Los personajes no me pertenecen, son de Rumiko Takahashi.


8ª. Un día nada agradable.

.

El torneo había acabado y el viaje en el avión fue tranquilo y una vez en el aeropuerto de Tokio, se miraron. Debían volver a casa, de donde se habían escapado para participar en un torneo al que sus padres se opusieron. Una vez en casa lo reñirían y los castigarían. Los aprovechados de sus padres a la vez de castigarlos les querían quitar el dinero ganado en el torneo.

Serían acosados por sus rivales, que los querían separar. Y Nabiki autoproclamada manager los metería en un lio,

-No quiero volver a casa- dijo Akane- vámonos un par de semanas por ahí .

- No puede ser- contestó el chico.

- ¿Una semanas?, ¿ Tal vez unos meses? Hasta que se olviden de nosotros y nos dejen paz.

- Hazte a la idea, esos no nos olvidaran. Atraemos a los locos como una colmena a los osos.

Ella lo miró desesperada.

-¿ Y que hacemos?

- Seguir adelante y no pararemos ante nadan ni nadie, no ceder ni un milímetro. No hemos ganado el torneo con facilidad, hemos luchado contra contrincantes que debían estar en el manicomio, pero algunos de ellos erran muy fuertes . Tenemos heridas que demuestran que nos ha costado ganar.

- ¡Pero… ¿y esos locos?.

-¿Cuando has perdido la esperanza?. Debemos seguir adelante, tenemos un objetivo y lo cumpliremos, nunca nos hemos rendido y jamás lo haremos.

Ella lo miró y asintió.

-¡ Perder nunca!, ¡ Retroceder jamás¡

Los dos chicos se dirigieron a la salida del aeropuerto, cuando vieron a la salida una nube de gente, estaban esperándolos. Los pasajeros del aeropuerto debían entrar o salir a empujones, más de uno se encaró con los periodistas que ocupaban las primeras filas y no dejaban ni entrar ni salir a nadie.

Enseguida alguien llamó a la policía y hubo una carga policial que disolvió el tapón de la entrada a fuerza de palos.

-Ahora en la televisiones hablarán de que la policía ha utilizado la fuerza para evitar que la prensa del corazón hiciera su trabajo- comentó Akane.

-Si, pero todavía hay canales decente que dirán la verdad. Que esa gentuza evitaba salir o entrar a la gente al aeropuerto. Si alguien ha perdido el vuelo o llega tarde a una reunión importante debería demandar a esos periodistas.

- Eso no pasará, nadie hará caso a esa pobre gente.

- Tienes razón, esos canales tienen demasiados contactos en las altas esfera- lo pensó- debemos salir sin que nadie nos reconozca, ni que nadie inocente resulte perjudicado.

- Si, esa basura ha despejado la puerta, pero deben estar esperándonos no muy lejos de la salida, nos llegaremos muy lejos sin que esos buitres caigan sobre nosotros.

Los dos se miraron, y minutos después los dos chicos con ropas nueva, abrigados y con bufandas y gorros salían del recinto, pasaban por delante de los periodistas y fans, y cogían el tren en dirección a Nerima.

Los dos jóvenes iban sentados tranquilamente, hablando de sus proyectos futuros. Cuando pararon en una estación, y subieron al vagón esas periodista tan molesta que les incordiò acompañada de su jefe, el otro periodista molesto y un hombre que llevaba una cámara de televisión. Este último se lo notó nervioso, nadie había querido acompañar a esa gente a la entrevista y se hizo un sorteo como en la antigua Roma. Cogieron una bolsa y metieron muchas bolas blanca y una negra, y él cogió la negra, y tuvo que acompañar a esa gentuza, si al menos hubieran jugado a piedra, papel, tijera, se hubiera librado de estar allí en esos momentos.

-¡Hola!, - dijo es presentadora – Aquí Reiko Matsumoto dispuesta a entrevistar a esos jóvenes que injustamente han ganado el torneo-¿ Que opinan de los comentarios de esas personas que dicen de su prometidos?

- Que tienen que estar rellenos de chocolate- dijo Ranma.

La periodista lo miró alucinada.

- ¿ Rellenos de chocolate?- preguntó asustada. Esos dos chicos eran unos carnivales. Miró a su jefe y este lo ordenó seguir.

-¿ Que dices? La nata es mejor- le respondió Akane a su prometido

- El chocolate es mejor para rellenar que la nata.

