, hay que prepararse para lo que viene, cualquier cosa podría pasar."- Helena mostró una sonrisa inocente, mientras que con una mano acariciaba inconscientemente el rostro de uno de los hombres postrados en la cama. Éste despertó al sentir la cálida mano en su mejilla...Mu, al darse cuenta de ello, corrió a abrazarle.
-"¡¡Shura! ¡¡Dios mío, ¡¡Estás bien!"- Todos giraron a verlos, los ojos del pobre virgen soltaban desconsideradamente lágrimas que surcaban sus sonrosadas mejillas. Shura, con las fuerzas que le quedaban, sonrió, abrazando a Mu efusivamente.
-"Mu, pequeño... ¿Dónde estamos?"- El muchacho de cabellos oscuros miró a su alrededor, encontrándose con una pobre cabañita humilde, muchas mujeres, a D.M. tirado a su lado, y a los vírgenes, en un poblado completamente desconocido.
Un momento...
Dirigió nuevamente su vista a dos chicas que estaban ahí, exactamente Larah (ejem... no puedo salir por todo lo que paso, se quedo viendo xD) y Murbella... Comenzó a temblar... Ahora si lo recordaba...
-"Ya les dije que no soy lo que piensan...¡¡NO LO SOMOS!"-
-"Eso lo sabemos, ¿Shura, Si, creo que así te llamas."- Repuso Helena, sentándose a un lado de Shura y regalándole una sonrisa. Shura se confundió aún más...
-"¿Quién eres tú, ¿Dónde estamos?"- Shura acercó su rostro al de la joven, interrogándola con la mirada, Helena amplió aún más su sonrisa.
-"Eso no tiene importancia, tu ya lo sabrás luego...¿Las reconoces a ellas, verdad?"-Preguntó, apuntando a Larah y a Murbella, que veían serias la escena.
-"Como no..."- Repuso con algo de odio en su voz el chico de cabello oscuro, la joven de blanca piel se alejó un poco de Shura, e hizo una leve inclinación frente a el, dejando que su cabello resbalara hacia delante, rozando los pies del hombre.
-"En nombre de ellas, de todo mi pueblo, y en especial mío, pido disculpas por todos los problemas que les hemos causado..."- Al terminar de decir eso, se recta nuevamente, estirando sus manos para alcanzar la coleta que llevaba (recordemos que no se la quitó nunca xD), desatándosela, cayendo nuevamente su cabello hasta la partida de sus muslos (el termino de su trasero o.OU).-"En este mismo momento, los devolveremos a su pueblo, y pediremos perdón por todo lo causado... es lo menos que podemos hacer..."-
-"Aparte de ayudarnos a pelear contra Radamanthys y ayudar a estos dos bichos a aprender el arte de las armas"- Se escuchó otra voz, atrás de Shura. D.M. Por fin había despertado, escuchando las palabras de la guerrera.
Shaka y Mu sonrieron, más Helena, todas las mujeres presentes, y hasta Shura se sorprendieron ante tal respuesta.
-"¡Si!"-
-"Bueno... yo"- Helena se quedo perpleja ante lo fácil que fue tener el perdón de los "Zaelyanos".
-"Aceptamos gustosas en ayudarles"- Dijo Nisa, medio impaciente.-"Pero ustedes, por favor, prométannos que nos van a ayudar con el testarudo líder de ese pueblo suyo."- Pidió, o más bien, ordenó.
-"Bueno, pero ustedes harán que estos debiluchos sean expertos en las armas"- agregó D.M.
-"Es que..."-
-"Vamos, nosotros observamos lo hábiles que eran con eso... además, nos deben el favor"-
-"¡De acuerdo!"- Estalló Murbella, de repente.-"Los ayudaremos, pero ya nos vamos de aquí, y los dejamos en su pueblo de una vez por todas"-
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Ya era de noche...
Si, seguramente al día siguiente partirían hacia Zaelya, el pueblo de los vírgenes... Mu lo pensaba mil veces...¿De verdad quería irse? No tenía respuesta alguna a su pregunta.
Era cierto, la vida en su pueblo ¡era como de los dioses! Los trataban tan bien... Se sentía muy protegido y querido a la vez.
