Dark: Hola a todos los lectores y bienvenidos al capitulo número tres!
Nico: Ya era hora!
Dark: No molestes, sé que me demoré un poco pero no es para tanto! ¬¬U
Nico: Si claro...bueno eso no importa...lo que importa es que...Dark Janubis no es dueña de Yugioh! Ni de ninguno de sus personajes!...
Dark: Gracias por la entrada...ahora sí con el fic!
El mejor de los cumpleaños!
Yugi estaba caminando hacia la casa del Señor Terek, el cual era el escriba y pintor de la ciudad.
-Me pregunto qué será lo que es tan urgente para el abuelo...ah...no importa ya lo averiguare!-dijo para sí mismo mientras daba juguetones saltos y pateaba piedrecillas por el camino. Realmente se sentía mucho mejor!
Sin embargo no notaba la presencia de aquella sombra que lo venía siguiendo desde que salió de la escuela.
Ooo
-Coloquen eso por allá! Tristan, coloca las jarra allí...Joey, coloca los platos aquí!-el abuelo se la pasaba dando instrucciones a los muchacho mientras en conjunto preparaban todo para la fiesta de Yugi, aunque los únicos invitados eran ellos. ¿La razón?. Bueno, todo era a causa de que como Yugi siempre hablaba de cosas que los demás no entendían era considerado un total fenómeno.
Para todos los que estaban en ese hogar era realmente triste que ningun muchacho tratara bien a Yugi sólo porque el pensaba diferente que ellos. Varias habían sido las veces que Joey y Tristan llegaban de recoger cañas y se encontraban con un Yugi solo y golpeado. Incluso hubo una ocasión que Joey fue a recoger a su pequeño hermano de la escuela, sólo para encontrar que un chico, dos veces más grande que Yugi, le estaba dando una paliza; ese día Yugi quedó tan lastimado que no se pudo mover durante horas y tardo días en caminar correctamente. Desde entonces Joey y Tristan se prometieron que protegerían al muchacho y le enseñarían a defenderse. Pero Yugi , aunque muy inteligente, parecía simplemente no tener cabeza para aprender a luchar.
Pero eso no importaba, ahora no era momento de recordar viejos rencores, era hora de conmemorar la quinceava estación de Yugi y todo debía ser perfecto, o al menos ese era el plan.
Ooo
-Señor Terek!-decía Yugi mientras golpeaba la puerta- Señor Terek abra por favor!
El viejo señor abrió la puerta y saludo amablemente a Yugi.
-Yugi, que bueno verte muchacho!. Viniste a recoger el encargo de tu abuelo verdad?
-Si señor, y si no le incomoda, tengo algo de prisa, no quiero caminar por las calles en medio de la oscuridad...
-Jajaja, acaso le temes a la oscuridad Yugi?-preguntó el anciano de forma burlesca
-Bueno...no por completo...es solo que algo me dice que no debo estar fuera de casa esta noche...-dijo Yugi algo nervioso.
-Jajaja...lo que digas muchacho. Bueno, ya que tienes prisa, aquí esta el encargo de tu abuelo- con eso le entrego un pairo dentro de un estuche de caña.
-Muchas gracias...adios!-entonces Yugi emprendió una rápida retirada sin notar al par de ojos que no dejaban de observarle.
Ooo
Yugi ya estaba cerca de casa y podía ver como detrás del viejo edificio el bote de oro de Ra se ocultaba mientras el poderoso dios se iba a dormir. La vista era perfecta, lo cual extraño a Yugi, normalmente no era tal claro, algo le decía que ese día las cosas no serían como siempre.
-Bueno, mejor entro, después de todo tengo que darle este papiro al abuelo-con gran entusiasmo Yugi ingresó a la casa, pero no vio a nadie. Era extraño, donde estaban todos, empezó a adentrarse hasta la cocina, entonces abrió la puerta y...
-SORPRESA!-gritaron todos dandole un susto que casi lo manda volando
-Aaah!-al darse cuenta de que eran sus amigos y su abuelo el miedo se desvaneció y se convirtió en alegría, era una fiesta y era para él- Jajaja, por Ra, sentí que mi espíritu se salía de mi cuerpo, jajaja...
Todos comenzaron a reír ante el comentario de Yugi. Entonces lo llevaron hasta la mesa del centro en donde habían colocado una vela con quince argollas doradas y a su lado un pequeño bollo de pan.