La periodista seguía preguntando y los dos jóvenes seguían hablando entre ellos.

- ¡Estás loco!, un pastel relleno de nata es superior a uno de chocolate.

Fue entonces cuando los periodista se dieron cuenta que los dos jóvenes los estaban ignorando.

-¡ Os estamos preguntando!, ¿ Queréis haced el favor de contestar?- chilló el energúmeno del presentador jefe- ¡No estoy acostumbrado a que me ignoren!, ¡Vuestra única opción es contestar!

- ¡Esta molestado!- dijo un anciano- es de mala educación hablar en el tren.

-¡Nos molesta!- opinó otro pasajero- ¿ no ve que esos jóvenes no quieren ser entrevistados, y menos por ustedes?

-¡Pues no le queda otra opción!, o se someten a mi entrevista o le arruino la vida- dijo ese hombre prepotente.

- Nos queda otra opción- dijo Ranma, el hombre se giró y vio que los dos chicos lo miraban con maldad.

- Nuestra opción favorita para deshacernos de idiotas que nos acosan- acabó Akane- pero ustedes no están preparados para aguantarla.

Y al parar en la siguiente estación del tren salieron volando los tres presentadores, fueron lanzados por los dos prometidos. El hombre que llevaba la cámara, salió asustado del vagón. Miró a sus jefes.

-Renuncio- dijo ese hombre- dejo vuestro canal. Me iré al periódico de mi padre. Ir a de periodista a bodas de la yakuza es menos peligroso que estar con vosotros- dejo la cámara y se fue. Y pensó- o me voy a la pastelería de mi novia, ella no le gustaba mi trabajo.

El tren siguió su camino, los dos jóvenes bajaron en su destino y bajaron del tren, desde el anden oyeron a la gente que los esperaba, para saludarlos.

-Nos buscan-dijo la joven- deben gente que debe querer vernos, ahora somos famosos y desean vernos.

Los dos miraron desde un lugar escondido a la salida, había una multitud de gente, muchos de ellos vecinos y conocidos.

-Pero si la mayoría de ellos son vecinos nuestros. Nos hemos vuelto cruzado con ellos yendo o volviendo del instituto.

-Las cosas han cambiado, ahora somos famosos. Hemos ganado juntos torneo. Todos querrán ser nuestros amigos- el joven suspiró y por un momento fue realista- suena bien eso de ser famoso, y que te alaben- la chica lo miró con mala cara- pero esto no durada mucho, el próximo torneo es en seis meses, cuando llegué ese momento ya no habrán olvidado. No le doy a la fama ni tres semanas, en un mes volveremos a ser dos desconocidos para la gente, nadie se acordará de nosotros.

- Menos nuestros opositores y padres- dijo con pesimismo la joven- daría lo que fuese para que esos seis nos olvidase, y nuestros padres dejarán de montar bodas, ya llevan tres intentos- suspiró-y siempre ha sido boicotear por esos locos. Algo me dice que el próximo intento nada la impedirá.

- Dejemos eso para más tarde. Ahora el problemas es salir sin ser visto- contestó el chico.

Y vieron como un grupo de personas se adelantaba, entre los que los esperaban en la salida, estaba la pesada de suempre y su grupo y avanzaba hasta ponerse en primera fila, y no lo hacían educadamente, sino apartando a empujones a las personas, los dos jóvenes lo reconocieron al instante.

-Esa pesada de Reiko Matsumoto y su grupo de periodista de tercera- Akane ya estaba harta de esa mujer. Era la clase de persona que no aceptaba un no, ni por la buenas, ni por las malas- ahora no tengo ganas de ver a esa loca.- de repente se le ocurrió algo-Tengo una idea- dijo con una sonrisa perversa, que no le gustó a Ranma.

Unos minutos después salieron de la estación, una chica muy sexy de largo pelo rojo con gafas de sol, un sombreo, una minifalda negra y un bolsa de tirantes, Un chico la acompañaba, vestido con una camisa de un grupo heavy, unos pantalones oscuros, con sombrero y unas gafas. Nadie les molestó, nadie reconoció que la chica era Ranma transformado en chica y el chico que la acompañaba era Akane disfrazada de chico.

Entraron en unos baños públicos. Ranko en el baño masculino y Akane en el femenino.

Un anciano vio como un chico entraba en el baño femenino y una chica en el masculino.