Pero por otro lado, en ese pequeño tiempo que había pasado en el pueblo de 'Helena', se sentía muy... vivo, le gustaba ese tipo de vivencia aventurera y entretenida... En fin, era como sentirse... útil.
¿Se quedaría o no? No lo sabía... El salir a meditar le haría sentirse mejor.
-"¿Mu?"- ¡Lo había olvidado completamente! ¡Shaka! No podría dejar a su amigo solo, en ninguno de los dos lados, debía escuchar su decisión.
-"¡Shaka!...Me...me asustaste..."-
-"¿Qué te sucede?"- Vaya, si que lo conocía bien.
-"N-nada... C-como...crees..."-
-"En serio... Dime que te pasa"-
-"Es solo que..."-
-"¡HABLA YA!"-
-"¡BIEN! ¡COMO QUIERAS! ¡MI GRAN DUDA ES SI ME QUIERO IR DE AQUÍ! ¡¿FELIZ?"-
Shaka calló por unos segundos. Su amigo tenía razón, el también tenía esa misma duda.
Es que, no todos los días ves como un ejército de mujeres te mandan a parir con lo diestras que eran con el uso de las armas, y lo peor es que el GRAN Shaka, no se doblegaba, DE NINGUNA MANERA. ¡Debía aprender a toda costa el uso de las armas! No quería permitir que la 'bruja' le ganara.
-"Yo me quedo..."- Dijo sin pensarlo más.
-"¿Perdón?"-
-"¡Mu! Piénsalo bien, siempre es bueno un cambio en nuestras vidas, ¿no?"-
-"¿Estás seguro?"-
-"No mucho... espero que nos entiendan..."-
-"Pues yo creo que si..."- Helena, llegaba al árbol donde al principio Mu se había sentado sólo.
-"¿Sabías que es de mala educación escuchar conversaciones ajenas?"- Shaka la miró con reproche.
-"Lo sé"- Sonrió y luego miró a Mu.-"Pero de todos modos saben que cuentan con mi apoyo"-
-"Apoyo, ¿hum?"- Shaka posó su mano sobre su barbilla.-"¿Apoyo para qué?"-
-"Vamos... Ustedes saben que no será fácil convencer a los demás de que quieren ser unos 'valientes guerreros'...¿Piensan que es muy simple? ¡imagínense lo que pasará si ese testarudo Kannon se entera!."-
Tenía razón...
Ambos tendrían problemas con el líder... Bueno, la verdad sólo Shaka...
Mu tendría problemas con Kannon Y con su padre, Shion.
Es que, ¿Qué diría el sabio si descubre que su pequeño y delicado hijo se convertirá en un grotesco maneja espadas, Lo castigaría severamente.
O en la mejor de sus suertes, tal vez lo apoye.
Pero, ¿El resto de la caballería y gente importante de Zaelya, también se opondría, Helena estaba en lo correcto, eso no iba a ser fácil.
-"¿Qué es lo que tanto piensan?... A poco se dieron cuenta de que lo que les dije es verdad."-
-"Exactamente..."- Mu le miró aterrorizado.
-"Ay... ¿Y es obligación decirles que se quedarán aquí?"- Les sonrió abiertamente a ambos, guiñándoles el ojo derecho.
¿Qué pasaría si no les decían?
-"A ver.. déjame pensar, bruja...1.-Pensarían que estamos muertos o algo por el estilo, 2.- Pensarían que tú nos mataste, 3.- Pensarían en matarte luego a ti y a tu hermana... O con su suerte al resto de las personas de este pueblo"-
-"Vaya, que inteligente eres, rubio"-
-"¿Me acusas porque tengo cualidades que tú no posees?"- Sonrió con un tono muy subido de ego, no muy característico en él.
-"Engreído... ¡Ya verás!"- Sus intenciones eran de darle un zape que nunca olvidaría, pero se vio interrumpida por la voz de Nisa.
-"Helena..."- Sus verdes ojos se posaron en los de la más joven.-"Déjate de juegos, tenemos que preparar las cosas para mañana al mediodía"-
-"Pero, ¡Nisa! ¿No puede ser a la salida del sol? Ahora iba a ..."-
-"Le diré a tu hermana que no le estás haciendo caso, Helena."-
-"Bueno, bueno... ya me voy."- Helena se acercó a los vírgenes y les susurró.-"Vayan a mi cuarto más tarde, y hablaremos sobre su decisión"- Sin más se fue junto con Nisa a organizar caballos y armas para el día siguiente.