-Es hora de soplar tu vela Yugi!-dijo entusiasmado Joey
-Pide tus deseos!-dijo Tristan
-Sí, Yugi pide unos buenos deseos!-dijo el abuelo
-De acuerdo!- Yugi cerro sus ojos y deseo mentalmente "deseo tener más grandes amigos para que la próxima vez mi cumpleaños sea algo grandioso, quiero que todos seamos felices, y deseo que poder ser quien soy sin temer a ello!"
Yugi soplo las velas y todos festejaron.
-Bueno, bueno, es hora de los obsequios!-dijo felizmente el abuelo
-Qué, quieres decir que también tengo obsequios?-Yugi preguntó sorprendido, con la falta de dinero no era fuera de lo común que su cumpleaños se redujera a sólo las velas y el pan.
-Claro que sí viejo, este cumpleaños es especial-dijo Tristan
-Sí!-respondió feliz Joey- y como Tristan lo dijo, primero será si regalo!
Tristan miró a Joey con cara de 'tu-nunca-cambias', pero rápidamente se alegró y le entregó a Yugi su obsequio que estaba envuelto en fibra de lino.
Yugi tomo el obsequio y empezó a desenvolverlo y al haberlo abierto por completo una sonrisa se dibujo en su rostro...
-zapatos nuevos!-dijo entusiasmado-Muchas gracias Tristan!
-Sabía que te gustarían, supe que sería perfecto después de que se te rompieron las otras cuando fuimos de excursión al desierto!-dijo con una amable sonrisa
-Son muy bonitos, gracias amigo!-con ello Yugi no tardo en cambiarse sus viejos zapatos remendados por los nuevos que su amigo le había dado.
-me da gusto que te gustaran!-respondió Tristan
-Si, si, pero si eso te gusto...entonces espera a ver el regalo que te hizo tu hermano!-dijo Joey
-Así?...y qué es Joey?- preguntó curiosamente el pequeño Yugi
-Bueno, me sorprende que no lo sepas todavía, después de todo, lo tienes en tu bolsa!- respondió Joey entre risas
Yugi no entendía, pero cuando miró en su bolsa pudo ver el estuche con el papiro que le habían pedido que recogiera, lo tomo y miró a Joey.
-es esto?- le preguntó
-Si, qué esperas?...ábrelo!-dijo emocionado
Yugi abrió el estuche y retiro con delicadeza el papiro de su interior. Lo tomo entre sus manos y lentamente lo empezó a desenrollar. Cuando hubo terminado, su rostro quedó sorprendido, casi en trance, estaba anonadado.
-No...puede...ser...-era lo único que Yugi podía decir mientras admiraba la imagen en el papiro
-Claro que puede ser, nada es imposible para tu hermano!-dijo Joey con gran orgullo
De pronto Yugi pareció volver a la realidad y su rostro se iluminó con gozo y alegría mientras contemplaba la imagen...
-Es una pintura del dragón de ojos rojos!-dijo Yugi casi gritando de la emoción-No puedo creerlo!...Joey, pero ...cómo?
-Veras, no fue tan complicado, sólo tuve que trabajar tiempo extra durante dos meses y pude ahorrar suficiente para pedirle al señor Terek la pintura, en cuanto a la imagen, sólo digamos que nadie se dio cuenta de la falta de un archivo en la administración del pueblo, jajaja!
-Joey eres el mejor hermano del mundo!-Yugi corrió hasta su hermano y le dio un fuerte abrazo, el cual fue bien recibido e igualmente respondido.
-Me da gusto que te agradara!-dijo muy feliz Joey
-Muy bien!...pero ahora es el turno del abuelo para dar su obsequio-dijo el señor Motou mientras cargaba un cofre en sus manos.
-Qué es abuelo?-preguntó Yugi
Todos se acercaron al abuelo y miraron el cofre.
-Yugi tu sabes que yo no soy verdaderamente tu abuelo...-empezó a decir, mientras que la cara de su nieto se ponía seria
-Lo sé, pero aun así para mi sí lo eres- afirmo el joven muchacho
-Y para mi tu y Joey sí con mis nietos, pero eso no quita que eso no es verdad-al abuelo parecía costarle un poco decir lo que decía- No quita el hecho de que no seas el hijo de mi hijo... no borra el hecho de que te encontrara aquella noche en mi puerta y que te aceptara en mi hogar...tal y como lo hice contigo Joey...-el abuelo volteó a mirar a sus niños, los cuales ahora ya no tenían sonrisas en sus caras sino algo de tristeza.
-se arrepiente de tomarme como su nieto señor Motou?-Yugi preguntó tristemente
El abuelo miró a su pequeño nieto y la cara de tristeza se transformo en una de tranquilidad.