-¡Que pervertidos son los jóvenes de hoy en día. Una mujer entrando en el baño masculino y una hombre en el femenino. Que enferma está la juventud de hoy en día.- Poco después vio salir a una chica del lavabo femenino y a un chico del masculino. Ese hombre se quedó sorprendido, él había estado allí desde hace horas, y sólo había estado una chica y un chico al sitio equivocado y veía salir una chica y un chico del lado correcto.

Miró la botella de vino, y la lanzó a la papelera, su médico tenía razón, beber no le aportaría nada bueno y desde aquel día no volvió a beber alcohol.

Ranma después de cambiarse en el baño y recuperar su verdadera identidad, salió del baño, poco después salió Akane como chica.

-Es la última vez que me transformó en chica y me pongo uno de tus vestidos. Esas braguitas son tan delgadas que pasa frío, y tú sujetadores se me han calvados en la espalda, deberías comprarlos un poco más grandes.

-Yo tampoco quiero volver a disfrazarme de chico. Tu ropa es raposa y no sé cómo te puedes poner eso calzoncillos son muy áspero.

-Pues haber ido sin ellos- contestó furioso el chico- yo no le encuentro nada áspero.

- ¡Eres un pervertido! ,¡ mira que insinuar que no lleve ropa interior!, y de repente recordó algo- ¿ Qué estabas diciendo?, ¿ Qué mi sostenes son pequeños?

-¡Si lo digo y lo reafirmo!, tus sostenes son pequeños, tanto para Ranko como para ti, no sé cómo puede ir con ellos, son demasiado pequeños para ti.

-¿ Insinúas que tengo el pecho pequeño?

- ¡No! Te digo que tienes el pecho más grande, que te han crecido.

Akane miró a su prometido furiosa, fue a darle un bofetón, pero él la paró.

-¡Idiotas!- dijo el chico- idiota tú, idiota yo. Volvemos a Nerima y lo primero que hacemos es peleamos. No nos habíamos peleado desde antes de irnos.

- Este barrio es malo para nosotros, debíamos irnos de él- contestó ella.

-Y tan malos aquí viven nuestras peores pesadillas, debemos libramos de ellas.

-Si conseguimos lo que nos proponemos desaparecerán.

Ella asintió

-Ir por las calles es peligroso, nos podemos encontrar gente que quiera hacerse una foto con nosotros, o peor aparecer nuestros padres- y añadió con miedo y furia- nuestros rivales- después de las entrevistas que concedieron esos seis mientras ellos estaban en el torneo, habían dejado de considerarlos amigos, presuntas prometidas o presuntos pretendientes. Ahora eso seis eran rivales, y debían poner las cosas claras.

- Pues iremos por el camino más corto- dijo él. Ella comprendió por donde quería ir el chico y sonrió, ese camino le gustaba mucho.

Un minuto después, iban por los tejados, ella en brazos de su prometido, esa era la razón por lo que a ella le gustaba viajar así, no lo podía negar adoraba que ese chico la cogiera en brazos.

El chico iba corriendo, pero asegurando cada paso, cada salto, no quería dañar la preciosa carga que llevaba en los brazos, era lo más valioso de su vida. Tan cerca de ella, adoraba el aroma personal de Akane, la adoraba por completo, sólo había algo que no le gustaba, sus ojos y su sonrisa, a pesar de que eran lo que más le gustaba de ella, era lo que más odiaba, porque lo dejaban indefenso y a su merced. Akane tenía en su rostro un arma de destrucción masiva, al menos para él.

En pocos minutos llegaron al dojo. Entraron por detrás, la puerta del edificio estaba invadida por periodistas, canales de televisión, y gente que quería verlos.

Por suerte habían dejado las maletas en unas taquillas en la estación, y sólo llevaban unas bolsas con lo imprescindible.

Nada más tocar el suelo.

-Apesta a okonomiyakis y a comida china- dijo Ranma con fastidio- esas locas están aquí y supongo que el resto de maniacos.

-Ya he tenido suficiente locos en el torneo,- dijo la joven- no quiero ver a esas personas.

-Yo tampoco, seguro que planean algo, y tú y yo acabamos peleándonos. No quiero que esa gata me abrace- y tuvo un escalofrío- cada vez que me abraza me Dan escalofríos y no puedo ni moverme, aunque te insulte, cuando me mandas a volar, te estoy agradecido por librarme de esa chica.