-"Que rara es esa tipa... no deja de sorprenderme"- El rubio virgen alzó una ceja, extrañado.
-"Es rara, pero muy útil y divertida"- El pelilila le sonrió serenamente, y luego se paró, alejándose del árbol en el que antes se había apoyado.-"Vamos, salgamos de aquí, tenemos que pensar en alguna solución"-
-"Tienes razón"- Shaka se alejó con su amigo Mu de aquel lugar, adentrándose más al pueblo. La entrada ahora estaba completamente sola, o eso era lo que se pensaba, ya que Shura, minutos después de que los vírgenes se habían marchado, había llegado al que sería el árbol donde antes su amigo Mu se había apoyado.
-"Cielos..."- Con su mano derecha se tomó la frente, apoyando todo su peso en el árbol y en su mano izquierda.-"Esto si es más raro de lo que pensé... mujeres raras... menos mal que mañana me voy de aquí"-
Se sentó en la hierba y miró al cielo... ¿Cómo le explicaría al resto del pueblo que fue atacado por un par de mujeres en donde Radamanthys y tuvo que 'abortar' la misión, tenía poco tiempo para pensar en una respuesta 'lógica' ...
¡Bah! ¿Y D.M. tampoco era parte del equipo entonces? ¿Por qué lo debía solucionar todo él?
-"Al fin llegaste amiguito, y ¿trajiste a alguien?"- ¡Hablando del rey de Roma! D.M. hablando con su pajarraco de nuevo.
Un momento...
Si mal no recordaba, el halcón que usaba el compañero suyo era específicamente para ver terreno y...
Enviar mensajes.
-"Oh no... ¡OH NO, OH NO, OH NO! ¿¡AHORA QUE HIZO DEATH MASK?"- Shura se alarmó de inmediato, sabía que los mensajes que enviaba su amigo siempre eran para pedir ayuda o refuerzos.-"¡Refuerzos! ¡No! ¡Carajo!"- Siguió viendo la escena escondido atrás de un gran arbusto.
-"Afrodita..."- Esto se ponía peor de lo que imaginaba... Afrodita había recibido el mensaje del halcón, lo que significaba que tendrían otra guerra sangrienta...
¡CONTRA MUJERCITAS!
-"Death Mask... ¿Qué fue lo que sucedió? ¿Y este lugar?"- El hombre de cabellos celestes se bajó de su blanco corcel (que mágico xD) y se puso a la altura del 'espía'.
-"Buen chico Galiot... guiaste muy bien a Afro"- D.M. sacó algo que parecían unas semillas y se las dio al negro halcón parado en su hombro.-"Afrodita... te mandé a llamar, para que le digas a Kannon que prepare una emboscada, luego sabrás cuál es éste lugar."-
-"¿Una emboscada?"-
-"Exacto"- Si, sus oídos no le habían mentido.
D.M. lo acababa de meter en otro lío contra otro pueblo.
-"¿Y eso?"-
-"Unas mujeres de aquí, me atacaron a mi y a Shura cuando cumplíamos nuestro trabajo en el lugar de Radamanthys"- El espía de cabellos azules hizo una pausa, dando un largo suspiro, y continuó.-"Una niñita, la cual parece ser la líder, bastante tonta por cierto, me ofreció disculpas con simples palabras... Como si es que eso fuera a curar todas las heridas que poseo en el abdomen por culpa de esas tipas"- Se levantó la prenda que llevaba, mostrando un horrible tajo, el que remarcaba con rojo toda la línea de su caja torácica.
-"Dios, que horrible... Al menos te curaron a tiempo"-
-"De no ser por los vírgenes ahora seríamos sus esclavos... ¿Comprendes?"-
-"¡O sea que esa era la misma tipa que secuestró a los vírgenes de nuestro pueblo! Todos hablan de ellos en Zaelya"-
-"Exacto... Ve por Kannon ahora mismo y guíalos a todos hasta este lugar"-
-"En seguida"- El joven (que más bien parecía muchachita) se montó de nuevo en el caballo blanco y partió en seguida hacia Zaelya, esa noche Kannon tenía mucho que hacer.