-Claro que no pequeño, nunca me arrepentiría de eso. Siempre consideré que recibirlos en mi hogar había sida mi máximo logró, nunca cambiará eso!-sus palabras hicieron que todos animaran los ánimos- pero como este cumpleaños te marca como un joven que cada vez se acerca más a ser un hombre, creo que ya eres lo suficiente maduro para tener esto...
De pronto el abuelo abrió el cofre que tenía enfrente y revelo su contenido a los presentes. Dentro de ese cofre y sobre un suave colchón rojo de ceda, reposaba un collar con un dije. Los ojos de Yugi se iluminaron al ver el dije de oro con el símbolo del milenio en él.
-Qué...qué es abuelo?-preguntó algo dudoso
-Esto mi pequeño Yugi, es la única cosa que tengo que puede comunicarte con quien tu realmente eres...
Yugi no entendía las palabras de su abuelo, pero no dijo nada para permitir que el anciano continuara.
-Veras... el día que yo recibí la noticia de la muerte de mi hijo, me sentí devastado. Sin él, nadie nunca llevaría las tradiciones de mi hogar adelante, por ello deseé que algo ocurriera, lo que fuera, pero que se me otorgase la oportunidad de criar a un nieto, uno que enorgulleciera el apellido Motou... entonces llamaron a mi puerta, y yo fui a atender, y ahí en mi entrada había un bulto de mantas, lo levanté y vi el rostro de un bebé, un tierno bebé...sabes quien era verdad?
-jajaja...era yo-dijo alegremente Yugi
-Si, eras tu pequeño. Lleve a ese niño adentro y creí que los dioses habían respondido a mis plegarias. Pero pronto Artur me hizo notar que éste collar colgaba del cuello del bebé, claro que en ese entonces le quedaba muy grande-dijo de forma bromista el abuelo- pero lo que me hizo entender que este niño era una responsabilidad mayor, fue lo que estaba escrito en la parte trasera del dije. Podrías leerlo?-dijo mencionándole a Yugi para que lo leyera
Yugi lo tomo y miró la escritura en plata, y quedó sorprendido.
-Qué?...qué dice hermano?-preguntó Joey
-di...dice: "Y-U-G-I"-dijo en voz baja
-¡Qué?-fue la reacción de los otros dos muchachos
-Así es-dijo el abuelo-este collar te lo dieron tus verdaderos padres... padres que también te dieron tu nombre. Por mi parte, al leerlo escrito en ese dije, no me atreví a cambiártelo. Por ello entendí que tu eras un regalo muy especial. Porque ése dije demuestra el gran cariño que tus verdaderos padres debieron haberte tenido, así que yo me sentí tan honrado de que se me otorgara el honor de ser tu nuevo abuelo, que no pude cambiar tu nombre-dijo con una mirada tierna.
-mi...mi nombre...me lo dieron mis padres...-Yugi aun estaba algo confundido y no estaba seguro de cómo reaccionar
-Exacto, así que siempre estate orgulloso de él porque es el recuerdo permanente del amor que ellos tuvieron por ti-dijo el abuelo mientras tomaba el collar de las manos de Yugi-Y de ahora en adelante, siempre usaras este collar para que nunca lo olvides-decía mientras le colocaba el collar a Yugi-y recuerda que siempre será un honor para mi ser tu abuelo, y que tu siempre me haces sentir orgulloso, todos los días-dijo mirando de frente a su nieto.
Yugi sintió como algunas lagrimas se formaban en su rostro. Nunca había estado tan feliz. Ahora ya sabía de donde provenía su nombre, también sabía que sus verdaderos padre también lo amaron, y más importante, sabía que su abuelo estaba orgulloso de él. No pudiendo soportar más se lanzo a los brazos de su abuelo y le dijo "gracias!".
La celebración continuó y todos estaban verdaderamente felices. Nada podía ir mejor. Pero de pronto, alguien toco la puerta.
-Yo iré a ver- dijo el abuelo.
Entonces fue a abrir la puerta y al abrirla encontró...
Ooo
Dark: Pom, pom, pom, que será lo que el abuelo encontró?
Nico: no lo sé, pero apuesto a que tu sí! ¬¬'
Dark: Sí! n.n
Nico: Y vuelvo a apostar a que nos lo diras recién en el próximo capitulo, verdad? ¬¬'''
Dark: Si de nuevo n.n!
Nico: Genial ¬¬''''''
Nico/Dark: Hasta la próxima
R&R