Akane lo miró sorprendida.

-Ahora me dirás que eres masoquista, y te gusta que yo te pegue.

-No me gusta- contestó él- y será mejor que hablemos más flojo o alguien se dará cuenta que estamos aquí.

No había acabado de hablar cuando oyeron voces.

Shampoo y el resto de acosadores llegó al sitio donde habían estado hablando los prometidos y no vieron nada.

-Shampoo oír voces, yo oír a Aíren y chica violenta- dijo la chica china.

- Tú cada vez estás peor, ya oyes voces- contestó Ukyo- cuando seas vieja…- y se rio.

-¿Qué insinuar?, ¿ Qué Shampoo estar senil?.

-Oyes voces que no existen. O estás senil, o estás drogada.

Shampoo se sintió humillada y….

-¡Yo matarla a cocinera!, ¡ Y después a chica violenta!.- y se preparó para atacar a Ukyo.

-¡Ven te espero!- y sacó su espátula dispuesta a defenderse.

Ryoga se metió entre las y puso los brazos en cruz.

-Dejad las peleas para más tarde…- y notó que tocaba algo blando con sus manos. Se giró y vio a Shampoo mirándolo furiosa, y después miró a Ukyo y la vio igual de furiosa. Apretó esas cosas blanda. Y se puso rojo, le estaba tocando los pecho a esas chicas.

-¡Déjame de manosearme, pervertido!- gritaron las dos.

Y a continuación le pegaron la paliza de su vida. Primero esas dos chicas, después los dos chicos por envidia. Después se acercó Kodachi , miró a Ryoga que yacía en el suelo, le cogió la mano y con la mano del chico hizo que le tocara el pecho, después de pegó por tocarle el pecho.

-¿Por qué me has pegado?- preguntó confundido un casi muerto Ryoga.

-¡Por tocarme el pecho!- contestó Kodachi- sólo me lo puede tocar mi amado Ranma, si no se atrevido es porque Akane lo tiene embrujado.

-¡Pero si has sido tú quien me ha hecho que te lo toque!- respondió el chico de la cinta.

-Eso es una tonta excusa- respondió la gimnasta.- me has tocado y punto.

Y esa chica se giró ofendida, ¡Cómo alguien de clase tan baja se atrevía a tocarle el pecho!

Kuno se acercó a Ryoga y le preguntó.

-¿Quién lo tiene Mejor?

Ryoga no pudo contenerse.

-Akari, mi novia, y Kasumi. Los de Kasumi son los mejores, después Akane.

Volvió a recibir otra paliza y merecida.

-¡Vamos para adentro!- ordenó Ukyo, miró a Ryoga con desprecio- entrar a esa basura, Ran-chan está a punto de llegar y me declarará su amor.

Y las tres chicas entraron a la casa peleándose por Ranma, y los dos chicos cogieron al caído por lo pies y lo arrastraron dentro.

Los dos prometidos vieron la escena desde el tejado, nada más oír a esos salir Ranma cogió a su prometida en brazos y saltó al tejado de la casa, por suerte nadie los vio, esos locos estaban tan metidos en su discusión que ninguno notó que dos chicos los observaban. Una vez esos se hubieron ido, los dos respiraron aliviados.

-¡Esos pelmas están en casa!, ¡Me apuesto algo que prácticamente viven aquí!- refunfuñó Akane- vamos a tener una estancia nada tranquila en esta casa.

- Baja el tono o volverán a salir- vio que Akane lo miraba mal-no es hora de pelearnos. No vamos estar ocultos para siempre. Tenemos que dejar nuestras bolsas en nuestras habitaciones. Ducharnos y cambiarnos de ropa. Y debemos pasar por delante suyo.

Ella lo miró mejor, pero no se le pasó el enfado, pero no dirigido al joven.

-¡Pues no veo como vamos a pasar por delante suyo sin que se den cuenta!

Ranma se quedó pensativo y de golpe.

-¡Tengo una idea!- dijo el joven con una sonrisa traviesa.

Akane estaba oculta a un lado del pasillo, debía cruzar por delante de todos sin que nadie la viese. Llevaba toda la ropa para ducharse, suspiró esperaba que el plan de Ranma saliese bien. Habían entrado sigilosamente en su habitación y escondido su ropa. Ahora esperaba que el plan de Ranma saliese bien.