-"Perfecto"- El hombre de cabello corto sonrió satisfecho, y se dio media vuelta, como si nada hubiera sucedido... Pero Shura se atravesó en su camino.
-"Si, perfecto, ¿no?"- Shura lo tomó por ambos hombros, Death Mask lo miró exaltado.-"¿Sabías que nuestras vidas corren peligro? ¿La de nuestra gente? ¡TODO NUESTRO PUEBLO!"- Lo zarandeó mientras gritaba.-"¡DEATH MASK! ¡TU YA VISTE LO BUENAS QUE ERAN ELLAS CON LAS ARMAS, Y NO SON LAS ÚNICAS AQUÍ! ¡NOS JODERAN, Y TODO POR TU CULPA!"- Shura lo soltó y resopló exasperado.-"Es mejor que vayas a buscar a Afrodita para que evite incidentes... no queremos más problemas de los que tenemos con Radamanthys"- Le taladró con la mirada, obligándole a cumplir la orden recién dada.
-"Shura... Amigo mío...¡piénsalo bien, Si las tomamos desprevenidas, no podrán hacernos nada, en especial si les quitamos las armas... nos atacaron sin saber quiénes somos, sin saber que luchábamos por la misma causa."-
-"Eso es distinto... ¿Hubieras hecho lo mismo si pillaras a unos hombres haciéndose pasar por aliados de Radamanthys?"- Shura lo señaló con el dedo.-"¡Claro que si! ¡En especial porque hacemos tan buen trabajo que de verdad Radamanthys nos cree sus amigos! ¡Tuvieron razones para hacerlo! Tú mismo lo dijiste, ellas luchan por la misma causa."-
-"Ellas... Deberían quedarse a salvo en casa, preparando la cena, ordeñando a las vacas o esperándonos en nuestras camas luego de un arduo día de trabajo"- Sonrió con malicia.-"En vez de intrometerse en asuntos de hombres, peligrando su vida y sudando como puercas"-
-"Creo que te tomaste tu trabajo muy en serio... Son personas como nosotros, y tienen derecho a ser libres..."- Shura arqueó una ceja mostrando una sonrisa cómplice y cínica.-"Pero claro, para ti, los hombres no pueden dominar a otros hombres, solo a las mujeres"-
-"Me mal entendiste... Sólo era una forma de decir que lo que hacen ellas no es normal... hay que conducirlas por el buen camino... Así todos somos felices y vencemos a Radamanthys sin ser humillados por un montón de muchachitas ahombradas"-
-"Estás loco, Death Mask... ahora ve por Afrodita, antes de que lo haga yo mismo"-
-"Ve tu, no importa, de todos modos ya debe haber llegado... ¿Qué harán los demás si te ven en el pueblo en vez de cumplir con tu trabajo? En especial si estás solo... No, no lo creo..."- Le tocó el pecho con su dedo índice, sonriéndole maliciosamente.-"Si quieres, les adviertes a tus 'súper niñitas' a ver si se pueden salvar... Aunque lo dudo... una ya se encariñó con los vírgenes... A que se muere antes de que pasen 5 minutos luego de que llegue la caballería... Ay el amor, ¿no?"-
-"Ya verás como esto se pondrá mal... tu conciencia no te dejará en paz, hasta que ofrezcas toda tu sangre a los dioses."-
-"El tiempo corre, Shura... Menos charla y más acción, ¿no?"- Rió con sadismo y se fue, dejando a Shura solo en medio de la entrada de aquel pueblo... ¿Qué se podía hacer en esta situación?.
Lo primero que se le pasó por la cabeza, 'estrangular a Death Mask con sus propias manos, luego hacer lo mismo con el resto del mundo, hasta con los de su propio pueblo'.
Corrió.
Debía encontrar a la líder y a su hermana, en ese mismo instante.
Pero alguien ya se le había adelantado...Al parecer, Siria ya estaba atenta de todo el asunto.
No por nada la llamaban la experta en discreción.
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Hasta ahí:P
espero que las personas que me mandaron mails para aparecer en este fic queden satisfechas n.n... Y si, los personajes con pareja: Camus, Saga, MU (xD), Aioria, y tal vez Shaka (si a Xanxel le agrada o.oU)
Reviews!
Gracias por
leer
Sayonara
Furany