La familia y su visitantes estaban discutiendo, cada uno declamaba a uno de los prometidos, incluso Mousse, que declaraba a Akane ante la mirada asesina de Shampoo. El chico chino vio Akane luchar en el torneo y decidió que sería una buena mujer para él, esa chica japonesa era mejor que la mayoría de la élite de las amazonas.

Akane bufón, nunca había visto tantos Idiotas juntos.

Entonces se oyó un petardo y todos se volvieron en esa dirección, ocasión que aprovechó Akane para pasar, sin que nadie la viese.

La joven se bañó con tranquilidad, se vistió y al ir a cruzar por delante de todos se volvió a oír u otro petardo y la chica cruzó el pasillo sin ser vista.

Subió a su habitación y allí la esperaba Ranma, que fue quien lanzó los petardos.

-Ahora te toca a ti- dijo la chica.

Y la historia se repitió, Ranma cruzó el pasillo dos veces sin ser visto. Una vez duchado y en la habitación de la chica.

-Ha salido bien. Por una vez tu planes salen bien- comentó riendo la chica.

-Lo que tú tienes envidia.- comentó el chico.

-Yo envidia, ¿ de ti? Ja

- Y tanto que tienes envidia.

- Si te ha salido bien el plan por casualidad.

No estaban peleándose, sólo bromeaba, burlándose de ellos mismos cuando tenían una tonta pelea por una Idiotas. No pudieron aguantar más y se rieron.

-Que tontos somos los dos, pelearnos, cuando podemos reírnos de nosotros mismos- dijo el chico.

- Muy Idiotas, está pelea en broma ha sido muy divertida. Debemos repetirla.

-Cuando quieras- dijo él- pero por ahora debemos guardar silencio, no hacer ruido.- bufó- suerte que compramos algo para comer en la estación de tren. Podemos comer sin que nadie sepa que estamos aquí.

Abajo la pelea segura, todos decían la suya. La única callada era Kasumi, juraría ver a Ranma pasando del baño, fue allí, pero él baño estaba como si no lo hubiesen utilizado, pensó que eran imaginaciones suya, pero oía ruidos en la planta alta. Se levantó y cuando salía del comedor, Soun le preguntó.

-¿Dónde vas Kasumi?, Hoy vienen Ranma y Akane y deberás preparar algo bueno.

-Voy al baño, necesito ducharme.- y cambió de tema-¡Creía que cuando volviesen los castigaría sin comer!- contestó su hija mayor.

-Y eso haré, pero como mayor castigo cenaremos algo bueno para que aprendan la lección por no hacernos caso.

Kasumi, entró en el baño despida, no vio nada fuera de lo común, no parecía que nadie se había bañado en horas, desde se bañó Nabiki, pero… en el ambiente había algo raro. Ella que siempre se dedicaba a la tareas del hogar, supo que alguien se había duchado hacía poco. Por eso se duchó ella, para ocultar las puertas que dejaron en el baño Ranma y Akane.

A parte ella si vio pasar tanto a los dos prometidos, pero no diría nada. Sonrió ese baño la relajó, se perfumería, había quedado esa noche con un amigo y del instituto, y quería impresionarle.

Mientras Akane y Ranma comían, escuchando la conversación que se desarrollaba abajo, esos locos eran tan ruidosos. Los dos se reían de las locuras de esa gente.

De golpe oyeron como el ruido bajaba y se pusieron en guardia. Vieron como la puerta de la habitación se abría y…

-Shampoo oír ruidos en esta habitación- dijo Shampoo- Airen y chica violenta estar aquí.

Y a esa habitación entraron sin permiso los seis rivales y Nabiki. Y se encontraron la habitación vacía, menos un gorrión que comía un poco de pan.

-Ese es el ruido que has oído- se rio Ukyo- ya oyes lo que no existe.

Shampoo miró al pajarraco, y lo espantó.

-Shampoo estar segura, ellos estar aquí- dijo la chica china- ¡buscad por la habitación!- ordenó esa chica.

Los allí reunidos la miraron asustados, esa chica se estaba desquiciando mal desde que Ranma se fue al torneo. Ver por la televisión a esos dos chicos tan juntos, literalmente juntos, verlos reír y bromear, incluso abrazarse. A Shampoo no le gustaba como al que ella llamaba su Airen estuviera tan cerca de esa chica de tanta poca valía.

-¡No lo aguanto! , ¡ Shampoo no saber que ve Airen en esa mujer debía!

-¡No es tan débil ha ganado el torneo!- contestó Ryoga, el chico estaba aún más loco por su amada Akane, si lograba vencer a Ranma, él sería el campeón, iría al torneo nacional, y… Akane vería que él era el único en quien confiar. miró

-Ryoga, te montas el cuento de la lechera, no vencerás a Ranma, y Akane no te mirará como tú quieres, aunque lo vencerás, ella se pondría del lado de Ranma y se enfadaría contigo- Mousse sabia en lo que pensaba Ryoga, tanto este como Kuno eran muy planos en sus pensamientos, eran tan predecibles, sólo pensaban en vencer a Ranma para quedarse con Akane.

Ryoga lo miró realmente mal.

-Lo mismo se puede decir de ti- Ryoga estaba furioso- piensas en ganar a Ranma para quedarte con Shampoo, pero también la osadía de mirar con deseo a Akane .- y gritó con furia-¡Akane será mía y de nadie más!

Los otros dos chicos desearon matarlo, pero.

-Debemos buscar a esos dos- dijo Ukyo- Dejamos las peleas para después.

-¡Seguro que están en esta habitación! No dejéis un sitio sin mirar.

Y empezaron a buscar por toda la habitación, Ryoga abrió un cajón, y sacó una de las braguitas de Akane y junto los otros dos chicos la miró embelesado.

-Esta son las braguitas de Akane- dijo Ryoga.

-Si- dijeron babeando los otros dos chicos.

Y recibieron un golpe de las tres chicas.

Ukyo los miró tirados en el suelo.

-¡Que pervertidos son los hombres!, ¡Siempre babeando con la ropa femenina¡- pero ella llevaba en sus manos un sujetador de la dueña de esa habitación. No fue por que le gustase Akane, si no porque se acababa de dar cuenta que la ropa íntima de Akane, era más preciosa que la suya. Se llevaría ese sujetador y una braguitas para ver como le quedaban a ella, y llevando esa ropa podía atraer a Ranma. También miraría la ropa de Akane y se compraría igual. Miró los sujetadores Akane tenía menos pecho que ella, bufó resignada, Eso era mentira, Akane había aumentado de pecho, tenía más que ella, y se estaba acercando al tamaño de Shampoo.

-No porque te vista como Akane lograrás que Ranma se fije en ti- sentenció Mousse- Ranma no se fija en Akane por su pechos o por su forma de cocinar, él se fija en ella porque sabe que ella siempre la apoyará. Ya lo habéis visto, los dos han ido a ese campeonato en contra de sus padres y de vosotras- el chico recibió un golpe de Shampoo que lo dejó noqueado.

-Sólo decía idioteces.- dijo la chica.

- Y tanto que decía idioteces-dijo Kuno con orgullo -Akane se va enamorar de ese idiota, cuando está enamorada de mi?, Akane será mi mujer.

Y se siguieron peleando, hasta que llegó Nabiki.

-¡Sois de los peores!, ¡ Robando la ropa de mi hermana- los acusó.

-¡Tú también lo haces!- se defendió Ryoga.

-¡Yo no sé la robo!, - contestó Nabiki con una sonrisa maligna- yo se la cojo prestada.

- Si ha coger prestada le llamas a no devolver lo que le coges a tu hermana.

-Ella es tonta, no se entera que le quito su mejores trajes- dijo la chica y se enfadó- mis informantes me han dicho que Ranma y mi hermana llegaron a la estación. No se los vio salir, pero yo creo que han escapado de alguna forma. Os pagué para que lo atrapañarais y no lo habéis conseguido- los miró furiosa- soy su manager, les tengo concretada una entrevista en ese programa basura. Si no van deberé volver el dinero, ¡así que buscarlos!- ordenó.

-Te lucras con tu hermana y Ranma, si se enteran, que lo harán, lo pagarás caro.- dijo Ryoga- deberías conocerlos.

-No pasará nada- contestó la hermana de Akane- Tanto Ranma, como mi hermana son tontos los puedo manejar con facilidad.

-Con tanta facilidad que se escaparon a un torneo y tú ni te enteraste- contestó con ironía Ukyo.

La cara de Nabiki fue un poema, esa fuga le salió cara, si lo hubiese sabido, se hubiera ido con ellos al torneo y hubiera ganado mucho dinero a costa de los dos prometidos.

Ese estado le duró poco.

-¡Buscad a esos dos!, ¡ Cuanto más tiempo pasa más dinero pierdo con esos dos!

Miraron por la ventana abierta.

-Seguro que salieron por la ventana, vayamos. Y todos salieron por esa ventana.

Nabiki, regresó al comedor. Debía encontrar la forma de llevar a la idiota de su hermana y al imbécil de Ranma a ese programa de corazón, eso sería su primer peldaño al éxito. Esos dos chicos no sabían moverse en el mundo. Ella le ayudaría, a cambio de una suma de las ganancias de esos dos. Los utilizaría para ganarse la vida. Ellos no podían deshacerse de ella. Tenía un contactos firmado con ellos, bueno falsificó las firmas de los dos prometidos, si la despedían se quedaría con todo.

Ranma y su prometida escaparon de la habitación cuando oyeron que se abría la puerta, salieron al tejado y se escondieron, escucharon toda la conversación. El chico tuvo que coger con fuerza a Akane, que estaba dispuesta a entrar y destrozar a esos seis y a Nabiki.

Bajaron al jardín y se metieron por la ventana del baño, en el peor momento, cuando se estaba bañando Kasumi.

Kasumi con sólo una toalla los miró. Ranma no pudo ver nada, en seguida se abalanzó Akane y lo noqueado de un golpe del mazo. Akane oyó como esos seis entrometidos, intentaban entrar en el baño por donde ellos, miró donde esconderse, y descubrió la bañera llena. Cogió al inconsciente Ranma, con objetivo de echarlo dentro y después echarse ella, quedando ocultos por el agua y el jabón.

Ranma se despertó en un momento antes, forjó con su prometida, lo que planeaba está era una locura, pero los dos cayeron al agua, él encima de ella, y así se ocultaron de sus perseguidores.

Y todo fue visto por una medio desnuda Kasumi. Unos segundos después entraron en el baño esos locos y sólo vieron a Kasumi tapada por una toalla y decidieron huir por donde entraron, aunque para los tres chicos fue una experiencia inolvidable, primero por ver a Kasumi medio desnuda y segundo por la paliza que recibieron por sus acompañantes al comparar a Kasumi con ellas.

Mientras Kasumi salió del baño, y este aparentemente quedó desierto, y de golpe, de la bañera salieron los dos prometidos medio asfixiados, intentando recuperar el aire. Respirando fuerte, y con los ojos enrojecidos. Tardaron unos minutos en recuperarse, y ella levantó la mano y abofeteó a su prometido.

-¿Por qué?- preguntó este- no te hecho nada.

-Me has besado, bajo el agua. Te has aprovechado de mi- contestó ella furiosa.

Ranma la miró furiosa.

-No te he besado, te estabas quedando sin aire, y te he dado un poco, por eso te he dado aire a través de mi boca.

Ella lo miró confundida y furiosa.

-¡ Eso es mentira¡- dijo la chica- atrévete de nuevo a besarte y te mato.- lo miró desafiante

-Pues vale, la próxima vez dejaré que te ahogue.

Ella lo miró, supo que lo que le dijo el chico era verdad. Ahora tenía dos opciones, o dejarse llevar por su orgullo, o reconocer su error. Durante el torneo habían avanzado mucho, se habían llevado bien, y olvidaron su estúpido orgullo. No podían retroceder y volver a ser los de antes.

-¡Lo siento!, ¡Tienes razón!- reconoció la joven-¡ Me has vuelto a salvar. Tal vez tú tengas razón y primero acto y después pienso.

-Yo también lo siento, y soy un tonto bocazas- se miró y la miró a ella- estamos empapados, y de mal humor. Debemos salir de la bañera y secarnos. Y cambiarnos de ropa.

-El problemas es que no tenemos ropa de repuesto.

-Pero si unas batas- dijo él- nos la podemos poner.

Los dos se sonrojaron. Cambiarse uno delante del otro le producía vergüenza. Cogieron las batas y se dieron la espalda y se empezaron a desnudar.

-¡ Cómo te gires te mato¡- le advirtió ella.

- ¡ Lo mismo te digo!- le contestó ella.

Se estaban cambiando, cuando ella oyó reírse al chico.

-¿De qué te ríes?- preguntó ella enraizada, según la contestación del chico, le daría una paliza.

-Recuerdo nuestro primer encuentro aquí. Los dos desnudos- dijo visto ahora me produce risa y vergüenza.

Ella recordó eso y no pudo evitar reírse.

-Que mal lo pasé, yo pensaba que me iba a bañar con una chica y me encuentro a un chico desnudo- se rio.

-La culpa fue mía por no poner una nota avisando que nadie entrando.

-Y mía por entrar si avisar- contestó ella.

-Desde ese momento la cosas se complicaron para los idos, el compromiso, todos ese grupo de locos que han ido apareciendo en nuestras vidas.

- Si, todos queriendo imponiéndose en nuestras vidas.

- Pues es hora que decidamos por nosotros, hemos empezado a dar nuestros pasos para que nadie nos controle. A partir de ahora nosotros mandamos en nuestra vidas.

-¡Nadie nos parará!-dijo la chica.- ¡Nadie nos vencerá!

-¡Nunca!- contestó el chico-¡Seguiremos el camino que nos hemos trazado, pasando por encima de quien se oponga!

-¡Sea quien sea!- contestó la chica.

Una vez secados y con las batas puestas, los dos chicos se dirigieron a sus habitaciones y se vistieron, escondieron sus ropas mojadas, y se reunieron en la habitación de la chica.

Los demás los buscaron por la casa y se reunieron en el salón y allí uno a uno se fueron durmiendo, la última en hacerlo fue Kasumi, que no dijo nada de como la vieron los dos grupos de jóvenes, la máscara de chica buena engañó incluso a perspicaz Nabiki. La hermana mayor vio a todos dormidos y sonrió, sabia donde estaban los dos jóvenes y el día siguiente sería muy movido, Ranma y Akane aparecerían, y una tormento, o un intento de tormenta, estallara sobre el dojo. Subió a su habitación se puso el camisón y se acostó y se durmió.

Mientras en la habitación de Akane los dos jóvenes dormían en la cama de ella. Abrazados y cansados del día que habían llevado, tranquilos, al día siguiente podrían las cartas sobre la mesa.

Amaneció, el sol entró por la ventana dela habitación de Akane, y los dos prometidos se despertaron a la vez, se miraron y sonrieron. Abajo reinaba el silencio, eso quería decir que toda la familia y los ocupas seguían durmiendo en el salón.

Ranma se fue a su habitación y se cambió. Cuando salió Akane lo estaba esperando, bajaron en silencio las escaleras, y en el salón vieron a toda la manada durmiendo. Los dos prometidos se miraron y sonrieron, esa gente se iba despertar de malas formas.

Continuará...


Notas del autor:

Los de la bolsa con la bola negra parece que es verdad, según parece cuando la legiones romanas montaban un campamento se ofrecían voluntarios para todo, para cocinar, para montar ese campamento, ir por agua, ¿ para todo? , ¡No! Había algo que no quería hacer nadie¡ Limpiar las letrinas!, hasta que un general, no sé cómo se le llamaba entonces, tuvo la idea de la bolsa con la bola negra, y al desafortunado que le tocaba la bola negra, ¡ le tocaba limpiar las letrinas!, supongo ante las bromas de sus compañero. Según cuenta la leyenda de ahí viene el decir "Me ha tocado la negra" cuando te toca pasar por algo malo. Supongo que al pobre que le tocase limpiar las letrinas de una gran ejército no lo pasaría muy bien.

En este capitulo los dos prometidos se esconden de sus acosadores, se ocultan en la bañera, Kasumi medio desnuda los descubre allí.

Y para el próximo capítulo despertarán a sus rivales de malas forma. A Reiko Matsumoto la deberán soportar en los próximos capítulos. ¿Tomoe y los demás participantes del torneo? No sé si volverán a aparecer, creo que no, su papel ya acabó.

Agradecimientos:

A Arianne Luna: No te preocupes seguiré.

A: Bernani0125: No, las sombras van al torneo para librarse de ser esclavos de los auténticos Shampoo y compañía y lo consiguen, pero eso no libra a los auténticos de sus deberes contraídos. Shampoo seguirá siendo la 'prometida" de Ranma, por qué fue ella la que fue derrotada por Ranma, no su sombra.

A Werger82: Si me está tomando tiempo las actualizaciones, hace meses que no subía nada. Si puede ser actualizaré más seguido.

Y a todos los que leen mis historias, ¡Muchas gracias!